Revista Pedalea #37

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año

04 | n º 37 | junio 2017

Tricicletto crêpe:

Arte y amor en una crepería sobre ruedas Actualidad La consolidación de Cool Place to Bike JUD be free Innovadoras capuchas con protección para el pedaleo Vivencial 2° Encuentro Cargo Bike

Revista mensual de circulación gratuita www.revistapedalea.com

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Contenidos Publicación digital de fomento de la cultura ciclista de edición mensual. //Directora Myriam Salazar //Textos Michelle Raposo Myriam Salazar Colaboración especial de Karl Álvarez, presidente Antofacleta //Fotografías Víctor Rojas Myriam Salazar //Portada Victor Rojas //Portafolio Alpes Escuela de Imagen y Comunicación //Diseño Aribel González //Diagramación La Máquina Editores //Ventas Roberto Caices roberto.revistapedalea@gmail.com +56 9 8527 6639

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editorial

actualidad

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Bike Brothers

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Karl Álvarez: La evolución de la movilidad depende de uno.

mi primer a

Tricicletto crêpe

JUD Be Free

portafolio

Geos

//Contacto contactorevistapedalea@gmail.com + 56 9 5714 3245

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Revista Pedalea es una publicación independiente, editada por La Máquina Editores Limitada. Revista Pedalea no se responsabiliza por las opiniones de sus colaboradores. Todos los derechos reservados. Las imágenes publicadas no pueden ser reproducidas por ningún medio sin autorización.

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Cool Place to Bike

el taller

urbanos

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2° Encuentro Cargo Bike


editorial

La evolución de la movilidad depende de uno. Por Karl Álvarez

Presidente Antofacleta

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Con 16 años pedaleando en Antofagasta uno ve cómo la seguridad vial va evolucionando a medida que los automovilistas se acostumbran a los ciclistas y este cada vez tomar más confianza en la calzada. Este ha sido uno de los temas que cuesta que adviertan los nuevos ciclistas, que a pesar de tener las habilidades para andar en bicicleta tienen un gran miedo de circular en la calle como cualquier otro vehículo. Antofagasta es una comuna portuaria y minera con solo 2 km de angostura, con sectores con pendiente de mar a cerro y 40 km de largo, en donde la mayoría de los habitantes viven máximo a 15 km del centro. Suele escucharse a menudo las siguientes respuestas cuando se pregunta ¿Por qué no usan la bicicleta?: “es muy lejos”, “voy a llegar transpirado”,” tengo un trabajo formal”, pero la respuesta que más se repite es: “es muy peligroso”. Y puede ser verdad, ya que Antofagasta se caracteriza por tener los índices de siniestralidad más altos a nivel nacional y ser la comuna después de Santiago con mayor cantidad de automóviles, los que van incrementando día a día, ya sea por ser el primer automóvil que se compran luego de entrar a una empresa minera; o el segundo o tercero, después de recibir uno de los sustanciosos bonos mineros que no llega a la mayoría. Siendo características en la zona las famosas camionetas rojas, que son usadas en las faenas mineras; camiones, especialmente los portuarios y por último no podemos dejar de mencionar a un ferrocarril de uso exclusivo a la minería, que divide a la comuna en dos, en cuya línea férrea es muy frecuente escuchar que un ciclista se haya accidentado. Estos datos pueden ser desalentadores para usar la bicicleta, pero han ayudado a que las personas se den cuenta que el automóvil no puede seguir tomándose las calles, pues el incremento de estos no va en relación directa con los 2 km de angostura de la ciudad, los cuales llevan décadas ocupando espacio y no teniendo donde estacionar; por lo cual, es común ver automóviles sobre veredas, paradas de locomoción colectiva e incluso en espacios para carabineros. Son estas problemáticas las que están bajando a muchas personas de los carros y subiéndolas a la bicicleta. Así fue como se creó la organización “Antofacleta”, que busca incentivar el uso de la bicicleta como medio de transporte en los ciudadanos de Antofagasta. Como organización observamos que no solamente tenemos que abordar a quienes usan la bicicleta solo con un fin; por el contrario, hacer que las personas sean partícipes de múltiples realidades, como lo son la vida sana, medio ambiental y económica. Y por lo cual realizamos variadas actividades tanto educativas como de disfraces, con fines ciclísticos o medioambientales, mostrándoles a los asistentes el poder que tiene la bicicleta para movernos. Llegando a involucrarnos en políticas urbanas y de transporte, haciendo notar la presencia de participación ciudadana en las instituciones, algo que en Antofagasta está muy perdido hace muchos años y nos ha costado que las personas se informen y participen en las decisiones, sin duda este es el mayor reto que tenemos para poder seguir sacando a las personas de su comodidad imaginaria y vean la realidad actual que afecta a la comuna, y que si no son parte del cambio seguirán viviendo con la misma problemática, pidiendo soluciones a problemas que se autogeneran a medida que la ciudad crece, y soluciones que vienen desde el exterior que no identifican lo local. Debemos ser los ojos y oídos de los profesionales, ya que los ciclistas somos los que más conocemos las problemáticas que afectarán a los nuevos ciclistas, que si queremos que se mantengan usando la bicicleta como un vehículo sustentable, debemos ser partícipes del cambio.

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actualidad

Sumando personas al ciclismo urbano: la consolidación de Cool Place To Bike

La iniciativa que cada vez reúne más adherentes, contó con la participación de Banco de Chile. Entidad que por segunda vez se coronó como ganador dentro de la categoría corporaciones y que además destaca por Bici Chile espacio diseñado especialmente para sus trabajadores ciclistas. Por Michelle Raposo

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Cuando uno ve que instituciones que uno asocia al trabajo de escritorio y andar siempre presentable, impulsa a sus trabajadores a subirse a la bicicleta, es que algo está empezando a cambiar. Parte de este cambio ha sido posible gracias al Cool Place to Bike, la instancia que motiva a empresas y organismos a pedalear para ver quien recorre la mayor cantidad de kilómetros. “La última versión de abril marcó una consolidación de la plataforma Cool Place to Bike, que en esta edición contó con el respaldo de tres grandes marcas: Thule, Sparta y 3M, lo que nos permitió regalar más de 14 bicicletas, cosa inédita hasta la fecha, ya que antes habíamos regalado como máximo tres por evento” cuenta Luis Elgueda director ejecutivo de Cool Place to Bike.

María Victoria Martabit, de Banco de Chile

Un ejemplo de estas instituciones motivadas con la causa es el Banco de Chile, que por segunda vez se coronó como ganador dentro de la categoría corporaciones. “Hasta ahora la experiencia ha sido muy buena, se han formado muchos equipos de hombres y mujeres, que comparten experiencias, hacen deporte y mejoran su calidad de vida a través de las bicicletas. Finalmente, cuando un trabajador está contento y motivado, eso se traduce en un mejor ser vicio a nuestros clientes”, cuenta María Victoria Martabit, gerente de Asuntos Corporativos y Desarrollo Sostenible del banco. ¿Qué los llevó a participar en Cool Place to Bike en un principio? En Banco de Chile promovemos el uso de la bicicleta entre nuestros trabajadores como una forma de aportar a su mejor calidad de vida, y también porque entendemos que aumentando el uso de la bicicleta aportamos a reducir la congestión vehicular, sobre todo en el centro de Santiago, que es donde está nuestra casa matriz y muchas de nuestras sucursales. Participar en Cool Place to Bike es una forma de promover entre nuestros trabajadores el uso de la bicicleta a través de una competencia sana. En general, cuenta Martabit, se ha visto que estas iniciativas mejoran el ambiente en las áreas donde hay trabajadores que pedalean, que en el caso del banco van desde vigilantes, ejecutivas comerciales y asistentes, entre otros.

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Una de las claves de esta motivación ha sido el cicletero, único en Latinoamérica, que el banco construyó hace un año y que ha sido tan popular que hay una lista de espera para poder usar las instalaciones. Con espacio para 150 bicicletas, duchas, lockers, lavandería, taller mecánico y una rampa para sacar la bicicleta, esta iniciativa “facilita el uso de la bicicleta en una zona donde se concentra la mayor cantidad de trabajadores del banco”, comenta Martabit quien agrega que “teníamos mucha confianza en que el proyecto sería bien recibido, pero nos sorprendió que su tasa de uso se completara en tan poco tiempo”. Por el momento, los interesados en seguir pedaleando y sacar la cara por sus empresas tendrán que esperar hasta noviembre, cuando se realice la segunda fecha el Cool Place to Bike, que como adelanta Elgueda, viene cargada con más bicicletas, regalos y sorpresas. Eso sí y “a propósito de la demanda espontánea de nuestros clientes, hoy día ofrecemos la plataforma mensual, que a diferencia de lo que se hace en abril y noviembre, permite monitorear mensualmente el uso de la bicicleta como medio de transporte de la ciudad, a través del uso de la aplicación Kappo Bike, enlazado con el sistema Cool Place to Bike. Esto tiene un valor asociado, por lo tanto las instituciones que quieran el servicio mensual, lo pueden contratar. Hoy lo están utilizando empresas como Acciona Chile, Synopsys y TPS Chile”, finaliza Elgueda.

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Instalaciones Bici Chile, Banco de Chile


mi primera bicicleta

Tricicletto crêpe: arte y amor en una crepería sobre ruedas

Por Myriam Salazar

Tras un largo año de reparaciones, probar recetas y mucho trabajo junto a una extensa lista colaboradores comienza a circular un atractivo carrito de sabores.

Camila Ljubetic y Carlos Fuentealba desde niños han estado ligados a las bicicletas. Jugando, estudiando y trabajando siempre han estado cerca de una cleta. Camila es caracterizadora y maquilladora profesional, “desde muy chica ando en bici. Siempre tuve mucha facilidad para andar en bici porque hice mucho deporte cuando chica. La bicicleta siempre ha sido mi compañera, de hecho hasta la tengo tatuada, ha sido un apoyo en todo sentido, hasta me he cambiado de casa en bici”. ¿Cuál es tu historia con la bicicleta? -Camila: mi primera bicicleta fue la bicicleta de mi abuela Liselotte. El otro día hablábamos de eso, mi abuela veía esa bicicleta tan vieja, tan chatarra que se la regaló a los basureros y yo le dije ¡por qué la regalaste!. Era de estas chanchas con acolchado y resortes, en ella aprendí como a los 5 años. Nunca anduve con rueditas. Me crié mucho con mis abuelos, mi abuelo Rafael era como mi papá, nos íbamos todos los veranos a Punta de Tralca. En realidad él me enseñó casi todo y también a andar en bici y el gustito a pedalear, porque allá ibas a todos lados en bicicleta. Al tiempo me

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compraron otra y después tuve una de paseo hasta que me cambié Luego de trabajar maquillando actores para algunas teleseries a una pistera. Camila buscó nuevos desafíos. “Me cambié al Teatro Municipal, fue una alegría inmensa, algo que siempre quise. Estuve 4 años ahí -Carlos: desde que tengo uso de razón que tengo una bicicleta en caracterizando bailarines de danza, cantantes de ópera, era hermi casa. Mi primer regalo grande fue una bicicleta para navidad. moso, lo voy a recordar toda la vida. Pero nunca me contrataron, Aprendí muy chico a arreglar mi bicicleta, mi papá me enseñó. así que tuve que dar un paso al lado y realizar un proyecto propio”. Salí del colegio y estudié electricidad pero no me gustó la carrera. Luego de eso entré a estudiar teatro a la Universidad Bolivariana en el centro. La bicicleta siempre ha sido transversal en mi vida, Por su parte Carlos es bien extrovertido y busquilla, “he trabajado cuando vivía con mis viejos andaba en bici, después me fui a vivir como eléctrico, fui cartero durante un año. Como actor participé solo y lo primero que hice fue comprarme otra bicicleta, porque en teleseries y también en teatro. No es fácil encontrar trabajo sabía con ella me podría movilizar y también ahorrar plata. Desde como actor, económicamente es muy inestable así que lo dejé”. ese tiempo es mi medio de transporte. Hoy en día trabaja como repartidor de sushi en bicicleta, labor que le acomoda mucho ya que ama pedalear. De la tele a la itinerancia sobre ruedas Camila tiene habilidades creativas que heredó de su madre. Ambos reconocen que fue bien especial la forma en que se co“Mi mamá es maquilladora, pero se dedicó a ser mamá, somos menzaron, a través de amigos en común y luego trabajando juntos 5 hermanos. Ella me entregó esa facilidad que tengo para lo en diferentes productoras televisivas. “Carlos no me caía muy bien artístico. Estudié maquillaje y comencé trabajando en canales de al principio porque lo encontraba demasiado extrovertido, somos televisión que es como lo más fácil. Me desilusioné mucho de mi súper diferentes en ese sentido. Después de dos meses empezamos carrera, porque no era lo que quería, me imaginaba otra cosa. a tener onda”, cuenta Camila, quien junto a una amiga por ese La creatividad en la tele es súper limitada y no tenía tiempo para entonces se preparaban para hacer un viaje por Sudamérica. Pero hacer nada más”. su amiga se enfermó de algo grave y el viaje tuvo que suspenderse.

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“Con Carlos estábamos empezando algo, y un mes antes del viaje me dijo que me fuera a vivir a su casa para ahorrarme el arriendo ya que cada uno vivía solo en su casa”. Camila aceptó y desde ahí llevan 3 años y medio juntos. Carlos confiesa que urdió un plan perfecto para poder conquistarla. En ese tiempo ambos estaban en un profundo estancamiento laboral, con turnos eternos y poca plata, estaban estresados. “Nos fuimos de viaje a Perú, esa fue nuestra terapia y empezamos a gestar la idea de ser independientes y no trabajarle ni un día más a nadie” cuenta Carlos. Siempre tuvieron la idea de que fuera algo itinerante y al alcance de todos, así fue como Camila empezó a pensar en un triciclo. Que fuera bonito y con acceso para todos. En Pasarelas Verdes conocieron a Café Triciclo donde su dueño les entregó más de algún consejo.

Con la ayuda de mis amigos El triciclo lo compraron a buen precio a un amigo, para restaurarlo y adaptarlo a lo que necesitaban contaron con la ayuda de un tío experto en mobiliario, la iluminación la hizo el papá de Carlos, la crepera fue una donación de Liselotte -la abuela- y de Carla García, mamá de Camila. Carlos diseñó el logo y toda la parte gráfica. El triciclo demoró un año en estar listo. Mientras recorren ferias y eventos de todo tipo preparando crepes, Camila y Carlos sueñan con ir más allá. “Mi sueño es tener un auto con carrito de arrastre para llevar el triciclo y Carlos quiere hacer un proyecto audiovisual, la idea es recorrer las zonas más turísticas de Latinoamérica preparando crepes”. Cuando a esta pareja se le fija una idea en la cabeza no paran hasta conseguir el objetivo, Tricicleto crêpe es la prueba de ello.

Investigando y buscando información en internet dieron con triciclos de repostería, muy populares en países europeos. “No soy muy fanática de los dulces, Carlos sí. Mi familia tiene mucha conexión con lo dulce porque mi abuela Liselotte –la misma de la bicicletaes alemana. Vi una opción clara con los crepes porque pueden ser dulces o salados. Se preparan en el momento, eso es lo que nos ha motivado harto porque es como una puesta en escena, porque todo el mundo te está mirando, eso también es rico porque mientras preparas el crepes conversamos con los clientes”, agrega Camila.

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el taller

BIKE BROTHERS: “Queremos que nuestros clientes se vayan felices con sus bicicletas” Por Myriam Salazar

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Cassio Eichenberger

Cassio Eichenberger, Guillermo Heresmann y Mariel Carrillo no son santiaguinos y se nota. Cassio con su hablar pausado llegó hace un buen tiempo desde Brasil, Guillermo vino desde La Serena y Mariel desde Concepción, juntos conforman un equipo libre del estrés capitalino.

Guillermo recuerda: “nos conocimos en otro taller donde trabajamos, Cassio llegó buscando aprender el idioma y la mecánica de bicicletas. Seguimos en contacto y en conjunto quisimos independizarnos hacer algo por nosotros mismos, ya teníamos los materiales y los conocimientos”.

En La Serena Guillermo estudiaba diseño gráfico, “mi medio de transporte era la bicicleta para ir a la universidad. En eso conocí a Mariel, mi polola, con quien compartímos el gusto por las bicicletas. Empecé a arreglar mi bicicleta y terminé armando para Walmart. Vivía en Coquimbo y ella en La Serena esos trayectos los hacíamos pedaleando”. Como en la zona no había mucho trabajo se vinieron a Santiago, Guillermo fue directo a San Diego donde colaboró en varios talleres mecánicos ganando experiencia. Cassio es brasileño y trabajó toda su vida con aviones. “Soy mecánico de aviones. Trabajé en Brasil por casi 15 años en la aviación tanto a gran escala como en la ejecutiva, pero por la situación social que se vive en Brasil decidimos con mi esposa venirnos a Chile con nuestros 3 hijos”.

Cassio, ¿cómo pasaste de la mecá nica de av iones a las bicicletas?

Guillermo y Cassio se conocieron mientras trabajaban en un taller de bicicletas donde tuvieron afinidad desde el principio, pronto se asociarían para crear un taller propio. “Aquí en Santiago se utiliza a diario mucho más la bicicletas a diferencia de Brasil”. comenta Cassio.

Me encanta la bicicleta desde niño; en Brasil pedaleaba desde los 5 años y nunca más dejé de hacerlo, siempre tuve curiosidad de saber pero nunca tuve tiempo, lo llevaba como un hobby. Trato de aprender cada vez más, la bicicleta siempre está evolucionando, hay que ir junto con su desarrollo. Estoy muy contento aquí, encontré dos personas que no se encuentran fácilmente. Cassio “En la aviación aprendí que uno tiene que mantener su lugar de trabajo como si pudiera comer en el suelo y así lo quiero hacer. Cuando una persona entra a un local limpio se siente confiada y a gusto. Nosotros tenemos que hacer nuestro trabajo bien hecho y también innovar, aquí por ejemplo el cliente puede observar mientras trabajamos en su bicicleta. Otra cosa que aprendí en la aviación es a trabajar bajo presión, aquí nosotros intentamos entregar las bicicletas lo más rápido posible, por lo general están listas en el día”.

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En Bike Brothers el cliente tiene en todo momento acceso al taller, “muchas veces también se le enseña a regular sus frenos y cambios, también asesoramos respecto a la durabilidad de las cosas, hay que saber cuidarlas para que su vida útil se prolongue”, afirma Mariel. ¿Cuál es la labor de cada uno en el taller? Cassio: “Todos hacemos de todo, estoy 100% en el taller y cuando tengo que irme me reemplaza mi hijo Leonardo, quien está aprendiendo y es un gran apoyo”. Mariel: ahora estoy como aprendiz de mecánico, a veces está lleno el taller y llega un cliente por un ajuste de frenos o cambios y son cosas que yo puedo hacer, no es necesario entrar la bicicleta al taller. Labores que compatibilizo con mi proyecto de diseño de vestuario ciclista “Ritoria”. Los clientes nos han felicitado por la atención y también por los precios. Desde que se instalaron junto a la ciclovía de Antonio Varas son cada día más los ciclistas que llegan a Bike Brothers, además tienen productos que no se encuentran en todas las tiendas del rubro. “Hace unas semanas iniciamos una alianza con Yerka Bikes, quien compre una Yerka la puede retirar en nuestro taller ya que las armamos y somos su servicio técnico. Además ya trabajamos desde el inicio con la marga BERG ( portuguesa ), que al igual que Yerka ha confiado en nosotros”, cuenta Mariel. Guillermo comenta que llegan todo tipo de bicicletas, “Desde la más simple a la más compleja. Tratamos de ser lo más transparente posible, cobramos lo justo y necesario, además traemos por encargo en 24 horas productos que no están en tienda como cuadros y transmisiones, piezas específicas que no se encuentran fácilmente”. El equipo de Bike Brothers no para y funciona casi 24/7, dando lo mejor de cada uno y así posicionarse en el mercado ciclista. “Tenemos un muy buen ambiente laboral y tratamos de transmitirlo a los clientes”, cierra Mariel.

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Bike Brothers Antonio Varas 323 Providencia



emprendencleta

JUD be free: innovadoras capuchas con protección para el pedaleo

Por Myriam Salazar

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Para nadie han pasado inadvertidas las bajas temperaturas de este otoño, menos para los pedaleros quienes a diario deben soportar el frío que llega de directo a sus caras. Un innovador producto en el mercado lleva alrededor de un año entregando protección para esta expuesta zona del cuerpo. Juan Francisco Millán es el creador de JUD, empresa que confecciona y comercializa capuchas de diseño propio, con la principal característica de proteger tanto del frío y el viento como también de los dañinos rayos UV. Músico de profesión tiene una amplia carrera como guitarrista, “estudie música en el Projazz, estuve de músico un rato, después tuve hijos, trabajé muchos años en una empresa privada como vendedor, hasta que lo dejé y con un socio formamos JUD”. Este emprendimiento le demanda mucho de su tiempo, aunque de todas formas puede mezclarlo con su profesión. “Toca guitarra y canto, ahora estoy con una banda con la que hacemos fusión griega. Me gusta todo tipo de música, compongo harto y lo que más me gusta es inventar cosas, piezas de guitarra, canciones. Me gusta mucho la música del mundo, como la música de Mongolia, la he escuchado harto últimamente”. Cuando terminó su trabajo como vendedor quedó sin nada. “aunque siempre me mantuve haciendo clases de guitarra. Un alumno que tenía me dijo que hiciéramos algo juntos, volando

nomás. Él tenía un chaleco pero no tenía capucha, me dijo” ´hagamos capuchas, que se puedan combinar con el chaleco regalón y sean intercambiables para distintos chalecos´, cuenta Millán. Buscaron la forma de hacerlas y que materiales utilizar, “ahí empezamos todo el periplo de buscar costurera, telas, etc. Así llegamos a Independencia nuestra casa matriz de tela, dimos con la Verito que es nuestra costurera, empezamos a probar, a hacer moldes, que es muy chico que muy grande, que si iba con forro o no y así fue saliendo. Entre los tres teníamos algo así como un taller de investigación textil, hasta que salieron los primeros que nos gustaron y nos pusimos a vender por Facebook. Al principio solo eran gorros de vestir de tela con una lanilla calientita por dentro y tuvo éxito. Luego vinieron los gorros con chiporro que tuvieron más éxito y después con corderito el año pasado en esta fecha, llevamos un año en esto”. A fin de septiembre comienzo de octubre cuando empezó a hacer calor de nuevo, bajaron las ventas de las abrigadoras capuchas y había que inventar algo nuevo. “Diseñamos un gorro para gente que hace deporte, para evitar el frío, para las personas que andan en bici, las que suben el cerro. Se nos abrió todo un mundo”. Volvieron a la búsqueda de nuevos materiales, “compramos tela dry fit, que evapora rápidamente la transpiración. Hicimos

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un gorro deportivo que llamamos Dry Hoodie, ese modelo salvó la temporada, tuvo súper buena aceptación entre los más deportistas, ya que además la tela tiene filtro UV, si transpiras te mantiene seco y calientito”. En noviembre su socio decide retirarse y Juan Francisco continuó solo con la marca, “estaba complicada la situación igual, así que me puse a publicitar como loco por Facebook. Tuvimos un viaje a San Pedro de Atacama donde comenzamos a vender en algunos hoteles”. Como buen emprendedor Millán es el representante legal, despachador, diseñador, el multihombre JUD. Siempre reinventando los productos para atraer al público comenzó a incorporar telas con otras características e incluso una línea infantil. “primero hicimos impermeable con termo sellado y tela dry fit. “Para los más deportistas y uno que tuviera la opción de poner debajo de un casco de bicicleta, protegiendo la cara y el pelo de la lluvia. Después de ese creé el que tiene corderito por dentro, se empezó a vender a la gente que trabaja en minería que trabaja bien arriba y necesita harta temperatura, y después para todo público, así lo introduje en el mercado”. La principal vitrina de JUD es Facebook e Instagram, además de sus distribuidores: Parafernalia Outdoor y en Valdivia en El espejo de Frida. De la producción total de JUD el 60% se vende en regiones y el 40% en Santiago, pronto estará presente en Punta Arenas y también en Alemania. Juan Francisco cuenta que el nombre tiene una razón muy sencilla, “en inglés hood es capucha y como acá lo chilenizamos, JUD be free. Ser libre el slogan de la marca, porque lo puedes usar en cualquier situación y combinar libremente con cualquier prenda, puedes usarlo perfectamente urbano ahora y también lo puede usar alguien que va a subir El Plomo, porque lo cierran, se ponen antiparras y listo, protegido”. Productos JUD: Dry Hoodie, Strorm Hoodie, Air Hoddie, Ice Hoodie. ¿Dónde te gustaría ver la marca? Más que donde me gustaría ver la marca, yo sería feliz - ya me pasó una vez, pero me gustaría que me pasara harto- de salir a la calle y ver a la gente usando los JUD, eso me haría muy feliz, porque encuentro que el producto es bueno, calientito, bonito y original.

@JUD be free JUD be free

www.judbefree.cl

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urbanos

Santiago es una de las 7 comunas que cada domingo vive CicloRecreoVía y forma parte de los 34 Kms de circuito. ¿Cuál es tu nombre y a qué te dedicas? Maribel Maneiro, soy publicista y hace dos años vine desde Venezuela. ¿Desde cuándo utiliza CicloRecreoVía? La utilizo hace un año aproximadamente, desde que me mudé a Providencia y aprovechamos de salir a pasear un rato. ¿Qué es lo que más le gusta del circuito? Me gusta el espacio para poder salir y disfrutar de la ciudad, ya sea caminando o en bicicleta, además de los espacios de la CRV, creo que la ciudad está súper bien pensada con las ciclovías. Fomentar la salud y el ejercicio en las personas me parece fantástico. ¿Recomienda utilizarlo, ¿Por qué? Si todo el rato, cada vez que tengan la oportunidad de salir a caminar, en bici o en patines, esta chévere jaja. ¿Te moviliza habitualmente en bicicleta? No, pero trato de hacerlo los domingos. En verano me muevo más, me voy en bicicleta al trabajo, pero en estas fechas que hace mucho frío me cuesta un poquito más. ¿Cómo mejoraría la experiencia en bicicleta por la ciudad? Bueno en realidad quizás con un poco más de cultura de enseñarle a las personas como realmente usar las señales de tránsito, tambien a los autos que siento que no están muy receptivos con los ciclistas y los peatones, falta más educación para todos para que podamos convivir bien. Disfruta de CicloRecreoVía cada domingo de 09:00 a 14:00 horas.

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Geos FABIÁN GALVEZ / Ilustrador

GEOS, nombre artístico de este ilustrador que no gusta de formalidades pero si del trabajo profesional. Con un punto de vista claro no sigue tendencias ni modas, buscando permanentemente un estilo propio que lo diferencie de la masa. Dedicado a otras actividades estuvo 6 años lejos del lápiz y el papel, “ ya había olvidado lo adictivo que es dibujar día a día. Malas situaciones personales me llevaron a retomar esta disciplina como método de terapia y ahora puedo decir con seguridad que la ilustración y la animación es lo mío”, afirma. Sobre la técnica no mantiene un formato o línea fija de trabajo, “Me gusta experimentar desde lo digital a lo análogo, ya sea Photoshop, Apps de android para dibujo, incluso hasta Macromedia Flash. Por el lado análogo me gusta la técnica del grafito, pastel seco y la tinta china son mi fuerte”. Menos utilizados son la acuarela y el acrílico aunque nunca los ha dejado de lado, “Quiero seguir practicando y aprendiendo, nunca es bueno descartar un método de dibujo, por el contrario, uno debe saber cuál es la técnica más apropiada según la temática y estética que se quiere retratar. A veces en que es necesario mezclar técnicas digitales y análogas o ambas al mismo tiempo”.

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2° Encuentro Cargo Bike se vivió en el Parque O´Higgins Por Myriam Salazar

Como una ma nera de v isibi l iz a r esta “nueva” for ma de movilizarse Torpedo Mensajeros y Te Cuido la Bici organizaron una entretenida tarde donde los asistentes pudieron conocer a los principales exponentes de la cultura cargo bike en Chile. La comunidad cargo crece con fuerza en la ciudad, hoy en día es común encontrarse en las calles con éstas llamativas bicicletas, siendo una excelente opción para emprendedores que transportan sus productos, como también para quien quiera llevar a sus hijos en un vehículo no contaminante. Ricardo Escobar – Menteciclista y Torpedo Mensajeros- unos de los organizadores de la actividad, es un ferviente impulsor de estos vehículos ya que además es su principal herramienta de trabajo en su emprendimiento de bicimensajería. Sobre los beneficios de usar éstas bicicletas Ricardo comenta, “se manejan como cualquier otra bicicleta, pero tienen la ventaja de poder llevar mucha más carga y/o personas que las bicicletas tradicionales. Están pensadas para ello desde su concepción, por lo que cada detalle está orientado a facilitar su uso, y que sea, por lo tanto, mucho más práctico tener una bicicleta de carga que una bicicleta tradicional adaptada para llevar carga. Seamos honestos, la mayoría de los vehículos llevan 1 persona y un bolso en el que con suerte lo más pesado es un computador. Pero claro, hace falta atreverse a cambiar la cabeza primero, abrir los ojos y ser pragmático y no cómodo”.

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¿Qué falta para que la gente se anime a usar estos vehículos? Hace falta animarse a probarlas y darse cuenta de que es mucho más práctico para casi todo, desde llevar pocas cosas para la oficina, por ejemplo, hasta nuestros hijos al colegio. Tiene todas las ventajas de una bicicleta (económico, no congestiona ni se atasca en congestión, no contamina, se estaciona donde sea, etc.) y además las de un vehículo pequeño, en el que podemos llevar cargas grandes. ¿Qué los motiva a organizar el encuentro? Los objetivos del encuentro eran 2. El primero era conocernos entre quienes conformamos la cultura Cargobike en Chile, compartir experiencias, conocer otras bicicletas, y fortalecer los lazos entre todos. El segundo es dar a conocer las bicicletas como método práctico de transporte a personas que aún no las conocían, o que solo las habían visto en fotos o escuchado de ellas. Los asistentes pudieron probarlas y conocerlas.

Tanto en Slalom, como Carrera lenta ganó José "Monster" Cárdenas. Para la carrera en parejas, la pareja ganadora fue José "Monster" y Sebastián Oyarzo, de Bicimensajeros. Para la carrera de carga, el ganador fue Ricardo de Torpedo Mensajeros. Debido al éxito de la actividad, sus organizadores ya piensan en una tercera fecha, “Esta vez queremos agrandarlo de forma exponencial y esperamos contar con invitados internacionales. También las competencias, más que juegos, se convertirán en carreras de verdad, con todo lo que ello conlleva. Será un espacio tanto para conocer las bicicletas, como para que marcas puedan hacer promoción, y para que las personas puedan asistir a un show de calidad” finaliza Escobar.

El evento tuvo varias competencias donde tanto los asistentes como participantes de las pruebas disfrutaron con cada una de ellas. Las pruebas fueron las siguientes: - Sla lom: ta nto en sol ita r io como en cont ra , donde los participantes debían avanzar lo más rápido posible por una línea de conos. - Carrera lenta: donde el último que llega gana, pero no se puede estar quieto, poner el o los pies en el suelo, ni andar de forma horizontal a la dirección de la carrera. - Carrera en parejas: en la que un participante lleva a otro en el área de carga de la bicicleta, dan una vuelta de esa forma, al llegar a la meta cambian de posición y luego dan otra vuelta a la pista. Esto mientras otra pareja compite a su lado. - Carrera de carga: consiste en que cada competidor, por turnos, debía hacer 3 vueltas contra reloj a la pista. Ahora bien, al comienzo debía cargar 3 bidones de agua de 20 litros (vacíos), a la mitad de la primera vuelta recoge una hoja de papel (la que se debía cuidar, ya que las arrugas restaban puntos), al finalizar la primera vuelta y sin descargar, se le pasaba una bolsa que llevaba un huevo crudo y una pequeña piedra, a la mitad de la segunda vuelta se le hacía entrega de una viga de metal de 2 metros de largo. Al finalizar esa vuelta, y aún sin descargar, debía cargar una rueda de camioneta, de 26kg. Todo esto debía llevarlo por una última vuelta.

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