N° 4 Año 1 Ene-Feb 2020
por Aldo Barucq Por
Juan Rey
Rosalba López López Antonio Gamaliel Pérez Queta NavaGómez Angel Acecam Irene Delgado Erik Wanza Sandoval Gianmarco Farfán Cerdán Óscar Páez Joél Gustavo Rodríguez Toral Mariana Estela Lebrija Clavel Juan Rey Héctor Daniel Olivera Campos Víctor Parra Avellaneda Ronnin Camacho Barrón
Revista Poetómanos Revista bimensual de Difusión Literaria
Dirección: Sergio H. García Sergiohgarcia95@gmail,com Consejo Editorial Peregrina Tirado Kevin Herrera García Salvador Montediablo Sergio H. García Correción Peregrina Tirado Diseño Sergo H. García Imagenes Portada: Efraín Vergara. Peyote (2020) @efrain_vergara_mejia Todas las imagenes del contenido son descargadas de Unsplash o el credito sen encuentra en ellas Esta revista se diseña a través de la siguiente dirección: revistapoetomanos.com @revista Poetomanos /Poetómanos
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Contenido Poesía: Los Niños de la Lluvia, Rosalba López López................................................................................................... 4 Trayectos, Antonio Gamaliel Pérez ..................................................................................................................... 6 Maleable Arcilla, Queta NavaGómez...................................................................................................................8 Dos Poemas de Irene Delgado................................................................................................................................10 Cruel, Ángel Acecam ..............................................................................................................................................12 Pequeños Poemas para una Muerte, Erik Wanza...............................................................................................14 Inesperado Revivir, Gianmarco Farfán Cerdán...................................................................................................16 Cronología de un Mal Sueño de Verano, Óscar Páez..........................................................................................18 Especial: Los Escritores del Bajío, Aldo Barucq..................................................................................................................20 En Portada: Efraín Vergara Mejía.......................................................................................................................34 Reseña Literaria: La poética de denuncia de genero de Hortensia Carrasco santos se llama “muererío”, Joel Gustavo Rodríguez Toral ..........................................................................................36 Las hazañas de Herman Melville y la culminación magnánima de su obra través de Pierre, Mariana Estela Lebrija Clavel.........................................................40 Música: Morir o Matar: la violencia y la locura de Nacho Vegas, Sergio H. García...................................................44 Auf Der Maur: álbum homonimo de Melissa, Juan Rey...................................................................................48 Cuento Consagración, Héctor Daniel Olivera Campos.....................................................................................................52 Detención Arbitraria, Víctor Parra Avellaneda...................................................................................................55 Los Últimos,Ronnie Camacho Barrón .................................................................................................................58
por Rosalba Lรณpez Lรณpez
Poesía: Los Niños de la Lluvia, Rosalba López López
Nos enseñamos a comer flores y saciar nuestros antojos en la miel de sus corolas, a reconocer el aire que trae consigo el diluvio y batirnos con la lluvia volviendo del llano esquivando pinos de picudas crestas. Anduvimos con el cansancio mordiéndonos los pies, con el peso a cuestas de la ropa mojada y el agua escurriendo lento por los tobillos. Tiernas pieles morenas tostadas por el sol refugian aromas traídos del campo y delatan el juego diurno del pequeño pastor: hierba, trementina, charcos, estiércol y sal. El paraguas olvidado espera paciente en casa mientras el corral aguarda por las ovejas, en el fogón hierve un atole de masa y los niños huyen de la tormenta. Se viste la tarde de oscuridad nos vemos apenas entre relámpagos y a falta de velas que iluminen el llanto dice mi abuela que mejor durmamos. Lavado el cielo y despierto el sol corrimos descalzos por el patio, con la tierra alimentando nuestras plantas, aunque al cedro de nuestra casa lo partió por la mitad un rayo.
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Poesía: Trayectos, Antonio Gamaliel Pérez
I En el trayecto que separa mi hogar del lugar donde debo estar hay dos tramos divididos que definen el momento en que digo adiós El primero, la luz: calles, bulevares donde hay olor a masa frita y ebriedad Ahí miro postes de luz en busca de formas dignas de ganar un premio, ángulos perfectos que reflejan la crudeza del mundo supuesto como mío Voy haciendo favores a extraños y también me hago favores a mí mismo Observo a las cucarachas siendo aplastadas por la quietud de mis pasos mi mirada perdida en el camino isiera encontrar alguna moneda en la escarpa Y por segundo llevo oscuridad: cuando los rostros desaparecen, la noche borra cada gesto con su frialdad La fatiga de subir por cerros a oscuras con el claxon de autos que azotan mi espalda miden mis pasos Ahí es donde mis labios silban a pordioseros prometiendo calidez y ningún pordiosero quiere sentir tanta lástima como yo estoy dispuesto a sentir camino a casa
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Poesía: Maleable Arcilla, Queta NavaGómez
iero palpar tu imagen, levemente con la sonoridad de mi palabra. Soy la creadora que perfila y labra con la maleable arcilla de la mente. Es tu olvido vivencia tan candente que su destello el mundo descalabra. Siempre hay resquicio que los diques abra a remembranza inmóvil y silente. Tu aroma se quedó a latir conmigo albergué tu prestancia, que comprendo sólo transcribo yo, fantasma amigo. Ideal de Pigmalión el que pretendo cuando de realidades me desligo únicamente por seguir viviendo.
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HAY UNA MUJER SENTADA al final del pasillo donde no hay un luz ni oscuridad, sino una pesada sombra que está detrás de ella. Voltea hacia la ventana que tiene enfrente y mira al patio de su hogar. Sus cabellos le cubren los hombros, lleva un camisón rosa pálido que deja ver su cuerpo en penumbras. Ahí estamos ambas. Ella gira su cabeza, quiero ver su rostro. Asomo mi cara a la suya, lento. Entonces me reconozco con el camisón y los cabellos en los hombros. é triste me veo sentada en ese pasillo.
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Poesía: Dos Poemas de Irene Delgado
NACÍ EN UNA MADRUGADA TRISTE, después de una fuerte tormenta. Así de simples son los presagios: se presentan como algo que debe ser. Estuvimos solas, mi madre y yo, en la sala de parto debajo de una clínica austera. Ella dice que por el suelo corría toda la soledad mezclada con el agua que se colaba por las paredes. En medio de la noche un rayo alcanzó la habitación en la que mi madre hacía un esfuerzo para no irse antes que yo. Dicen que cuando estamos en el parto no hay nada que nos separe de la muerte. Ahora lo entiendo, mamá: siempre estoy pariendo.
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Poesía: Cruel, Ángel Acecam
Hoy amaneció el insomnio fiel creyente de la ingenuidad. Bastó con un beso y una sopa caliente para entregarme su alma. fatídico final al bregar al astado deseo de enamorarte. Robe tu labor y desquite mis enojos en placidos soñadores que nada tenían que ver. Convertí tu nombre en desprecio y soledad asesina, en llanto; muerte repentina. Madrugadas de venganza entre mis carcajadas y sus miradas perdidas. Disfrute cada estación donde con frio o calor daba igual mis golpes de ansiedad y dolor. Pero ¿En qué me he convertido? repudié tanto mi esencia presente, noche a noche, a estrellas fugases pedía deseos, desterrarte con mis ojeras teñidas de azul. ahora que soy tú, no debí torturar no debí existir. Te regreso tu alma para dejarte entregar las cadenas que arrastras. Ten, ahí está, dejame dormir.
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l a v o d n a S a por Erik Wanz
Poesía: Pequeños Poemas para una Muerte, Erik Wanza Sandoval
I Dos pasos, quizás, el abismo tiene definidas formas. II Vaya que habrá nostalgia. El descenso, siempre, detiene el viento. III ¿é habrá para el descanso? ¿Viejas tormentas? ¿Olvido consecuente? IV La última nota al final del día. Un compás sin resignación. V No queda sino la espera para quien se ha desprendido del tiempo. VI No es mi voz exánime la que habrá de sostener el recuerdo pasajero. VII Este de aquí, tendido, sin tanto brillo, soy yo anticipando mi muerte.
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Por
Gianmarco Farfรกn Cerdรกn
Poesía: Inesperado Revivir, Gianmarco Farfán Cerdán
Viniste como un cometa en plena noche. Cuando ya no esperaba nada arribaste a mi orilla con los girasoles en tus ojos y con las suaves nubes de tus manos. En mi orilla solamente había un barco viejo desvencijado sobreviviente de una guerra en la que nadie venció. Pero viniste tú y con el sublime arte de tus besos y el bálsamo de tus caricias lo reconstruiste pieza por pieza. Ahora gracias a ti podremos navegar juntos por siempre rodeados de delfines y gaviotas sobre el mar más sosegado y la música más bella del universo.
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Poesía: Cronología de un Mal Sueño de Verano, Óscar Páez
A Janis Joplin “Hiciste bien en morir,
Día 1 por eso te hablo, Mis viejos son dos notas que no entienden el sabor del por eso me confío a una niña monstruo.” Hachís. Ahora soy una niña gritando en el Monterrey Alejandra Pizarnik pop.
Día 4 Lile Girl Blue No Cry, cuenta tus deditos. Las lunas muertas me adsorben la sonrisa.
Día 2 Estoy atrapada en los blues. La ciudad de México quiere mis huesos, los hombres de botas y sombreros no entienden el rock.
Día 30 Duermo en las vértebras de una guitarra que /se desafina con mi llanto. En mis cabellos ya baila la muerte.
Día 65 Vuelvo a una casa grande, llena de rostros desconocidos, los inciensos del mundo no me elevan, me aterran.
Día 7 Aún no despierto del sueño del chamán, he caído en abismos de whisky y folk.
Día 31 No hay ningún Dios cerca, el verano se va en los arcoíris de loto. Please, please, no me dejes sueño.
Día 70 Me hundo en la ola humana del zócalo, una alberca enorme me extiende sus brazos, me dice vuelve, vuelve, voy a ella.
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Especial: Escritores del Bajío
Los Escritores del Bajío
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Por Aldo Barucq
os Escritores del Bajío es un colectivo literario que explora las diferentes formas de desautomatizar el lenguaje por medio de la poesía y narrativa. Este grupo de escritores emergentes se reúne por primera vez en el Festival Cultural Interfaz 2018 que tuvo lugar en Guanajuato siendo auspiciado por el ISSSTE, reuniendo a los jóvenes que recién descubrían en la literatura y en la pluma una vocación, más que un pasatiempo. Las letras no quedaron ahí, no quedaron amuralladas en una hacienda colonial de la capital Cervantina; reunidos por un lenguaje común han seguido recorriendo ciudades del Bajío mostrando un poco de lo que hacen como individuos de tinta suelta y como colectivo. El colectivo está conformado por escritores jóvenes con un camino ya recorrido en el mundo de las letras, entre otras vertientes culturales y artísticas. El grupo se conforma por escritores de Nayarit, Aguascalientes, Guadalajara, Colima y Michoacán, ciudades que comparten una tradición literaria para este país y que de alguna u otra manera es evidente en la obra de sus integrantes, ya sea en forma de crítica, influencia o negación. Esto es la voz joven del Bajío. Voces que bien pudieran ser susurros tardíos de Comala, fantasmas, sombras de Cuévano, seres ausentes en el Bestario de Arreola: Beth Guzmán, Guadalajara, Poesía. 23 años. Aldo Barucq, Aguascalientes, Narrativa. 25 años. Miguel Ángel Santos López, Michoacán, Narrativa. 24 años. Sergio H. García, Nayarit,
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Poesía. 24 años. Luis Oseguera, Michoacán, Poesía. 24 años. Janneth Castellanos, Guadalajara, Poesía. 24 años. Sergio Martínez, Aguascalientes, Narrativa. 28 años. Akatl Guijarro, Colima, Poesía. 23 años. Cristina Bello, Michoacán, Poesía. 24 años. Mónica González Lambert, Nayarit, Narrativa. 25 años. Isis Oslaya, Michoacán, Poesía. 24 años. Gabriela Cano, Guanajuato, Poesía. 30 años. Victoria Equihua, Michoacan, Poesía. 23 años. Valentín Soto, Guanajuato, Poesía, 25 años. Mireya Torres, Colima, Narrativa. 24 años. Lupita Vazquez, Colima, Poesía, 25 años. Jóvenes que entrelazan sus inquietudes literarias con sus lecturas favoritas, con las bondades de Netflix, la música de streaming, los movimientos sociales y políticos, las redes sociales y el tiempo fragmentario que les ha tocado vivir. Los Escritores del Bajío se han presentado en Guadalajara durante la tertulia literaria organizado por Ediciones el Viaje. En Michoacán, durante la Poesía en Vivo del café Giraluna Y más recientemente en el Congreso Nacional de Creadores Literarios en Aguascalientes. Para este año 2020 se planea que el colectivo siga rodando con todos los semáforos en verde por diferentes ciudades de la república, que en bola el peaje se abarata. Actualmente se pueden encontrar los textos de sus integrantes en diversas revistas impresas y digitales, antologías o libros de circulación nacional. Poetómanos les presenta una pincelada del trabajo de Los Escritores del Bajío. Una voz unificada y sucesora, para bien o para peor, de los grandes maestros del Bajío. La desautomatización de lo cotidiano y la literatura experimental son algunos sellos distintivos de este colectivo, además, claro, la contraposición de estilos, problemas, temáticas y egos.
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o d r a u d E Valentín Si a mi lugar querido en busca fueras, inútil brújula, compás y mapas, ni en la razón ni en la locura en capas encontrarás la ruta que debieras. Si piensas mi lugar entre los vivos, no está en la enfermedad que me lastima, tampoco en el cerebro al que se ultima, situado en otro campo de furtivos. No fue la casa adonde mi familia me crió distinto y desde entonces hombre, ni con amigos que no entienden nada. Se halla entre lo que pienso y la vigilia, entre la triste realidad y el nombre, mi lugar donde mi cuerpo y la andada.
Licenciado en Letras Españolas por la Universidad de Guanajuato. Su tesis para obtener el grado versa sobre la imagen de autor de Jorge Luis Borges para el periodo de 1974 a 1981 y, particular-mente, el ethos discursivo en La cifra (1981). Poemas y prosas de su autoría han aparecido en publicaciones tales como: Golfa, Página Salmón, Ruleta Rusa, Los demonios y los días, De-lirio, Pez ciego,entre otras. Ha participado como ponente y creador literario en eventos académicos y festivales de literatura en diversos estados del país, tales como el Encuentro Nacional de Escritores Jóvenes Jesús Gardea (ENEJ 2017), el Congreso Nacional de Estudiantes de Lengua y Literatura (CONELL 2018) y el Congreso Nacional de Creadores Literarios (CONACREL 2018 y 2019). Becario del Festival Interfaz 2018 en Guanajuato. Coordinador del laboratorio de creación de revista Golfa y del círculo de lectura Nuevos Hermeneutas de 2018 a 2019 en Guanajuato. Periódicamente, publica en su blog de poesía: paragrabarseenunarbol.wordpress.com. Su primer libro de poesía: Día cero, se publica este año por Crisálida Ediciones.
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q c u r a B o Ald Padre hoy tengo la edad de Bowie cuando dio a luz a Hunky Dory, y aunque no tengo todavía a mi Hunky Dory, sigo llorando en el cine en las películas en la que los padres se callan y no dicen nada y así un día de pronto se van callados como un reloj sin pila: por siempre un tiempo congelado. Me parezco a Bowie en el cuerpo flaco y en los colores del alma. Bowie era muy joven cuando parió una mujer sobre su cuerpo. Yo aún no tengo el fértil amor a mi reflejo como para sembrarme siquiera un tulipán en el pecho. Fuiste tú quien me habló de Bowie. Recuerda. Sigo siendo un joven que va al teatro siempre solo, casi siempre con el abrigo negro que no te llevaste. Me conmueve el mundo que se nos acaba como si nos bebiéramos un vaso de leche, como niños hambrientos. Tan rápido se vacía el mundo de historias. Pronto no tendrá ningún sentido ir al teatro. Pronto todos los dramas del mundo irán a dar al mar radioactivo del apocalipsis. Pronto contaremos nuevas historias donde la tierra nos trague hasta llegar a su centro para que viéramos lo que en verdad es un corazón roto y quemado, y no las tonterías que vemos en el cine. Padre se nos acaban los dramas las historias sobre hombres que paren jardines. Hombres que se parecen a Bowie. Lic. en Filosofía por la Universidad Autónoma de Aguascalientes. Ganador del Premio Interuniversitario de Creación Literaria “Felipe San José González” en categoría Cuento (2017) por la Universidad las Américas. Dos veces acreedor al segundo lugar en Concurso de Talentos Universitarios de la Universidad Autónoma de Aguascalientes en categoría Cuento (2014) y (2017). Ganador del Concurso Estatal de Ensayo José Guadalupe Posada por INJUVA (2013). Becario del Festival Cultural Interfaz 2018 por parte del ISSSTE en categoría “Literatura” en Guanajuato, Guanajuato. Participe en el Primer y Segundo Encuentro de Narradores de Aguascalientes organizados por el Instituto Municipal Aguascalentense para la Cultura. Ha publicado cuento, ensayo y poesía en diversas revistas y antologías.
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o
Gabriela Can
Tengo miedo de muchas cosas. En especial a las más propias. A salir de mi habitación con la pijama larga y parecer un fantasma. A verme sin querer en el espejo durante la noche. Aquello que me asusta es mi propio cuerpo cuando parece otro. Cuando no me recuerda al que suelo sentir o ver sobre mis pies. El origen de todo esto quizá radica en saber que no podemos vernos a los ojos más que a través de una superficie de cristal. Cuando era niña me acuerdo que me gustaba caminar sobre mis pasos. Regresar a esas huellas que, al mismo tiempo, nunca podía igualar me producía mucho vértigo porque pensaba que era un doble que existía en y fuera de mi o como si siempre nos estuviésemos persiguiendo a todas horas, todos los días y los años de nuestro tiempo en este mundo. También por eso pienso que las palabras no se equivocan. La palabra autopsia, ese procedimiento a través del cual descubrimos la causa de una muerte, viene del griego /autós/ ‘uno mismo’ y /opsis/ ‘observar’. Es decir, verse a uno mismo. Docente, escritora, artista visual. Estudió la Licenciatura en Letras Españolas en la UG y la Maestría en Enseñanza de Estudios Literarios en la UAQ. Es mediadora de lectura acreditada por CONACULTA. Ha publicado en revistas como Onomatopeya, Conspiración del Silencio, Hojas al aire, Poetómanos. Aparece en las compilaciones El furor de la estrella Negra de la Tinta del silencio y El mundo no se acaba de Ediciones el Humo, donde también, publicó He visto caer a mi cabello (2018) que recientemente forma parte de la biblioteca digital de Poesía Mexa. Ha colaborado de forma activa en las revistas Saltapatrás y Golfa y actualmente prepara un librocollage que se puede seguir en @ingravitus / @ingravitus1 en Instagram y Twier respectivamente.
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a u h i u q E a i r Victo Victoria Me llamo victoria Y hoy estoy asustada Este es el nombre de mi abuela Ella me lo puso para que su tristeza siga con vida Victoria Es mi abuela Hoy ella tiene canas Hoy ella es un silencio rompiendo la noche Ella es la leche que alimenta los campos Hoy ella tiene leucemia Se abre su piel Le duele la espalda Le cuesta comer Me abraza y me cuenta que yo soy su mundo Me abraza y en su pecho suena el mar Me abraza y sale el sol Me abraza Hoy mi abuela está muriendo Lo veo en mis ojos, lo siento en mi voz, Hoy mi abuela va a morir Y yo me quedaré sola Me lanzarán al espacio, viviré en la luna, O en Saturno, o en marte, Porque aquí no hay nada para mí. Hoy mi abuela cumple 15 años de Muerta iero contarle que soy una adulta e hoy hace frio y tráfico, e desayuné tacos de papa y un café, iero contarle lo más insignificante y aburrido de mi día, Y escucharla responder, e me diga que soy tonta, que se ría y me dé un consejo, e acompañe esta sensación de huérfana que tengo.
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Abuela, abuelita, Victoria, Te cuento que hoy gobierna la izquierda Pero Yurian murió, No me he casado porque nadie me ha robado, Como se dice en el pueblo, Me salí de casa y viví unos días en un Chedrahui, Me salí de la escuela porque ya no me alcanza el dinero, Te voy a hablar de algo llamado narco Y de lo que ahora siembran en Capula, Te leeré el periódico, las cifras, el apocalipsis donde vivo. Y voy a llorar, sobre tus ojos, sobre tu pecho, sobre tu espalda, Voy a llorar porque odio todo lo que hizo Felipe Calderón, Porque odio los bancos, y la renta, y los precios de la luz, Voy a llorar porque me dejaste, Voy a llorar porque me abandonaste, Voy a llorar porque te moriste, Y cada día llegaría a casa contigo Y cada día te diría: VICTORIA POR FAVOR NO MUERAS VICTORIA POR FAVOR NO MUERAS VICTORIA POR FAVOR NO MUERAS Y sabría que estos gritos son para mí, e soy yo la que le teme al cáncer, e soy yo quien necesita palabras de aliento, e soy yo quien piensa constantemente en dejar este mundo. Victoria Me llamo Victoria Y hoy estoy resistiendo.
Julio conoció a Carla en un concierto de piano en el momento más pleno de sus carreras Cantaban Su agilidad desbarataba el piano los reflectores hicieron del humo muchas figuras las decisiones hicieron de ellos un dúo después de algún tiempo la intensidad de sus canciones no era la misma Ahora lo que Carla y Julio tienen en común es que no hablan sobre el tema siempre que afinan sus voces no se oyen evitan hacer ruido hacen piezas musicales que no tienen voz pero las palabras se afinan dentro del ritmo Carla sabía: lo que cantaban no era dúo Carla sabía que Julio tiene 2 hijos y se ha divorciado 3 veces Julio está casado con Victoria pero Julio piensa en Estefanía al mismo tiempo que busca a Martha y Julio ya no quiere saber nada de Carla aunque todavía cante con ella y compongan canciones que hacen un éxito en la ciudad Lejos, Julio en su habitación amarilla deja que la luz entre por el techo la luz de Julio tiene un techo y cuatro esquinas donde los cristales explotan de cansancio donde sus dos hijos se dejan caer para atraparlos piensa que si Victoria cae un día estará ahí que si Estefanía tropieza él estará ahí que si Martha lo hace tropezar él cantará tan fuerte para que ella regrese Si Carla se despega de la esquina huirá de la luz para no ver el impacto.
Isis Olaya
Isis Olaya (Zitácuaro, Michoacán, 1995) Estudió la licenciatura en Lengua y literaturas hispánicas. Ha publicado en medios impresos y digitales. Aparece en la antología del tercer Encuentro Nacional de Poetas Jóvenes 2017 y en la antología del Encuentro Internacional de Poetas Zamora 2019. Fue becaria INTERFAZ- Guanajuato 2018. Fue becaria del PECDAM emisión 2018-2019 con el proyecto Hábitats Tiene un blog: www.misdesnudosfrentealascosas.blogspot.mx
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rcía Sergio H Ga «Yo nací un día que Dios estuvo enfermo, grave». César Vallejo
Dios creó las moscas un día que tenía flojera, les puso dos alas, seis patas, un montón de ojos apuñados como las uvas, y después, les dio el mal hábito de buscar la suciedad. Así podrían enfermar al hombre cuando él no estuviera de ánimos. Dios creó las moscas un día que tenía flojera y nos las mandó, para que nos chingaran y enfermaran. Las creó un día de flojera, así como a las mariposas cuando se sentía enamorado, y a Vallejo y a mí, un día que estaba enfermo. Fue parte del colectivo pro-arte local y artesanal “Tianguis cultural: Ruiz” y el proyecto musical “Pro-Rock”. Actualmente Dirige el proyecto literario “Viernes Cafeteros”, de la revista de difusión cultural “Poetómanos” y es miebro de la banda de rock “Huéspedes”. Ha sido becario del programa Los Signos en rotación, Festival Interfaz ISSSTE-Cultura Guanajuato 2018, y Segundo lugar en el concurso “Páramo de Sueños”. Miembro del Colectivo «Escritores del Bajío» y ha participado en múltiples talleres y lecturas en festivales culturales dentro y fuera del estado. Columnista en “Proyectiva” y ha sido publicado en distintas revistas literarias y en antologías.
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Mi casa está abarrotada de post-its con mensajes motivacionales. man standing near board DÁ-LO TO-DO Sesgados en sílabas.
Luis Oseguera
emojis crípticos de ballenas y gorilas en el interior de los libros. E-RES LO QUE QUIE-RES
Podría ser que yo sea sonámbulo o que los gnomos tengan un grotesco sentido del humor.
E-RES LO MÁ-XI-MO CAL-MA Y PA-CIEN-CÍA En cada cómoda que abro, en el candado de la puerta, incluso en la pasta de dientes. A-LE-GRÍ-A TO-DO EL DÍ-A No puedo dejar de pensar en quién los escribió. Un día soñé con sus manos: delgadas, ásperas y frías, de dedos finos, largos, de caligrafía hermosa.
Podrían ser las cabañuelas pronosticando esperanza como pueden, forzándola, poniéndola a huevo en nuestras narices. PAZ GE-NE-RA PAZ Podría ser dios, en su vocación de coach motivacional o podrían ser, simplemente, las cucarachas y su venganza. LA VI-DA ES GRAN-DIO-SA
Á-NI-MO CAM-PE-ÓN Surgieron también en el piso los mensajes.
Lo único que sé es que mis ojos son antenas defectuosas y que los post-its se pegan a tus zapatos mejor que las palabras.
UN PA-SO A LA VEZ EL É-XI-TO ES-TÁ EN TI Uno con el café, el periódico, las ojeras bien puestas, la pijama y el tiempo encima.
Licenciado en Lengua y Literaturas Hispánicas por la UMSNH. Fue becario INTERFAZ Guanajuato 2018. Ha sido publicado en algunos medios electrónicos, en el BUE-NA VI-BRA LLA-MA suplemento literario del periódico Cambio de BUE-NA VI-BRA Michoacán, en la revista “Animalario” de la Facultad de Letras UMSNH, aparece en la antología “Raíces de una voz” (editorial Namox, 2017) y en la antología del Encuentro Busqué entre los papelitos Nacional de Poetas Jóvenes, Morelia (Mano Armada ediciones, 2018). alguna señal, alguna pista de cordura. Ganador delpremio de poesía en el XX Congreso Estudiantil de Crítica e Encontré poco, Investigación Literarias de la UAM- Iztapalapa.
caritas felices debajo del comedor,
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s
anto S l e g n Á l e u g Mi
Tengo un encendedor en el bolsillo: Un recordatorio de mi amor por la combustión espontánea. Afortunado el que así muere. En ocasiones prendo el encendedor. Algún día esa llama acariciara mi dedo con ternura y comenzara un pequeño incendio, tan ardiente, que solo quede la pavesa. Solo un polvo que cubra nada.
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o l b a i d e t n o Salvador M Mientras mido la vida en suspiros, noto que el cielo cae como un apocalipsis periódico, entre tantos días en los que uno muere y nace, solo queda esperar un hecho insólito que nos dé una bofetada y nos permita así, abrir un poco los ojos. Mientras y mientras, mentiras y mentiras, de la gente, de uno, de la vida, de la muerte, que nos espera, allá, donde los muertos callan dormidos en el frío mientras la tierra los abraza, Y el infinito olvido los acurruca Como a recién nacidos, mientras los que se portan bien esperan ir a un cielo que requiere visa y los que se portan mal esperan un infierno donde se refugian los santos, mientras y mientras, mentiras y mentiras, mentiras de la vida, de los fantasmas que fuimos y de los reflejos que se flagelan cuando vemos al espejo, más mentiras de la gente, que nos dicen menos con la mirada que más cuando hablan tanto con la boca. e ilógico estar tanto tiempo anhelando lo que los dioses ya ignoraron. Mientras mido la vida en suspiros, la muerte me mide en cigarrillos y botellas de cerveza, en silencios prematuros, en pensamientos, en sueños diurnos del subconsciente, de sueños eróticos del inconsciente, en deseos quiméricos del consciente, siento el invisible soplo de la soledad, un hálito frió, acre, que ni el humo de cigarro ahuyenta, que ni la vigilia ahuyenta, que ni el último suspiro ahuyenta, nadie, nada, nunca Estuvo 4 años en un taller de creación literaria y 2 diplomados en el centro cultural de Salinas. Ha expuesto la Exposición de la antología Literatura en movimiento, así como el libro Altiplano Potosino en Matehuala, así como la presentación de los talleres al termino del ciclo. Posteriormente un par de presentaciones en el teatro de las artes de Salinas y últimamente algunas publicaciones en revistas independientes de internet. Tuvo la beca Interfaz Los Signos de la Rotación 2018.
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o l l e B a n i t s i r C Mi madre me regaló una maleta azul para cuando decidiera salir de viaje, guardé ahí los diarios, tus lucky rojos, LSD y los pasaportes falsos. Sin licencia conduje el cadillac amarillo hasta Nueva York / 50 kilómetros por hora Lush Life de Coltrane en el estéreo, saqué el arma de la guantera y como escondida en la nota de ese saxofón disparé. Escuché tu voz en mi cabeza no estamos de cacería pero yo siempre quise ser una poeta beat y decirte: come on honey, let´s burn it. Después de incendiarlo todo aparecerán los espíritus de una manifestación que soñé durante los años sesenta, sostenía una cartulina mientras decía: equal pay for equal job, equal pay for equal job. Entonces tomabas mi mano, pero desperté desperté en el bajío de nuestro país, decías esto no es Nueva York y estamos perdidos pienso ojalá el espíritu de Cowen nos guiara decías hagamos una línea que nos lleve de vuelta pienso ojalá pudiera escribir un poema sin temer el regreso a casa.
Un auto se detiene y me observa, de cerca me observa grito que mis piernas ya no son parte de mi cuerpo y me elevo por encima de los árboles incendiados un hombre baja del auto, pregunta: ¿por qué estás sola? respondo que no lo estoy y pienso en una canción vieja, alguna que haya memorizado pensando en mi funeral. Veo mi rostro en el espejo lateral derecho y me pregunto si mis párpados tienen la misma coloración que los de Elise Cowen antes de lanzarse por esa ventana. Me pregunto si tendré tiempo de arrepentirme y pensar que creo en Dios, que siempre creí en él, en el que existía bajo mis uñas y la bala del estéreo era en realidad una plegaria. Me pregunto si tendré tiempo de usar el arma, antes de que anochezca, o si elegiré los incisivos, el escape, conduciré el cadillac amarillo a otra parte una calle oscura donde me sienta más a salvo, no voy a despertar en casa y si lo hago, ellos dirán que no sé seguir órdenes o escribir luego del incendio.
emé todas las palabras que construían la carretera y estoy ahí de nuevo, sin auto que conducir la carretera es cada vez más larga como la cola de un roedor aunque yo sea los incisivos de su hocico y los ojos negros que huyen de casa o mejor dicho, las cuatro patas que buscan la oscuridad.
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Convocatoria Textos en español en formato Word -Poesía -Cuento -Ensayo -Reseña o crítica de libros, películas o música -Artículo de opinión
Máximo 3 hojas por colaboración
Enviar a: revistapoetomanos@gmail.com Fecha límite: 20/marzo/2020
NO TIENEN QUE SER INEDITOS
a r a g r e V n í a r f E
M
i nombre es Efraín Vergara Mejía, también conocido como EFDO, originario de Tepic, Nayarit. Soy un chico irreverente e indiferente; artista de lo cotidiano, domador de versos, un tanto básico, pintor, escritor y fotógrafo.
La percepción que tengo de mi mismo como artista, es un tanto variable: me gusta pensar que como artista soy elástico, capaz de crear emociones en las personas que aprecian mi obra, que logren identificarse y amo ese contacto con el espectador, así como el empoderamiento que causa un escenario o el estar delante de algún público. También me siento agradecido de lo que he logrado, la verdad es que el ser un niño sufrido y con ansias de liberar emociones me ha creado una carrera de la cual estoy orgulloso de las exposiciones que he tenido y las plataformas donde me he desenvuelto siempre buscando entregar lo mejor para el espectador. Mi estilo gráfico es algo fácil de describir y es un tanto peculiar: soy fanático del arte erótico, amante de la naturaleza y del surrealismo, elementos variables y distintos con los que me gusta jugar al hacer mis cuadros.
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Peyote (2020 )
Efraín Vergara Mejía
Mi acercamiento con el arte inició desde pequeño. Nací en el seno de una familia un tanto peculiar, rodeado de personas peculiares y distintos tipos de ellas. El suceso que le dió un cambio a mi vida fue cuando a una corta edad: la separación de mis padres. Esto mismo me hizo encaminarme al mundo del arte, buscando un lugar en donde refugiarme. Si bien este acontecimiento no me causó tanto dolor -por la corta edad con la que contaba-, si me impulsó a buscar un medio de canalizar mis emociones y la falta atención de mis padres. Así fue como los libros, la pintura y el arte en general, se volvieron acompañantes de mi día a día para encontrar algo que lograra darme paz.
El cuerpo femenino y la naturaleza me inspiran a pintar. Además de plasmar algo relacionado con sucesos y algunas personas que han dejado huella en mi vida; experiencias amorosas tanto buenas como malas al igual, como las mujeres con las que he compartido parte de mi vida, y han tenido cierto impacto en ella, así como exparejas. Una de mis principales musas es mi madre. Otro recurso que inspira mi obra son mis raíces: me considero orgulloso de haber nacido aquí y de la herencia cultural que tenemos, así también busco relacionar mi arte con elementos típicos al igual que el arte Wixarika.
Neon Bonita (2019)
Mi historia con la escritura inicia desde que era pequeño, buscando expresar todo aquello a quienes no podía expresar, ya sea porque no estuvieran ahí o fuera difícil verlos. Como escritor mi estilo es algo elástico y dinámico, me gusta interactuar con el público, causar emociones en ellos, usando como recurso situaciones de la vida diaria con las que todos podremos sentirnos identificados. Principalmente mis textos están basados en mi día a día, y experiencias las cuales endulzo para que sean entretenidas al leer, al igual que con la pintura me gusta recurrir al erotismo usándolo como recurso en mis escritos para lograr un mayor impacto en el espectador mientras lee o escucha algo de mi autoría.
Imperfecto Primavera (2019)
Yoselin (2019)
Como artista les aconsejo siempre seguir sus metas y realizar todo lo que gusten sin afectar a nadie, los seres humanos estamos hechos de experiencias y vivencias, de nosotros depende si estas son buenas o malas. Siempre confía en ti y no te dejes opacar, con empeño puedes lograr lo que sea cuentes o no con apoyo, mírame yo estoy aquí. Pin Up (2019)
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Joel Gustavo RodrĂguez Toral
Reseña Literaria: La poética de denuncia de genero de Hortensia Carrasco santos se llama “muererío”, Joel Gustavo Rodríguez Toral
E
l pasado 25 de septiembre del año pasado se dio el premio del Concurso de Poesía “María Elena Solórzano” 2019. Premio que otorga “Ediciones Tinta Nueva” que preside el poeta y editor Federico Corral Vallejo de manera activa y titánica en la escena de la poesía independiente nacional. Premio que, por cierto, fue declarado en empate entre las poetas Alma Karla Sandoval, con su poemario “Por defecto de Melena”, y Hortensia Carrasco Santos, con su poemario: “Muererío”. Este hecho solo habla del buen nivel de poesía de varias de las poetas quienes concursaron e indudablemente aportaron de manera importante.
alto nivel al hablar de fenómenos sociales que afectan de manera criminal a las mujeres del país Hortensia demostró
Para motivos de este texto he de abordar el poemario “Muererío” de Hortensia Carrasco Santos, sin demeritar el trabajo poético de Alma Karla Sandoval que abordó a varias personalidades femeninas de la historia de la cultura y la poesía. Por otro lado Hortensia Carrasco Santos demostró tanto un nivel de convencimiento por hablar de fenómenos sociales que afectan de manera criminal a las mujeres del país. Además de que aborda en sus poemas muchos casos de la nota roja. Pero en este poemario en particular tiene la agudeza y el oficio de escribir su poemas con
singular arte, logrando un alto nivel poético que se agradece. Ya con su anterior trabajo de nombre “El libro del mal amor” editado por la editorial “Verso destierro”, que preside la poeta y editora Adriana Tafoya, en noviembre de 2018, editorial que por cierto, la poeta Hortensia Carrasco es una gran colaboradora, y con este poemario ya mencionado nos había demostrado un gran logro de madurez y de convicción para criticar a la sociedad y su manera de ver al amor, desde lo cursi hasta lo fatal. Podría pensarse que es una extensión de “El libro del amor”, pero “Muererío” logra su propia razón con una voz crítica y con una excelente escritura, por ejemplo, en el tercer poema “Las Vírgenes de Metlatónoc” expone a la costumbre de la transacción de hijas como una fuente de trata de personas.
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Reseña Literaria: La poética de denuncia de genero de Hortensia Carrasco santos se llama “muererío”, Joel Gustavo Rodríguez Toral
He aquí el poema: “Soy una niña tu'un savi Mi edad es una década más cuatro años. Para mi padre soy cifra de salvación. Retrocedo para no ser de un hombre desconocido. La montaña es mi fortaleza. Yo aún debo ir tras el zanate la iguana, la tortuga, y el conejo. Mi boca está para jugar con el hueso del capulín y mis ojos para seguir el nacimiento de las flores. Pertenezco aquí y no quiero que me rijan las costumbres. Por eso huyo cuando el viento me enseña los dientes Y no corrige el camino de mi pueblo. Me aparto como la hoja fresca que cae del árbol para que no me alcance el terroso destino en Metlatónoc. ¡Dios de la tierra se mi aliado! ¡Vuelve locos a los hombres! Y ni la sangre de algunas aves ni el clamor del rezandero. les de justicia ni sosiego, ni paz ni regocijo.”
En éste poema demuestra con singular belleza en el lenguaje que sirve para llevarnos a esa niña adolescente quién vive el drama. En el poema: “Lacertus” nos habla de un mito de crueldad que al parecer es del Estado de Tlaxcala, en Tenancingo, un tipo quien secuestra muchachas para la explotación sexual, y amarra a las muchachas que se oponen, y son entregadas a un cocodrilo llamado: “Lacertus” para que las devore. Cito: El tapacamino y el pato triguero el teporingo y el camaleón no me escuchan ¿Será porque en Tenancingo hay un cocodrilo que come palomas, mujeres y niñas?
Estos son solo dos ejemplos de éste poemario llamado: “Muererío”, título tomado de un poema: de Juan Gelman. El poemario de: “Muererío” consta de 12 poemas llenos de dignidad en donde nadie quiere abordar el tema de los lugares del feminicidio, tanto los casos en Ciudad Juárez o el caso de: “Bianca” tomado del libro de crónica roja: “La fosa de
[1] Hortensia Carrasco Santos con 7 poemarios también ha publicado el libro: “Semblanza de un Poeta” en la Editorial EON 2017 que contiene entrevistas que acercan al finado poeta: “Saúl Ibargoyen”, su vida y su universo literario.
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Reseña Literaria: La poética de denuncia de genero de Hortensia Carrasco santos se llama “muererío”, Joel Gustavo Rodríguez Toral
agua”, de la periodista “Lydiee Carrión” que nos habla de una serie de crímenes de muchachas en los Héroes de Tecámac y que fueron hallados restos de mujeres en el río de los Remedios, el poema mencionado es “Murmullos de Chiconautla”. En el quehacer poético de Hortensia Carrasco Santos se dan ciertamente muchas vistas del terrible México en que vivimos, pero la poeta no deja a sus palabras en el pesimismo de la realidad, con su arte lo señala vivamente, y al contrario logra con gran abrojo e ingenio si hacer tanto el arte poético, como hablar de la realidad, y proponer en el imaginario la resuelta y valiente denuncia. Por ello: “Muererío” es una lectura obligada. El poemario ésta conformado por los siguientes poemas:
-Desmesura -Profundidad de campo -Las Vírgenes de Metlatónoc -Lacertus -El Robusto quejido de Chihuahua -Gentileza -Murmullos de Chiconautla -El otro nombre de las cosas -El sabor de los ausentes -Encima el hueso, la ceniza -Pobrecita muerte -Hueserío o Muererío (poema que parece así se va a quedar con el nombre del poemario). Son 12 poemas, de los cuales y a título personal sobresalen los siguientes poemas: “Las Vírgenes de Metlatónoc”, “Murmullos de Chiconautla”, “El otro nombre de las cosas” y “Pobrecita Muerte”. Y desde este humilde texto felicitamos a la poeta por su arte poético, esperando sus próximos poemarios.
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“He escrito un libro perverso y aun así me siento inmaculado como un cordero”. Herman Melville
por Mariana Estela Lebrija Clavel
A
sí se expresaba Melville luego de la publicación de e Whale (La Ballena) en octubre de 1851, o, mejor dicho, Moby Dick, título con el que se sustituyó y dio a conocer la sexta obra del autor. En la actualidad reconocemos el nombre de Herman Melville como un clásico y prodigioso autor norteamericano que propagó sus letras de manera universal a través de distintas épocas. No obstante, el reconocimiento dentro del círculo de literatos, le costó un siglo de existencia, como también, un cúmulo de injurias provocadas por el constante desdeñamiento religioso al que hacía referencia en sus textos. Es decir, Melville, no vivió para atestiguar el éxito tardío de su labor. Contrariamente a las declaraciones de su madre, María Gansevoort Melville, acerca de que a Herman poco le preocupada sí
gustaban o no sus libros, puesto que su único interés, eran las ganancias que pudieran servir para pagar préstamos exorbitantes, “parecen haber pruebas que sugieren que las mejores críticas le consolaban menos que le devastaban las peores”, acerca de su libro ballenero, el cual, catalogaban como “más que blasfemo”. Mientras la opinión pública se encargaba de dañar la posibilidad de que Moby Dick pudiera venderse, Melville, siguió adelante con la creación de su séptima obra, durante los últimos días de octubre y principios de noviembre de 1851, “tan enfrascado en su nuevo trabajo, que no dejaba el estudio hasta que se había hecho de noche: momento en que, por primera vez en el día, tomaba algo sólido”. Pierre o las ambigüedades (Pola) fue el nombre que dio forma a una historia trágica, acerca de un joven escritor contaminado por ideales hereditarios, que se niegan a despertar el sentido trágico de la vida.
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Reseña Literaria: Las hazañas de Herman Melville y la culminación magnánima de su obra través de Pierre, Mariana Estela Lebrija Clavel
A lo largo de la historia, Pierre (el héroe de Melville) experimentará un proceso de crecimiento mental, rodeado de representaciones sexuales, el autoengaño y la oscuridad mórbida del ser humano. Melville tenía la certeza de que Pola debía obtener ventas mucho más prosperas que Moby Dick, al mismo tiempo que se cuestionaba sí el público aceptaría una obra tan compleja, que no narrara travesías, esta vez, había escrito una novela psicológica.
A lo largo de la historia
Pierre
(el héroe de Melville) experimentará un proceso de crecimiento
mental
rodeado de representaciones sexuales
oscuridad mórbida del ser humano el autoengaño y la
La obra se publicó en Nueva York en julio de 1852, concomitante a su publicación, fue juzgada como: “Tal vez la ficción más loca que existe”, “de una ambigüedad larga, embrolladora y que resulta desconcertante para el alma”, entre otras tantas de carácter similar. ¿La realidad? Pola terminó por destruir la carrera literaria de Melville, a pesar de haber contado con un par de publicaciones más en años posteriores. Y sin embrago, Pierre significó el centro del ser de Melville y la culminación de sus logros. El 1919, surge el frenesí tardío por Herman Melville, época donde surgieron admiradores de Pierre o las ambigüedades, es entonces, cuando se da a conocer una de las cartas del novelista H. M. Tomlison en donde refiere que:
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Reseña Literaria: Las hazañas de Herman Melville y la culminación magnánima de su obra través de Pierre, Mariana Estela Lebrija Clavel
“Se supone que Melville ha sido redescubierto recientemente. En realidad, aquí la gente pone a Moby Dick por las nubes y parece ser que desconoce que Pierre es uno de los libros más importantes del mundo, profundo en su metafísica, de una manera indescriptible: De hecho, creo que usted mismo, encontraría en la lectura un drama filosófico, algo con que mantener activa su mente, ya que es una novela filosófica que alcanza el cielo y cae hasta el infierno, en su tránsito hacia una culminación”. No me cabe duda, los toques de genialidad creadora que definen la obra de Herman Melville, lo considero lo que Anne Juranville determina como “El melancólico”, ese, que tiene a menudo la mirada baja; sí no observa al otro es porque está absorbido por visiones demoniacas, mismas que plasmó en su obra y las que le valieron la mirada enturbiada de la crítica, que no supo actuar como el lector modelo que el texto demandaba.
FUENTES DE CONSULTA Bibliográficas: Melville, Herman. Pierre o las ambigüedades. Epulibre.1852. (Traducción de Marta Pérez). Cibergrafía: Literatura y Comunicación: La lectura como nuevo mecanismo crítico. Bernárdez Rodal, Asunción. Universidad Complutense de Madrid. hps://es.scribd.com/document/323299340/Pi erre-o-las-ambiguedades-Herman-Melvillepdf
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Por Sergio H García
I
gnacio González Vegas, mejor conocido en el mundo de la música como Nacho Vegas, es un cantautor asturiano cuya obra podría ser catalogada como dulcemente depresiva, ya que en la mayoría de sus canciones nos encontramos con temáticas relacionadas con el desamor, el temor, la muerte y la tristeza. En su álbum “Desastre manifiesto” del 2008, el cantante español nos propone quizás la historia más triste que envuelve su carrera musical. Contada de forma inversa, podemos entender que esta suerte de tragedia termina con la primera canción(Dry Martini S.A.)e inicia con la última canción (Morir O Matar).Y es,esta última, quizás la canción más fuerte de este material y tal vez una de las canciones mejor trabajadas de Nacho.
En Morir o Matar, Nacho Vegas hace evidente su habilidad para construir historias y personajes y su profunda conexión con la llamada condición humana, característica que se refleja, no solo en este álbum del 2008, sino en casi toda su discografía, la cual es altamente recomendada. La primera estrofa de Morir o Matar nos muestra una relación amorosa dominada por el miedo gracias a la percepción y testimonio del protagonista que es quien nos relata la historia. “Te sentaste justo al borde del sofá Como si algo allí te fuera a morder.”
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Música: Morir o Matar: la violencia y la locura de Nacho Vegas, Sergio H. García
Posteriormente, dentro de la misma estrofa, se nos presenta la negociación de la otra mitad de la pareja hacia nuestro narrador. En ella se afirma que hay cosas que se tienen que aprender para mejorar y dejar de estar en polos opuestos: uno tiene que aprender a mentir y el otro a dejar de hacerlo; uno tiene que ser fuerte y el otro tiene que aprender a flaquear; uno a morir y el otro a matar. “Dijiste: "Hay cosas que tenemos que aprender, Yo a mentir y tú a decirme la verdad, Yo a ser fuerte y tú a mostrar debilidad, Tú a morir y yo a matar."” Pero ¿Realmente se refiere a morir o matar literalmente? La respuesta obvia es un contundente no, pero entonces a qué se refiere el cantautor con esto. En gran parte de las artes líricas se usa un recurso literario llamado metonimia, la cual consiste en designar un concepto con el nombre de otro. Un ejemplo de esto es Julio Cortazar que en “Me caigo y me levanto”, habla sobre las recaídas y las rehabilitaciones como metonimias para la decadencia y la cotidianeidad y el acto de cambiarlo todo o superar a sí mismo con los sacrificios que esto conlleva. En el caso Vegas, la metonimia es más evidente: Matar se relaciona con atacar, abusar y violentar al otro, mientras que Morir significa dejarse caer, ser violentado, preferir el daño propio al ajeno; dejarse matar y estar, de alguna budista forma, más consciente de la humanidad. Esto favorece muchísimo la trama de esta canción, puesto a que algunos psicólogos afirman que para que se dé el acto de la violencia dentro de la
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pareja (y cualquier medio social) se necesitan dos perfiles: el violentador y el violentado. Ambos son revelados con la culminación de esta primera estrofa. La siguiente estrofa, a modo de polisíndeton que se corta en algunas ocasiones, nos expone la soledad en metáfora de un silencio que se transforma en miedo y después en terror para, por fin, terminar, de nuevo en la carencia de sonido y las especulaciones sobre un buen futuro y loa trágica certeza de saber que eso no es lo que vendrá, porque como condena a muerte, solo se trata de morir o matar.
Música: Morir o Matar: la violencia y la locura de Nacho Vegas, Sergio H. García
“Y después se hizo el silencio y el silencio fue a parar a una especie de pesada y repartida soledad, Y la soledad dio paso a un terror que hacia el final nos mostró un mundo del que ninguno quisimos hablar. Y así eran nuestras noches y así era nuestro amor: comenzaba en el silencio y continuaba en el terror, y otra vez de allí al silencio. Dime, ¿para qué hablar De lo que pudo haber sido y de lo que jamás será, Tratando de adivinar qué fue eso que hicimos tan mal?, Si, en fin, se trata de morir o de matar.”
Para la tercera estrofa, el narrador advierte a la otra persona de alguna forma fraternal, como de hermano a hermano, o por otro lado, podría ser una sutil y agresiva amenaza sobre el ejercicio la violencia y la tristeza del violentador; sobre la infección de este mal en el resto de la sociedad, cuando explica que si alguien vuelve a prometerle amor, es probable que esta persona sea infiel y promiscua, hedonista y triste, ya que la violencia no solo es física, sino que puede ser psicológica, social y sexual. Instantáneamente, después de terminar esta estrofa, la guitarra que hasta este momento se había mantenido casi limpia cambia a un overdrive con una ganancia medianamente fuerte y la voz que, hasta el verso pasado, se había mantenido calmada y melancólica, ahora cobra fuerza y se lamenta como un gran felino herido y dispuesto a atacar a cualquiera que lo toque. Durante las siguientes dos estrofas, el narrador cuenta una de las anécdotas que más degradó a la relación, entre lo que se puede destacar las drogas como catarsis a la depresión, el miedo completo a la muerte, el acoso y los intentos de suicidio con tal de detener el dolor. Como cuando pasan las explosiones, nada vuelve a ser igual, la guitarra sucia se queda el resto de la canción, la voz se raspa cada vez más; jamás vuelve la paz. Las ultimas estrofas nos hablan de por fin acabar con el dolor, por fin ser el violentado invirtiendo así los ciclos o recurrir al suicidio del personaje como forma de redención de culpas, de acabar con el dolor, de “obtener la santa paz que en vida no gocé jamás”, cerrando el ciclo de sufrimiento para la pareja, pues hasta que uno muere, todo solo se trata de morir o matar.
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“La mujer es el reposo del guerrero” Friedrich Nietzsche
por Juan Rey
H
ay un enorme gozo y éxtasis al poder elucidar y viajar por las rolas, las letras, y el Soma musical de una mujer feroz -que he admirado desde el momento mismo que piso un escenario-. Melissa Gaboriau Auf der Maur, nacida en Canadá en 1972. Guitarrista, cantante y bajista (su principal arma melódica). Prácticamente, hace toda su carrera en los E.U. (en bandas como e Hole y e Smashing Pumpkins) para después hacer su trayecto como solista. Hoy trataremos su primera producción: el genuino y puro “Auf der Maur”. Tal vez el “Out our Minds” tenga más vigencia pues fue producido hace diez años, pero el “Auf der Maur” , el “Disco Naranja” -si se le puede dar un apelativo- es el que está construido a mediados del siglo XXI y merece todo un despliegue de nuestro disfrute por sus vías.
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Música: Auf Der Maur: álbum homonimo de Melissa, Juan Rey
Pareciera que después de colindar con dos grandes personajes del mundo del Rock (Billy Corgan y Courtney Love), es imposible no salir nutrido o afectado por sus personalidades. Así es como Melissa se embarca en el viaje de armar su primer disco: Auf der Maur. El disco “Orange” arranca sin contemplaciones con la acelerada, viral y rebosante “Lightning is my girl” . Desde el inicio percibimos toda la frondosidad que ha adquirido con los años Melissa en el manejo del bajo. Después vendría el primer sencillo del álbum, la descomunal, incansable, y sísmica “Followed the Waves”. La fuerza de Melissa le da la pauta en todo momento a la contundencia de la rola. Sigue el disco con el segundo sencillo que salió del CD, la excelente y de acontecer falsificado de “Real a lie”. Para continuar con la lacerante, honda sádica y trotadora “Head Unbound”.
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Seguiría el siguiente sencillo y por demás la mejor rola del disco. El intenso ritmo de guitarra por parte de Melissa al comienzo es impresionante: agarra por sí mismo un poder femenino apasionado. Sápida y aromática “Taste you” aparece en el ambiente para endulzarnos los oídos. Vendría una rola ominosa, musculosa, impetuosa e intensiva: “Beast of honor” para después disfrutar del ritmo socarrón, burlón, y cuasi-sadomasoquista de “I´ll be anything you want”. Después nos topamos con, tal vez, una rola de las menores del disco, pero no quiere decir que se pierda eficiencia y cualidad: la consistente, férrea y afanosa “My foggy notion”. Nos adentramos ahora por una de las zonas más poperas y geniales de Melissa, con la alegre, romántica y rock-balada “Would if a could”. Un puro piano que deviene en una línea sonora frágil y
Música: Auf Der Maur: álbum homonimo de Melissa, Juan Rey
cabalgando por los tañidos del bajeo de Melissa, avanzamos al desatarse de estampida sonora de “Skin receiver” y terminamos con la canción bipolar donde el comienzo choca con el final. Son dos posicionamientos de musicalidad transversada. La demencial, disparatada, y vesania “I need I want I will” y son esos últimos diez segundos del final los que estallan en un estado cuasi-meditativo. Auf der Maur construye este disco de manera que explote todo aquello que le ha sido adherido en sus travesías con las otras bandas en las que ha pertenecido y por su misma alta calidad en el manejo de su leal instrumento. En el álbum, Kim Deal y Hilary Wood son también salvajes figuras en el modo de tratar al peculiar aparato. Es muy común subvalorar el trabajo del bajista, pero personas como Melissa logran originar un epicentro de toda composición. No es fácil. Y como siempre –para variar- son las mujeres las que logran esas fuerzas para poder confinarlas con el mundo, con el ser, con el universo, con la vida, con todo. Eso también se patentiza en la fragilidad que emana del corpus de Melissa para desembocar en opulencias armónicas.
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por HĂŠctor Daniel s o p m a C a Oliver
Cuento: Consagración, Héctor Daniel Olivera Campos
N
o, si el libro está muy bien. Es muy bueno y me he reído mucho. Es fresco, desenfadado y original. Es mucho mejor que los otros libros de microrrelatos que hemos editado en ésta casa hasta el momento -confesó el editor, arrellanado en la silla de cuero de su despacho. -¿Entonces, qué problema hay para que no quieran editarlo? -le interrogó el escritor novel. -Su nombre. -No entiendo. ¿Se refiere al título? -No, al nombre de usted. Únicamente publicamos a autores con nombres conocidos. -Entonces no habrá problemas. Me llamo Pérez Pérez, ¡habrá apellido más conocido! -Mire, no me vacile, ese es el problema. ¿ién es Pérez Pérez? Nadie. Yo no sé quién es, no me suena de nada y al lector tampoco. ¿Y por qué alguien va a comprar un libro de Pérez Pérez o de Pepito de los Palotes o de cualquier otro insigne desconocido? -Confiaba en que su editorial se encargaría de la promoción -Y a su edad también se creerá que el ratoncito Pérez, que debe ser primo suyo, se lleva los dientes de leche. -Ahora el que me vacila es usted. -Mire, le voy a hablar claro. Le voy a explicar lo que ningún editor le contará nunca: El mundo editorial ha cambiado. Los editores ya no vendemos libros, el libro es secundario y la calidad literaria importa un bledo. Los editores vendemos un producto y ese producto es el autor. El autor ha de convertirse en su propia marca. La gente que adquiere un sólo libro al año por Sant Jordi, y que son el grueso del mercado, compra aquel
libro del autor que les suene, título que ya se ha publicitado previamente en la prensa a cargo de unos cuantos críticos mamporreros y en las redes sociales a cargo de personal que se dedica profesionalmente a tales menesteres. Usted me dirá, ¿entonces hay promoción? ¡Claro que la hay! Hasta podemos sacarlo en televisión o hacer que gane un concurso literario de renombre convenientemente amañado. Pero, en cualquier caso, sólo se promociona sobre seguro, los autores ya vienen promocionados de casa, ya tienen una marca reconocida como escritores o son autores mediáticos que salen por la tele a los que les buscamos un negro para que les escriban sus flamantes obras que compraran las marujas el día de autos. -Entonces… -Debe crear una marca propia y reconocible. Escoja un género y no se mueva de él. Si hace microrrelatos, que no se le ocurra escribir otra cosa porque eso desconcierta a sus potenciales lectores. Pérez Pérez ha de ser garantía de microrrelato de humor, pongamos por caso, de manera que el comprador con sólo leer su nombre ya se haga la idea del libro que se va a llevar a casa, encasillarse es básico. Cree un blog que no sea cutre. Siga al top ten de blogs del género por el que ha optado, según el número de visitas, e interactué con ellos de manera que, al final, consiga enlaces de sus blogs al suyo; así se irá haciendo un nombre. Una vez que haga eso, contrate un community manager que le lleve las cuentas y compre bots que generen perfiles falsos de seguidores de su blog. Si usted tiene una cifra abultada de followers, aunque sean más falsos que un duro de cartón, por el efecto gregario le
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Cuento: Consagración, Héctor Daniel Olivera Campos
entrarán seguidores de verdad que no querrán quedarse fuera de seguir al más cool. Y, por supuesto, no tenga manías en lamer todos los culos que haga falta y en escribir reseñas elogiosas de truños de autores ya consagrados e influyentes. -¿Y si hago todo eso ustedes me editarán? -Es posible. Pero en su caso, lo dudo, es usted gordo, poco fotogénico y cincuentón. Los nuevos valores que se promocionan son todos jóvenes, delgados, modernetes y quedan bien en las fotos. Además, usted viste convencional. Déjese coleta, tatúese o, al menos, póngase un sombrerito y, desde luego, apúntese a un gimnasio. Desarrolle una leyenda, diga que fue mercenario en Angola, camello en Ibiza o camarero en un burdel de Copacabana; no importa que sea mentira, lo esencial es que el periodista que le vaya a entrevistar pueda llevarse un titular a la boca. Y si todo eso no funciona, siempre puede liarla parda. -Creo que no le entiendo. -Le pondré un ejemplo. ¿Mire -el editor extrajo una foto del cajón de su escritorio-, lo ve? Este individuo es el escritor Eduardo Labarca meando sobre la tumba de Borges. -¿Por qué me enseña eso? ¿é me propone? ¿é vaya a mearme en la tumba de Cela? -Eso sería magnífico. -¡Ni en broma! -Le aseguro que con escrúpulos no irá a ninguna parte como no sea a autoeditarse en Amazón, que es el cajón de-sastre, el cementerio de los elefantes, la sentina de los a u t o re s f r a c a s a d o s q u e p a s a n m á s desapercibidos que un pedo un jacuzzi.
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-No pienso hacer nada de lo que me ha dicho. -¿Por qué señor Pérez Pérez? -Porque me produce pereza. Tiempo después y por mucho que le jodiera, Pérez Pérez tuvo de reconocer que el editor tenía razón. Los amigos y conocidos no le compraron su libro autoeditado en Amazón porque se preguntaban: “¡é coño va a escribir este tío!”. Y los desconocidos tampoco adquirían su libro porque se preguntaban: “¿ién coño es este tío?”. El autor se sentía atrapado como un hámster en su rueda, enjaulado en un terco anonimato, destinado a morir exhausto sin que nadie lo leyera, sin que el público llegara jamás a apreciar si era bueno, malo o simplemente discreto. Cuando la guardia civil esposó a Pérez Pérez, el autor sonreía. Le sabía mal por su sobrino, un informático friqui al que había metido en aquel embolado y a quien también habían arrestado. Por lo demás, la promoción había sido un éxito rotundo, un debut apoteósico. Es cierto que algunos conductores se habían distraído provocando diversos accidentes de tráfico con un balance de varios muertos y multitud de heridos, pero, aquel era un pequeño tributo que se cobraba la literatura, daños colaterales. Su sobrino era un puto crack, un hacker cojonudo, sólo él había sido capaz de escribir más de trescientos microrrelatos de su tío en los paneles luminosos de la autopista del Mediterráneo entre Algeciras y La Jonquera. En toda España y en el extranjero ya sabían quién era Pérez Pérez. Se había consagrado.
Por VĂctor Parra Avellaneda
Cuento: Detención Arbitraria, Víctor Parra Avellaneda
A
tado en una patrulla. A la espera de un veredicto arbitrario.
Sólo. Ahí. En un páramo desconocido. Culpable por capricho de los encapuchados. ¿Cuánto tiempo ha pasado desde que lo secuestraron? ¿Horas, días, semanas, meses? No lo sabe. –Deténgase–le dijeron cuando caminaba por la calle–Identifíquese–agregaron, mientras el de la patrulla de policía le apuntaba con un fusil. –Disculpe oficial. No tengo a la mano mi identificación. Está en mi casa. Solo voy a la tienda que está en la esquina–les dijo, con algo de nerviosismo, al ver que la boca del cañón del arma lo miraba atentamente. –Conque no trae identificación. é pinche tienda ni que madres. ¡Agárrenlo muchachos, llévense a este pendejo! –sentenció el oficial. Lo sujetaron de los brazos. Una culata
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laceró su rostro. Brotó de su sien una cantidad descontrolada de sangre. Parecía que llovía. El agua de esta lluvia era escarlata. –Ahora me toca a mí. No hay más que resignarse–pensó para sí mismo–Ni modo. Así es la vida, solamente una espera a una muerte incierta. Le hicieron preguntas que no comprendió. A cada "no" y cada "sí" recibía por igual una paliza. Cualquier acción mientras respirara significaba la tortura. Respirar era una tortura. Ver era una tortura. Sentir era una tortura. Vivir era una tortura. La muerte era el paraíso en esta situación. Un paraíso inalcanzable. –¡Pero sí que están bien pendejos ustedes! –dijo un sujeto, cuya voz emanaba gran autoridad sobre los demás agentes–¡Este no es, idiotas! ¡Se agarraron a otro que ni tiene que ver con todo el asunto! –A ver, ¿cómo así? ¿Este no es el periodista ese que buscamos por bocón? –preguntó ingenuamente un agente hacia el de la voz autoritaria.
Cuento: Detención Arbitraria, Víctor Parra Avellaneda
–¡No! ¡este es un fulano cualquiera, un don nadie que ha tenido la mala suerte de toparse con la idiotez de todos ustedes! ¡Ni siquiera se parece al que nos tenemos que echar! –Ni modo jefe. Así son las cosas. U n d í a se e n c u e n t r a a l q u e buscamos y otras veces pues pasa esto–le contestó sin remordimientos el oficial. –Sí jefe. ¿é acaso no se acuerda de la tipa esa que disque era estudiante y que detuvimos en la carretera y que al final no era? ¡Uf, que lástima, tan bonita que estaba antes de darle de a plomazos! Pues así es esta chamba, jefe. Existe un gran riesgo de equivocarse. Y más si los que detenemos resulta que no son los que hay que chingarnos y no cooperan, pues no hay de otra. Al cabo si nadie se entera. Nomás puede que salga una pinche nota roja toda culera que a los tres días la gente va a olvidar –argumentó el agente.
Solo se escuchaban voces. La oscuridad era omnipresente. Él, atado a la patrulla, aturdido y no sabiendo si esto era ya un sueño o un delirio producido por la agonía previa a la muerte. Las voces aparecían como un desfile de fantasmas entre la penumbra. –Pues ¿qué hacemos ahora? –preguntó otra voz, de otro oficial. –¿Cómo que qué hacemos ahora?
¡Ya saben que se hace en este caso! ¡Encuentren al que sí buscamos! ¡y al de aquí, denle cuello; que nada sirve que esté libre!, ¡pues ya sabe todo y también nos puede delatar! –dijo el de la voz autoritaria. Se oyeron pasos acercarse hacia la patrulla, donde él se encontraba. –A ver tú, bájate. Ya te llegó la hora–dijo una de las tantas voces. Lo bajaron de la patrulla. Oyó cómo se cargaban las armas. Solo oscuridad. Frío punzante. En un instante, las luces y las detonaciones iluminaron todo páramo donde las balas acabaron pronto con su vida. A lo lejos, como sincronizado con aquel momento, los fuegos artificiales de múltiples colores provenientes de la ciudad relampagueaban convulsamente por todo el cielo. –¿Ya vieron? ¡Ya es la hora muchachos, ya dieron el grito del 16 de septiembre! –dijo el de la voz autoritaria–¡é viva México, pinches cabrones! –¡Viva México! –repitieron los otros oficiales, enérgicos, mientras disparaban que con sus fusiles disparaban al aire.
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por Ronnie Camacho Barrรณn
Cuento: Los Últimos,Ronnie Camacho Barrón
E
stoy por marcharme del único mundo que he conocido y realmente no siento nada, pocas veces he probado bocado, pero jamás he saciado mi hambre, la oscuridad de los cielos nunca me permitió ver el sol y aunque ya no hay ruidosas ciudades, nunca he podido conciliar el sueño. Mi nombre es Elías Salas, soy el capitán del arca espacial A-001 y soy parte de la Generación Z, no aquella nacida entre los finales de los noventa y principios del dos mil, sino la última que nació después de la Guerra Zombi. Todo ocurrió en el dos mil ciento sesenta, cuando la humanidad estaba al borde de la extinción por la falta de recursos, las guerras y enfermedades sumamente infecciosas que se esparcieron por todo el globo. En busca de preservar la vida, las mejores mentes del mundo idearon un gen que podía convertir a la personas en seres virtualmente indestructibles, en secreto lo implementaron en la zonas de mayor conflicto y enfermedad, esperando que todas sus simulaciones y experimentos funcionaran en la realidad. Para suerte del mundo, el gen funcionó o al menos lo hizo en un principio, pronto las personas comenzaron a curarse de las distintas enfermedades, el sueño y el cansancio habían dejado de ser un problema
e incluso las más potentes armas no podían hacer ni mella en los cuerpos de los humanos con el gen en su interior. De a poco la vida volvió a prosperar, las enfermedades habían desaparecido y la guerras ya no tenían sentido si el enemigo no podía morir y justo ese fue el comienzo de los problemas. Aunque el gen en un principio había logrado su cometido tenía un efecto curioso en aquellos que lo poseían, pues todos presentaban un hambre voraz que solo podía saciarse con la carne de todos aquellos que no contaban con el gen. Fue así como la Guerra Humano-Zombi se apoderó del planeta y aunque los humanos lo intentaron por años, no pudieron frenarnos. Nosotros la Generación Z somos descendientes de aquellos impregnados con el gen, nuestros padres devoraron al mundo y aunque nosotros conservamos el intelecto y la razón, también heredamos su hambre. El problema, es que en este mundo muerto solo quedamos nosotros, ya no hay más comida y nuestra única opción es buscarla en otros mundos. Mi arca espacial está lista para despegar, espero que a donde sea que vayamos, encontremos comida.
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