Falsa editorial Yo escondí las esperanzas en un buque muerto, ahí donde juegan los recuerdos. Espero y no espero a que ellas me busquen. Duermo y no duermo anhelando su arrivo. Pero nada sucede solo, pensar en lo que vendrá no existe. Navego en el silencio de las noches y sin querer me sumerjo en todas las heridas. Quise saberlo todo y ahora me veo lamiendo las cicatrices dulcemente. Es el momento de dibujar un puente para mis sueños, para los tuyos, para los nuestros. Y aunque escuche el óxido que cruje y se queja de todo, veo los destellos que se ríen y llaman desde el otro lado. Cruzo la lluvia y los miedos, el viento y la locura, el hierro y la estupidez, el río y todas las oscuridades Caigo profundamente en una sola certeza, veo a los niños jugar y siento el chispazo. las esperanzas, ya no son necesarias. Creo.
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Coordinación y falsa editorial/ Matías Ciccolella Comandos centrales/ Flavius Volátil Edición y arte de tapa/Ser Sur Ediciones/ sersurediciones.blogspot.com Colaboraciones espaciales en esta edición Arte de páginas centrales/ Tomás Vidal Sección “Volver a leer“ / Gito Minore Difusión/Germán Rivero Contacto/ revistalaanónima@gmail.com 2
Topos Apretó junto a su pecho el cúmulo de papeles amarillos con membrete como si de eso dependiese su vida. Estaba perdido, y solo sabía que se encontraba en el ala izquierda del edificio. A lo lejos, se derretía el corredor sobre un manto de lavandina con perfume de limón, en una tarde de 40º grados. Tenía miedo, se imaginaba que su camisa era un trapo de piso de tanto sudor acumulado y se enjugaba la frente todo el tiempo. De repente, vio escapar a un topo por un túnel a su derecha, y se extrañó por completo cuando vislumbró la misma figura caminando desde el fondo del pasillo de los limones. A los pocos minutos sucedió lo mismo: un topo desaparecía por un túnel y reaparecía por cualquier parte del edificio. Ahora estaba más angustiado que antes: todo ese ir y venir de topos y túneles lo desbarataban. Después de mucho tiempo de espera se percató de que había otros como él: otros hombres que esperaban sentados, o a pie, con los mismos papeles amarillos con membrete. Súbitamente, un topo raptó a su compañero de la derecha, el cual no volvió a aparecer jamás. Corridas las horas, sucedió lo mismo con el hombre de su izquierda. Se preguntó, al borde del delirio, cuándo se lo llevarían a él; pero los minutos pasaban y nada sucedía hasta que escuchó decir por un altavoz: Gutiérrez, Jorge, tomografía computada, sala 22
Juan Martín Vidal / Constitución, Ciudad de Buenos Aires / poeta / jmvidal100@hotmail.com 3
Un choque de planetas de alta rotación y órbita extraviada Una eclosión direccionada en fases impares Se liberan caóticos y breves cometas de felicidad doliente desgajan almas a mansalva abren enormes signos de interrogación de vocación carnívora Y declinantes indelebles El trillado pimentón de novela mentirosa La inusual imantación de los ecuadores los domingos de flores los vinagres abundantes los martes salvajes y las noches rosas ¿Sera ése el cuerpo celeste que maneja el pulso de la marea de tu océano de pelo? ¡Ay linda! Es el peligro inminente de perder los nombres y fundir los rostros de los recuerdos que no llegan ¡Morocha infinita! son esas fuleras alegrías que parecen perdidas pero en definitiva Siempre Están pegando la vuelta
Ariel Iñiguez / Inspector de billeteras / Barrio de los Hombres Sensibles / arielverificaciones@gmail.com 4
En tonos de madrugada (Vamos de vuelta). En otro plano, quizás. Donde las urgencias no eran tal y las sonrisas pasajeras quedaban en el tiempo. Allá, una mirada cruzada era una más, una mueca al olvido. En un viaje en colectivo saldría la caballerosidad. Eso de darte un acto de mi don y en el instante regresármelo. O una casual salida de compadres donde complotan los por que sí. Sería eso, nada más. Si los caminos no se hubiesen encontrado. -Vos por tu sendero y yo por el mío- dijiste Habrían sido muchas las dichas casuales Pero siempre algo en común, Algo en particular. Como cada sonrisa En forma de estela que nos dejábamos Al rozar.
Mate Cosido/ Estudiante/ Escobar, Buenos Aires/ www.quenosebajelamarea.blogspot.com.ar 5
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Soneto III: A la sílaba Detrás de todas las cosas del mundo Hay un silencio, como una palabra Sale de todas las bocas y labra Al tiempo como olas el mar profundo. No existe fuego que arda sin su aliento, No hay pie que encuentre la tierra sin antes Pisar esta roca; cuantos atlantes Y cuantos cielos hay son su elemento. Es todo el universo y el sagrado Misterio de sus elefantes, Shiva Que danza y su pie derecho apoyado Sobre el Sueño, es abajo y es arriba. Fue la primera voz plural e íntima, Es puro instante y es también la última. ////////////////////
Soneto V Quisiera que el verso cante a la tarde El repetido canto de las aves Como rumor de antiguo salmo a través Del tiempo. Pedir prestado el alarde Último del día y ceñirlo al ritmo De su sílaba; pero hacer al verso Lento en la conquista de éste algoritmo, Inquirir de la moneda el reverso Primero, demorar la metáfora Hasta el final para animar el juego, Romper el verso mil veces y luego Modular su esbelto cuerpo de ánfora Para siempre. Fatal encuentro el placer De Penélope en hacer y deshacer.
Sonetos de Matías Ibarlucea/ Poeta, músico/ San Martín, Buenos Aires / matiasibarlucea@hotmail.com 7
Sensaciones de agua, siempre la poesía como un gesto, una salvación. Reducto incesante donde mora la íntima unión con el universo, con el olor al canto de los grillos, agitado frotar de sus alas, con el paisaje del perfume verde y la brisa que sabe a todos los lugares que me alojaron en su seno de madre simbólica... Sensaciones de agua, conexiones, la piel que lo dice todo y me trae como raíz a la esperanza, esperanza mía, ruego, soga, ancla, mano que toma amable mi hombro, para que no me vaya, inventándola, inventándote esperanza, señuelo para seguir en este mundo, tan sembrado de hastío, tan invitante de muerte. Recuerdo mar de Chile en la roca, recuerdo piedra florida, rincón del cuerpo que lucha por no sucumbir ante el espanto... Recuerdo el amor en mi boca, aunque presente para seguir amando con locura de nostalgia y carne enamorada. El cielo siempre multi discursivo de nubes o su ausencia, pleno o en retazo citadino, paleta infinita: parece que fuera espejo de mi alma, como un lugar donde caer dormida, como un regazo para descansar de tanto humano deshumano, de tanta cosa ya perdida... Sensaciones de agua, rocío y mate, hoja, nervadura como mapa ante la indiferencia, nervadura como nudo al que atar la existencia. Corteza de eucaliptus, gotas vegetales como plumas perfumadas en un campo todavía limpio, en mascar la hierba y comer tierra. Recuerdo la lluvia en el verano, que son todos los veranos, el ciruelo y el damasco, y la pared pintada con cal. La luz rosa en el asfalto y el pino frondoso de la imaginación. Una señora antigua sentada en la vereda, diciendo en su figura un mundo de gallinero en el fondo bajo el imperio de la sola luz solar, diciendo comida hecha por manos y una vida predecible ... ¿Es inexorable el camino de la conciencia? Sensaciones de agua, y de luz y de polvo entre los dedos de los pies, la poesía como una salvación. Recuerdo el calor de Huaco, y su implacable mensaje de finitud y belleza. Recuerdo pisos de damero, alfombras mágicas, y pasillos frescos de la infancia. 8
Recuerdo el olor a podredumbre de las casas de todas las pobrezas del mundo, y el sobreviviente pasar de un momento a otro, sin más horizonte que una pared a un metro de la nariz y una zanja olvidada, zanjada a veces por la fiesta y el amor con harina barata... Recuerdo un lago azul del Sur y la selva fría imponiendo su ley de mujer salvaje y un viento anterior en las sierras como preludio del desastre. El río de Salta en otoño hablando con las hojas amarillas que se dejaban llover y así llevarse en la trasparente superficie y el perro hablándome sus males. Todo resuena, toma profundidad, lo envuelve una luz y late. Laberinto circular, sensaciones de agua y de todas las sensaciones como salvaciones, como poesía sensacional, salvacional como esperanza espantada, inventada, como poesía inventando la sensación de la esperanza para seguir inventado la vida, y la vida baile libre su propia danza.
Laura Gallo/ Cantautora, poeta/ Buenos Aires/ tierracantando@gmail.com/ tierracantando.blogspot.com/ 9
Movimiento
Un barco navega por las grandes aguas del mundo. Solitario el navío de colores que resultan inidentificables, un tanto avejentado y golpeado por la experiencia, se dirige a una velocidad moderada, no se sabe hacia qué dirección ni con qué fin. Simplemente el cuerpo flotante se entrega a la voluntad de la marea, como si reposara sobre ella sin preocupaciones. A veces, cuando el curso aleatorio de su ilimitada (?) travesía lo lleva al seno de océanos o mares, terroríficas tormentas lo batallan y el agua, que tanto lo ha cobijado, impunemente parece querer devorárselo como por un capricho inexplicable. Cualquiera que lo vea diría que no es más que un cacharro roído e inservible, que para lo único que podría ser útil sería para salvar algún náufrago en peligro de extinción (pero esas cosas nunca suceden). Aun así, a pesar de su dudosa impredecibilidad, solitario el navío de colores que resultan inidentificables, un tanto avejentado y golpeado por la experiencia, se dirige a una velocidad moderada, no se sabe hacia qué dirección ni con qué fin.
Gonzalo Del Valle/ Estudiante de música y antropología/ Gualeguaychú, Entre Ríos y Constitución, Ciudad de Buenos Aires / gonzalo.d.v@hotmail.com 10
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Atravesó su pecho dividiéndolo en dos revelándole con la luz su propia sombra. Despeinó su cabello alborotándole sus certezas sus resguardos Moldeó formas redondas con mano sabia cuerpos de barro girando incesantes Heló su corazón tras una mirada profunda vehemente. Se apoderó con dulzura de sus sueños aclarando con intensidad sus largas noches Sopló una ráfaga en sus labios transformando de un vuelco la calma en caos.
Laura Spagnolo/ Bailarina /Ciudad de Buenos Aires/
Fuego en Diciembre Son mis brazos los que dibujan, rápidas y constantes pinceladas, que en el aire, incansables buscan, acariciar el sueño de tus párpados. Voy devorando las maderas del silencio, que el olvido cruja, que se quiebre, que grite en chispas tu ausencia. -Yo no comparto la calma de la piedra, su consuelo de desértica permanencia. Menos aún, la tranquilidad cíclica, de mi escurridiza enemiga. No comprenden el secreto de mis ojos de carbón, Mi violencia es amor, quiero abrazarlo todo. Mi hambre de inmensidad, es juventud y rebeldía.Soy un instante rojo encaminado a la muerte, (luz en la noche y calor al invierno) que busca adherirse, que busca escaparse. La tranquilidad ya no duerme conmigo, mi danza seduce y mi locura transforma, y esta lengua quema, incontrolable, todo lo seco. Viento, enciende las melodías que lleva mi sangre, que no me encuentre la noche apagado, muerto. Y que en la gris ceniza del recuerdo, escriba una y otra vez, tu nombre.
Darío Martí Barros Seijas/ La Boca, Ciudad de Buenos Aires / dariomartinbarrosseijas@hotmail.com/
No sé hacer el amor, pero sé hacer guiso de lentejas a Juan, Martín, Leandro, Emiliano, Guillermo, Nicolás, Elías, Diego...
No sé qué estaré haciendo Me repito día a día Despertando en otras casas Distintas a la mía Dirán que soy muy fácil O bien “qué complicada” Y ambas serán acertadas Pues equilibro no tengo nada Es que todos hablan de amo Y yo sigo sin comprender Cómo hacen los que aman Para amar y no querer Todos hablan de amor Y dictan extenso discurso Y yo con el 302 Esperando sea mi turno Todos hablan de amor Y yo comprando la poscoito Me pregunto si el doctor Sabrá hacerme un aborto Todos hablan de amor Y yo encendiéndome otro pucho Mientras voy discando a Freddo Por helado en cucurucho Todos hablan de amor Incluso un par lo están haciendo Lo sospecho por la forma En que se agita ese Ford Éscort Yo no sé hacer el amor Pero sé hacer guiso de lentejas También rasguear acordes Do Fa Sol La menor séptima No sé decir te amo Y siento debo confesarlo: Yo no sé hacer el amor Sólo sé cómo ensayarlo.
Andrea Varchavsky/ Actriz/ 16
Odas con la bípeda calidad de definirse como sexuales y no ser más importantes que una naranja seca, la cual semejante a un vagabundo se revuelca abruptamente por las calles en son de redondez y precipicios indocumentados, o porque no una banana en forma de revolver. I Te han estafado exhortando al tejido, cacareando tono y semitono amoroso Sexto nexo terco Ensalada de ladrillos, jugo de gato Roast beef de señora El argumento no es válido Toda ciencia es fallida Espejo sin reflejo añejo Velo que revelo y resuelvo perplejo Plantando no en vano no en vano. II Entre bodas infernales y lechos edípicos la fortuna sexual crepita La diversión se había vuelto lúgubre Siempre recordando que de los pies saldrán líquidos verdes helados y el Orgasmo llegará en su caja hermética sellada por eclesiásticos hermosos curas Gélido orgasmo sacro Reprimido como anhelado
Iván Marincovich/ Estudiante, artista/ Barracas, Ciudad de Buenos Aires/ 17
Volver a Leer: Uso del diccionario
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¿Qué tal amigos de La Anónima? Nuevamente nos encontramos en las páginas de esta querida revista para repensar algunas cuestiones sobre nuestro oficio de escribir. Quienes venimos desarrollando esta profesión, vocación o ¿por qué no? compartimos el simple gusto por las letras, en estos últimos veinte años, contamos con una inapreciable ayuda que nuestros padres y abuelos del siglo pasado no tuvieron. Estoy hablando del famoso Auto corrector que cualquiera de los “Words” del paquete Office que usamos tiene incorporado. Realmente es una gran ventaja operativa a la hora de volcar en formato digital una producción escrita, sea cual sea. Sus beneficios son variados y harto conocidos. Obviamente que no voy a proponer novedad alguna comentando cualquiera de sus aspectos positivos. Por eso, más bien, me gustaría aprovechar este espacio para detenerme en algunos puntos que, si bien no son negativos propiamente del sistema, sí lo son en cuanto a la actitud que a veces nosotros tomamos. Muchas veces nos sucede que escribimos en nuestra PC, sin prestar mayor atención a la ortografía. En algunas ocasiones la máquina sola detecta el error y lo corrige automáticamente (como en el caso de ciertos acentos) y en otras, como cuando pifiamos alguna letra, la misma tecnología nos subrayará en rojo lo que está mal para que, con solo apuntar la flecha de nuestro mousse allí se nos despliegue un pequeño listado de palabras similares para corregir. Entonces nos relajamos. Confiamos a fe ciega en esta maravilla del ingenio humano y simplemente escribimos, dejando divagar nuestra mente en la fabulosa historia que queremos narrar, sin darle importancia a los detalles ortográficos, total quien realiza la sucia labor de maestra ciruela será nuestra querida operaria eléctrica. Ahora bien, no todos los errores en un texto son de tipeo u ortográficos a rajatabla. Hay ciertas palabras que no estando necesariamente mal escritas terminan provocando confusión. Por ejemplo: la palabra este. Dependiendo de su acentuación cambiará radicalmente su significado: este es un adjetivo demostrativo: este cuaderno, pero también este es la región de un territorio que además se relaciona con el punto cardinal (que se escribe en mayúscula Este). A su vez éste es un pronombre demostrativo (pero no siempre lleva tilde, solo para desambiguar). Y siguiendo con este intríngulis, si lo acentúo al final esté es una conjugación del verbo estar (cuando yo esté muerto). Sin embargo, de cualquiera de estas tres formas este-estééste el programa no me va a marcar error. Este detalle tan importante, que es poder contextualizar una palabra, darle la carga de sentido deseado, es una tarea que ningún aparato ha logrado aun concretar.
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----------------------------Entonces ¿qué hacer? Primero y principal, no dormirse relegándole el trabajo a la máquina. Como ya se recalcó en alguna oportunidad anterior releer es parte fundamental del proceso de escritura. Y segundo, frente a este tipo de dudas consultar siempre al diccionario. Ya sea el escolar común y corriente o si se quiere alguno ortográfico o de dudas. Cualquiera de ellos es útil. Mismo para los fanes de la informática los hay on-line. Uno muy bueno es http://www.wordreference.com/ Apropiarnos de esta herramienta fundamental, que es el uso del diccionario, nos facilitará la tarea y a su vez nos ayudará a escribir más claro y mejor. ¡A trabajar! Gito Minore/ gitomin@yahoo.com.ar/
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Barro de bocas secas Vuelcan las luces Del trono primordial Enfrente a la mueca De los planos desnutridos Barro de cuantas bocas secas Vuelan cínicas ironías Del poder sin papel Cruces del presente ayer Disfrutando de agua y abrigo Mofándose de todas las ideologías En un sueño de gala en antaño Iris de cuantos ojos ciegos Se cansó de ser sol el sol Pero ¿Hasta cuándo?
Cristian Sebastian David/ Músico, poeta/ Almagro, Ciudad de Buenos Aires/ sebastiancr_david@hotmail.com/ 19
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Claroscuro o negro andar De tantos claros que oscurece de suave recuerdo el despertar éstas son mis manos éste es mi altar. Ruego siniestro lo pensado regla de piedra imagino llevar soy mutante, medio raro soy corbeta sin capitán llevo décadas llegando a ningún lado cielo y tierra alejado sombra negra de mi altar éstas son mis manos ésta es mi verdad.
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ABC Las ansias el ardor jugando con el abecedario. Las palabras queman entre silencios a tu piel alfabética a mis letras mayúsculas de acá abajo...
Poemas de Edgardo Néstor Brites/ Ciudad de Buenos Aires/ 21
El mundo es un trompo da vueltas hasta agotarnos. Es un molino que gira en nuestra memoria y oscurece los latidos. El mundo suelta dados al azar nos sorprende nos golpea nos transforma como ratas amontonadas en ollas.
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Equilibro mi peso con el de la cartera para no c a e
r en la suciedad del asfalto.
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La poesĂa es una flecha que llega lejos no tiene precio nos lleva por autopistas hacia lo efĂmero de la palabra abre puertas hacia el abismo hacia la belleza del sol y nos une en cada latido.
Poemas de Ivana Szac/ poeta/ Buenos Aires/ ivapoetisa2012@yahoo.com.ar/ 22
Recuerdos olvidados Esas palabras que se secaron a olvidos. Esos recuerdos enterrados en el tiempo. Ese mirar de reojo por miedo a encontrarte. Un ebrio fugitivo se va sin pagar la cuenta. Una pareja justifica con besos el estar juntos. La lluvia que hiere las calles desiertas. Todo esto, es sin vos. El mundo quizĂĄs no necesite de mis ojos para existir. Pero seguro prescinde de tu recuerdo con cada dĂa que pasa.
Chensky 23
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Chau che Chau che, nos vemos en el próximo número pero antes, algunas cuestiones importantes sobre el delirio hecho revista. Recomendamos ferozmente abrir esta revista para apreciar el arte de tapa/contratapa completo realizado por Ser Sur Ediciones. Si ya leíste este número no lo tires, ni lo guardes en un cajón, compartílo, regalalo, dejalo en un banco de plaza, dáselo a un desconocido o inventa. Esta revista gratuita, se declara autogestiva y colectiva. Para mantenerla viva, es necesario darle amor e invitarla al cine . Los escritos aquí publicados pertenecen a sus correspondientes autores, está prohibido su uso sin mencionarlos. Los escritos de este número fueron corregidos, arreglados y/o diagramados según las exigencias de sus autores y el espacio disponible. Algunos signos de puntuación fueron añadidos o suprimidos según la lógica del escrito. Se pide disculpas por errores, fallas o correcciones innecesarias. Todo el material recibido será publicado en el próximo número. No hay selecciones por “calidad” o gusto. Agradecemos el apoyo y la motivación de las anónimas y anónimos que colaboraron de alguna forma. Un aplauso por el aporte desinteresado del poeta Gito Minore y del artista Tomás Vidal. //////////////////// La convocatoria esta abierta las 24 hs. Enviá tus material para el próximo número con nombre completo o seudónimo, profesión o vocación y mail a revistalaanonima@gmail. com. Te pedimos que la extensión de tu escrito sea similar a los publicados aquí. También abrimos la convocatoria para que puedas ser parte del equipo de trabajo de La Anónima. Escribinos con tu propuesta! ( También poseemos la opción de intalar sucursales en todo el sistema solar y sus alrededores ) Descarga, visita, imprimí y compartí en facebook.com/revistalaanonima sersurediciones.blogspot.com. issuu.com/sersurediciones
La Anónima no es de nadie, es de todos.
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