Revista Signum 44

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SIGNUM Revista

Año 3, Núm.44

ComunicacióN PolíticA & CulturA



SIGNUM Revista

ComunicacióN PolíticA & CulturA

Año 3, Núm.44

¿Quién será presidente? Por: Alejandro Arroyo

Cuidar el timeline propio para reconstruir el debate Por: Fernando Dworak

El rencor social y el voto útil Por: Sergio Uzeta

Mucha campaña, pero ¿Y la educación? Por: Gabriela Seoane

La Ley de Comunicación Social Por: Ricardo Homs


CONTENIDO

6 8 10 12 14 18 22 24 34

36 40 42 44 46 48 50 54 56

No se llenan vacíos con huecos: democracia carente Por: Claudia Guzmán

Mucha campaña, pero ¿Y la educación? Por: Gabriela Seoane

Cuidar el timeline propio para reconstruir el debate Por: Fernando Dworak

Cultura de la legalidad y cohesión social Por: Armando Hernández

Futbol y cultura Por: Cuauhtémoc Miranda

¿Quién será presidente? Por: Alejandro Arroyo

El rencor social y el voto útil Por: Sergio Uzeta

Políticas públicas, inclusión social y adultos mayores Por: Ileana Hidalgo

La Ley de Comunicación Social Por: Ricardo Homs

Elecciones y legitimidad política Por: Elvin Torres

Entre el decir y el hacer Por: Alfonso Gómez

La intolerancia nuestra de cada día Por: Eduardo Higuera

Empleo: derecho esencial para las personas con discapacidad Por: Fidel Pérez

La nueva sala constitucional de la CDMX Por: Moisés Vergara

Entrevista con: Ricardo Anaya Datos e información: su importancia en las elecciones Por: Diego García

La cobardía mira desde abajo Por: Manuel Grapain Grandes Personajes de la Historia Política Por: Rodrigo Díaz

DERECHOS DE AUTOR Y DERECHOS CONEXOS, año 3, No. 43 , 2018. Revista Signum Comunicación Política & Cultura, es una publicación mensual editada por M&D High Strategy Group, calle retorno 21 de Genaro García No. 12-301 Col. Jardín Balbuena, Delegación Venustiano Carranza, CP, 15900 Tel. (55) 55522465 y cuya página electrónica es: www.revista-signum.com Editor responsable: Claudia A Martínez Díaz direccion@revista-signum.com Reserva de Derechos al Uso Exclusivo No. 042015041712141100203, ISSN 1405-8499 ambos otorgados por el Instituto Nacional del Derecho de Autor, responsable de la última actualización de este número de Informática INDAUTOR, Ing. Juan José Pérez Chávez, calle Puebla, 143, Col. Roma, Delegación Cuauhtémoc, CP 06700, fecha de la última modificación: 30 de diciembre de 2017. Las opiniones expresadas por los autores no necesariamente reflejan la postura del editor responsable ni de la publicación. Queda estrictamente prohibida la reproducción total o parcial de los contenidos e imágenes de la publicación, sin previa autorización de M&D High Strategy Group. TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS.

DIRECTORA GENERAL Claudia Martínez Díaz

direccion@revista-signum.com

DIRECTORA DE COMUNICACIÓN Y ESTRATEGIA Mónica Martínez Díaz dircom@revista-signum.com

COLABORADORES (en orden alfabético) Alejandro Arroyo Alfonso Gómez Armando Hernández Carlos González Cuauhtémoc Miranda Claudia Guzmán Dunia Ludlow Diego García Eduardo Higuera Elvin Torres Fernando Dworak Fidel Pérez Gabriela Seoane Ileana Hidalgo Manuel Grapain Moisés Vergara Ricardo Homs Rodrigo Díaz Sergio Uzeta Yuri Beltrán

CONSEJO EDITORIAL (Por pares ciegos) DISEÑO EDITORIAL M&D High Strategy Group FOTOGRAFÍA Y PUBLICIDAD

Signum Comunicación Política SUSCRIPCIONES Y DISTRIBUCIÓN direccion@revista-signum.com VENTAS DE ESPACIOS Y PUBLICIDAD direccion@revista-signum.com Teléfono: 5523860423 y 26123392


CARTA EDITORIAL

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stamos en el último mes de las campañas presidenciales. Son tiempos difíciles para reflexionar, argumentar y debatir. Aunado a la poca disposición cultural que tenemos para ejercitar nuestras habilidades retóricas, la campaña expone a flor de piel todo tipo de emociones, desde la pasión hasta el más visceral odio y resentimiento. Si no se hace algo, podríamos quedar expuestos a los embates de la demagogia, disfrazada de un lenguaje cuasi religioso, cuyo objetivo es vender certezas en un entorno donde solamente debería haber respeto a la pluralidad y responsabilidad por las decisiones tomadas. En ese sentido, y de acuerdo con el desarrollo de las campañas y al desempeño de sus protagonistas, se presentan aquí tres escenarios a considerar con miras a la elección presidencial del 1 de julio próximo. Precisamente en ese contexto, la entrevista en esta edición es con Ricardo Anaya Cortés, candidato a la presidencia de México por la coalición “Por México al Frente”. En esta conversación Anaya nos habla de sus propuestas, de sus razones para ser presidente, de la democracia y la justicia, pero sobre todo de su visión de país, una entrevista que no puede perderse. Por otra parte, no cabe duda de que el proceso electoral y las campañas del 2018 han puesto sobre la mesa fenómenos que son reflejo de los contrastes que se dan en un país tan complejo y diverso como el nuestro. Hablamos del rencor social y del llamado voto útil, dos expresiones que no son excluyentes, pero que se ubican en los extremos que marcan la emoción visceral y el uso de la razón. Las mismas encuestas han asumido un papel de juez y guía de las opiniones convirtiéndose en un oráculo griego que presagia un destino inevitable, dejando de lado que son herramientas que no necesariamente confirmarán tener razón, pero generando una expectativa de guerra de no cumplirse su “profecía”. Desafortunadamente hoy palabras como congruencia y tolerancia adoptan diversas dimensiones, por un lado, en el terreno de la política no existe una definición que abarque el término congruente porque francamente su sentido es muy elástico para algunos de los personajes protagónicos actuales, y por otro, ahora la palabra tolerancia está mal vista, pues para muchos presupone un término en el cual hay una relación de poder. El hecho es que la elección es inminente y será muy importante alentar la participación ciudadana para acudir a las urnas, apelando siempre a que se dé una elección copiosa, abierta y transparente. Estos son algunos de los temas que nuestros colaboradores analizan en esta edición, pero también podrá encontrar otros como: la nueva Ley de Comunicación, la cultura de la legalidad y la educación para el próximo sexenio. Como siempre, agradecemos su lectura, comentarios y sugerencias. El consejo editorial


No se llenan vacíos con huecos: democracia carente Por: Claudia Guzmán*

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ara nadie es desconocido (por lo menos en la actualidad mexicana y latinoamericana) que gracias a los procesos electorales se ha iniciado una conversación, llamémosle así en el escenario más optimista o en el escenario más recurrente, una discusión sostenida y permanente. Lo cierto es que en conversaciones o discusiones, el diálogo es el mismo: la realidad de la democracia requiere de ruta y destino.

*Claudia Guzmán es diseñadora gráfica por la Universidad La Salle, cuenta con estudios en Grafología, Religiones del Mundo y Psicología. Actualmente estudia Administración Pública en la Universidad Latinoamericana. Es Coach Internacional Certificada por la ICC (International Coaching Community) con sede en Londres, dicha certificación cuenta con el galardón European Quality Award. Es parte del Consejo Directivo de COPARMEX Ciudad de México y es Presidenta de la Comisión de Mujeres empresarias de este Centro empresarial. Ha sido reconocida como una de las mujeres más influyentes en el sector público y privado por la Revista Expansión en su edición las 100 mujeres más poderosas del 2015. Fue nombrada Emprendedora del año por la Revista Mujer Ejecutiva en su edición 20 líderes mexicanas. Forma parte del observatorio ciudadano del IEDF y de la Red de observación electoral de este mismo Instituto. @ClauGuzG

La democracia se percibe lejana, se duda de su existencia, sus fundamentos se tambalean ante la experiencia de los tropiezos de las decisiones de las autoridades electorales y el comportamiento de los partidos políticos que desluce cualquier intento de definición. Algo está faltando, no sé si distancias, definiciones o afirmaciones. Lo que me parece real, es que se anhela, aunque desde espacios de carencia, es decir; desde la ausencia, y contrariamente desde la controversia. Se advierte una democracia que se encuentra vacía, sin presencias, ajena a cualquier sentimiento de pertenencia ¿Cómo una sociedad puede ver en su régimen un sentido de identidad, si todo lo que la contiene más bien contradice y la contrapone por sus escenarios y actores? Suena a teatro, ¡y así se percibe! La realidad de la democracia mexicana es que se encuentra lastimada, más que eso, ¡desahuciada! Ante este fatídico escenario, ¿cuál es el remedio y el trapito para resolver el conflicto en el que nos hayamos metidos? En qué momento esto de la democracia se convirtió en luchas entre jaurías, ¡disculpen la alegoría!, pero es que se discute con tal rabia y con tan salvajes recursos que a eso pareciera ha quedado reducida. En el sentido más puro, la democracia ¿No se trata del respeto a la voluntad de los acuerdos de la mayoría? Un espíritu demócrata no debiera estar basado en la carencia, en lo que no existe, en lo que no hay. Debería enfocarse en otra óptica para ver lo que sí realmente es: la democracia es el triunfo de los acuerdos por sobre la intolerancia, por sobre la imposición y sobre la ignorancia. Habría pues que entender primero qué es y qué no es, cómo es y cómo no es, hacia dónde va y en dónde no se debe quedar. La democracia es el resultado de un proceso de acuerdo, de elecciones (del verbo elegir). Su naturaleza es la de la deliberación. Las sociedades contemporáneas son cada vez menos homogéneas y más plurales, por lo que lo único cierto es que no hay un solo punto de vista con el que todos estemos de acuerdo. El proceso de convenir estos acuerdos se expresa en lo que votamos ¡Esto es lo que es! Lo que no es, son esos jaloneos, esas “travesuras” con las que se


disfrazan los intereses no genuinos, las trampas, el deseo de obtener la ventaja. Debemos reivindicar el sentido de la existencia de la democracia, de su aspiración. La democracia, llanamente, es el respeto al consenso, la apertura frente a un disenso, no se trata solo de discurso, se trata del verbo y acción hacia el progreso y civilización. ¿Cómo es la democracia? La democracia es simple y está basada en la expresión de la participación ciudadana. Según Habermas, “en la concepción liberal la formación democrática de la voluntad, tiene exclusivamente la función de legitimar el ejercicio del poder político. Los resultados electorales constituyen una licencia para asumir el poder de gobernar, mientras que el gobierno ha de justificar ante la opinión pública y el parlamento el uso que hace de ese poder” (2008, p. 375). Mientras que, conforme con la concepción republicana, la formación democrática de la voluntad tiene la función, esencialmente más fuerte, de constituir la sociedad como una comunidad política y mantener vivo con cada elección el recuerdo de ese acto fundacional (Habermas, 2008, p, 376).1 ¿Hacia dónde va? Hacia la hipermediación, el uso de las tecnologías es el nuevo cauce por donde corre el derecho a la libre expresión. Datos de la Asociación de Internet MX en su Estudio sobre los hábitos de los usuarios de Internet en México 2017, señalan que 6 de cada 10 entrevistados, consideran que Internet los acerca a los procesos democráticos en México. Según esta misma estadística, 9 de cada 10 internautas están interesados en los procesos electorales de este 2018 y estarán pendientes de esta información en línea y el 92% en redes sociales.

El mayor interés de búsqueda de los usuarios son las campañas políticas con 85% y el menor los partidos políticos con el 56% ¿Así o más claro? la democracia va hacia la ruta de la expresión, manifestación, difusión y promoción digital. La democracia no se define solo en una jornada electoral, no se trata únicamente de un concepto, es la suma permanente de espacios en donde se expresa la participación ciudadana, es el cauce para ejercer de forma efectiva derechos y libertades. Es momento de la evolución de la democracia hacia modelos incluyentes que reivindiquen la pluralidad, no solamente se trata de homologar criterios, se trata de legitimar acuerdos, de encontrar modelos de genuina representatividad. ¿Dónde no debe quedar? En un régimen vacío, los vacíos no se llenan con huecos, es momento de exigir a nuestras autoridades electorales, a los partidos políticos y a las propuestas de cada uno de ellos, sustancia que esté llena de soluciones a la realidad. La próxima revolución debe ser la evolución de un sistema y de un régimen ya desestimado. “Toda revolución dice Ortega y Gasset, es una tentativa por someter la realidad a un proyecto racional”, es ahí a donde debiéramos llegar, a la racionalidad y a la congruencia de una democracia basada en el respeto a la integridad.

REFERENCIAS 1. Dominguez. H. Democracia deliberativa en Jürgen Habermas* Medellín Colombia. Vol. 4. No. 5: Analecta política -El texto hace parte de la investigación que el autor está realizando para optar al título de Maestría en Filosofía en la Universidad Pontificia Boliviana. -Habermas, J. (2008). Facticidad y validez. Madrid: Trotta

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Se advierte una democracia que se encuentra vacía, sin presencias, ajena a cualquier sentimiento de pertenencia.


Cuidar el timeline propio para reconstruir el debate Por: Fernando Dworak*

S *Fernando Dworak Analista y consultor político. Licenciado en Ciencia Política por el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y Maestro en Estudios Legislativos por la Universidad de Hull, en Reino Unido. Entre sus libros se encuentra El Legislador a examen. El debate sobre la reelección legislativa en México (Fondo de Cultura Económica, 2003) del cual es coordinador y coautor, así como Caminando hacia el futuro. La experiencia de la movilidad en la Ciudad de México, coescrito con Laura Ballesteros (M2050, 2016). Es coordinador del Diplomado en Planeación y Operación Legislativa en el ITAM. Colabora en los portales Político.Mx e Indicador Político y en la Primera Emisión con Luis Cárdenas, por MVS. Profesor de asignatura en el ITAM y la Universidad Iberoamericana, también ha impartido cátedra en diversas instituciones académicas del país. Página electrónica: @FernandoDworak

on tiempos difíciles para reflexionar, argumentar y debatir. Aunado a la poca disposición cultural que tenemos para ejercitar nuestras habilidades retóricas, la campaña expone a flor de piel todo tipo de emociones, desde la pasión hasta el más visceral odio y resentimiento. Si no se hace algo, podríamos quedar expuestos a los embates de la demagogia, disfrazada de un lenguaje cuasi religioso, cuyo objetivo es vender certezas en un entorno donde solo debería haber respeto a la pluralidad y responsabilidad por las decisiones tomadas. ¿Sería posible hacer algo antes de caer en una espiral donde todos podríamos perder no solo las bases del entendimiento común sino incluso la propia democracia? Las expectativas no pintan bien a nivel de las masas. Los spots están hechos para captar la atención del ciudadano sobre un tema y por lo general se usan para mover emociones, no ideas o argumentos. Los debates entre candidatos sirven más para que evaluemos sus capacidades para la defensa y el ataque, que sobre propuestas o argumentación técnica. Y el entorno tecnológico privilegia la reacción inmediata y la visceralidad, apoyado en las redes sociales. Quizás la única esperanza se encuentre en nuestra responsabilidad frente a nuestro entorno y particularmente nuestros timeline, como Cándido con su jardín. La apuesta: lograr un cambio si cada quien pone de su parte al convertir sus redes sociales en espacios para el debate y la argumentación a través del intercambio de ideas. Van algunos consejos: No perder el tiempo con fanáticos. Hay varios nombres según las filias y fobias políticas para este tipo de perfil: chairos, pejezombies, peñabots, maguichairos, entre otros. Son las personas con quienes no se puede discutir


y que generalmente reaccionan de manera virulenta ¿Son tontos? La evidencia señala que se encuentran tan convencidos de algo que se han vuelto impermeables a toda información contrastante, y son tan inteligentes que pueden hacer cuanto salto lógico sea necesario para no cuestionarse. Detenerse con ellos para intercambiar puntos de vista es tiempo perdido. Y nunca bloqueen a alguien: solo lo harán sentirse justificado. Contar hasta cien. La mejor respuesta en redes sociales no es la inmediata, sino la ponderada. No tienen por qué contestar todo tipo de cuestionamientos. Muchas veces conviene distanciarse un poco, tomar aire, hacer otra cosa y luego pensar si vale o no la pena. Recuerden: lo que pongan puede ser usado en su contra en el futuro. Cuidar el lenguaje. Usen lenguaje llano y claro. Eviten hasta lo posible los calificativos, pues no abonan al razonamiento. Sean amables y tiendan puentes cuando se puede entablar un diálogo. Cultiven la labia y la soltura en un entorno donde muchos privilegian mensajes telegráficos. La ortografía y la redacción adecuada cuentan, pues hablan sobre su capacidad para acomodar ideas y razonar.

Saber usar el humor. Últimamente se han presentado como actos de ingenio ataques, injurias, calumnias o la caricaturización grotesca. Abona al problema la facilidad para hacer memes. En lugar de cuestionar, conozcamos el método satírico y privilegiemos el ingenio y la ironía sobre la repetición escatológica de “Fecal” o “Meado”. Hay una diferencia entre los métodos cómicos de, digamos, Paco Calderón y cualquier monero de La Jornada. Contrastemos y abramos opciones. Ubicar falacias y atacarlas frontalmente. Conozcan las reglas del debate y distingan todos los razonamientos falsos sobre los que se basa buena parte de la discusión pública como la argumentación ad hominem, la falacia de autoridad, la de la mayorías y muchas otras. En lugar de caer en ellas cuando surjan, denúncienlas y exijan evidencias o razonamientos más sólidos. Sean amables. Aunque las redes sociales privilegian la inmediatez y el anonimato, deben ser un reflejo de la comunidad. Imagínense que a la persona la tenemos enfrente. La construcción de una democracia empieza desde nuestra propia responsabilidad. No lo olvidemos.

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La construcción de una democracia empieza desde nuestra propia responsabilidad. No lo olvidemos.


Futbol y cultura Por: Cuauhtémoc Miranda*

E *Cuauhtémoc Miranda es autor del libro Crónicas Hertzianas, historia de la radio en México editado por Interwriters. Estudió la carrera de Ciencias de la Comunicación en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, además realizó una maestría en Filosofía y Crítica de la Cultura por la Universidad Intercontinental. Desde 1992 ha sido productor y conductor para diversos grupos radiofónicos, entre los que destacan Televisa-radio, Radio Fórmula y Grupo Imagen. Es catedrático del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores Monterrey campus Ciudad de México. @cumiranda

n este verano se tendrá uno de los eventos deportivos más importantes del orbe, incluso, podría en algún momento eclipsar el proceso electoral del 1 julio en la República Mexicana. Hablamos del Campeonato Mundial de Futbol Rusia 2018, certamen que aglutina a 32 naciones y donde se mostrará quién es el número uno en esa disciplina deportiva que literalmente, mueve al mundo. En todos los sitios se sintonizará el televisor para ver la gran hazaña: derrotar al eterno rival, pero para aficionados y no aficionados, esta reunión puede tomar otros tintes si nosotros lo queremos. Este gran pretexto universal podría servir para incrementar la cultura que tanta falta nos hace, esto es, antes de cada encuentro futbolístico se puede investigar sobre cada nación; dónde está ubicada en el mapa, cuál es su gobierno, moneda, clima, historia, los máximos representantes en el arte, relación comercial y/o cultural entre los países confrontados. Cuántas preguntas se pueden responder partiendo de un enfrentamiento; se trata de tener mayores elementos para una buena charla, más allá de ver a 22 jugadores en la cancha y considerar si es fuera de lugar o el famoso penal. En esta línea cultural, sería importante tomar el ejemplo de España, donde el secretario de Estado de Cultura, Fernando Benzo y el presidente de la Liga, Javier Tebas, firmaron dos nuevos convenios de colaboración en los que ambas instituciones ponen en marcha diversas iniciativas para fomentar el acceso a la cultura. En primer lugar, convocar a la realización de cortometrajes cuyo objetivo es la promoción de los valores del futbol. Esta iniciativa otorgará premios en-


COMUNICACIÓN tre 10.000 y 30.000 euros para la ejecución de los proyectos. En segundo lugar, un plan de fomento de la lectura. En esta acción se realizarán videos donde algunos futbolistas profesionales responden con un extracto de un libro a una pregunta habitual de un periodista tras un partido. Son ellos los que animarán a leer y así aprovechar la repercusión directa que tiene el futbol en la vida de las personas. Además, futbolistas y deportistas hablarán de su relación con los libros o de algún libro que hayan leído recientemente. Sin lugar a dudas un atleta de alto rendimiento es una figura de mucha influencia en los diversos públicos, hay que aprovecharla; la pregunta sería, ¿este modelo podría aplicarse en México? Para tener una idea, según las cuentas definitivas de la Federación Internacional de Futbol Asociación (FIFA) y Kantar Sport, solo la final de la Copa Mundial de Brasil 2014 alcanzó una audiencia televisiva de mil millones de personas, mientras que la cifra total de

todo el torneo llegó a los tres mil doscientos millones de aficionados que disfrutaron en sus hogares las emocionantes contiendas. Si tanta gente está interesada en ver un rectángulo verde donde 11 futbolistas pretenden meter el balón en una meta, es momento de aprovechar esa movilidad de alguna forma; con un pequeño porcentaje de esa audiencia que se pase al lado de la cultura, ya se tendría una enorme ganancia. Las escuelas, centros de trabajo, la familia, no hay pretexto para intentar tener una dosis de cultura; se puede hacer al inicio del juego, en el medio tiempo; intercambiar ideas, reflexiones, historias, anécdotas; no todo es saber la alineación de los equipos y las estadísticas que en números siempre serán frías. Quizá todo esto se puede quedar en un simple sueño, pero es momento de buscar otra forma de ver el futbol y la cultura.

REFERENCIAS 1.https://elpais.com/cultura/2018/03/20/actualidad/1521561817_724708.html?id_externo_rsoc=TW_CC .http://es.fifa.com/worldcup/news/mas-de-tres-mil-millonesde-telespectadores-vieron-el-mundial-de-2014--2745549


El rencor social y el voto útil Por: Sergio Uzeta*

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l proceso electoral y las campañas del 2018 han puesto sobre la mesa fenómenos que son reflejo de los contrastes que se dan en un país tan complejo y diverso como el nuestro. Hablamos del rencor social y del llamado voto útil, dos expresiones que no son excluyentes, pero que se ubican en los extremos que marcan la emoción visceral y el uso de la razón.

*Sergio Uzeta es comunicador y periodista, y en la actualidad se desempeña como consultor independiente, especializado en el manejo de plataformas tecnológicas de comunicación y el desarrollo de talleres en manejo de medios, manejo de crisis y construcción de identidad pública. Ha sido director de Noticieros y Programas Informativos de Canal Once, conductor en Radio Fórmula y Radio Independiente de México; fue el director fundador del Canal Judicial de Televisión y también el primer director de Notimex, en su etapa de Agencia de Noticias del Estado Mexicano. En el servicio público también se desempeñó como gerente corporativo de Comunicación Social de Pemex y trabajó en la Unidad de la Crónica Presidencial durante las administraciones de Miguel de la Madrid y Carlos Salinas de Gortari. Es egresado de la licenciatura de Comunicación en la Universidad Iberoamericana, lugar donde también ha dado clases y diversos talleres. @UZETASUM

El rencor es una emoción destructiva, capaz por sí misma de amargar y arruinar la vida a quien lo experimenta. Puede considerarse una reacción hasta cierto punto normal por parte de quien siente lo que para él es una injusticia. El rencor se conecta directamente con la imagen o aquello que representa lo que nos es odiado; puede ser una persona, un partido político, un candidato, una doctrina económica o religión, etc. En el actual contexto mexicano, el rencor social puede definirse como el resentimiento que nace en un individuo hacia las personas que pertenecen a un grupo social más favorecido. El mecanismo mental es bastante elemental, al no ver que las facilidades de otros son alcanzables por él mismo, entonces culpa a aquellos otros individuos de males propios, y sin mayor razonamiento se adquiere un sentimiento de rencor. En un país como México, donde casi el 50 por ciento de la población vive en condiciones cercanas a la pobreza extrema, el rencor social ha ido creciendo, lo cual provoca una animosidad muy negativa cuyo siguiente paso es el odio y el ajuste de cuentas hacia aquello o aquellos que la persona ubica en el bando más privilegiado. Desde hace un par de sexenios, los mexicanos hemos transitado de un discurso de odio de connotación racial, religiosa, ética, sexual, al discurso de odio ideológico y de clase. Este fenómeno resulta preocupante, ya que en el clima de confrontación política que vivimos, el discurso del odio prende con facilidad y amenaza con ver como natural la dinámica de ajuste de cuentas entre las personas. En el otro extremo se ubica el voto útil, fenómeno que, a final de cuentas, tiene que ver con un voto estratégico más razonado y menos emotivo. La primera vez que se escuchó la expresión “voto útil” en México fue en 1988. Entonces, los ultras de izquierda insistieron, clamaron y exigieron al ingeniero Heberto Castillo que declinara a favor de Cuauhtémoc Cárdenas, en ese momento candidato del llamado Frente Democrático Nacional, conformado por tres partidos pequeños


y satélites al poder presidencial. El ingeniero Castillo se vio obligado a declinar. Cedió la candidatura y hasta el partido. En el 94 lo que privó fue el voto del miedo, tras el levantamiento del EZLN en Chiapas y el asesinato del candidato presidencial del PRI, Luis Donaldo Colosio. Entonces, no hubo necesidad de promover el voto útil. La historia fue muy diferente en el 2000, cuando Vicente Fox fue el principal promotor y beneficiario de dicho tipo de votación. Fox sabía que las condiciones del mercado político requerían un cambio de producto, pero la marca anterior, el PRI, tenía una gran fidelidad ante sus consumidores. La única forma de ganarle a la marca preferida en un país conservador era demostrar que la mercancía estaba tan podrida que no habría sociedad que pudiera degustarla. Hay que destacar, sin embargo, que el voto útil no significa lealtad eterna, ya que lleva implícito el apoyo electoral sin mayor compromiso. En las elecciones presidenciales del 2012, el voto útil fue utilizado por el PRI para llamar a la población a una especie de referéndum que abriera la puerta al regreso de un gobierno priista tras 12 años de panismo. El domingo 1º de julio, un México dividido y confrontado acudirá a las urnas para elegir un nuevo presidente. En esta campaña hemos visto que los llamados al voto del miedo no han servido, ya que el enojo y el rencor social dominan las acciones de millones de mexicanos que darán su voto a Andrés Manuel López Obrador, candidato de la coalición “Juntos Haremos Historia”, conformada por Morena, PT y Partido Encuentro Social.

López Obrador ha encabezado las preferencias electorales desde el arranque de las campañas y la tendencia a su favor ha encendido las alarmas de aquellos grupos y élites de poder que sienten amenazados sus intereses ante la posible llegada del tabasqueño a la silla presidencial. Las especulaciones sobre la conformación de un bloque, que pudiera devenir en dique para contener el avance de AMLO, han dominado la agenda pública en las semanas recientes. Por ello, crecen las voces que llaman al voto útil para favorecer a quien viene ocupando el segundo lugar en las preferencias. En este caso el panista Ricardo Anaya, candidato presidencial de la coalición “Por México al Frente”, integrada por el PAN, PRD y Movimiento Ciudadano. El tema ha sido parte de la agenda mediática de los últimos días, pues las presiones de diversos intereses que no quieren al aspirante de MORENA han empujado a otros candidatos a declinar y sumar fuerzas con Ricardo Anaya. La elección es inminente y el ánimo caracterizado por el enojo y el rencor social son una poderosa fuerza que moverá a millones de mexicanos a la hora de votar. A los analistas y observadores de la vida nacional, lo único que nos queda es apelar a una elección copiosa, abierta, transparente y con un resultado claro, donde gane aquel candidato que obtenga el mayor número de votos. Más nos vale que el resultado sea avalado por todos. Solo así, evitaremos que nuestro país ingrese en un periodo de turbulencia política marcada por la confrontación, la violencia y el discurso de odio, síntomas de una sociedad harta de una clase política corrupta y abusiva.

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Violencia y discurso de odio, síntomas de una sociedad harta de una clase política corrupta y abusiva.


La Ley de Comunicación Social Por: Ricardo Homs*

E *Ricardo Homs, es experto en liderazgo social, estrategias competitivas de negocios, marketing político y posicionamiento. Dirige la empresa Ries & Ries México, empresa de consultoría en marketing y desarrollo estratégico de competitividad para marcas que forman parte de la corporación global fundada por Al Ries en Atlanta. Es Vicepresidente de la Academia Mexicana de la Comunicación, autor y conferencista. Ha publicado más de 23 libros con las editoriales más importantes y con temas relacionados con el liderazgo, el marketing y la comunicación. Forma parte del Editorial Board del Journal of Political Marketing, editado en Nueva York por The Haworth Press. @homsricardo

l tema de la nueva Ley de Comunicación Social que acaba de aprobar el Congreso y que ya fue publicada en el diario oficial, debe ser abordado desde una confusión que es notoria, ya que se habla de comunicación social, pero realmente se refiere a lo que es propaganda oficial, lo cual evidencia un mal manejo de conceptos y lleva a equívocos que son importantes destacar, pues hablan de la falta de conocimiento de lo que debe ser una ley de comunicación. La Ley de Comunicación Social que fue aprobada se refiere principalmente a las formas en que el presupuesto público debe ser utilizado para contratar propaganda política para las campañas del sector público. Sin embargo, se deja en el aire lo más importante que es: una política general de manejo de contenidos para que realmente se garantice, por una parte, el derecho que debe existir de libertad de expresión por parte de los medios de comunicación y por otra, también el derecho que tienen las audiencias de tener información real, confiable y que sea verídica. Pero eso no está contemplado en esta ley. En ese sentido, la confusión inicia cuando la comunicación social en el contexto tradicional del sector público en México, se ve como una labor informativa, como algo que simplemente consiste en dar a conocer al ciudadano lo que está haciendo alguna institución gubernamen-


tal y esto lleva incluso a muchos de los graves vicios que tiene el manejo de la comunicación social en nuestro país; primeramente el no entender que la comunicación no es lo mismo que la información. La comunicación forzosamente es un proceso integral donde debe haber un retorno o retroalimentación a partir del impacto que tenga el mensaje inicial y esto implica la necesidad que debiese existir de quien comunica, desde el sector público y más en el ámbito gubernamental, de estar consciente de los escenarios que pueden darse a partir de la información que se está compartiendo públicamente y de cuál es el fenómeno de opinión pública que puede generar, ya que mucho de lo que vemos hoy es que el manejo de la comunicación social, propicia ambigüedades e incluso, tiene luego un impacto negativo en el ánimo social y en la percepción pública. Este es el primer punto que valdría la pena destacar en el ámbito de la confusión.

Por otra parte, también debiésemos entender que cuando se habla de campañas públicas no estamos hablando de publicidad oficial, como se maneja, porque la publicidad siempre se remite al ámbito de lo comercial, de manejo de marcas, a la búsqueda de generar ventas y la comunicación política y social tiene una herramienta equiparable a la publicidad que se llama propaganda. Cabe señalar que la propaganda abarca campañas de candidatos en una elección, como también a las campañas que pretenden incidir y lograr cambios de actitud y de hábitos en el ciudadano, como las del sector salud, las que se enfocan en temas educativos o las que manejan temas de conductas públicas. Si nos preguntáramos de qué adolece esta Ley de Comunicación Social, podríamos mencionar que no permite blindar el manejo del presupuesto público, para que no termine siendo utilizado para promover

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Una ley de comunicación social debe abarcar todos los ámbitos de la comunicación pública, en búsqueda de garantizar tanto la libertad de expresión, como el derecho a la información.


la figura de un funcionario público en busca de nuevas oportunidades políticas, en lugar de aplicarse en campañas de beneficio social. Esta nueva ley no garantiza erradicar la práctica de utilizar al presupuesto de propaganda oficial, para presionar a los medios de comunicación en relación con sus contenidos informativos. Esto debe evitarse, ya que puede derivar en que la compra de tiempos o espacios oficiales para uso de propaganda, termine cooptando la libertad de expresión que deben tener los periodistas, porque cuando ese presupuesto sirve también para presionar, se está ejerciendo censura. Estas problemáticas no las contempla esta ley y por eso podemos inferir que es demasiado limitada en su impacto. Es conveniente se haga una reconsideración y se retome el tema, en la próxima legislatura, para analizarlo desde esas dos perspectivas: el mal manejo de

los recursos para uso y beneficio de un funcionario o de un partido político y evitar que estos recursos terminen generando influencia en el manejo de los contenidos, porque esto definitivamente nos remite a una censura muy discreta, muy sutil, pero al fin y al cabo, censura. Recapitulando, si aún esta ley la enfocáramos al ámbito de la propaganda oficial, debiese servir para evitar esos dos vicios usuales en la relación de las estructuras gubernamentales con los medios de comunicación. Ahora bien, si habláramos ya de una ley de comunicación social, debiera considerarse también buscar nuevas políticas que definan la responsabilidad de los medios de comunicación de decir la verdad, y cuando esto no se cumpla, se tengan consecuencias. Por otra parte, debiera abordarse también el tema de la comunicación en el ámbito de las redes sociales, el cual se ha dejado muy al aire y


por ello puede tener graves consecuencias, porque hay que decirlo, para poder garantizar el uso de las redes sociales a favor del ciudadano, hay que controlar el mal uso que se pueda dar a estas por medio de bots y de otros recursos tecnológicos que manipulan al individuo aprovechando un elemento que hay que destacar: el anonimato. No es lo mismo tratar de manipular desde los medios tradicionales, donde se conoce siempre de dónde proviene la información y quién está detrás de la información; que a través de las redes sociales en donde el desconocimiento del origen de la información, permite incluso la generación de fenómenos de comunicación que parten del la generación de mentiras e información falsa, también denominada fake news. La manipulación informativa en las redes sociales existe porque no se enfrenta por temor pues cuando la autoridad intenta poner orden, siempre se termina tergiversando la ley y apelando a un derecho. Ge-

neralmente se denuncia como un intento de querer limitar o coartar la libertad de expresión de cualquier ciudadano y de este modo se termina protegiendo a quienes están manipulando a la sociedad. Hay que destacar que todas las campañas políticas hoy se están dando en un ámbito de opacidad y manipulación total y absoluta, falseando hechos, magnificando datos o incluso hasta generando rumores y tergiversando la verdad, Esto no se debe seguir tolerando, porque definitivamente el impacto que va a tener en la sociedad es muy grave. A partir de lo anterior, una ley de comunicación social debe abarcar todos los ámbitos de la comunicación pública, en búsqueda de garantizar tanto la libertad de expresión, como el derecho a la información, que debe tener la sociedad en un contexto democrático como el que estamos viviendo.


Entre el decir y el hacer Por: Alfonso Gómez*

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a congruencia es una de las formas del comportamiento humano que se construye con el tiempo y nuestros actos. Se fortalece o se debilita de manera invariable dependiendo del sentido de sobrevivencia del individuo. La congruencia, por definición, es la conveniencia, coherencia o relación lógica que se establece entre distintas cosas.

*Alfonso Gómez Herrera lleva ejerciendo el periodismo desde hace 35 años. Fue reportero en los periódicos: Diario de México y El Sol de México. Reportero, investigador y conductor en Canal 13 de Televisión, posteriormente Imevisión (Canal 13 y Canal 7 TV). Trabajó durante 17 años en Grupo Monitor de Radio Red donde se desempeñó como Jefe de Redacción, de Noticieros Metropolitanos, Gerente de Información, Director de Información, Director de Internet y Director de Operaciones. Gerente de las emisoras XEFAJ 1560 AM XENET 1320 AM. En el sector público ha ocupado las Subdirecciones de Información de la PROFECO, y las Direcciones de Información en las secretarías de Gobernación y Economía. Actualmente se desempeña como Subdirector de información del GPPAN en la Cámara de Diputados. Es egresado de la carrera de Periodismo y Comunicación Colectiva de la UNAM, FES Aragón y actualmente cursa la Maestría en Periodismo Político en la Escuela de Periodismo, Carlos Septién García. @Alfonsogomez1

La congruencia nos permite orientar nuestro sentido hacia alguna persona cuando existe una relación entre lo que percibimos y lo que contrastamos con su actuación. Una jefa o jefe de familia se ven constantemente expuestos a pruebas de coherencia por la naturaleza de su entorno y los hijos son sus jueces. El líder de un grupo de trabajo, que predica con el ejemplo, obtiene el reconocimiento y consigue sus metas solamente si muestra congruencia. En la toma de decisiones, la gran diferencia entre los animales irracionales y los racionales es que aquellos reaccionan por instintos y los últimos obedecen a actos lógicos de asociación de significados, por lo tanto, una relación humana se trunca y desbarata cuando se falta a la congruencia o a la coherencia. “Cuando interpretamos los actos de una persona, esperamos encontrar congruencia. Si alguien es bromista y amable un día, nos sorprendería que se mostrara hosco y enojón al día siguiente, y trataríamos de hallar una explicación. La vida no es tan predecible como el funcionamiento de una máquina, pero esperamos un grado de congruencia, un patrón de conducta característico y más o menos constante de cada individuo. Cuando nos enfrentamos con la incongruencia, sospechamos que algo anda mal. Por eso se requiere un concepto de personalidad que proporcione cierto grado de certeza predictiva y alguna estabilidad para clasificar al individuo” 1


En el terreno de la política no existe una definición que abarque el término congruente porque francamente su sentido es muy elástico, tan amplio como el espectro de posturas que hemos visto en el puntero de la elección para la Presidencia de la República. En efecto, Andrés Manuel López Obrador se ha mostrado como el extremista que conocemos de hace más de 18 años: duro, exigente e implacable contra los privilegiados del poder, pero al mismo tiempo es amoroso, conciliador, tolerante, incluyente y hasta benevolente con los que en otro tiempo fueron sus antagónicos. Hablamos del político mexicano (hay quienes lo califican como el más querido y más respetado de este siglo), que lo único que quiere es un cambio justo y verdadero para nuestro país. Sin embargo, como aspirante presidencial, lo menos que debemos exigirle es congruencia, coherencia, transparencia, verticalidad, porque de lo contrario estaremos ante la más pueril intención de conseguir el poder a costa de los más bajos instintos humanos: la hipocresía, la traición y la alevosía, con el argumento de que todo es por la democracia.

Hablar de la historia privada de López Obrador es hablar del hombre público, el que dejó el PRI de Tabasco en 1983, cuando el gobernador Leandro Rovirosa Wade, escuchando las quejas de los militantes decidió pedirle la renuncia. En 1996, en una entrevista que le hizo el periodista José Frías Cerino, AMLO decía que sus grandes amores eran: “Mi mujer (Rocío Beltrán) es mi gran apoyo, es mi paraíso. Con ella he enfrentado siempre los momentos más difíciles de mi vida. Ella me ayuda, me apoya, me critica, es mi consejera, y mis hijos, bueno, lo mismo los gozo cuando puedo. El mayor, José Ramón, es el más serio, más introvertido, muy respetuoso; el segundo es Andrés, es candela pura, me cuestiona, debatimos, es contestatario, muy inteligente; y el chiquito, Gonzalo, es el que más extraña a su papá”.2 Hace unos días3 en el noticiario de Carlos Loret en Televisa, se decía que son pocos los que comprenden el círculo cerrado del tabasqueño, entre ellos se mencionó a Andy, el hijo de Andrés Manuel, identificado como el filtro político del partido, el encargado de asignación de puestos en el Congreso, jefaturas delegacionales, alcaldías, guberna-

COMUNICACIÓN POLÍTICA

AMLO es un político con oficio, “tiene tablas”, se le permite desviar la atención de manera impune y no se le encara para que hable con la verdad.


turas, tiene el control total de la Ciudad de México. Los presentados por Andrés Manuel López Obrador como parte de su gabinete, en caso de ganar, pasaron antes por la oficina de Andrés López. José Ramón López Beltrán, también hijo de Andrés Manuel, estuvo a cargo de la campaña de Delfina Gómez en el Estado de México; pero tras la derrota, su fuerza en el partido se vio mermada. A pesar de eso, el Estado de México continúa bajo su cargo. Gonzalo López Beltrán, tercer hijo de Andrés Manuel, tiene a su cargo la estructura operativa de los puntos del país que dejan libres sus hermanos José Ramón y Andrés Manuel. Siendo francos, su nepotismo es congruente más allá de que jure y asegure que, de llegar a la Presidencia de la República, sus vástagos no ocuparán puestos en la administración pública. Como se puede apreciar, está por verse. AMLO es un político con oficio, “tiene tablas”, se le permite desviar la atención de manera impune y no se le encara para que hable con la verdad. Algunos lo elogian porque se hace el gracioso y hace afirmaciones que son provocaciones e invenciones. Y si no, vean lo que contestó en la entrevista colectiva del programa Tercer Grado de Televisa, el pasado 3 de mayo. Carlos Loret de Mola (CLM), conductor: ¿Considera que Elba Esther Gordillo es una mujer corrupta? AMLO: Sí. CLM ¿Y qué hace su yerno y operador político y qué hace su nieto en su campaña?

AMLO: Pues están ayudando y así hay mucha gente que nos está ayudando CLM: ¿Y eso no es malo? AMLO: No. Fíjate, Carlos, que quienes usaron a la maestra o quienes tenían relación con ella, como suele pasar en estos casos, la convirtieron en chivo expiatorio, porque así lo hacen. Les ayudó, es una mafia; ya cuando no les sirven los desechan. Y yo tengo una debilidad, no me gusta que se ensañen con la gente. O sea, respeto a los perseguidos, a los presos. CLM: ¿Alfonso Romo, que está postulado para ser su jefe de gabinete? AMLO: A los finados los respeto mucho, no me meto con los muertos. CLM: Sí, no vayan a venir a “jalar las patas”. Oiga, ¿Alfonso Romo entra ahí? Ese fue un tema que por cierto en el video que subió… AMLO: Alfonso Romo es un empresario ejemplar, extraordinario, tiene dimensión social, es muy distinto a otros. A lo mejor no se sabe, pero Alfonso Romo es bisnieto de Gustavo Madero, él trae en la sangre su vocación democrática CLM: Usted habló muy duro de él en uno de sus libros AMLO: Sí, sí, claro. CLM: Lo tachó de corrupto AMLO: Claro, claro, claro, y yo creo CLM: ¿Ya no es corrupto? AMLO: No. Es que los hombres, todos tenemos altas y bajas; nos comportamos de una manera durante un tiempo y de otra manera después. Por eso, el juicio hacia un ciudadano, un dirigente, un político, el juicio final es hasta que uno se muere, porque yo conozco gente que se ha portado muy mal durante un tramo de su vida y luego se reivindica, conozco muchos.


Hay un peligroso rasgo que se ve en el puntero de la contienda, la incertidumbre con la que mide a las personas cercanas y las lejanas. Cuál es el verdadero Andrés que tenemos enfrente: el de hoy que busca garantizar un Estado democrático de derecho, en donde nada quede al margen de la ley y nadie por encima de esta. O el del presidente legítimo del 2006. Cuál es el verdadero Andrés: el padre de familia que ve a sus hijos creciendo de manera independiente, como en cualquier familia mexicana, o el que los cobija de manera hipócrita dentro de su círculo cercano en su partido familiar MORENA. Cuál es el verdadero Andrés: el que rechaza el nuevo aeropuerto o el que matiza diciendo que siempre sí va, pero mediante la concesión a los inversionistas privados, pasando por alto que en el arrebato de su negativa inicial argumentó que el terreno es fangoso y que representa un peligro para la aviación. Cuál es el verdadero Andrés: el que llama “minoría rapaz” a los miembros del Consejo Mexicano de Negocios o el que busca un acercamiento posterior con la Coparmex y el CCE con tal de enviar un mensaje de conciliación, habiendo sembrado entre millones de mexicanos la semilla del odio clasista, de pobres contra ricos. Al final de todo, el Andrés de antes o el Andrés de hoy representa la oportunidad para que el poder cambie de polaridad, sin modificar la existencia para

la mayoría de su feligresía. O que alguien explique, a qué obedecen tantas reconversiones de panistas convertidos en morenistas, perredistas en morenistas, priistas en morenistas, homófobos convertidos en libertinos morenistas. Todos ellos están buscando no perder los privilegios actuales del poder, acercándose al hombre que ha perdido la congruencia en aras del deber político de “conducir” a la nación. Regresando a la definición de congruencia, líneas arriba, sospechamos que algo anda mal y es posible que estemos cerca de presenciar que, con el pretexto de “otorgarle” el poder al pueblo, la toma de decisiones del gobierno pase por el tamiz de la masa y que veamos el nacimiento de una nueva manera de mediatizar el poder. En palabras de AMLO, “la patria es primero. Yo tengo una responsabilidad y así la asumo para conducir un movimiento de transformación, está de por medio el interés del pueblo, el interés de la nación. Ante eso, no hay nada”.4 Esperemos que este propósito no sea el gran espejismo del que millones se arrepentirán después.

REFERENCIAS

1. García González, Eva Laura, Psicología General, 3ª edición, México, 2014, Grupo Editorial Patria, pp. 164 https://bit.ly/2KZ4CDk 2. Revista Proceso, julio 2000. https://www.proceso.com. mx/183647/lopez-obrador-en-tabasco-una-historia-en-claroscuro 3. Despierta con Loret, 11 de mayo de 2018. https://noticieros. televisa.com/programas/despierta-con-loret/ 4. Palabras pronunciadas por AMLO durante la toma de protesta como precandidato a la Presidencia de la República, 12 de diciembre de 2017. Periódico Debate. goo.gl/pUyUyb


Empleo: derecho esencial para las personas con discapacidad Por: Fidel Pérez de León*

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o basta con que se use el lenguaje correcto para referirse a las personas con discapacidad. No bastan uno o dos donativos, todavía falta mucho por hacer y las medidas asistenciales ya no son suficientes. Son necesarias acciones de fondo y precisas para generar un verdadero cambio, tanto a corto como a largo plazo, que repercuta en la vida cotidiana de cada persona con discapacidad en nuestro país.

* Fidel Pérez De León es Director General del Instituto de las Personas con Discapacidad de la Ciudad de México (INDISCAPACIDAD CDMX). Ingeniero Agrónomo con Diplomado en Mercadotecnia Política por el ITAM. Recibió el Premio al Mérito de Servidor Público que otorga la Comisión de Atención a Grupos Vulnerables de la LXII Legislatura de la H. Cámara de Diputados. Su trabajo le ha valido el reconocimiento de diversas asociaciones civiles. Ha participado como ponente en foros, congresos, encuentros, ferias y jornadas de inclusión, nacionales e internacionales. Ha desempeñado diversos cargos en la Administración Pública Federal, Estatal y Local, y es una persona con discapacidad física. Luchador incansable por la igualdad de oportunidades e inclusión de las personas con discapacidad. “La discapacidad no es contagiosa, la discriminación, sí” @fideldiscapacid

La lucha por erradicar la discriminación y propiciar la inclusión de las personas con discapacidad ha tenido como uno de sus principales ejes de acción, el dotarlos con los medios para que puedan desarrollarse con autonomía y libertad dentro de la sociedad. Para lograr este fin es necesario que puedan tener acceso y puedan mantener un empleo. Precisamente este 20 de junio, el Convenio 159 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), cumplirá 35 años. Dicho Convenio se titula, “Sobre la readaptación y el empleo de personas inválidas [sic]”. El Estado mexicano lo ratificó en 2001. Este convenio le dio continuidad a la “Recomendación sobre la adaptación y la readaptación profesionales de los inválidos [sic]” de 1955, también de la OIT, texto que surgió en la década inmediata a la posguerra. Los soldados que volvían de las filas después de la Segunda Guerra Mundial, y que durante el enfrentamiento habían perdido alguna función corporal, ayudaron a que las autoridades internacionales fijaran la atención en las personas con discapacidad. Aunque de fondo no existía una voluntad de lucha por los derechos humanos de las personas con discapacidad, la necesidad de reactivar la economía dio lugar a generar condiciones adecuadas para que los veteranos que habían regresado con alguna discapacidad pudieran reincorporarse a la fuerza laboral. Esto ayudó a que los organismos internacionales focalizaran su atención en las personas con discapacidad. El esfuerzo continuó en 1975 con la “Recomendación para el desarrollo de recursos humanos”, también de la OIT. Gracias a que 1981 fue declarado por la Asamblea General de la Organización de la Naciones Unidas (ONU), como el “Año Internacional de las Personas con Discapacidad”, se encaminó la redacción del convenio del 83.


De los 17 artículos que conforman el convenio, sobresalen el 1°, 3°, 4°, y el 7°, en donde se establecen los fundamentos de igualdad, que se promueva la obtención y conservación del empleo, y que las personas con discapacidad puedan progresar en la estructura de la organización. Es decir, como todo empleado puedan aspirar a escalar hasta la cúspide. Además, los miembros se comprometen a proporcionar y evaluar servicios de orientación y formación profesional, colocación, etc., para que puedan cumplirse estos estatutos. Por supuesto esta solo es una vertiente histórica de las diferentes normas, leyes, convenios, etc. En el marco internacional podemos citar textos tan relevantes como las “Normas uniformes sobre la igualdad de oportunidades para las personas con discapacidad”, emitidas por la ONU; y no debemos olvidar la Convención sobre los Derechos Humanos de las Personas con Discapacidad (CDHPD), cuyo artículo 27 blinda y vela por la protección de los derechos laborales de estas personas; por otra parte, brinda un marco legal oportuno que es pauta a seguir para las legislaciones de todos los países firmantes; en este tenor, tampoco podemos dejar de mencionar la Convención Interamericana para la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra las Personas con Discapacidad. En el espectro del marco jurídico nacional, podemos seguir un halo de no discriminación desde los artículos 1°,5°, 25° y 123° de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos; que pervive en los artículos 2°,3°,4°,51°,56°, 86°,132°,133°. Por cierto, en 2015 existió una iniciativa de ley para reformar los artículos 2° y 56°, donde se agregaban un

par de párrafos con la intención de adecuarlos más a los estatutos de la CDHPD y del Convenio 159 de la OIT; hasta el momento, tengo entendido, se mantiene estancada. También es oportuno mencionar la Ley Federal Para Prevenir y Eliminar la Discriminación o la Ley General para la Inclusión de las Personas con Discapacidad. Como mencioné anteriormente, no basta. Un marco jurídico no es suficiente si no existen acciones de facto. Por ello es necesario mencionar las políticas y programas realizados a partir de estas leyes. Por ejemplo, en la Ciudad de México se lleva a cabo el programa Empodera-T, que ayudó a 1,200 personas para que obtuvieran un empleo permanente. Este programa ataca el desempleo de las personas con discapacidad desde diferentes frentes: Empleo temporal (ha beneficiado a 3,100 personas); Capacitación para el Trabajo (ha beneficiado a 1,024 personas); Proyectos Productivos (que fomenta el emprendimiento, ha beneficiado a 14 iniciativas, afectado de forma positiva a 55 personas y un total de 21 familias); y, finalmente, Educación para crecer (ha certificado a 36 personas a nivel primaria y 102 en nivel secundaria). Concluyo, a 10 años de la CDHPD y a 35 del Convenio 159, debemos preguntarnos ¿Qué hemos hecho bien? Y ¿En qué debemos seguir trabajando para mejorar la calidad de vida de las personas con discapacidad? REFERENCIAS 1. Convenio sobre la readaptación profesional y el empleo (personas inválidas [sic]), Organización Internacional del Trabajo, núm. 159, Ginebra, 20 de junio 1983. 2. Ley Federal del Trabajo. Diario Oficial de la Federación, Ciudad de México, 12 de junio de 2015. 3. La Inclusión Laboral en México: Avances y retos; Biblioteca Mexicana del Conocimiento, Secretaría del Trabajo y Previsión Social, Ciudad de México, 2015.

COMUNICACIÓN E INCLUSIÓN

Dr, Ted Rummel, cirujano paralítico. Imagen utilizada olamente para fines ilustrativos.


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icardo Anaya Cortés nació en Naucalpan, Estado de México, pero desde muy pequeño su familia emigró a Querétaro.

Anaya es licenciado en Derecho por la Universidad Autónoma de Querétaro; tiene una Maestría en Derecho Fiscal en la Universidad del Valle de México; y un Doctorado en Ciencias Políticas y Sociales en la Universidad Autónoma de México. Es un candidato que abraza el humanismo político como forma de entender y ejercer la política. Considera que los problemas de México no son ideológicos sino prácticos y requieren de voluntad y decisión para enfrentarlos. Su gobierno sería el primero de coalición en la historia de México. Como él mismo lo comenta, le gusta ser disciplinado en todo lo que hace, pero sin duda lo que más disfruta es pasar tiempo con su esposa y con sus tres hijos.



RS. ¿Por qué quiere ser presidente? RA. Porque estoy convencido de que el país no va por buen camino. México no ha tenido un buen gobierno. Hoy tenemos un país muy inseguro, con una corrupción endémica que ha salpicado a la sociedad y

que año con año nos coloca como país encabezando los indicadores internacionales en la materia. Lo mismo ocurre con la impunidad. Y en lo económico existe mucho sufrimiento evitable, que estoy decidido a cambiar. Quiero ser presidente de México porque no me resigno a que tengamos que administrar

la mediocridad, sino que quiero encabezar un cambio, de fondo y con visión de futuro. RS.¿Cómo inició su interés por la política y para usted, qué es un buen político? RA. Siempre he considerado que la actividad política es el espacio en el que más se puede influir para transformar lo que está mal. Creo que un buen político es alguien que se encarga de tomar decisiones en beneficio de todos, pensando en el hoy y en el mañana, es decir, resolviendo los retos y problemas que enfrentan los ciudadanos en el día a día, pero también poniendo los cimientos para adelantarse a nuevos problemas y retos antes de que ocurran y estar preparado para ellos. RS. ¿Qué son para usted la democracia y la justicia? RA. La democracia es la forma como tomamos entre todos, aún con nuestras diferencias y coincidencias, decisiones en favor del bien común; en favor de los anhelos y de los problemas de la gente. Es una forma de gobierno incluyente y tolerante, en donde muchos, por medio de mecanismos legales, deciden mejor que uno solo. Por eso creo en el gobierno de coalición. La justicia es el gran pendiente de México. Significa dar a cada quien


lo que le corresponde, con la ley en la mano, y bajo un marco de Estado de derecho. Ese dar a cada quien lo que le corresponde significa lo mismo un ingreso familiar decoroso, que salud, seguridad y oportunidades de realización material y espiritual. También significa cero corrupción e impunidad, y castigo a quienes deciden romper el orden y las reglas de conducta que la sociedad decidió como válidas en sus leyes. RS. ¿Es Ricardo Anaya un candidato de derecha? RA. Soy un candidato que abraza el humanismo político como forma de entender y de ejercer la política. Creo que los problemas de México no son ideológicos, sino prácticos, requieren voluntad y decisión para enfrentarlos. Gracias a esa forma de pensar, fue posible que entre diferentes, sumáramos esfuerzos por el bien de México, y lográramos negociar un gobierno de coalición con varios partidos, organizaciones sociales, académicos e intelectuales, que tiene su expresión en la Coalición “Por México al Frente”. RS. ¿Nos puede mencionar tres propuestas que lo hagan diferente a los otros candidatos presidenciales? RA. Primera, sin duda, el gobierno de coalición, lo cual nos va a lle-

var a un auténtico cambio de régimen. Segunda, soy el único que propone un cambio radical en la estrategia para hacer frente a la terrible crisis de inseguridad por la que atraviesa el país. El modelo actual no funcionó y se debe cambiar. Nosotros es-

tamos convencidos de que no es solamente con más efectivos y con más recursos como se combate al crimen organizado y desorganizado, sino con instituciones más sólidas y con inteligencia. Con una Fiscalía autónoma e independiente que persiga los delitos; con una nueva Secretaría de Seguridad Ciu-


dadana; con más policías federales; y con la certificación de todas las policías locales, lo cual requerirá que las fuerzas armadas permanezcan en las calles hasta que eso ocurra. Una tercera propuesta es la intención de acabar con la imperante injusticia en la distribución del ingreso. Este gobierno ha sido el que más dinero ha tenido en la historia del país, y han sido un desastre en gastarlo. En mi gobierno privilegiaremos que sean los ciudadanos más que el gobierno, quien tenga dinero en los bolsillos. Por eso vamos a aumentar el salario mínimo desde el primer día, y a poner en marcha el programa de Ingreso Básico Universal, para que todos los mexicanos, por el simple hecho de serlo, gocen de una renta elemental. RS. Usted ha mencionado que es necesario romper con el pacto de impunidad existente ¿Qué quiere decir con esto? RA. El país enfrenta la peor crisis de su historia en materia de impunidad, y esto es en todos los aspectos. Desde la comisión de delitos que no se castigan en casi la totalidad de los casos, entre ellos los que más lastiman a los mexicanos, como el homicidio, el robo con violencia, el secuestro, el feminicidio, los

delitos cometidos contra menores o la extorsión, entre muchos otros, hasta la corrupción, que es nuestro principal cáncer en la vida pública. Es esa corrupción la que ha irritado a los mexicanos, tanto por el descaro con el que el actual grupo gobernante roba, como por la impunidad que le sigue a esos hechos. Y para ello vamos a modificar los artículos 102 y 108 constitucional, para que el presidente de la República en funciones pueda durante el tiempo de su encargo, ser procesado por la comisión de delitos, incluidos los delitos de corrupción. Y para ello proponemos también una Fiscalía autónoma por completo del Poder Ejecutivo, para que pueda investigar sin temor al presidente. Seré el primer presidente sin fuero, y sujeto a la ley, como cualquier otro ciudadano. RS. En México no estamos acostumbrados a los gobiernos de coalición, ¿qué ventajas tiene para la población este tipo de gobierno? RA. En efecto, es una figura innovadora en la política nacional. Nuestro gobierno será el primero de coalición en la historia de México. Ese es un modelo que ha sido exitoso en el mundo. Así han funcionado por ejemplo el


gobierno de Alemania a lo largo de muchos años. En América Latina, también ha habido experiencias muy exitosas de gobiernos de coalición como en Chile o en Uruguay, por mencionar dos. Se trata de partidos de distinto signo ideológico, en donde se privilegian las coincidencias por encima de las diferencias, pero en donde cada partido o expresión mantiene intacta su identidad ideológica y programática. En los gobiernos de coalición van de la mano estrechamente el presidente y su frente o coalición en el Poder Legislativo. De esa manera, el presidente logra sacar adelante una agenda de transformaciones y de decisiones trascendentes para el país, al tiempo que los partidos que lo impulsaron definen a los integrantes del gabinete presidencial. Gobernando juntos es posible sacar adelante cambios en beneficio de México. RS. ¿Qué asuntos privilegiaría en su gobierno? RA. Definitivamente el devolverle la paz y la tranquilidad al país será mi principal prioridad. Que los mexicanos vivan en un país seguro y en paz. Es el gran pendiente de los gobiernos de México desde hace muchos años, y tenemos que aceptar que el

modelo actual de seguridad no ha funcionado. Que la inseguridad n o solo no

h a disminuido ni se ha contenido, sino que alarmantemente se ha


disparado. 2017 fue el año más violento en los últimos veinte años, y está clar o

que eso no puede seguir así de ninguna manera. Ha llegado el mo-

mento de cambiar la estrategia. No podemos tener un país con tan alarmantes índices de inseguridad, propios de un país en guerra. Voy a devolverles la paz y la tranquilidad a las familias mexicanas. Y eso va de la mano con otra prioridad en mi gobierno, que será el de dotar a todos los mexicanos por igual de un piso parejo en oportunidades de bienestar económico y social. No es posible que existan 10 millones de mexicanos que todos los días se acuesten sin saber qué van a comer al día siguiente. No son mis únicas prioridades, Agrego una más: garantizar suficiencia de abasto de medicinas en todo el sistema público de salud en México. Ese ha sido un reclamo que he escuchado de las personas a lo largo y ancho del país en mi campaña. No es cierto que no haya medicinas por falta de presupuesto. Claro que lo hay. Lo que pasa es que se roban el dinero y dejan a la gente sin medicinas. Eso también lo voy a cambiar. RS. ¿Quiénes lo acompañarían en su gobierno? RA. No es aún el momento de mencionar los nombres, por estar yo en campaña, y porque


consideraré los acuerdos que en su momento se tomen al interior del Frente para ese propósito. Pero lo que sí puedo confirmar, es que seremos un gobierno que incluya a las mejores mujeres y hombres. Personas de trayectoria honorable, con capacidad y un profundo amor por México. Seremos absolutamente incluyentes de todos quienes siendo honestos y no corruptos, puedan aportarle a México la transformación que demanda el país. Voy a encabezar un gobierno de cambio verdadero. Un cambio profundo de régimen. Seremos el primer gobierno de coalición en la historia de México. RS. ¿Por qué los ciudadanos deberían creer en usted? RA. Porque soy una persona honesta que conoce a fondo los problemas y retos que enfrenta México. Porque toda mi vida me he preparado para servir a mi país. Y al igual que la mayoría de los mexicanos trabaja duro y desde muy temprano pensando siempre en el bien de mis hijos y en el país que les quiero dejar. RS. ¿Qué estrategias utilizaría para mantenerse comunicado efectivamente con la ciudadanía? RA. Es deber de un presidente comunicarse permanentemente

con los ciudadanos, mediante un diálogo de ida y vuelta. Estaré siempre en contacto con los ciudadanos, usando los medios de comunicación pero también las nuevas tecnologías de la información. RS. ¿Tiene confianza en la autoridad electoral? RA. Somos un país de instituciones electorales sólidas, que hemos creado los mexicanos con mucho esfuerzo a lo largo de las últimas décadas. Hoy gozamos de elecciones libres, competidas, y en donde el ganador no está decidido de antemano, como ocurrió a lo largo de la mayor parte del siglo XX, sino que se decide hasta el día de las elecciones. RS. ¿Cómo se imagina la mañana del 2 de julio? RA. Será un nuevo despertar para México. Ese día habremos de empezar a construir un México de oportunidades para todos y no para unos cuantos. No esperaremos al 1° de diciembre para que ello ocurra. Sino que empezaremos de inmediato, primero en el equipo de transición, luego con las bancadas del Frente en el Congreso y finalmente conmigo en la presidencia, a dar respuesta a los anhelos y legítimos reclamos de


las y de los mexicanos. El 2 de julio daremos el banderazo de salida a la edificación del mejor gobierno que haya tenido México. RS. Si no llega a la presidencia, ¿qué va a hacer? RA. Estoy convencido de que vamos a ganar. Hay una expectativa enorme en los mexicanos por cambiar a nuestro país y en ese propósito estamos sumando a millones de voluntades. Es ahí en donde me veo, encabezando ese esfuerzo de transformación, para tener el mejor gobierno que haya tenido México. RS. Si le pidieran definir a Ricardo Anaya como persona y como profesional, ¿Qué diría? RA. Soy un convencido de que el halago en boca propia es vituperio, así que prefiero no definirme en aquello que pueda sonar como autoelogio. Lo que sí les puedo decir es que soy alguien muy apegado a mi familia. Como la mayoría de la gente disfruto mucho el tiempo que paso al lado de mis tres hijos y de mi esposa. Me gusta estar con ellos tanto tiempo como sea posible. Como definición puedo decir que me gusta ser disciplinado en todo lo

que hago. Lo mismo en mi profesión como abogado, que como político y ahora candidato a la presidencia de México. RS. Si llegara a ser presidente ¿Qué México esperaría ver al terminar su mandato? Y ¿Qué esperaría escuchar acerca de usted? RA. Sin duda al terminar mi mandato espero entregar un México mucho mejor que el que recibí. Espero ver a un país más seguro, en paz y por supuesto, más próspero. Uno en donde la gente al despertarse en la mañana, no le quepa duda que estamos mejor que el país de 2018 que nos legó el PRI. RS. Por nuestra parte es todo, a usted, ¿qué le gustaría agregar? RA. Solo me gustaría añadir que tenemos a la vuelta de la esquina una elección entre dos visiones muy diferentes de país. La que propone que regresemos al pasado autoritario, populista y de un México que ya no es, como el que propone López Obrador, y el cambio para bien que proponemos nosotros en el Frente. Un México sin corrupción, en paz, y en el que la gente viva todos los días la realidad de vivir en un mejor lugar. Ese es el país que quiero y por el cual les pido su voto el próximo primero de julio. No dejen de votar. Muchas gracias.



Datos e información: su importancia en las elecciones Por: Diego García *

E

n el marco del ejercicio de los derechos político electorales, los Estados han creado instituciones que permiten dar certeza a los derechos a votar y ser votado; en México los actores políticos que principalmente interactúan en una elección son: las institucionales electorales, partidos políticos y la ciudadanía; quienes generan, comparten y difunden información con mayor auge durante el proceso electoral.

*Diego García Vélez es Licenciado en Administración y Maestro en administración electoral; tiene más de 20 años de experiencia en la Administración Pública y actualmente labora en el Instituto Electoral del Estado de México como secretario particular del Consejero Presidente. Es autor de diversos artículos sobre comunicación política, elecciones y participación ciudadana @dgv1968

La elección 2018 se ha caracterizado por la aplicación de las reformas que maximizan el ejercicio de los derechos político electorales de la ciudadanía y su integración a la esfera pública; entre estos destacan las candidaturas independientes y la integración paritaria de las mujeres en el registro de candidaturas al garantizar el principio de paridad en sus dos dimensiones. En el caso de las candidaturas independientes uno de los requerimientos que exige la norma es el cumplimiento del porcentaje de apoyo ciudadano para obtener el registro correspondiente, mismo que se realiza en función de la demarcación territorial en la que se participa, por ejemplo, para contender por la alcaldía en el municipio de Ecatepec en el Estado de México, se necesita conseguir el 3% de apoyos ciudadanos de la lista nominal de electores de ese municipio con corte al 31 de agosto del 2017, en por lo menos la mitad de las secciones electorales, dicha lista se integra con 1,217,175 registros que al calcular el 3% se traduce en 36,516 firmas de apoyo ciudadano. Para llegar a estas cifras, la cantidad de datos que se generan van desde quienes se registran en el padrón y lista nominal de electores, hasta aquellos que con su apoyo permiten, a quien aspira, obtener su registro, creando así una fuente de información primaria que permitirá al órgano electoral determinar el número mínimo de apoyos requeridos, eso por una parte, y por la otra, la base de datos que se integra, en su caso, con los apoyos ciudadanos recabados por el aspirante. El objeto de esa información una vez procesada, sistematizada y analizada, es que sería utilizada para que la autoridad electoral tomara una decisión objetiva y oportuna sobre otorgar o negar el registro como candidato al aspirante.


ELECCIONES Otro ejemplo de generación de datos y de información es que, de los más de 13,000 registros de quienes contenderán por un cargo de representación popular local en el Estado de México, igual que en el caso anterior, se integra una base de datos inicial por los actores políticos, que a partir de las solicitudes de registro en segunda instancia, permitirá que esa información sea organizada y sistematizada por el órgano electoral, para determinar con esa serie de elementos articulados, la procedencia de los registros y la paridad de género. Asimismo, en el cumplimiento de sus obligaciones, los actores políticos deberán administrar el uso de sus recursos para no rebasar el tope de gastos de campaña, mismo que se calcula en el Estado de México, multiplicando el 34% del valor diario de la Unidad de Medida y Actualización vigente, por el número de ciudadanos inscritos en el padrón electoral en el Estado, distrito o municipio de que se trate, con corte al último mes previo al inicio del proceso electoral. Para este cálculo es necesario conocer el número de ciudadanos inscritos en el padrón electoral de la demarcación de que se trate y el valor de la unidad de medida y actualización; si regresamos al caso de Ecatepec esto se traduce en un padrón electoral de 1,231,360 ciudadanos, la unidad de medida y actualización utilizada para el cálculo fue de $75.49 y el 34% de ese valor nos da $25.66. Tenemos entonces que 1,231,360 ciudadanos por $25.66 nos da un total de $31,596,697.6, mismo dato que utilizarán los actores políticos como referente para que no sea rebasado y

tomar la decisión sobre la administración de su financiamiento entre todas sus candidaturas; a su vez esta información será utilizada por el órgano electoral competente para llevar a cabo la fiscalización del ejercicio de recursos públicos; mismo procedimiento que aplicará para todas las candidaturas en el ámbito estatal. Un ejemplo de información histórica puede ser sobre los resultados de una elección anterior, la cual puede ser utilizada por los actores políticos con el objeto de tener un referente de cómo fue el comportamiento de la votación en una demarcación territorial y poder así generar información predictiva para plantear una mejor estrategia de participación, incluso para llevarla a cabo en la modalidad de una coalición. Como se puede apreciar, la información va de la mano con el proceso de toma de decisiones y es utilizada a partir de las necesidades de cada quien, con ello se puede visibilizar como la captación de datos permite recabar, organizar, sistematizar y analizar la información que será utilizada para que quienes toman decisiones dispongan de cifras y elementos críticos en un momento oportuno. Por ello la generación de información confiable, precisa y objetiva es una gran responsabilidad, pues existen decisiones que por su grado de importancia suelen ser cotidianas y no requieren de un gran análisis, pero por otra parte están las que se consideran de gran relevancia, ya que influyen de manera significativa en el quehacer electoral y deben ser consideradas como trascendentales, por lo que hay que tomarlas con los datos y la información precisa y veraz.


Mucha campaña, pero ¿Y la educación? Por: Gabriela Seoane*

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n días recientes se dieron a conocer las propuestas de los candidatos a la presidencia de México en materia de Educación. Cabe subrayar que tratándose de un tema tan importante, los candidatos presentan las propuestas de manera muy general sin detallar el cómo de la implementación.

*Gabriela Seoane es licenciada en periodismo y comunicación por la UNAM FES Acatlán y Maestra en educación también por la UNAM. Se ha desempeñado como guionista, redactora y reportera de radio y televisión. Ofrece capacitación para entrenamiento en medios y es profesora de cátedra del ITESM CCM en el Departamento de Español, Literatura y Arte de la preparatoria. @Gabseomx

Andrés Manuel López Obrador, candidato de la coalición Juntos Haremos Historia propone, entre otras cosas, becas para todos los estudiantes de nivel medio superior, a fin de evitar la deserción escolar, y una beca de 2 mil 400 pesos al mes parar los universitarios de escasos recursos. Alimentación en todas las escuelas de educación básica de las zonas marginadas del país. También señala que se suspenderán las cuotas de los padres de familia para la infraestructura de las escuelas en la cual se invertirá, así como en la instalación del Internet gratuito en todo el país. Cabe señalar que llevar a cabo estas propuestas implicaría ejercer un presupuesto bastante grande. Recordemos que el destinado para educación pública en este año es de 280 mil 969 millones de pesos. Cabría preguntarse si alcanzaría con estos recursos para darles las becas a los alumnos tanto de la educación media superior (811, 393) y a los de las universidades (390,075). También habría que cuestionar si se incluirá en estas becas a los jóvenes que pertenecen al bachillerato y/o universidades tecnológicas, a las escuelas normales; así como a los sistemas no escolarizados, lo cual evidentemente incrementa el presupuesto. Por otra parte, es importante reflexionar sobre la pertinencia de becar a todos los estudiantes, sin que se les exija cierta calidad (ofrece que no habrá rechazados de las universidades públicas). Es decir, todos entran a las universidades y además se les otorga una cantidad mensual sin que tengan que cumplir con un promedio mínimo ¿Esto fortalecerá la calidad educativa, como también propone el candidato? Todas estas ofertas se basan en el principio de que la educación no es un privilegio, sino un derecho del pueblo. En la propuesta no se


COMUNICACIÓN aclara si se pondrá esta condicionante para otorgar el apoyo económico o si, como se hizo en la Universidad Autónoma de la Ciudad de México que fundó López Obrador, se otorgará indiscriminadamente. En el último punto de su decálogo, el candidato de Juntos Haremos Historia señala que hará uso de las facultades del Ejecutivo para detener las afectaciones laborales y administrativas de los maestros por la Reforma Educativa. Esto implicaría, aunque no se aclara, suspender las evaluaciones docentes, ya que ha sido la principal demanda de un amplio grupo de profesores. López Obrador se pronuncia por cancelar la Reforma Educativa a la que califica de reforma laboral. Ricardo Anaya Cortés, candidato de la coalición Por México al Frente, se pone como meta lograr la cobertura educativa para el 50% de los jóvenes del país. Señala que se debe dar un mejor presupuesto a la universidad. Ofrece respetar la autonomía de las instituciones educativas y se muestra a favor de mantener los exámenes de admisión. Se pronuncia por seguir con la evaluación docente, pero también tomar en cuenta las opiniones de los maestros en la aplicación de la Reforma Educativa. Subraya la importancia de hacer énfasis en la preparación en ciencias, ingeniería y matemáticas.

Por otra parte, Anaya Cortés, dice que es importante actualizar el sistema de estímulos docentes a fin de garantizar la capacitación de los profesores. También establece que se deben reconocer las diferencias que hay por regiones. En este mismo sentido, Anaya se refiere a la importancia de reformar los programas de estudio de las normales. El candidato de Por México al Frente ha reiterado que no piensa cancelar la Reforma Educativa, sino mejorar su implementación. Destaca la importancia de modernizar el sistema educativo, también se muestra a favor de trabajar en la mejora de infraestructura. Sería importante que detallara la manera como piensa comenzar a reforzar las áreas de ciencias, matemáticas e ingeniería, lo que implicaría una modificación de los programas de estudio desde la educación básica hasta la superior, por lo que tendría que haber una amplia consulta, así como participación de especialistas en el área educativa. Es interesante que tome en cuenta las diferencias que pueden existir por regiones, ya que esta es una de las principales críticas que ha recibido la Reforma Educativa. El candidato del PRI, José Antonio Meade Kuribreña, se muestra a favor de la actual reforma educativa. Señala que mantendrá la evaluación a los profesores. Propone pasar de 25 mil a 100 mil escuelas de tiem-


po completo en las cuales se imparte inglés y computación a los alumnos, además de las materias regulares; también cuentan con comedor y pueden practicar actividades artísticas y deportivas. Dice que habrá un aumento salarial significativo para los maestros y un nuevo modelo educativo basado en tecnología. Este nuevo modelo implicaría una nueva consulta con expertos (como en el caso de la propuesta de Anaya), así como la modificación de los planes y programas de estudio desde el nivel básico. Meade también propone apoyos a los estudiantes de educación media superior, que se presume serán económicos. Promete deducibilidad fiscal para la educación superior. Otra propuesta es la creación de un Instituto Nacional para el Desarrollo Profesional Docente. En este último caso, tendría que aclarar si este Instituto reemplazaría a las normales o las sustituiría. Cabe señalar que en esta propuesta coincide con Andrés Manuel López Obrador y Ricardo Anaya, quienes se refieren a la necesidad de modernizar y/o reformar los programas de estudio de las normales. Tanto Meade como Anaya coinciden en la importancia de cambiar los programas de estudio y en la necesidad de dar una vuelta hacia la tecnología. Sin embargo, no hablan sobre llevar el Internet a todas las escuelas, propuesta foxis-

ta que retoma Andrés Manuel López Obrador. En ninguno de los tres casos existe (o al menos no lo han dado a conocer) un diagnóstico real sobre la situación de los planteles públicos en todo el país. Tampoco se presenta un estimado presupuestal para llevar a cabo todas las propuestas: más planteles, cambio de programas, uso de tecnología, y becas o ayuda económica para los estudiantes. En conclusión, de acuerdo con los planteamientos de los candidatos, el presupuesto será uno de los elementos fundamentales para poder llevar a cabo las propuestas que hacen en materia de educación. Se requiere trabajar con seriedad en la transformación de los planes y programas de estudio para que se prepare a los estudiantes de acuerdo con los avances tecnológicos y científicos que se viven a nivel internacional. También será fundamental la actitud de los maestros, muchos de los cuales se oponen a la evaluación e incluso a la capacitación. Ojalá y no seamos testigos de otro sexenio perdido en materia de educación.

REFERENCIAS 1.

2.

3.

S/A. La educación, según los candidatos. Reforma. Recuperado de: https://www.reforma.com/aplicacioneslibre/articulo/default.aspx?id=1394368&md5=4c480a506b4680b19391c20ba25acf16&ta=0dfdbac11765226904c16cb9ad1b2efe Poy Solano, L. Presupuesto para educación pública en 2018, sólo 0.2% mayor que el de este año. La jornada. Recuperado de:http://www.jornada.unam.mx/2017/11/19/ politica/015n1po SEP.http://www.snie.sep.gob.mx/descargas/estadistica_e_indicadores/estadistica_e_indicadores_ educativos_15MEX.pdf Redacción. Anaya presenta sus propuestas en materia educativa. El financiero. http://www.elfinanciero.com. mx/elecciones-2018/cuales-son-las-propuestas-de-anaya-en-materia-educativa


Nueva fecha: 3y4 de agosto 2018


Cultura de la legalidad y cohesión social Por: Armando Hernández*

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a cultura de la legalidad es un factor fundamental para la cohesión social, pues el respeto a la ley reduce las brechas sociales, mejora el funcionamiento de las instituciones y promueve el sentido de pertenencia entre los miembros de una sociedad.

*Armando Hernández Estudió en la Universidad Nacional Autónoma de México; es Licenciado, Maestro y Doctor en Derecho, con Especialidad en Derecho Constitucional, Derechos Humanos y Derecho Administrativo; ha ocupado diversos cargos en el Instituto Electoral del Distrito Federal y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación. Ha sido catedrático, instructor, conferencista y miembro de diferentes asociaciones vinculadas a la materia de Derecho, Derechos Humanos y Procesos Parlamentarios, también ha publicado artículos en DDHH. Actualmente es profesor de la Facultad de Derecho de la UNAM así como de varias universidades del país, y Magistrado Presidente del TEDF. @DrArmandoHdz

La cultura de la legalidad es el conjunto de valores, creencias y normas, que motiva a los ciudadanos a confiar y respaldar al Estado de derecho, al mismo tiempo que rechaza cualquier comportamiento contrario a la ley. La cultura de la legalidad implica que las personas estén convencidas de que el cumplimiento de la ley es conveniente para todos, pues representa los marcos normativos de la vida social y política. El respeto a la legalidad garantiza la convivencia pacífica entre los miembros de una sociedad, ya que solo cuando las personas cooperan en favor del grupo se pueden alcanzar acuerdos o normas que regulen la convivencia. Así, el reconocimiento de la ley es condición de la vida social. La cultura de la legalidad tiene un impacto en la cohesión social en al menos tres niveles:


1. Reduce las brechas sociales, pues la ley procura representar y defender los derechos de todos. De manera que la ley proporciona una estructura que regula la convivencia respetuosa y justa entre los integrantes de una sociedad. Así, por ejemplo, si determinado grupo intenta sobreponerse a otro, la norma puede corregir y sancionar este comportamiento.

de una sociedad. Cuando un grupo de personas comparte un mismo conjunto de ideas se crearán y fortalecerán vínculos de empatía, pues se entienden a sí mismos como integrantes de un mismo conjunto. Este mecanismo permite también respetar y superar las diferencias entre los grupos al existir un conjunto de normas que encaminan la convivencia.

2. Mejora el funcionamiento de las instituciones. Las instituciones marcan “pautas” o “formas” socialmente aceptadas de alcanzar determinados objetivos, cuando estos lineamientos no se cumplen el sistema falla. La cultura de la legalidad involucra el respeto a estas normas y logra que las metas se alcancen de acuerdo a lo previsto.

La cultura de la legalidad fortalece la cohesión social en función de que favorece la integración social, ya que plantea una serie de normas que garantizan la convivencia y la tolerancia entre sujetos. La legitimidad de la vida política depende en buena parte de estos factores debido a que decisiones públicas se considerarán más o menos válidas de acuerdo al nivel de consenso alcanzado entre actores sociales.

3. Promueve el sentido de pertenencia entre los miembros

POLÍTICA

Flor de loto: La ley no restringe la libertad. Por el contrario, sin ella, la libertad simplemente no existiría.


¿Quién será presidente? Por: Alejandro Arroyo*

E *Alejandro Arroyo Politólogo por la UNAM, conjunta experiencia en Gobierno, Poder Legislativo y Sector Privado. En el ámbito gubernamental ha sido asesor y enlace legislativo en la Secretaría de la Reforma Agraria y en el staff jurídico de la Presidencia de la República. Fue Director de Comunicación Social del Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de Familia (DIF). En la Cámara de Diputados fungió como Secretario de Enlace Legislativo y con Órganos de Gobierno del Grupo Parlamentario del Partido Nueva Alianza en la LXII Legislatura. Colaboró durante casi una década en la Firma de Cabildeo, Comunicación y Relaciones Estratégicas Fitch y Asociados, desde donde asesoró y acompañó a diversas asociaciones, empresas y corporativos nacionales y multinacionales en su relación con el Gobierno y el Congreso. Fue también profesor en la FCPySUNAM y en la Universidad Iberoamericana. @ElAletsArroyo

stamos en el último mes de las campañas presidenciales. Y aunque al momento de escribir estas líneas no se han celebrado aún dos de los tres debates pactados entre los candidatos, además de que eventualmente cabe la posibilidad de que se presente algún evento de gran envergadura susceptible de modificar el rumbo mismo de la elección, por la conversación pública existente hasta el momento, y de algún modo por las cifras que reflejan las diversas encuestas al día de hoy, todo parece indicar que el próximo presidente de México será Andrés Manuel López Obrador. No obstante el ánimo determinista que se presenta en cierta parte del electorado y en otra más de la opinión publicada, por un mínimo de honestidad intelectual y analítica vale la pena abrir el abanico de posibilidades y así elaborar un ejercicio que configure escenarios políticos y las razones de su puesta a cuadro. En ese sentido, y de acuerdo con el desarrollo de las campañas y al desempeño de sus protagonistas, se presentan aquí tres posibilidades a considerar con miras a la elección presidencial del 1 de julio próximo. Una vez que se sepa quién haya ganado, la discusión sobre su ejercicio de gobierno será motivo de otro análisis. Escenario 1: Andrés Manuel presidente. Sin duda es la estampa más probable. Lleva todo 2018 como puntero en las encuestas. Al margen de los números, que desde luego son fundamentales, la narrativa que él ha construido y la que gira a su alrededor lo han hecho un personaje prácticamente invulnerable a cualquier ataque. A pesar de sus evidentes deficiencias argumentativas y de programa de gobierno, es el candidato que mejor ha conectado con el ánimo social que impera contra la élite gobernante, y eso en la presente campaña electoral le ha valido más que los sesudos razonamientos técnicos de sus oponentes con todo y sus estrategas, voceros y seguidores, quienes por cierto están furibundos de que así sea. Si Andrés Manuel es presidente, será por seguir al pie de la letra su guion: no polemizar, no profundizar y mantener viva la llama antisistema. AMLO es quizá junto con El Bronco, el candidato más real y auténtico de acuerdo con el ser y sentir del mexicano promedio (“¡pus no llegué”!), y eso, ante un par de opositores cuyas candidaturas se perciben como muy forzadas y cuya personalidad es poco empática a nivel de masas, muy probablemente sea el valor y el motivo que lo lleven a la silla presidencial. Escenario 2: Ricardo presidente. Hasta el momento ocupa el segundo lugar de las preferencias, e igual-


Escenario 3: José Antonio presidente. Se ha dicho hasta la saciedad que es el más preparado, honesto y el de mejor trayectoria. Y es cierto. Lo que también es cierto es que su campaña adolece de al menos dos factores fundamentales: candidato y parti-

do. Como líder popular -requisito necesarísimo de casi toda candidatura- es nulo, y el partido que lo postula tiene los mayores negativos de su historia. Con esos lastres, para que se cumpla el escenario muy poco probable de ver a Meade como presidente -que cabe decir podría hacerlo tal vez mejor que sus oponentes- solo será a partir de dos posibilidades: que todo el aparato de Estado se vuelque contra los opositores en materia de movilización territorial y de recursos económicos, o que en Meade se presente una conversión de proporciones bíblicas que lo coloque en una imagen y una narrativa radicalmente opuestas a las que hasta hoy mantiene. Todo parece indicar que sus múltiples estrategas han estado equivocados en el camino andado. Apostaron por un electorado valorador de honestidades y capacidades técnicas. Está demostrado que esa no era la ruta. Tal vez Meade podría ser presidente en un contexto de normalidad democrática y en un país menos desigual al que tenemos. Corolario. “La elección más grande en la historia de México” está por definirse. Las lecciones son muchas y otras más todavía no las alcanzamos a vislumbrar. Hasta el momento, en el ambiente queda muy claro qué queremos y qué no como país. Queremos un México mejor, con crecimiento económico sostenido, libre de violencia, sin corrupción y sin impunidad; más educado, con mejores servicios y un largo etcétera. En lo que no nos hemos puesto de acuerdo es en los “cómos”, y precisamente en eso es en lo que el país se nos puede ir de las manos si no encontramos la fórmula o el mecanismo pronto.

COMUNICACIÓN POLÍTICA

mente lleva todo 2018 en esa condición. Para que sea presidente de México se tienen que conjuntar al menos tres factores. Primero, humillar a sus oponentes en los dos debates que restan y, como bien señala de manera recurrente Roy Campos, que se apropie de la conversación posdebate. Segundo, que AMLO cometa algún error o una serie de errores fuera de guion y que por alguna razón genere una decepción pública y masiva -lo cual es muy poco probable-, lo que haría que una franja importante de indecisos y votantes switchers volteen a ver a Anaya como su opción. Y tercero y quizá más importante, el factor priista a nivel local, es decir, que los gobernadores tricolores, al ver a su candidato presidencial irremediablemente derrotado, tuvieran en Ricardo Anaya como su mejor alternativa dividiendo el voto a favor de su partido en lo local, pero con apoyo a Anaya en la presidencial. Desde luego en un escenario de esta naturaleza cabe la posibilidad de que algunos busquen favorecer a Andrés Manuel, sin embargo, una coyuntura como la aquí planteada puede tener un peso significativo en el Día D. Ricardo Anaya es un político inteligente, estructurado, joven y propositivo, lo que desafortunadamente para él no juega como elemento clave en un electorado que ha dado muestras permanentes y persistentes de inclinarse más hacia lo emocional y no sobre lo racional, y que al día de hoy tampoco lo ven como alguien empático de las causas populares.


Políticas públicas, inclusión social y adultos mayores Por: Ileana Hidalgo*

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as políticas públicas como herramienta de la Administración Pública nacen en Estados Unidos de Norteamérica en la década de los 50`s, lo hacen en el marco del Estado de Bienestar, bajo el contexto de la guerra fría y un sistema económico y de gobierno capitalista que liberalizó las relaciones de trabajo de la vigilancia del Estado, supuso una categorización social, creándose diversas clases sociales y otorgando al ciudadano nuevas posibilidades de expresión/colaboración ante el Estado.

*Ileana Hidalgo es Licenciada y Maestra en Derecho, con especialidad en Derechos Humanos por la Universidad Castilla la Mancha, en España. Dentro del IEDF ha sido Directora de Organizaciones de Representación Ciudadana y Presidenta del Comité Derechos Humanos “Nuestros Amigos A.C.” También ha sido investigadora en el Instituto de Investigaciones Legislativas del Senado de la República “Belisario Domínguez”. Es conferencista a nivel nacional e internacional y también docente en varias universidades del país. @IleanaHidalgoR

Al contar el Estado con un gobierno sumamente paternal, se ensancharon las estructuras gubernamentales y a consecuencia de ello se creó un desequilibrio y una crisis de recursos económicos dado que el modelo de Estado de Bienestar requería del gobierno altas inversiones en recursos de todo tipo, así en Estados Unidos al igual que en otros países como México, llegada la década de los 80’s el Estado de Bienestar se agota: la burocracia excesiva, las malas decisiones de gobierno, el creciente déficit fiscal, la ineficiencia que trae consigo el centralismo, las crecientes demandas y los cuestionamientos que hace la ciudadanía a los gobernantes obligan al Estado a poner en práctica acciones para su adelgazamiento, así como a efectuar prácticas más abiertas y transparentes, donde la racionalidad del gasto sea efectiva. El Estado mexicano atraviesa entonces tres grandes crisis: de legitimidad, de eficacia y de eficiencia por lo que se ve obligado a abandonar el intervencionismo estatal en el ámbito económico, así como a utilizar tecnologías de gobierno pero con menos recursos y la incorporación de la ciudadanía, para intentar lograr mayor eficiencia y consenso respecto de la conducción del Estado. Así en nuestro país, el valor de las políticas públicas se eleva cuando se dan a conocer las tecnologías de buen gobierno, que en la visión de Ricardo Uvalle “son los instrumentos, procesos y/o técnicas que se caracterizan por concebir a la administración pública de conformidad con su realidad política, económica y cultural. Tienen como propósito mejorar las capacidades con que los estados cuentan para dirigir a la sociedad…” (1994: 308 – 309) siendo su principal característica la incorporación de la opinión ciudadana al gobierno. Uvalle menciona que son tres las tecnologías de buen gobierno: 1) gerencia social; 2) gerencia pública y 3) políticas públicas. Entendiendo por gerencia social, una modalidad de la acción gubernamental encaminada a combatir el deterioro en la calidad de vida; implica construir, implementar y dirigir los procesos relacionados con la calidad de vida de la sociedad, dando tratamiento básico a lo relacionado al bienestar social. En tanto, por gerencia pública, aquella dirección que se desarrolla en el ámbito de la vida pública, teniendo como referentes básicos la procuración de altos niveles de gobernabilidad, democracia política, descentralización y participación ciu-


POLÍTICA dadana, caracterizándose por eliminar instancias de decisión vertical o piramidal, sustituyéndolas por instancias flexibles, horizontales y con gran capacidad de adaptación; sin basar su capacidad de acción en el proceso administrativo tradicional (planificar, coordinar, organizar, dirigir y controlar). Ahora bien, las políticas públicas son la herramienta con que el gobierno cuenta para dar cabida efectiva a la participación ciudadana y respuesta a problemas públicos. Luis Aguilar Villanueva –uno de los principales estudiosos de las políticas públicas en Latinoamérica- las define como las decisiones de gobierno que incorporan la opinión, participación, corresponsabilidad y el dinero de los privados en su calidad de ciudadanos, electores y contribuyentes. Es decir, las políticas públicas son quizá el instrumento más inclusivo que puede utilizar el gobierno para crear, fortalecer y reafirmar vínculos con la sociedad. Vínculos que cuando hablamos de adultos mayores como grupo social adquieren particular relevancia, ya que en México el número de adultos mayores se encuentra en franco crecimiento, con proyecciones que exigen que se ponga cada vez mayor atención a la red de servicios que se debe proporcionar a este grupo poblacional y a los derechos humanos que el Estado debe garantizar. La Comisión Nacional de los Derechos Humanos refiere que los adultos mayores además de contar con todos los derechos que se encuentran reconocidos tanto en la Constitución Política mexicana como en los ordenamientos jurídicos que se derivan de ella, tienen derecho a: 1. No ser discriminados/as en razón de su edad. 2. Ejercer sus derechos en condiciones de igualdad. 3. Recibir el apoyo de las instituciones creadas para su atención en lo relativo al ejercicio y respeto de sus derechos. 4. Ser protegidas y defendidas contra toda forma

de explotación y maltrato físico o mental; 5. Recibir la atención y protección que requieran por parte de la familia y de la sociedad. 6. Vivir en lugares seguros, dignos y decorosos, en los que puedan satisfacer sus necesidades y requerimientos. 7. Recibir información sobre las instituciones que prestan servicios para su atención integral, seguridad social, educación y capacitación en cualquiera de sus niveles para mejorar su calidad de vida e integrarse a una actividad productiva. 8. Participar en actividades culturales, deportivas y recreativas. Para el ejercicio pleno de los derechos de las y los adultos mayores a través de las instituciones públicas, es pertinente el uso de las políticas públicas de manera que la inclusión sea efectiva y se dote a los adultos mayores de participación plena. La realidad exige que dejemos el enfoque asistencialista con este sector poblacional y que reivindiquemos el cúmulo de sabiduría del cual es poseedor este grupo social, las políticas públicas pueden y deben incorporar en cada etapa de su diseño la opinión y participación de los adultos mayores, es mucho lo que pueden aportar en la etapa diagnóstica de los problemas públicos, así como valiosa su participación en la implementación y evaluación de las mismas, abandonemos los paradigmas donde solo juventud, practicidad e inmediatez imperan. 15 de junio. Día mundial de toma de conciencia de abuso y maltrato en la vejez.

REFERENCIAS

1. Uvalle Berrones, R., Los nuevos derroteros de la vida estatal, Instituto de Administración Pública del Estado de México IAPEM, 1999. 2. Corzo Franco, Julio, Diseño de Políticas Públicas. Una guía práctica para transformar ideas en proyectos viables”, Editorial IEXE, México, 3ra. Edición, primera reimpresión, 2018


Elecciones y legitimidad política Por: Elvin Torres*

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os comicios electorales presidenciales del próximo primero de julio del presente año, obligan a replantear diversos escenarios políticos, los cuales deben de abordarse de manera heterogénea para un análisis preciso de lo que está en juego.

*Elvin Torres es Doctor en Filosofía con Acentuación en Ciencias Políticas por la Universidad Autónoma de Nuevo León, Maestría en Gobernabilidad y Gestión Pública, Instituto Ortega y Gasset, Madrid, España. Ha sido catedrático de maestría en la Facultad de Derecho y Criminología y Ciencias Políticas de la Universidad Autónoma de Nuevo León; asesor jurídico en el Congreso de Nuevo León; Director de Concertación Social, Desarrollo Social y Director de Empleo y Desarrollo Empresarial del municipio de Monterrey, Nuevo León. Actualmente catedrático de la UVM, consultor legal en Law Firm TorresGarza-Sada y jurídico Congreso del Estado de Nuevo León. @Elvin_TB

Las elecciones en el país, donde ochenta y nueve millones de electores tendrán la posibilidad de elegir al presidente de la República, 500 diputados federales, 128 senadores, 9 gubernaturas, 972 diputaciones locales y 1613 alcaldías, son trascendentales dada la gran oportunidad que tiene la sociedad de hacerle frente al gobierno, a los partidos políticos y servidores públicos que se postulan, esperanza que se renueva o se aviva cada tres o seis años a través de las elecciones locales o federales. Las elecciones son un elemento importante del sistema político mexicano a través del cual los ciudadanos tienen la posibilidad, cada cierto período, de premiar o castigar a los candidatos a puestos de elección popular. Aunque el sistema político ha tenido declives, en palabras del politólogo italiano Giovanni Sartori, la sociedad mexicana se ha empeñado para retirar a sus gobernantes cada seis años, evitando con ello golpes de estado y crisis política e institucional; ante esta reflexión, las elecciones son las que renuevan el sistema, le dan cauce, salida, base y, sobre todo, legitimidad al sistema político.


En vísperas de las elecciones, se debe alentar la participación ciudadana para acudir a las urnas y emitir el voto, es la única posibilidad que ofrece el sistema político para cambiar o frenar a determinado político. Las elecciones, sin duda, juegan un papel determinante y son elemento indispensable para la democracia de un país; además en este momento, tienen mayor alcance que los diversos mecanismos de participación ciudadana como el referéndum, plebiscito o revocación de mandato, que aunque han permitido empoderar a los ciudadanos, no tienen la fuerza ni la legitimidad que ofrecen las elecciones libres, periódicas y competitivas. Este primero de julio, las elecciones serán históricas, porque concurre la disputa por la silla de diversos puestos políticos tanto federales como estatales, las estadísticas muestran que las encuestas han dejado de ser atractivas y confiables; los ciudadanos cada vez se empoderan más y

participan, sobre todo tendrán un gran reto, ya que con su participación y voto se podrá cambiar la historia. La renovación del sistema político es indispensable para la vida democrática del país, evita el desgaste institucional, permite la renovación de los cuadros para dirigir el país, congresos federales y estatales. Las elecciones son el único mecanismo político que renueva al sistema, lo oxigena, lo reorienta y sirve de válvula de escape cuando el sistema electoral está desgastado. El corporativismo y el voto de masas no deben pesar más que la voluntad particular de la sociedad, que a través de su voto, tiene la gran oportunidad de premiar, castigar, ofrecer continuidad, atreverse al cambio, moverse o quedarse estática apabullando la democracia de un país.


La intolerancia nuestra de cada día Por: Eduardo Higuera*

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urante la segunda mitad del siglo XX una de las palabras más importantes, hoy condenada por muchos, fue tolerancia. Tras las terribles vivencias de la Segunda Guerra Mundial, las naciones del mundo buscaron que no se repitieran las atrocidades cometidas en ese entonces.

*Eduardo Higuera es un profes ional con 20 años de experiencia en el campo de la comunicación, colaborando en medios informativos, comunicación social institucional, producción de medios, posicionamiento y manejo de relaciones públicas. @HigueraB

La masacre de Guernica, los campos de concentración nazi, los gulags que en la práctica eran condena de muerte para cientos de miles de combatientes alemanes, los campos de reubicación de japoneses en Estados Unidos, las masacres de limpieza étnica en los Balcanes, los experimentos genocidas del imperio japonés en China y muchos hechos más, fueron los que hicieron que las nacientes Naciones Unidas buscaran que la tolerancia fuera uno de los pilares de la vida tanto al interior de cada país, como entre las naciones. Hoy la palabra tolerancia está mal vista, pues para muchos presupone un término en el cual hay una relación de poder. Sin embargo, creo que no debemos dejarla de lado tan fácilmente. El uso y comprensión de la tolerancia puede ser un buen primer paso en muchos campos de la vida social. Y es que desde los sitios menos esperados las sociedades construyen sus actitudes hacia el otro. Por ejemplo, ejercer la tolerancia ante las diferentes posiciones sobre la selección nacional como una forma de crear una mejor sociedad es un buen ejercicio para, mejorar la tolerancia en nuestro país. Y es que basta con que subas un tuit a tu red social personal para que decenas de tuiteros te ataquen, te tachen de vendepatrias y te digan que es una pendejada (así, con todas sus letras) el no apoyar a los mexicanos en estos momentos en los que la unidad es más necesaria que nunca. La duda que me surge es ¿la unidad de nuestro país o la unidad en torno a un equipo deportivo que nunca ha logrado sus metas y lleva diciendo que “ahora sí es nuestro mundial”, desde el ridículo de 1978?, ¿no sería mejor escuchar con tolerancia a los descritos en el panteón futbolístico nacional y mejor exigir que los ratones verdes entreguen resultados verdaderos?


Pero dejemos de lado la relativa banalidad de una copa del mundo y llevémoslo a terrenos mucho más serios. La democracia tiene como uno de sus fundamentos el fomentar el disenso entre las diferentes opciones políticas y proyectos de sociedad que se enfrentan en las urnas. Todo dentro de un marco de respeto hacia las personas que no comulgan con nuestros ideales, es decir la discusión política se encuentra acotada y garantizada por leyes y normas que fomentan la tolerancia política. Por eso es alarmante ver el nivel de agresividad que los diferentes partidarios, como si se tratase de una discusión entre hinchas de barras bravas; es decir sin otro argumento que la víscera y la consigna. Basta con postear que uno va votar por AMLO para que el ocurrente posteador reciba apelativos como chairo, chavista, mesiánico e ignorante; del mismo modo si se nos ocurre decir en una comida familiar que nuestro voto irá en favor de Meade los “corrupto”, “estás bien idiota (pero con otra palabra)” o “en qué país vives” surgen en segundos; ni digamos si expresamos que vamos con el candidato Anaya, los insultos son además porque fomentamos el pragmatismo político entre la supuesta izquierda y derecha partidistas, en pos de un proyecto egoísta y personal del candidato. Por supuesto que estoy matizando mucho los términos e insultos.

Curiosamente, el proceso electoral y la copa del mundo se traslapan y correrán en las mismas fechas. Los ánimos se exacerbarán aún más por los fracasos futbolísticos, estoy seguro de ello, y la recta final de la contienda, en la que será un jugar al todo o nada. La intolerancia nuestra de cada día será la regla que comande la vida en nuestro país, si no tenemos cuidado. Por esta razón creo importante revalorar la palabra tolerancia, porque no podemos pensar en algo mejor de forma tan inmediata para nuestro país, los cambios reales y duraderos no se dan por decreto o de un día al otro, así que ¿Por qué no empezar por simplemente no agredirnos ni calificarnos como si fuera la única forma de relacionarnos? Y este ejercicio no es solo hacia aquellos que prefieren a Alemania, España o Argentina como sus favoritos en Rusia 2018, sino para todos aquellos que tengan opiniones diferentes sobre los candidatos, partidos, instituciones, proyectos y propuestas o militantes y simpatizantes que no compartan nuestras ideas y deseos. Este camino nos podría ayudar a sanar como sociedad, lo contrario solo nos llevara a pensar que quizá la segunda guerra no fue tan mala que digamos ¿No cree usted querido lector?

COMUNICACIÓN POLÍTICA

Yo no soy patriota. Este vocablo que hace más de un siglo significaba la revolución y libertad ha venido a corromperse y hoy manoseado por la peor gente incluye la acepción, más relajada de los intereses políticos y expresa la intransigencia, la intolerancia y la cerrazón mental. Santiago Carrillo


La nueva sala constitucional de la CDMX Por: Moisés Vergara*

E

l 4 de mayo de 2018, fue publicado en la Gaceta Oficial de la Ciudad de México, el decreto por el que se expide la Ley de la Sala Constitucional del Poder Judicial capitalino, reglamentaria del artículo 36 de la Constitución Política de dicha entidad.

Moisés Vergara Trejo es Doctor en Derecho y Especialista en Derecho Electoral, grados que obtuvo con mención honorífica en las Facultades de Derecho de la Barra Nacional de Abogados y de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), respectivamente. Asimismo, es Licenciado y Maestro en Derecho por la Facultad de Derecho de la UNAM y cuenta con estudios de especialización en derechos fundamentales en la Universidad Carlos III de Madrid, España y con diversos diplomados en derecho electoral, argumentación e interpretación jurídica. Fue distinguido con un Doctorado Honoris Causa por el Instituto Mexicano de Líderes de Excelencia y es miembro de la Barra Nacional de Abogados, A.C. y de la Sociedad Mexicana de Estudios Electorales, A.C. Ha sido profesor universitario y ha ejercido de manera libre la profesión de abogado; entre otros cargos públicos fue asesor y secretario particular en la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión; Secretario Técnico Jurídico, Secretario de Consejo Distrital, Asesor de la Secretaría Ejecutiva y Asesor de Consejero Electoral en el Instituto Electoral del Distrito Federal. En el Tribunal Electoral del Distrito Federal, se desempeñó como Secretario Auxiliar, Secretario de Estudio y Cuenta, Coordinador de Ponencia de dos Magistrados Presidentes, y Secretario Administrativo. Actualmente es Secretario General del Tribunal Electoral de la Ciudad de México @moshivergara

En el referido numeral de la carta magna local, se establece que el Tribunal Superior de Justicia contará con una Sala Constitucional de carácter permanente, misma que será la máxima autoridad local en materia de interpretación de la Constitución y estará encargada de garantizar la defensa, integridad y supremacía de la misma, y la integridad del sistema jurídico local sin perjuicio de lo previsto en la Constitución federal. La Sala se integrará por siete magistradas y magistrados designados por el Pleno del Tribunal Superior de Justicia para un periodo de ocho años, sin que el número de integrantes de un mismo género pueda ser mayor a cuatro. El proceso de selección se llevará a cabo en sesiones abiertas y transparentes. La Sala Constitucional tendrá las atribuciones siguientes: a) Garantizar la supremacía y control de la Constitución; b) Declarar la procedencia, periodicidad y validez del referéndum en los términos previstos por la Consti-


POLÍTICA tución y las leyes en la materia; c) Conocer y resolver las acciones de inconstitucionalidad que le sean presentadas dentro de los treinta días naturales siguientes a la promulgación y publicación de normas locales de carácter general que se consideren total o parcialmente contrarias a la Constitución o de aquellas que, aun siendo normas constitucionales, hubieren presentado vicios o violaciones en los procedimientos de su formación; d) Conocer y resolver sobre las controversias constitucionales que se susciten entre los entes legitimados de conformidad con la Constitución; e) Conocer y resolver las acciones por omisión legislativa cuando el Legislativo o el Ejecutivo no hayan aprobado alguna ley, decreto o norma de carácter general o reglamentaria de la Constitución, o habiéndolas aprobado se estime que no cumplen con los preceptos constitucionales; y f) Conocer y resolver las accio-

nes de cumplimiento en contra de las personas titulares de los poderes públicos, los organismos autónomos y las alcaldías cuando se muestren renuentes a cumplir con sus obligaciones constitucionales y con las resoluciones judiciales. Estas acciones podrán ser interpuestas por cualquier persona cuando se trate de derechos humanos. Un aspecto importante es que, por disposición constitucional, la Sala no tendrá competencia respecto de recursos ordinarios en contra de resoluciones judiciales definitivas, emitidas por otras Salas del propio Tribunal Superior de Justicia. Por su parte, la referida Ley Reglamentaria, estatuye que la Sala Constitucional conocerá y resolverá con base en las disposiciones de ley, sobre: a) Las acciones de inconstitucionalidad;


b) Las controversias constitucionales; c) Las acciones por omisión legislativa; d) Las acciones de cumplimiento en contra de las personas titulares de los poderes públicos, los organismos autónomos y las alcaldías; e) Del juicio de restitución obligatoria de derechos humanos, por recomendaciones aceptadas y no cumplidas, a fin de emitir medidas para su ejecución; f) Las impugnaciones por resoluciones emitidas por los jueces de tutela en acción de protección efectiva de derechos humanos; y g) Las impugnaciones que se presenten en el desarrollo del procedimiento de referéndum para declarar la procedencia, periodicidad y validez de este. Asimismo, la Ley establece que, para resolver los asuntos cometidos a su competencia y jurisdicción, la Sala Constitucional deberá sujetarse a los siguientes principios: a) Interpretación conforme a la Constitución y con los tratados internacionales de la materia favoreciendo en todo tiempo a las personas la protección más amplia;

b) Maximización de los derechos fundamentales establecidos en la Constitución federal y en los tratados internacionales de los que México sea parte y hayan sido ratificados conforme a derecho; c) C riterio de interpretación material de las disposiciones constitucionales y legales, conforme al estado social y democrático de derecho; d) Criterio de interpretación procesal, considerando que el objeto de los procesos constitucionales, es obtener la observancia y cumplimiento de la Constitución local; y e) Impulsar de manera oficiosa el proceso, durante cada una de sus etapas. Del análisis realizado a la nueva Ley Reglamentaria, se advierte que otorga competencia a la Sala Constitucional para substanciar y resolver sobre las impugnaciones que se presenten en el desarrollo del procedimiento de referéndum sobre adiciones, reformas o derogaciones constitucionales aprobadas por las dos terceras partes de las y los miembros del Congreso local, las cuales podrán ser interpuestas por la parte legitimada ante la Sala Constitucional en un plazo de diez días, contados a partir de aquel en que sean publicados los actos materia de controversia.


Asimismo, tendrá competencia para declarar la procedencia, periodicidad y validez del referéndum en los términos previstos por la Constitución local y las leyes en la materia. Por su parte, la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Ciudad de México, prevé que para ser electa Magistrada o Magistrado de la Sala Constitucional se requiere: a) Cubrir los requisitos previstos en las fracciones I a V del artículo 95 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y del artículo 21 de la misma Ley Orgánica del Poder Judicial: ser ciudadano mexicano; tener cuando menos 35 años de edad; poseer título y cédula de Licenciado en Derecho con antigüedad mínima de 10 años; tener buena reputación; no haber sido condenado por sentencia firme; haber residido en el país los dos últimos años; no haber sido Jefe de Gobierno, Secretario General de Gobierno, Fiscal General de Justicia, o diputado al Congreso de la Ciudad de México el año previo a la designación; presentar declaración de evolución patrimonial; y aprobar los procesos de evaluación de control de confianza; y b) Adicional a lo anterior, tener

al menos 5 años de experiencia en temas constitucionales y/o de defensa de derechos humanos. Finalmente, la Ley Orgánica del Poder Judicial, también dispone que los nombramientos de las y los Magistrados serán hechos preferentemente de entre aquellas personas que cuentan con el Servicio Civil de Carrera Judicial y que se hayan desempeñado como juez o jueza o que hayan prestado sus servicios con eficiencia y probidad en la impartición o procuración de justicia, o en su caso, que por su honorabilidad, competencia y antecedentes en otras ramas de la profesión jurídica se consideren aptos para impartirla. En igualdad de circunstancias, se preferirá a los originarios o vecinos de la Ciudad de México. Sin duda, la conformación y entrada en funciones de la nueva Sala Constitucional de la Ciudad de México será un ejercicio interesante donde deberán estar los mejores perfiles, lo cual ocurrirá a partir del 1 de enero de 2019.


La cobardía mira desde abajo Por: Manuel Grapain*

L *Manuel Grapain, es Director, Guionista y Fotógrafo Cinematográfico, así como actor, egresado de la Escuela de Arte Teatral (INBA) como Lic. En Arte Dramático. Maestro en Mercadotecnia por la Universidad de la Comunicación, donde también es profesor en la carrera de Cinematografía. Forma parte de la Comisión de Evaluación del EFICINE PRODUCCIÓN que otorga el estímulo fiscal por la cláusula 189 de la Secretaría de Hacienda. @mr_manugz

a Bestia (Italia,1970). Un jinete con la mirada al frente viene acalorado, el sol cae a plomo, un par de arbustos bordean el camino, lo forman tierra y piedras que han caído por la ladera; un par de miradas lo ubican al cabalgar hacia el zoom de la cámara de Luciano Trasatti impoluta; deciden no disparar, “es solo el loco John” le dice uno al otro, “cualquier bala en él es un desperdicio”; error trágico de este par que sin saber desatan la sed de una bestia escondida al decidir cuidar el parque e ir en busca de otra presa a otro lado. Aparece un río para refrescarlo todo, el loco John bebe profusamente; a unos metros en la orilla opuesta, un par de manos, brazos y hombros desnudos tallan una y otra vez dejando en evidencia la gracia de una joven lavando ropa; tanta vida y voluptuosidad frente al loco John son problemas; es un fruto difícil de ignorar, así que se avalanza sobre la joven, le arranca la poca ropa que trae; sin embargo, no ha podido ultrajarla del todo, dos balas al aire lo detienen; suelta a la presa y huye. La joven tapa su desnudez tras el cuerpo de su salvador. En el pueblo todos se conocen, en la cantina también, John busca entre las meseras, alguna que cubra sus deseos de inmediato, pero ninguna se dispone, saben que no trae ni un centavo. Frustrado se le avienta a una que estaba en otro asunto y termina corrido del lugar, un amigo habla con él a solas. En paralelo, un grupo de hombres discuten un negocio, firman documentos en las oficinas del banco local, no sin ser vistos. La transacción es buena por $100,000.00 USD. El Sr. Powers echa a andar su carreta hacia el rancho, con un par de escoltas; a la altura de la tierra y las piedras, el Sr. Powers está por perder todos sus poderes, un par de acreedores le salen al camino, le quitan la valija, el tiempo y la vida. Al revisar el


CULTURA contenido, no encuentran dinero, solo comprobantes de transferencias y retiros. Otro esfuerzo del loco John que no trae más que el estómago vacío.

tienen; formar una alianza con el loco es una opción que toman por dos razones, ignorancia y necesidad, el resultado es la tragedia.

En el pueblo se preguntan por qué mataron al Sr. Powers, “dicen que no tenía enemigos” se escuchaba; el primer sospechoso por supuesto, casi por costumbre u obligación es El Machete, un mexicano líder de una banda de ladrones que sin embargo nada tienen que ver con el asunto. En ese momento llega una tabaquera a manos del sheriff, había sido encontrada por el alguacil en plena escena del crimen; en la cantina todos la han visto, es la tabaquera del soco del loco; al ser increpado el asesino del Sr. Powers se sabe perdido, pero se resiste a la aprehensión, cuando trata de huir en su caballo, una bala muy certera atraviesa su corazón.

Después de proferir vejaciones, asesinatos, abusos que tenían por objetivo recuperar aquel dinero, recuperan solo la mitad; todos están de acuerdo menos el loco John.

El loco John sin ser visto se retira hacia el sur, en México, ya a salvo de cualquier acusación, se reúne con unos camaradas, su pistola trae una bala menos. En la cantina conoce a una pareja que anhela trascender su vida rural, para asegurar su bienestar en la ciudad, saben que eso es caro, que para empezar necesitarían una catidad que no

La avarivcia y la idiotez son la pista sobre la que corre la carrera por el botín entero; paradójicamente el loco John comienza a desintegrarse, sus recursos se agotan, no ha dejado de sudar, tras ser apresado por la banda del Machete, con apuros logra escapar, trae consigo, como un hermoso objeto intercambiable, a la esposa del joven que ya anda cerca para cobrar venganza. Todo maltrecho, el joven en su búsqueda, mata al loco John casi por casualidad, por instinto, por la ira; la mujer suspira por última vez en sus brazos, igual que su familia que no pudo salir del rancho en llamas. Al regresar encuentra en un lugar que creía seguro la valija quemada por completo, los biilletes fueron el combustible perfecto para prenderle fuego desde dentro. Alrededor del dinero no hay salvación todos mueren, dice Mario Costa director.


E

n 1970 resultó electo como presidente de México Luis Echeverría, del Partido Revolucionario Institucional (PRI). Dicha elección se dio en medio del descontento por el gobierno autoritario de Gustavo Díaz Ordaz, del cual el recién nombrado jefe del Ejecutivo había sido parte como secretario de Gobernación.

*Rodrígo R. Díaz Martínez es estudiante de Derecho en la Universidad La Salle y actualmente se desempeña como asistente de Dirección de la Revista Signum, C,P & C. @Rodr_DM

Luis Echeverría Álvarez nació el 17 de enero de 1922 en la Ciudad de México, abogado de profesión, en 1946 ingresó al PRI para dar inicio a su carrera política. Fungió como secretario del entonces presidente del partido, sin embargo, en 1964 obtuvo el puesto más importante hasta ese momento en su carrera, el de secretario de Gobernación, nombrado por el entonces presidente Gustavo Díaz Ordaz. Como secretario de Gobernación, Echeverría frente a los hechos de julio de 1968 (la matanza de Tlatelolco), en los cuales el ejército intervino en contra de estudiantes y tomó varias escuelas, señaló en conferencia de prensa (para deslindar a Díaz Ordaz de la represión) que él mismo había ordenado la intervención de las Fuerzas Armadas del Estado en contra de los estudiantes, lo cual no era posible, dado que esa facultad es exclusiva del Ejecutivo. Como presidente, Echeverría propuso una apertura democrática en la que abriría canales de comunicación con los afectados de los sucesos de 1968. Estableció que se seguirían los principios de la Revolución Mexicana, esto quería decir que el Estado intervendría en todas las esferas de la economía. También propuso diversas reformas, entre ellas la reforma político-electoral, la cual fue aprobada, y una nueva Ley Federal Electoral , así como el establecimiento de una credencial


LEcheverrÍa u i s permanente de elector; con ello se pretendía que los partidos pudieran vigilar equitativamente en la Comisión Federal Electoral. La reforma alentó a la formación de nuevos partidos políticos, la mayoría de estos de izquierda. En 1971 se suscitaron conflictos estudiantiles tanto en la Ciudad de México como en Nuevo León, originados por la lucha de ideologías que existía en las instituciones entre estudiantes y autoridades. En Nuevo León no hubo intervención armada del Estado, pero sí en la Ciudad de México, en una marcha de estudiantes, de la cual resultaron 29 muertos (a este acontecimiento se le conoce como “La Masacre del Jueves de Corpus” o “El Halconazo”). Aunque el presidente prometió una investigación, esta nunca se llevó a cabo. Por otro lado, se dieron enfrentamientos armados en contra del gobierno, guerrillas que se financiaban a través del secuestro de personajes importantes del país, como empresarios y políticos. La ola de violencia se desató desde 1971, y para 1976, varios de los

implicados en estos movimientos habían sido asesinados o capturados por el gobierno. En el ámbito internacional Estados Unidos puso fin a la relación especial que tenía con nuestro país, ya que aumentó la tasa impositiva a las importaciones, y México procuró la amistad con Cuba y Chile. Al final del sexenio de Echeverría se desató una crisis económica severa debida a una fuga de capitales, la especulación contra el peso, y a que la inversión por parte de empresarios fue casi nula, ya que el gobierno estaba peleado con ellos; todo esto provocó el estancamiento de la economía. Luis Echeverría Álvarez fue acusado por la matanza de 1968, sin embargo, después de diversas órdenes de aprehensión, detenciones e investigaciones, en 2009 se decretó su exoneración del delito de genocidio, así como su libertad absoluta. REFERENCIAS

1. Promulgada el 5 de enero de 1973. 2. Partido Mexicano de los Trabajadores, Partido Demócrata Mexicano, Partido Socialista de los Trabajadores, Partido Socialista Revolucionario y el Partido Revolucionario de los Trabajadores.



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