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FERTILIZANTES
LA LLUVIA QUE ALIMENTA
La lluvia que alimenta
Fertilización foliar: La fertilización foliar es un método altamente eficiente de aplicar nutrientes a los cultivos. Permite solucionar carencias nutritivas de manera casi inmediata, alimentar plantas débiles o con un sistema radicular enfermo o dañado y lograr que, en períodos de gran desarrollo, las plantas puedan disponer de más nutrientes de los que sus raíces son físicamente capaces de absorber. Sin embargo, para lograr buenos resultados hay que comprender bien de qué modo pueden afectar a la absorción de nutrientes factores como la humedad, la temperatura, la hora del día o la concentración de la solución pulverizada. La vida vegetal apareció en el mar y las primeras plantas fueron algas que carecían de raíces y absorbían los nutrientes a través de las hojas. Aunque millones de años de evolución han servido para desa-
dos rutas. Por un lado, hay un proceso pasivo de penetración provocado por los gradientes de concentración que es la diferencia de concentración entre dos líquidos separados por una membrana. Si la solución nutriente pulverizada sobre la hoja tiene una concentración mayor que los líquidos internos de la planta, poco a poco, parte de los solutos
En otro estudio sobre fertilización foliar, realizado con manzanos, los investigadores observaron que la absorción de nutrientes era mayor con temperaturas más bajas (21º C frente a 32º C) y cuando las hojas tenían un buen contenido previo en nitrógeno. La incorporación de un producto humectante o mojante a la solución pulverizada multiplicaba por dos la absorción de nitrógeno. En tiempo húmedo la cutícula se encuentra más hidratada, lo que favorece la permeabilidad y la absorción de nutrientes. Una de las características de la fertilización foliar es que los nutrientes penetran en las hojas, pero no se mueven demasiado por la planta. Al contrario que las
que viven en climas áridos, como los cactus, y mucho más permeable en aquellas especies de climas húmedos. Las plantas de cannabis que crecen al aire libre en climas secos suelen tener una cutícula
Una de las características de la fertilización foliar es que los nutrientes penetran en las hojas pero no se mueven demasiado por la planta
La tensión superficial del agua reduce la absorción de nutrientes salvo que se añada un humectante o mojante
rrollar un sistema radicular especializado en la absorción de nutrientes del suelo, las plantas nunca han perdido su capacidad de nutrirse a través de las hojas. La fertilización foliar es la aplicación de nutrientes disueltos en agua sobre la superficie de las hojas de las plantas. Ya en 1844 se demostró científicamente que las plantas pueden absorber y utilizar nutrientes a través de las hojas pero, a día de hoy, sigue sin comprenderse completamente el mecanismo. Las hojas están recubiertas en toda su superficie (inferior y superior) por una
mucho más gruesa que las que crecen en interior, invernadero o en zonas húmedas. La cutícula gruesa reduce la efectividad de la fertilización foliar, así como las hojas duras y rugosas. En cambio las hojas finas, de tacto suave y cutícula delgada, así como las partes jóvenes son mucho más permeables a los nutrientes. Para regular la transpiración y la respiración la planta dispone de los estomas, que son pequeños poros repartidos por la superficie de las hojas que sirven para intercambiar gases con la atmósfera y liberar vapor de agua. La cantidad de estomas depende de cada especie vege-
La lluvia alimenticia aprovecha una facultad que las plantas poseen desde hace millones de años: comer a través de las hojas
cutícula impermeable e hidrófoba que repele la humedad y que evita que la planta se deshidrate a pleno sol o se hinche de agua con la lluvia. La cutícula es más gruesa e impermeable en las plantas
tal, pero oscila entre 150 y 3000 por centímetro cuadrado. La penetración de los nutrientes a través de la cutícula se produce por al menos
disueltos en el fertilizante, atraviesan la cutícula y se introducen en la hoja, intentado equilibrar el nivel de sales de ambos líquidos. Este proceso de “osmosis” aumenta cuanto mayor es la concentración de la solución pulverizada, lo que también aumenta el riesgo de producir quemaduras en las hojas. El segundo punto de entrada de los nutrientes son los estomas, pero no está claro el mecanismo. Aunque los estomas son aberturas en la hoja, parece bastante claro que el agua no penetra directamente por ellos, debido a que el poro del estoma está cubierto por la cutícula. Además la gran tensión superficial del agua impide que pase por un orificio tan pequeño. Por otro lado se ha demostrado que los estomas juegan un papel importante en la absorción de nutrientes suministrados por vía foliar, aunque no se acaba de comprender como lo hacen. Pudiera ser que la carga eléctrica de las moléculas, o su ausencia, influya en la forma en que se absorben. Las partículas que llevan carga eléctrica, como nitrato, amonio, potasio o sulfato, tienen más problemas para entrar por los estomas que las partículas sin carga, como la urea o los micronutrientes quelatados. En un estudio realizado con plataneros se pudo determinar que hasta el 65 por ciento del nitrógeno en forma de urea se absorbía en sólo 25 minutos, sobre todo a través de las hojas más jóvenes y de la superficie inferior de las hojas, donde hay mayor número de estomas. La absorción completa de todos los nutrientes se produjo en 30 horas.
raíces, las hojas no están diseñadas para repartir minerales por la planta, por lo que el movimiento de los nutrientes es
Las deficiencias de microelementos se corrigen rápidamente con la fertilización foliar
Los nutrientes penetran más fácilmente en las plantas jóvenes