SIGNUM Revista
Año 3, Núm.45
ComunicacióN PolíticA & CulturA
SIGNUM Revista
Año 3, Núm.45
ComunicacióN PolíticA & CulturA
Retomar las narrativas
Qué sigue
Para una verdadera democracia;asignaturas pendientes
Preguntas para reflexionar Por: Eduardo Higuera
Por: Fernando Dworak
Por: Diego García
La comunicación: reto del próximo presidente Por: Alejandro Arroyo
Por: Alfonso Gómez
Después de la elección… Por: Gabriela Seoane
CONTENIDO
6 10 12 14 16 20 22 24 26 28
Innovación y optimización del proceso electoral Retrato del IECM Por: Yuri Beltrán
32 44 46 48 52 54 56 60 62 64
Entrevista con: Víctor Gordoa “Imagen es Poder”
El turno es del ciudadano Por: Cuauhtémoc Miranda
Qué sigue Por: Alfonso Gómez
Corrupción y derechos humanos Por: Armando Hernández
Agenda 2030: los retos del nuevo gobierno mexicano Por: Ileana Hidalgo
Poder o no poder: esa es la cuestión Por: Sergio Uzeta
La comunicación: reto del próximo presidente Por: Alejandro Arroyo
El reto del nuevo presidente: recuperar la confianza y la credibilidad Por: Ricardo Homs
México, fin de ciclo Por: Carlos González
La discriminación sexual de las personas con discapacidad
Por: Fidel Pérez de León
Nueva Ley de Propiedad en Condominio eliminará inseguridad jurídica
Por: Dunia Ludlow
Preguntas para reflexionar Por: Eduardo Higuera
Democracia y elecciones Por: Moisés Vergara
Retomar las narrativas Por: Fernando Dworak
La reconfiguración política y social del sistema político Por: Elvin Torres
Para una verdadera democracia; asignaturas pendientes Por: Diego García
Imaginémonos cosas chingonas Por: Claudia Guzmán
Después de la elección… Por: Gabriela Seoane
Grandes Personajes de la Historia Política Por: Rodrigo Díaz
DERECHOS DE AUTOR Y DERECHOS CONEXOS, año 3, No. 45, 2018. Revista Signum Comunicación Política & Cultura, es una publicación mensual editada por M&D High Strategy Group, calle retorno 21 de Genaro García No. 12-301 Col. Jardín Balbuena, Delegación Venustiano Carranza, CP, 15900 Tel. (55) 55522465 y cuya página electrónica es: www.revista-signum.com Editor responsable: Claudia A Martínez Díaz direccion@revista-signum.com Reserva de Derechos al Uso Exclusivo No. 042015041712141100203, ISSN 1405-8499 ambos otorgados por el Instituto Nacional del Derecho de Autor, responsable de la última actualización de este número de Informática INDAUTOR, Ing. Juan José Pérez Chávez, calle Puebla, 143, Col. Roma, Delegación Cuauhtémoc, CP 06700, fecha de la última modificación: 30 de diciembre de 2017. Las opiniones expresadas por los autores no necesariamente reflejan la postura del editor responsable ni de la publicación. Queda estrictamente prohibida la reproducción total o parcial de los contenidos e imágenes de la publicación, sin previa autorización de M&D High Strategy Group. TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS.
DIRECTORA GENERAL Claudia Martínez Díaz
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DIRECTORA DE COMUNICACIÓN Y ESTRATEGIA Mónica Martínez Díaz dircom@revista-signum.com
COLABORADORES (en orden alfabético) Alejandro Arroyo Alfonso Gómez Armando Hernández Carlos González Cuauhtémoc Miranda Claudia Guzmán Dunia Ludlow Diego García Eduardo Higuera Elvin Torres Fernando Dworak Fidel Pérez Gabriela Seoane Ileana Hidalgo Manuel Grapain Moisés Vergara Ricardo Homs Rodrigo Díaz Sergio Uzeta Yuri Beltrán
CONSEJO EDITORIAL (Por pares ciegos) DISEÑO EDITORIAL M&D High Strategy Group FOTOGRAFÍA Y PUBLICIDAD
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CARTA EDITORIAL
H
an sido las elecciones más grandes de la historia de nuestro país con una participación ciudadana sin precedentes, en donde la decisión del electorado fue contundente dándole la victoria al ya presidente electo Andrés Manuel López Obrador y a su coalición “Juntos Haremos Historia”. Prácticamente todo el país se ha vestido de los colores del Movimiento Regeneración Nacional (MORENA). Precisamente como tema central en este número, nuestros colaboradores analizan los aspectos que han estado presentes en las campañas de los candidatos presidenciales y los retos que enfrentará el nuevo presidente de la República, así como el papel que deberá jugar la ciudadanía para lograr un México mejor para todos. Esta vez nuestra entrevista fue con Víctor Gordoa, consultor en imagen pública y fundador del Colegio de Consultores en Imagen Pública. Líder de opinión en esta especialidad, nos comparte su experiencia y nos habla también de las campañas, dándonos una visión muy interesante acerca de ellas. No cabe duda que estas elecciones deben llevarnos a la reflexión sobre algunas de las lecciones que han dejado. Por un lado, la alta participación ciudadana que habla de la necesidad de expresar sus convicciones y ser escuchada y tomada en cuenta; por otro lado, el de la legitimidad de las instituciones como el INE que demostró su capacidad para llevar a cabo las elecciones, podría decirse de manera impecable. Para los partidos, la inaplazable tarea de revisar sus acciones y recomponerse si quieren seguir siendo una alternativa para los ciudadanos; y el tema de los candidatos independientes para que haya más equidad en la contienda. Inquietudes quedan muchas, como la pregunta de qué contrapesos tendrán las decisiones presidenciales, si el Poder Legislativo quedará en manos de su partido por mayoría. Sin embargo, esto representa también una oportunidad para que la ciudadanía demuestre que no solo en las votaciones participa, sino que, de forma organizada, también puede exigir legítimamente a sus representantes. En el contexto polarizado que provocaron las precampañas y campañas, los retos para el nuevo presidente serán muchos, pero entre los principales estarán el de recomponer el tejido social, cumplir sus promesas de campaña y generar políticas públicas claras, viables y eficientes que conduzcan al desarrollo de un México más equitativo y justo. Deberá gobernar verdaderamente para todos. Ahora ya no basta el discurso, deberá pasarse a la acción; y tampoco podrán evadirse tan fácilmente temas y respuestas como se hizo en la campaña. Se requiere certeza para generar confianza y credibilidad, no solamente a nivel interno sino externo. Por supuesto, todo ello con el trabajo comprometido de todos los mexicanos, para hacer de este país un mejor lugar donde vivir.
El Consejo Editorial
Innovación y optimización del proceso electoral Retrato del IECM Por: Yuri Beltrán*
L *Yuri Beltrán es Maestro en Gobierno y Asuntos Públicos por la FLACSO y licenciado en Economía por la UNAM. Cuenta con una Especialización en Justicia Electoral por el TEPJF. Fue asesor de la Presidencia y de Ponencia en la Sala Superior del TEPJF. En el IFE asesoró a la Secretaría Ejecutiva y a la Coordinación del Voto de los Mexicanos Residentes en el Extranjero. Ha dado decenas de conferencias en temas electorales. Ha publicado en Nexos, Voz y Voto, Este País, El Universal y CNN en español. Es miembro de la Sociedad Mexicana de Estudios Electorales. Actualmente es Consejero Electoral del Instituto Electoral de la Ciudad de México (IECM). @yuribeltranm
a reforma electoral de 2014 fue un parteaguas para la implementación del sistema nacional de elecciones en el país. Esta nueva forma de organizar comicios implica un trabajo conjunto entre autoridades locales y nacionales, puesto que se requiere de colaboración y cooperación para desarrollar las actividades que implica un proceso de esta naturaleza. Para el sistema electoral un desafío importante es aprovechar los canales de cooperación, sin sacrificar en la autonomía técnica de cada órgano. Pese a lo anterior, los institutos locales electorales no han perdido su autonomía técnica. Continúan con la importante labor de ponerse a la vanguardia en la organización de los comicios procurando que el costo beneficio sea en favor de la ciudadanía. Ahora bien, si bien es cierto que el INE cuenta con las atribuciones para establecer criterios y parámetros generales, también lo es que en la medida que cada instituto local cree nuevos materiales, nuevas prácticas y nuevas mejoras, el sistema electoral en su conjunto obtendrá mejores insumos para organizar las elecciones. Muestra de lo anterior es la certificación en la norma ISO-Electoral 17582:2014 del IECM, la cual da muestra que nos apegamos a los más altos estándares internacionales en materia electoral. Cabe mencionar que dicha distinción volvió a ser auditada durante el desarrollo de la jornada electoral de este año.
Dicha recertificación contribuyó a que las actividades de la jornada electoral avanzaran de forma adecuada, toda vez que se tenía un plan para cada eventual contingencia. Además, se tuvo claridad de cada uno de los procesos, así como de su respectiva evaluación. Esto se convirtió en un elemento que da certeza a la ciudadanía de que su voto será contado con certeza y transparencia. Algunos de los aspectos relevantes que se realizaron en el IECM fueron: • Transparencia. Se decidió que aparte de las sesiones del Consejo General del IECM, se transmitieran por Internet, también, las de los 33 Consejos Distritales. Con esta determinación se le permitió a la ciudadanía presenciar en tiempo real, las sesiones de cómputos distritales. Así cada elector constató el cómputo y escrutinio de sus votos. Vigiló cómo fueron cap-
turadas las actas y cómo, ante inconsistencias, se procedía a la apertura de cada paquete a fin de que ningún sufragio emitido se quedará fuera. Adicionalmente, se transmitió el cómputo y escrutinio de los votos de los y las ciudadanos y ciudadanas de la Ciudad de México residentes en el extranjero. • Innovación. Al ser la única entidad federativa en que los cómputos inician al concluir la jornada electoral y bajo la experiencia de los comicios de 2015, en los que como una consecuencia no prevista de la casilla única se integraron paquetes electorales con material electoral diferente al de la elección correspondiente, el IECM propuso el uso de la tecnología para evitar que la documentación local llegue a un órgano diferente al que tiene que llegar (federal-local o viceversa). Se determinó la implementación de Tecnologías de Identificación de Radiofrecuencia.
ELECCIONES
La jornada electoral del 1 de julio mostró una elevada participación ciudadana. Esto debe animar a todas las autoridades a mejorar su trabajo y fortalecer su compromiso para mejorar cada proceso comicial.
Esta tecnología se empleó en 33 sedes de los Consejos Distritales del IECM y en las 24 Juntas Distritales del INE de esta Ciudad para identificar la existencia de documentación como actas, sobres de votos válidos, nulos, así como boletas sobrantes de la elección local en la documentación de la elección federal. Dicho aspecto permitió el intercambio de documentos y aseguró el avance de los cómputos distritales. •Votación de capitalinos en el extranjero. En la Ciudad de México se registraron para votar desde el extranjero 28 mil chilangos y votaron 20 mil, cifras que no colocan en el primer lugar de inscritos y votos recibidos a nivel nacional. Estos números casi triplican los resultados de hace seis años. El incremento se debió, en gran medida, al empleo de una es-
trategia en redes sociales que permitió hacer llegar la información a chilangos en 100 países; además de la realización de giras de trabajo y de entrevistas con medios extranjeros. • Herramientas informativas. El IECM fue el único organismo local en realizar conteos rápidos para cargos como las alcaldías. Este ejercicio coincidió al 100% con otra herramienta informativa como lo es el Programa de Resultados Preliminares (PREP), lo que confirma su precisión. • Materiales accesibles. Se buscó el diseño de materiales que faciliten el ejercicio del voto a todos los ciudadanos, entre ellos a las personas que tienen alguna discapacidad. Entre las medidas tomadas están el propiciar el acceso adecuado a las casillas; el empleo de lupas,
mascarillas braille y sello X que auxilien en la emisión del sufragio, entre otros. El obtener la certificación implica un compromiso con la mejora continua y requiere el análisis constante para poder optimizar los procesos en los siguientes ejercicios. En este marco destaco tres aspectos a optimizar: • Buscar medios que hagan más fácil el acceso a todas las actividades que realiza el Instituto; a través de todos los medios electrónicos. • En cuanto a los connacionales en el extranjero debemos asegurar que la relación con ellos sea un vínculo permanente. Se deben retomar las experiencias anteriores y los esfuerzos realizados en ellas para que la próxima vez que se
busque el vínculo con la diáspora se tengan elementos para contactarlos. Además, de la inminente necesidad de facilitar el sufragio a través del voto por Internet. • En cuanto a la difusión de resultados se debe repensar la forma en que se presentan a la ciudadanía. Es necesario que sea de forma accesible y explicando los tiempos de avance y la forma en que ello ocurre. La jornada electoral del 1 de julio mostró una elevada participación ciudadana. Esto debe animar a todas las autoridades a mejorar su trabajo y fortalecer su compromiso para mejorar cada proceso comicial.
El turno es del ciudadano Por: Cuauhtémoc Miranda*
E *Cuauhtémoc Miranda es autor del libro Crónicas Hertzianas, historia de la radio en México editado por Interwriters. Estudió la carrera de Ciencias de la Comunicación en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, además realizó una maestría en Filosofía y Crítica de la Cultura por la Universidad Intercontinental. Desde 1992 ha sido productor y conductor para diversos grupos radiofónicos, entre los que destacan Televisa-radio, Radio Fórmula y Grupo Imagen. Es catedrático del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores Monterrey campus Ciudad de México. @cumiranda
n esta nueva etapa que comienza, es momento de hacer un alto en el camino y reflexionar profundamente sobre el futuro de la nación, si creemos que una persona tendrá la fuerza para dar un golpe de timón sobre los problemas que día a día se viven en esta nación, sería iluso, pero sobre todo de un terrible conformismo. El verdadero cambio depende únicamente de cada uno de nosotros. Aquí una pequeña lista por lo que debemos comenzar. México ocupa el lugar 135 de 180 países según Transparencia Internacional en su Índice de Percepción de la Corrupción, y además obtuvo la calificación de 29 en una escala del 0-100, donde cero es el país peor evaluado (datos del último reporte de esta institución). Este flagelo lo hemos alimentado todos, por querer ahorrar tiempo, multas, filas, ser los primeros, porque deseamos más nos valemos de la corrupción, es ahí donde se necesita cortar de tajo. Si lo permitimos de forma micro en automático lo convertimos en macro, es sencillo, cada uno deben acabar con este mal que parece anquilosarse en todos los sectores del país. A cada momento se escuchan reclamos sobre el empleo: mal pagado, esclavista y de poco poder adquisitivo. De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el 57% de la población ocupada
COMUNICACIÓN en México trabaja en la economía informal, donde los empleos se caracterizan por tener una fuerza laboral poco calificada y estar concentrados en actividades de bajo valor agregado, lo cual contribuye al pernicioso círculo de informalidad, bajas competencias, habilidades y destrezas, y, por ende, baja productividad2. Tenemos que cambiar esos números, cada uno de nosotros le debe dar el justo valor al trabajo, hay que mostrarse, sin pretextos; nada de que no se puede, ofrezcamos ese extra para entonces sí pedir mejores sueldos. Debemos estar conscientes de que nada vendrá del cielo ni con tarjetas multibeneficios, y mucho menos tocará a la puerta. Simplemente debemos de pasar de la informalidad a la formalidad. Y no menos importante, el tema educativo, otra deuda pendiente a transformar. Tan solo en la transición de secundaria a la escuela media superior, el índice de es-
colarización de estudiantes de 15 a 19 años cae a 54% aproximadamente; el índice más bajo para este grupo de edad entre los países de la OCDE, y muy por debajo de la media de la organización, la cual es de 84 por ciento3. No se puede permitir más a nuestros alumnos dejar la escuela, hoy más que nunca se necesita de una sociedad educada, con valores, estudiosa de su entorno no solo inmediato sino global, polifacética, artística, creativa, cuestionadora, crítica mas no criticona, pero eso también es parte de la responsabilidad no solo del gobierno sino de la sociedad en su conjunto y de cada individuo. Ha llegado el momento, o perfilamos un mejor futuro hoy, o seguimos con lo mismo. REFERENCIAS 1.http://www.eluniversal.com.mx/nacion/seguridad/mexico-cae-seis-lugares-en-indice-global-de-corrupcion 2.https://www.elsiglodedurango.com.mx/noticia/932840.preocupa-a-la-ocde-bajo-nivel-educativo.html 3.https://www.eleconomista.com.mx/politica/Detec to-la-OCDE-retos-para-Mexico-en-materia-de-educacion-20180205-0102.html
Corrupción y derechos humanos Por: Armando Hernández*
L *Armando Hernández Estudió en la Universidad Nacional Autónoma de México; es Licenciado, Maestro y Doctor en Derecho, con Especialidad en Derecho Constitucional, Derechos Humanos y Derecho Administrativo; ha ocupado diversos cargos en el Instituto Electoral del Distrito Federal y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación. Ha sido catedrático, instructor, conferencista y miembro de diferentes asociaciones vinculadas a la materia de Derecho, Derechos Humanos y Procesos Parlamentarios, también ha publicado artículos en DDHH. Actualmente es profesor de la Facultad de Derecho de la UNAM así como de varias universidades del país, y Magistrado Presidente del TEDF. @DrArmandoHdz
a forma en que la corrupción afecta a los derechos humanos no suele ser muy evidente en primera instancia. Detectar los efectos negativos de la corrupción en la economía es sencillo, por ejemplo, cómo esta desalienta la inversión, frena la creación de empleos y reduce el crecimiento económico es claro, pues existen estadísticas al respecto. Sin embargo, relacionar directamente cómo la corrupción daña los derechos humanos resulta más complejo, esta relación dañina puede observarse al menos en tres tipos de acciones: La primera, cuando la corrupción hace que los recursos públicos se administren de forma deficiente y el Estado no responde a sus obligaciones oportunamente debido a que gran parte de ese dinero termina lejos de su destino original. En consecuencia, todos los ciudadanos nos vemos afectados en mayor o menor medida por esta conducta, y solo unos pocos resultan beneficiados. Este caso puede entenderse también como una suerte de “privatización” en la que el Estado deja de ocupar un espacio para cederlo a un interés particular. La segunda, en aquellos casos que condicionan el ejercicio de un derecho a cambio de alguna clase
de pago o concesión. Un ejemplo claro de esta situación son los momentos en los que ciudadanos hacen pagos irregulares para acceder a servicios básicos, aun cuando estos derechos están consagrados por nuestra Constitución.
tienen en las instituciones mexicanas y daña severamente el tejido social. Por lo anterior, la relación entre instituciones y ciudadanos se ve mermada y termina por contribuir a un círculo vicioso en donde la desconfianza es una constante.
En tercer lugar, se encuentran los intercambios que violan abiertamente los derechos humanos, como los actos de corrupción que buscan evadir leyes, normas o reglamentos que protegen los derechos de las personas. En esta clasificación entran los casos de empresarios o servidores públicos que burlan la ley a fin de obtener un beneficio a costa de la afectación a terceros.
Estos tres casos ilustran cómo la corrupción, además de tener evidentemente consecuencias económicas, también afecta la dignidad humana y por lo tanto los derechos humanos. La relación entre ambos conceptos aún debe abordarse más a profundidad desde la academia y las políticas públicas, para contar con más y mejor información para la toma de decisiones. En un sentido sustantivo, el combate a la corrupción es condición para el ejercicio de los derechos humanos y forma parte de una estrategia integral que permite la inclusión social y fortalece el tejido social.
Este fenómeno, además de costarle al país 347 mil millones de pesos anuales, según Transparencia Internacional, afecta la confianza que los ciudadanos
POLÍTICA
Flor de loto: No veo una mejor forma de defender los derechos de una persona que conciliándolos con los derechos de las demás personas.
Poder o no poder: esa es la cuestión Por: Sergio Uzeta*
E
l proceso electoral y las campañas del 2018 han puesto sobre la mesa fenómenos que son reflejo de los contrastes que se dan en un país tan complejo y diverso como el nuestro. Hablamos del rencor social y del llamado voto útil, dos expresiones que no son excluyentes, pero que se ubican en los extremos que marcan la emoción visceral y el uso de la razón.
*Sergio Uzeta es comunicador y periodista, y en la actualidad se desempeña como consultor independiente, especializado en el manejo de plataformas tecnológicas de comunicación y el desarrollo de talleres en manejo de medios, manejo de crisis y construcción de identidad pública. Ha sido director de Noticieros y Programas Informativos de Canal Once, conductor en Radio Fórmula y Radio Independiente de México; fue el director fundador del Canal Judicial de Televisión y también el primer director de Notimex, en su etapa de Agencia de Noticias del Estado Mexicano. En el servicio público también se desempeñó como gerente corporativo de Comunicación Social de Pemex y trabajó en la Unidad de la Crónica Presidencial durante las administraciones de Miguel de la Madrid y Carlos Salinas de Gortari. Es egresado de la licenciatura de Comunicación en la Universidad Iberoamericana, lugar donde también ha dado clases y diversos talleres. @UZETASUM
El rencor es una emoción destructiva, capaz por sí misma de amargar y arruinar la vida a quien lo experimenta. Puede considerarse una reacción hasta cierto punto normal por parte de quien siente lo que para él es una injusticia. El rencor se conecta directamente con la imagen o aquello que representa lo que nos es odiado; puede ser una persona, un partido político, un candidato, una doctrina económica o religión, etc. En el actual contexto mexicano, el rencor social puede definirse como el resentimiento que nace en un individuo hacia las personas que pertenecen a un grupo social más favorecido. El mecanismo mental es bastante elemental, al no ver que las facilidades de otros son alcanzables por él mismo, entonces culpa a aquellos otros individuos de males propios, y sin mayor razonamiento se adquiere un sentimiento de rencor. En un país como México, donde casi el 50 por ciento de la población vive en condiciones cercanas a la pobreza extrema, el rencor social ha ido creciendo, lo cual provoca una animosidad muy negativa cuyo siguiente paso es el odio y el ajuste de cuentas hacia aquello o aquellos que la persona ubica en el bando más privilegiado. Desde hace un par de sexenios, los mexicanos hemos transitado de un discurso de odio de connotación racial, religiosa, ética, sexual, al discurso de odio ideológico y de clase. Este fenómeno resulta preocupante, ya que en el clima de confrontación política que vivimos, el discurso del odio prende con facilidad y amenaza con ver como natural la dinámica de ajuste de cuentas entre las personas. En el otro extremo se ubica el voto útil, fenómeno que, a final de cuentas, tiene que ver con un voto estratégico más razonado y menos emotivo. La primera vez que se escuchó la expresión “voto útil” en México fue en 1988. Entonces, los ultras de izquierda insistieron, clamaron y exigieron al ingeniero Heberto Castillo que declinara a favor de Cuauhtémoc Cárdenas, en ese momento candidato del llamado Frente Democrático
Nacional, conformado por tres partidos pequeños y satélites al poder presidencial. El ingeniero Castillo se vio obligado a declinar. Cedió la candidatura y hasta el partido. En el 94 lo que privó fue el voto del miedo, tras el levantamiento del EZLN en Chiapas y el asesinato del candidato presidencial del PRI, Luis Donaldo Colosio. Entonces, no hubo necesidad de promover el voto útil. La historia fue muy diferente en el 2000, cuando Vicente Fox fue el principal promotor y beneficiario de dicho tipo de votación. Fox sabía que las condiciones del mercado político requerían un cambio de producto, pero la marca anterior, el PRI, tenía una gran fidelidad ante sus consumidores. La única forma de ganarle a la marca preferida en un país conservador era demostrar que la mercancía estaba tan podrida que no habría sociedad que pudiera degustarla. Hay que destacar, sin embargo, que el voto útil no significa lealtad eterna, ya que lleva implícito el apoyo electoral sin mayor compromiso. En las elecciones presidenciales del 2012, el voto útil fue utilizado por el PRI para llamar a la población a una especie de referéndum que abriera la puerta al regreso de un gobierno priista tras 12 años de panismo. El domingo 1º de julio, un México dividido y confrontado acudió a las urnas para elegir un nuevo presidente. En esta campaña hemos visto que los llamados al voto del miedo no han servido, ya que el enojo y el rencor social dominaron las acciones de millones de mexicanos que dieron su voto a Andrés Manuel López Obrador, candidato de la coalición “Juntos Haremos Historia”, conformada por Morena, PT y Partido Encuentro Social.
López Obrador encabezó las preferencias electorales desde el arranque de las campañas y la tendencia a su favor encendió las alarmas de aquellos grupos y élites de poder que sintieron amenazados sus intereses ante la llegada del tabasqueño a la silla presidencial. Las especulaciones sobre la conformación de un bloque, que pudiera devenir en dique para contener el avance de AMLO, dominó la agenda pública en las semanas recientes. Por ello, crecieron las voces que llamaron al voto útil para favorecer a quien venía ocupando el segundo lugar en las preferencias. En este caso el panista Ricardo Anaya, candidato presidencial de la coalición “Por México al Frente”, integrada por el PAN, PRD y Movimiento Ciudadano. El tema fue parte de la agenda mediática de los últimos días, pues las presiones de diversos intereses que no querían al aspirante de MORENA empujaron a otros candidatos a declinar y sumar fuerzas con Ricardo Anaya. La elección se llevó a cabo y el ánimo caracterizado por el enojo y el rencor social fueron una poderosa fuerza que movió a millones de mexicanos a la hora de votar. Ahora, más nos vale que el resultado sea avalado por todos. Solo así, evitaremos que nuestro país ingrese en un periodo de turbulencia política marcada por la confrontación, la violencia y el discurso de odio, síntomas de una sociedad harta de una clase política corrupta y abusiva.
COMUNICACIÓN POLÍTICA
Y de repente, cayó en cuenta de que había ganado el poder. Anónimo
El reto del nuevo presidente: recuperar la confianza y la credibilidad Por: Ricardo Homs*
H *Ricardo Homs, es experto en liderazgo social, estrategias competitivas de negocios, marketing político y posicionamiento. Dirige la empresa Ries & Ries México, empresa de consultoría en marketing y desarrollo estratégico de competitividad para marcas que forman parte de la corporación global fundada por Al Ries en Atlanta. Es Presidente de la Academia Mexicana de la Comunicación, autor y conferencista. Ha publicado más de 23 libros con las editoriales más importantes y con temas relacionados con el liderazgo, el marketing y la comunicación. Forma parte del Editorial Board del Journal of Political Marketing, editado en Nueva York por The Haworth Press. @homsricardo
ay dos variables que están presentes en este momento en nuestro país y es fundamental comprenderlas. La primera de ellas es el contexto sociopolítico que hemos vivido a lo largo de este último año, vinculado a la sucesión presidencial. Este dio inicio desde mucho antes de que estuvieran designados los candidatos, y se manifestó desde fines del 2017 con el golpeteo y la descalificación de los posibles candidatos, por parte de quienes también aspiraban la nominación de su partido. En el contexto de las redes sociales y el anonimato que estas ofrecen, se generó un entorno negativo que se fue acentuando a partir de la precampaña y después terminó haciendo crisis durante la campaña. La estrategia en precampaña y después en el periodo electoral, consistente en buscar infringir desgaste en los contrincantes, para desacreditarlos y descalificarlos, dio por resultado que, en lugar de perfilar una campaña constructiva, sustentada en propuestas, se generara una campaña donde las propuestas no eran más que un mero trámite para cumplir con los estereotipos tradicionales esperados en una contienda electoral. La fortaleza de la estrategia en esta campaña siempre se centró en descalificar y desgastar, o incluso, si lo vemos desde un punto de vista más técnico, en reposicionar la identidad del contrincante, tratando de proyectar una identidad caracterizada por la corrupción, dado que la campaña tuvo como tema primordial la corrupción. Por ello el candidato que quedase menos desgastado ganaría la contienda. Lo anterior trajo nuevas prácticas como las fake news, que en la campaña anterior aún no existían. También se centró en el manejo de estrategias mal llamadas de contraste, pero que en realidad son de desgaste, las cuales trajeron como consecuencia que se dividió al país, al generar un ambiente de desconfianza total y absoluta, además de desacreditar a las per-
Mientras en el pasado se partía de un voto de confianza para toda noticia que recibíamos y esta contaba con una credibilidad preaprobada, ahora se deberá partir de la base de que lo más probable es que lo que se dice sea falso. Por tanto, se están generando nuevas conductas públicas, como lo es verificar las fuentes de una noticia para determinar si lo que se dice es creíble. Este nuevo contexto de desconfianza genera mucha confusión. El mexicano es desconfiado por naturaleza, como lo describió Octavio Paz en su libro El laberinto de la soledad, obra editada en 1950. Sin embargo, debemos considerar también que hoy existe un exceso de información, generada a partir de la Web y las redes sociales, lo cual aumenta la confusión. En este contexto tiene especial significación la ausencia de ética en el manejo de la información pública, principalmente en el ámbito político.
Hoy vivimos en la jungla verbal, donde todo se vale. Sin embargo, desde la perspectiva moral, tradicionalmente existían valores que generaban la obligación de considerar la verdad como una aspiración social. Fuimos educados con este principio moral. Sabíamos que al mentir estábamos infringiendo las reglas sociales. Ahora parece haber caducado este precepto, lo cual trae un ánimo ciudadano complicado, donde mentir no tiene implicaciones morales. Siempre ha existido la posibilidad de que alguien mintiera, pero había conciencia de que era incorrecto hacerlo. Hoy podemos partir de la base de que nos acostumbramos a mentir, a leer noticias falsas y a reenviarlas a nuestros amigos para luego descubrir que dicha información carecía de veracidad. Y aunque este es un fenómeno global, en México alcanzó dimensiones que nos ponen en peligro a todos, porque a partir de ahí, la delincuencia y la corrupción crecen frente a un sistema de justicia inoperante. La mentira ha invadido todos los ámbitos sociales, incluyendo la procuración de justicia. Se puede mentir en un juicio penal sin que haya las mínimas consecuencias. Es más, los juicios terminan siendo una competencia entre las partes por ofrecer a un juez los argumentos de mayor impacto, en un contexto sobreentendido, incluso
COMUNICACIÓN POLÍTICA
sonas, los funcionarios, las instituciones y a las mismas noticias que circulaban en redes sociales, como instrumento informativo. La introducción de las fake news puso en evidencia que no todo lo que se publica tiene que ser verdadero, aunque lo parezca. A partir de ahora, la comunicación pública va a tener que superar el primer escollo, que es la desconfianza de la ciudadanía.
con conocimiento del juez, de que toda la argumentación que evalúa es ficticia y las pruebas lo más seguro es que estén manipuladas. Hemos perdido el valor de la palabra, que es el eje y el inicio de cualquier proceso de comunicación. Este contexto sería la primera variable que tendríamos que entender. La segunda variable que hoy impacta el contexto nacional es que las instituciones públicas de México por lo general han minimizado el papel de la comunicación. Le han dado simplemente el rol de vehículo para informar a la ciudadanía sobre temas propios de la institución. Quienes han estado a cargo de las áreas de comunicación han tenido como objetivo ser el vocero del funcionario en turno y el enlace con los medios de comunicación masiva, en tiempos previos a la disrupción tecnológica, cuando los medios de comunicación eran los que tenían el monopolio de la información pública, porque eran el único vehículo por medio del cual la sociedad se enteraba de las noticias. Las instituciones públicas mexicanas no entendieron el proceso de formación de redes sociales, que lleva ya varios años y se quedaron con una estructura simplista e improvisada. Mucha gente que está en el ámbito de la comunicación pública no tiene trayectoria académica, porque no ha egresado de las escuelas de comunicación. Por tanto, su visión es totalmente funcional. Ahora el reto que viene a partir de este contexto del cual hemos estado hablando, es el de rescatar el tejido social y volver a generar una sociedad que se interrelacione sobre la base de la certidumbre, a partir de proyectos integrales de comunicación,
capaces de detonar fenómenos de opinión pública que impacten el ánimo colectivo y la actitud ciudadana. Después de esta elección presidencial, donde ya hicieron crisis la confianza y la credibilidad como valor social, tenemos que reiniciar el proceso y para ello se requiere que las mismas instituciones públicas entiendan lo que cualquier comunicólogo profesional sabe: la comunicación no es lo mismo que la información. La información es de una vía y va de quien tiene algo que decir, hacia la sociedad y ahí termina. Mientras tanto, la comunicación es un proceso dinámico de interrelación, donde el ciclo se cierra hasta que hay una retroalimentación por parte del receptor. Este proceso, en el ámbito de la comunicación política y gubernamental, es todavía más importante porque es precisamente esa retroalimentación lo que en estricto sentido de las ciencias de la comunicación, se denomina opinión pública. La opinión pública no es lo mismo que la mente pública y mucho menos que el inconsciente colectivo. Es un fenómeno psicosocial, en el cual la sociedad, a partir del impacto de un acontecimiento de gran relevancia y significado, reacciona. La generación de actitudes positivas y enfocadas a la formación de consensos ciudadanos a favor de proyectos e iniciativas gubernamentales y políticas, debe ser el objetivo de un proyecto de comunicación social. Quienes tengan la responsabilidad de la comunicación social dentro de las instituciones públicas, deben ser especialistas en la planeación y ejecución de estrategias de comunicación colectiva y deben
tener la formación académica en esta disciplina. Solo así podrán desarrollar esta actividad con visión estratégica y liderar la agenda pública. Hasta hoy, las instituciones del Estado mexicano han sido incapaces de proponer la agenda pública y liderarla, pues esto lo han logrado actores informales de la sociedad, como sindicatos y grupos sociales con intereses políticos, e incluso, el crimen organizado. Hasta hoy la autoridad siempre se ha manifestado reactiva, dando respuesta a exigencias de terceros. Entre los retos que deberá asumir el nuevo gobierno estará dirigir sus esfuerzos al mejoramiento del ánimo social, así como rescatar la credibilidad del Estado mexicano y sus instituciones. Además, estimular la confianza de los ciudadanos por quienes están asumiendo altas responsabilidades dentro de la estructura gubernamental. Hoy estamos atrapados en un círculo vicioso de desconfianza. Las redes sociales se han encargado de desmitificar la figura de los gobernantes y de quienes ejercen poder. Las redes sociales han puesto en evidencia que la mayoría de quienes ejercen altos cargos dentro de la estructura gubernamental, aprovechan el poder que les confiere el cargo, para beneficiarse de modo personal. A partir de un proyecto profesional de comunicación política, se puede guiar a la sociedad para que camine hacia un nuevo proyecto de nación. El reto del nuevo gobierno, casi durante la mitad del sexenio, va a tener que estar enfocado en el rescate de la confianza y de los valores, para que, como respuesta, el ciudadano sea respetuoso de las leyes y las instituciones. En ese sentido, la comunicación pública profesional es el único vehículo para poder sensibilizar co-
rrectamente a la ciudadanía; olvidémonos ya de las campañas a base de spots de televisión y radio, donde las instituciones gubernamentales trataban de convencernos de lo bien que estaban actuando e incluso de lo que más nos convenía. Hoy la comunicación se ha convertido en una caja de Pandora, donde hay acceso a la información, pero también existe sobreinformación, lo cual llega a provocar confusión, al grado de que ha cambiado la conducta de las personas en lo que respecta el manejo informativo. La forma de digerir la información se ha transformado radicalmente; se han generado nuevos hábitos que consisten en tratar de corroborar en la Web lo que se dice y ver qué más hay publicado, porque se parte de la base de que lo que me están diciendo, lo más probable es que esté mal intencionado, que sea una información manipuladora o que sirva a quién sabe qué fines. Todo esto nos habla de un contexto nuevo que jamás nos imaginamos que sucedería. En resumen, podemos decir que el reto del nuevo gobierno va a ser rescatar la confianza pública. Para lograrlo deberá recobrar también la credibilidad y esto nos debe llevar a reintegrar el tejido social. El eje para lograrlo van a ser definitivamente: políticas y proyectos de comunicación pública muy profesionales, así como la participación de gente muy sólida conceptualmente, experimentada y honorable en el manejo de la comunicación. Este perfil profesional además debe incluir los conocimientos que deben sustentar esta actividad. Deben tener nociones de psicología social, de sociología, antropología y manejo del lenguaje. Necesitamos recuperar una identidad cultural y valores sociales profundos, que hemos perdido hoy en este país.
La discriminación sexual de las personas con discapacidad Por: Fidel Pérez de León*
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o hablar sobre la sexualidad de las personas con discapacidad genera mayores problemas de desigualdad y marginación para la población.
El pasado junio, como cada año, recordamos a Helen Keller, mujer sordo-ciega, que fue gran promotora de los derechos de las personas con discapacidad. Diferentes anécdotas y datos sobre esta efeméride me llevaron a un texto, una biografía de Keller escrita por Dorothy Hermann.
* Fidel Pérez De León es Director General del Instituto de las Personas con Discapacidad de la Ciudad de México (INDISCAPACIDAD CDMX). Ingeniero Agrónomo con Diplomado en Mercadotecnia Política por el ITAM. Recibió el Premio al Mérito de Servidor Público que otorga la Comisión de Atención a Grupos Vulnerables de la LXII Legislatura de la H. Cámara de Diputados. Su trabajo le ha valido el reconocimiento de diversas asociaciones civiles. Ha participado como ponente en foros, congresos, encuentros, ferias y jornadas de inclusión, nacionales e internacionales. Ha desempeñado diversos cargos en la Administración Pública Federal, Estatal y Local, y es una persona con discapacidad física. Luchador incansable por la igualdad de oportunidades e inclusión de las personas con discapacidad. “La discapacidad no es contagiosa, la discriminación, sí” @fideldiscapacid
La biografía de Hermann llega a una reflexión crucial, ¿era Keller un ser sexual? Claro que lo era, e incluso llegó a tener una propuesta de matrimonio. Sin embargo, Keller no suele ser vista desde esta perspectiva. ¿Cuál es el ícono más usual con el que se le representa? Es una alusión al momento en el que su mano tiene contacto con una corriente de agua que surge de un grifo, este episodio en la vida de Keller, no solo marca el punto en el que ella comenzó a comprender el lenguaje de señas, sino que también determinó la imagen con la que el mundo la recordaría: una niña. Las personas con discapacidad somos víctimas de discriminación incluso cuando se pretende actuar a nuestro favor, pero la discriminación inversa no es el tema que quiero tratar, sino la percepción de donde surge esta, la infantilización de las personas con discapacidad. Si bien nos encontramos en una posición vulnerable en la sociedad, es por su estructura misma, lo cual no se debe confundir con nuestra capacidad para tener una vida autónoma e independiente. Creer que las personas con discapacidad son incapaces de valerse por sí mismas ha llevado a que se omitan temas de vital importancia durante el desarrollo de las generaciones más jóvenes o a entorpecer la denuncia en casos de agresión o violencia. La sexualidad por sí sola ya es considerada un tema tabú, pero al tratarse de personas con discapacidad es un tema totalmente silenciado. Cuando Keller recibió la propuesta de matrimonio debió rechazarla porque su familia lo vio como algo inapropiado ¿Por qué? Pues porque a Keller no se le consideraba apta para ejercer la maternidad. Pese a ser la primera mujer con discapacidad auditiva y visual en obtener un grado universitario, ser una activista y escritora de renombre mundial, era incapaz de ser madre para esa familia criada en el sur estadounidense, una familia extremadamente conser-
En 2014, el sitio “Comunicar Igualdad” escribió sobre el caso de Marisa Ibañez, una mujer con discapacidad de tipo intelectual. Ella había querido ser madre durante largo tiempo, tomó cursos y se preparó; sin embargo, cuando su hijo nació le fue retirado por orden de un juzgado civil argentino. Pese a que esta nación del sur americano firmó, al igual que el Estado mexicano, la Convención sobre los derechos de las Personas con Discapacidad, la cual señala en su artículo 23, que los Estados Partes velarán por que las PcD (personas con discapacidad) tengan la posibilidad de fundar una familia, decidir sobre el número de hijos que deseen tener, además de que se les permita criar a sus hijos sin que estos deban de arrebatárseles: Respeto del hogar y de la familia Los Estados Partes tomarán medidas efectivas y pertinentes para poner fin a la discriminación contra las personas con discapacidad en todas las cuestiones relacionadas con el matrimonio, la familia, la paternidad y las relaciones personales, y lograr que las personas con discapacidad estén en igualdad de condiciones con las demás... Por otra parte, la desinformación ha sido un factor para que las mujeres con discapacidad sean expuestas a violencia sexual en altos índices de acuerdo a instancias internacionales. En junio también se conmemoró el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia
Sexual, pero ¿Qué hemos hecho? En el libro “Mujer, Discriminación y Violencia” de Ana Peláez, experta de la Organización Nacional de Ciegos de España (ONCE), se señala que el 40% de las mujeres con discapacidad, sufre o ha sufrido violencia. Cifra que coincide con los datos de Handicap International, quienes afirman que el 35% de las mujeres con discapacidad ha sufrido algún tipo de violencia, física, emocional o sexual. De acuerdo a la experta Irene Torices Rodarte, autora de “La Sexualidad y Discapacidad Física”, esa cifra puede ser mucho mayor, podría incluso doblar el número de las víctimas que no viven con discapacidad, pues no pueden denunciarlo, ya sea por su condición física, por un secreto familiar o porque se encuentran recluidas en alguna institución psiquiátrica. ¿Qué estamos haciendo al no hablar de la sexualidad de las personas con discapacidad? Discriminar, volver vulnerables a muchas mujeres, apartarlas e incluso al no informarlas, negarles la ayuda. Las personas con discapacidad no estamos enfermas, somos como cualquier otra persona y tenemos el derecho a una vida plena en todos los sentidos.
REFERENCIAS 1. 1. http://www.jornada.unam.mx/2015/10/21/sociedad/040n2soc 2. 2. https://www.infobae.com/america/mundo/2018/03/07/las-mujeres-discapacitadas-estan-diez-veces-mas-expuestas-a-violencia-sexual/ 3. 3. https://discapacidades.nexos.com.mx/?p=219 4. 4. https://www.huffingtonpost.es/2018/06/06/siete-falsos-mitos-sobre-la-vida-sexual-de-las-personas-con-discapacidad-fisica_a_23450203/ 5. 5. https://www.rainn.org/articles/sexual-abuse-people-disabilities 6. 6. https://archive.nytimes.com/www.nytimes.com/books/98/08/30/ reviews/980830.30kendrit.html 7. 7. http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0188-77422004000200008
COMUNICACIÓN E INCLUSIÓN
vadora al pertenecer a la facción confederada durante la Guerra de Secesión. Casi un siglo después, todas estas ideas retrógradas deberían haber quedado en el pasado, pero tristemente, no es así.
Preguntas para reflexionar Por: Eduardo Higuera*
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as elecciones ya ocurrieron y, para cuando usted lea esto, ya tendremos una idea más o menos clara de quién será el próximo presidente de México. Los enconos de campaña habrán dado paso a las impugnaciones postelectorales y las etapas decisorias del presente proceso electoral estarán tomando velocidad por fin. Este es un momento para reflexionar y respondernos algunas preguntas ante el espejo, como ciudadanos ante la reciente elección. Aquí presento algunas posibilidades:
*Eduardo Higuera es un profes ional con 20 años de experiencia en el campo de la comunicación, colaborando en medios informativos, comunicación social institucional, producción de medios, posicionamiento y manejo de relaciones públicas. @HigueraB
¿Ejercí mi derecho al voto? Esta es una pregunta central. Los mexicanos tenemos el síndrome de la apatía crítica y el mejor ejemplo lo constituyen las personas que se quejan de lo mal que está todo, hablan de la inseguridad rampante y del pésimo desempeño de las instituciones de todo tipo. Este tipo de personas prefieren no hacer nada, ya que así pueden seguir gruñendo y quejándose desde su zona de confort, en la que ellos son libres de no hacer nada más que ejercitar su quijada al hablar. Si, por el contrario, usted fue uno de los millones de mexicanos que estamos interesados en hacer algo por mejorar nuestro entorno y salió a expresar sus convicciones políticas en las urnas el pasado primero de julio, lo felicito. Solo se necesita la decisión de pasar del pensamiento a la acción para crear una masa crítica que finalmente haga que la balanza se mueva a favor de una mejora sustancial. La esencia de la democracia está en la participación ciudadana, de lo contrario abrimos el paso para que el sistema político de México se convierta en una aristocracia, una tiranía o una kakistocracia. ¿Ejercí mi derecho al voto…de forma razonada o por consigna? En el infierno de los sistemas políticos hay un círculo reservado para aquellos que votan sin pensar lo que hacen, es decir que escuchan más sus vísceras o las consignas que cantan los grupos militantes, sin desmenuzar el fondo del mensaje y las propuestas. Votar de forma completamente emocional es permitir a los odios y enconos tomar el lugar central de nuestras decisiones, sin considerar en ningún momento una duda o análisis que permita ver si aquello que dicen las consignas es verdad o si acaso es posible otra versión de las cosas, que pueda ser mejor para todos.
George Bernard Shaw.
¿Ejercí mi derecho al voto…con intención de darle seguimiento? Y es que una cosa es ir a la casilla, tachar la boleta e introducirla en la urna, y otra qué pasa después y cómo afecta a mi decisión. La inmensa mayoría de nosotros pensamos que el votar agota nuestra responsabilidad como ciudadanos participativos, nada más lejos de la realidad. Los ciudadanos, si dejamos hacer a las élites políticas lo que se les dé la gana, terminamos en una posición se sumisión muy difícil de revertir. Y esto tiene toda la lógica, si no somos capaces de averiguar cómo y de qué forma se continúa el proceso de elección de nuestros gobernantes, ¿cómo vamos a vigilar lo que hacen y demandar transparencia y honestidad en sus acciones? Para que, como decía un clásico del cine nacional, quede claro como el agua de tamarindo, dígame con honestidad si tiene idea de las causales de nulidad de una elección en México. O mejor aún, explíqueme que institución del sistema electoral tiene a su cargo la validación de las elecciones y cuál el proceso de fiscalización de las campañas electorales, ambos elementos esenciales para que cualquier candidato llegue a asumir el cargo. ¿Ejercí mi derecho al voto…consciente de que en la democracia hay ganadores y perdedores? El hecho de que millones de personas voten significa que todos los votos cuentan, pero de ninguna manera podemos pensar en un voto monolítico, que se encuentre alineado de forma perfecta con nuestra forma de pensar y de sentir. En otras palabras, la democracia pone en juego las dife-
rentes aspiraciones y proyectos de nación, encarnadas en los candidatos y sus propuestas, para que veamos cuál de todos está apoyado por la mayoría de las personas. El aceptar que mi voto quizá no lleve a la presidencia a mi candidato favorito es un acto de madurez humana y política. No podemos montarnos en berrinches como aquellos que hacíamos cuando éramos bebés, ni entonces ni ahora sirven de nada, excepto para hacer las cosas más tensas. Los berrinches que surgen cuestan millones de pesos y, en algunos casos, vidas humanas. Un berrinche político puede llevarnos al cierre de calles y avenidas, disturbios, pérdidas materiales y humanas. Si queremos que nuestro sistema democrático transite hacia algo mejor que lo que tenemos actualmente, es necesario que los perdedores, sean votantes o candidatos, desarrollen la madurez política para enfrentar los resultados sin tratar de cambiar todo por la mera fuerza de su voluntad molesta. Sin duda podría enumerar muchas preguntas más sobre nuestras acciones cómo ciudadanos ante las pasadas elecciones, no obstante, el espacio es poco y no debo abusar de su paciencia. En su lugar prefiero pedirle a usted que me lee que reflexione sobre su forma de actuar el primero de julio pasado y analice sumando una última pregunta: ¿Estoy haciendo algo que contribuya en la mejora del futuro?
COMUNICACIÓN POLÍTICA
La libertad significa responsabilidad. Por eso la mayoría de hombres la temen.
Retomar las narrativas Por: Fernando Dworak*
C *Fernando Dworak Analista y consultor político. Licenciado en Ciencia Política por el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y Maestro en Estudios Legislativos por la Universidad de Hull, en Reino Unido. Entre sus libros se encuentra El Legislador a examen. El debate sobre la reelección legislativa en México (Fondo de Cultura Económica, 2003) del cual es coordinador y coautor, así como Caminando hacia el futuro. La experiencia de la movilidad en la Ciudad de México, coescrito con Laura Ballesteros (M2050, 2016). Es coordinador del Diplomado en Planeación y Operación Legislativa en el ITAM. Colabora en los portales Político.Mx e Indicador Político y en la Primera Emisión con Luis Cárdenas, por MVS. Profesor de asignatura en el ITAM y la Universidad Iberoamericana, también ha impartido cátedra en diversas instituciones académicas del país. Página electrónica: @FernandoDworak
omo pareciera ser en el resto de occidente, en México se votó entre dos visiones: una que buscaba continuar con un modelo que, con sus virtudes y defectos, ha abierto el país al extranjero y mostrado cambios en la calidad de vida y la democracia; y otra que, aunque no sabemos bien a bien qué pretende, se apoyó en discursos francamente atávicos y superados desde hace décadas. Más allá de las pasiones en la recta final de las elecciones, es necesario darnos cuenta de que, si la visión más atrasada llevó la delantera, se debió a que no hubo un proyecto alternativo concreto. Todo Estado requiere un discurso que le dé rumbo al país y que a su vez legitime sus políticas y visiones del mundo. Este es un principio básico para el ejercicio del poder. De hecho, el PRI en sus años de hegemonía insertó su propia visión a través del nacionalismo revolucionario ¿De qué trata? Va un resumen: los mexicanos sufrimos un trauma en nuestro origen, que nos hace distintos al resto del mundo; y solo se superará con la voluntad de un líder providencial. El problema surge cuando, a pesar de que esta interpretación quedó superada, no ha habido un reemplazo en más de treinta años. Si un país no tiene un rumbo, se cae en una visión conocida como la política de la inevitabilidad. De acuerdo con Timothy Snyder en su libro On Tyranny. Twenty Lessons from the Twentieth Century (2017), aparece cuando nos convencemos que no hay nada en el futuro salvo lo mismo. Es decir, que la historia solamente puede moverse hacia la democracia liberal y que no se puede volver al pasado. Por lo tanto se puede esperar mayor globalización, un arraigo mayor de la razón y la expansión de los niveles de prosperidad. En contraparte, muchos pensadores y políticos entraron en un coma intelectual y la autocomplacencia. Cuando la
La incapacidad de la política de lo inevitable por tejer una cohesión lleva al riesgo de que se caiga en lo que Snyder llama la política de la eternidad: la legitimidad a través de un discurso de un pasado mítico y que carece de relación con los hechos históricos aun cuando lo ocurrido realmente fue desastroso. De esa forma el pasado es reducido a una serie de efemérides equidistantes, las cuales se pueden manipular a través del discurso político. Esta reducción imposibilita a pensar en futuros posibles y poten-
cialidades gracias a la fatalidad que implica ver al pasado como inamovible, de tal forma que el cambio es visto como una lucha entre una visión buena y otra mala. O como se decía, había que buscar las soluciones “nuestras”, que debían corresponder a nuestra idiosincrasia. ¿Qué hacer? En primer lugar conocer la historia, sus patrones y lecciones. De acuerdo con Snyder, la comprensión de un momento nos da la posibilidad de ser cocreadores de otro a través de la responsabilidad individual. Renunciar a esto es darles la victoria a los políticos de la eternidad. La mejor forma de entender esto es dejar una posición reactiva frente a los voceros del pasado, es retomar una narrativa sobre el proyecto de los últimos 30 años, con una visión crítica sobre sus errores, sus aciertos y la forma que se puede calibrar. Sobre todo, debe dar una noción de comunidad y destino atractivos e incluyentes. Haya ganado quien haya ganado, hay mucho por reconstruir a partir del 2 de julio.
COMUNICACIÓN POLÍTICA
inevitabilidad se toma como dada, la crítica pierde asertividad. Y es sabido que cuando se toman los derechos como inamovibles, aumenta el riesgo de perderlos. Un reflejo de esta actitud fue creer que los problemas del desempeño de una democracia se resuelven con políticos “disruptivos”: personas que pondrán un poco de caos para que las cosas se muevan, sabiendo que el sistema es tan sólido que el reacomodo llevará a un resultado mejor a lo que se tenía. Para Snyder esta visión es adolescente, pues asume que podemos generar desastres, que otros arreglarán, cuando en realidad como ciudadanos debemos ser responsables de nuestras elecciones.
Para una verdadera democracia; asignaturas pendientes Por: Diego García *
A *Diego García Vélez es Licenciado en Administración y Maestro en administración electoral; tiene más de 20 años de experiencia en la Administración Pública y actualmente labora en el Instituto Electoral del Estado de México como secretario particular del Consejero Presidente. Es autor de diversos artículos sobre comunicación política, elecciones y participación ciudadana @dgv1968
pesar del ascenso en la instrumentación de los recientes estatutos para la contienda democrática, multiplicar el nivel de cultura política y civismo, es algo improrrogable para la democracia mexicana.
No significa que los mexicanos no permanezcamos atraídos hacia los asuntos públicos, las prácticas democráticas o bien, en la percepción de la sociedad respecto del ejercicio del poder. La sociedad mexicana ha advertido cambios en materia de transparencia electoral y rendición de cuentas para partidos. Candidatos y gobernantes hablan de un verdadero sistema democrático y una sociedad más preocupada en este tema; pero para esto, primero se debe erradicar de nuestra cultura política la subsistencia de conductas neutrales que no ayudan a reafirmar la vida democrática. Para comprender las particularidades de la cultura política es importante agregarle el adjetivo “democrática”. Recordemos que los sistemas autocráticos gestaron sus propios códigos que explicaban, justificaban y nutrían los abusos y el autoritarismo. Por ello, en la cultura política de un sistema democrático se encuentran las condiciones y la información para la participación de los ciudadanos en los asuntos públicos. Podríamos definir entonces a la cultura política como un elemento indispensable para robustecer los sistemas democráticos. He ahí la importancia de impulsar el desarrollo de una cultura política y acompasarla con la transformación del modelo electoral que se ha edificado en México. En esta segunda década del siglo XXI, se han elaborado estudios por instituciones académicas y especialistas que ya están proyectando características que asentarán políticas públicas en materia de educación cívica. El libro “El déficit de la democracia en México”, da cuenta de cómo ha venido cambiando el interés de los ciudadanos y cómo pueden interpretarse estos cambios, el poder y la importancia de los medios de comunicación, la apreciación de
ELECCIONES los ciudadanos según sus preferencias electorales y orientación ideológica; la trascendencia de la titularidad de derechos y la adhesión social para la pertenencia a una comunidad; la participación en la política y la conexión entre ciudadanos y gobernantes; la transparencia y la rendición de cuentas; los filtros por los que se interpretan los valores autoritarios y los democráticos, así como lo que entienden los ciudadanos por compromiso democrático y los elementos que permiten hablar de un déficit de la democracia mexicana en la actualidad. Contradictoriamente, según la Encuesta Nacional de Cultura Política, mientras la mayoría de los mexicanos opina que los gastos del gobierno, las actividades en contra del crimen organizado y la información económica de los funcionarios públicos debería ser pública, uno de cada cinco encuestados considera que podrían sacar provecho de su cargo, siempre y cuando hagan cosas importantes para la sociedad. La estimación de los encuestados sobre las elecciones está dividida, sería imperativo reflexionar si obedece a las expectativas sobre la democracia o a posturas partidarias. Es trascendental señalar que, para los encuestados, existe un gran vínculo entre democracia y derechos humanos. Para concluir, es imperioso integrar algunas observaciones que sustentan la idea del déficit democrático mencionadas en este libro. El déficit democrático
es mayor para los ciudadanos que creen que la democracia es la mejor forma de gobierno, que para aquellos que consideran otras alternativas para gobernarse. En tal escenario, la relación de datos que ofrece la encuesta, indica que quienes más valoran la importancia de que México sea gobernado democráticamente, consideran que la forma en que hoy se gobierna es poco democrática. A mayores expectativas, mayor déficit democrático. Los resultados de esta encuesta proporcionan información importante sobre cómo ven los ciudadanos la democracia que tenemos. La disparidad es evidente, tema por tema, cosa que no podría ser diferente en un país con tantas desigualdades como el nuestro. Se puede apreciar en las páginas de este libro que la cultura política ha progresado, y ante el deseo de transformar a las instituciones por la vía pacífica, las expectativas para el funcionamiento de la democracia son muy altas. Esto representa un desafío a los integrantes de la clase política y a las instituciones involucradas con el desarrollo de la cultura democrática. Las reflexiones y los resultados contenidos en este libro, serán muy apreciados para la construcción de una política de Estado en materia de educación cívica que contribuya a la consolidación de la democracia, y sobre todo, a que la participación de los ciudadanos se convierta en una brújula para las prioridades políticas y legislativas, así como en un regulador del ejercicio del poder político en México.
Después de la elección… Por: Gabriela Seoane*
E *Gabriela Seoane es licenciada en periodismo y comunicación por la UNAM FES Acatlán y Maestra en educación también por la UNAM. Se ha desempeñado como guionista, redactora y reportera de radio y televisión. Ofrece capacitación para entrenamiento en medios y es profesora de cátedra del ITESM CCM en el Departamento de Español, Literatura y Arte de la preparatoria. @Gabseomx
s un hecho que el dos de julio todos los mexicanos nos despertamos a la misma hora, nos dirigimos hacia nuestro trabajo y realizamos las actividades cotidianas habituales, pero ¿para todos será lo mismo? Seguramente quienes votaron por el ganador sienten una enorme ilusión de que el ahora virtual presidente de la República cumpla con, al menos, la mitad de sus promesas de campaña. También habrá desencanto y enojo por parte de quienes no vieron llegar a “su candidato”. Pasada la efervescencia es importante hacer una reflexión sobre el saldo que deja el periodo electoral. Por ejemplo, en cuanto a los aspectos relacionados con la comunicación, debemos destacar lo siguiente: Los debates. Por primera vez se presentaron tres formatos diferentes. El segundo es el que más prometía, porque se incorporaba la intervención de ciudadanos (seleccionados por el INE). Sin embargo, el contenido no sufrió variaciones sustanciales. Los candidatos privilegiaron los ataques personales a las propuestas. En algunos casos el protagonismo de los moderadores restó tiempo a las respuestas e incluso hizo confusas las preguntas (muchas de ellas provenientes del público). Pero si los debates quedaron a deber, los postdebates se convirtieron en algo tortuoso. Como se mencionó en una colaboración anterior en Signum, los representantes de los candidatos se dedicaron a proclamar ganador a “su gallo” y a proferir ofensas y/o descalificaciones. Se convirtieron en verdaderos reality shows,
COMUNICACIÓN ante la complacencia de los comunicadores quienes presumían que sus espacios eran trending topic en las redes sociales. Lo interesante es que los debates no influyeron sustancialmente en la toma de decisión del electorado; una gran mayoría se negó a reconocer las deficiencias de sus candidatos y mantuvo su voto inicial. Encuestas. Aunque ya en múltiples ocasiones se ha cuestionado la validez de estos instrumentos, la “encuestitis” estuvo presente en este periodo electoral. Inclusive en esta ocasión se publicaron las llamadas encuestas de encuestas (promedio de todas las encuestas). También aparecieron sondeos en redes sociales, que se sumaron a los datos que publicaron casas encuestadoras y medios de comunicación. Los resultados fueron descalificados y desconocidos por quienes no se veían favorecidos, y se utilizaron como propaganda por los que sí. Quedan aún muchas dudas sobre la validez de la metodología y los tamaños de las muestras; sin embargo, quedó claro que las encuestas se usaron
más con fines propagandísticos que informativos. Redes sociales. En este periodo electoral, las redes sociales cobraron importancia central, tanto para lograr que la información llegara con mayor inmediatez, como para poner de manifiesto la urgencia de una educación digital. Tanto en Twitter, como en Facebook, Instagram y Wathsapp, por mencionar las más utilizadas, estas herramientas digitales pusieron de manifiesto varias cosas. 1. La falta de madurez de una gran mayoría de los usuarios de redes para entablar un diálogo enriquecedor en torno a los candidatos y sus propuestas. Es muy común que la personalidad de la gente se transforme a través de las redes sociales, pero en el periodo electoral este fenómeno se profundizó. Insultos, reacciones coléricas y hasta amenazas de muerte hicieron su aparición. 2. La ignorancia sobre temas fundamentales, pero la proclividad a expresar una opinión. No se trata de ser especialista en un
tema, pero en muchos casos ni siquiera se reflejaba un conocimiento superficial de lo que se comentaba, parecía que solo se hacía por atacar o por sentirse agraviado, aunque no existiera razón para esto. 3. La falta de argumentación. El enojo, la reacción emocional, impidió en muchos de los casos mantener el diálogo sobre un tema concreto, porque se cuestionaba exponiendo una serie de falacias como: generalizaciones, falsa imposición de autoridad (lo afirma ese académico…), ad populum (la mayoría piensa…) o ad hominem (como lo dijo fulanito…), por mencionar las más comunes. Cabe señalar que algunas personas intentaron hacer análisis más profundos sobre algunas propuestas de los candidatos y en muchos casos los comentarios fueron insultos. Como lo menciona Sartori (1979): “En cuanto sujetos empeñados activamente en la lucha política todos terminamos por argumentar en forma personal”. (p.16) 4. La aparición de multitud de “medios digitales” que presentaban contenido tendiente a hacer propaganda a favor o en contra de un candidato. Aquí es importante subrayar que las personas no acostumbran a verificar ni la veracidad de la información ni la seriedad de la fuente. Como lo señaló un estu-
dio realizado por expertos del MIT sobre publicaciones, en 126 mil historias tuiteadas por tres millones de usuarios durante 10 años y publicado por la revista Science, las personas privilegian el rumor y el engaño a las noticias verdaderas.1 Cuando se aclaraba un rumor o noticia falsa, las personas, como lo señala el mencionado estudio, no le daban la difusión que sí habían ofrecido a las noticias falsas. En conclusión, es importante reflexionar profundamente sobre el saldo del periodo electoral y de la elección misma. Examinar con cuidado si el periodo electoral es el adecuado, si el presupuesto que se destina a las campañas sigue siendo válido en un país con más de 50 millones de personas viviendo en la pobreza. Hacer un análisis sobre el papel de los medios de comunicación, su parcialidad o imparcialidad, así como su contribución (o falta de) en la construcción de la democracia. Pero, sobre todo, habrá que actuar con gran prudencia para resarcir los agravios y lograr que México salga adelante.
REFERENCIAS 1.
2.
Meyer, R. (2018). The Grim Conclusions of the Largest-Ever Study of Fake News. TheAtlantic. Recuperado de:https:// www.theatlantic.com/technology/archive/2018/03/largest-study-ever-fake-news-mit-twitter/555104/ Sartori, G. (1979). La Política. Lógica y método en las ciencias sociales. México: FCE
Nueva fecha: 3y4 de agosto 2018
V
íctor Gordoa es consultor en imagen pública y presidente del grupo Imagen Pública. Es ganador del premio Agustín Reyes Ponce al mérito empresarial, otorgado en México por la Universidad Iberoamericana de la cual es egresado. Fundó el Colegio de Consultores en Imagen Pública, la primera facultad de Imagen Pública en el mundo, donde se estudia desde la licenciatura hasta el doctorado en dicha especialidad. Ha escrito los libros: “El poder de la imagen pública”, “Imagología” e “Imagen vendedora”. Es un líder de opinión en el tema de Imagen Pública y colaborador de programas de radio, así como editorialista de diarios y revistas. Ha sido designado recientemente caso de estudio de las escuelas de negocios IPADE de la Universidad Panamericana de México e IEEM de la Universidad de Montevideo. Más allá de eso, Víctor Gordoa es un hombre visionario, con mentalidad estratégica y de gran elocuencia; un hombre que no descansa hasta conseguir sus sueños. En esta entrevista, nos permite conocer un poco más de él y del apasionante mundo de la Imagen Pública.
le empecé a llamar Imagen Pública. Busqué estudios, quise encontrar una maestría para seguir complementando mi educación superior; ya tenía yo estudios en Administración de Empresas, en Comunicación y dije: ahora, en Imagen Pública. Lo decepcionante fue encontrarme con que ninguna universidad, ni mexicana ni extranjera, me daba la posibilidad de estudiar la maestría. Fui autodidacta, me armé mi propio plan de estudios y cada nueva unidad de conocimiento me llevaba a otra, así viví tres años fascinantes en que me la pasé estudiando, pero los recursos se me acabaron y no encontraba yo trabajo, porque en ese entonces, nadie me entendía ni quería contratarme porque eso era muy nuevo y no sabían qué resultado podía tener, así fueron mis inicios considerándome, a los 43 años de edad, un hombre fracasado sin trabajo. RS. ¿Cómo llega Víctor Gordoa a encontrarse con la Imagen Pública, al grado de llegar a crear la primera facultad de esta especialidad en el mundo? VG. Yo trabajé catorce años en los medios de comunicación y ahí aprendí a definir quién iba a tener éxito y quién no, porque fui conductor y productor de televisión y presenté a muchos artistas, la clave estaba en la coherencia con que ellos se comunicaban frente a sus públicos; los incoherentes no tenían futuro, los coherentes sí. Me estaba haciendo viejo en los medios de comunicación, tenía yo 39 años de edad, había dado 14 años de mi vida ahí, y me hice el cuestionamiento de si valía la pena seguir invirtiendo más. Esta crisis de los 40 años me sirvió para correr el riesgo de irme, en el punto en que estaba yo más alto en la televisión mexicana, y dar el salto al vacío para después descubrir que eso de la coherencia estaba íntimamente ligado con el concepto imagen, después añadí la palabra pública para diferenciarlo del error que se comete de que imagen es una cuestión de carácter estético. Entonces
RS. ¿Dónde encontró la fuente de ese conocimiento? VG. Donde la localizaba, a veces en libros, a veces en maestros; la encontraba en escuelas, colegios, universidades donde tenían esa materia que yo andaba buscando, y así me moví desde la emiótica hasta la Psicología, pasando por una gran cantidad de ciencias en las que basé la creación de la Ingeniería en Imagen Pública, título con el que bauticé esta nueva ciencia del Siglo XXI que ha traído tantos beneficios. RS. ¿Cuál es la importancia actualmente de la Imagen Pública y por qué la llamó ingeniería? VG. Imagen es percepción, quienes trabajamos en el terreno de la consultoría en Imagen Pública trabajamos en el manejo de la percepción integral en torno de una persona o de una institución, lo bauticé como Ingeniería en Imagen Pública porque es un proceso constructivo, donde ponemos estímulos verbales y no verbales juntos, que deben enviar con coherencia el mensaje que se quiere transmitir para despertar en la gente sentimientos, no pensamientos, y con base en
sentimientos generar vínculos de simpatía entre el emisor y sus audiencias; esta simpatía hace que les gustes y entonces te acepten, te digan sí; sí a tus productos, sí a tus propuestas, sí a tu liderazgo, sí a tu contratación, sí a tu patrocinio, sí a tus donativos, sí a todo lo que tú estés tratando de conseguir, y con ello forjar una identidad positiva que con el tiempo se traduce en una reputación. RS. ¿Cómo se relaciona la Imagen Pública con la influencia y el poder? VG. De la manera como eres percibido va a depender mayoritariamente el éxito o fracaso de aquello que emprendas, es un axioma muy simple; si eres bien percibido aumenta dramáticamente la probabilidad de que logres el objetivo; si eres mal percibido, las puertas se te cierran inmediatamente al desagradar a los demás; por lo tanto, la consecución del poder depende en gran medida de la Imagen Pública, llevamos ya 24 años trabajando en consultoría en Imagen Pública y todavía sigue siendo considerado algo muy nuevo. En estos 24 años he asesorado más de 35 campañas políticas a todos los niveles, no me falta ni un solo nivel político por tocar, he trabajado ya para presidencia de la República, gobernadores, miembros del poder legislativo, presidentes de partidos políticos, y hemos capacitado además a miles de candidatos que han aspirado al poder. Con esto puedo decir con toda claridad y contundencia que el sector político, que es un sector íntimamente ligado con el poder, necesita de la Ingeniería en Imagen Pública. Por el lado empresarial, el poder económico, también tenemos ya cientos de casos en los que hemos trabajado, llevando siempre un beneficio a las empresas y a las instituciones que nos han contratado; por ejemplo, un fenómeno que se produce de manera colateral cuando se trabaja en el terreno de la Imagen Pública es el aumento de las ventas de manera automática, el incremento de porcentajes de mercado, y esto es un fenómeno que se logra gracias a la mejoría en cómo
eres percibido, por lo tanto yo decidí titular mi primer libro: El Poder de la Imagen Pública y tener como nuestro lema: “Imagen es poder”. RS. ¿Cómo podemos definir la congruencia y cómo funciona para tener credibilidad o no? VG. Nosotros preferimos llamarle coherencia, la diferencia es muy sutil, pero no es lo mismo. La coherencia se da en dos niveles muy sofisticados: el primer nivel es que, hasta nuestra llegada, el terreno de la imagen, desde el punto meramente estético, no consideraba la esencia; yo postulé un axioma en mi primer libro en el que proclamo que la esencia es el fundamento de la imagen y que la creación de toda imagen debe respetar la esencia; si la esencia es violada, no existe la convicción en la persona o en la institución que está siendo objeto de un trabajo de Ingeniería en Imagen Pública, entonces la esencia es primero, antes que la imagen, y esta debe ser reconocida para poder ser respetada; una vez reconocida la esencia, se debe implementar la estrategia de estimulación de audiencias que vaya con esa esencia; que
sea coherente con la misma, este es el primer nivel de coherencia: esencia e imagen, fondo y forma. Después viene el segundo nivel de coherencia: no existe estímulo verbal puro, siempre que estimulamos a los demás de manera verbal, está funcionando una gran cantidad de estímulos no verbales que modifican el mensaje que estamos enviando con palabras, entonces nuestra comunicación debe siempre contemplar la parte verbal y la no verbal al mismo tiempo; el problema gravísimo del ser humano, el problema que arruina tantas empresas, es que una cosa es lo que estás diciendo con palabras y otra completamente distinta la que estás diciendo sin ellas; es la incoherencia lo que te lleva al fracaso, es la incoherencia la que te lleva al rechazo de tus grupos objetivo, por ello es tan importante esta coherencia, pero pocas empresas y pocas personas saben cómo lograr la coherencia entre esencia e imagen, entre lo verbal y lo no verbal, de ahí nuestra aportación. RS. ¿Cómo surgió el Colegio de Imagen Pública? VG. Desde el principio yo avizoré que era necesario crear esos estudios que yo no había encontrado, empecé por fundar entonces el Colegio de Imagen Pública, solo a nivel maestría, después fueron los jóvenes quienes vinieron a tocar nuestras puertas, lo que me obligó a crear un nuevo grado académico que titulé Licenciatura en Imagología, que podría ser traducido como la ciencia de la imagen, y de esta manera empezamos con los dos grados básicos de educación superior: licenciatura 4 años y después maestría 2 años; finalmente, queriendo coronar la obra académica, me di a la tarea de proponer la creación del Doctorado en Imagen Pública; un proceso que fue largo, tedioso, difícil, y que finalmente se logró en el año 2017, con esto quedó integrada la primera facultad en Imagen Pública del mundo; solamente enseñamos Imagen Pública, a nivel licenciatura, maestría y doctorado. Agregamos además la extensión universitaria a diplomados en diferentes áreas y ofrecemos
también seminarios cortos, sobre todo para dar a las empresas, a sus ejecutivos y funcionarios; a los políticos y a todo aquel que quiere aprender rápidamente ciertas habilidades del terreno de la percepción. Con esto tenemos entonces una institución que es la primera facultad en Imagen Pública del mundo, orgullosamente mexicana, producto de exportación; buscado igual en Tailandia que en Dakar, igual en Alemania que en España, igual en Argentina que en Ecuador o en los Estados Unidos, de allá vienen estudiantes para acá. Hoy tenemos la maestría más exitosa de toda la República Mexicana, abrimos 4 veces salón completo de maestría al año, cuando otras maestrías que se consideran exitosas abren solamente dos veces al año. Normalmente una maestría abre una vez al año y con pocos alumnos, nosotros rebasamos 200 alumnos en maestría. RS. ¿Y respecto al campo laboral? VG. A la fecha, a 17 años de haber sido fundado el colegio, tenemos ya muchos casos de éxito de exalumnos cuyos testimonios pueden encontrar en nuestra página www. imagenpublica.mx, de gente que sabe que viniendo a estudiar aquí va aprender algo que se aplica en la práctica; yo soy un enamorado de que el conocimiento debe ser útil; conocimiento que no sirve, ¿para qué lo quieres? Todo lo que se estudia aquí es para que tú aprendas a trabajar y explotar un campo de trabajo emergente y prácticamente virgen, valuado en más de 15 mil millones de dólares solamente a nivel hispanoparlante. RS. El tema fundamental en México han sido estas elecciones, en su opinión, de los candidatos a la presidencia, ¿quién tuvo el mejor manejo de Imagen Pública y quién el peor? VG. Cuando se lea esta entrevista ya habrá sido la votación del primero de julio y habremos sabido quién va a ser el próximo presidente de la República Mexicana, yo voy a hablar desde el punto de vista de la consultoría
en Imagen Pública, de la Imagologia, la ciencia de la imagen, sin ponerme desde aquí a especular quién va a quedar como presidente o no, la moneda está en el aire. Hoy que estamos a 27 de junio del 2018, a escasos cuatro días de la elección, ninguna campaña fue buena, es increíble ver que a los niveles que ha alcanzado ya la preparación que en el colegio damos a los consultores en Imagen Pública, los tres candidatos más importantes no hayan hecho uso de la Ingeniería de Imagen Pública en esta ocasión, de ahí los pobres resultados alcanzados. Tenemos el caso de José Antonio Meade que permitió que se revirtiera el proceso de permeabilidad de la imagen, él tendría que haber permeado al partido, tendría que haber roto con las estructuras antiguas para proponer un cambio no solamente para México, sino dentro del partido que lo lanzó como candidato; no lo hizo, fue al revés, el error fue en su primer acto público, ya habiendo sido destapado como candidato, al haber dicho frente a las huestes priistas “háganme suyo” cuando precisamente el no haber sido suyo era su principal patrimonio de imagen pública. La estrategia todavía se hizo más dura con la entrada del nuevo presidente del Partido Revolucionario Institucional, René Juárez, donde ya el candidato se volvió absolutamente priista: la chamarra roja, el logotipo del PRI en el atril y las fotografías con lo más acendrado del antiguo priismo mexicano, que está claramente detectado que era rechazado por la mayoría de las personas, después de los resultados en torno a la corrupción, la inseguridad y la impunidad que se está viviendo en México. Ricardo Anaya, un joven muy preparado, con un extraordinario manejo de la palabra, audaz, astuto, pero que careció del ingrediente emocional; no logró nunca perforar el corazón de la gente, no solamente es importante decir “cómprame” que es cuando dices “vota por mí”, es importante despertar en la gente que te quieran, “quiéreme”, es el mensaje que sabe transmitir la Ingeniería en Imagen
Pública; no se usó y entonces quedó como un candidato inteligente, pero no sensible. Y finalmente el eterno Andrés Manuel López Obrador, que en 18 años de campaña dio lecciones de propaganda. López Obrador es un extraordinario propagandista, con premeditación, alevosía y ventaja, usó muchas técnicas de propaganda que lograron penetrar en la mente de un electorado que no es razonable sino absolutamente sentimental. Él logro que la gente dijera: “México necesita un cambio”, para bien o para mal, pero se necesita un cam-
bio, y logró despertar en la gente, la mexicana frase de “la tercera es la vencida” y la gente estuvo dispuesta a darle esa oportunidad; de ahí que, además utilizando extraordinarias técnicas populistas en las que se divide claramente al pueblo, el verdadero pueblo, de los demás.Quien no es verdadero pueblo son los demás: aquel que trabaja, aquel que ha logrado crear un patrimonio, aquel que da empleo, todos son los demás, y entonces polarizando a la gente logró que lo ames locamente o lo odies acendradamente, y por eso está en el lugar en el que está. Yo preveo una elección entre dos formas de gobierno, pero los dos se reúnen en la misma
persona, va ser una elección entre estar a favor de Andrés Manuel López Obrador o en contra de él, no tanto a favor de Anaya o de Meade, sino votar por ellos dos, cualquiera, por estar en contra de Andrés Manuel López Obrador tratando de evitar que llegue al poder; entonces es un individuo que se convirtió en el centro de la actividad electoral en este periodo de elección presidencial. RS. ¿Cómo influyen los medios de comunicación en la imagen pública? VG. Amplificando la imagen, los medios de comunicación debemos separarlos en dos: los medios tradicionales, que se han vuelto lentos en relación con los nuevos medios, que son las redes sociales. Los medios de comunicación tradicional, sobre todo la prensa y después la televisión, van mucho más atrás que las redes sociales; la radio todavía responde un poco más de manera inmediata a la comunicación social, pero nos damos cuenta que cada vez más tomando a las redes sociales como contenido de la radio. Los nuevos medios de comunicación llámese Facebook, Twitter, Instagram, son los que están ahora dándole a la gente el gran beneficio de ser parte activa de los medios, cuando antes como receptores eran solamente una parte pasiva; ahora, son muchísimos los millones de participantes en los medios de comunicación de las redes sociales, y esta es la gran diferencia. Nosotros desde el principio hemos estado muy atentos al advenimiento de las redes sociales; fui de los primeros en tener un correo electrónico en 1996, de los primeros en haber abierto cuentas tanto personales como institucionales en las redes que acabo de mencionar, en haber tenido un canal de televisión en YouTube con ya casi 300.000 suscriptores, y por supuesto, dentro de nuestra empresa de Imagen Pública, abrir la empresa especializada en manejo de redes sociales para nuestros clientes, porque consideramos que los medios de comunicación son fundamentales para aumentar el nivel de conocimiento de una imagen pública.
RS. ¿Las encuestas electorales influyen en la imagen pública? VG. Influyen en la percepción de la gente en torno a que se cree que lo que las encuestas dicen es lo que va a pasar, y eso no es cierto, las encuestas son fotografías de un momento dado, que auscultan opinión en una muestra seleccionada correctamente con valor científico, también en un momento dado, pero no quiere decir que sean bolas para adivinar, para predecir el futuro; si así hubiera sido, estaría en el poder Hillary Clinton y no Donald Trump, si así hubiera sido, Inglaterra no se hubiese salido de la Comunidad Económica Europea; por lo tanto, las encuestas, si bien señalan ciertas tendencias de opinión, jamás deben de tomarse como pronósticos. RS. En la actualidad existe un boom de expertos en Imagen Pública, pero en su opinión ¿Cuáles son las principales características que debería tener un buen Consultor en Imagen Pública? VG. Consultor en Imagen Pública es un título registrado como marca, que solamente puede ostentar cualquiera que ha estudiado, todos aquellos que se hacen llamar “asesores de imagen” así nada más, no tienen educación superior en la materia, porque no hay escuelas de eso con grados de educación superior. Somos la única escuela que avizoró que esto podía ser digno de materia de estudio, que invirtió ya desde 1992 hasta la fecha, 26 años de trabajo en la creación de la primera facultad en Imagen Pública del mundo y que está engresando a gente verdaderamente preparada; entonces en este boom que tú mencionas, solamente tenemos dos clases de gente: la que estudió y la que no, la que hace las cosas con conocimiento y la que las hace por intuición, creyendo que porque se visten muy bien o saben hablar muy bonito, pueden asesorar a los demás en hacerlo, y se necesita mucho más que esas dos habilidades para poder trabajar la percepción -imagen es percepción- de manera integral, porque si tú dejas puntos de fuga de comunicación verbal
o no verbal en tu comunicación integral, lo único que vas a producir es incoherencia y si vemos, analizando por ejemplo las campañas políticas ya que están todas tan recientes, podemos ver que la incoherencia estuvo presente en todas las campañas, increíble, ¿no? De ahí el gran campo de trabajo que se puede abonar a través de la Imagologia y de la Ingeniería en Imagen Pública. RS. ¿Cuáles han sido los principales retos a los que se ha enfrentado?
VG. Son muchos, el primero es lograr que nuestros clientes admitan un diagnóstico de imagen pública procedente de investigación y de análisis de esencia, qué es contrario a lo que ellos creían, es muy difícil para los clientes aceptar que, sin darse cuenta, habían estado haciendo las cosas de manera equivocada, me ha tocado ver incluso a clientes muy enojados; sin embargo, cuando comprenden que el terreno de la percepción en sus casos no corresponde con el terreno de la realidad y que deben de entender que para la gente su percepción es la realidad, y que ellos son el origen de la mala percepción, aceptan el diagnóstico y de ahí piden la ayuda, dicen:
“ok ya lo entendí, quiero corregir todo, ¿pueden ayudarme?”. Eso es un reto. El segundo reto es que el cliente permita un análisis de esencia que arroje con sinceridad resultados verdaderos, a veces hemos tenido que vencer retos de clientes que nos han ocultado cosas y que nos vienen reventando a la mitad de un proceso de Ingeniería en Imagen Pública, y tenemos que decirles: “¿por qué nunca me lo dijiste?, podríamos haberte vacunado sabiendo esa verdad y haber puesto los remedios antes de que surgieran las cosas; entonces ha sido un gran reto enfrentarnos a dolores de imagen pública a la mitad de un proceso debido a la omisión, por parte de nuestros clientes, de una verdad que creían que nunca se iba a saber y que acaba reventando a la mitad de algo. El tercer reto importantísimo, es que la gente vea a la Ingeniería en Imagen Pública como un proceso que nunca debe pararse. A veces nos ha pasado que un gobernador dice: “ya me ayudaste a ser gobernador, muchas gracias” y ya no nos contratan cuando son gobernadores; empiezan entonces los dolores de cabeza porque creen que como ya tienen el poder va a ser fácil estar en la cima, que nunca van a caer, y podemos ya citar por centenas los casos de gente que habiendo estado en la cumbre de la popularidad o de la aceptación, caen estrepitosamente a través de un sexenio. La ingeniería en Imagen Pública es un proceso que se debe conservar, que es digno de estar muy al pendiente de los cambios en la esencia, porque la esencia es dinámica, evoluciona, todos podemos saber que nuestra esencia no es la misma que cuando éramos niños, adolescentes, jóvenes o adultos; ha habido una evolución, si bien hay ciertas cualidades que son innatas, muchas otras se han convertido en una adaptación a través del contexto en el que nos ha tocado desarrollarnos. La Ingeniería en Imagen Pública está pendiente de la evolución de la esencia y de los objetivos; por ejemplo, no es lo mismo el objetivo de lograr un puesto de poder, que el objetivo de hacer un buen ejercicio de ese poder.
Por otra parte, se debe estar muy al pendiente de las necesidades de las audiencias en un medio que actualmente es cambiante a cada momento, ya no es lo mismo hablar de la generación X que de los millennials, y cuando apenas estábamos estudiando a estos, ya surgieron los centennials con una forma de pensar diferente con respecto a su generación anterior, así que estos cambios tienen que ser rápidamente detectados y adaptarse a ellos, porque si no, puedes perecer en el transcurso del cambio, siendo empresa o siendo institución no lucrativa.
Sin embargo, los retos que enfrentamos hacen que nuestro trabajo sea siempre emocionante, diferente, cada caso es particular, diferenciado y finalmente muy divertido. Trabajar en la consultoría en Imagen Pública, yo hasta lo veo como algo en donde la paso muy bien, es como si estuviéramos jugando un partido de futbol todos los días, haciendo jugadas, metiendo goles y además nos da las gracias y nos pagan. RS. ¿Nos podría compartir alguna anécdota que haya sido importante en su vida profesional?
VG. Sí, para mí fue muy importante creer en la idea, porque en los primeros años que fueron muchos, ocho del Colegio de Imagen Pública, perdí dinero, me sostuvo la fe en la idea y saber que en el momento que ya se comprendiera la necesidad de esto, se iba lograr la cantidad de alumnos y de clientes. Tuve que invertir todo el dinero que ahorraba varias veces y quedarme en ceros, el solo hecho de haber podido construir nuestra nueva sede en el lugar en la que está, un edificio precioso, de diseñador, en un rumbo privilegiado, porque estamos a una calle del
Centro Comercial Antara y a 200 metros de Plaza Carso, donde está el museo Soumaya; haber podido llevar a cabo esta obra, fue solamente motivo de fe y de avisoramiento, porque después de haber comprado el terreno, donde invertí todos los recursos, yo no tenía el dinero para construir el edificio, y fue la propia evolución del negocio, tanto de consultoría, como de capacitación y académico, lo que me llevó a captar los recursos suficientes para reinvertirlos; soy un empresario que cree en la reinversión de las utilidades para generar la riqueza tanto humana, a tra-
vés del empleo, como material, a través de los activos; y haber visto coronada esta obra en junio del año 2015, fue para mí un motivo de enorme satisfacción. Siguiente anécdota, cuando escribí mi primer libro, el editor me dijo que solamente me iba a hacer mil, y que si no se vendían, los iba a tener que pagar yo, que solamente así me firmaba el contrato de publicación; hoy, después de cambiar de editorial dos veces, una a Random House Mondadori, la más importante que ahora se llama Penguin, y la segunda a nuestra propia editorial, porque ya el manejo del e-commerce hace innecesario que tengas una editorial, puedes vender ya tus propios libros. Hemos ya vendido más de 300 mil libros, hablo en plural porque mi hijo, el doctor Álvaro Gordoa, tiene dos libros publicados y le ha ido excelente en ventas; yo tengo “El poder de la imagen pública”, “Imagologia”, e “Imagen vendedora” y Álvaro tiene “Imagen cool” y el libro de “El método H.A.B.L.A”. Entonces estos cinco títulos han vendido ya cientos de miles de ejemplares. Tercera anécdota: yo nunca me imaginé que iba a poder darle a México la primera facultad de Imagen Pública en el mundo, y esto es digno que muchos mexicanos lo sepan y que se sepa en otras partes del mundo; los mexicanos también podemos crear conocimiento y un producto de exportación al más alto nivel, nuestra escuela de Imagen Pública, puede ser considerada entre las mejores escuelas del mundo, tanto por su forma como por su fondo, nuestra excelencia académica es verdaderamente digna de elogio y no lo digo porque yo quiera autoelogiarla, sino por los también cientos y cientos de testimonios que tenemos de nuestros exalumnos y alumnos ¡Nunca lo imaginé! Y finalmente, me acaba de suceder ser seleccionado en la escuela de negocios IPADE de la Universidad Panamericana de México, y en la escuela IEEM de la Universidad de Montevideo en Uruguay, como caso de estudio en toma de decisiones, de resiliencia y de visión, así como de multiplicación de riqueza; un peso invertido después de que acabábamos
de perder dinero en el año 2008, en los últimos 10 años se ha multiplicado por 90, son resultados que nunca imaginé y que, hoy por hoy, me tienen muy satisfecho; mi ego está tranquilo, veo el mundo de manera diferente, y me he dado cuenta que la diferencia entre aquel loco que fue calificado así cuando dije que quería yo fundar estudios de educación superior en la materia y un visionario, como me dicen hoy, fue solamente el éxito de la idea, una idea que pude haber abandonado durante tantos años de penuria y que nunca vi morir.
diva que hayas otorgado, y es la dádiva la que genera el proceso de recepción; creerte merecedor de todo cuando no has dado es un error que produce frustración, por lo tanto; con todo esto he comprendido que la vida se trata de ser feliz, cada quien en lo que le ha tocado cumplir como objetivo de vida, y para mí empresarialmente, la felicidad se ha convertido en un objetivo para toda la gente que me rodea. Me gusta que quien trata con nosotros sea feliz a través de nosotros, por eso nuestra filosofía queda plasmada en nuestro manual de fundamentos bajo la fraRS. Si pudiera que definir a Víctor Gor- se: “ayudamos a los demás a ser mejores y doa en lo personal y en lo profesional, tener más, para abrir un camino de felicidad”. ¿qué diría de él y de su imagen pública? RS. Por nuestra parte es todo, a usVG. Pues que soy un loco que se convirtió en ted, ¿qué más le gustaría agregar? visionario, que la gente me considera un hom- VG. Cierro con esto: una imagen sin esencia bre exitoso pero yo no, yo nada más me consi- carece de sustento, una esencia sin imagen dero una consecuencia de las decisiones que carecerá de credibilidad. En la vida hay que he tomado en mi vida, y si tuviera que definir la ser y parecer. palabra éxito, yo no la pondría en torno a la acumulación de dinero, sino en torno a la libertad de poder hacer y de poder gozar del tiempo que la vida me permita tener de aquí en adelante, eso para mí es el éxito; por lo tanto, creo que cualquier hombre puede lograr el éxito a la hora que logre el poder ser dueño de sí mismo. Soy un creativo muy inquieto y mi peculiaridad es que considero que una idea deja de serlo cuando no la realizas, una idea no sirve de nada si no se convierte en una realidad; en la vida no solamente hay que engendrar las ideas, sino hacerlas, y esa es la parte difícil. Finalmente, después de haber estado prácticamente muerto el 17 de octubre del año 2001, día en el que me desangre víctima del estrés que produjo en mí la angustia que sentía yo al ver que mi obra podía zozobrar, y que me regresaron de esta muerte en una sala de emergencias de un hospital, aprendí que el mundo es lo que es a pesar de uno mismo, que nada es para tanto en la vida, y que jamás puedes pretender recibir o pedir, sin antes haber dado; tu recompensa siempre será equitativa a la dá-
Qué sigue
Por: Alfonso Gómez*
D
espués de los episodios dejados por las campañas políticas, ahora nos disponemos a pasar de la beligerancia de las protestas al aterrizaje de las propuestas. Será una tarea titánica no solamente para los políticos triunfadores, sino para los ciudadanos.
*Alfonso Gómez Herrera lleva ejerciendo el periodismo desde hace 35 años. Fue reportero en los periódicos: Diario de México y El Sol de México. Reportero, investigador y conductor en Canal 13 de Televisión, posteriormente Imevisión (Canal 13 y Canal 7 TV). Trabajó durante 17 años en Grupo Monitor de Radio Red donde se desempeñó como Jefe de Redacción, de Noticieros Metropolitanos, Gerente de Información, Director de Información, Director de Internet y Director de Operaciones. Gerente de las emisoras XEFAJ 1560 AM XENET 1320 AM. En el sector público ha ocupado las Subdirecciones de Información de la PROFECO, y las Direcciones de Información en las secretarías de Gobernación y Economía. Actualmente se desempeña como Subdirector de información del GPPAN en la Cámara de Diputados. Es egresado de la carrera de Periodismo y Comunicación Colectiva de la UNAM, FES Aragón y actualmente cursa la Maestría en Periodismo Político en la Escuela de Periodismo, Carlos Septién García. @Alfonsogomez1
Solamente como mero recordatorio, la mayoría de los candidatos prometieron que van a meter a la cárcel a los corruptos, por lo que en los próximos meses veremos de que está hecho el nuevo presidente de la República. No olvidemos muchos de los ofrecimientos en campaña, como los siguientes: Que van a echar abajo tal proyecto sexenal. Que desde hoy los ninis van a dejar de caminar como zombis. Que las madres solteras van a recibir una ayuda económica. Que los adultos mayores van a ganar el doble de su apoyo mensual. Que los menesterosos y humildes van a recibir dinero en efectivo para paliar sus carencias. Que los del gobierno ahora si se van a portar bien y no habrá políticos corruptos. De manera particular, el ganador de las elecciones y los perdedores ofrecieron que, si voto por este, voy a tener esto; si voto por aquél, voy a tener aquello; si no voto, voy a perder tanto. Pero nos quedaríamos cortos en el alcance de la democracia mexicana si reducimos el pasado proceso electoral a un simple balance de prebendas, como si se tratara de una bolsa de bienes y servicios. Por lo tanto, debemos aspirar a que el ejercicio democrático se traduzca en menos gobierno y más ciudadanía, en una autoridad más transparente, que rinda cuentas de sus acciones, que la austeridad no sea un logro sino una obligación. En suma, que para el cambio de hombres y nombres en el Poder Ejecutivo Federal haya valido la lucha encarnizada a la que fuimos sometidos por los candidatos en todos los días de su campaña. Una de las primeras acciones que veremos seguramente será la recomposición de las Secretarías de Estado, inclusive su ubicación geográfica y un verdadero esquema de descentralización
Norberto Bobbio
administrativa. De todas las acciones en este sentido, la que tendrá todos los reflectores ciudadanos será la administración de la seguridad pública, el principal problema que enfrenta el país, y después de este, el tema económico. Los ciudadanos tendremos que exigir de hoy en adelante que la lucha contra la corrupción sea una marca constante del nuevo gobierno, con la exigencia a los nuevos funcionarios para despojarse del fuero no escrito, de someterse al juicio ciudadano y en ello, el nuevo Ejecutivo tendrá que aceptar que ya no estará en campaña y no tiene que defender a ultranza a los suyos por más cercanos que estén de su entorno. Si cumple verdaderamente con lo ofrecido tendremos el líder que todos esperamos. Si ocurre lo contrario, más tarde que temprano surgirán los burlas, tanto como las que tuvo a lo largo de su sexenio el presidente Peña Nieto, y con ello, nos resignaremos a seguir con otro sexenio de simulaciones y de impunidad. Del lado del legislativo el cambio democrático es más comprometedor de lo que parece, porque ha sido tal el enquistamiento de la burocracia en este poder del Estado mexicano, que para comenzar deberá someterse a una verdadera sacudida de vicios, inercias y componendas de los verdaderos dinosaurios del sistema, hasta emprender una cruzada hacia la reducción de senadores y diputados, pasando por una disminución de las jugosísimas dietas y demás presupuestos, hasta achicar el tamaño de la estructura de apoyo a la labor de los congresistas.
Esto tendrá una repercusión en la vida de los partidos políticos, independientemente del cambio obligado al que estarán sujetos los que resultaron derrotados, obligándolos inclusive a la refundación y por qué no, hasta el cambio de siglas porque las que actualmente ostentan remiten al ciudadano al viejo y corrupto régimen. Será una transformación de la clase política, la clase gobernante, la que se ha visto beneficiada siempre dejando al último al ciudadano. Es la hora del tan ansiado cambio. Si resulta, el siguiente paso tendrá que darse en el Poder Judicial de la Federación, pero de ese nos ocuparemos en otra ocasión. Por lo pronto, el ciudadano tiene que prepararse parta asumir el cambio; de entrada, la disminución del aparato burocrático y con ello una forma diferente de ver al gobierno, ya no como una forma de vida, sino como un ente que permita que muchos de los servicios públicos no los tendrá que proporcionar solo el gobierno, también los particulares. De lograr todo este nuevo escenario, los millennials y las generaciones por venir podrán ver, ahora sí, un México que aprovecha responsablemente sus recursos naturales, el ingenio de su mano obra, el empuje de los emprendedores y la honestidad de sus gobernantes. ¿El nuevo presidente podrá con el reto?
COMUNICACIÓN POLÍTICA
…me parezco a aquel niño que derramando una vasija de agua al mar creía aumentar su nivel
Agenda 2030: los retos del nuevo gobierno mexicano Por: Ileana Hidalgo*
P *Ileana Hidalgo es Licenciada y Maestra en Derecho, con especialidad en Derechos Humanos por la Universidad Castilla la Mancha, en España. Dentro del IEDF ha sido Directora de Organizaciones de Representación Ciudadana y Presidenta del Comité Derechos Humanos “Nuestros Amigos A.C.” También ha sido investigadora en el Instituto de Investigaciones Legislativas del Senado de la República “Belisario Domínguez”. Es conferencista a nivel nacional e internacional y también docente en varias universidades del país. @IleanaHidalgoR
asadas las votaciones a las que fuimos convocados este primero de julio, en cuanto se declare la validez de la elección y le sea otorgada por el Instituto Nacional Electoral la constancia al presidente de la República Mexicana recién electo, serán muchos los ámbitos en los que el presidente y su equipo de colaboradores deberán empezar a prepararse y bosquejar estrategias para asumir diversos retos, siendo uno de los más relevantes el que está referido a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), objetivos que los gobierno han vertido en una agenda denominada Agenda 2030, la cual alude a una serie de compromisos de trabajo para el logro del desarrollo mundial sostenible en los órdenes económico, social y ambiental a más tardar para el año 2030. De acuerdo a la Asamblea General de Naciones Unidas, la Agenda 2030 es un “plan de acción en favor de las personas, el planeta y la prosperidad”. A través de 17 objetivos y 169 metas, abarca 5 esferas de acción: las personas, el planeta, la prosperidad, la paz y las alianzas. De esta forma se establece una agenda universal implementada por los países y partes interesadas mediante una alianza de colaboración que tiene entre otras aspiraciones la construcción de la paz y la erradicación del hambre y la pobreza como factores torales para el desarrollo sostenible y resiliente.
El origen de estos objetivos se encuentra en los Objetivos de Desarrollo del Milenio, especialmente en el reconocimiento de lo que estos no consiguieron, de ahí que fueran reformulados bajo una estrategia global que define no solo objetivos sino metas e indicadores, siendo todas ellas indivisibles. Los Objetivos de Desarrollo Sostenible son: 1. Poner fin a la pobreza en todas sus formas y en todo el mundo. 2. Poner fin al hambre, lograr la seguridad alimentaria y la mejora de la nutrición y promover la agricultura sostenible. 3. Garantizar una vida sana y promover el bienestar de todos a todas las edades. 4. Garantizar una educación inclusiva y equitativa de calidad y promover oportunidades de aprendizaje permanente para todos. 5. Lograr la igualdad de género y empoderar a todas las mujeres y las niñas.
6. Garantizar la disponibilidad y la gestión sostenible del agua y el saneamiento para todos. 7. Garantizar el acceso a energía asequible, fiable, sostenible y moderna para todos. 8. Promover el crecimiento económico sostenido, inclusivo y sostenible, el empleo pleno y productivo y el trabajo decente para todos. 9. Construir infraestructuras resilientes, promover la industrialización inclusiva y sostenible y fomentar la innovación. 10. Reducir la desigualdad en los países y entre ellos. 11. Lograr que las ciudades y los asentamientos humanos sean inclusivos, seguros, resilientes y sostenibles. 12. Garantizar modalidades de consumo y producción sostenibles. 13. Adoptar medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus efectos. 14. Conservar y utilizar sosteniblemente los océanos, los mares y los recursos marinos para el desarrollo sostenible.
POLÍTICA
Tiempo tendremos para calificar el desempeño de la acción pública a través de un instrumento tan loable como los Objetivos de Desarrollo del Milenio.
15. Proteger, restablecer y promover el uso sostenible de los ecosistemas terrestres, gestionar sosteniblemente los bosques, luchar contra la desertificación, detener e invertir la degradación de las tierras y detener la pérdida de biodiversidad. 16. Promover sociedades pacíficas e inclusivas para el desarrollo sostenible, facilitar el acceso a la justicia para todos y construir a todos los niveles instituciones eficaces e inclusivas que rindan cuentas. 17. Fortalecer los medios de implementación y revitalizar la Alianza Mundial para el Desarrollo Sostenible. Afortunadamente, a diferencia de otras propuestas de acción, ésta se encuentra desarrollada de una manera donde la simulación gubernamental no vale, para ello se diseñó desde Naciones Unidas -en conjunto con expertos, actores gubernamentales, personal de organizaciones no gubernamentales, líderes y lideresas comunitarias-, un marco de indicadores
mundiales para los Objetivos de Desarrollo Sostenible y metas de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible. No ha sido fácil la definición de esta agenda global, tan solo México organizó una consulta regional de la cual surgió la Declaración de Guadalajara, que destaca la necesidad de que los grupos vulnerables sean considerados de forma transversal en las políticas públicas; realizó tres talleres internacionales sobre desarrollo social y económico, inclusión y la importancia de la medición del progreso en la Nueva Agenda de Desarrollo; patrocinó la consulta temática sobre energía (en conjunto con Tanzania y Noruega); además de asumir compromisos en materia de igualdad de género y derechos de las mujeres. No se trata de una lista de buenos deseos, pues no hay un objetivo donde México no tenga tareas pendientes, no hay labor menor ni aspecto que no sea relevante. Por otro lado, no se trata de que
sea solo el presidente quien dirija las tareas a realizar para cubrir las metas, se trata de que las y los políticos, funcionarios y servidores públicos asuman su parte de responsabilidad para el cabal cumplimiento de los programas y alcanzar los ODS. Para ello México hoy requiere de un buen gobierno, decía Platón que un buen gobierno es el que tiene como funciones centrales la aplicación de una legislación justa que busca hacer virtuosos y felices a los ciudadanos, y velar por el bien común; Aristóteles decía que el fin del Estado era la felicidad de sus ciudadanos. En un Estado de derecho como el nuestro - donde la política, el derecho y la administración pública son precondición para que la democracia fructifique como un sistema que reporta bienestar a sus ciudadanos- hacen falta atributos que van más allá de un diagnóstico de la situación en que nos encontramos las y los mexicanos o de un discurso (electoral). Hace falta reforzar la ética pública para
lograr ese buen gobierno tan anhelado por la mayoría de los habitantes de este país. En palabras de Oscar Diego Bautista, ética pública “se refiere a la ética aplicada y puesta en práctica en el ámbito público; implica plena conciencia en las actitudes del servidor público la cual se traduce en actos concretos orientados hacía el interés de la ciudadanía. Como decía Max Weber, implica el logro de una ética de la responsabilidad”. Cuando el servidor público desempeña su función con sentido de responsabilidad, se da cabida no a la posibilidad de lograr una meta sino a la certeza de poder alcanzarla. Sin duda los ODS son un reto que implica contar con un presidente y un cuerpo de administración pública preparado, ético, responsable e inclusivo, tiempo tendremos para calificar el desempeño de la acción pública a través de un instrumento tan loable como los Objetivos de Desarrollo del Milenio.
La comunicación: reto del próximo presidente Por: Alejandro Arroyo*
A *Alejandro Arroyo Politólogo por la UNAM, conjunta experiencia en Gobierno, Poder Legislativo y Sector Privado. En el ámbito gubernamental ha sido asesor y enlace legislativo en la Secretaría de la Reforma Agraria y en el staff jurídico de la Presidencia de la República. Fue Director de Comunicación Social del Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de Familia (DIF). En la Cámara de Diputados fungió como Secretario de Enlace Legislativo y con Órganos de Gobierno del Grupo Parlamentario del Partido Nueva Alianza en la LXII Legislatura. Colaboró durante casi una década en la Firma de Cabildeo, Comunicación y Relaciones Estratégicas Fitch y Asociados, desde donde asesoró y acompañó a diversas asociaciones, empresas y corporativos nacionales y multinacionales en su relación con el Gobierno y el Congreso. Fue también profesor en la FCPySUNAM y en la Universidad Iberoamericana. @ElAletsArroyo
l momento de escribir estas líneas no se ha celebrado la elección presidencial. Pero no importa. El acento de la presente colaboración intenta colocarse en un aspecto fundamental e indispensable para el próximo titular del Poder Ejecutivo Federal: la comunicación. Para nadie es ajeno que un eficaz ejercicio de gobierno pasa por una gestión estratégica precisa, atinada, funcional y efectiva de aquella. Desde luego la agenda de gobierno es medular. De igual manera lo es la visión y los objetivos que pretende alcanzar el nuevo presidente. Pero si no se tiene una política de comunicación y de difusión pertinente y certera, ningún esfuerzo, por loable que sea, llegará a buen puerto. La razón es simple: la comunicación se ha vuelto horizontal. En cualquier momento y lugar, cualquiera puede tener oportunidad de viralizar algún contenido. En segundos es posible generar percepciones y destruir reputaciones. Cuando el nombre del juego en política hoy se llama transparencia y credibilidad, la clase política –y más aún, la élite gobernante– requieren atender estos aspectos cruciales. Aunque los contextos son particulares y las épocas definitivamente diferentes, en los últimos 30 años hemos tenido solo dos presidentes con dotes comunicacionales, Carlos Salinas y Vicente Fox. Mucho más efectivo el primero que el segundo, pero ambos “conectaban” con el gran público. Ernesto Zedillo no lo hacía mal, pero tampoco era su fuerte. Planeado o no, supo hacerse de una percepción positiva sobre todo aprovechando al máximo la alternancia en el poder presidencial que le tocó vivir. Por el contrario, Felipe Calderón nunca halló la manera efectiva de comunicarse con las grandes audiencias, y Enrique Peña Nieto, a pesar de haberse construido una imagen sólida como candidato, siendo presidente se enfrentó a la era del meme y de unas redes sociales incendiarias. Dicho sea de paso, también los múltiples errores a nivel público del aún presidente le abonaron a la generación de una percepción negativa. El estilo personal de comunicar es clave en la construcción de una comunicación estratégica de gobierno. Aunque es posible ser un político sin grandes capacidades comunicacionales, con una estrategia definida y eficazmente gestionada en ese rubro, la labor gubernamental puede alcanzar rumbo y claridad.
Una posible explicación puede atribuírsele al distanciamiento entre sociedad y clase política. Peor aún, van en direcciones opuestas y los políticos profesionales poco se han preocupado por encontrar el camino en el que puedan transitar conjuntamente. Solo lo hacen –o intentan– en época electoral, pero cuando se convierten en gobierno, la distancia se agudiza y el malestar se intensifica. El pasado proceso electoral dio claramente cuenta de eso. Por tal motivo, el nuevo presidente tiene muchos retos, pero también grandes oportunidades en función de la actual dinámica
comunicacional. Entre los primeros se encuentra agrupar al menos dos capacidades indispensables: humildad y empatía, ambas en el sentido de leer, reconocer y solidarizarse con el múltiple y variado ánimo ciudadano. Imposible dar gusto a todos, pero mal haría el nuevo presidente en ensoberbecerse y solamente dar cabida al canto de las sirenas. Es simple, para estar en aptitudes de ejecutar una comunicación eficaz, el nuevo presidente tendrá que ser sumamente sensible al entorno que lo rodea. Entender esto se dice fácil, pero el reto es mayúsculo en un ámbito condicionado por el poder político que una presidencia representa; no obstante, es indispensable que lo lleve a cabo. En cuanto a las oportunidades, resulta inmejorable aquella orientada a devolverle a la política su credibilidad. Si el nuevo presidente se muestra sensible, empático y transparente al comunicar puede, si no reducir la polarización del entorno (que sería lo deseable, porque detractores los habrá siempre), sí dejar de ser al menos factor polarizante. Dado el reciente proceso electoral, es indispensable regresarle a la política su credibilidad y a la presidencia su autoridad, siquiera en lo referente a la investidura. Pero esto último depende del nuevo presidente y solo de él, porque el gran público no tiene por qué ser el responsable mientras no le den el incentivo para serlo. Y ese incentivo, como hemos visto no solo en México sino también en gran parte del mundo, viene solamente de la clase política y de la élite gobernante. Por su bien –y el de todos– valdría la pena lo intentaran.
COMUNICACIÓN POLÍTICA
Muy probablemente el último gobierno que tuvo esas características en México fue el de Carlos Salinas de Gortari. A eso se añade que el expresidente era –y es– un buen comunicador político. Cierto es también que el México de 1988 a 1994 tenía otros resortes a nivel de sistema político y de la relación gubernamental con los medios de comunicación, sin embargo, Salinas supo generar durante parte importante de su administración una buena percepción a la vez de saber difundir correctamente su filosofía de gobierno. Los mexicanos sabían y entendían con claridad que quería y de qué se trataba el salinismo. El problema, de sobra conocido, fue el manejo de crisis al final de su mandato. Desde entonces a la fecha, y salvo algunos destellos de cierta elocuencia dados por coyunturas muy específicas (“El Pacto por México”, por ejemplo), la comunicación gubernamental a nivel presidencial ha resultado más bien fallida.
México, fin de ciclo Por: Carlos González*
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l triunfo de la campaña presidencial de Andrés Manuel López Obrador1 es solo la punta de un iceberg que es indispensable conocer y reconocer, si es que no queremos chocar con él y hundirnos por ello como el Titanic, en medio de un océano tan inhóspito como vehemente.
*Carlos González, es Economista, especialista en temas electorales y de participación ciudadana, ha desempeñado cargos de alta responsabilidad en las tres instituciones electorales federales mexicanas (IFE, FEPADE y TEPJF) y en organismos internacionales (PNUD, FNUD y OEA) Ha sido Director Ejecutivo de Capacitación Electoral y Educación Cívica del IFE y presidente de las Comisiones de Participación Ciudadana y Educación Cívica y Capacitación del IECM, donde ha sido Consejero Electoral. @CarlosCE_IEDF
El voto que recibió su candidatura2 ha sido, obviamente, un voto para él y el proyecto político que ha construido junto con muchas otras personas, pero sobre todo ha sido un voto de decenas de millones de mexicanos y mexicanas desencantadas con la situación general que prevalece en el país y, a la vez, encantadas con la posibilidad de cambiarla. Es un voto que vale tanto por lo que es, como por lo que significa. Es el voto de un país que ya cambió y quiere cambiar. El voto de México en el final de un ciclo. Que sea el voto de México al principio de un nuevo ciclo, depende de nosotros y de nadie más. Ni más, pero tampoco ni menos. Aquí algunas razones y razonamientos sobre ello y para ello. El fin de ciclo Lo que hizo crisis en el país no fue solo el modus operandi político del sistema priista o de cualquier otra “ista” modus partidista, fundado en la articulación de cuatro elementos básicos: 1) el uso de todo tipo de recursos públicos (materiales, financieros y humanos) para las campañas políticas (electorales o no) de su(s) partido(s); 2) la coacción y compra descarada del voto, mediante la amenaza, promesa o manipulación del acceso a programas sociales o de plano la entrega de quinientos o mil pesos en promedio a cambio primero de la promesa y después la demostración de un voto (tanto en procesos constitucionales, como también ahora en contiendas internas partidistas); 3) la cooptación de liderazgos y sus “bases” bajo un esquema de supra-sub ordinación clientelar mediante múltiples procedimientos, la mayoría de los cuales implica un salario o una promesa de salario, y; 4) la injerencia indebida sobre procesos y, a veces, instituciones garantes. Todo eso ha hecho crisis. Es la verdad esperpéntica que casi nadie quiere aceptar ante el espejo de la realidad nacional, pero que poco a poco se va imponiendo con sus gestos grotescos, sinestros, ya inaceptables e intolerables: inoperantes. Los resultados electorales de la actual coyuntura electoral mexicana parecen indicar que ese modus operandi es lo que hizo crisis, pero en realidad no es solo eso. Quizá buena parte de los vencedores también
ELECCIONES hicieron uso de los residuos de ese modus operandi que, desde luego y en general, se ha roto porque ya no puede operar como antes, gracias al hartazgo de la gente, la visibilización de las redes sociales y, sobre todo, la acción de múltiples organizaciones de la sociedad civil cada vez más poderosas y empoderadoras. En realidad, lo que en el fondo y como causa hizo o está haciendo crisis en nuestro país es el funcionamiento de todo un sistema societal basado en la desigualdad (con sus siniestros correlativos sociales de discriminación, marginación y exclusión) fundamentalmente producida, a su vez, por los efectos de la crisis estertórea de sus corruptas derivaciones económicas, culturales y políticas, incluidas las de dicho modus operandi. Esta no es la derrota de un partido o de varios y el correlativo triunfo de un partido o de varios, eso es lo de menos: este es el fin de un ciclo de vida nacional en México. Este fin de ciclo, lamentablemente, no implica (aún) el fin de nuestro sistema societal basado en la desigualdad (ojalá), pero sí el principio del fin de una forma específica de su funcionamiento que bien podemos llamar “régimen”. De esta forma, el fin del ciclo mexicano que se anuncia es o podría / debería ser el principio del fin del régimen con que se gobierna ese sistema societal: régimen de gobierno y reproducción basado en los 4 elementos del modus operandi político que hemos descrito y que ha dejado de operar como modo legítimo de hacer las cosas en el mundo político electoral. El triunfo de Andrés Manuel De esta forma, el triunfo presidencial de An-
drés Manuel López Obrador no es solo el triunfo presidencial de Andrés Manuel López Obrador: es la expresión de una sociedad deshilvanada en un país invertebrado que reacciona ante un estructurado régimen de dominación clientelar y corrupto, en cuyo contexto ha comenzado a hacer crisis su sistema social de desigualdad, discriminación, marginación y exclusión. Esta es una visión optimista y quizá utópica: la visión de este escribano que no tiene otra visión que ofrecer y compartir. La agenda ciudadana que viene Lo que inició (o presumiblemente habrá de iniciar) no el 1º sino el 2 de julio es (o es esperable que sea) una verdadera “sacudida nacional”. Habrá desconcierto, desorganización y quizá excesos, también de la coalición ganadora. Nada de eso debiese sorprendernos. Pero debemos prepararnos para ello… ¿para qué? Pues para hacer de la contingencia, virtud. Es este un buen momento para nosotros: todas y todos los que no estamos ni queremos estar dentro del modus operandi del régimen de gobierno y reproducción del sistema societal de desigualdad que, en cambio, queremos transformar en el país lindo que, definitivamente, queremos habitar. Viene una coyuntura que puede ser formidable. Que así sea, depende de nosotros, afortunadamente. Por fin, la buena ventura podría anidar entre nosotros. Ojalá. Fin del comunicado. REFERENCIAS 1. Como siempre, la persona lectora tiene ventaja sobre la persona escritora. Solamente él o la lectora sabrá si me equivoqué o no en la premisa principal de este ensayo, escrito semanas antes de la elección y su amable lectura. De cualquier forma, es convicción del autor de estas líneas que, aun cuando el resultado electoral fuera otro, la necesidad de reconocer el fin de ciclo del actual régimen mexicano se impone en la agenda nacional, particularmente en la agenda de la participación ciudadana. 2. Haya ganado o no…
Nueva Ley de Propiedad en Condominio eliminará inseguridad jurídica Por: Dunia Ludlow*
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as condiciones de abandono, deterioro e inseguridad jurídica en que viven miles de departamentos y unidades habitacionales, nos obligan a elaborar una nueva Ley de Propiedad en Condominio y modificar otras leyes para agilizar la intervención de las autoridades e incentivar la participación ciudadana.
*Dunia Ludlow es Diputada Local VII Legislatura ALDF. Estudió la Licenciatura en Ciencias Políticas y Administración Pública en la Universidad Iberoamericana, donde se graduó con Mención a la Excelencia Académica. Es Maestra en Gobierno y Administración Pública por la Universidad Complutense de Madrid, España, así como en Economía y Gobierno por la Universidad Anáhuac del Norte. Ha estudiado dos Diplomados, uno en Opinión Pública y Comunicación Política por la Universidad Nacional Autónoma de México y el otro en Diseño y Planificación de Campañas Electorales, impartido por la Fundación Ortega y Gasset de Madrid, España. Actualmente es la Presidenta de la Comisión de Vivienda de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal. @DuniaLudlow
En junio pasado, llevamos a cabo una mesa para hablar sobre las limitaciones y problemas de la actual Ley de Propiedad en Condominio y dimos a conocer los obstáculos que se están presentando para escriturar propiedades. En esta reunión, en la que participó el Colegio de Notarios, detallamos que ya contamos con una propuesta desarrollada a partir de un amplio proceso de consulta con todos los sectores involucrados. Desde abril de 2016, se presentó la primera iniciativa de reforma a la Ley de Propiedad en Condominio. Dos meses después llevamos a cabo talleres de consulta con los actores relevantes en este sector, que incluían a administradores externos de condominios, los condóminos, académicos, sociedad civil, notarios y autoridades como la Procuraduría Social (Prosoc) y el Instituto de Vivienda. Para agosto de 2016, habíamos habilitado un sitio de Internet en el que cualquier persona interesada podía presentar sus comentarios y observaciones a la propuesta de reforma. En diciembre de 2017, se presentó la nueva Ley de Propiedad en Condominio de la Ciudad de México y la reforma a la Ley de la Procuraduría Social. Además de todo este trabajo, entre abril y junio de este año, llevamos a cabo reuniones de análisis con equipos técnicos de
Lo que la propuesta plantea es generar un marco jurídico que fortalezca la certeza de la propiedad de los condóminos; promover una mejor articulación entre las autoridades y los condóminos; y establecer mecanismos ágiles y transparentes en favor de una nueva cultura condominal. Para alcanzar estas metas necesitamos adecuar y simplificar los procedimientos para la constitución del régimen en propiedad en condominio, porque uno de los problemas que está impidiendo la escrituración de nuevos condominios es el requisito de una póliza de fianza que el propietario del inmueble debe entregar a la delegación. En su lugar estamos proponiendo crear una póliza de seguro, que es un instrumento más accesible para toda la población. De acuerdo con el Colegio de Notarios, en la CDMX el 50% de las viviendas no tienen escrituras. Esta cifra incluye a viviendas que carecen de ese documento y a las que sí cuentan con escritura, pero tienen el in-
mueble intestado o no están a nombre del dueño virtual. Lo anterior, repercute en que el gobierno capitalino no reciba los impuestos y derechos que se generarían por la regularización de esas propiedades. En su lnforme de Avance Trimestral, enero-diciembre 20171, la Secretaría de Finanzas nos advirtió que el año pasado se registraron 10.6 por ciento menos operaciones de jornada notarial y transmisiones de propiedad por sucesión. Y aunque atribuyó la caída a la no publicación de los programas, lo anterior, no coincide, toda vez que en marzo de 2017, la Consejería Jurídica sí anunció los beneficios de este programa, e inclusive fueron otorgadas 33 mil 600 constancias, según el Colegio de Notarios.2 Es urgente atender este pendiente antes de que llegue el primer Congreso, porque de lo contrario, corre el riesgo de no considerarse. La tarea que tendrá la próxima legislatura será titánica, no debemos echar en saco roto las advertencias de un gran problema que se avecina en esta capital. REFERENCIAS 1.https://data.finanzas.cdmx.gob.mx/documentos/banco_info_2017_4/ IAT_Ene_Dic_2017.pdf 2. http://www.colegiodenotarios.org.mx/?a=2136
COMUNICACIÓN POLÍTICA
los diputados integrantes de la Comisión de Vivienda, notarios, desarrolladores y la Procuraduría Social (Prosoc).
Democracia y elecciones Por: Moisés Vergara*
P Moisés Vergara Trejo es Doctor en Derecho y Especialista en Derecho Electoral, grados que obtuvo con mención honorífica en las Facultades de Derecho de la Barra Nacional de Abogados y de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), respectivamente. Asimismo, es Licenciado y Maestro en Derecho por la Facultad de Derecho de la UNAM y cuenta con estudios de especialización en derechos fundamentales en la Universidad Carlos III de Madrid, España y con diversos diplomados en derecho electoral, argumentación e interpretación jurídica. Fue distinguido con un Doctorado Honoris Causa por el Instituto Mexicano de Líderes de Excelencia y es miembro de la Barra Nacional de Abogados, A.C. y de la Sociedad Mexicana de Estudios Electorales, A.C. Ha sido profesor universitario y ha ejercido de manera libre la profesión de abogado; entre otros cargos públicos fue asesor y secretario particular en la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión; Secretario Técnico Jurídico, Secretario de Consejo Distrital, Asesor de la Secretaría Ejecutiva y Asesor de Consejero Electoral en el Instituto Electoral del Distrito Federal. En el Tribunal Electoral del Distrito Federal, se desempeñó como Secretario Auxiliar, Secretario de Estudio y Cuenta, Coordinador de Ponencia de dos Magistrados Presidentes, y Secretario Administrativo. Actualmente es Secretario General del Tribunal Electoral de la Ciudad de México @moshivergara
ara Javier Patiño Camarena, “el término democracia ha sido y es utilizado para cubrir una amplia gama de regímenes políticos, algunos de los cuales son antiguos y experimentados y otros relativamente nuevos.” También nos dice que el vocablo democracia es, “además, un término multívoco ya que algunas veces es utilizado para referir una forma de Estado, otras para designar una forma de gobierno, e incluso para calificar a una forma de vida.” 1 Entonces, hablar de democracia es referirse a uno de los conceptos multívocos más polémicos del Derecho y de la ciencia política, el cual ha sido estudiado durante el transcurso de la historia. Por su parte, Giovanni Sartori opina que “existe una profunda diferencia entre la democracia tal y como la entendían los antiguos y la democracia de los modernos. En ambas el principio de legitimidad es el mismo, pero todo lo demás es distinto. La primera es un ejercicio propiamente dicho, y en ese sentido “directo” del poder, mientras que la segunda es un sistema de “control” y de limitación del poder. La primera no prevé representación, mientras que la segunda se basa en la transmisión representativa del poder.” 2
La democracia de los atenienses o “el gobierno del pueblo”, estaba basada en las decisiones colectivas, tomadas en asambleas ciudadanas donde la mayoría de la población eran esclavos. Los representantes se elegían por sorteo considerando únicamente al género masculino y existían escasos mecanismos para controlar al poder. La democracia moderna, por el contrario, encuentra sustento en el ejercicio y potenciación de las libertades cívicas, en el Estado de derecho y en la legitimación e implementación de mecanismos de control al ejercicio del poder. Los representantes en los países democráticos generalmente son electos por el pueblo y, el ejercicio del voto, según el sistema de cada nación, puede ser: universal, libre, directo o indirecto y secreto, sin soslayar otros métodos electivos.
También puede entenderse a la democracia como lo establece la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos en su artículo 3°, no solamente como una estructura jurídica y un régimen político, sino como un sistema de vida fundado en el constante mejoramiento económico, social y cultural del pueblo. Siguiendo a Sartori, puede afirmarse que “la opinión pública y la democracia electoral tienen que ver con la dimensión horizontal de la política: la base del edificio. Pero después viene el edificio y, con él, la dimensión vertical de la política, donde hay quien está arriba y quien está abajo, quien manda y quien es mandado, el nivel superior y el nivel inferior. “Democracia vertical” es, pues, la democracia como sistema de gobierno, y por tanto como estructura jerárquica. Y aquí topamos con la acusación que se
POLÍTICA
Hoy en día es muy difícil referirse a la democracia como un constructo íntegro y estático.
viene haciendo desde siempre a la democracia: ¿cómo es que el mando de la mayoría se transforma en mando de minoría o minorías?” 3 Sartori responde a la pregunta anterior afirmando que el término mayoría tiene muchos significados, pero debe entenderse en el sentido de criterio mayoritario o en el sentido de mayor número; es decir, que la toma de las decisiones debe someterse a la “regla de la mayoría”. Como dato curioso, comenta también este autor que las votaciones no provienen de los griegos, sino de las órdenes religiosas de los monjes atrincherados en sus conventos que se veían obligados a elegir a sus superiores. Hoy en día es muy difícil referirse a la “democracia” como un constructo íntegro y estático. Existe una serie de elementos que se van edificando de ma-
nera continua, y hacen al vocablo cada vez más amplio y complejo. No obstante, nos atrevemos a decir que, desde nuestro punto de vista, la participación ciudadana es un elemento central de la democracia, que se materializa a través de los procesos electorales durante el ejercicio del sufragio, el cual es un derecho y una obligación de carácter universal. En ese sentido, José Antonio Crespo, refiriéndose a las elecciones y a su proceso legitimador, nos dice que es un mecanismo que contribuye a mantener la estabilidad política cuando los resultados tienen una aceptación mayoritaria; sin embargo, sostiene que la legitimación es una cuestión subjetiva que depende de la percepción ciudadana, debido a que “los procesos electorales constituyen, pues, una fuente de le-
gitimación de las autoridades públicas. La legitimidad política puede entenderse, en términos generales, como la aceptación mayoritaria, por parte de los gobernados, de las razones que ofrecen los gobernantes para detentar el poder.” En dicha lógica, para que una democracia realmente funcione, es necesario contar con autoridades electorales administrativas y jurisdiccionales verdaderamente profesionales e independientes, que organicen las elecciones y resuelvan los conflictos, apegados a la legalidad, pero al mismo tiempo, con sensibilidad política, pues no debemos perder de vista que el objeto central es la lucha por el poder político y la transición pacífica y ordenada del mismo, lo cual se encuentra relacionado con el concepto de democracia vertical del maestro Sartori.
Finalmente, es preciso señalar que, si bien es cierto, la democracia no se limita exclusivamente a las elecciones, pues la transparencia y rendición de cuentas, la organización de la sociedad civil, el respeto a los derechos humanos, entre otros grandes temas, juegan un papel primordial en la configuración de la vida democrática de todo país; también lo es, que de cualquier manera, las elecciones son para la democracia un eje toral y fundamental, mismas que no deben de concebirse como un proceso propio de la autoridad electoral o los partidos políticos, sino como una oportunidad integral de participación de la ciudadanía misma.
REFERENCIAS 1. PATIÑO Camarena, Javier, Nuevo Derecho Electoral Mexicano, México, UNAM, 2006, p 5. 2. SARTORI, Giovanni, La democracia en 30 lecciones, México, De bolsillo, 2015, p. 57. 3. Ibídem, p. 43. 4. CRESPO, José Antonio, Elecciones y Democracia, México, IFE, 2016, pp. 23 - 24
La reconfiguración política y social del sistema político Por: Elvin Torres*
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l tejido político y social después de las elecciones presidenciales, y toda la perplejidad de espacios públicos y curules que están en juego, independientemente del arraigo político, son un tema que debe ocuparnos como nación.
*Elvin Torres es Doctor en Filosofía con Acentuación en Ciencias Políticas por la Universidad Autónoma de Nuevo León, Maestría en Gobernabilidad y Gestión Pública, Instituto Ortega y Gasset, Madrid, España. Ha sido catedrático de maestría en la Facultad de Derecho y Criminología y Ciencias Políticas de la Universidad Autónoma de Nuevo León; asesor jurídico en el Congreso de Nuevo León; Director de Concertación Social, Desarrollo Social y Director de Empleo y Desarrollo Empresarial del municipio de Monterrey, Nuevo León. Actualmente catedrático de la UVM, consultor legal en Law Firm Torres- Garza-Sada y jurídico Congreso del Estado de Nuevo León. @Elvin_TB
Las elecciones presidenciales habrán pasado, el fervor social y la mercadotecnia política habrán disminuido, así que habrá que reconstruir objetivos comunes, iniciando por la reconfiguración política y social de nuestro país. Sin embargo, no será una tarea fácil para el nuevo presidente de la República, tomando en consideración la politización del voto y la competencia de las elecciones. Más allá de toda la oleada y fervor que se suscitó por el tema de las elecciones, es momento de que todos los actores políticos, sociedad y gobierno, cierren filas en torno a la estabilidad social y el reacomodo político. Es importante que la sociedad mexicana esté plena y no dividida, que la legitimidad impere en los resultados electorales y sea la decisión libre de los
Es momento de que todos los actores políticos, sociedad y gobierno, cierren filas en torno a la estabilidad social y el reacomodo político.
ciudadanos y no la norma jurídica que empodere al próximo presidente de México. La reconfiguración social y política del país, se debe tra-
bajar en conjunto, a través de acciones que se lleven a cabo de forma coordinada, inmediata y sensata; el valor de aceptación de la derrota electoral debe imperar como esencia del arte de la política y fomento de la democracia.
El país y las instituciones son más fuertes que cualquier aspiración, personaje o político; se debe contribuir con las buenas prácticas, una vez que ha pasado la fase de las elec-
ciones, para reconstruir un tejido de aceptación, de trabajo coordinado y cooperar, desde cualquier ámbito de la sociedad, con el gobierno para lograr una nación más próspera, justa y vigorosa.
Imaginémonos cosas chingonas
El sueño de un México para después de las elecciones
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Por: Claudia Guzmán*
Imaginémonos cosas chingonas! Así enérgicamente, Javier Hernández “Chicharito”, confrontaba la incredulidad del comentarista de futbol: David Faitelson, quien desmerecía cualquier posibilidad para el equipo mexicano ante un pronóstico desalentador que situaba a México en el Mundial, no solo sin ninguna oportunidad, sino como un equipo que históricamente no podría arrebatar la victoria al campeón del mundo: Alemania. Y ahí estaba lo chingón: en ¡Cambiar el futuro!
*Claudia Guzmán es diseñadora gráfica por la Universidad La Salle, cuenta con estudios en Grafología, Religiones del Mundo y Psicología. Actualmente estudia Administración Pública en la Universidad Latinoamericana. Es Coach Internacional Certificada por la ICC (International Coaching Community) con sede en Londres, dicha certificación cuenta con el galardón European Quality Award. Es parte del Consejo Directivo de COPARMEX Ciudad de México y es Presidenta de la Comisión de Mujeres empresarias de este centro empresarial. Ha sido reconocida como una de las mujeres más influyentes en el sector público y privado por la Revista Expansión en su edición las 100 mujeres más poderosas del 2015. Fue nombrada Emprendedora del año por la Revista Mujer Ejecutiva en su edición 20 líderes mexicanas. Forma parte del observatorio ciudadano del IEDF y de la Red de observación electoral de este mismo Instituto. @ClauGuzG
Después del inimaginable triunfo azteca sobre la escuadra germana, el país se desbordó en euforia, los memes y los videos motivadores, no se hicieron esperar, la memoria de aquella declaración del Chicharito se haría viral en las redes y quedaría como testigo reminiscente de su predicción y profética clarividencia. Así, el “Cielito lindo” retumbaba en los estadios, el corazón verde latía con embates de esperanza que se manifestaba y daba vuelta al mundo para citarse con nuestra victoria alada, en nuestro icónico “Ángel” de la Independencia. ¡Vaya!, qué buen ejemplo puso la selección mexicana, un equipo desestimado que no solo se enfrentaba al grupo del campeón sino a la incredulidad y al enfado de sus connacionales, ¡vaya! qué forma de arrancar la semilla de la duda que redefinía el milagro mexicano como la certeza y la acción que pueden transformar cualquier presagio. Si con esta actitud pudiéramos ir a todo lo que ya está en la conciencia colectiva, ¡otra canción ya nos cantaría! Y es aquí donde quiero hacer una alto reflexivo; para cuando estemos leyendo esto, ya tendremos el resultado de la elección presidencial, y todas aquellas campañas de miedo, de denostación que provocarían la ira y el encono social, estarán germinando. Es aquí donde quisiera invitar a quien está leyendo estas líneas, a que desafiemos las creencias que nos limitan, México debe abrazar en estos momentos la unión y la solidaridad; no podemos ni debemos permitir ningún espacio que provoque la fragmentación, que incite a la separación, ¡no!, ahora es momento de ir de lo ordinario a lo extraordinario; que de verdad pasemos de imaginar, a crear; que pasemos del anhelo de desear, a la satisfacción de lograr.
Phil Jackson
México necesita mexicanas y mexicanos que nos mostremos civilizados en medio de la desafección y la incredulidad democrática, es necesario que si no nos gusta lo que vemos dejemos de quejarnos y nos unamos para cambiarlo. Para exigir hay que actuar, para criticar, hay que demostrar el resultado de los hechos que queremos alcanzar. Frente al futuro incierto de cualquier resultado electoral está la actitud con la que debemos trabajar, hoy la cultura cívica debe estar cargada de participación efectiva: de participación ciudadana comprometida. Ninguna autoridad podrá pasar por encima de una sociedad organizada y enfocada al bien común, enfocada a los acuerdos y al consenso. Lo que sigue para México es que después del primero de julio nos preparemos para exigir, para trabajar, para gobernar, cambiemos el paradigma. El voto no es para declarar quién va a ganar, es para quien habrá de representar, no a los mexicanos, sino la voluntad de ellos. Estamos frente a un momento histórico, de nosotros depende que la historia de apatía y pérdida cambie, de nosotros depende que el ejemplo de Isaac Hernández, mejor bailarín del mundo; Guillermo del Toro y Alfonso Cuarón ganadores del Oscar; y Lupita González, bicampeona mundial de marcha en China, nos inspire a pensar en cosas chingonas, nos inspire a mantener el espíritu solidario y enardecido que se desbordó en las calles para rescatar a los caídos en la devastación del 19 de septiembre. México, que no se te olvide, no somos el resultado del 1º de julio,
somos el corazón de un México unido que cuando quiere, puede; que cuando quiere, trasciende. Honremos al pueblo que realmente somos, al que se levanta temprano y viaja en sus entrañas cada mañana; a quien con tesón concluye carreras; a quien con compromiso abre negocios y también puertas. Vayamos y enfrentemos paradojas; vayamos a la batalla contra la violencia; vayamos a la batalla contra el abuso y la impunidad; a la batalla contra la desigualdad; basta de comprar la basura de los pronósticos desalentadores basados en minorías, somos mayoría, somos más los que de verdad queremos trabajar. Construyamos ciudadanía, trabajemos en colectivo, honremos lo que somos: un pueblo que se levanta en la victoria de su gloria, somos más que un 1º de julio; somos más que un día, somos tiempo sin medida; somos nuestra música, nuestras tradiciones, nuestros bailes; somos gastronomía, arte, vida, paisajes; somos desiertos y también mares; somos cultura, somos color, somos “tricolor”; somos el silencio de nuestros muertos y la estridente voz de un himno, este himno: ¡Mexicanos al grito de guerra! Seamos unidad y ejemplo global, somos más que un día de elecciones; somos un país de lecciones, imaginémonos cosas chingonas señoras y señores.
COMUNICACIÓN POLÍTICA
Los buenos equipos acaban por ser grandes equipos cuando sus integrantes confían los unos en los otros, lo suficiente para renunciar al “yo” por el “nosotros”
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espués del sexenio de Luis Echeverría, el PRI continuó en el poder. José López Portillo, fue el único candidato a la presidencia en 1976 y obtuvo el 91.90% de los votos. Con él, se daría paso a uno de los crecimientos y declives económicos más importantes en el país.
*Rodrígo R. Díaz Martínez es estudiante de Derecho en la Universidad La Salle y actualmente se desempeña como asistente de Dirección de la Revista Signum, C,P & C. @Rodr_DM
José Guillermo Abel López Portillo y Pacheco nació el 16 de junio de 1920, estudió Derecho en la Universidad Autónoma de México, universidad en la que más adelante se recibiría como doctor en la materia. Ya como abogado, López Portillo ingresó a las filas del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en 1959. Su carrera política dentro de ese partido lo llevó a tener cargos como el de secretario de Hacienda de 1973 a 1975, y su gran amistad con el presidente Luis Echeverría, le abriría las puertas para ocupar la presidencia de la República de 1976 a 1982. Era conocido que el presidente en turno elegía como su sucesor usualmente al secretario de Gobernación; sin embargo, Echeverría rompió la tradición designando a López Portillo, precisamente por su amistad con él, dejando a un lado al entonces secretario de Gobernación, Mario Moya Palencia. López Portillo llegó a las elecciones federales sin contrincante, ya que ningún partido presentó candidato, y ganó las elecciones limpiamente, aunque el abstencionismo fue alto. Inició su gobierno el 1º de diciembre de 1976, en
medio de una crisis social que había propiciado el gobierno anterior, por lo que una de sus tareas primordiales debía enfocarse a remediar los males de sus antecesores y crear una política incluyente y pacífica, sin recurrir a la represión por medio del uso de la fuerza pública. A pesar de la economía proteccionista del gobierno anterior, López Portillo anunció que crearía alianzas con el sector privado para que este invirtiera en el país, a través de la “Alianza por la Producción”, misma que el presidente consideraba la solución a los problemas socioeconómicos del país. Por otro lado, en 1977 se dio una Reforma Política a la Constitución junto con una
nueva ley titulada: “Ley Federal de Organizaciones Políticas y Procesos Electorales”, que entre sus propósitos tenía los siguientes: Institucionalizar las demandas de apertura de la disidencia, impidiendo que ésta tomara el camino de la subversión como había sucedido en el sexenio anterior y otorgar a las instituciones públicas una mayor representatividad política y social que permitiera incluir a las minorías ideológicas. 1
gran número de barriles al día, gracias a que se habían descubierto yacimientos petrolíferos en la zona de Campeche en el Golfo de México. A pesar de que México tuvo una buena economía de 1978 a 1981 por el petróleo, en ese último año empezó a disminuir el precio de venta, que era de 38 dólares, para quedar en 34.
La “Ley Federal de Organizaciones Políticas y Procesos Electorales” se dividía en cinco títulos, estos eran: a) Partidos y organizaciones políticas, b) Nueva conformación de la Cámara de Diputados, c) Autoridad electoral, d) Régimen de nulidades, recursos y sanciones y, e) Coaliciones y frentes.
El gobierno mexicano empezó a definir estrategias para revertir dicho decrecimiento, ya que del petróleo dependía casi en su totalidad la economía, así que al precio del barril se le aumentaron 2 dólares, pero la medida no dio buen resultado, dejando al país muy mal parado económicamente; lo que seguía era aplicar nuevas políticas para reactivar la economía nacional.
López Portillo apostó por la economía basada en el petróleo, vender este para obtener cantidades enormes de dinero y solventar así, en parte, la economía del país. De hecho, se llegó a producir una gran cantidad para enviar un
A pesar de poner en práctica un “Plan de Desarrollo Nacional Industrial”, la inflación aumentó en un 26% y el déficit en cuenta corriente había incrementado considerablemente, declarándose fallido dicho plan.
En 1980 se llevó a cabo una Reforma Fiscal, misma que contenía la implementación de un nuevo impuesto, este era el Impuesto al Valor Agregado (IVA), mismo que debía ser absorbido por los consumidores, añadiéndole el 10% a los productos, sustituyendo el entonces Impuesto sobre Ingresos Mercantiles que era del 4%; esta medida fue totalmente repudiada por la gente, pues debía solventar el error del gobierno en cuanto a la economía, pero este se justificó diciendo que se generaría mayor ingreso a la economía nacional y por tanto la inflación disminuiría. Para finales del sexenio, la dependencia económica del petróleo provocó el declive antes mencionado, y la medida del incremento al barril no dejó buenos resultados, lo que llevó a la economía en picada; esto provocó la devaluación del peso, y propició que las personas cambiaran sus pesos a dólares y abrieran cuentas en Estados Unidos, ya que el futuro del país era más incierto que en ocasiones anteriores.
El presidente culpó de la crisis a factores externos y a la gente que sacó su dinero del país. Las medidas desesperadas fueron la nacionalización de la banca y el control de cambio monetario. López Portillo terminó su mandato el 30 de noviembre de 1982, en medio de una crisis aún más agravada que la del sexenio anterior, con una banca nacionalizada y una economía totalmente fallida. Su gobierno también se caracterizó por el nepotismo, ya que varios integrantes de su familia ocupaban puestos públicos, así como amigos suyos, el caso más conocido fue el de Arturo Durazo Moreno, jefe de la policía, con una gran fortuna acumulada. José López Portillo falleció el 17 de febrero de 2004.
REFERENCIAS 1. Delgado, G. (2008). Historia de México. Legado histórico y pasado reciente. México: Pearson. 2. Imágenes usadas solo con fines ilustrativos.
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