Informativo CIRM. Mayo-junio 2013

Page 1

Cirm nformativo

DIRECTORIO CIRM Presidente: P. Fernando Torre, msps Primera Vicepresidenta: Hna. Juana Ángeles Zárate, csc Segundo Vicepresidente: Hno. Ricardo Reynoso, fms Vocales femeninas: Hna. Georgina Zubiría, rscj Hna. Luz Angélica García, osr Hna. Lucila Martínez, stj Hna. Patricia Pérez, cfmm Hna. Anastasia García, macic Vocales masculinos: P. Carlos Morfín, sj P. Gonzalo Ituarte, op P. Enrique Castro, ocd Hno. Eduardo Navarro, fms P. Salvador Rodea, cr

C O N T E N I D O

2 Editorial Reflexión 3 Una reflexión de mujeres

Claudia Patricia Aguirre Macossay

Hna. tHertha Hampl, fsps

Director: P. Guillermo Uribe Aceves, ocd Editor: Hno. Sergio Argüello Vences, ssp Corrección de estilo: Jorge Hernández Mejía, ssp

Atención a suscriptores De lunes a viernes de 9 a 14 hrs. Tel (55) 56.04.54.14 Fax (55) 56.04.95.55 Email: informes@cirm.org.mx

Hna. Elena Luna Jiménez

Hna. Eulalia Calderón Alcántar

15 ¿Para siempre?... Hno. Gustavo Llaguno Velasco, msps 20 Aportes de la Vida Religiosa femenina después del Vaticano II Hna. Silvia Conde, sa 27 Desafíos a la Vida Religiosa De la Vida Religiosa mexicana 56 Testigos y promotores Juana Angeles Zárate Celedón, csc de nueva evangelización Palabra, Espíritu y Vida 41 ¡Necio, esta misma noche se te reclamará la vida! (Lc 12,13-21) Isingrini Virginia, mmx De la UISG 57 Fidelidad creativa desde la UISG Hna. Patricia Pérez Sánchez, cfmm

Diagramación y diseño: DG Fernando Daniel Perera E.

Impresión: Editorial Progreso S.A. de C.V. Tiraje de 500 ejemplares más sobrantes para reposición.

Hna. Luz Angélica García Plata

47 Formar futuros sacerdotes

Julieta Guadalupe Puente Rodríguez, op

Portada: Hno. Jesús Rosario Fuentes, ssp

Webmaster: Lic. Miriam Elena Canchola

Voces Jóvenes 53 La promoción de la mujer en la Vida Religiosa

Tesorero: Hno. Manuel Arróyave Ramírez, sfc

Revista Informativo CIRM: Coordinador del Departamento de Comunicación: Hno. Sergio Argüello Vences, ssp

46 Ellas nos guiarán en el Reino de Dios

8 Un carisma común para una 49 Misionera del amor de Dios, misión compartida Laicos/as guadalupana y mensajera soy… Hna. Rosalba Chávez Esquivel y Religiosos/as 51 Ser testigo de la acción de Dios Hna. Ivonne Joubtert Flores, stj en las personas 12 Sé feliz: ¡Mujer eres!

Secretaria General: Hna. Ilse Mayer W., hsjl secretariagral@cirm.org.mx

CIRM Nacional Amores 1318, Col. Del Valle, Del. Benito Juárez, 03100 México, DF Tel (55) 56.04.54.14 Fax (55) 56.04.95.55 www.cirm.org.mx

Mayo-junio 2013

Testimonios 44 Compartiendo un poco de mi vida…

Hna. Bertha Mondragón

De la CLAR 61 Mensaje final: XLII Junta Directiva y del VII Encuentro de Secretarias y Secretarios de la CLAR


Editorial

Cirm

R

2

eflexionar sobre la Vida Religiosa femenina nos lleva a reconsiderar el papel de la mujer en la Iglesia y la sociedad. La mujer siempre ha ocupado un lugar preponderante en la vida, pues en ella se gesta; la historia toda, no se podría entender sin este importante y sustancial papel, no sólo desde el punto de vista de supervivencia sino de plenitud de lo más humano y liberador por sus contribuciones en el mundo de los valores, de la ciencia, de las luchas sociales y de la defensa de la vida en todas sus expresiones. Pensar teológicamente la Vida Religiosa femenina es otro de los desafíos que nos plantea la historia desde una doble perspectiva: como una tarea siempre pendiente en medio de estructuras de carácter androcéntrico y una oportunidad de colocar de mejor manera el auténtico lugar de la mujer en la historia de salvación, en el contexto de cambio de época en el que se gesta el nuevo modelo de humanidad que se ha denominado nuevo paradigma. No podemos pensar en ello sin las contribuciones que la teología trinitaria y las grandes luchas sociales han aportado a la reflexión y desarrollo del pensamiento humano. Sería inconcebible acercarnos a estos nuevos paradigmas si no es desde cuestiones de igualdad, reciprocidad, género y validación de sus derechos. Si bien es cierto que la narración de la historia de la Vida Religiosa, privilegia al mundo masculino atribuyéndole la autoría de sus orígenes a personajes como san Antonio Abad y Pacomio, aparece pálidamente la hermana de éste último, María, como abadesa de uno de los dos primeros mo-

nasterios femeninos de los que dan cuenta la historia, atribuidos ambos a San Pacomio. Quedan igualmente pálidas las contribuciones de grandes místicas y religiosas que han contribuido sustancialmente al desarrollo de la Vida Religiosa a través de estos 17 siglos de su existencia; fundadoras muchas de ellas de novedosas y comprometidas expresiones de la misma, reformadoras y profetas. En términos más amplios, la Vida Religiosa femenina ha tenido un lugar imprescindible en los procesos de evangelización de nuestro pueblo, siempre abierta a colocarse en los lugares de frontera, cercana a sus necesidades y luchas; su rostro y presencia manifiestan el otro rostro de la Iglesia que hace creíble al Dios de Jesús por sus actitudes de misericordia, inclusión y justicia. Son muchos los desafíos al interno de la Vida Religiosa femenina y los que provienen del exterior, que son un llamado y una propuesta de liberación evangélica. Pertenecemos a una de las instituciones que históricamente se ha entendido como jerárquica y este es el primer elemento de discernimiento y praxis profética que será parte de nuestra identidad como Vida Religiosa que acentúa el carácter carismático. Quizá este es el contexto que nos implicará descubrirnos y manifestarnos el verdadero proyecto de Jesús en relación a su Iglesia y el papel de la mujer en la misma. Leer este boletín nos colocará de cara a algunos planteamientos que danzarán seguramente en este devenir de posturas y procesos. Les animamos a tener una mirada interpretadora de los signos y desafíos que brotan de esta lectura.


Reflexión

Una reflexión

de mujeres

Claudia Patricia Aguirre Macossay Licenciada en Teología

E

n distintos espacios de la vida humana hemos hablado del lugar que las mujeres tenemos dentro de los escenarios sociales, políticos, religiosos; pareciera que no quedan dudas sobre nuestra presencia activa dentro de las esferas sociales; por lo menos así se plantea en el discurso; en teoría, hemos apostado por una cultura que reconozca la importancia que tienen las cuestiones de género y nos proponemos ser parte de un diálogo al respecto que pareciera no agotarse, y en algunos casos, pareciera que participáramos de monólogos o comunicaciones sin resultados, lo descubrimos así, cuando constatamos cifras que identifican a América Latina como un continente en el cual la discriminación hacia las mujeres, aparece como un hecho sistemático y cada vez más diversificado en sus expresiones.

Entender a la mujer latinoamericana hoy es una tarea que nos apremia a las mismas mujeres, no podemos hacerlo sin tener como principio básico el hecho de las diferencias, es decir, no todas las mujeres vivimos lo mismo, por lo tanto no todas narramos la misma historia sobre nuestra existencia. Necesitamos una lectura crítica de nuestro contexto, que permita identificar las pautas sociales que nos hacen ser como somos y una de éstas es la discriminación, hecho que se encuentra presente como una realidad palpable y que a la vez se gesta en procesos de ideologización que nacen y se alimentan en grupos de distintas índoles de nuestra sociedad, advirtiendo que nosotras mismas somos parte de esos espacios, y que a veces nuestra actitud respalda la conformación de ideas discriminatorias. Por ejemplo, un silencio inoportuno puede permitir que

Cirm

En distintos espacios de la vida humana hemos hablado del lugar que las mujeres tenemos dentro de los escenarios sociales, políticos, religiosos; pareciera que no quedan dudas sobre nuestra presencia activa dentro de las esferas sociales  .

3


Cirm

Una reflexión de mujeres

4

personas de nuestro entorno abanderen creencias sobre valores que de fondo transgreden la convivencia humana; con esto queremos decir que algunas de las situaciones que fomentan la discriminación provienen de las creencias que subyacen tras nuestras acciones, pero estas toman fuerza, sin duda, en nuestros espacios inmediatos y de mayor convivencia. En México, el Consejo Nacional para Prevenir la discriminación, describe así dicho fenómeno: “La cultura dominante, a lo largo de la historia, ha dado a las mujeres un papel de subordinación en una visión masculina que las deja sin derechos, poder y prestigio. Se les ha conferido la responsabilidad única de la reproducción y el cuidado familiar. Las sociedades modernas se identifican con los ideales democráticos de igualdad y libertad, sin embargo, en el espacio familiar funcionan principios tradicionales que sirven como ancla de formas autoritarias y discriminatorias. Estos valores que se aprenden dentro de la familia, se practican y reproducen fuera de ella, dando una continuidad acrítica a la dominación del hombre en contra de la mujer” (Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación s.f.). Como hemos dicho, organizaciones civiles, religiosas, gubernamentales promueven prácticas que permitan la participación de la mujer en la vida social, económica, productiva y política de su país, sin embargo, distinguimos que aún cuando las mujeres tengamos mayor incidencia en la vida social, esto no asegura una sana convivencia con el otro. La discrimación es un hecho que va más allá de una cuestión cultural, no está situada solamente en América Latina, sin embargo, de las implicaciones que ésta trae

para la mujer latinoamericana, algunas sí son de tipo cultural y atentan contra el sentido de vida que tenemos; por ejemplo, las formas de convivencia con los varones adquieren cada vez características de competencia: Nos hemos comprado la idea de la rivalidad y no de complementariedad. Todavía encontramos varones que cierran la puerta a la experiencia de confiar a las mujeres un liderazgo laboral… frecuentemente en espacios parroquiales constatamos que existe menor número de mujeres en actividades de coordinación, a pesar del índice notoriamente mayor de su participación. Concretamente en México es notable una multiplicada discriminación en este mismo ambiente: Por una parte, se la discrimina por ser mujer y por ser laica. En el campo de la Vida Consagrada también es subvalorada y menospreciada su aportación, a pesar de la capacitación que pueda tener. Si la mujer, consagrada o laica “se atreve” a transitar por el campo de la teología, su


Frente a esta situación, como mujeres nos parece necesario preguntarnos: ¿Qué elementos necesitamos incorporar a nuestra reflexión teológica, para fomentar una cultura que detecte y erradique actitudes de discriminación hacia las mujeres?  aporte se mira con desconfianza, se minimiza o se la ridiculiza… Es innegable que el fenómeno discriminatorio se gesta en los ambientes familiares, comunitarios, educativos y llega hasta otros escenarios de la vida social, convive con nosotros a diario y podemos incluso dejarlo pasar, ya que hemos creado un filtro de “naturalización” que nos permite asimilar como ordinarios y aceptables, los hechos que están deteriorando la convivencia humana. Frente a esta situación, como mujeres nos parece necesario preguntarnos: ¿Qué elementos necesitamos incorporar a nuestra reflexión teológica, para fomentar una cultura que detecte y erradique actitudes de discriminación hacia las mujeres? Como sabemos, a la reflexión teológica, le corresponde no menos que tener en cuenta el contexto en el que transcurre la existencia humana, pues es ahí donde Dios se manifiesta y en donde se teje la historia de Salvación. Ésta requiere de interpretaciones que permitan al hombre y a la mujer la posibilidad de compartir con dignidad;

de ese modo los obispos de América Latina han mantenido sobre la mesa de la reflexión constante, la realidad de muchas mujeres:“En esta hora de América Latina y El Caribe, urge tomar conciencia de la situación precaria que afecta la dignidad de muchas mujeres. Algunas, desde niñas, son sometidas a múltiples formas de violencia dentro y fuera de casa: tráfico, violación, servidumbre y acoso sexual; desigualdades en la esfera del trabajo, de la política y de la economía; explotación publicitaria por parte de muchos medios de comunicación social, que las tratan como objeto de lucro” (Aparecida Núm. 454). Consecuentes con tal reflexión, nuestros obispos, en el mismo documento, levantan la voz a favor de las mujeres: “Proponemos algunas acciones pastorales: a) Impulsar la organización de la pastoral de manera que ayude a descubrir y desarrollar en cada mujer y en ámbitos eclesiales y sociales el “genio femenino” y promueva el más amplio protagonismo de las mujeres. b) Garantizar la efectiva presencia de la mujer en los ministerios que en la Iglesia son confiados a los laicos, así como también en las instancias de planificación y decisión pastorales, valorando su aporte. c) Acompañar a asociaciones femeninas que luchan por superar situaciones difíciles, de vulnerabilidad o de exclusión. d) Promover el diálogo con autoridades para la elaboración de programas, leyes y políticas públicas que permitan armonizar la vida laboral de la mujer con sus deberes de madre de familia” (Aparecida Núm. 458). Ante la iniciativa de los obispos en Aparecida, que invita a ser conscientes de las

Cirm

Una reflexión de mujeres

5


Una reflexión de mujeres situaciones que afectan a la dignidad de las mujeres, consideramos de peso la responsabilidad que tenemos las mujeres que, formal o informalmente, proponemos en nuestros espacios, una experiencia de Dios, una reflexión teológica.

Cirm

Mujeres, en un contexto de discriminación Frente a la cuestionante que nos hemos planteado, proponemos algunas respuestas que surgen a raíz de nuestra experiencia junto a otras mujeres que compartimos la misma inquietud: ¿Cómo provocar experiencias de Dios en lo cotidiano que logren relaciones dignas entre hombres y mujeres? ¿Cómo acceder al Dios que Jesús experimentó como Padre de hombres y mujeres? En nuestros espacios de reflexión cotidiana: ¿Dónde debemos colocar el acento? Estas preguntas forman parte de una sola cuestión, intentamos por ello proponer algunas respuestas:

6

a. Las mujeres tenemos el compromiso de una experiencia de Dios que nos inquiete la dignidad: Experimentar a Dios es una realidad que tocamos todos los días a través de distintos medios como son la relación con la otra, el otro, con la naturaleza, con la comunidad, y de forma particular a través de nuestra propia vida. Desde la propia historia es donde Dios nos habla y para la propia historia es su Palabra, por ello, necesitamos recuperar la función de dos mecanismos que nos ayudan a las mujeres para escuchar la Voluntad de Dios: sensibilidad e indignación. Necesitamos volvernos a los sentidos y es-

cucharnos a nosotras mismas a través de ellos. Las mujeres corremos el riesgo de olvidar la sabiduría que nos otorga nuestro sexto sentido, que si bien es cierto, no es quizá científicamente comprobable, más en la historia de nuestras madres y abuelas descubrimos cómo esa sensibilidad les advertía cuando era necesario marcar un límite, cambiar una actitud o ayudar a alguien. Este sexto sentido ha sido también un indicador del peligro.

La indignación la hemos aprendido, a la mayoría no nos la enseñaron en la escuela, sino que pudimos ver hechos ante los que, algunas mujeres mostraban su rechazo y reprobación. Nos dimos cuenta que la mayor parte de estos hechos estaban relacionados con el agravio hacia una persona, fuera quien fuese... este juez interno nos iluminaba en el momento preciso en que debíamos detener un acto injusto, incorrecto. Es ahí donde la indignación nos llevaba a proponer una convivencia de equidad. Que Dios nos inquiete la dignidad, será posible siempre y


Una reflexión de mujeres

b. Dejar que Dios nos traduzca la dignidad en un proyecto de vida. Dios se manifiesta a través de la comunidad y es través de ella como hemos aprendido a vestirnos con el traje de la dignidad. Para muchas de nosotras el concepto de dignidad no es comprensible sino hasta que logramos salir de situaciones que nos han mantenido afectadas por mucho tiempo. A veces nos compramos la idea de tener lo que nos merecemos y por lo tanto, soportamos prolongadamente situaciones que no nos permiten ver, ni mucho menos vivirnos dignamente. Le permitimos a Dios que nos traduzca la dignidad a través de otras mujeres que nos ayudan a descubrir el plan que tiene para nosotras, cuando las mujeres contamos con un grupo de referencia podemos escucharnos mejor a nosotras mismas y hacer lectura de la propia historia, alejándonos del individualismo que promueve otros valores contrarios a la dignidad. c. Discernir la creencia de ser mujer. Hay creencias que apuntan que ser mujer es tener determinada estructura física, estar dispuesta al matrimonio, tener las habilidades domesticas destacadas o incluso sentir de determinada forma, esta es una creencia que limita y fomenta la discriminación ya que reduce nuestra posibilidad de desarrollo en otros ambientes, y desde otras actividades; esta es una de las situaciones que nos llevan a considerar como importante el discernimiento de nuestras creen-

Ser mujer es una experiencia que no está determinada o estandarizada, vamos siendo auténticamente mujeres desde lo que vivimos, sentimos e interpretamos  . cias, ya que nosotras mismas cooperamos en la fidelidad a ellas justificando así la discriminación que experimentamos. Discernir lo que es ser mujer nos permitirá aceptar, incluir y convivir con distintas formas de serlo. Ser mujer es una experiencia que no está determinada o estandarizada, vamos siendo auténticamente mujeres desde lo que vivimos, sentimos e interpretamos, por eso es importante reconocer y manifestar en nuestros propios espacios una cultura de discernimiento. Conclusión Ante un contexto como el que hemos descrito, descubrimos que nuestras reflexiones pueden ser discriminatorias cuando evitan abordar realidades como estas, en ese sentido vemos necesario incorporar criterios que permitan una experiencia de Dios basada en la experiencia de lo humano. Nuestra reflexión teológica tendría que descubrir esas experiencias cotidianas que construyen un entorno social de convivencia, distinguiéndolas de aquellas que definitivamente no lo hacen. La aspiración más grande que podemos tener es la de una reflexión teológica encarnada y transformadora de la realidad. Por lo tanto, las mujeres tenemos mucho por hacer.

Cirm

cuando contemos con el recurso tan subjetivo de la sensibilidad y la indignación.

7


Reflexión

Un carisma común

para una misión compartida. Laicos/as y Religiosos/as Hna. Ivonne Joubert Flores, stj

“A cada uno se le concede la manifestación del Espíritu para el bien común” (1 Cor 12, 7).

Cirm

C

8

ompartiendo algo de lo vivido y aprendido en el Seminario de Carisma y Laicado que organizó la CLAR en Octubre de 2011. Experiencia que en lo personal renovó y fortaleció mi fe y mi esperanza. En la teología del laicado y de la Vida Religiosa se abren nuevos horizontes, soplan nuevos aires. Los carismas, que el Espíritu Santo ha regalado a su Iglesia se recrean en la medida que los compartimos. Compartir del cuál emergerán nuevos rostros de Vida Consagrada y nuevos rostros de laicado. Se tiene la intuición de que entre re-

ligiosos/as y laicos/as van a surgir nuevas formas de vida cristiana. Se va a renovar la vitalidad de nuestros carismas.

En la teología del laicado y de la Vida Religiosa se abren nuevos horizontes, soplan nuevos aires. Los carismas, que el Espíritu Santo ha regalado a su Iglesia se recrean en la medida que los compartimos  .


Un carisma común para una misión compartida

1.- Coadjutoría o colaboración. Grupos más o menos organizados, o laicos individuales, que se reunían en torno al instituto garante del carisma, para contribuir al desarrollo de la misión del mismo. El instituto permanece todavía como expresión de la lectura privilegiada, o incluso única, del carisma. 2.- Misión compartida. Entraña un compromiso explícito con la misión del instituto: • Presupone un conocimiento de dicha misión y una profundización desde la perspectiva laical. • Comporta una corresponsabilidad más allá de los elementos de una actividad concreta. • Exige la pertenencia a una comunidad donde se alimenta, revisa y celebra la fe. • Prepara a una disponibilidad para asumir responsabilidades. • Despliega una apertura a una mayor vinculación con el carisma… Supone un paso más en el compromiso por ambas partes, permite que el

instituto continúe siendo garante (más o menos privilegiado) del carisma fundacional, pero también puede iniciar un proceso por el que surjan nuevas vocaciones específicas. 3.- Familias evangélicas. En este momento estamos hablando de un carisma sin instituto, entendido este como expresión privilegiada y única del carisma, porque el instituto, a pesar de ser en la mayor parte de los casos el proyecto fundacional, viene a convertirse en «una» prolongación más del carisma. Algunos institutos apuntan en esta dirección, aun cuando todavía no se haya consumado el proceso, porque no es fácil que existan diversos grupos de laicos institucionalizados que puedan realizar su propia lectura del carisma1. Uno de los fenómenos más llamativos dentro de la Vida Religiosa de nuestro tiempo, es la toma de conciencia del «carisma compartido». Este caminar está lleno de logros, dificultades, esperanzas y temores. Entre ellos podemos constatar en diferentes experiencias: Como logros • Trabajo y/o proyectos apostólicos entre religiosos y laicos. • Formación conjunta y relectura de la Espiritualidad y Carisma. • Los fundadores tuvieron la intuición del carisma expresado en la vocación laical.

1 Desafíos teológicos y pastorales de la misión compartida. M. Junkal Guevara Llaguno, rjm y Diego M. Molina, sj.

Cirm

Es necesario identificar los distintos modos de encarar la relación entre los laicos/as y los religiosos/as en el marco de un carisma común. Para realizar este análisis tomo como referencia un modelo que distingue tres modalidades posibles de compartir el carisma:

9


Un carisma común para una misión compartida • Proyectos institucionales guiados por laicos, con excelentes resultados. • Se ha tomado conciencia de que para vivir el carisma la oración es fundamental. • Participación de laicos en Capítulos, Constituciones, asambleas. • Experiencias de acompañamiento mutuo y complementariedad.

Cirm

Como dificultades • Falta de recursos económicos que sustenten la formación y proyección apostólica de laicos/as. • La resistencia de religiosos/as, laicos/as a los cambios que implica que el Carisma no es exclusivo de la Vida Consagrada. • Falta impulso de un trabajo de la vocación laical más acorde a los signos de los tiempos. • Faltan cauces de participación en las familias carismáticas. • Miedo de los laicos/as a tomar un compromiso formal. • Laicos/as que se forman y se van. • Inmadurez y falta de compromiso de religiosos/as y laicos/as.

10

Como esperanzas • Llegar a entender vivencialmente que el carisma encarnado en laicos/as y religiosos/as es vida nueva que emerge del Espíritu Santo. • El carisma perdura en el tiempo. Hondura evangélica. • Que lleguemos a decir NOSOTROS/AS porque somos UNO.

• Desde la vida carismática de los laicos/as se espera que surjan vocaciones para la Iglesia y el mundo. • Profundizar los niveles de vida comunitaria y de compromiso que llevan a la comunión de bienes acorde a la realidad. • Mayor compromiso laical en la transformación de la sociedad. • Fortalecimiento de la Familia Carismática. • Comunidades donde compartimos lo que somos, aprendiendo unos de otros. Algunos temores son • Poner una estructura religiosa a la vida laical, y a su formación. • Exceso de la autonomía de los laicos. • Fusión entre laicos/as y religiosos/as sin diferenciar la identidad y la autonomía de cada uno. • Riesgo de convertir esta experiencia en un experimento diseñado por nosotros y no por el Espíritu Santo. • Que el trabajo con laicos/as sea sólo por necesidad de la comunidad religiosa. • Resistencia a vivir relaciones más humanas y humanizadoras entre laicos/as y religiosos/as. Los cuestionamientos que rodean el tema son muchos, y nos los hacemos tanto los laicos/as como los religiosos/as: ¿Estamos entendiendo lo mismo? ¿Cómo ir dando pasos para que los caminos se iluminen desde la reflexión teológica y no desde la organización? En la Iglesia hay vino nuevo, ¿cómo favorecer la consolidación de


Un carisma común para una misión compartida

No hay duda de que estamos ante un movimiento del Espíritu, tenemos que dejar que siga soplando, escucharlo, dejarnos conducir  . Y también descubrimos lo que es diferente: • Llamada o vocación, tanto a la Vida Consagrada como a la Vida Laical. • Una consagración específica. • La misión es común pero los ministerios pueden ser diferentes y peculiares. • Proyectos de vida diversos. No hay duda de que estamos ante un movimiento del Espíritu, tenemos que dejar que siga soplando, escucharlo, dejarnos conducir. Nos llevará a donde no queremos y a donde no conocemos. Camino que laicos/as, y religiosos/as estamos a invitados/as a recorrerlo de forma conjunta.

Cirm

los odres nuevos?, ¿es posible una misión compartida, sin vida compartida, sin una verdadera metanoia?, ¿qué le aporta a Vida Religiosa, la espiritualidad laical? En este caminar nos vamos aclarando y descubrimos qué tenemos en común laicos/as y religosos/as: • Seguimiento de Jesús y la referencia al Reino. • Don carismático recibido. • Igual dignidad. • Consagración bautismal. • Participación en la transformación social en el mundo. • Participación y corresponsabilidad en la vida y misión de la Iglesia

11


Reflexión

Sé feliz: ¡Mujer eres! Hna. Hertha Hampl, fsps

Cirm

A

12

una mujer sensible hasta las lágrimas Jesús toca su corazón en la  primera mañana de la resurrección: “Mujer, ¿por qué lloras?” Es el preámbulo para después llamarla por su nombre: “¡María!” Podemos sacar múltiples conclusiones de esta palabra de Juan (Jn 20, 15-16). Para mi objetivo, basta con una y, como es muy clara, quiero dejarla a tu interpretación personal. El escritor español Pérez-Reverte asegura haber “ahondado un poco más en su idea de que el gran héroe de nuestro tiempo es la mujer”. Me sorprendió como extra esta nota del periódico Reforma. Descubro en el escritor, libertad, apertura y valentía para expresar algo que tal vez no tenga demasiada resonancia en nuestra cultura.

Por otra parte, si la mujer quiere responder con dignidad humana y evangélica a la misión recibida de Dios Padre desde lo alto y a todo lo que se espera de ella, necesita antes que nada vivirse con realismo y conciencia crítica, de cara a una realidad patriarcal con hondas raíces ya existentes en la cultura, durante siglos. Al decir “dignidad humana” digo física, psicológica y espiritual, porque sólo desde una armonía integral puede una persona trascenderse, sin necesidad de hacer ruido. El patriarcado que impregna el ambiente puede ser una postura consciente o inconsciente y, no se trata de quemar cartuchos en “darle coces al aguijón”. Simplemente no convertirlo en obstáculo. Le bastaría a la mujer, por el momento, con descubrir valientemente su papel y reconocerse corresponsable de esta falta de armonía existencial, que puede encontrarse en todas las realidades sociales; a veces sutil en la Iglesia, por lo tanto, menos fácil de enfrentar. A propósito, ¿habría armonía en el Sínodo sobre la Vida Consagrada, celebrado en 1994, cuando este estilo de vida está formado en gran número por mujeres y la presencia de éstas en ese evento eclesial fue mínima y además quienes asistieron lo hicieron en calidad de oyentes? Esta incongruencia tan común es el fruto de la forma de proceder que se ha venido haciendo una costumbre. Es la realidad y lejos


Sé feliz: ¡Mujer eres! lo importante. Tu fuerza y tu proyección seguirán sin tener límites, como no los tiene la hondura del gran misterio de tu persona. Ama y asume tu realidad femenina ante el varón, como una complementación indispensable. La integración y la complementariedad entre ambos es algo que desde siempre tu Dios pensó. Ésta dada la cultura patriarcal que nos envuelve, necesitas ser una conquista serena y digna. Siempre desde tu identidad, tu ternura, tu creatividad y tu capacidad de entablar amistad aun con aquello que sospechas como un obstáculo. Desde tu intuición penetras agudamente y brota

Mujer consagrada: estás a tiempo de reiniciar tu caminar por esta vereda del Evangelio, sea cual sea tu situación. Sigue expresándote y viviendo desde lo sustantivo: lo importante. Tu fuerza y tu proyección seguirán sin tener límites  .

Cirm

de paralizar, puede ser un reto verdaderamente entusiasmante. Hoy, ¿seguiremos aceptando pasivamente algo que no entra en el plan de Dios para la historia humana? ¿O revelarnos? ¡No! ¿Entonces, continuar siendo mano de obra barata? Creo que en muchos casos seguirá siendo la única opción. Pero ante la voluntad de Dios, amada, asumida y vivida responsablemente, urge dar pasos concretos, firmes y valientes. Revisar nuestra escala de valores y ubicar la preparación, en todos sus aspectos, como una prioridad irrenunciable. Si ya no es el momento de una preparación intelectual, tampoco es indispensable. En las palabras de Mercedes Navarro, religiosa mercedaria, podemos encontrar la clave para esta afirmación: “El varón habla principalmente sobre cosas importantes: negocios, economía, eficacia, placer, estadísticas, etc. La mujer, en cambio, habla sobre lo importante: prioridades, armonía, hondura, calidez en la relación” y, en algunos casos, pocas cosas más. En la expresión “lo importante” encontramos un sustantivo; la misma palabra “cosas importantes” descubrimos un adjetivo. El adjetivo puede estar o no, sin que falte el “ser” de la expresión. La mujer intuye y actúa motivada por lo sustantivo que la golpea constantemente. Tenga preparación intelectual o no. No obstante, puede tener la sabiduría del Espíritu Santo que es un don, claridad recibida gratuitamente. Mujer consagrada: estás a tiempo de reiniciar tu caminar por esta vereda del Evangelio, sea cual sea tu situación. Sigue expresándote y viviendo desde lo sustantivo:

13


Cirm

Sé feliz: ¡Mujer eres!

14

de ti un “plus” que manifiesta en tu entrega, la audacia, la finura y el olvido propio; también en la constancia, la pertenencia y la fidelidad. Todo este bagaje es típico de la mujer, quien cada vez más, va ubicándose y reivindicando su protagonismo, sin necesidad de opacar al varón, simplemente va respondiendo al llamado recibido desde el Génesis. Le corresponde también despertar en el otro sexo, el elemento femenino que él posee y que requiere para vibrar con ella, sin intentar utilizarla como un objeto. Y al mismo tiempo con su presencia, invitarlo para que descubra, acoja y valore el aspecto masculino que ella posee. ¡Qué fabulosa misión! Existe una realidad que nos sigue incomodando y sorprendiendo en los campos de la evangelización y de la vida: el predominio del varón y la complicidad de la mujer, con una actitud sumisa, cómoda y pasiva. Pero es un hecho que la mujer y en nuestro caso la consagrada, cuando es firme, silenciosa y sobre todo contemplativa, va ejerciendo su influencia benéfica en el otro sexo. Nos admira y alegra el triunfo de la acción del Espíritu Santo en los pasos decididos de un gran número de consagrados. Insisto, no tiene caso buscar culpables, pero sí responsables. Cada uno busquémoslos, porque nadie puede lavarse las manos. Yo, como mujer y reconociendo las grandes diferencias que nos caracterizan, me gozo en afirmar que ambos tenemos una misma dignidad: ¿seguiremos jugando el papel de sumisas, que no es lo mismo que flexibles y capaces de padecer los lentos pro-

cesos? ¿Seguiremos siendo “mano de obra barata”, porque nos devora la precipitación y la compulsión de responder a las demandas ajenas, y por lo tanto seguimos sin darnos el tiempo personal necesario para prepararnos, para rehacernos a fin de vivir con interioridad contemplativa, que es la que afina el amor y el servicio? La cantidad de mujeres que pueblan la Vida Religiosa es un valor, pero el número entra en la categoría de “cosas importantes”; “lo importante”, lo sustantivo es la calidad. ¿Para qué queremos masas, montones de gente, a veces vocacionalmente recolectada a base de una pesca? Necesitamos personas integradas, libres y capaces de valorarse, de amar y de dejarse amar, sí por Dios, pero también por sus creaturas. Querida hermana religiosa: ¡despierta! Necesitas abrir los ojos y aprovechar el llamado de Dios. Desde que te hizo mujer, te regaló con el bautizo su sacerdocio, y haciendo gala de su gran amor gratuito te llamó para “estar con Él” y para ser sacramento de su presencia en cada rincón y en cada persona. Podemos hacer nuestra la Palabra de Sofonías: “da gritos de júbilo, gózate y regocíjate de todo corazón”. “No temas, el Señor, tu Dios, está en medio de ti; te ama y se llenará de júbilo por tu causa”. No cabe la frustración, el desánimo y menos el seguir paralizada sin aprovechar el dinamismo al que te invita el Espíritu. Aprendamos la humildad, sí, pero también la libertad y la audacia de María de Nazaret. Como Ella, manos a la obra. El varón, el mundo actual y la Vida Consagrada cuentan contigo. ¡Eres mujer y te han llamado por tu nombre!


Reflexiones Reflexión

¿Para siempre?... Hno. Gustavo Llaguno Velasco, msps

H

ace poco tuve la dicha de acompañar en Ejercicios Espirituales a unos novicios que se preparaban para su primera profesión religiosa. Profundizamos diversos temas y todo iba caminando bien hasta que salió algo inesperado para mí. Yo cometí el error de escribir en una de las fichas de meditación “se van a preparar para su profesión perpetua”, en vez de haber escrito “…para su primera profesión”. En ese momento de manera unánime, los novicios reaccionaron y me dijeron “¡Nooo!, no nos espantes, si solamente es apenas la primera profesión”.

Eso me ayudó a palpar y profundizar la dificultad que tienen los jóvenes de hoy a comprometerse “para siempre”. Ellos se preparaban para hacer sus votos por un año, y yo les insistía que aunque fuera por un año, en espíritu deberían de hacerlos “para siempre”, ante lo cual parecía que les hablaba en “chino”. ¿Por qué la dificultad? ¿Se prepararon todo el noviciado sólo para probar un año y a ver qué pasa? Ya había escuchado que a las nuevas generaciones les es cada vez más difícil hacer compromisos de por vida, pero no lo había palpado

Cirm

“La Fidelidad es hija de la Correspondencia y del Vencimiento: es fruto del Dominio propio y la da el Espíritu Santo a las almas muy ejercitadas en las virtudes. La Fidelidad es hermana de la Perseverancia…” (Concepción Cabrera de Armida)

15


Cirm

¿Para siempre?...

16

tan cerca. Esta experiencia me ha dejado reflexionando y me ha movido a profundizar este tema que abordo en el presente artículo. Es un hecho que nuestra cultura está evolucionando y que los jóvenes van modificando sus características en las nuevas generaciones. Varios hemos escuchado sobre la cultura “líquida”, término introducido por el sociólogo polaco Zygmunt Bauman. Lo sólido siempre ha sido un elemento muy valorado por las generaciones anteriores y por las tradiciones de nuestras congregaciones religiosas. Por ejemplo, se valora que el religioso/a tenga una formación “sólida” (muchas veces se refieren a una formación fundada en Tomás de Aquino), nuestro sólido fundamento es Jesucristo, y que nuestros compromisos sean duraderos con cimientos sólidos que garanticen nuestra perseverancia. Pero ahora constatamos que lo sólido ha dejado de ser una característica de nuestra cultura occidental, especialmente en las generaciones más jóvenes; el elemento que las va caracterizando es lo líquido, lo que cambia de forma, lo que es flexible y volátil. Ante dicho fenómeno hay dos tipos de reacciones que se suelen dar entre la Vida Consagrada (VC): o se ve como un “problema”, o se ve como un “reto”. En el primer caso se mira de manera crítica dicho fenómeno y se le rechaza ya que se lee desde las categorías modernas de lo “sólido”, lo perenne; en el segundo caso no se rechaza el fenómeno, se le reconoce, pero se constatan muchos retos para nuestras congregaciones religiosas. Uno de esos retos consiste en que nuestras congregaciones

han sido diseñadas y constituidas en clave de solidez y no de liquidez; y no solamente nuestras congregaciones religiosas, sino también casi toda la estructura institucional eclesiástica. Así que nos enfrentamos a un fenómeno que no nos es fácil de aceptar, comprender, digerir e integrar. Recuerdo que hace unos cinco años se realizó una encuesta a jóvenes españoles que tenían contacto con religiosos/as, y en la presentación de los resultados de la encuesta se planteaba una pregunta: “¿Por qué los jóvenes, a pesar de valorar mucho a los religiosos/as, no optan por la VC?” Los resultados de la encuesta mostraban que los jóvenes realmente admiraban a los religiosos/ as con los que tenían contacto, ya que se realizó a jóvenes que estudiaban en colegios gestionados por religiosos o religiosas; uno de los elementos que impedían que los jóvenes optaran por la VC era la dificultad de hacer un compromiso perpetuo; sí eran capaces de cruzar el océano, ir a Asia, América Latina o África, ir de voluntarios a experiencias muy arriesgadas, pero sólo por un tiempo, para siempre, simplemente no. En nuestras Congregaciones Religiosas tenemos la concepción heredada de que, o se es religioso/a o no se es; no hay términos medios. O se es Jesuita, Salesiano, Misionero del Espíritu Santo, Comboniano, Franciscano, Misionera de la Caridad, Clarisa, Religiosa de la Cruz… o no se es; será otra cosa, pero religioso y religiosa no se es. Hace apenas once años aparecía un artículo de Clodovis Boff en la revista “Vida Religiosa” de los Claretianos, en la que escribía indignado por un fraile que hizo sus votos solemnes, y en menos de un mes después colgó


¿Para siempre?...

los hábitos. C. Boff decía… “¿qué es esto? Una broma o una payasada”. Tal vez en ese momento no se tenían los elementos de interpretación que tenemos ahora sobre lo que está pasando en las nuevas generaciones, pero realmente era desconcertante ver la reacción de un muchacho de una cultura líquida y abandonar su compromiso adquirido en un acto público derivado de una cultura sólida. Parecía algo esquizofrénico. Hoy en día es un tema cada vez más abordado en el contexto de la VC desde los promotores vocacionales, formadores, hasta las uniones de superiores/as generales. De hecho hace dos años la revista de Vida Religiosa de Chile, “Testimonio” dedicó todo su fascículo a dicha temática1. ¿Qué hacer como VC frente a dicho fenómeno nuevo? Me gustaría mencionar algunas de las recomendaciones que dan autores que abordan el tema, pero antes, hay una cosa que es indispensable como paso previo: lo primero que debemos hacer es intentar comprender el fenómeno, estudiarlo, abordarlo, y no juzgarlo, como solemos hacer los religiosos/as. No se trata de aplaudirlo o condenarlo en primera ins-

tancia, sino de reconocerlo, aceptar que existe y que debemos entenderlo mejor. Clodovis Boff, en su artículo titulado “La formación en la VR, hoy” a pesar de sus consideraciones “indignadas” se puso a reflexionar y trató de dar unas pistas. La primera de ellas fue afirmar el primado de la vida espiritual en nuestra vida; de ahí la necesidad que el religioso/a cuide muchísimo su vida espiritual a través del hábito constante de la oración personal a Dios. También se lamentaba que algunos religiosos/as ponen el fundamento de su consagración en la comunidad o en la misión, cuando, aunque son valores fundados de la VC, no son fundantes ya que “nadie puede poner otro cimiento que el ya puesto, Jesucristo” (1 Cor 3,11). Por último recomendaba formar bien al religioso/a para vivir los votos religiosos de castidad, pobreza-trabajo y obediencia. José Ma. Arnaiz en su artículo titulado: “Para hablar y ejercitarse en fidelidad”, constataba la realidad de fragilidad vocacional que existe hoy en día. No hay duda, que son más frecuentes de lo que parece, que los religiosos/as hacen votos perpetuos con la convicción íntima de que son por un tiempo.

1 Revista Testimonio, No. 228, Jul-Ago 2008, Santiago de Chile.

Cirm

Uno de los elementos que impedían que los jóvenes optaran por la VC era la dificultad de hacer un compromiso perpetuo; sí eran capaces de cruzar el océano, ir a Asia, América Latina o África, ir de voluntarios a experiencias muy arriesgadas, pero sólo por un tiempo  .

17


¿Para siempre?...

Cirm

No hay duda, que son más frecuentes de lo que parece, que los religiosos/as hacen votos perpetuos con la convicción íntima de que son por un tiempo  .

18

Los estudios sociológicos arrojan cuatro situaciones diversas que es necesario poner atención: 1. Los que salen después de un proceso serio de discernimiento vocacional que deja claro que ha llegado el momento para ellos de abandonar la VC. 2. Los que salen y no deberían salir. Al hacerlo, son infieles a una llamada que sigue estando presente y a una capacidad de respuesta que normalmente les debería permitir continuar en su respectivo Instituto Religioso. 3. Los que no salen y, sin embargo, deberían salir y, sobre todo, no deberían haber entrado. El caso de religiosos que no son felices, ni hacen felices a sus hermanos, no son fecundos para su persona ni para el Instituto. 4. Por último los que superan las crisis vocacionales y por lo tanto continúan de un modo renovado en la VC y de hecho han consagrado su fidelidad. Arnaiz menciona que la fidelidad es algo de lo que poco hablamos y no cultivamos lo suficiente. Hoy en día la fidelidad está “acosada” y es importante defenderla. Él plantea que hablar y ejercitarse en la fidelidad es posible, conveniente, necesario e indispensable.

Los artículos que contiene la revista Testimonio -que mencionamos líneas arriba- giran en torno a la necesidad de formar en la fidelidad, y a la importancia de acompañar a los religiosos/as especialmente cuando están en tiempos de crisis existenciales y/o vocacionales. Después de constatar el fenómeno, de intentar comprenderlo, de ver el reto que nos arroja a nuestras Congregaciones Religiosas y leer las recomendaciones y sugerencias que dan los autores, me quedan dos inquietudes que no alcanzo a resolver del todo y que en nuestros Institutos necesitaremos estudiar más a fondo. La primera inquietud la planteo con la pregunta: ¿qué tanto tenemos que educar a los que ingresan a nuestras Congregaciones para formarlos en la fidelidad del “para siempre”? La segunda inquietud es preguntarnos ¿qué tanto será necesario modificar nuestras estructuras institucionales (y conceptuales) para adaptarnos al nuevo fenómeno? No es fácil responder a semejantes interrogantes. Se me ocurre que necesitamos distinguir con mucha fineza entre el fondo y la forma. El camino del seguimiento de Jesús tiene elementos que son fundamentales y de por vida, a los que no podemos renunciar, por ejemplo: la fe y el seguimiento de Jesucristo, la colaboración en la construcción del Reino traducido en la lucha por un mundo mejor y la comunión eclesial. Me parece que eso es el fondo, pero la forma de hacer el seguimiento sí que puede variar. Posiblemente en nuestros Institutos Religiosos tenemos que plantearnos la posibilidad de abrirnos a diferentes modalidades de pertenencia e identidad religiosa. Hoy en día entendemos que o se es totalmente religioso/a y completamente perteneciente al Instituto Religioso o no se es ni se pertenece; ¿no


¿Para siempre?...

será necesario abrir diferentes niveles y modalidades de pertenencia? Me llama la atención que hay asociaciones laicales misioneras2 que se abren a esta posibilidad en donde hay laicos que están consagrados de tiempo completo a la misión, pero cuando no está en sus posibilidades, se pertenece a la asociación a diferentes niveles, algunos a medio tiempo, otros, los fines de semana y otros desde la oración, pero todos partícipes del mismo carisma y misión. Tal vez los religiosos/as tenemos que escuchar la creatividad de los laicos y abrir nuestras estructuras institucionales para hacer participar de los carismas dados, no por el Instituto, sino por el Espíritu. Posiblemente un Instituto Religioso pueda estar integrado por seguidores de Jesús desde un carisma compartido a través de una consagración definitiva, otros desde el ministerio sacerdotal, otros desde formas laicales de seguimiento, pero todos compartiendo una misión y una espiritualidad que les da identidad, más allá de las formas de hacerlo, o si es para siempre o por un tiempo.

Algunos autores dicen que ahora es el tiempo del Espíritu, y con mucha razón. Antes el paradigma era lo sólido, asemejándolo a Jesucristo como único fundamento verdaderamente sólido de nuestra fe; ahora parece que desde la categoría “líquida”, se trata de aprender a movernos, no desde un fundamento sólido e inmóvil, sino desde la liquidez del Espíritu de Jesús que es como el aire que no sabemos de dónde viene ni a dónde va. Volviendo a mi experiencia de Ejercicios Espirituales con los novicios, ante sus miedos del “para siempre”, fuimos dialogando que no se engancharan con ello sino que más bien dieran un paso de fidelidad para dejarse guiar por el Espíritu de Jesús, profesar para entrar en la batalla y en la lucha de seguir a Jesús como religiosos en el Instituto Religioso pero con los dos pies bien adentro. Los novicios hicieron su primera profesión y pido por su perseverancia y su fidelidad desde la liquidez del Espíritu de Jesús.

2 Por ejemplo los Misioneros Seglares Vicencianos (MISEVI).

Cirm

Ahora parece que desde la categoría “líquida”, se trata de aprender a movernos, no desde un fundamento sólido e inmóvil, sino desde la liquidez del Espíritu de Jesús que es como el aire que no sabemos de dónde viene ni a dónde va  .

19


Reflexiones

Aportes de la Vida Religiosa femenina después del Vaticano II Hna. Silvia Conde, sa

Ya antes del Vaticano se percibían signos, manifestaciones, búsquedas a nivel de la Vida Religiosa y de la teología que indicaban que algo tenía que cambiar en la Iglesia para dar libre paso al Espíritu y responder a la realidad social que vivía cambios acelerados  .

Cirm

S 20

i contemplamos la Vida Religiosa femenina a lo largo de su historia, podemos constatar la influencia recíproca del don carismático, y el don jerárquico en la Iglesia. Se puede apreciar una mutua interacción, una relación fecunda entre ambos. En ocasiones es el dinamismo evangélico de la Vida Religiosa el que lleva a cambios en las orientaciones de la jerarquía, y en otras son las iniciativas jerárquicas las que dinamizan la Vida Religiosa. El Concilio Vaticano II ha sido, sin lugar a duda, un ejemplo de ello. Este vital acontecimiento es un parte

aguas en la Vida de la Iglesia; con frecuencia hacemos referencia a él como antes y después del Vaticano II. Ya antes del Vaticano se percibían signos, manifestaciones, búsquedas a nivel de la Vida Religiosa y de la teología que indicaban que algo tenía que cambiar en la Iglesia para dar libre paso al Espíritu y responder a la realidad social que vivía cambios acelerados debidos a la postguerra después de la segunda guerra mundial, a revoluciones en diferentes lugares del mundo, a los avances tecnológicos, etc. Juan xxiii, sensible a


Aportes de la Vida Religiosa femenina…

La convocatoria de 10 religiosas a participar en el Concilio fue ya una señal de los nuevos aires que llegaban para la Vida Religiosa femenina  . sido tan cuestionada desde sus cimientos. Sólo ella, fundada en la roca que es Jesucristo, ha podido salir adelante, purificada, reconstruida, animada a caminar en el anuncio del evangelio. En las siguientes líneas intento recopilar el aporte de la Vida Religiosa femenina en estos 50 años de iniciado el Concilio Vaticano II. Religiosas auditoras presentes en el Concilio La convocatoria de 10 religiosas a participar en el Concilio fue ya una señal de los nuevos aires que llegaban para la Vida Religiosa femenina. Su participación alimentó procesos de innovación y experimentación. Se esforzaron por centrar de nuevo la Vida Religiosa en Cristo y su mensaje, subrayaron la dignidad personal de cada miembro de la comunidad, realzando la especificidad y el valor del ser mujer; apostaron por una nueva actitud de las religiosas frente al mundo, al cual debían abrirse para contrarrestar tantos problemas de injusticia, violencia y opresión (UISGNo. 150, 2012).

Cirm

toda esta realidad, inspirado por el Espíritu Santo como él mismo lo dijo, promulgó el Concilio Vaticano II para que la Iglesia dialogara con el mundo moderno: "Quiero abrir las ventanas de la Iglesia para que podamos ver hacia afuera y los fieles puedan ver hacia el interior" (Convocatoria al Concilio Vaticano II, 25 de enero 1959). Se necesitaba el “aggiornamento” de la Iglesia. La Vida Religiosa femenina también fue invitada a salir de sus conventos e ir hacia la gente, a dialogar con el mundo, a osar nuevas formas que le permitieran llegar más lejos y con mayor conocimiento y profundidad a las realidades humanas tan necesitadas del anuncio de la Buena Nueva. Se le pidió que relativizara las Constituciones y se abriera a la novedad del Espíritu, que regresara al soplo inspirador de sus fundadoras y fundadores para que este dinamismo evangélico fuera vivido en los contextos sociales del momento. Esta invitación fue seguida con gran entusiasmo por la Vida Religiosa en todas las latitudes; todo mundo se puso en movimiento. El trabajo postconciliar de renovación permitió a las congregaciones redefinir su identidad y vivir un tiempo de profundización espiritual y teológica. El revivir el valor, la energía puesta por las y los fundadores, su creatividad, su fortaleza para realizar la obra que el Espíritu les inspiraba animó a las congregaciones a discernir los nuevos caminos que se necesitaban recorrer para la evangelización en el mundo de hoy de acuerdo al carisma de cada congregación. Este movimiento causó una verdadera revolución en la Iglesia y en las congregaciones religiosas. Jamás una institución había

21


Aportes de la Vida Religiosa femenina…

En un barrio gitano en Andalucía me impresionó una placa conmemorativa a una religiosa que decía: `Gracias por haber querido vivir entre nosotros´ . Y en efecto, la Vida Religiosa femenina entró por estos nuevos caminos ya anunciados por las religiosas participantes del Concilio.

Cirm

De “estado de perfección” a seguidoras de Jesucristo La Vida Religiosa femenina dejó de poner el acento en estar en un “estado de perfección” para ponerlo en el seguimiento de Jesucristo, al servicio de Dios y del mundo: “Pasión por Cristo – Pasión por la Humanidad” (UISG, noviembre 2005). La Vida Religiosa no se entiende como un don personal, sino como un don dado a la Iglesia para servir al mundo. Este cambio nos ha invitado a no vivir los protagonismos y privilegios de antaño, a ser humildes y ponernos al servicio de los demás. La comunidad cristiana puede sentirnos y puede situarnos como hermanas.

22

La misión como centro de la vida cristiana Al entenderse la Vida Religiosa femenina como un compromiso de seguir a Jesucristo,

es la misión la que toma la primacía siguiendo al enviado por excelencia, Jesucristo. Es la vida de las personas la que importa antes que las estructuras y reglamentos: “El sábado está hecho para el hombre y no el hombre para el sábado” (Mc 2, 27). Este seguimiento no es exclusivo de la Vida Religiosa, es propio de toda vida cristiana. Comunidades de inserción – opción por los pobres Dialogar con el mundo, salir de los conventos. Las religiosas se desplazaron hacia las colonias populares con deseo de convivir con el pueblo para experimentar con él "sus gozos y esperanzas, sus tristezas y angustias" (Gaudium et Spes No 1) y hacerlas suyas. Ahí han sido testigos del amor misericordioso y compasivo de Dios. En América Latina se les conoce como “Comunidades Insertas en Medios Populares” cuyo influjo ha sido determinante en la evangelización popular apoyando y animando a las Comunidades de Base y la pastoral de conjunto. En un barrio gitano en Andalucía me impresionó una placa conmemorativa a una religiosa que


Aportes de la Vida Religiosa femenina…

Ir a lugares de frontera La Vida Religiosa femenina también experimentó ser llamada a lugares de frontera, a zonas liminares, ahí, donde está en juego la vida, la dignidad de las personas: la prostitución, la trata de personas, los migrantes, el mundo de las adicciones, las personas homosexuales, el acompañamiento de comunidades en zonas de conflicto armado, los organismos que defienden los derechos humanos, las que buscan defender la justicia, que buscan la paz, el trabajo en la promoción y liberación de la mujer, la defensa de la ecología. Su presencia y compromiso con estas realidades las ilumina con la luz de Cristo; anima y da esperanza a las personas que las padecen. Los iconos del samaritano y la samaritana ejemplifican la misión de la religiosa, de los cristianos y de las personas que se comprometen en estas realidades: “Mística y Profecía”. Una espiritualidad encarnada Esta presencia en medio del pueblo es sostenida por una fe unida a la vida cotidiana, una fe que ilumina la existencia con la Palabra de Dios. La Palabra de Dios ilumina la vida y la vida da sentido a la Palabra de Dios. Facilitar a las personas el acceso a la Biblia, a los evangelios, a los documentos pastorales; ofrecerles diferentes formas de oración, abrirles caminos de libertad en su relación con Dios les proporciona instrumentos valiosos para que ellos puedan vivir como personas adultas su compromiso cristiano.

En algunas comunidades religiosas la oración comunitaria se ha ampliado para compartirse también con la gente que rodea a la comunidad, con vecinas y vecinos encontrando en ello un mutuo enriquecimiento. Promoción y defensa de la mujer La marginación de la mujer, su exclusión en muchas esferas de la sociedad, la violencia y explotación de la que es víctima, la trata de personas que las utiliza como objetos que se venden al mejor postor ha tenido eco en el corazón de numerosas religiosas que han acudido en su defensa y en su ayuda. La respuesta de las religiosas a estas situaciones no es masiva, pues es un terreno difícil y delicado, por lo que la presencia de quienes acuden en su ayuda es como punta de lanza, como campana que llama a ocuparse de estas hermanas nuestras tan necesitadas. Inculturación del evangelio El conocimiento de la cultura de los pueblos a donde se es enviado es indispensable para la inculturación del evangelio. Las religiosas han tomado muy en serio este aspecto esencial de la vida humana siendo su aporte valioso en la vivencia cristiana de los pueblos. En ocasiones, aun teniendo deficiencia en el conocimiento de una lengua, su amor hacia las personas les comunica lo esencial, el gran amor de Dios por ellas. En una ocasión un sacerdote me decía: “No se vayan a llevar a esta hermana, en mi parroquia nadie ha hablado tan mal la lengua como ella, pero ella tiene lo esencial, ama a la gente, ellos y ellas lo sienten; sin duda ella es la

Cirm

decía: “Gracias por haber querido vivir entre nosotros”.

23


Aportes de la Vida Religiosa femenina…

No se vayan a llevar a esta hermana, en mi parroquia nadie ha hablado tan mal la lengua como ella, pero ella tiene lo esencial, ama a la gente, ellos y ellas lo sienten; sin duda ella es la mejor comunicadora de la Buena Nueva en mi parroquia  . mejor comunicadora de la Buena Nueva en mi parroquia”.

Cirm

Votos religiosos centrados en la misión Los votos han sido cuestionados y mal comprendidos por muchas personas. En ocasiones se comprende parte de sus críticas. Esta realidad ha llevado a la Vida Religiosa femenina a expresar y vivir en una nueva dimensión los votos religiosos de pobreza, castidad y obediencia. Pobreza: se subraya el aspecto del compartir, de la solidaridad, de una nueva gestión de los bienes de la creación. Castidad: se la ve como el desarrollo de la capacidad de amar, como lo hizo Jesús, sin reservas, sin exclusiones de ningún género, buscando el bien de los y las demás, ampliando nuestras tiendas a todo aquel o aquella que lo ne-

24

cesite. Obediencia: se comprende como una búsqueda responsable, compartida entre quién da la misión y quién la recibe; como una búsqueda conjunta de la voluntad de Dios para la persona y para el grupo. De más en más se habla del discernimiento como elemento indispensable para encontrar la voluntad de Dios: “tanto la superiora como la hermana se someten juntas al Espíritu” para encontrar lo que Dios quiere. Donde es posible este discernimiento se hace con la comunidad. En algunas ocasiones es conveniente ampliarlo al grupo de trabajo con quién se lleva a cabo la misión. Teología feminista La religiosa ha ingresado en terrenos antes vetados para ella, como es el de la teología. De más en más existen religiosas que se implican en este estudio. Ahora las encontramos como profesoras de teología, de ética, de espiritualidad habiendo llegado, inclusive, a dar clases y acompañamiento en los seminarios. Algunas de ellas han llegado a ser directoras de escuelas de Teología. La Teología feminista ha sido un terreno especialmente fecundo para la religiosa. Su sensibilidad, su experiencia de vida, su


Aportes de la Vida Religiosa femenina…

Lugar de la religiosa, de la mujer en la Iglesia La presencia de la Vida Religiosa femenina en el corazón mismo de la Iglesia, Pueblo de Dios, la ha invitado a buscar cada vez más, una participación activa y responsable en la pastoral de la Iglesia. Su lucha por ser reconocida e integrada no sólo en la realización de actividades, sino en la reflexión y programación de los proyectos parroquiales y diocesanos va abriendo caminos en este sentido.

La Teología feminista ha sido un terreno especialmente fecundo para la religiosa. Su sensibilidad, su experiencia de vida, su reflexión ha enriquecido esta Teología  . Compromiso social y político La consecuencia inmediata de la convivencia con las colonias populares ha sido el compromiso social y político. Al vivir con las

gentes y experimentar las injusticias que se ejercen sobre ellas, no pueden quedarse indiferentes ante sus luchas por la justicia, por los derechos humanos, por la paz con dignidad de las comunidades. Dejó de ser extraño el ver a alguna o algunas religiosas acompañando a la gente en sus marchas, en sus plantones, y si no es en las marchas es apoyando de otra manera estos movimientos. No es raro escuchar de parte de los marchistas: ¡Qué bueno que la Iglesia no nos abandona! Algunas religiosas han tenido el llamado para formar alguna ONG al servicio de los marginados; algunas congregaciones tienen representantes en la ONU para influir de alguna manera en las decisiones que afectan a poblaciones enteras. En comunidades de hermanas mayores este interés no decae buscando a través de firmas y pronunciamientos colaborar a un mundo menos injusto. Este compromiso ha sido causa de numerosos conflictos tanto eclesiásticos como civiles. Influencia de la religiosa en campos de la investigación y del saber La formación cualificada de la religiosa le permite entrar en diálogo con el mundo moderno, con la investigación científica en terrenos especialmente delicados como es la bioética y la genética, en la sexología, en el terreno de los Derechos Humanos y de la abogacía. Diálogo entre culturas – aceptación de las diferencias Dada la movilidad de la Vida Religiosa femenina hasta los confines de la tierra, la

Cirm

reflexión ha enriquecido esta Teología. En la actualidad ha logrado formar grupos de teólogas en diferentes continentes quienes con sus aportes ayudan a que esta teología se desarrolle y madure.

25


Aportes de la Vida Religiosa femenina…

En resumen, la Vida Religiosa femenina siendo una inspiración del Espíritu, don de Dios para la Iglesia y para el mundo, nos sorprende por su creatividad, valentía y osadía para hacer presente a Cristo ahí donde el Espíritu la envía  .

Cirm

hace presente en una gran diversidad de países, de culturas. Con ello ha ido adquiriendo sabiduría y conocimiento para entablar un diálogo con lo diferente, a no imponer sus puntos de vista, sus proyectos y programas. Ha aprendido a escuchar y a que se le escuche. Ha podido descubrir a Dios presente en toda cultura, en toda persona, en los diferentes credos y religiones. Su actitud respetuosa ha permitido que la Buena Nueva del evangelio pueda ser acogida por otras culturas.

26

Acogida de personas con opción sexual diferente La realidad lésbico-gay se pone cada vez más de manifiesto; sociedades y gobiernos se van pronunciando en su favor, en medio de controversias y de críticas. Algunas reli-

giosas se han sentido enviadas a estas personas para acogerlas y ayudarles a encontrar su dimensión de hijos e hijas amadas por Dios así como son. Hacer presente a Cristo donde el Espíritu la envía En resumen, la Vida Religiosa femenina siendo una inspiración del Espíritu, don de Dios para la Iglesia y para el mundo, nos sorprende por su creatividad, valentía y osadía para hacer presente a Cristo ahí donde el Espíritu la envía; siempre la encontraremos comprometida donde la comunidad humana sufre y clama al cielo: “El clamor de los hijos de Israel ha llegado hasta mí y he visto la opresión a la que los egipcios los somete. Ve, pues, yo te envío para que saques de Egipto a mi pueblo…” (Éxodo 3, 9).


Reflexiones

Desafíos

a la Vida Religiosa mexicana Juana Angeles Zárate Celedón, csc

H

ermanas y hermanos en el camino de seguimiento de Jesús miembros de la Junta Directiva de la CLAR y de la Vida Religiosa en México.

A manera de introducción: Me he permitido empezar esta participación, la cual agradezco, con las palabras de la declaración de misión de la Conferencia de Líderes de Mujeres Religiosas LCWR1. De la realidad histórica y del proceso de evolución hacia el proyecto de Dios como humanidad, es de donde emergen los desafíos, a modo de bendiciones de la Ruah divina, bendiciones que acompañan los pro-

cesos de transformación en Reino; así nos lo ha revelado la historia de salvación que ha sido y va siendo conducida por la pedagogía liberadora de la Trinidad, fuente de vida plena en el amor. Nuestro tiempo es sagrado pues le pertenece a Dios, y le pertenece a la humanidad que Él creó; el tiempo está consagrado para ofrecernos liberación y plenitud, así nos reconocemos en él y lo acogemos como espacio teológico de Revelación con una densidad profundamente teologal y humana. El presente es el tiempo de Dios, tal como lo percibía Santa Teresita del Niño Jesús cuando expresaba “mi vida es un instante,

1 FARREL Pat, Navegando los cambios, discurso presidencial de la LCWR 2012. Página web www.lcwr.org

Cirm

“Nuestro tiempo es sagrado, Nuestro liderazgo es un don y nuestros desafíos son bendiciones” Declaración de misión de LCWR

27


Cirm

Desafíos a la Vida Religiosa mexicana

28

una efímera hora, momento que se evade y que huye veloz. Para amarte, Dios mío, en esta pobre tierra no tengo más que un día: ¡sólo el día de hoy!2 En el hoy nos encontramos discerniendo los signos de su presencia para que nuestra lengua hable de la justicia de Dios3, justicia que es amor liberador y que nos coloca de cara con la injustica y frente a ese otro modo de existir, de interactuar, de gestionar. El futuro será esa cadena de tiempos de Dios, asumidos como kairós, y así tejeremos la historia de salvación pues el día le pasa el mensaje al día y la noche se lo susurra a la noche (Sal 19,3). Las realidades que acontecen en el tiempo y que son interpretadas por el ser humano a la luz de la fe, tienen un sentido místico que enlaza los presentes para constituir el futuro. La Vida Religiosa se reencuentra desafiada en su respuesta a este tiempo de Dios, no sólo desde el ámbito de la eficacia de una misión, sino desde la perspectiva de su proceso de evolución para dinamizar en fidelidad creativa su identidad carismática como tal y el de los carismas específicos de los diversos institutos de Vida Religiosa que han surgido como don del Espíritu para salir al encuentro de las necesidades de los seres humanos y ofrecerles liberación. Es en este tiempo y en este espacio, que estamos invitadas/os a reconocer el don específico de la Vida Religiosa para la Iglesia y el mundo, haciéndonos cargo del presente y del futuro desde lo que hoy nos toca hacer.

La Vida Religiosa se reencuentra desafiada en su respuesta a este tiempo de Dios, no sólo desde el ámbito de la eficacia de una misión, sino desde la perspectiva de su proceso de evolución para dinamizar en fidelidad creativa su identidad carismática  . Los desafíos que brotan de su identidad y misión, así como del tiempo que nos toca vivir como tiempo de liberación son bendiciones, abordaremos este tema desde la perspectiva de la berakah, oportunidad que da el Espíritu de ser bendición para la Iglesia y sociedad mexicana en esta hora de la historia y en ello encontrar el gozo de responder en fidelidad creativa y reencontrarnos con nuestro talante místico profético. 1. Desafíos desde el contexto mundial El contexto mundial nos brinda el primer escenario de discernimiento. Hay diversas maneras de estar en la realidad. El desafío cultural es quizá el más acuciante para la Vida Religiosa, porque en

2 Poema de Santa Teresa de Lisieux “Mi canto de hoy” en catholic.net. Obras completas de Santa. 3 Cfr. Sal 71,24.


Desafíos a la Vida Religiosa mexicana porque nos permite mirarnos en ese macrocosmos que cuestiona la pertinencia y eficacia de nuestra misión, y pone en entredicho nuestras opciones y criterios orientadores de vida como propuestas viables para la sociedad en su proyecto de alcanzar desarrollo y plenitud. Este desafío es a la vez una oportunidad para que entremos a las entrañas de nuestra propia identidad, de nuestras propias culturas y paradigmas como Iglesia y como Vida Religiosa; confrontarlas con las otras verdades del mundo, es tiempo de escucha, de aceptar los cuestionamientos que se nos hacen y formular nuestras propias preguntas, es tiempo de resolver y clarificar posturas, de decantar tradiciones y viejos paradigmas… es tiempo de gracia para recrear en fidelidad creativa la cosmovisión evangélico-carismática que se inserta en el principio de encarnación para los hombres y mujeres de hoy, transformaciones que nos instan hacia una Vida Religiosa humanamente significativa, pastoralmente elocuente y místicamente anclada en el proceso pascual del cambio de época5. Puntualicemos este contexto global, en lo que la realidad socio política mexicana plantea como desafíos a la Vida Religiosa presente en el país. Compartiremos con ustedes algo de nuestro contexto general de la situación de México, así como el eclesial y de Vida Religiosa.

4 Cfr. VELASCO YAÑEZ, Daniel, investigador del Departamento de Estudios sociopolíticos y jurídicos del ITESO en su

conferencia: Los desafíos a la Vida Religiosa desde la realidad sociopolítica en la semana de Vida Consagrada en Guadalajara Jalisco. 5 Cfr. RAMOS Gerardo Daniel, Cambio de época y la Vida Consagrada, Revista Vida Religiosa, Mayo del 2012.

Cirm

la base de nuestra comprensión de la realidad está una cultura concreta, una manera de ver el mundo y la vida que configura un estilo de vida y de opciones. Si bien es cierto que en décadas pasadas la cultura era aparentemente más homogénea, el mundo se ha convertido en una aldea global, tanto por la globalización como por la revolución de las redes sociales, a la vez que acomete contra las identidades particulares, al mismo tiempo las evidencia en su intento de asimilarla. Tal vez por eso hoy somos más conscientes de las diferencias y de esa suerte de resistencia y de lucha por valorar y conservar las propias cosmovisiones. Hoy por hoy no podemos hablar de una cultura sino de una diversidad de culturas que afloran y buscan su lugar en el mundo. Al interactuar, las culturas van confrontado sus valores concebidos como únicos desde sus cosmovisiones; este movimiento permite cuestionar lo considerado como único y lleva a replantearse la vida sobre nuevos criterios, de ahí el denominado cambio de época marcado por la crisis de valores ante la inoperancia de los sistemas clásicos de relaciones marcados por una cultura de globalización4 y de dominación-sumisión; esto nos hace ver cómo se van moviendo los valores hacia otro paradigma. De este cambio de paradigmas emergen los primeros desafíos que se nos presentan

29


Desafíos a la Vida Religiosa mexicana a las medias bajas e incluso a las bajas; la extorción llega hasta los comerciantes ambulantes a quienes se les piden cuotas de protección. La muerte, los secuestros y las extorciones nos han tocado a todos y todas, han maltratado a nuestras comunidades rurales, a nuestros colegios, instituciones de salud, parroquias, familiares e inclusive a hermanas y hermanos religiosos, dejando una estela de miedo y desconfianza. Las células delictivas están en el corazón de los pequeños poblados instaurando su 2. Desafíos que nacen del contexto control de muerte y destrucción. Algo realmente preocupante es que la vida de los general de la situación de México La realidad misma es muy compleja y sisté- narcotraficantes se convierte en aspiración mica, así como su interpretación evangélica para los niños/as y jóvenes que al no tener debido a la diversidad de factores que la oportunidades de educación, libertad y traconforman, al proceso de cambios vertigi- bajo sueñan con una vida fácil llena de lujos nosos y a la trama manipulatoria de los me- aunque sea breve y trágica, la vida relatividios de comunicación abierta a favor de zada frente a la riqueza y el poder. Sin duda el fenómeno del crimen organiintereses políticos. Sin duda la situación que más impacta zado tiene sus causas en otros viejos proen nuestro país es la INSEGURIDAD cuya blemas que nos aquejan en el país y que principal causa es el narcotráfico y el crimen están asociados entre sí de una forma sisorganizado, la lucha de territorio entre los témica. La delincuencia organizada ha tenido su diversos grupos delictivos y la estrategia Calderonista que nos ha golpeado con la gran aliado en una clase política, por un lado muerte de 70,000 personas y más de 25,000 obligada a delinquir bajo amenaza de muerdesaparecidos como cifras oficiales en el te o bien cínica que saca su provecho en ello y hace alianzas de poder y privilegios. reciente sexenio.6 La muerte, la delincuencia y la inseguri- Según algunas fuentes informativas, en el dad han llegado a todos los ámbitos de la sexenio pasado algunos funcionarios públisociedad mexicana y a través de todo su cos fueron auspiciados por grupos delictiterritorio, no sólo a las clases altas sino vos y eso era de conocimiento público.

Cirm

Compartiremos con ustedes algo de nuestro contexto general de la situación de México, así como el eclesial y de Vida Religiosa  .

30

6 Según los datos reportados por la SEGOB los desaparecidos en el sexenio Calderonista son 26,112 en

www.proceso.com.mx Otros datos al respecto se encuentran en blogs.cnnmexico.com del 26 de febrero de 2013 del 2013. Datos presentados en www.periodicodigital.com


Desafíos a la Vida Religiosa mexicana

Según el censo oficial del 2010 la población asciende a 112,336,538 mexicanos, de los cuales 46.2 millones son reportados en pobreza; 35.8 moderada y 10.4 en extrema  . que toman en cuenta para determinar el grado de pobreza son el rezago educativo, la carencia de acceso a servicios de salud,

de seguridad social, de calidad y espacios de vivienda y acceso a la alimentación; tomando en cuenta todo ello registran que 52,5 millones de mexicanos tienen un ingreso inferior al bienestar social. En fin, los datos duros no logran del todo reflejar el drama de la pobreza que viven millones de personas como fruto de un sistema económico neoliberal, en las franjas de miseria de nuestras grandes urbes, algunas poblaciones campesinas e indígenas, así como el de las clases medias y microempresarios que compiten contra las grandes empresas trasnacionales y que se resisten con creatividad y esfuerzo. Frente a la pobreza, falta de oportunidades educativas y laborales, siguen emigrando a USA miles de compatriotas en busca de mejores oportunidades de vida, junto con miles de hermanos/as centro y suramericanos engrosando la población indocumentada en el país vecino, a merced de las políticas migratorias de sus Estados. El fenómeno migratorio en México nos une y nos duele como continente, pues es de todos conocido el tránsito de dolor y vejaciones que conlleva este cruce en el que nuestros hermanos migrantes se ven amenazados por la delincuencia organizada y el maltrato de algunas autoridades. Junto a ello el abrazo samaritano de muchas/os ciudadanas/os, organismos no gubernamentales y religiosas/os que acompañan y reavivan sus fuerzas y esperanzas.

7 Datos obtenidos del Informe de Evaluación de la Política del Desarrollo social 2010, elaborado por el CONEVAL

instancia gubernamental, pág. 28.

Cirm

El inicio del gobierno Peñista el 1 de diciembre del 2012 quedó marcado por los disturbios de protesta y violencia, en estos primeros meses ha ido manifestando los viejos problemas del PRI y sus prácticas manipulatorias con aparentes logros a favor de la educación y de las clases más desfavorecidas, el ejército se mantiene en las calles en algunas zonas por estrategia temporal, y la ola de violencia no cesa. Una de las causas profundas de la delincuencia organizada es la pobreza. Según el censo oficial del 2010 la población asciende a 112,336,538 mexicanos, de los cuales 46.2 millones son reportados en pobreza; 35.8 moderada y 10.4 en extrema7. Los factores

31


Desafíos a la Vida Religiosa mexicana Junto a la pobreza y migración vemos ahora que muchos hogares se han desintegrado, y se están conformando nuevos modelos de familia, los jóvenes son bombardeados por los medios de comunicación, viven el hoy, se comunican a través de las redes sociales, faltan alternativas para ellos; son atrapados por la delincuencia. Otros tienen una palabra confrontadora ante la injusticia y la falta de oportunidades. Manifiestan una nueva sensibilidad a la ecología, la tolerancia, la inclusión y la paz. Hay jóvenes que son convocados y responden a la llamada del Evangelio comprometiéndose en diversos ámbitos sociales y religiosos.8

Cirm

Este problema emblemático sistémico nos plantea grandes desafíos. Nos ha hecho reconocer que la violencia tiene raíces que atraviesan todos los ámbitos, desde el corazón de la persona en la trama familiar hasta lo laboral y político  . 32

8 Cfr. Plan Trienal 2011-2014, pág. 5 CIRM. 9 Idem, pág.6.

En México la educación es cada vez más pobre y desigual. Hay un bajo desempeño escolar y se da una educación descontextualizada que no responde a los retos de la realidad. En las mujeres, los indígenas, los niños de la calle es donde se alcanza la mayor tasa de analfabetismo y de rezago educativo. Frente a esta realidad hay comunidades y maestros que están creando experiencias educativas acordes con el contexto y el compromiso ético.9 Este problema emblemático sistémico nos plantea grandes desafíos. Nos ha hecho reconocer que la violencia tiene raíces que atraviesan todos los ámbitos, desde el corazón de la persona en la trama familiar hasta lo laboral y político; la violencia nace de cosmovisiones antropológicas relacionales y sociales de desigualdad y donde hay desigualdad siempre va a suscitarse violencia. La crudeza de la realidad cuestiona los modelos culturales que marcan nuestras relaciones de fraternidad, autoridad-obediencia y colaboración o competencia con los otros carismas y ministerios en la Iglesia y en la sociedad; nos exige replantearnos nuestros modelos evangelizadores que no transforman vidas de acuerdo a los valores del evangelio y que en términos generales no impactan en la trama social y las decisiones políticas de bien común. Nos invita a colaborar en la recomposición del tejido social desde el fundamento antropológico y teológico de la dignidad del ser humano y a hacer procesos de deconstrucción de paradigmas culturales que despersonalizan e invalidan la dignidad del ser humano.


La Vida Religiosa queda desafiada a la escucha atenta, orante, inteligente y de fe de la realidad de nuestro país, al menos para evitar la ingenuidad que no siempre beneficia a los pobres y a veces nos hace cómplices de un sistema que puede ver bien nuestras obras de caridad, pero se incomoda frente a cuestionamientos de fondo del porqué de la pobreza, la inoperancia de nuestros sistemas legislativos, judiciales, laborales, etc. Ante el dolor de las muertes, de la corrupción e impunidad, en México han surgido varias manifestaciones de genuina resistencia que en su momento han dado luz y han cuestionado nuestro ser y quehacer como Vida Religiosa. Un antecedente, el Ejército de Liberación Zapatista EZLN que rescata los derechos del mundo indígena y nos plantea un modelo diferente de organización solidaria. El Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad y el profeta Javier Sicilia que ante el asesinato de Juanelo, su hijo, recoge el dolor de miles y miles de personas víctimas de la delincuencia organizada y de las políticas de estado, dolor que se volvió profecía, esperanza y lucha a favor de las víctimas de la violencia, movimiento que ha ido interactuando con todas las instancias necesarias para atender el grave problema de las víctimas de la delincuencia y la recuperación sel tejido social. El Movimiento YosSoy132, movimiento juvenil universitario que recoge las auténticas aspiraciones de los jóvenes y de todos los seres humanos de honestidad e inclusión a favor de los derechos de los mexicanos y unidos a otros muchos movimientos, bus-

can entretejerse a esas otras pequeñas o grandes luchas que denuncian la impunidad manifestándose a favor de la dignidad y los derechos humanos. Estos movimientos y muchos otros, en medio de sus ambigüedades, nos van mostrando y retando a tomar nuestro lugar emergente en esta trama social y eclesial desde nuestra identidad carismática. Aunque a lo largo de mi reflexión he ido presentado algunos desafíos, he de agregar otros que se han ido discerniendo en diferentes espacios de la CIRM: • Una lectura evangélica carismática de la realidad que impulse a desentrañar las redes de manipulación y enajenación que nos mantienen dormidas/os y temerosas/os y a veces como mudas/os ante la problemática del país. Ofreciendo buenos recursos evangelizadores, educativos y de salud pero que no siempre reconstruyen el tejido de relaciones desde la propuesta del Reino. • Despertar nuestro profundo talante profético que toma el riesgo de regresar al espíritu del desierto migrando a dónde hace falta la vida, la humanización, la re lacionalidad trinitaria, para hacer del desierto LUGAR DE DIOS. Desinstalarnos a ir a los nuevos lugares de frontera para abrazar con escucha compasiva al Dios que clama en las diversas realidades de muerte. • En ese salir al encuentro de los rostros desfigurados de nuestros hermanos, hemos de acoger los otros caminos que convergen en la lucha por reivindicar al se humano en su dignidad, hemos de abrirnos a lo que los otros carismas y ministerios

Cirm

Desafíos a la Vida Religiosa mexicana

33


Desafíos a la Vida Religiosa mexicana

Estos movimientos y muchos otros, en medio de sus ambigüedades, nos van mostrando y retando a tomar nuestro lugar emergente en esta trama social y eclesial desde nuestra identidad carismática  .

Cirm

eclesiales aportan a favor de los grandes problemas que nos aquejan, y hemos de extender nuestra tienda a otros grupos y religiones, articulándonos en redes a favor de la paz, de los migrantes, de la trata de personas, indígenas, jóvenes, mujeres y todos los grupos vulnerables en nuestro país. • A la luz de los movimientos emergentes de nuestro país, nos enfrentamos ante el desafío de tomar conciencia de la responsabilidad ciudadana frente a la toma de decisiones que atañen a nuestro pueblo, la solución no está solo en las polí ticas de estado, está en el seguimiento que podamos dar a los compromisos

34

adquiridos en cualquier servicio público y a que se respeten los derechos de los ciudadanos. En la Asamblea Nacional del 2011, Maricarmen Bracamontes10 hacía un recuento de los hechos vivido y nos hacía un pregunta lacerante, ¿dónde estaba la Vida Religiosa cuando la gente era secuestrada, asesinada, violentada?, nos señalaba que la vida está en las calles y nos invitaba a sumarnos a todos los esfuerzos que en ella se dan en la defensa de la vida y dignidad humana, desafío que hoy sigue resonando en nuestro caminar. Participar, desde nuestro ser y misión en la reconstrucción del tejido social, desde una nueva conciencia ciudadana, se convierte en un imperativo ético y vocacional, en un imprescindible aporte que la Vida Religiosa esta llamada a promover y fortalecer11. 3. Desafíos que nacen del contexto eclesial y de Vida Religiosa en México La Vida Religiosa en México está constituida por una gran pluralidad de institutos que desde sus diversas formas, carismas y servicios, enriquecen a la Iglesia. Algunas congregaciones son totalmente oriundas del país con sus propias espiritualidades y otras más, articuladas a las grandes familias de Vida Consagrada; contamos con institutos de origen europeo, principalmente español y francés, que nos han enriquecido con su presencia y extensión en nuestro país y que a su vez se han enrique-

10 Ponencia de la teóloga mexicana Maricarmen Bracamontes en la XLVI Asamblea Nacional de la CIRM realizada en

Tlalnepantla Edo. Méx. 2011.

11 Plan Trienal 2011-2014 de la CIRM.


Desafíos a la Vida Religiosa mexicana cido con vocaciones mexicanas de diverso origen urbano, campesino e indígena, muchas de ellas prestando su servicio evangelizador en México y otras muchas en otros lugares de sus congregaciones. De más de 400 institutos presentes en el país, conocemos a más de 10012 que son fundaciones mexicanas que en su mayoría han logrado extenderse por la república y en diversos países de Centroamérica, Suramérica, África, Asia y Europa. En la última reunión de las superioras generales llevada a cabo aquí en la CIRM, hicimos un sencillo ejercicio de localizar algunos rasgos que nos identifican13. Distinguimos que en general somos una Vida Religiosa misionera y en un buen porcentaje, desde la diversidad de nuestros Carismas, nuestras pastorales tienen un acento evangelizador prioritariamente en parroquias. Un menor porcentaje estamos insertas/os en el mundo campesino e indígena, favoreciendo servicios de salud y educación alternativas, así como en lugares y circunstancias de riesgo como el fenómeno migratorio, trata de personas, mujeres en situación de prostitución y centros de atención a personas víctimas de adicciones. También asumimos servicios clásicos de educación y salud, asilos, casas hogar atención a seminarios y casas de espiritualidad.

Esta doble acción no siempre ha sido fácil de realizar y se ha enfrentado a la diversidad de posturas al interno de la Vida Religiosa, eclesial y social causando división o indiferencia. Reconocemos que muchos de nuestros esfuerzos por vivir la pasión por Dios y por la humanidad, desde nuestros carismas específicos, no siempre han sido eficaces en la transformación de las realidades temporales, desde la propuesta del Reino de Dios.14 En su conjunto, nuestra diversidad también se manifiesta en los diferentes modelos eclesiales y de Vida Religiosa que determinan nuestras presencias, estilos y opciones. Hemos sido testigos también de las búsquedas y transformaciones de algunos institutos que han evolucionado con radicalidad su misión en la Iglesia haciendo reestructuraciones en todos los ámbitos de su vida y misión. La CIRM convoca y anima una sana unidad en la diversidad, ofreciendo instancias de formación, reflexión y discernimiento de llamadas y respuestas comunes, desde nuestra identidad al servicio de la Iglesia mexicana15. La Vida Religiosa inmersa en el caminar común en América Latina y el Caribe, ha venido reflexionando, discerniendo y animando nuestra identidad y misión, en este cambio de época que nos va planteando nuevos

mayo del 2010.

13 Reunión semestral de superioras generales que se llevó a cabo el 15 de febrero del 2013 con el tema “Identidad y

desafíos de la VR mexicana”.

14 Plan Trienal 2011-2014 CIRM, pág. 7. 15 Ibid, pág. 6.

Cirm

12 95 congregaciones femeninas estaban inscritas en la UISG en el 2010, según la plenaria que se llevó a cabo en Roma,

35


Desafíos a la Vida Religiosa mexicana

Cirm

desafíos de cara a nuestra realidad, la del mundo y país nos invitan a escuchar a Dios en los nuevos escenarios y sujetos emergentes, donde la vida clama16. Somos conscientes que en esta hora de la historia, el cambio de paradigmas es parte del proceso de revitalización de todo lo institucional y sistémico. Las problemáticas que detectamos al interno de la Vida Religiosa, nos revelan la imperante necesidad de revisar estructuras, valores y opciones personales e institucionales que no respondan a la esencia de nuestra identidad y a los desafíos de un pueblo que necesita descubrir a Dios en medio de su vida y recorrer caminos de autenticidad y liberación, caminos que han de ser recorridos al interno de la Vida Religiosa que sufre los embates del consumismo, el individualismo y falta de radicalidad en la vivencia de sus votos y la desintegración psicoemocional de algunos de sus miembros17. Si bien es cierto que nos agobia el escaso personal con que contamos para atender a nuestras obras pastorales, las pocas vocaciones y el elevado promedio de edad que avizora y exige un ineludible discernimiento de nuestra acción pastoral, consideramos que es la hora del Espíritu para enfrentar de fondo situaciones que requieren ser transformadas hacia los siguientes desafíos y que han sido tomados como tales en el plan trienal 2011-2014 de la CIRM18:

36

16 Ibid, pág. 7. 17 Cfr. Ibid, pág. 7. 18 Plan Trienal 2011-2014 CIRM, págs. 7-8.

Teresa de Lisieux.

– La humanización de nuestros estilos de vida, estructuras y misión. Ofrecer la buena noticia de una salud integral a los miembros de nuestras instituciones, desgastados por la misión y estructuras inadecuadas que pueden llevar a la muerte. – La organización de la Vida Consagrada, al interno de las congregaciones y la conformación de redes de solidaridad, haciendo existencial el principio de la

Las problemáticas que detectamos al interno de la Vida Religiosa, nos revelan la imperante necesidad de revisar estructuras, valores y opciones personales e institucionales que no respondan a la esencia de nuestra identidad y a los desafíos de un pueblo que necesita descubrir a Dios en medio de su vida  .


Desafíos a la Vida Religiosa mexicana

Una invitación del Espíritu a evidenciar la minoridad evangélica de la Vida Religiosa

haciéndola resurgir del anonimato por su significatividad como propuesta de alternancia de valores contraculturales pero profundamente humanos y humanizadores. Es tiempo de asumir nuestra pobreza como itinerario espiritual de radicalidad evangélica, fermento de una Iglesia renovada y centrada apasionadamente en Jesús. Hacer de la Vida Religiosa un sujeto minoritario, humilde, pero emergente, coprotagonista de la transformación eclesial y social que requiere nuestro mundo. Este contexto y los desafíos que emanan de él nos invitan a estar vigilantes para vislumbrar los signos de vida que nos están manifestando que algo nuevo está naciendo, devolviéndonos el sabor de presencia profética y alternativa para la Iglesia y la sociedad. 4. Lo realizado en la CIRM como respuesta a estos desafíos Haciendo eco del lema de la CLAR, de escuchar a Dios donde la vida clama, la CIRM ha ido impulsando a la Vida Religiosa Mexicana a dar una respuesta que transfigure la realidad de violencia desde una opción por la paz. Nuestras asambleas nacionales han tomado este tema para su profundización y el discernimiento de estrategias, instando a participar en las manifestaciones públicas a favor de la paz identificándonos como Vida Religiosa y a unirnos a todas las iniciativas ya sean eclesiales o sociales que se pronuncien a favor de ella. En esta misma línea se ha activado la Comisión de Justicia, Paz e Integridad de la Creación quien en forma de red con las congregaciones que están trabajando en

Cirm

unidad en la diversidad desde la intercongregacionalidad. – La apertura a una auténtica eclesialidad de comunión donde respetemos e impulsemos la diversidad de carismas y ministerios. Luchando valientemente contra toda exclusión. Creando lazos de diálogo, reconocimiento, valoración y dignificación de la Vida Religiosa femenina y masculina en las Iglesias locales. Es necesario escuchar el grito de opresión de la vida de institutos diocesanos que se someten a estructuras machistas y clericales para poder sobrevivir. – La valoración e inclusión de la riqueza de las vocaciones laicales a quienes el Espíritu les confiere carismas para la misión y espiritualidad compartida. – Una sólida formación humanística y teológica a las hermanas y hermanos, que contribuya a la reconstrucción del yo interior para ser testigos del poder transformador de Dios. – La formación de la Vida Religiosa femenina, formar a la religiosa de hoy para el mundo de hoy asumiendo nuevos liderazgos que favorezcan la intercongregacionalidad y las redes. – Una honda espiritualidad evangélica y carismática que trascienda nuestras plegarias y se haga principio de vida desde la coherencia de la ética cristiana. Bebiendo del manantial transformador de la Palabra de Dios en las Sagradas Escrituras y en las sagradas realidades de nuestro pueblo.

37


Desafíos a la Vida Religiosa mexicana

Cirm

esta línea, orientarán nuestro ser y quehacer desde este eje temático. Otra de las prioridades que ha tomado la CIRM ha sido la intercongregacionalidad y las redes, al respecto ha ofrecido en diferentes instancias una concientización y profundización sobre este signo de los tiempos, sus implicaciones y sus alcances, tanto en la asamblea nacional como en las asambleas semestrales de superioras mayores y delegadas. En estas instancias se ha impulsado la conformación de redes. Actualmente tenemos tres que se han configurado con mayor solidez: La primera de ellas es la RED DE EDUCACIÓN CIRM que surge en el 2010 a raíz de un análisis de la realidad y del reto de ofrecer una educación transformadora de la misma. La decisión de una hermana de asumir la coordinación de renovados esfuerzos por unir fuerzas y hacer un planteamiento educativo católico transformador, dio inicio a esta novedosa experiencia para las congregaciones que ofrecemos

38

Es tiempo de asumir nuestra pobreza como itinerario espiritual de radicalidad evangélica, fermento de una Iglesia renovada y centrada apasionadamente en Jesús  .

educación en el país. Esta red nos ha ofrecido el abrir este otro modo alternativo de compartir sabidurías y recursos en torno al aprendizaje situado y en búsqueda de modelos educativos transformadores; alrededor de ello han realizado el Primer Congreso de la Red de Educación de la CIRM con la asistencia de más de 1000 participantes entre maestras/os y religiosas/os con el tema “Educar y transformar, tejiendo una nueva realidad”. La RED DE PASTORAL MISIONERA que está integrada por congregaciones que colaboran en la misión evangelizadora y que van configurando sus vínculos, acciones y necesidades conjuntas. La RED DE JUTICIA, PAZ E INTEGRIDAD DE LA CREACIÓN en búsqueda de fortalecer sus acciones a favor de la paz y ser fermento de animación en este aspecto a toda la Vida Religiosa. En proceso hay discernimientos de otras posibles redes como la de salud, la de formación y la de comunicación. Este esfuerzo conlleva otra acción que se ha ido realizando en la CIRM que ha sido impulsar la formación de nuevos liderazgos que promuevan el cambio de paradigmas, la inclusión y el trabajo en común, a ello ha dedicado algunas de sus asambleas semestrales de superioras generales y mayores. Por otro lado, los lineamientos asumidos nos han llevado a revisar y replantearnos las ofertas formativas que ocupan mucho del dinamismo de la CIRM. Contamos con el INTER que ofrece la formación inicial; el CET Centro de Estudios Teológicos a nivel licenciatura; Escuela de formadoras/es y la formación permanente a través de talleres, semanas de Vida Consagrada, nuevas gene-


Desafíos a la Vida Religiosa mexicana

5. Lo que falta por hacer Me parece que son muchos los desafíos que hoy enfrenta la Vida Religiosa mexicana, he-

Otra de las prioridades que ha tomado la CIRM ha sido la intercongregacionalidad y las redes, al respecto ha ofrecido en diferentes instancias una concientización y profundización  . mos querido responder a algunos de estos retos pero, aún nos falta mayor convocación para poder identificarnos como Vida Religiosa mexicana en su talante de comunión místico profética. Se abre un horizonte siempre abierto para asumir este tiempo como sagrado, nuestro liderazgo como un don y nuestros desafíos como una bendición. Nos toca sostener y dar continuidad a los procesos iniciados, aunque no tengamos todas las respuestas pero sí la certeza de que algo nuevo está naciendo y nuestra esperanza es parte de ese compás de espera que va detectando esos nuevos signos y los va alimentando. Viene a bien terminar este humilde aporte con el poema de San Juan de la Cruz

Se abre un horizonte siempre abierto para asumir este tiempo como sagrado, nuestro liderazgo como un don y nuestros desafíos como una bendición  .

Cirm

raciones, triduo teológico. Se está trabajando en un proceso de articulación de las diferentes escuelas bajo un mismo modelo formativo desde la identidad y misión de la CIRM con la finalidad de formar a las/los religiosas/os para el mundo de hoy. Promueve la formación y reflexión nacional a través del boletín bimestral de Informativo CIRM y de la página web. Por último, la Junta Directiva Nacional ha ido impulsando un proceso de reestructuración en la CIRM para poner su organización y estatutos al servicio de las prioridades y lineamientos de la misma. Reestructuración que ha implicado nuevos planteamientos organizativos que atraviesan los diversos departamentos que la conforman como el de Regionales, Comunicación, Formación, Secretariado permanente y Economía, éste último departamento ha ido colaborando fuertemente en la actualización y formación de la Vida Religiosa en el ámbito propio con la asistencia de más de 500 participantes en sus cuatro reuniones anuales, implicarles en el dinamismo místico profético ha de ser una tarea permanente de este departamento.

39


Desafíos a la Vida Religiosa mexicana en la subida al monte como camino de perfección, de unión con Dios y con su proyecto liberador, camino que nos invita a adentrarnos en el misterio del desasimiento y con-

fianza total en el paso liberador de Dios. "Porque todo el que quiera salvar su vida, la perderá; y todo el que pierda su vida por causa de mí, éste la salvará" "Lc 9, 24-25".

PARA POSEER AL TODO “Para venir a gustarlo todo, no quieras tener gusto en nada. Para venir a saberlo todo, no quieras saber algo en nada. Para venir a poseerlo todo, no quieras poseer algo en nada. Para venir a serlo todo, no quieras ser algo en nada. Para venir a lo que no gustas, has de ir por donde no gustas. Para venir a lo que no sabes, has de ir por donde no sabes. Para venir a lo que no posees, has de ir por donde no posees. Para venir a lo que no eres, has de ir por donde no eres. Cuando reparas en algo,

dejas de arrojarte al todo. Porque para venir del todo al todo has de negarte del todo en todo. Y cuando lo vengas del todo a tener, has de tenerlo sin nada querer En esta desnudez halla el Espíritu su descanso, porque, no codiciando nada, nada le fatiga hacia arriba, y nada le oprime hacia abajo, porque está en el centro de su humildad. Porque, si quieres tener algo en todo, no tienes puro en Dios tu tesoro”. 25 de febrero del 2013 - México, D.F.

Q

ueremos darte voz, y por eso en el

Cirm

ponemos a tu disposición   una nueva sección: “Voces nuevas” a donde podrás mandarnos artículos, poemas, pensamientos, propuestas, reflexiones, oraciones, etc. y todo lo que de tu imaginación salga y que pienses puede ayudar a que la Vida Religiosa en México sea verdadera sal de la tierra y luz del mundo.

40

Envía tus archivos al Departamento de Comunicación, por fax al 01.55.56.04.95.55 o al correo: comunicacion@cirm.org.mx, con atención al Hno. Sergio Argüello Vences, ssp.


Palabra, Espíritu y Vida

¡Necio, esta misma

noche se te reclamará la vida! (Lc 12, 13-21)

M

ientras Jesús camina hacia Jerusalén, aprovecha para enseñar a los discípulos y a la gente que lo buscaba para escucharlo. Le plantean preguntas, quieren oír una palabra que ilumine las cuestiones importantes de la vida, cuestiones que son también las nuestras. Uno, de entre la muchedumbre, le pide que sea juez en el pleito por una herencia. A la muerte del padre, su hermano se había pro-

bablemente quedado con todos los bienes dejándolo sin un quinto. Podemos imaginar la rabia que guardaba en el corazón por lo que era, sin sombra de duda, una injusticia. Se apela a Jesús, el maestro sabio, el profeta que no tiene miedo de decir la verdad, para que se encargue de convencer al hermano de cederle la parte que le toca. Lucas es muy atento a la relación que establece el creyente con los bienes de la

Cirm

Isingrini Virginia, mmx

41


¡Necio, esta misma noche…

Cirm

tierra. Es una relación imprescindible. No sólo estos bienes son necesarios, sino que son signo de la bendición del Señor. Sobre todo el don de la tierra es el don por excelencia concedido al pueblo para que no olvide que debe su existencia a la benevolencia de Dios. Pero desde los orígenes la tierra fue objeto de contiendas. Abraham y Lot se pusieron a discutir cuando se trató de repartirse aquellas inmensas extensiones de territorio. Con tal de salvar la fraternidad, Abraham dejará que el hermano escoja la parte mejor y él se irá hacia el desierto. Pero Lot, sin saberlo, escogió la propia ruina porque ahí surgían Sodoma y Gomorra destruidas luego por fuego y azufre. La historia sagrada nos hace ver como el deseo de tener para sí lo que es un don entregado a todos, acaba por socavar desde la raíz toda relación. Los bienes se convierten en ocasión de odio, de guerras y destrucción. Por eso, Jesús no responde a la petición de hacerse juez en una contienda de herencias, sino que quiere poner de manifiesto el verdadero mal que se oculta detrás de

42

Jesús no condena la posesión en cuanto tal, sino la ilusión de encontrar allí la seguridad, la fuente del propio valor  .

esta solicitud. Denuncia el afán de poseer cada vez más: aquí radica el error, la mentalidad de la que son víctimas ambos contrincantes: «Miren y guárdense de toda codicia, porque, aunque uno posea abundantes riquezas, éstas no le garantizan la vida». La parábola que sigue no hace más que ilustrar la necedad de quien pone su confianza en los bienes de la tierra, en quien cree que la salvación consiste en tener cada vez más. Jesús no condena la posesión en cuanto tal, sino la ilusión de encontrar allí la seguridad, la fuente del propio valor. El sujeto de la parábola son los campos de un hombre rico que produjeron una cosecha extraordinaria. El acento cae sobre la fecundidad del terreno que, especialmente en aquellos tiempos, dependía en buena parte del clima y muy poco de la intervención del campesino. Y, para el hombre bíblico, la benevolencia de las estaciones no eran fruto de las estrellas, sino de la bendición de Dios. Pero aquel hombre, ante tal abundancia, empieza a desvariar. Tiene muchos graneros repletos de trigo que seguramente podía vender a precios muy altos en tiempos de carestía. Pero quiere otros más grandes aún. Y repite varias veces aquella trágica palabra: «mis... mis...». La tierra es suya, la cosecha es suya, los graneros son suyos. Para él acumular bienes para sí mismo, o al máximo para su familia, equivale a estar tranquilo y feliz. Pero hay una insensatez en sus cálculos: lo ha programado todo a la perfección, pero no ha calculado la hora de su muerte. Ha pensado en sus días pero no ha pensado en el último. He aquí por qué aquella misma noche se le pide la vida. La muerte, como


¡Necio, esta misma noche…

Y como la rana de Fedro acabó por estallar al beber mucha agua, así sucede con cada uno de nosotros cuando hacemos del poseer sin límites el único objetivo de nuestra vida. Es una codicia que traiciona nuestra miseria  . diera de nosotros. Enriquecerse ante Dios quiere decir «hacer limosna», compartir con los demás, con los más necesitados, todo lo que se ha recibido. Aquel «ante Dios» se concreta así en un «para los demás». Y como la rana de Fedro acabó por estallar al beber mucha agua, así sucede con cada uno de nosotros cuando hacemos del poseer sin límites el único objetivo de nuestra vida. Es una codicia que traiciona nuestra miseria. Porque quien nunca se contenta con lo que tiene, quien corre a toda costa detrás de una imagen de sí omnipotente, demuestra cuán poco contento está con lo que es y tiene. Y así, mientras el enriquecerse para sí es prisionero de la inconsistencia, la riqueza compartida, la fraternidad y amor quedan para la eternidad. Ni siquiera el más pequeño gesto de bondad se perderá y lo volveremos a encontrar en el Amor que no tiene fin.

Cirm

dijo un poeta, es como un gran nivel de albañil que empareja a todos. El problema lo tendrán, más bien, los que quedan vivos, es decir, los hijos que empezarán a luchar para quedarse con el mayor número de bienes. Y así vuelve a empezar la contienda: guerras, muertes, petición de que se les haga una justicia que se va a fundamentar en la misma lógica de la injusticia. Parece que Jesús ha transformado en parábola una intuición que viene de la tradición sapiencial: «Vanidad de vanidad; todo es vanidad». ¿Qué significa esta expresión? Cohélet es un hombre desilusionado que mira a la raíz de todas las experiencias humanas: todo lo que el hombre busca y encuentra ofrece mucho menos de lo que le promete. Es inconsistente como el viento, como el aliento que se desvanece y no deja rastro. Cohélet indica en especial tres formas de vanidad: la esterilidad del esfuerzo humano; la fragilidad de las metas alcanzadas; las numerosas anomalías e injusticias de las que está repleta la existencia. Pero la parábola de Jesús no se limita a constatar la vanidad de los bienes terrenales, ni quiere simplemente sacudir al hombre para que se libere de la fascinación del poseer. Indica más atinadamente el camino de la verdadera liberación: «Así es el que atesora riquezas para sí y no se enriquece ante Dios». Es, entonces, el «para sí» lo que es insensato, y se le debe sustituir con otra orientación que es la de enriquecerse «ante Dios». Pero, ¿qué significa esto en concreto? Podemos encontrar la respuesta en los versículos siguientes. Enriquecerse ante Dios significa, por ejemplo, no caer en la tentación del afán, del ansia, como si todo depen-

43


Testimonios

Compartiendo

un poco de mi vida… Hna. Bertha Mondragón Misionera de la Caridad de María Inmaculada

En 1984 profesé en la Congregación de Misioneras de la Caridad de María Inmaculada y desde ese entonces he vivido, reído y llorado dentro de los hospitales sumando mis 28 años de Vida Religiosa al servicio del enfermo  .

Cirm

M

44

i nombre es Bertha Mondragón Gutiérrez, tengo 46 años, nací en el bello Estado de San Luis Potosí, en 1966. Mis padres Luis Ignacio Mondragón y Ma. Teresa Gutiérrez originarios de Cuernavaca Morelos y San Luis Potosí, respectivamente. Soy la segunda de cinco hermanos: Carlos, Bertha, Teresa, Carmen y Benjamín. Agradezco a este medio poder compartir brevemente mi experiencia como religiosa enfermera. No podría hablar de esta experiencia sin antes mencionar un poco de mi infancia ya que fue ahí, en el seno familiar, donde se forjó “el deseo de servir y dar a los demás”.

Mi infancia transcurrió entre la escuela, los juegos comunes y de moda de ese entonces, entre las riñas normales de niños, entre los gritos, la fantasía, los paseos, las nieves, las gelatinas, las rondas, los encantados y las escondidas, las misas de Domingos, el catecismo, y en fin la convivencia familiar. Lo que más recuerdo es la solidaridad de mis padres con nuestros vecinos, con los compadres, con los amigos, con los familiares sobre todo cuando estaban en situaciones críticas como la enfermedad, el hambre, el desamparo, la soledad, la miseria, etc. Y aunque fuimos una familia muy austera y con grandes carencias, siempre había algo para dar a los demás cuando lo


Compartiendo un poco de mi vida… mo tiempo, sin enfermarme?, ¿cómo actuar en medio de la diversidad, la debilidad, lo opuesto, lo contrario? Definitivamente Dios actúa a través del tiempo, Él es el creador y artífice del ser humano. Y aprendí, a través del tiempo y las experiencias, del contacto con los enfermos y sus familiares, de los doctores y enfermeras de los sacerdotes y religiosas con su testimonio de vida, que sólo soy un instrumento más de la complejidad de la creación y que dentro del llamado que sentí desde pequeña de “servir a los demás”, está el llamado a recrear, cuidar y conservar esta creación; Él es el que actúa en cada momento de la vida y de diferente manera, es Él quien dispone lo que se tiene que hacer en el momento que se debe hacer; es Él quien consuela y acompaña, el que calla y aconseja, el que vela como la madre ante su hijo recién nacido y el que despide con su silencio y su presencia al enfermo que se prepara para el gran encuentro. Esto es definitivamente el regalo más grande que Dios ha hecho en mi vida como Enfermera, poder contemplar tan cerca el misterio de la vida y la muerte, la salud y la enfermedad, que fue formando en mí a una mujer fuerte, solidaria y previsora, a pesar de mi vulnerabilidad y debilidad emocional. Esto es solo un pequeño fragmento de mi vida que lo escribo para ustedes, agradeciendo a Dios el llamado a este maravilloso apostolado. Morelia, Mich. Febrero 2013.

Cirm

necesitaban, o siempre había tiempo para estar con el enfermo en el hospital. Mis padres muy trabajadores y optimistas en medio de la pobreza y la escasez, solucionaban los problemas económicos más urgentes para nuestra educación y salud. En 1984 profesé en la Congregación de Misioneras de la Caridad de María Inmaculada y desde ese entonces he vivido, reído y llorado dentro de los hospitales sumando mis 28 años de Vida Religiosa al servicio del enfermo. A los 16 años, siendo novicia, presencié el primer parto de cientos que vería y asistiría después; a los 17 la primera cirugía, y a los 18 años la agonía y la partida de una ancianita, era la primera vez que enfrentaba la muerte en el lecho del dolor junto a la familia desgarrada por la inevitable partida de su madre. Estos fueron los primeros retos a los que me enfrenté, la llegada y la partida, el gozo y la esperanza, la felicidad y la tristeza siempre presentes y al mismo tiempo en el hospital, era abrir una habitación y participar de la felicidad de una madre que tiene en sus brazos a su hijo tan deseado y tan amado, o a un ser querido en franca recuperación, pero al cerrar y abrir otra puerta era participar de la tristeza, las lágrimas, la angustia y a veces la desesperación ante la impotencia de lo inevitable e inexplicable que es el misterio de la muerte, la partida final de un ser amado. Esto se traducía para mí en una bomba de sentimientos encontrados y continuamente me preguntaba como mujer: ¿cómo voy a manejar tantas emociones al mis-

45


Testimonios

Ellas

nos guiarán en el Reino de Dios Hna. Luz Angélica García Plata Oblata del Santísimo Redentor

El Dios de la vida ha hecho grandes cosas por mí al conducirme por sendas de misericordia y bondad, de acogida y compasión; me ha dado la oportunidad de afirmar y confirmar la llamada que me sigue haciendo el Redentor  .

Cirm

D

46

esde el seguimiento a Jesús Redentor. Soy enviada a compartir la Buena Noticia de Jesús (Mc 3, 13-15) con las mujeres que se encuentran en situación de prostitución y/o trata con fines de explotación sexual. Con ellas, las Oblatas del Santísimo Redentor generamos procesos de vida, de humanización y liberación. La vocación recibida me posibilita a ser especialmente sensible a las injusticias en que están inmersas tantas mujeres. La misericordia, la solidaridad, la alegría, la gratuidad son rasgos de mí ser Oblata; me capacitan para hacer con cada una de las mujeres un camino de igualdad (1Co 9,19-23). El carisma recibido me da la fuerza para permanecer en medio de estas situaciones y seguir apostando por la vida (DP 272 y VC 9, 75 y 86) El compartir con ellas la vida misma con todos sus sinsabores y alegrías a la luz de la Palabra por más de veinticinco años, ha llenado mi vida de esperanza, de gozo y agradecimiento, al reconocer la presencia de un Dios inmensamente compasivo, solidario y cercano. “Él me envía a experimentar y compartir la salvación con las mujeres” (Documento Congregacional).

La cercanía a sus realidades de exclusión y estigmatización en que viven, me reta a seguir descubriendo y acogiendo las posibilidades del Reino de Dios que existe en ellas. Inculturarme en la realidad me conlleva a una presencia solidaria y profética (Documento Congregacional). He gozado al celebrar con varias mujeres momentos de su pascua; de sentirse reconocidas e incluidas en espacios de libertad y respeto a su ser de mujer y de hija de Dios. He disfrutado con mis hermanas de congregación, el nacimiento de sus hijos e hijas, sus logros académicos; su participación en la evangelización y catequesis familiar, en la vivencia de algunos sacramentos. Agradecida les estoy por su amistad, confianza y apertura para buscar juntas otras alternativas de vida y salvación. El Dios de la vida ha hecho grandes cosas por mí al conducirme por sendas de misericordia y bondad, de acogida y compasión; me ha dado la oportunidad de afirmar y confirmar la llamada que me sigue haciendo el Redentor, para que, junto con la mujer, incida en las causas que generan la prostitución y apoyar la defensa de sus derechos hasta las últimas consecuencias (Lc 11,37; Jn 15,13).


Testimonios

Formar

futuros sacerdotes Hna. Elena Luna Jiménez Hija del Espíritu Santo

años de 1990 a 1996. Creo que un reto muy grande fue el de trabajar tan de cerca con los sacerdotes. Aprender a proponer sin imponer. Descubrir que lo más importante no era mi idea, sino el bien que podíamos hacerles en su formación trabajando de común acuerdo, con la muerte que esto lleva consigo:“Si el grano de trigo no cae por tierra y muere queda infecundo, pero si muere dará mucho fruto”. Y aquí, como en otros momentos no es la muerte lo que cuenta sino la vida que ésta genera. Nuestro Padre, Félix de Jesús Rougier, y nuestra Madrecita, Ana María Gómez, nos decían: “Vosotras habéis resuelto consagrar vuestra vida, hasta el último suspiro, a formar futuros sacerdotes, a imitación de Jesús”. Siguiendo nuestros modelos: Jesús Sacerdote Víctima y María Madre de la Divina Gracia. Con sencillez comparto lo que Dios realizó a través de mí en esos seis años, que

Cirm

E

l Seminario Menor es una institución educativa destinada a la formación de jóvenes que parecen tener indicios de vocación al sacerdocio ministerial. Su finalidad es proporcionar elementos de formación humana, cristiana, intelectual, en un proceso de acompañamiento y discernimiento vacacional, para que respondan al llamado de Dios, mediante una opción libre, consciente, responsable y gozosa. Las religiosas Hijas del Espíritu Santo trabajamos en este apostolado juntamente con los sacerdotes encargados de esta etapa, en la delicada responsabilidad de la formación sacerdotal. Nuestro aporte está encausado a favorecer el desarrollo integral de los alumnos. Impartimos en la dimensión académica una formación humanística a través de la adquisición de conocimientos, y el desarrollo de habilidades y actitudes dentro de la vivencia de los valores humanos. Les damos formación en la oración y catequesis. En la dimensión pastoral, los ayudamos en la preparación, desempeño y evaluación de la misma. Dentro de la dimensión vocacional, los acompañamos en su proyecto personal, les proporcionáramos elementos de discernimiento en vista a una opción madura. Estuve colaborando en el seminario Menor de la diócesis de Tepic durante seis

47


Formar futuros sacerdotes considero positivos, de aprendizaje y muy fecundos, por lo que implica: educar, formar y acompañar. Con libertad, puedo decir: que cada uno de los seminaristas se sintió aceptado, valorado y amado por lo que él era. Sin duda que esta experiencia los impulsaba a responder en su vocación con amor, entusiasmo y generosidad. Aprendieron a ser responsables, respetuosos, a quererse entre ellos, a saberse hermanos, a vivir en familia. Sé que algunos se siguen apoyando en su ministerio sacerdotal. Aprendieron a orar, a hacer silencio, a escuchar la voz de Dios en las distintas mediaciones. Compartí mi espiritualidad, el amor al sacerdocio, el amor a María para que Ella fuera su compañera en su caminar vocacional. Cuando he tenido ocasión de encontrarme a alguno de ellos, siempre hay una palabra de gratitud. Se me viene la frase del

poeta Amado Nervo: “Cuando planté rosales, coseché siempre rosas”. ¿Qué beneficios recibí en esta experiencia? En este campo, mi carisma y misión se explica por sí mismo y esto me llenaba de gozo. Me encanta mi vocación de Hija del Espíritu Santo: “Darle sacerdotes a Jesús”. Se acrecentó mi ser de mujer consagrada, mi capacidad de amar y mi riesgo de amar a cada uno. Creo que aunque pase el tiempo (dieciséis años), los nombres y los rostros permanecen como cincelados en mi mente y en mi corazón; y me viene esta frase que en aquellos años me hacía tanto sentido: “Al final de mi vida me dirán: ¿has amado? Yo no diré nada, abriré mis manos vacías y el corazón lleno de nombres”. Sí, llevo los nombres de cada uno en mi corazón y eso sigue alimentando cada día mi vida consagrada. “Por todos los que me has dado, mantenme fiel consérvame feliz”.

¡Descuentos de la CIRM para ti! Pensando en tu economía la CIRM hará diferentes descuentos para todos nuestros eventos: - Primer descuento: el 10% del costo original del curso o taller, si se hace el pago al menos 10 días antes del inicio del mismo. - Segundo descuento: el 10% del costo original del curso o taller, si la Congregación a la que se pertenece nformativo está al corriente en el pago de la cuota anual del año en curso. - Tercer descuento: el 10% del costo original del curso o taller, si se inscriben tres o más personas de la misma Congregación.

Cirm

Cirm

48

Notas: 1.- Se pueden aplicar uno, dos o los tres descuentos. 2.- Si el pago se hace entre nueve y un día antes del evento, pueden aplicarse el segundo y tercer descuento. 3.- No se aplicará ningún descuento, si el pago se hace el mismo día del evento. 4.- Si requiere factura, favor de agregar el 16% del IVA.


Testimonios

Misionera del amor de Dios, guadalupana y mensajera soy… Hna. Rosalba Chávez Esquivel Misionera Guadalupana del Espíritu Santo

M

e siento agradecida y bendecida de poder compartir una experiencia misionera, de las muchas que Nuestro Buen Padre Dios me ha permitido vivir a lo largo de 25 años de pertenecer a este Instituto misionero. Me enfocaré en la misión que viví en el pueblo de Tepango de Rodríguez, Puebla. Actualmente, Parroquia de San Antonio de Padua. La comunidad la formábamos cuatro hermanas. La cabecera parroquial se encontraba en el pueblo de Tepetzintla, Puebla, a una hora caminando. Ahí vivía el Párroco, Eleazar Hernández. La parroquia está formada por dos etnias: Náhuatl y Totonacos. Los debíamos atender a todos, aunque a nosotras nos dejaba el párroco casi en su totalidad el pueblo de Tepango y Caltuchoco (ambos totonacos) y sólo en Semana Santa o en misiones especiales atendíamos Tepetzintla, y dos comunidades más.

¿Qué hacíamos? En la sierra norte de Puebla, ya hacía años que se venía trabajando la pastoral de conjunto y los agentes estábamos organizados por equipos en las diferentes áreas pastorales. Pero me permitiré sólo mencionar lo que directamente hacíamos en la comunidad de Tepango. El pueblo estaba organizado en cuatro secciones (por lo de las mayordomías) y, aprovechando esta organización, teníamos una comunidad de base en cada sección. Nos reuníamos cada semana en diferentes casas con los de cada sección; se oraba, se reflexionaba la Palabra de Dios, se dialogaba la vida y se escuchaba a las personas. A Caltuchoco íbamos un día a la semana y hacíamos lo mismo. El párroco sólo venía a celebrar la misa los domingos, así que, nosotras éramos “las párrocas” durante la semana; hacíamos exequias, bautismos de emergencia, celebrábamos

Cirm

El aporte que creo haber hecho, fue trabajar incansablemente porque la personas descubrieran su dignidad, como personas creadas a imagen y semejanza de Dios .

49


Cirm

Misionera del amor de Dios…

50

diariamente la Liturgia de la Palabra, visitábamos enfermos, algunas veces acompañábamos el nacimiento de los bebes. Bendiciones de casas, siembras, ganados (se tiene mucho esta costumbre). Acompañé algunos niños enfermos a la Ciudad de México, pues había una organización que les daba atención médica gratuita. Los fines de semana acompañábamos a los catequistas y nosotras mismas dábamos la catequesis para los sacramentos. Es un pueblo sumamente religioso, así que, cada mes hay una fiesta-mayordomía, y se les acompañaba a poner la ofrenda, recogerla, repartirla, bailar el tapachuwuan (danza de ofrenda), etc. Organicé campeonatos de Basquet con los adolescentes y jóvenes que se preparaban a la confirmación. Ya que es el único deporte que ejercitan y la única distracción también. Tal vez suene fácil todo lo que “hacíamos”, pero en realidad son muchos los retos que nos presenta esta pastoral: para empezar, los idiomas, pues era el Náhuatl y el Totonaco. Gracias a Dios que algunas personas eran bilingües y me hice ayudar de intérpretes, siempre me hice acompañar de dos o tres jóvenes intérpretes. También, es un reto entrar a su cultura-cosmovisión, con los pies descalzos, pues es tierra santa. Como anécdota, hice una reunión con los mayordomos, fiscales y personas mayores para ver la manera de darle mantenimiento al templo pues se estaba abriendo el techo. Al iniciar la reunión todo era en castellano, por atención a mí, pero vi sus dificultades, fui por una grabadora y les pedí que todo fuera en totonaco, y que yo

traduciría más tarde. Ni tardos ni perezosos, empezaron a discutir y en un tiempo breve ya estaba solucionado todo, iríamos un equipo de tres señores y yo a la Ciudad de México a colectar con los paisanos y en Tepango otro grupo haría lo mismo. Yo me sentí feliz, pues entendí que en la propia legua todo es más fácil y rápido. Otro obstáculo es la situación geográfica del lugar; es hermosísima la naturaleza, pero todo era a pie o en las camionetas de carga. El frío, la lluvia, la niebla, dado que es sierra. El aporte que creo haber hecho, fue trabajar incansablemente porque las personas descubrieran su dignidad, como personas creadas a imagen y semejanza de Dios. Dialogaba con personas mayores que se sentían lastimadas por “los de razón” (en su mayoría de descendencia española) y les enseñé a valorarse; me esforcé por hablar su idioma y compartir su mesa y costumbres. Y supieron que también comparten el sacerdocio bautismal, aprendieron a vivir su día a día y a valorar, agradecer y orar por los sacerdotes, de hecho, salieron algunas vocaciones. El regalo que yo recibí en mi paso por esta parroquia fue el vivirme como signo creíble, cercano, tierno y compasivo del amor de Dios. Pues así me hicieron sentir... al buscarnos en casa, al recibirnos en sus casas, en los caminos, en las fiestas. Siempre nos decían que cuando nos veían venir les recordábamos a la presencia de Dios. Eso me motiva y reta en mi vida misionera aún hoy que me encuentro en la ciudad del Alto, Bolivia, en la Parroquia “Suma Yapuchiri” (El Buen Sembrador), escribiendo nuevas páginas misioneras.


Testimonios

Ser testigo de la acción de Dios en las personas

Q

ueridas/os compañeras/os de camino: con gusto he aceptado compartir con ustedes mi experiencia como acompañante en el proceso de crecimiento psicológico-espiritual. Tarea que he realizado durante los últimos veinte años. En ellos he tenido la oportunidad de acompañar a formandas, seminaristas, religiosas y religiosos, sacerdotes y laicas/os. El acompañamiento vocacional que he ofrecido está basado en una antropología de la vocación cristiana. Su finalidad es comprender y discernir el propio proceso vocacional y favorecer, de ese modo, un crecimiento vocacional más consistente, basado

en los valores del Evangelio, que abran a la fuerza del Espíritu irradiando sus frutos en la misión. Para recorrer este proceso es necesario entrar en las posibilidades y debilidades con que cuenta cada acompañado, y con las mías también. Implica que yo, como acompañante, me ponga en tela de juicio, en algunos momentos. Dejarme guiar por la persona, que ella me introduzca en su casa, que me lleve a su corazón. En el acompañamiento he tenido que enfrentar algunos retos y les comparto uno de ellos. Recuerdo que acompañé a una persona extremadamente agresiva. Durante unos dos meses no lograba entender lo que me sucedía. Poco a poco fui haciéndome

Cirm

Hna. Eulalia Calderón Alcántar Esclava del Sagrado Corazón de Jesús

51


Ser testigo de la acción de Dios en las personas consciente de que surgía en mí un gran miedo y ansiedad antes de iniciar las sesiones con dicha persona. No sucedía lo mismo cuando debía acompañar a otras personas. En ese tiempo contaba con la ayuda de un supervisor al cual le comenté mi dificultad. Fue un primer fracaso para mí en ese campo, pues, después de un año de trabajo constaté no poder ayudarle. Esa es una realidad dolorosa con la que yo, como acompañante, debí hacer cuentas, asumir y humildemente reconocer: el medio que puedo ofrecer no siempre será un bien para todos, o por parte mía o por parte de la otra persona. Es un camino en el que se requiere también dejarse acompañar, como quien nos conduce a su casa y nos la muestra. En una ocasión mientras acompañaba a un joven formando, me quedé en silencio; él me pidió “un empujoncito”; se lo di, y fue así como

me abrió su corazón y los secretos que en él escondía y que lo hacían sufrir. Después de ese momento inició un camino de mayor profundidad donde pude contemplar el paso de Dios abriéndose camino y el joven tratando de quitar las escorias que en su vida tenía, sus resentimientos y tristezas, y abrirse a un mundo de más flexibilidad y alegría, dejando salir más libremente el artista que llevaba dentro y la ternura que lo caracterizaba pero que rígidamente escondía. Los acompañamientos también me han ayudado, me han permitido tocar a Dios y todo su amor para con cada persona y el amor que las personas le tienen. En algunas ocasiones no he podido contener las lágrimas al contemplar la obra de Dios en ellas y ellos, y por permitirme ser testigo de esa gracia. De esto estoy agradecida al Dios corazón del cielo y corazón de la tierra.

¡Descuentos de la CIRM para ti! Pensando en tu economía la CIRM hará diferentes descuentos para todos nuestros eventos: - Primer descuento: el 10% del costo original del curso o taller, si se hace el pago al menos 10 días antes del inicio del mismo. - Segundo descuento: el 10% del costo original del curso o taller, si la Congregación a la que se pertenece nformativo está al corriente en el pago de la cuota anual del año en curso. - Tercer descuento: el 10% del costo original del curso o taller, si se inscriben tres o más personas de la misma Congregación.

Cirm

Cirm

52

Notas: 1.- Se pueden aplicar uno, dos o los tres descuentos. 2.- Si el pago se hace entre nueve y un día antes del evento, pueden aplicarse el segundo y tercer descuento. 3.- No se aplicará ningún descuento, si el pago se hace el mismo día del evento. 4.- Si requiere factura, favor de agregar el 16% del IVA.


Voces Jóvenes

La promoción

de la mujer en la Vida Religiosa Julieta Guadalupe Puente Rodríguez, op CET-CIRM

E

n una clase de Teología de la Vida Religiosa, en el CET-CIRM; la maestra nos lanzaba una pregunta: ¿qué pasaría si la Vida Religiosa se termina? Cada una de las alumnas guardamos silencio y pensamos en qué haríamos si eso pasara. Hoy día es una preocupación latente, cada vez somos menos, más enfermas, ancianas y con la misma tarea: responder a las necesidades de fe, de la Iglesia y de la sociedad.

Por eso, es importante que quienes aun creemos en este proyecto y que anhelamos ser signo del Reino de Dios, vivamos plenamente, seamos mujeres y hombres capaces de expresar a la humanidad que ese Dios Padre-Madre sigue manifestándose cada día en este, nuestro mundo. En esta reflexión me enfocaré, en el papel de la mujer religiosa, su rol en la Iglesia y la necesidad de preparación, de acción y de testimonio en su actuar cotidiano. Así, el

Cirm

“Bendita será, la mujer que hace opción, por la causa de Dios, por la ley del amor…” Rosa Martha

53


La promoción de la mujer en la Vida Religiosa

Cirm

Ha llegado la hora en que la vocación de la mujer se cumple en plenitud, la hora en que la mujer adquiere en el mundo una influencia, un peso, un poder jamás alcanzado hasta ahora  .

54

primer gran desafío que -a mi entender- tenemos, es tomar conciencia y abrir caminos para que como mujeres lleguemos a ser un lugar teológico y desde allí vivir. Pablo VI en la clausura del Concilio Vaticano II dice: “Ha llegado la hora en que la vocación de la mujer se cumple en plenitud, la hora en que la mujer adquiere en el mundo una influencia, un peso, un poder jamás alcanzado hasta ahora”. Por ello la importancia de rescatar el papel de la mujer desde su liderazgo, en concreto en la Vida Religiosa, es necesario ser protagonistas de la historia, ofrecer testimonios de esperanza para otras mujeres y así en dignidad seguir construyendo una humanidad más justa y pacifica. No en vano Jesús motivó para que cada mujer que tuvo contacto con él, entre ellas María Magdalena, la hemorroisa y muchas más, recuperaran su dignidad y caminaran con la cabeza erguida, sintiéndose amadas y valoradas por ese Dios de gratuidad que reconoce la bondad, la ternura, la fidelidad y la capacidad de dar vida. Urge que cambiemos nuestro pensamiento y enfrentemos a nuestra cultura patriarcal para cre-

cer, valorar aun mas el “ser mujer” y nuestro papel dentro de la sociedad. Retomando la preparación que recibimos en nuestras congregaciones, en la mayoría de los casos es concretamente profesional (maestras, enfermeras, trabajadoras sociales, etc.) mi pregunta es: ¿no podríamos hacer eso fuera del convento, incluso con más libertad? Mi invitación es a reflexionar sobre la vida en comunidad, porque es necesario aprender a vivir esta opción de vida, aprender a ser hermanas, familia, crecer unas a otras desde la experiencia de Dios, encarnar ese Verbo, ser más felices y como consecuencia, ser invitación para que otras mujeres anhelen venir a vivir con nosotras. El mundo nos rebasa, va a mil por minuto y pareciera que nosotras estamos tranquilas de ver que la Iglesia se ha estancando en el siglo xvi, es necesario que caminemos y nos formemos para responder a lo que nuestra sociedad necesita hoy, de lo contrario, seremos una Vida Religiosa caduca.

Por otro lado, las tecnologías, el ecumenismo, los diferentes carismas nos ofrecen la oportunidad de renovarnos y ser mas creativas en nuestra labor, ofrecer una


La promoción de la mujer en la Vida Religiosa

evangelización de calidad, desde una experiencia profunda de Dios que camina con su Pueblo, se manifiesta y le anima a seguir a pesar de la tempestad. No podemos tampoco ser ajenas a lo que pasa en nuestro país, esta ola de violencia y muerte, que nos reclama compasión y respuesta como mujeres que optamos por la vida. José Ma. Castillo, escribe un libro muy interesante: El futuro de la Vida Religiosa, donde menciona, la importancia que tiene trabajar nuestro ser por una vida de coherencia, transparencia y plenitud. Habla fuertemente en cuanto a qué seria lo que define a un religioso, religiosa: “…que a los religiosos, religiosas se nos reconozca y se nos distinga no por el tipo de casas en que vivimos y menos aun por nuestras vestimentas o cosas parecidas, a los religiosos y religiosas se nos tendría que reconocer porque somos personas tan profundamente humanas, que se han liberado de la inhumanidad que todos llevamos dentro. Y, además, porque somos tan sensibles a todo lo que afecta a la humanidad que la gente al vernos, no tenga mas remedio que decir: 'aquí hay algo que humanamente no tiene explicación'”.

Los votos, la oración, nuestras constituciones y todos los medios que tenemos para crecer no tienen razón de ser, si nuestra vida no ejemplifica a los demás, es decir, somos testimonio de lo que vivimos, así que, el compromiso esta en manifestar concretamente el proyecto del Reino, el Evangelio encarnado en todo lo que somos y hacemos. Sencillamente podemos sintetizar nuestra misión en este gesto: preparar incesantemente una morada para Dios allí donde estamos (colegios, hospitales, parroquias u otros) instaurando vínculos sanos y siendo ministras para que su Espíritu llegue con éxito y el Evangelio se haga vida. Termino esta reflexión con una cita bíblica que es inclusiva y a la vez retadora para confiar en ese Dios al que alabamos y predicamos: “Hermanas y hermanos alegrémonos en el Señor en todo tiempo, alegrémonos y demos a todas y todos muestras de un espíritu muy comprensivo y en cualquier circunstancia recurramos al Dios de la vida, el nos guardará en su corazón y su paz se instalará entre nosotros y nosotras” (Fil 4, 4).

Cirm

Es necesario aprender a vivir esta opción de vida, aprender a ser hermanas, familia, crecer unas a otras desde la experiencia de Dios, encarnar ese Verbo, ser más felices .

55


De la Vida Religiosa

Testigos y promotores de nueva evangelización

Extracto del Mensaje del Sínodo de los Obispos al Pueblo de Dios 26 de octubre de 2012

Cirm

D 56

e este sentido de la vida humana más allá de lo terrenal son particulares testigos en la Iglesia y en el mundo cuantos el Señor ha llamado a la Vida Consagrada, una vida que, precisamente porque está dedicada totalmente a él, en el ejercicio de la pobreza, la castidad y la obediencia, es el signo de un mundo futuro que relativiza cualquier bien de este mundo. Que de la Asamblea del Sínodo de los Obispos llegue a estos hermanos y hermanas nuestros la gratitud por su fidelidad a la llamada del Señor y por la contribución que han hecho y hacen a la misión de la Iglesia, la exhortación a la esperanza en situaciones nada fáciles para ellos en estos tiempos de cambio y la invitación a reafirmarse como testigos y promotores de nueva evangelización en los varios ámbitos de la vida en que los carismas de cada instituto los sitúa (núm. 7).


De la UISG

Fidelidad creativa desde la UISG

C

on gusto les comparto una palabra sobre lo que es la UISG, lo que se hace, se ha hecho y nuestra tarea como Constelación: permanecer fieles creativamente. La UISG es la Unión Internacional de Superioras Generales, un espacio de solidaridad, para armonizar culturas, idiomas, carismas, para construir puentes de comunicación, para estimular el diálogo y la colaboración en red, para facilitar la comunicación entre las religiosas de todo el mundo, es un foro internacional para reflexionar sobre los desafíos del momento y buscar respuestas adecuadas en el respeto a la autonomía y de la espiritualidad de cada instituto.

Esta Unión nos permite disminuir las distancias, confines y fronteras, como signo de nuestro compromiso por extender el Reino de Dios en el mundo. Funciona mediante tres grandes instancias de animación: una Directiva, Administrativa y otra Relacional. Dicha animación es circular como una manera de expresar las correlaciones entre las diversas instancias que la conforman. La animación se basa en una visión teoantropológica de la persona humana, que ahonda sus raíces en el misterio trinitario y tiende hacia la comunión universal, a través del compromiso en la construcción de una cultura de la vida, de la paz y de la solidaridad. Las relaciones dentro de la unión,

Cirm

Hna. Patricia Pérez Sánchez, cfmm

57


Fidelidad creativa desde la UISG

Cirm

La Asamblea plenaria es un órgano de consulta, animación y reflexión a nivel internacional, abierta a todos los miembros de la Iglesia y convocada por la Presidenta cada tres años, donde se estudian temas de actualidad para la Vida Religiosa, a nivel internacional  .

58

manifiestan una circulación de vida, de amor, que es lo que constituye la comunión entre las Superioras Generales. Las Superioras Generales están agrupadas en constelaciones y de cada constelación hay una o varias delegadas, formándose también un Consejo de Delegadas. La Asamblea plenaria es un órgano de consulta, animación y reflexión a nivel internacional, abierta a todos los miembros de la Iglesia y convocada por la Presidenta cada tres años, donde se estudian temas de actualidad para la Vida Religiosa, a nivel internacional. El Consejo de Delegadas es un órgano de discernimiento, deliberación, decisión y acción; está conformada por los miembros del comité directivo y los miembros de las constelaciones. La animación relacional se caracteriza por el diálogo con la CIVCSVA, Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y Sociedades de vida apostólica y con la Con-

gregación para la evangelización de los pueblos o propaganda FIDE. Con la CIVCSVA por nuestra identidad de consagradas y con Propaganda FIDE por nuestra misión de evangelizadoras. Asambleas Plenarias que se han realizado a partir del año 2001 como discernimiento en este caminar místico-profético. • 2001 - Muchas culturas, un solo corazón. Mujeres enviadas a ser presencia viva de la ternura y de la misericordia de Dios, en un mundo que sufre. • 2004 - Mujeres discípulas de Jesucristo, artífices de reconciliación, en este nuestro mundo. • 2007 - Mujeres con el desafío a tejer una nueva espiritualidad, que genere esperanza y vida para toda la humanidad. • 2010 - Qué bien sé yo, la fuente que mana y corre, aunque es de noche. El pertenecer a la UISG, nos brinda la oportunidad de insertarnos a este grupo de Vida Religiosa femenina, apostólica, de todo el mundo, para escuchar, discernir la voluntad de Dios y actuar en consecuencia a las llamadas de Dios, corriendo los riesgos que esto implica. En la última Asamblea Plenaria (2010) se nos recordó que el futuro de la Vida Religiosa, está en la fuerza de su mística y de su profecía. En esa ocasión nos reunimos alrededor de 800 Superioras Generales de 87 países, para saciarnos de la Fuente de vida, el Dios de Jesús, de donde emana nuestra alegría, nuestra esperanza y nuestra fuerza.


Fidelidad creativa desde la UISG

3 Redescubrir y escuchar la fuente que habla en nuestro corazón, en el otro y en la creación. 3 Ir sin cesar a la fuente de nuestro carisma, para sacar de nuevo, el dinamismo de nuestro primer llamado. 3 Crear un estilo de vida místico-profético, abierto a la hospitalidad y a la acogida, sin exclusividad. Respetar las diferencias que nos permiten reconocer la riqueza de las diversas culturas y religiones. 3 Reinventar un arte de vivir juntas, marcado por las relaciones que humanizan, por la escucha, la empatía, la no violencia. 3 Abrir los ojos para descubrir nuevos caminos de luz, en las tinieblas de nuestro mundo. 3 Ofrecer como mujeres consagradas, un ministerio de compasión y de sanación. Es bueno que nos preguntemos: qué acciones de los compromisos emanados, se han ido concretizando en nuestras familias religiosas, tanto al interno de nuestras comunidades, como en la misión. Ahora nos preparamos para asistir a la próxima Asamblea Plenaria en Roma, del 3 al 7 de mayo, con el tema: No será así en-

tre vosotros (Mt 20,26) El Servicio de la autoridad según el Evangelio. Ya les compartiré las reflexiones y la Declaración final, respecto a nuestro servicio de autoridad. Hermanas, estamos y nos sentimos llamadas a una mayor fidelidad creativa de los compromisos que vamos adquiriendo como Vida Consagrada, femenina, apostólica y mexicana. Nuestro modo de ser fieles a la creatividad es nuestra manera de seguir a Cristo hoy al estilo de nuestros Fundadores. Invito a las Congregaciones que pertenecemos a la UISG y que formamos la constelación de México, a permanecer fieles al servicio de Dios, de la mujer y del hombre de hoy, en una actitud de búsqueda, de discernimiento y de compartir experiencias para que juntas sigamos tejiendo con la riqueza de nuestras espiritualidades y carismas, redes, caminos, lazos que nos permitan transitar este momento histórico y sentir que no vamos solas, sino que somos una comunidad de animadoras generales a favor de la vida, de la paz y de la solidaridad, pues nuestro lenguaje profético nos es solo verbal; se expresa también a través de acciones simbólicas. Que la Ruah divina siga alentando nuestro caminar de Vida Religiosa femenina, mantengamos abiertos nuestros ojos y nuestro corazón, para sentir como brisa suave su presencia y su impulso para seguir a Jesús. León, Gto., marzo 10 de 2013.

Cirm

Algunos de los compromisos que emanaron de esta Asamblea, fueron:

59


De la CLAR Mensaje Final

XLII Junta Directiva

y del VII Encuentro de Secretarias y Secretarios de la CLAR Ciudad de México del 25 febrero al 1 de marzo de 2013

A toda la Vida Religiosa de América Latina y el Caribe

Cirm

"A 60

quí se cuenta cómo, hace poco, milagrosamente, se apareció la perfecta Virgen santa María Madre de Dios, nuestra reina, allá en el Tepeyac, de renombre Guadalupe ¿No estoy aquí yo, que soy tu madre? ¿No estás bajo mi sombra y resguardo? ¿No soy yo la fuente de tu alegría? ¿No estás en el hueco de mi manto, en el cruce de mis brazos? ¿Tienes necesidad de alguna otra cosa?” (Nikan Mopoua).

Con estas palabras de Santa María de Guadalupe, la Hermana Mercedes Leticia Casas Sánchez, F.Sp.S., Presidenta de la CLAR, hizo la apertura de la XLII Junta Directiva y del VII Encuentro de Secretarias y Secretarios de la CLAR, en la ciudad de México, invitándonos a abrir la puerta de la casa, la puerta de Betania, para que el Espíritu Santo visitara la casa de la Vida Religiosa y dejara entrar las voces y los clamores de los sujetos emergentes y los nuevos escenarios, de manera que “Escuchemos a Dios donde la vida clama”.


XLIIReflexiones Junta Directiva En este contexto, nos alegró acoger, profundizar y orar el Horizonte Inspirador de la CLAR, que contiene el Plan Global que animará la vida de nuestras Conferencias en los próximos tres años, para ser casa de encuentro, comunidad de amor y corazón de humanidad. En nuestro caminar queremos invitarnos mutuamente a hacer propio este Horizonte Inspirador y el icono de Betania, y a vivirlo con audacia en nuestras respectivas Conferencias y Regiones. Queremos asumir como criterio de acción “promover y acompañar comunidades nuevas de Vida Consagrada: • Centradas en la Palabra y el Espíritu • Cimentadas en el encuentro personal y comunitario con Jesucristo vivo • Abiertas a los escenarios prioritarios y a los sujetos emergentes de América Latina y el Caribe” (Objetivo general del Plan Global). Y que aquí se cuente cómo, hace poco, milagrosamente, la Vida Religiosa Latinoamericana y Caribeña, salió con un nuevo rostro, a recorrer, como y con María de Guadalupe, los caminos inciertos y pequeños que conducen al Reino. XLII Junta Directiva, VII Encuentro de Secretarias/os de las Conferencias Nacionales. México D.F., 1 de marzo de 2013.

Cirm

Fuimos llegando de los distintos rincones de nuestra Patria Grande, 51 hermanas y hermanos, representando a 21 Conferencias de las 22 que forman la Confederación. Nos hemos sentido fraternal y sororalmente recibidas/os por las hermanas/os de México; ellas/os nos fueron transmitiendo y contagiando la vida y fuerza de su pueblo. Especialmente queremos resaltar el encuentro celebrado en la sede de la CIRM con las/os Religiosas/os del país. Otro momento significativo de comunión eclesial fue la presencia de Mons. Carlos Aguiar Retes, Presidente del CELAM, el mismo día en que el Papa Benedicto XVI hacía efectiva su renuncia, momento que pudimos vivir juntas/os por una transmisión directa. A lo largo de estos días nos hemos detenido a ver la realidad de nuestros pueblos, de la Iglesia y de la Vida Religiosa. Una realidad llena de luces y preñada de vida y esperanza, en la fuerza de resistencia, en la capacidad de celebrar y de hacer fiesta, en la música y la danza de nuestros pueblos. Una realidad también llena de sombras que nos duelen, nos provocan impotencia y desconcierto, nos presentan desafíos que al mismo tiempo son bendiciones de la Ruah divina, donde Dios puede actuar. Una realidad, en fin, compleja y ambigua, como nuestras vidas, como la vida toda. Percibimos que no estamos en tiempos de grandes discursos y propuestas sino en búsqueda de nuevas alternativas que respondan evangélicamente a los desafíos, a los nuevos escenarios y a los sujetos emergentes actuales.

61


XLII Junta Directiva

Cirm

Agradecimiento de la CLAR a la CIRM Nacional

62


Suscripción El Boletín Informativo CIRM se pone a tu disposición y ofrece a todos los religiosos y religiosas de México la nueva sección: “Noticias de la Vida Religiosa”, donde podrás mandarnos información1 sobre eventos de tu congregación que desees publicar2 en el Boletín Informativo CIRM, y compartir con todos los religiosos y religiosas de México. Comparte con nosotros información como: • Capítulos generales, provinciales, regionales… • Profesiones religiosas. • Nuevas experiencias apostólicas. • Noticias sobre tu congregación. • Tu espiritualidad. • Hacer preguntas a los religiosos de México. • Propuestas de colaboración apostólica. • La pascua definitiva de alguna hermana o hermano. • Preocupaciones. • Y todo lo que creas que nos puede ayudar a crecer. Envía tu información al Departamento de Comunicación, por fax al 01.55.56.04.95.55 o al correo: comunicacion@cirm.org.mx, con atención al Hno. Sergio Argüello Vences, ssp. 2

La información que envíes tendrá que ser sin fines de lucro. Sin costo alguno.

SUSCRIPCIÓN ANUAL $ 100.00 Forma de pago • Depósito directo en Banamex a nombre de Conferencia de Superiores Mayores de Religiosos de México,A.R., Cta. 7864497 Suc. 205. Por favor enviar la ficha de depósito y el nombre del suscriptor o suscriptora al fax (0155) 56 04 95 55. • También se puede hacer el pago personalmente en las oficinas del Departamento de Economía de la cirm en horarios de 9:00 am a 2:00 pm, de lunes a viernes. • El pago incluye 6 ejemplares en el transcurso de un año. El envío es a cualquier parte de México. El costo incluye iva. Si requiere factura sólo pídala. Si usted se ha suscrito pero ha tenido problemas con la recepción de la Revista por favor escribir a: comunicacion@cirm.org.mx

Cirm

1

63


Suscripción

Anúnciate con nosotros

Si

deseas hacer algún anuncio en el puedes hacerlo de forma fácil nformativo y rápida. Llega a la Vida Religiosa de México y da a conocer tus servicios o necesidades.

Cirm

Los costos son los siguientes: $1000 MEX por una cuartilla del boletín a dos tintas y $500 MEX por media cuartilla a dos tintas. Para mayores informes favor de escribir a: comunicacion@cirm.org.mx con el Hno. Sergio Argüello Vences, ssp.

Cupón de suscripción a la Revista

Cirm nformativo

Suscripción anual 100.00 MXN.

Cirm

Favor de llenar y hacer llegar este cupón a la Sede de la Cirm Nacional (Amores 1318, Col. Del Valle, CP 03100, México DF) o al correo: secretariadjunta@cirm.org.mx

nformativo

Congregación: ________________________________________________________ Nombre del suscriptor/a: _______________________________________________ Domicilio:____________________________________________________________ Calle y núm.

Colonia

Población:__________________ Estado:_________________ C.P._____________ Teléfonos y Fax:_____________________ Correo Electrónico:___________________

1 año ( ) Suscripción nueva (

)

Depósito:_________________________ RFC: _____________________________

2 años ( ) Renovación ( ) Necesita Factura Sí (

) No (

)


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.