Revista Poetómanos Año 1 No. 3 (Nov-Dic) 2019 by Revista Poetomanos

N° 3 Año 1 Nov-Dic 2019

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Las Innovaciones Literarias de Jorge Luis Borges por José Antonio Samamé

Climax: Existencialismo, baile y Rock&Roll por Sergio H. García Krizia Fabiola Tovar Sebastián Díaz Barriga Daria Denegri Óscar Páez Aaron González Pilar Sanjurjo Michelle Duque Díaz Julio Zatarain Rogelio Silva Cerna Dennise Alcibar Víctor Parra Avellaneda Israel Montalvo Salvador Montediablo José Antonio Samamé Saavedra Sergio H. García Kevin Herrera García Dante Vazquez

Revista Poetómanos Revista bimensual de Difusión Literaria

Dirección: Sergio H. García Sergiohgarcia95@gmail,com Consejo Editorial Aldo Barucq Kevin Herrera García Salvador Montediablo

Correción Peregrina Tirado Diseño Sergo H. García Imagenes Portada: Angélica Hernández Ibarra (2019) @Mexafotos Todas las imagenes del contenido son descargadas de Unsplash o el credito sen encuentra en ellas Esta revista se diseña a través de la siguiente dirección: revistapoetomanos.com @revista Poetomanos /Poetómanos

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Contenido Poesía Inﬁerno, Krizia Fabiola Tovar.................................................................................................. 6 Un Fabuloso Juego Llamado Amor, Sebastián Barriga........................................ 8 Tristeza, Daria Denigri....................................................................................................................... 10 Cánticos Nuevo, Óscar Páez.............................................................................................................. 12 Recibo, Aaron González.......................................................................................................................... 14 Reconciliación/ [Destiempo], Pilar Sanjurjo................................................................. 16 Postal, Michelle Duque Ordaz......................................................................................................... 18 Cuento Toda la Noche Bailamos, Julio Zatarain........................................................................... 22 El Vacío es el Comienzo, Rogelio Silva Cerna............................................................. 25 Tamara, Dennise Alcibar........................................................................................................................ 30 La Flor Inﬁta, Víctor Parra Avellaneda........................................................................... 33 Más Allá de tu Carne, Israel Montalvo................................................................................ 36 La Relatividad, Salvador Montediablo................................................................................. 39 Opinión El Fantasma de la Revolución en los Movimientos actuales, Kevin Herrera.................................................................................................................................................................... 43 Ensayo Las Innovaciones Literarias de Jorge Luis Borges, José Antonio Samamé...................................................................................................................................................................... 45 Cine Clímax: Existencialismo, baile y Rock&Roll, Sergio H. García................. 50 Reseña Literaria Aeros: Todo Cambio inicia con una Fractura, Danteo Vásquez.................. 54

Carta Editorial Se acerca el fin del año y con ello las típicas tradiciones y cenas al centro de la mesa y pareciera que este año se muere como vivió sus últimos seis meses: al pie de lucha. A principios de octubre en Chile, específicamente en su capital Santiago, iniciaron las protestas que ya hoy se conocen como “Primavera de Chile” o “Revolución de 30 pesos” (este último por el aumento de 30 pesos chilenos al precio del transporte público, hecho que vino a romper las compuertas que contenían los años de injusticias por parte del gobierno). Después de Chile, vino Bolivia con el desconocimiento de Evo Morales como presidente y a la par, Haití, Argentina, Brasil, Ecuador y México, con las protestas y disturbios feministas. Hoy a 15 de días de acabar el año, las manifestaciones siguen en su lucha. En el caso particular de México (país donde nací y vivo) la lucha no solo ha sido de y por mujeres, sino que ha sido de profesores, trabajadores y estudiantes (de toda una generación, pues). Desde que el tiempo de las redes sociales llegó, se le ha rendido burla a una mala y, hasta cierto punto, desconocida realidad sobre los llamados Milennials (niños y niñas nacidos entre 1981-1996), que si son arrogantes, que se quejan de todos y algunos otros dicen que no saben de nada sobre la vida (como si alguien supiera). Sin embargo, todos estos movimientos, en México y Latinoamérica, han sido dirigidos, encabezados o reforzados por estos “Niños mimados”. Estos “Inconformes”, pues es esta característica y el acceso (en algunos casos malsano) a la información, las que ha orillado a movimientos como el actual movimiento Feminista o las manifestaciones estudiantiles de la Universidad de Guanajuato (de donde salió la foto de la portada, tomada por Angélica Hernández) en la cual se exigía a las autoridades del estado, universitarias y municipales, la completa seguridad de los estudiantes, esto último derivado del asesinato de una estudiante en su habitación. La acción de los estudiante pues contundente: tomar todas las instalaciones de la UG y acampar, además de constantemente ser ellos su propia voz en redes sociales y además mostrarle al mundo que ellos no son los malos, como se termina por satanizar a los movimientos, haciendo muestras artísticas, exposiciones, talleres, conciertos, pijamadas e incluso, una vez finalizada la huelga, limpiar todo. En la Universidad Autónoma de Nayarit sufrió algo parecido, solo que este movimiento fue de parte de maestros y trabajadores, apoyado por los estudiantes que exigían el pago de las quincenas y derechos de estos primeros. Estas son la consecuencias de los Milennials, de los “todo me Incomoda”, herederos de los desastres de otras generaciones pasadas y condenados a la manifestación, a ser la generación de cambio. Poetómanos apoya y respalda cada movimiento por la justicia y los derechos. Que orgullo ser parte de ustedes.

Sergio H. García

Selecci贸n

Selecci贸n Poet贸manos

Poet贸manos

INFIERNO

K r i z i a Fa b i o l a Tov a r

Poesía: Infierno, Krizia Fabiola Tovar

Sólo pido un intento más a la vida, al corazón, a nuestra historia, mas siempre termino por perder, muriendo en el segundo círculo del infierno. ¿Por qué no te das cuenta? Aferrada al calor de tu mano estoy, para escapar de nuestro destino, para burlarme de él y contarle que por fin logré estar a tu lado. Aguardo por ti en el viejo lugar al anochecer. La oscuridad de tu habitación es un crimen perfecto.

Mañana abandonarás mi corazón por una nueva amante, y toda esta mentira por fin besará la luz del día. ¡Cada noche regreso al tormento mas el torbellino tiene otra victoria! ¿Me darías el beso maldito? Aquel por el que somos tan cobardes, cuando te marches no mires atrás la apocalipsis de este infierno. Y con ácidas lágrimas a nuestra historia, al corazón, a la vida, sólo pido un intento más.

El magno conquistador y su imperio, amantes rotos que un torbellino de reloj no los quiere una misma pieza. Quema el hielo de mi piel otra vez, me vuelves ave fénix a mitad de mis catástrofes, de azul paso a rojo. Necesito tu infierno, sellar mi beso sobre el poema tatuado en tu pecho, tus luciérnagas en esta árida tierra, nuestras sonrisas de niños traviesos por las mañanas porque no hemos sido sorprendidos, y descubrir dentro de esas sábanas mi refugio.

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Poesía: Un Fabuloso Juego Llamado Amor, Sebastian Barriga Cuando era niño mis padres solían tener este juego fabuloso: aunque los propósitos permanecen ocultos el juego llegó a la relación como una moneda de cincuentacentavos extraviada o perdida en alguna calle de la ciudad de méxico pareciendo decir: ¡oye! ¿me vas a levantar o qué? llevo aquí todo el día y sólo quiero volver a casa: estoy cansada. en aquél entonces papá pretendía mandar dinero -en vez de amora la tarjeta bancaria de mamá. como el cajero automático estaba a una hora de distancia solíamos cruzar toda la ciudad en nuestro vocho 70 sólo para descubrir que no había dinero ni amor ni ninguna otra cosa dentro de la tarjeta de mamá de la amante de papá o del perro de los vecinos. me sentí tan triste sólo quería un par de calcetines un lápiz verde y, tal vez un pececito cuyo amor no se escapara de mis manos.

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Tristeza por: Daria Denegri

Poesía: Tristeza, Daria Denigri

Hoy la tristeza me abrazó el corazón y me recosté a abrazarla también. Yo le decía lo sola que estaba, Ella me recordaba, nostálgica, los momentos felices que había olvidado… Yo la abrazaba con fuerza, Ella me estrujaba el corazón… Y por alguna extraña razón, No quería que se fuera. A veces la tristeza nos abraza tan fuerte, que junta nuestros pedazos rotos, A veces la tristeza también es curativa y hace que nos sintamos menos solos. Fue extraño cómo abrazar la oscuridad del vacío de tu alma, de pronto te llena, te calma. Hoy la tristeza me abrazó con fuerza, Y yo la abracé también.

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Cรกnticos Nuevos ร scar Pรกez

Poesía: Cánticos nuevos, Óscar Páez Llegará un día en que la raza humana Se habrá secado como planta vana. Alfonsina Storni

I El cenzontle muere en mis ojos, equilibrando las murallas de la nada, mientras los templos se desmoronan. La incubadora de larvas reconstruye prematuramente su enjambre, sobre el cadáver de una ola que sirve de choza. El cenzontle muere en mis manos, anochece su sangre. II El viento transporta mi coraza, las ciudades sucumbieron. Madre, el cenzontle reaparece, con su pico de fuego de entre tu vientre; sus hijos no han perecido su pugna III La tierra protege la carne del niño pájaro, desde su lecho un cántico nuevo vigila los mares. Las semillas adoptan la forma del hombre. Nuevas voces habitan estos vestigios; que ahora será nuestro hogar. La grama crecerá en las recientes tierras y cenzontle retoñara su plumaje.

*Commission Julia McKenzie* Página 13

Recado

Aaron Gonzรกlez

Poesía: Recado, Aaron González

erdóname por la mirada perdida. Perdóname por la cara de no haber dormido en días. No pretendía que me vieras como me viste esa noche. Si por mi fuera, me verías con una sonrisa todos los días me verías todos los días. Tal vez creas que te he ignorado la noche entera, no creas, léeme. Por favor. He escuchado cada pequeña silaba que has pronunciado y la he saboreado internamente. Me encanta. Sabes de lo que hablo, esa manera tan personal que tienes de hablar de las cosas que amas. Me pierdo un poco en tu rostro cuando hablas hasta del clima porque tus labios se mueven con cierta cadencia, y tus cejas se encorvan de muchas maneras, y tus ojos brillan mientras parpadean rápidamente. Tu rostro se transforma en una belleza audiovisual cuando hablas. Me he dedicado a memorizar cada pequeño centímetro de tu rostro, lo he acariciado con las yemas de mis dedos una y otra vez. No podre no recordar la textura de tu piel, lo que sentí cuando la pude acariciar. ¿Alguna vez has oído hablar a alguien de las cosas que ama? Hay un brillo bastante dulce en los ojos de las personas que lo hacen, las comisuras de los labios se esfuerzan en no extender una sonrisa amplia. Quizá he vacilado mucho en todas estas palabras para simplemente decir que te quiero desde la noche misma en que me hiciste el amor, y que en mi garganta se atoraron las letras hasta hace unos días. Ya lo dije. No sé si podré repetirlo. Perdóname.

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Reconciliaciรณn / [Destiempo] Pilar Sanjurjo

Poesía:Poesía: Reconcilicación/[Destiempo], Pilar Sanjurjo Reconciliación/ [Destiempo], Pilar Sanjurjo

Reconciliación mirase en el espejo, acariciarse, hacer palpable ese reflejo, sentirlo real, las piernas flexionadas, la cabeza recostada en las rodillas, me recorro con el dedo índice cada forma, hago espirales, cosquillas livianas en la cintura y el vientre, me pierdo en las distintas tonalidades que se reflejan con el sol que se filtra desde la ventana y cuándo se va me entretengo con mi piel erizada, tensa, fría, suave y con el aire que se enreda entre los pelos de mis piernas desnudarse frente al espejo, desmembrar como se vuelve otro ese horizonte. conozco en cada encuentro una marca nueva, pienso que la dejó algún beso y no me di cuenta casi que puedo abrazarme, sentir la cálida mirada que me hace la que está del otro lado.

[Destiempo] oscureció casi no veo mis pies se camuﬂan con el asfalto el sonido del tren me lo susurra el viento el último tren se va sin mi tarde ¿vos te habrás subido?

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Poesía: Reconciliación/ [Destiempo], Pilar Sanjurjo

Postal Michelle Duque Ordaz

“Abuela” Alfredo Lozano

Poesía: Postal, Michelle Duque Ordaz Tengo dos abuelas maternas. En alguna parte una crece, conoce lo venidero que aún le quede al mundo -que se rompe desde adentro En un impacto expandido como esfera de navidad. – La otra sigue cegada por el resplandor, ¿de qué está hecho el encierro? Eso que dicen te ha de proteger: ¡Niña, quédate adentro! ¡Chamaco, métete, ya no es hora de andar corriendo! ¡Si andas tan noche afuera te van a chupar las brujas! El mundo se alza y se derrumba detrás del seguro de una puerta. Cuando tuve trece años me escapé para tomar el camión, camino al colegio católico -fundado por el Dios lucrativo. Mi segunda abuela -la que aún no nace y aprende a desconocer su cascarón. Se deshacía desde los ojos, atrapados entre el fastidio crónico del recorrido a las lagunas que se le acrecentaban. Los ojos se le chorreaban y se hundían -cuerpo que bebe del agua de su confusión. Mezcolanza estampada y destinos paulatinos: de los coyotes aullando en su cabeza a la compañía de azotar las rodillas en el suelo al balanceo en el teje de la alegría de los muchachos escondidos en el monte para que no se los llevara el encierro al robo de mi abuelo ¿al amor de mi abuelo! al sexo de mi abuelo. Tarde, pero la frialdad se hace manta y luego día. De quebrarse por las risas de unos niños a la muerte de esos otros –y los otros que ya no eran niños. Ojos de polvo, mares telúricos: Desorbitados, tiras de tierra que apenas pisaba y comenzaban a desmoronarse. Pero mamá dijo: -¡No te vuelvas a salir! ítame esa cara que te pareces a ella. ¿A cuál? Vivo entre células vibrantes predispuestas a la realidad. Maldiciones constantes -porque todo se repite, pero (¿) no es igual (?)-

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Poesía: Postal, Michelle Duque Ordaz La primera abuela no vivió entre lagunas, pero las conoció; quisieron ahogarle las raíces, mas sólo le tiñeron de azul el corazón. De ella sólo susurran los vestigios de sus pasos: -La soledad es un estambre amarillo tejido a gancho, Ritual para antes de dormir. Un título al que mi madre no llegó. Mi madre misma. Facciones sobre el espejo. Y el alma sudando por la espalda. Soy ella a la inversa abriéndome el pecho, Llenándome de azul la calma. Cortándome la cara para depositar las similitudes / en un alhajero porque cada rasgo demanda. Luego maldición: -Él quería tener un hijo, ella le dijo que se fuera a tenerlo. -Ustedes se quedan sin cobijo. Ya nos acostumbramos a perderlo. Molino, giro eterno, uno sólo es igual al ciento. Volví a asomarme y alguien que ya no era quien fue dijo: -Adelante. (¿) O no (?) Confundo: No sé si fue ayer u hoy, si lo dijimos o lo inventamos - ¿qué no se ha inventado? Pude sólo imaginar el encuentro. Respuesta que desconoce la ruptura del silencio previo, inmaculado en todos los hilos que corren desde el pasado. La liquidez es una maldición. lagunas entre realidad-fantasía-ﬁcción. -Son a salto de mata por la familia.Si la culpa de esta obstinación existiera no sería mía… Mía sólo es el rastro de lo que antecede; aunque… podría ser pues no sé a quién se lo debo; y retractarme también me sucede. ¿No te ha pasado que del resuello del cansancio

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zde una tarde a la que dijiste sí -pues toda respuesta se resume a un sí o note das cuenta que conoces otro modo de vivir? Camino de alhajas, plástico consuelo. Y por algún hervir en la sangre uno preﬁere el oropel de las cicatrices. -Pasado: mezcolanza que se vuelve a estampar. Como si los objetos-vestigio tomaran tus sentidos en la mañana que descansaras -ritual para despertarY te fastidiaran con las historias detrás de todo aquello -porque te sabes rizoma y pretendes no dar raíces. “… De conocer el pasado para comprender el / presente e imaginar el futuro.” Lo siguiente fue el hallazgo: Poemarios de mi madre en cajas (que sueñan con ser bibliotecas.) Laberintos con muros de recuerdo emergiendo de las macetas. Las historias de la segunda abuela sin principio, nudo o desenlace, porque las tres partes eran, simultáneamente, la acción de lo que signiﬁcaban. El día de su liberación, frente al hoyo ceremonioso, Mamá dijo: -Mírala, quedará ahí, como fue en vida y será en muerte-No hay nadie ahí.- Creo que dije ¿o me tragué la lengua y los dientes? Sé que quise decir que la muerte le dio tajo al verdadero ataúd que la disponía de hace tiempo, al ¡niña, quédate adentro! Silencio… Puede que ahora sí se lo diga -porque no ha terminado, aún ni pasa, seguimos ahí. Somos todos: Fantasmas que atienden a su propio entierro. Hartos de escuchar más cuentos y en el mejor caso La Nada, que sólo es algo porque le recuerdo. ¡é glorioso no ser nada! Y yo estoy ahí viéndole la cáscara de cuerpo. Profanando su vida con sus recuerdos Sintiendo mis pensamientos.

Poesía: Postal, Michelle Duque Ordaz

Si me pierdo, escuchen mis lagunas para que sepan cuanto van creciendo, apenas escuchen cuando vayan emergiendo. Bésenme la frente, quítenmelo todo, déjenme el oropel, giren el molino, pónganseme enfrente para verles renacer. Rueden por el piso un vestigio, apenas algo: El hilo de una gota de tristeza, esperanza o placer. Tomen la aguja de gancho Y entiérrenmela en los ojos para que el agua caiga. Profánenme la nada con el pensamiento Y ábranme la puerta para ser razón por la que no dejen salir a conocer.

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Toda la Noche Cantamos Julio Zatarain

Ilustraciones de Elizabeth Builes

Cuento: Toda La Noche Cantamos, Julio Zatarain

oy será un buen día, dijo Tereso al despertar en la mañana, y por la tarde, después de que los turistas se marchasen, la playa parecía un basurero. Debía usar una carriola vieja para acarrear los promontorios de residuos. No pudo conseguir carretilla esa tarde. El viento soplaba casi tan fuerte como el abanico de su casa. La basura daba volteretas en la arena y se le escapaban hacia el mar las bolsas más tercas. A pesar de ello, y de que su espalda le dolía, seguía pensando que iba a ser un buen día, aunque éste ya casi terminara. Al oeste se veía la dilución de una gigantesca pantalla dorada, dibujando a través de los maravilló al ver la multitud de puntos brillantes cirros triplicados, uno de los atardeceres más en el cielo, aunque sabía que poco iba a durar, porque el aire arreciaba y la negritud se poderosos del noroeste mexicano. doblegaba a invariables destellos azules. silhouee photo of woman siing on rock ¡Va a llover!, le gritó Tereso a María de Jesús, su during golden hour hija, quien azuzaba las pequeñas olas y corría Algunos niños de la isla se juntaron para ayudarlo a recoger basura. Procuraron que el ﬁngiendo que el agua tenía interés en alcanzarla. mar no se tragara ningún envoltorio. Marichuy, como le llamaban, recordaría aquella noche muchos años después, durante su La noche se apuró. Varios niños fueron a prender las luces de las palapas. Los últimos lecho de muerte, cuando le preguntaron si creía borrachos abandonaban la isla y los en la existencia de sirenas, y no pudo contestar restauranteros limpiaban el desastre que porque ni su boca ni sus ojos volvieron a abrirse. provoca cien kilos de ceviche de pescado. Lloverá fuerte, dijo Tereso al escuchar el gruñido del cielo. Hey, muchacha, a ver, ve a la Tereso era pescador por la mañana, y por la noche pepenador. Cuidaba la playa. Esta casa y tráeme unas bolsas que están abajo de la ocasión poco iba a lucrar con la basura. hornilla. Ella se apretó el vestido blanco y Llevaba casi dos kilos de botes de aluminio caminó aburrida hasta la cabaña. Cuando salió, cuando, en días pasados, recolectaba hasta diez cuatro minutos después, las estrellas se kilos hacia la misma hora. Hoy será una buena despedían detrás de un gran telón gris. El olor a noche, se dijo de todos modos, y siguió lluvia llegaba benevolente, causando una risa angustiosa a los isleños por miedo a que las olas recogiendo basura. alcanzasen sus casas. Pronto quedó el ﬁrmamento compitiendo con la playa, ¿Hay más granos de arena en la Tereso iba a vaciar la basura a una bolsa, pero playa que estrellas en el universo? Tereso se lo distrajo el festival de luces al compás de los

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Cuento: Toda La Noche Cantamos, Julio Zatarain casa y tráeme unas bolsas que están abajo de la hornilla. Ella se apretó el vestido blanco y caminó aburrida hasta la cabaña. Cuando salió, cuatro minutos después, las estrellas se despedían detrás de un gran telón gris. El olor a lluvia llegaba benevolente, causando una risa angustiosa a los isleños por miedo a que las olas alcanzasen sus casas. Tereso iba a vaciar la basura a una bolsa, pero lo distrajo el festival de luces al compás de los relámpagos y su sonido tardío. Corrió a un tejaban hecho con hoja de palma y recordó las historias de su pueblo, donde los rayos desvanecían a las personas, dejando solamente en el piso una mancha negra, chamuscada, y el sombrero solitario arriba de la mancha… Decían que los rayos los mandaban a otro mundo. Tereso observó cómo su hija seguía divirtiéndose con algunos peces que saltaban desesperados en la orilla. Con truenos y pescados me quiere hablar Dios, pensó. Era como si el vendaval removiera las brasas del cielo, trayendo luces y ecos. ¿Habrá cosas que Dios no sepa?, pensó Tereso mientras le daba la espalda al viento para respirar mejor. La pequeña de seis años, Marichuy, casi cae en trance cuando llegaron a sus poros esos vientos irreconocibles de altamar. Regresó a casa envuelta en un misterioso miedo. Al llegar encontró a su madre con las manos en forma de plegaria y con cara de espanto. La misma cara que puso cuando murió su abuela. Le dijo mami. Cállate, estoy rezando. Salió al portal de la cabaña y vio a su padre maravillado por el mar y el cielo. Pensó cuan extraños eran los dos. Dios no escuchó a Tereso. Estiró su cuerpo y se recostó para mirar la inmensidad del océano. La basura que quedaba no iba a llegar al mar. Vio a su hija caminando lento, acercándosele, todavía con el miedo envuelto.

Papi, ¿ya viste los peces que brillan?, Marichuy olvidó el estado pálido de su madre. ¿Cuáles peces, niña?, preguntó su padre olvidándolo al instante. Siguió viendo todo su rededor. En el ángulo izquierdo: algunas solitarias almas recogiendo más basura y yéndose a dormir, palmeras oscilantes, cabañas, la inﬁnita huerta de cocos, restaurantes, y al fondo, más allá de todo pero antes de las montañas de la lejanía, estaba la termoeléctrica expidiendo nimbostrato; se le acabó la mirada en el ﬂanco izquierdo, pero a su derecha, por donde estaba jugando su hija, había cientos de peces luchando por su vida. Ah, sí, dijo sin interés, hay varamiento. Pero más a la derecha, allí justo donde el mar inicia o se acaba y la espuma se desvanece, había varias docenas de peces rodeando un bulto que no parecía ser humano porque estaba demasiado grande, pero que tenía la forma de una mujer, una muy grande. Cuando el cielo se quedó quieto, se pudieron oír sus estertores. ¡Una ballena!, gritó Tereso. Los relámpagos iluminaban con ambigua alternancia el dorso humano. Miraron la bella cola de pescado. Era verde y brillaba. La criatura notó que dos personas se acercaban. Se alteró, comenzó a estremecerse y a berrear un fabuloso ruido vago que podía llevar al embelesamiento si se escuchaba en altamar. Una lluvia diminuta llegó sólo a estorbar y de pronto toda la atmósfera del lugar se convirtió en una alberca inmensa de brisa. Cuando llegaron, Marichuy fue quien habló, la brisa densa hizo que sintiese lo que sentimos cuando hablamos dentro de una alberca, pero lo debía decir, y lo dijo, pues jamás le volverían a brillar los ojos así, ni en su lecho de muerte. ¡Papá, es una sirena!

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El VacĂo es el Comienzo Rogelio Silva Cerna

Cuento: El Vacía es el Comienzo, Rogelio Silva Cerna momento antes de responder.

a balsa de Ene se adentra en el mar solitario con el sube y baja de las olas. El sonido del viento y el chapoteo del agua es lo único que escucha. Alrededor todo es neblina. Contempla por un largo rato ese limbo pálido que nubla sus pensamientos, como si el vacío inundara cada imagen desagradable de su vida hasta hacerla desaparecer. Después de remar por varios minutos, el sonido de un motor que se acerca lo saca de su trance. Aparece un bote abriéndose paso entre la niebla. Lleva dos siluetas a bordo y vienen justo hacia él. Es un anciano gordo y calvo, viste de spandex y lleva a un niño envuelto con impermeable y chaleco salvavidas. A simple vista se puede notar que el pequeño tiene síndrome de Down. Eleva el rostro al cielo y sonríe con el viento en su cara, lo festeja con las manos alzadas, se alegra aún más cuando ve a Ene, como si le resultara alguien conocido. El viejo apaga el motor, saluda con un sonoro “buenos días” y tiende la mano a Ene. El niño se entrevera entre sus brazos y extiende también su mano regordeta. Soy Pablito, soy Pablito, repite varias veces y se palmea el pecho. Ene responde el saludo y el anciano lo mira con curiosidad, resuella como si le costara trabajo jalar aire, luego echa un vistazo a la balsa de Ene. La analiza como en busca de algo de más que la presencia solitaria de su tripulante. —Tenga cuidado—, dice el viejo— más adentro el mar es bravo y traicionero. Es fácil perder el rumbo—. Ene asiente con la cabeza y titubea un

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—Tendré cuidado—. Dice ﬁnalmente. —Nosotros vamos hacia los arrecifes de aquella orilla, a ver si tenemos suerte—. Dice el anciano y muestra una caña de pesca. —Atraparé un pez grande para mi abuela—. Interrumpe el niño. El viejo lo mira y después sonríe. —A mi nieto le encanta este lugar —. Dice el viejo, pero no obtiene respuesta. Entonces parece entender que Ene es un hombre de pocas palabras o de esos a los que no les gusta iniciar una conversación con un extraño. —Pero bueno, no le quitamos más el tiempo.— Dice ﬁnalmente y extiende de nuevo la mano a Ene, para despedirse. Enciende el bote y da marcha hasta que se vuelven pequeños a lo lejos. Pablito no deja de extender la mano en un adiós que ondea de lado a lado. Ene rema un poco más sin perder de vista las siluetas en el bote. Aún se escucha la voz chillona de Pablito que ríe, grita y festeja a *Cagrejo Ermitaño Juano Hernández*

Cuento: El Vacía es el Comienzo, Rogelio Silva Cerna

El cielo se despeja y un azul claro e intenso lo cubre y acaricia con su calor. De nuevo suena a lo lejos la risa del niño, luego un chapoteo. Ene aguza la mirada y hace sombra con el dorso de su mano para cubrir los rayos del sol que ya se asoma. La cabeza calva del anciano emerge del agua, luego estira el cuerpo y trepa de nuevo al bote, el niño echa carcajadas. Ene vuelve a remar hacia adelante hasta quedar rodeado nada más que por nubes. De nuevo en soledad, trata de escribir una nota en su cuaderno, pero las palabras se niegan a salir. Recuerda el día en que toda su vida se vino abajo: la mirada a punto de apagarse en el rostro de su esposa y el cuerpo inerte de su hijo, como el de un ciervo atropellado a la orilla de la carretera. Las heridas en sus pechos como agujeros que lo devoraban todo alrededor. Ene se desmorona. Acostado boca arriba deja que el llanto se deslice hasta sus orejas. Cuando el sol le impide abrir los ojos, lo asaltan las palabras que recientemente le había dicho el viejo: es fácil perder el rumbo. Se incorpora y echa un vistazo para calcular qué tanto se alejó de la orilla. Allá al fondo cree divisar indicios de cercanía; un débil sonido de voces. Por primera vez en mucho tiempo tiene una urgencia de abrazar a alguien y de asirse de algo. Hoy no voy a poder, se convence después de varios minutos de sentir que ﬂota en la nada y que el sol le quema el rostro. Comienza el retorno de forma lenta, con titubeos.

*The Whale Song Juano Hernández* Página 27

Cuento: El Vacía es el Comienzo, Rogelio Silva Cerna Media hora y el anciano no emerge, Ene comienza a impacientarse. La calma en el niño le indica que podría ser cosa normal. Pero al mismo tiempo le desconcierta que no pregunte por su abuelo, piensa que si fuera él y tuviera su edad ya estaría aterrado. Al mismo tiempo le enoja la negligencia del viejo al dejar solo al niño. ¿A qué hora saldrá tu abuelo? le pregunta. El niño levanta los hombros y sorbe los mocos. Yo no sé, responde con una sonrisa que deja ver su dentadura incompleta. Después de varios minutos más, la incertidumbre en Ene termina por ganarle. Pablito, espérame aquí ¿sí? dice mientras se quita la camisa y los pantalones. Desciende de la balsa. Se zambulle. Sale una y otra vez a tomar aire. Cada que emerge, el niño lo observa sentado desde el mismo sitio, con la caña de pescar aún entre las manos. Resultado de imagen para ballena pintura Al séptimo intento, después de casi una hora de sumergirse y bucear en círculos, lo más profundo que pudo, queda fatigado. Ya sin aliento para nadar y contener la respiración, abandona la búsqueda. El mar se lo tragó, es la frase que retumba en su cabeza. El niño es ajeno a lo que pasa. Ya toma un refresco de la hielera, ya se pone frente al timón y hace trompetillas como si nada raro estuviera ocurriendo. Ene sube al bote. Pablito presume un pequeño crustáceo de carnada. Su cara está enrojecida por el sol y el viento le bate el fleco de su cabello. Se sienta al lado de Ene y lo mira curioso con sus ojos rasgados y la boca abierta; un hilillo de baba le escurre por las comisuras. Ene espera una pregunta, que lo cuestione por el paradero de su abuelo, pero no pregunta nada, sólo sonríe con una inocencia que le trepana el pecho. Más de una hora. Cuánto tiempo dura un tanque de oxígeno. Ene no tiene idea, pero espera que sea lo suficiente como para que el anciano suba a la superficie. Piensa en la posibilidad de que algún animal lo haya devorado o que tuviera un infarto mientras estaba sumergido. Dos horas y no hay indicios del viejo. Ya no hay nada que esperar. Se pregunta cómo hará para volver a la orilla sin que el niño crea que abandonan a su abuelo. Dos horas con treinta minutos pasan y el atardecer pinta el cielo como una explosión estática. En el horizonte brota un chorro de agua: una ballena jorobada saca todo su cuerpo al viento en un salto majestuoso. El estruendo al caer eriza la piel de Ene y Pablito da brincos de emoción.

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*Ballenas Juano Hernández*

Convocatoria Textos en español en formato Word -Poesía -Cuento -Ensayo -Reseña o crítica de libros, películas o música -Artículo de opinión

Máximo 3 hojas Enviar a: revistapoetomanos@gmail.com Fecha límite: 17/enero/2020 NO TIENEN QUE SER INEDITOS

Tara

Dennise Alcibar

Cuento: Tara, Dennise Alcibar

is sentidos están afilados, por primera vez conocí a un ser humano y ya no pertenezco a este mundo. Diego es lo sublime, mis ojos fueron suyos desde que presentí nuestro futuro y lo dibuje con mi lengua sobre sus pulgares. Mi deseo provocó el suyo y su mirada no se detuvo en mis labios sino en mis dientes. ¿Cómo no va a estar hambrienta la mujer de este Adán? Nos entregamos al ritual como cazador y presa. Respiré el banquete de su piel dispuesta, recosté su cuerpo bajo el mío y nos unimos, pero no fue suficiente. Deseo a Diego tan dentro de mí como sea posible. Besé sus ojos, musas verdes, y libé la absenta que emanó de ellos. Lo vi transfigurarse en la más deliciosa pulpa. ¿Cómo no va a estar hambrienta la mujer de este Adán? Fui una fiera codiciosa: lo bañé en saliva, me nutrí de los fluidos que me ofrendó, mis garras se hundieron en su carne al mismo tiempo que mis dientes. Escarbé sus entrañas hasta saciar mi apetito. En nuestra misa de cuerpos presentes, mi salvador ofreció la eucaristía para el perdón de mis pecados. Tomad y comed todos de él. La cena de mañana será en conmemoración suya, haré puré de papa y coles de bruselas para acompañar la buena carne que puse a congelar: sabe cómo cerdo, pero más sustancioso. La noche del sábado 27 de julio la familia de Diego L. me contactó para investigar su desaparición. Visité todos los lugares que Diego L. frecuentaba, pero nadie pudo darme información relevante, hasta el jueves 1 de agosto. Conseguí un testimonio que me condujo a la pareja sentimental de Diego: Tara M.

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Cuento: Tara, Dennise Alcibar Visité a Tara M. para averiguar el paradero de Diego L. y no estaba en su domicilio. Los vecinos me informaron que presuntamente está fuera de la ciudad. No saben nada de su familia, ni su procedencia. La única información que pudieron proporcionarme es que llegó a vivir a ese sitio hace menos de un año. El 3 de agosto entré a la vivienda de Tara M. Estoy consciente de haberme conducido con ilegalidad, asumo las consecuencias de mis actos, pero no podía dejar pasar más tiempo. Su departamento es un lugar pequeño y muy limpio, sin rastro de polvo. En apariencia no hay nada fuera de lugar, pero como ya se sabe, el orden es sospechoso. Las casas más ordenadas pertenecen a personas con algún tipo de desorden. Revisé meticulosamente cada espacio y encontré un falso fondo en la alacena, allí hay un recetario y una libreta, cuyas últimas notas transcribí al inicio de este escrito. En el refrigerador hay carne congelada. Nada más.

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La Flor Infinita VĂctor Parra Avellaneda

Cuento: Flor Infinita, Víctor Parra Avellaneda

ay en el jardín de una vieja casa una flor infinita. Nadie se atreve a entrar ahí por el miedo de perderse entre el infinito y reconocer que Dios tiene forma de planta. Los animales que se atreven a deambular en sus arbustos evitan tocar cualquier hoja. Inconscientemente saben que, al ser infinita, la flor se ha alimentado de la luz de todas las estrellas que han existido y en sus tejidos están los nutrientes necesarios para generar cualquier forma de vida. Por eso dicen que los frutos de esta flor son en realidad todas las estrellas y planetas que deambulan por el universo. Dicen que cuando la flor comience a marchitarse, también lo harán las noches estrelladas, los sueños de los hombres y el canto de las aves. Dicen que ello anunciará el fin de la primavera y el inicio de un invierno perpetuo, donde todas las cosas volverán a su lugar de origen: a la nada. Hay en el jardín de una vieja casa una flor infinita. Nadie se atreve a entrar a este lugar por miedo a perderse entre el infinito y reconocer que en el jardín impera el vacío.

Parede com Falsa vinha Nadia Abduch Página 34

Convocatoria para portada Revista Poetómanos

Enviar una imagen en alta definición tomando en cuenta que esta debe ser original y de autoría propia

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La propuesta deberá ser enviada a revistapoetomanos@gmail.com con el asunto: Portada Enero

La imagen será seleccionada por el comité editorial Poetómanos

Cada autor puede mandar hasta 3 propuestas, estas pueden ser: Fotografía, dibujo, pintura, Collage o cualquier tipo de expresión grafico-pictórica

La convocatoria cierra el 17 de enero del 2020

Mรกs Allรก de tu Carne Israel Montalvo

Cuento: Más Allá de tu Carne, Israel Montalvo

l Sol era una nuez anaranjada que se posaba sobre el firmamento, el viejo alemán recorría el camino que conducía a la choza que compartía con su amante, ubicada al extremo norte de la torre del fin de los tiempos. El viejo aun usaba ese uniforme militar con que había llegado al confín de los mundos, era una segunda piel. Roída y carcomida por una eternidad, como su rostro, un reflejo de hastío, hacía un tiempo que se había quitado el bigote que había llevado por su rostro por toda una vida, se parecía al de Chaplin, aunque en él, perdía su gracia para convertirse en algo amenazador. El viejo era un ermitaño que vivía en un aislamiento perpetuo, salvo por su amante, el resto del mundo desconocía su presencia, era un fantasma en una ciudad de olvidos, como lo era su amante, un judío tan frágil como el cristal finamente cortado, él era una contradicción, tanto con el viejo como para la cordura, pasaba sus tardes en la tienda de a n t i g üe d a d e s d e l a D i v i n e, q u i e n s e consideraba “la persona más inmunda del mundo”, un título que se había ganado en su juventud, en que se dedicó a explorar el lado más oscuro de la naturaleza humana. El judío iba cada día en busca de condenaciones para decorar su nido de amor. Ahí se encontró con el libro de la vida de un hombre llamado Destino, en el cual leía lo que vendría y le daba las respuestas para cada suceso. Siempre traía una toalla blanca con manchas marrones en la cabeza simulando un turbante. Y vestía una piyama estampada con ositos dormilones y pantuflas peludas. Hablaba en su propio idioma, una mezcla de palabras invertidas y parábolas bíblicas, para el viejo ese despojo de hombre era el amante más generoso con que se hubiese topado en esa u otra vida. Lo había

conocido en su llegada y sin pensárselo le brindó su casa y consuelo después de haber huido de otra existencia donde fue el verdugo de hombres como su amado. A veces se odiaba por llegar a sentir compasión por él, quién había cargado el sufrimiento del mundo bajo sus hombros, sus manos aún tenían frescas las huellas de la crucifixión, estigmas sangrantes que le impedían ser útil en cualquier cosa. En cierto modo ellos eran dos gotas de agua, dos versiones de la misma cosa, el ying y el yang, mientras su amado intentó salvar a los hombres con el sacrificio, el viejo intentó salvar a su pueblo quitando del mapa a todos los demás. Ninguno logró una diferencia. El mundo siguió sin ellos, enfrascado en sus errores, mientras sus despojos de humanidad terminaron en una minúscula cabaña pérdida en el anonimato a las afuera de la ciudad del otoño perpetuo. Ese día según sus cálculos, sería su aniversario, algo que tuvo que explicárselo sin lograr hacerlo entrar en razón al judío, aun así, el viejo decidió hacerle un regalo, algo para demostrarle su importancia, aunque, su amado no lo comprendiera ni le interesara. Fue a la tienda de la Divine y se hundió en el foso de antigüedades por los confines del sótano, entre las bizarrías más singulares que Divine había acumulado en vidas, muchas de ellas databan de existencias, antes de los tiempos y las eras, y ahí fue donde se encontró con la caja blanca. Pesaba menos de un gramo y en ella podrían caber tan solo un par de zapatos. Se perdía en una blancura perpetua y estaba cubierta por algo que simulaba la piel de algo vivo. Divine le contó lo que creía saber sobre la caja blanca,

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Cuento: Más Allá de tu Carne, Israel Montalvo Pesaba menos de un gramo y en ella podrían caber tan solo un par de zapatos. Se perdía en una blancura perpetua y estaba cubierta por algo que simulaba la piel de algo vivo. Divine le contó lo que creía saber sobre la caja blanca, era en cierto modo, como la caja negra de un avión, sólo que en su interior se escondía el registro de universos perdidos y humanidades extintas. El viejo no lo pensó dos veces y se llevó la caja, ese sería el regalo ideal para su amado, el registro de otros tiempos, mucho antes de que ellos marcaran una vida con sus actos. Esa noche, después de la cena, el viejo le dio la caja, su amante estaba fascinado con la textura que simulaba la piel de algo vivo, y el viejo se preguntaba por su contenido, Divine le rogó que no la abriese por nada del mundo, sin darle un porque, y eso, alimentó su curiosidad. Después de beberse los restos de un par de botellas (a ﬁn de cuentas era su noche), el viejo se había desinhibido con la legua dejando libres las historias de la gran guerra y el reinado de un milenio que nunca llegó a existir, mientras su amado no le prestaba gran atención ya que estaba perdido en el libro de la vida, en el pasaje que hablaba de quien leía esta historia y de cómo acabarían sus días. El viejo dejó libre a la curiosidad que tanto deseaba indagar en la caja, a la cual, su amante le había tomado poco interés. Se balanceó sobre ella y la tomó en sus manos. No lo pensó, quitó la tapadera que cubría la superﬁcie y se encontró con una ranura vaginal, un himen inmaculado, que bien podría ser unos labios carnosos. El viejo la acarició con sus dedos y se le puso dura con ese suave roce. Se dejó llevar por el impulso y al darse cuenta le daba un beso a la ranura, separó sus labios al sentir como se habría y dejaba una obertura donde se asomaba la oscuridad, aquello que habitó la existencia antes de la existencia. Era tan pura y hermosa. Un negro

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absoluto. Despertó emociones que no sabía que se podían sentir y una necesidad de fundirse en aquel olvido, y dejar de ser. La caja cayó de sus manos que eran un temblor palpitante. Levantó la vista y vio a su amante, su atención estaba tanto en él como en aquello que había indagado, era como si ese negro profundo lo hubiese poseído, dejó de lado el libro donde todo está escrito, como lo que debía hacer en ese momento. Se quitó el turbante, en su mirada, se podía ver una lucidez que nunca se le había conocido. El judío fue al encuentro del viejo y tomó sus manos temblorosas, le dio un prolongado beso y lo guio a los conﬁnes de otros cosmos, en busca de un lugar en que por ﬁn serían solo uno. Se hundieron por esa ranura hasta perderse en la negrura dejando a la caja por el piso, en su lomo la obertura simulaba una bo ca hambrienta, deseosa por dar otro gran bocado.

La Relatividad por Salvador Montediablo

Cuento: La relatividad, Salvador Montediablo Te quiero como a nadie había yo querido antes; antes de ti no soñaba más que con muertos con la piel al revés o con fantasmas que se asoman por la ventana, pero después, sueño con cosas que de seguro ni existen, que están ahí para que ambos las inventemos, ella me dice: Pues no te emociones mucho, la verdad es que me la paso bien contigo. Charlamos mucho y sabes cosas muy interesantes. Siento que me quieres y eres honesto, pero, espera no te enojes, no te vayas, no quiero que te sientas así. Sólo dame tiempo para pensar bien las cosas. Hoy hablé con mi hermana mayor, yo sé que tú no eres así, pero me puso a pensar. Me platicó: No, hermanita, esos cabrones nomas te quieren para coger y luego adiós, y con suerte no sales embarazada. Bien los conoceré yo. A mí nunca me pasó, supe elegir bien a mis novios, pero a Lencha ¿la recuerdas? La de pelo castaño que pasaba por mí para irnos de fiesta. A ella sí le pasó algo similar, y ni sabes lo que me contó: Amiga, no me ha bajado, no sé qué hacer, tengo miedo de que mis padres me manden a la calle o de que el Alfredo se haga el pendejo y ya no me corresponda; o ambas. Y entonces ¿qué haré? espero sea un retraso nada más, pero no lo creo, soy muy regular y además. Creo que no usamos condón la vez de la fiesta de Ricardo. Cuando estábamos en su coche le pregunté que si traía condones, el cabrón me dijo que sí, pero Alfredo siempre ha sido muy mentiroso y más si anda pedo, una vez platiqué con uno de sus amigos: Alfredo… mira, amiga, no es porque estemos en ésta fiesta y esté ebrio, pero te seré honesto, no creo que te quiera. Éste bro se clavó con su ex, aún la ama, si anda contigo es como para no pensar en ella ¿si me entiendes?… ¿tienes un cigarro?- gracias. Te digo, estás bien pendeja si sigues con él, una vez hasta su misma ex me dijo, así igual o más peda que yo: A este pendejo lo traigo de mi gato, yo ya le dije que sólo cogiéramos y fuéramos amigos, pero

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ahí anda de enamorado y romántico el muy mamón. Me vale verga que sea el capitán del equipo de fut y el próximo candidato a la presidencia de la federación universitaria, si no me gusta, no me gusta y ya. Es muy su pedo si se clava ¿no crees? yo ya le fui clara y si él se quiere lastimar, pues que pendejo. Oye ya supiste lo de la Claudia ¿sí sabes lo que paso con ella? su misma prima andaba diciendo: No, manita: Pobre Claudia, si se pasó de pendeja, primero, por andar reprobando, segunda por lo que hizo. Le dijimos estudia, estudia, pero nada que estudiaba. Se acostumbró a que en la prepa sacaba sus 8 y 9. Pero no, en la universidad supo cómo era una escuela que no es de paga, y pues el pedo está en que la pendeja se le insinuaba al profe de cálculo para que la pasara; se le insinuaba y el profe le entendió a la primera. Era cuestión de que la Claudia le tirara el calzón para que aﬂojara con un “rapidín” y con el 8 o 9 en la boleta de caliﬁcación. Bueno, según ella. Un día que se van todos que a una conferencia de liderazgo o una mamada así, el profe estaba borrando el pizarrón cuando la Claudia que se aproxima y le agarra el pito, y que le roba un besote al profe, que aparte estaba feo y era muy baboso. La prima se lo empezó a agasajar y el profe la apartó, le dijo que no con la cabeza, y ésta encabronada que le dice que lo iba a acosar de abuso, de acoso y de cabrón coge-estudiantes. Pero que pendeja la muchacha, la laptop del profe estaba grabando todo, era una trampa del profe; ahora sabemos que no es tan

Cuento: La relatividad, Salvador Montediablo No, sobrina: nomás deje que termine la secundaria, voy a ser el mejor luchador habido y por haber. e pinche Rey Misterio y que la mamada. Esos nomas se saben 3 o 4 movidas y ya con eso, es más el pedo el que hacen. Yo si voy a darme putazos de verdad, tengo pensada una mascaras así partida en dos: de mi lado izquierdo quiero ser el Coatzacoatl, para volar y andar emplumado. Volar desde la tercera cuerda y caerles en la cholla y mandarlos a chingar a su madre hasta el Mictlán; el otro lado quiero ser el pinche rey jaguar, para que mis enemigos sepan que les voy a arrancar el corazón y psicológicamente sepan que pedo. Todo está en la mente, me cae. Este toque de mota está bien bueno. Hace unos días me encontré a un cabrón en el gimnasio de la colonia, un chavo como de unos 19, andaba encabronado y le pegaba fuerte al costal, me acerco y le pregunto ¿Anda encabrona'o, mijo? y que me responde mirándome bien feo:

baboso el profesor. Claudia se fue de putilla al eje vial y después se fue a otros lugares a ofrecer su cuerpo. ¡Jaja! no es por ser mala persona pero la cabrona si me caía mal, aun siendo mi prima. Una vez me la llegué a encontrar, en la cena de navidad, nadie se le acercaba. No sabemos ni quien la invitó. Estaba en una esquina comiéndose un tamal de picadillo. Pobrecilla, me dio cosa, me le arrimé y ya me comenzó a Pues mire, patrón, no es algo que le importe, igual platicar: son mis problemas, pero si quiere saber: ando aquí para ser fuerte, para tener la fuerza para defender a Prima, está bien cabrona la vida. ¿Tú crees que mis amigos. Hace unos días después de echar una me interesa harto convivir con ustedes, bola de cascarita de fut llegaron unos vándalos, nos quitaron arrogantes hijos de la chingada? No, nomás el balón de fut, eran más que nosotros, y al ver que no espero a que todos se pongan pedos para ir por traíamos ni un peso que nos agarran a madrazos. Al mi acta de nacimiento y mi documentación al pobre de Jorge si le tumbaron un diente. Me cuarto de mis papás que muy ahuevo me encabrona la gente abusiva, la fuerza es para hablaron hace rato. e chinguen a su madre, defender a los que no la tienen, no para andar de con perdón de nuestra abuelita. ¡jaja! ¿no estás abusones. Por eso ando aquí, entrenando para la tomando nada? Ten, es mezcalito que traje de próxima que me encuentre partirles su madre. Yo sé Salinas, un rancho de San Luis. Bueno, pues, me que la venganza no es buena, yo sé ya me lo dijo mi casé con un wei que conocí en el Facebook. ama, pero nomás por si se vuelven a aparecer y ocupo Estaba en el gabacho, pero ya viene para acá, ya defenderme. Hace poquito fui a ver al Jorge, le le dieron la residencia. Él no sabe que me la viví pusieron un diente de ﬁerro al pobre. Deporcí está de puta. e ni sepa. Pero el muy wei dice que si feo. Pero bueno, lo visité, estaba en su Xbox y ya se enamoró, ya tenía una casita hecha y pues ahí jugando los dos me dice: vivo además de que me mandaba dólares, pero acuérdate que la diabetes como la putería no se Oye, we: con lo que pasó mi papá ayer me llevó a un cura, nomás se controla. Pues ya sabrás, nomás putero, que para que me hiciera hombre y me vine por la documentación porque según él, me supiera defender. No le encuentro sentido, pero ese quiere llevar para los iunadesteits. Pues bueno, lugar no me gustó: ni la atmosfera, ni las viejas todas así me tocó por andar de cabrona. Oye ahí anda pintadas, ni sus carnes chocando en cámara lenta el tío Palomito ¿verdad? es a toda madre. No sé con él tubo. Es más, ni el tragote de tequila que me por qué tampoco me habla, ya anda pedo, dieron me gusto. Yo quiero una novia bien pero, pues, recuerdo que de chica me platicaba:

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Cuento: La relatividad, Salvador Montediablo

estoy bien jodido y aparte tengo cara como de servidor público con la quincena atrasada. No, hombre, si te contará. Mi primo el Joss, ese wei me platica: No, primo: esta difícil encontrar a tu media naranja, a veces vamos a encontrar a nuestro medio limón o a nuestra media manzana, pero a la media naranja, es un pedo que romantiza la soledad y la búsqueda de la perfección entre dos seres. Y pues yo creo que la perfección es aburrida, que mejor que los defectos para reírnos, para aprender, para creer que la humanidad puede mejorar, a lo mejor te suena a que te tiro el verbo. Pero ya cuando crezcas vas a agarrar el pedo ¿quieres un cigarro? -Ten. El amor, el pinche amor, no deja. Mejor dedícate a cosas productivas para ti, sé cabrón para algo que te guste y cuando sea el momento ella te llegará. Porque estarán en un lugar donde ambos convergen y sus mentes se van a conectar, así como en Star Wars, así mero, y si no llega pues tampoco tienes por qué temerle a la soledad, es buena compañera. No vayas a estar como un wey que se andaba muriendo por una mujer. Lo encontré en mal estado en una cantina, no sé por qué me comenzó a hacer platica, me decía: We, no entiendo estos tiempos: le dije todo lo que sentía, me aprendí unos versos de memoria y se los dije tan naturalmente que creí que si iba a caer, que íbamos a frecuentarnos. Claro que le tendría paciencia, que saliendo del café ella iría pensando en darme el Sí en su momento, pero fue tajante. Me comenzó a contar sobre lo que le platicaba la pendeja de su hermana sobre lo que le paso a una amiga de ella que cogió con un wei que tenía un amigo que una vez le platico sobre lo que le decía la ex del wei, luego la ex comenzó a platicar sobre lo que le paso a una tal Claudia que le contó sobre lo que hacía su novio y su plan para sobrevivir en los subtes del gabacho, que a su vez platicando con su prima le contó los alucines que provocaba la mariguana en su tío el que iba a ser luchador, que estando en el gimnasio se encontró con un wei que estaba encabronado, entrenando por que unos vándalos los madrearon y le tiraron el diente a uno morro que jugando al Xbox le platica al encabronado que lo llevaron a un putero y que platicó con un primo mayor que le decía que se encontró a un pendejo en una cantina que andaba borracho y llorando por una mujer.

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El Fantasma de la RevoluciĂłn en los Movimiento Actuales por KevĂn

Herrera

Opinión: El Fantasma de la Revolución en los Movimientos Actuales

na obra de arte, pero, más no un símbolo del feminismo, es importante tener claro que el movimiento está saliéndose de las manos, y poco a poco se aleja de lo que se esperaba, están en un punto crítico en el cual son intocables. No se les puede decir nada, no puedes criticar su movimiento por que estarías en contra d e e l l a s , y e s o e s a b s u r d o. L a incongruencia es increíble: sexualizaron una imagen de forma desagradable ¿con qué ﬁn? ¿tomarlo como bandera? Pero ¿no hicieron todo lo que ellas deploran? Más que feminizarlo lo hicieron una burla para su movimiento y nos dice que ellas, mismas se ven e esa manera, ya es una psicosis maniaca paranoica que e n v u e l ve a t o d o e l m u n d o. L a victimización es tremenda y, quiero que quede claro y estipulado, la situación de ciertas personas contra las mujeres es asquerosa, pero eso no es motivo para generalizar: ni todos los hombres son asesinos y violadores en Página 44

potencia, ni todas las mujeres son… ¡exacto! ¿qué palabra se puede usar sin ofenderlas? ¿Santas? ¿Feministas? No todas las mujeres sufren lo mismo. Es como todo: no todas las PERSONAS sufren lo mismo, entonces no es bueno generalizar. Lo que ellas hacen no es la manera correcta de hacerlo y este es el punto cúspide de todo. Alegan una ñ de hace 100 años, con la “revolución” y cómo la violencia fue parte de la misma, pero, eran tiempos distintos. Ahí la mujer no tenía los mismos derechos (no digo que ahora los tenga). Pero, utilizar y feminizar una ﬁgura autoritaria de esa época a la cual parecen enaltecer para después contradecirse, es, simplemente incomprensible. Así uno queda estoico ante tanta incongruencia y solo ve manchado un movimiento que poco a poco se va tergiversando a un hecho oscuro que si sigue así, culminará en una revolución llena de guerra y muerte, retrocediendo 100 años en el tiempo. Porque claro, los cambios solo se logran con violencia.

Las Innovaciones Literarias de Jorge Luis Borges por José Antonio Samamé

Ensayo: Las Innovaciones Literarias de Jorge Luis Borges, José Antonio Samamé

n la actualidad, la producción literaria de Borges constituye un gran legado clásico en Argentina que representa a toda una generación por su rigor impuesto en sus escritos, siendo un prototipo unánime con trascendencia internacional que integra una postura revolucionaria y reaccionaria, empleando un lenguaje culto como popular, asimismo, articula lo antiguo con lo moderno. Cabe mencionar que, su obra conforma un medio transmisor de elementos propios de la metafísica y abstracción, además de un espécimen para el resto de escritores nacionales, pues el estilo Borgeano propicia de una serie de soluciones ante diferentes problemas, misterios, inquietudes por el futuro, entre otras temáticas a plasmarse en escritos de literatos argentinos. Por tanto, se erige como insigne escritor clásico contemporáneo de la literatura hispanoamericana con reconocimiento a nivel mundial, que manifestó en su acervo literario una inclinación por elementos oriundos de su patria junto a ideales de revolución vanguardista. Asimismo, su poesía se caracteriza por exponer un legado denotado de pensamientos, los cuales, se reflejan en profundos sentimientos de una realidad onírica consciente o inconsciente, no obstante, se centra en manifestar una herramienta que induce a pensar, reflexionar e indagar en relación con el aspecto emotivo, pues se avoca en el desarrollo de análisis y raciocinio. Por tanto, los escritores que adoptan esta modalidad corresponden a Raúl Gustavo Aguirre, Joaquín Giannuzzi, Alfredo Veiravé, Jorge Calvei, Alberto Girri, Horacio Castillo, Roberto Juarroz, Mario Trejo, entre otros poetas (Real Academia Española, 2019). En ese sentido, la poesía de Borges se caracterizó por plasmar un hito notable en Argentina, pues se enfocó en impulsar el pensar, averiguar, cuestionar, analizar, entre otros aspectos fundamentales en el desarrollo intelectual, por tanto, su temática se desligó de los componentes emotivos expuestos con mayor predominio en el género lírico, a fin de ocasionar inquietudes como diferentes ideologías.

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Ensayo: Las Innovaciones Literarias de Jorge Luis Borges, José Antonio Samamé Cabe mencionar que, las obras poéticas de Borges se denotan por expresar una gama de peculiaridades conformes a fines estéticos, procurando orientarse a intereses manifestados en el escrito, así como, a las expectativas de la demanda objetivo, con el fin de transmitir a través de una creación sofisticada un conjunto de emociones emanadas del mismo ser. Por otro lado, resalta la injerencia de la temática en el arte de escribir, siendo más relevante en relación a las figuras literarias empleadas en la poesía como metáforas, ritmos, hipérbaton, entre otros distractores, pues impera la pasión y el dominio del tópico seleccionado (Castellanos, 2014). En tanto, el estilo poético de Borges indica la disconformidad con la forma de escribir artificiosa por constituir una equivocación que expone un problema moral, impidiendo generar en el lector sentimientos de admiración, por ende, determina que la idoneidad de la obra poética se denota por su concordancia con los fines estéticos, cumplimiento con el objetivo propuesto, además de la demanda establecida. De este modo, exige una profunda atención del lector para conseguir comprender el escrito de forma global.

Por otro lado, sus escritos en prosa enmarcados a ciencia ficción se denotaron por ser precisos con una admirable brevedad en sus primeras publicaciones en Destiempo como RMS, no registrándose diferencias significativas con los matices expresadas en la poesía, pues Borges concebía al lenguaje como una creación estética que brindan al lector un escenario activo y vivaz en concordancia con la historia desarrollada en aras de impulsar su intervención hasta el final de su análisis (Real Academia Española, 2019).

Respecto a su involucramiento en el poético de Borges género policial, Borges es un continuador de la indica la disconformidad con la forma categoría creada por la obra literaria de Poe, mostrando una gama de matices particulares de escribir artificiosa por constituir unaproducto de la evolución generada en el transcurso de los periodos, es decir, el lector equivocación que expone un problema contemporáneo muestra una óptica diferente a lo anterior, por ende, los misterios, los moral, impidiendo generar en el lector sentimientos de admiración” desenlaces de historias que narran escenas “En tanto, el estilo

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Ensayo: Las Innovaciones Literarias de Jorge Luis Borges, José Antonio Samamé

De esta manera, el público objetivo actual se caracteriza acceder a información con facilidad a diferencia de sus antecesores por el dinamismo de los avances tecnológicos, aspecto que propicia el surgimiento de un metalector diestro respecto a la trama o secuencia de hechos en diferentes escenas desarrolladas por el género policial. Por tanto, Borges pretendió en su obra detectivesca dilucidar una serie de hechos de forma soﬁsticada que ocasiona en el lector confusión, impidiendo la explicación a detalle de la suscitación de crímenes descritos, pues el narrador del relato junto con la intervención de algunos personajes otorga una mayor complejidad al cuento enmarcado en este género, cuya orientación se dirige especialmente a literatos, expertos en ﬁlosofía e intelectuales.

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“se caracteriza acceder a

información

facilidad a diferencia de sus antecesores” con

Respecto a los matices evidenciados en el género ensayo desarrollado por Borges, se muestra originalidad por la fusión de elementos como el ficcional y no ficcional, la articulación de la creación con la crítica, aspectos que confieren un enfoque renovador al escrito, registrándose en Ficciones e Inquisiciones, asimismo, plasmó una serie de dictámenes respecto a la relación de la literatura periférica con la central, además de conseguir establecer una nueva estructura jerárquica en diversos géneros literarios (Weinberg, 2016).

Ensayo: Las Innovaciones Literarias de Jorge Luis Borges, José Antonio Samamé Las apreciaciones concedidas por Borges respecto a literatura universal como a la historia mundial, se exponen en diferentes obras de género narrativo, destacando su antología de cuentos Historia universal de la infamia, El pudor de la historia, entre otros, cuya temática manifiesta su postura escéptica antes determinadas confirmaciones dadas por otros literatos, pues su crítica se enfoca en asegurar la discrecionalidad acerca de periodos de suscitación de determinados acontecimientos históricos en el campo de las letras. Por otro lado, manifiesta su oposición a focalizarse en temas únicamente nacionales en la producción literaria, pues en la conferencia titulada El escritor argentino y la tradición resaltó las capacidades de los individuos sudamericanos para emplear matices europeas o universales en el desarrollo de sus escritos (Balderston, 2017). Por ende, Borges constituye una excelsa figura en el mundo literario con peculiar estilo literario, así como, la adopción de una postura contrapuesta a lo precisado en la literatura mundial, pues su pensamiento escéptico en este ámbito converge en el desarrollo un análisis minucioso de sus obras para comprender su filosofía, además de su apreciación respecto a diferentes ciencias, lo cual, manifiesta su disfrute por la lectura de obras complejas caracterizadas por infundir desconfianza, recreación de universos imaginarios, picardía, entre otros. Finalmente, el estilo borgeano se denota por una eleva sofisticación que articula temáticas de ficción con matices no ficcionales e inéditas que otorgaron genialidad a sus obras, asimismo, transmite en el lector sensaciones de suspenso ante hechos concebidos como incrédulos que conlleva a analizar su postura escéptica manifestada en demasía en sus escritos de complejas operaciones literarias, implantando sus propios estándares, reglas, formas de leer, entre otros aspectos que convergieron en novedosos modos de escribir, los cuales, confirman su disconformidad con el ámbito literario convencional.

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Cine: Clímax: existencialismo, baile y Rock&Roll

n abril de 1651, omas Hobbes afirmaba en Leviatán que todos los humanos son por naturaleza iguales en facultades físicas y psicológicas. Desde esta igualdad y otras causas en la naturaleza humana, todo el mundo está, naturalmente dispuesto a pelear entre sí, de modo que "Con todo ello es manifiesto que durante el tiempo en que los hombres viven sin un poder común que los atemorice a todos, se hallan en la condición o estado que se denomina guerra; una guerra tal que es la de todos contra todos". En otras palabras, lo que afirmaba este señor de cabellos blancos y raros era que si no fuese por el estado o una autoridad, o las leyes, o el p o der nor malizador (seg ún Foucault), o tu maestro regañón o tus padres, el hombre se comería al hombre, como hiena a las hienas, siendo así un hombre natural, salvaje; perverso. Para 2018, 367 años después de la publicación de Leviatán, Gaspar Noe nos presenta su largometraje más musical: Clímax. En ella, el director argentino-francés, nos muestra una empresa de jóvenes bailarines a punto de partir a Estados Unidos a una competencia internacional, no sin antes recurrir a la vieja tradición griega: la fiesta.

La Película inicia con una mujer mancillando de rojo la fría nieve de Francia, después, unos de los pocos cortes de la cinta y entramos a una de las pocas escenas estáticas: un televisor rodeado de libros y películas que, claramente, son las inﬂuencias del director y de la cinta como tal. En la TV se nos muestran entrevistas a modo de presentación de los personajes y conocemos la parte más social de cada uno; una especie de materialización del Super Yo de cada personaje, diría Freud. Todos los personajes, menos a una Selva (Sofía Boutella) que conocemos después del siguiente corte y estaremos en gran parte de la película, literalmente, tras ella. En esta escena que inicia con el bello rostro de Boutella se nutre en gran parte, de una de las coreografías de baile más brillantemente grabadas, con pasos impresionantes y rítmicamente precisos y, además, el empleo del Plano secuencia extendido a grandes tomas no solo en tiempo, sino en calidad cinemática.

Pero ¿é tienen en común adolescentes bailando con el ﬁlósofo Hobbes y su Leviatán? Pues cómo en Posterior al baile, el director nos casi todo el arte e intertextualidad, lo importante no es el por qué, si no el cautiva la atención con la ya mencionada ﬁesta. Todos empiezan a cómo.

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Cine: Clímax: existencialismo, baile y Rock&Roll

bailar, fumar, conversar, socializar, a presentar de una forma un poco más cotidiana (un poco más del Yo Freudniano), y comienzan, también, a beber. La trama se va enredando y apretando tanto que uno pudiera pensar que no nos lleva a ningún sitio distinto, a ningún lugar donde resituarse después de ella; a ningún punto de conversación para con la pareja o los amigos. Inclusive, después de esta parte que no lleva a nada, salvo a conocer los personajes caen los créditos, mientras las coreografías de baile, está vez en más libertad, y la música hipnotizante sigue y sigue.

“La sustancia en el ponche actua en ellos como un

bloqueador racionalidad” Página 52

de la

“El Hombre es el Lobo del Hombre” Después del acta de defunción de los créditos para la primera parte, se da inicio a la segunda y más cutre parte de la película. Volvemos a la historia notando que nuestros pródigos del baile se encuentran extraños, todo gira y nos envuelve en la confusión; alguien puso algo en el ponche. Algunos tratan de quitarse el efecto de la droga, otros, que poco a poco serán más, simplemente se dejan llevar y todo esto sin dejar de bailar. Los planos secuencia y los giros de cámara son cada vez más frecuentes y erráticos. En tanto a los personajes, la sustancia en el ponche actua en ellos como un bloqueador de la racionalidad, como un impulsador del instinto sobre todas las cosas y brilla el instinto de tribu y todos se olvidan del Leviatán, el propio y el colectivo. Todos actúan por instinto, con dejadez y con agresividad, con el alma de un animal salvaje.

Cine: Clímax: existencialismo, baile y Rock&Roll

En este punto, Gaspar Noe nos propone, casi al ﬁnal de la película, lo errático de una selva, la distopía en carmesí llena d e a n i m a l e s a n t ro p o m o r f o s, q u e hacía 40 minutos, para el espectador, eran chicos comunes, como yo o usted, lector, cualquier otro. Gaspar Noe ha sido considerado el director que más gente ha sacado de sus cintas y con Clímax comprueba. Clímax no es una película para entenderla (me tomó 4 o 5 reproducciones en Netﬂix, para poder llegar a dos o tres conclusiones seguras y poder hacer esta entrada) si no que esta es una película para disfrutarla con los sentidos, dejarse llevar y emocionar. Clímax es un andar trágico entre la música que contribuye al aturdimiento, el baile, una excelente fotografía, los giros, el drama y, sobre todo ello, una enorme bandera de la Francia Revolucionaria. e ironía ¿No?

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Aeros: Todo cambio inicia con una fractura Dante Vรกzquez

Obra: ร ngel por Ing. Cuevas

Reseña: Aeros: Todo cambio empieza por una fractura, por Dante Vázquez

uando tenía veinticuatro años, quería enloquecer y morir. Pensaba que eso era cool y extraordinario, tenía la idea de que las personas sobresalientes debían trascender los límites de lo conocido olvidándolo todo para ser recordados como alguien grandioso. Con el paso del tiempo, tuve que enfrentar la despedida de Aldo, mi hermano menor. Las personas cercanas a mí, pensaron que perdería la razón. Por fortuna no fue así. Encarar la partida de un ser querido no siempre es fácil, y entras en una espiral descendente donde la ausencia se vuelve una presencia constante. Surgen preguntas, dudas, culpas, arrepentimientos; inicia el ciclo del duelo: negación, ira, negociación, depresión y aceptación. Y aquí es donde empieza el viaje que trajo a mi memoria Cecilia Oliveros[1], en Aeros, con las siguientes palabras: “Una transformación profunda es paulatina. Inicia con una fractura, quizás minúscula, en nuestros armazones psicológicos. Así se implantan las ideas, y su presencia actual traba o dobla los engranajes del pensamiento. La idea semilla puede germinar o no, si se alimenta. Si acaso lo hace, rompe con las estructuras que la apresan, expande ramas nuevas y las raíces modiﬁcan la mente, con cada hoja, con cada brote, enviándonos a nuevas posibles ideas.” Una historia entrañable del género fantástico a la que le vienen bien las palabras de Tzvetan Todorov: Lo fantástico es la

vacilación experimentada por un ser que no conoce más que las leyes naturales, frente a un acontecimiento aparentemente sobrenatural. Y la que para mayor deleite puede leerse acompañada de Las Cuatro Estaciones, de Antonio Vivaldi; ya que tiene un inicio primaveral e inquietante: “¿No te gustaría saber si existe algo más allá? ¿Más allá de la vista? ¿Algo intangible, algo más allá, más allá de la sobrevivencia, del éxito, de la percepción de la realidad? ¿Algo más allá de la demencia?” Llegando a un veraniego conﬂicto: “¿é valor tienen, estos envoltorios cárnicos, burdos, llenos de ﬂaquezas, en comparación con la sinfonía electromagnética del destino?” Dando paso a un otoño revelador e intenso: “Hace unos días que no salgo de casa. ¿Cuál es el punto? Afuera todo es horrible. Y aburrido. Igual, no quiero que me vean.” Iniciando así un invierno inesperado: “La existencia se volverá una página vacía en la cual podrás dibujar la nueva forma de tu ser”.

“Una transformación profunda es paulatina.Inicia con una fractura,quizás minúscula, en nuestros armazones psicológicos.” Página 55

Reseña: Aeros: Todo cambio empieza por una fractura, por Dante Vázquez Sin duda Aeros es un cuento que no te puedes perder. En él, Cecilia Oliveros, (también autora de Nox, antología de relatos) narra el ascenso de Aarón, prometido de Nadia, a una realidad distinta, después del suicido de su hermano Isaac.

Sin duda Aeros es un cuento que no te puedes perder. En él, Cecilia Oliveros, (también autora de Nox, antología de relatos) narra el ascenso de Aarón, prometido de Nadia, a una realidad distinta, después del suicido de su hermano Isaac. Si quieres conocer a un Aeros deja un vaso con leche y galletas de coco en tu ventana o cerca de ti antes de dormir. “Están hechos de magia”. Temas como la cordura y la locura, el tiempo, la realidad, la vida como un círculo, la muerte, son puestos en tela de juicio de forma auténtica por Cecilia Oliveros. Y te hará vivir cada día desde un plano existencial distinto del que te encuentras. izás mi hermano está volando junto a los Aeros. [1] Cecilia Oliveros (1981) Escritora y licenciada en medicina, es autora de Nox, antología de relatos, 2015; y de Aeros, 2019. Sus escritos se encuentran en los terrenos de lo fantástico, lo escabroso, el terror, la ciencia ficción, y últimamente desarrolló un gusto por lo ciberpunk. Su primera novela “Los Aniquiladores de Planetas: Origen” está siendo publicada como un serial en su blog, www.otakusamasensei.wordpress.com, en donde además saca algunos artículos de cosecha personal sobre autores, cómics y manga. Sus influencias literarias son J.R.R Tolkien, H.P. Lovecraft, Alan Moore, Neil Gaiman, Warren Ellis, entre muchos otros, como Poe y Borges. Nació y radica en la provincia veracruzana.

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