Flecos, cinturones trenzados, patchwork, pantalones Oxford, estampados, vestidos largos y colores tierra. Los setenta fueron años de caos y revolución, y sus ecos hoy se traducen en pura creatividad. Los vimos en las pasarelas de Gucci, Chloe, Emilio Pucci y Prada y ahora llegan a nuestras colecciones primavera-verano con una moda llena de frescura, belleza y nostalgia.