Sombras y Paradojas El dibujo de Jorge Martins Sombras e Paradoxos O desenho de Jorge Martins Shadows and Paradoxes The Drawings of Jorge Martins
fundação carmona e costa
junta de extremadura
Conselho de Administração Maria da Graça Carmona e Costa (Presidente) Álvaro Carmona e Costa Portela José Amaro Martins Carmona e Costa António Francisco da Costa Gomes Dias Coelho
Presidente de la Junta de Extremadura Guillermo Fernández Vara
Assistente para a programação cultural Pedro Valdez Cardoso
Consejera de Cultura e Igualdad Leire Iglesias Santiago Secretaria General de Cultura Miriam García Cabezas Director General de Bibliotecas, Museos y Patrimonio Cultural Francisco Pérez-Urban
museo extremeño e iberoamericano de arte contemporáneo Director Antonio Franco Domínguez Técnicos de Arte / Conservadores José Ángel Torres Salguero Catalina Pulido Corrales Rocío Nicolás Blanco Francisco Tomás Cerezo Vacas Departamento Didáctico Teresa León González Administración Rosa Regalado González Ángeles Barrientos Tejada Mª Paz García Buzo Centro de Documentación y Biblioteca M.ª Victoria Gaviro Jiménez Encarnación Pérez Rojas
Este libro fue producido con motivo de la exposición «Sombras y Paradojas», de Jorge Martins, con el comisariado de Óscar Alonso Molina, que se realizó en el MEIAC, Badajoz, en octubre y noviembre de 2018, con el apoyo de la Fundação Carmona e Costa Este livro foi produzido por ocasião da exposição «Sombras y Paradojas», de Jorge Martins, com curadoria de Óscar Alonso Molina, realizada no MEIAC, Badajoz, em Outubro e Novembro de 2018, com o apoio da Fundação Carmona e Costa This book was produced on the occasion of “Sombras y Paradojas”, an exhibition by Jorge Martins, curated by Óscar Alonso Molina, held at MEIAC, Badajoz, in October/November 2018, with the support of the Fundação Carmona e Costa
Sombras y Paradojas El dibujo de Jorge Martins ediciรณn y textos
ร scar Alonso Molina
D O C U M E N TA
© MEIAC – Museo Extremeño e Iberoamericano de Arte Contemporáneo calle Virgen de Guadalupe 7, Badajoz, España © Sistema Solar (Documenta) Rua Passos Manuel 67 B, 1150-258 Lisboa, Portugal imágenes y textos (aforismos) © Jorge Martins textos © Óscar Alonso Molina ISBN: 978-989-8902-24-5 fotografía José Manuel Costa Alves António Jorge Silva traducciones José Gabriel Flores depósito legal 445957/18 impresión Gráfica Maiadouro SA Rua Padre Luís Campos 686, 4470-324 Maia, Portugal
[presentación], Antonio Franco, Óscar Alonso Molina Jorge Martins y la poética del dibujo, Óscar Alonso Molina
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O B R A S | P L AT E S
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Índice de imágenes | Índice de imagens | Image Index Jorge Martins: biobibliografía | biobibliografia | biobibliography
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[apresentação], Antonio Franco, Óscar Alonso Molina Jorge Martins e a poética do desenho, Óscar Alonso Molina
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[presentation], Antonio Franco, Óscar Alonso Molina Jorge Martins and the poetics of drawing, Óscar Alonso Molina
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[presentación]
Sombras y Paradojas. El dibujo de Jorge Martins, supone la primera exposición individual de envergadura que en nuestro país se dedica a uno de los nombres referenciales de la plástica portuguesa del último siglo. A sus setenta y ocho años, y en plena actividad creadora, Jorge Martins (Lisboa, 1940), ha llegado a convertirse en un referente dentro del rico panorama creativo actual del país vecino, tanto por la firmeza e independencia de su compromiso estético —en buena medida ajeno del vaivén de las modas internacionales que década a década van dictando el devenir colectivo de la creación—, como por la singular posición que Martins ocupa en el mapa generacional. De hecho, la atención que su trabajo suscita entre los jóvenes artistas en los últimos años es un importante aspecto a tener en cuanta llegado el momento de valorar la pertinencia de un trabajo como el suyo, donde una impecable formalización se combina con la búsqueda continua de nuevos procesos y soluciones a la hora de plantear las imágenes plásticas. Sin duda, a esta vigencia del trabajo y al prestigio del artista mucho ha contribuido la infatigable investigación de Martins en torno al dibujo desde sus primeras exposiciones, hace ahora exactamente sesenta años; de hecho, será con sus dibujos con los que llegará, ya a finales de la década de los setenta, al Centro Georges Pompidou de París, donde se le dedicó una individual. El dibujo, disciplina antaño «secundaria», incluso subsidiaria, vive en el presente un momento feliz, de renovado interés tanto en los aspectos conceptuales que implica como en los procesuales y formales, y en la figura de Martins encuentra un nombre ineludible a la hora de recapitular sobre sus logros y límites históricos durante la segunda mitad 9
del siglo XX, pero también en cuanto a la línea de horizonte que la rodea en nuestro presente estético. Nuestra exposición se concentra exactamente en esta parte de su abundante producción, el dibujo, en la cual el artista tanto se destaca. Dibujos de gran formato y una versatilidad asombrosa, donde la abundancia de registros es la nota predominante: desde la geometría al gesto expresivo; desde el orden matemático al enunciado verbal en forma de escritura, palabra, letras o anotaciones; desde la silueta a la mancha; desde la figura al monocromo… Martins no se limita a una fórmula susceptible de multiplicarse hasta el infinito por medio de variantes y, frente a lo que suele ser habitual en creadores de su edad, donde el territorio ya conquistado se explota hasta el agotamiento, nuestro protagonista evita en todo momento la repetición de un repertorio reconocible de gestos, marcas, fórmulas o iconografía ya establecidas por él mismo con anterioridad y puestas bajo el imperio de la firma. Para la muestra del MEIAC nos hemos decantado por una amplia selección de obras de todas las fechas productivas del artista. Desde el principio hemos evitado la idea de retrospectiva (queremos mostrar con nuestra exposición el fenomenal momento que vive la obra del artista en el presente, con un estudio abierto y activo del que están saliendo hoy algunos de sus mejores trabajos), esquivando consecuentemente el carácter de museo-mausoleo derivado de este tipo de revisiones. Por ello también rechazamos la organización cronológica de lo expuesto, o todo lo que conduzca a crear la impresión de un falso desarrollo lineal en la larga trayectoria de Martins, donde logros pretéritos parecieran conducir de manera secuencial y un tanto inevitable a otros derivados, causales, que los engloben. Esto no suele ser así casi nunca, y desde luego en el caso que os ocupa supondría una tergiversación. Nuestro criterio de selección, y tanto el plan expositivo como el orden interno de la publicación que el lector tiene entre las manos, por el contrario, subrayan cómo las preocupaciones del artista son continuamente renovadas a lo largo de los años, de las décadas, de toda su trayectoria, creciendo de manera espiral, digamos, 10
antes que orden sucesivo. Por ello hemos organizado el recorrido en núcleos temáticos donde la obra actual lanza miradas oblicuas en todas las direcciones —el pasado incluido—, para hilvanar secuencias no previsibles, y destacar reflejos e iluminaciones transversales en el tiempo. Por lo demás, se trata de dibujos inéditos en muchos casos, algunos de los cuales se ultimaban en el momento de cerrar la selección, que muestran la asombrosa versatilidad de su sintaxis, la singularidad, riqueza y el refinamiento de sus procesos formativos, y el variado conjunto de intereses icónicos con que se maneja. Nuestra exposición propone unos novedosos ejes de lectura sobre la obra de Martins, que completan y actualizan la abundante fortuna crítica recibida por el artista a lo largo de su carrera. Así, analizaremos el dibujo como sismógrafo de los estados anímicos, del pulso «vital» y emocional del artista, para comprobar cómo se combina en buena parte de estas obras con un rigor analítico y una capacidad para la organización de los elementos que componen la imagen en el plano de representación muy notables. A este equilibrio entre los momentos «calientes» y los «fríos» dedicará nuestra exposición un apartado. De igual modo, los aspectos performáticos derivados de la ejecución de unas obras en los grandes tamaños habituales del artista, quien para llevar a cabo sus dibujos con frecuencia ha de emplear como el danzarín todo el cuerpo, tendrán su espacio propio en el recorrido. La relación del soporte con los propios materiales de dibujo, por un lado, pero por otro con la escala humana son factores decisivos en la ejecución física de las piezas. Así, el dominio del pulso y el manejo de los ejes muñeca-codo-hombro-cadera aparecen a veces relacionados con aspectos de la gestualidad corporal, del desplazamiento del cuerpo (en su totalidad o sólo de algunas de sus partes) sobre la superficie del papel, como si de una danza o una acción se tratara, hasta conseguir el ritmo lineal buscado. Otra de las secciones de la muestra se dedicará a poner de relieve los límites disciplinares del dibujo en relación con la pintura, la narrativa, la arquitectura, la escenografía y/o sus campos expandidos en la actualidad. En este sentido, cabe destacar las 11
relaciones que una parte de este dibujo ha establecido con otros momentos decisivos del arte durante la modernidad tardía, como los Supports-Surfacces franceses; más atrás, también con aspectos concretos de la Abstracción Postpictórica, la Field Colour Painting, e incluso con los grandes logros del expresionismo abstracto, pero subvirtiendo en todos los casos muchas de las premisas canónicas de sus respectivas poéticas y «traduciéndolas» a los códigos gráficos dibujísticos. En esta juguetona, paradójica y casi perversa relectura de la tradición canónica tardomoderna se retrata otra asombrosa capacidad más de Jorge Martins que nuestra exposición quiere destacar. Finalmente, la capacidad del dibujo de Jorge Martins para traducir lo intangible —que no inmaterial—, como la luz, el tiempo, el lenguaje o el espacio, ocupará un último apartado en nuestro análisis. Al respecto, nuestra intención es subrayar como una de las más notables características en la obra de Martins, su asombrosa capacidad para poner en escena, dentro de los límites de la hoja de papel, dimensiones simbólicas, espirituales y metafísicas prácticamente inmanejables fuera del plano de la imagen. El título de la muestra, sugerido por el propio artista, Sombras y paradojas, apunta hacia esta dimensión un tanto insondable del arte desde su estadio nuclear: el dibujo. Series y secciones, pues, que se cruzan y se prestan a examinarse de forma abierta, no lineal, tanto cronológica como temáticamente. Y a este propósito la singular arquitectura del MEIAC, con sus recorridos circulares y sus salas curvas, desembocando suavemente y sin transiciones marcadas unas en otras, resultará el cómplice ideal de una lectura que propone, insistimos, poner de relieve la actualidad y el vigor del trabajo de este artista portugués que, quizá en el mejor y más influyente momento de su dilatada carrera, por fin llega a nuestro país. Al respecto de esta labor de promoción, no quisiéramos cerrar estas líneas sin recordar la generosa disposición al proyecto y la completa confianza que depositó en nosotros la Sra. Maria da Graça Dias Coelho Carmona e Costa, así como de la Fundação Carmona e Costa que preside. Y por supuesto, señalar el fino trabajo de Manuel Rosa en el diseño y cuidado de la edición de este 12
libro, llevados a cabo con sensibilidad de artista. Todos, junto con el propio Jorge Martins, hemos formado un equipo de trabajo del que guardaremos un entraĂąable recuerdo.
Antonio Franco Director del MEIAC
Ă“scar Alonso Molina Comisario
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Jorge Martins y la poética del dibujo Óscar Alonso Molina
Dibujo como sismógrafo · Mano distraída o mano atenta · Lo frío y lo caliente, la geometría y el gesto · Espacio ficcional frente al plano de la representación · Tradiciones de la modernidad tardía · Figuras y lugares o la más pura de las abstracciones · Dibujo performativo · Narrativa · Lo intangible, que no inmaterial
Históricamente al dibujo se le ha asociado la capacidad de decir lo más íntimo, lo profundo de la psicología del artista. Su auténtica «mano» se revelaba ahí, decían, de la manera más clara y sin distorsiones en cuanto que el dibujo expresa con la mayor inmediatez las imágenes mentales internas que el creador saca de sí, expulsa al mundo, da a luz por medio de formas plásticas concretas, susceptibles ya a partir de ese momento de ser vistas (por él mismo, en primer lugar), comentadas, compartidas, analizadas y puestas en duda. Poner en duda quiere decir aquí no sólo recelar de su pertinencia, sino también discutidas (en el sentido de lidiadas, batalladas) en su naturaleza tal y como llegaron a ser en su estado originario. El dibujo bajo esta perspectiva se entendería pues como el embrión a partir del cual el cuerpo definitivo alcanzará sus formas, dimensiones y alcance últimos. El camino de las artes hermanas —la pintura, la escultura, etcétera—, será por lo tanto el de la refutación y el retoque, la aproximación consecutiva por fases o etapas, capas y desbastes hacia la perfección que, el dibujo, por su parte, deberá supuestamente conseguir según la teoría clásica casi alla prima, desde el instante de su aparición. 15
Los dibujos de Jorge Martins son clásicos precisamente, y sobre todo, por esto mismo: porque detienen su imagen perfecta y lograda, su imagen última, a la primera. No requieren ni admiten complementos, y las transformaciones o variantes que puedan afectarlos llegarán en otro dibujo posterior, pero no en ese mismo papel. De creer todavía hoy en la vieja teoría, todo lo que podríamos saber de Martins como artista completo lo podríamos deducir de la limpieza, economía sintética, enorme variedad, paradójicas, sutileza y sofisticación que caracterizan su dibujo. La tesis del dibujo como núcleo nos dejaría entonces a las puertas de un universo por venir pero que desde allí se encauza. Sería como una teleología que conduce lo que ya está presente ante nuestros ojos hacia un enunciado digamos más completo y también más cerrado que concluiría en «la firma». Por eso, supongo, los dibujos apenas fueron firmaron en la antigüedad. Más bien se asignaban, sobre todo retrospectivamente, pero sólo hasta un momento concreto de la modernidad en que empezaron a ser considerados en sí mismos obras definitivas y finales, algo que anunciando el porvenir se paraba allí en seco, dejándonos ante la belleza de una profecía. Esa misma modernidad que, por cierto, inventaría un dibujo nuevo, irreflexivo, tirando de las visiones interiores del Víctor Hugo dibujante (donde el desenlace lo producen un borrón de tinta o una gota causales, las materias y los materiales expre16
sándose de manera libre), o de las formas de las nubes, pobladas de seres fantásticos; incluso de los dibujos que le sugerían a Leonardo las manchas de una pared estampada con una esponja húmeda. Dibujo al borde de la visión o del arrebato. Dibujo como escritura automática; balbucir de lo que todavía no es lenguaje, y donde la formalización está esperando la puntuación, el fraseo… Dibujo del duérmela. Dibujo convulso y loco. Taquigrafía. Tics. Dibujo eminentemente moderno, insistimos. Frente a tantos modelos, ¿cabría entender el dibujo de Martins al cabo como sismógrafo de cierto estilo? ¿Incluso el estilo mismo? A ello parecería indicar el hecho de que sus motivos iconográficos, tanto como el repertorio gráfico, se desarrolle siguiendo una espiral creciente, inclusiva, antes que la típica secuencia lineal, a lo largo de su ya muy dilatada trayectoria. Y lo confirma el hecho de que, aunque los motivos y los registros en que estos se dan a conocer se repitan tarde o temprano —en ocasiones con décadas de intervalo—, haciéndolo además mediante un número de combinaciones tan vasto que en términos prácticos nos hablan de una continua variedad, de una investigación incesante. Martins es en esencia un dibujante, y en el dibujo tenemos todo lo que le define. Es más, negando la idea clásica del dibujo como disciplina subsidiaria de sus hermanas mayores, ni la pintura ni la escultura de Martins culminan nada que su capacidad gráfica no hubiera abocetado con anterioridad; más bien, por el contrario, plantean aspectos 17
y problemas que sus dibujos abordarán de manera más ambiciosa tarde o temprano. El dibujo parecería tener una doble genealogía: la mano distraída y la mano atenta. El garabato que recorre la superficie del papel sin intención figurativa u organizativa alguna; que se expande o arrebulla en espirales, golpes con la punta del stilus, arañazos, tachones; el cardiograma de lo absurdo y del sinsentido, pero del que se terminará sospechando al menos cierta voluntad de ocupar las superficies al recorrerlas en todas las direcciones de manera rápida o lenta, en zigzag o a saltos, patinando o tropezando, todo vale. La propia textura del papel se pone al servicio de esta línea de actuación, ofreciendo al conjunto su grano y la trama, para que el lápiz conté, el carboncillo, la barra de sanguina o la tiza se tumben y arrastren. Es el reino del difumino, o en su caso del trapo que barre la superficie envolviéndolo todo en una atmósfera de baja definición. La mano atenta, por su parte, pautaría esos ritmos veloces y un tanto alocados, agrupándolos, organizándolos de alguna manera. La línea parte en dos el infinito del papel vacío, construyendo con su misma aparición un arriba frente a un abajo, un norte al que dirigir el punto de fuga de la mirada en lo que ahora es una ventana abierta al vacío que hay detrás del plano de representación. Basta el fogonazo de un rayo negro en forma de línea y, de golpe, el continuum indiscriminado del universo se pliega, se parte, se ilumina. Un punto, una simple raya sobre un fondo blanco implica ya el contraste suficiente como para que 18
toda metáfora empiece su curso. Asistimos al reino de la estética. Martins no abusa de la geometría, pero no la niega tampoco. La suya es dúctil y suave en sus contornos por lo general, nada sistemática ni rigurosa: geometría de la intuición, de la mano alzada y del redondeo. En sus dibujos el orden y el caos se combinan de manera soberbia por medio del hacer «a mano», sin excesos técnicos. Es capaz de trazar una retícula impenetrable con lo que parecen algodones, nubes, soplos de vapor, ceniza al viento… Y de la misma manera, le he visto conseguir que el negro absoluto de un papel prácticamente teñido en su totalidad sea un espacio habitable, susceptible de recorrerse con total confianza a pesar de la oscuridad: ¡consiguiendo que veamos allí dentro con los ojos cerrados! Maravilla. Martins quemando el papel con apenas un poco de presión de su dedo sobre algo de reseco grafito en polvo; o aguando una plana con tinta hasta conseguir que, en el estricto blanco y negro resultante, afloren los colores: hay tintas en el fondo rojizas, azuladas, grises, verdosas, que sólo en este nivel de dilución muestran su genética… Martins curvando el espacio, agujereando el plano en blanco, haciéndolo volatilizarse delante de nuestras narices, o llevándoselo tan lejos que nos parece imposible tocarlo aunque nuestros dedos se apoyen en el cristal que lo protege… ¿Qué más pruebas querríamos de su magisterio en la técnica que, precisamente, estas «sombras» y «paradojas» propuestas por él mismo como título para nuestra exposición? Mano atenta o distraída, decíamos… Pero será el pulso lo que equilibre ambas genealogías. Barthes por su parte hablaba de un doble ori19
gen para la pintura: el de la cocina y el de la escritura: la mano que amasa, unta, bate y la que socava, araña o estría. Quitémosle el aspecto de capa, intrínseca a la primera, sustituyámosle por el barrido de la tinta china o el sfumato del carbón, y tendremos la versatilidad de Martins para que lo que en principio son las naturales limitaciones naturales del medio gráfico se transformen en una variedad de registros asombrosa y que le ha ocupado sin aburrirse, sin aburrirnos, toda una vida. Martins revive las tensiones que enfrentaron ya en el siglo XVI a la tradición florentina y la veneciana del dibujo, basadas respectivamente en el contorno, la línea de sombra (que como un estilete separa unos cuerpos de otros, y a todos ellos del fondo), para los primeros, mientras que para los segundos se sostenía en el arabesco, el revolver de líneas siguiendo caminos diversos, que terminan configurando un cuerpo por aproximaciones sucesivas tanto de su silueta como de sus volúmenes. Vaivén entre lo pulsional y lo analítico que recorre todo su dibujo: donde la sintáctica de la mancha, el goteo, el borrón o el garabato es predominante, entonces la forma general se inscribe en una geometría blanda, algodonosa, digamos, o el ritmo termina por aparecer a partir de la repetición casi —aquí el «casi» nos proporciona la clave— sistemática; por el contrario, donde la imagen lo es de una proporción que parte en dos, tres, cuatro, etcétera el plano, o un módulo que se repite, o 20
una figura calculada en base al número, será lo inconcreto o azaroso el camino para llevarlas a cabo, animando visualmente el conjunto. Martins abunda en este tipo de ligeras paradojas mezclando los procesos «en frío» y «en caliente»: lo que parece automático, gestual, improvisado o accidental, se amalgama con modelos regidos por el orden y la aritmética —en última instancia por la matemática y el número—, o por su desenvolvimiento temporal en los ritmos y las secuencias. Fundir de oscuro gris azulado la mitad exacta de una plana de papel de más de metro y medio cuadrado, dividida en dos por su eje axial, de tal manera que al estar tumbada la línea de contacto entre la mancha y el fondo virgen forme una línea de horizonte. En apariencia no podría haber otro ejercicio más sencillo… Pero el trasiego del papel en el taller del artista, un atanor denso, intensamente vivido y utilizado, vela ligeramente el soporte, sobre todo en los bordes por donde es cogido para su manipulación. El «fondo» parduzco tampoco es una simple mancha de grafito extendida sobre el papel de manera uniformemente mecánica, sino una nube penetrable y por ello más profunda que el negro blindado, que el papel convertido en una plancha de plomo, en un muro alicatado, sellado. A partir de ahí puede ocurrir cualquier cosa. Insisto: es sólo un papel partido en dos por una mitad negra dibujada y por otra blanca —crema— sin tratar: en principio el más conven21
cional de los enunciados minimalistas. Pero precisamente en su extremada sencillez es donde cobra todo su sentido la manera que ha tenido Martins de cubrir con una capa de polvo de grafito la parte superior (la noche oscura), y su receptividad para que el sutil sobe del papel en la mitad inferior (el terreno, la tierra que se extiende desde nuestros pies hasta la línea del horizonte), con su blanco maculado, con ese mínimo desgaste que supone negar la pulcritud de lo perfecto y puro. El plano sobre el que se apoya la mano del dibujante es susceptible de limitarse al del papel, pero al mismo tiempo también de abrirse a un espacio simulado que se abre tras él, como si de una ventana o un espejo se tratara. En este punto encontramos otra de las características del dibujo de Jorge Martins: la identificación del plano de representación con la literalidad del espacio ficcional, con la realidad virtual que el dibujo crea ante nuestros ojos «allí detrás». Los efectos de transparencia y superposición son habituales: las formas brumosas, las lineales, los objetos macizos, las sombras arrojadas, los diagramas y los signos se colocan en planos sucesivos —y en posición flotante generalmente— de dudosa contigüidad: qué se sitúa delante y qué detrás resulta al cabo difícil de discernir por completo para quien mira, pues los límites del papel estratégicamente no suelen aportar datos definitivos para la ubicación ni para las coordenadas espaciales del conjunto. Más allá de su voluntaria ambigüedad, la indiferencia con que una silueta humana, 22
o un detalle figurativo, se mezclan con cuadrados, rectángulos o con retículas y arabescos —en algunas obras de manera endiabladamente confusa y abigarrada, además-, aumenta la indefinición organizar cualquier parámetro de lectura espaciotemporal-narrativa en buena parte de las imágenes de Martins. Es todo un logro, no un descontrol. Por lo demás, abundan los efectos de bajorrelieve en los detalles (como si las líneas se separaran del papel, o algunos elementos tridimensionales estuvieran apoyados en él), mientras que en plan general de la obra lo más habitual es la organización como de capas paralelas intercaladas, donde cada una de ellas contuviera un tipo de registro concreto ligeramente contradictorio con las colindantes. El aspecto brumoso, esfumado y vaporoso de muchas de sus manchas (donde el contorno neto ha desaparecido a la manera de los dibujos de Seurat, pero no por ello la solidez de los volúmenes se diluye por completo), nos proporciona algunos de los dibujos más misteriosos a la vez que bellos salidos de su mano. Con esta figura retórica, donde lo opaco se vuelve traslúcido, y los efectos de volumetría persisten a pesar de la pérdida de corporalidad, peso y solidez de los cuerpos simulados, Martins alcanza algunos de sus momentos de mayor e inaprensible belleza a partir de la complejidad perceptiva asociada. La tardomodernidad nos ofreció desde las décadas centrales del siglo pasado una serie de poéticas cuya preocupación por la naturaleza disciplinar desembocaría en auténticas paráfrasis sobre las condiciones de aparecer de la imagen. La obra de Martins se instala en las fisuras y contradicciones que es23
tas tradiciones dejaron planteadas y no pudieron resolver por completo. Desde las tesis del formalismo greenbergiano o el núcleo de intereses del Expresionismo Abstracto norteamericano, a los Supports-Surfaces franceses, pasando por los planteamientos de la Field Colour Painting o de la Abstracción Postpictórica, por citar sólo los núcleos más densos tanto en lo conceptual como en lo plástico, y más atendidos por la historiografía, quedan planteadas muchas de las cuestiones que preocupan a Martins en torno a la naturaleza de las imágenes. Con ellos recoge la obsesiva preocupación tardomoderna por evidenciar el plano de representación, la literalidad del medio gráfico, y resaltar lo específico de su particular dicción. En este sentido, el dibujo y la pintura, así como el dibujo y la escultura de nuestro protagonista están netamente separados entre ellos dentro de su producción, su catalogación y, lo que es más importante, su propio imaginario; así por ejemplo nadie puede dudar ni por un segundo frente a una de las piezas que se recogen en este libro que sean otra cosa que dibujos, fenomenales dibujos. No obstante, frente a la especificidad del medio, así como frente a las ideas de integridad, unidad y finish propugnadas por sus antecesores, Martins se inscribe ya en el cambio de paradigma posmoderno, escéptico ante la ortodoxia teórica y el dogma que aspiraba a una obra de arte «pura», es decir, aquella que en principio debería eludir toda comunicación con cualquier otro tipo de experiencia que no sea inherente a la más literal y esencial naturaleza de su propia condición material. Greenberg (quien a su vez parte directamente de Roger Fry), a la cabeza de esta 24
genealogía señalada, organizará una larga estela de algo así como un clasicismo moderno que él entendía como el resultado de un proceso histórico determinista que culminaría en ese arte de superficies, por completo abstracto y que parece enunciarse sólo a sí mismo. Pero frente a esta herencia preceptiva, la mutación, la adaptación al medio y la hibridación operada por la heterodoxia de Martins nos proporcionan un dibujo «evolucionado» en un sentido inesperado. Así, su dibujo está salpicado de figuras y lugares; de escenas y relato; de arquitectónica y e incluso, en ocasiones, escenografía. Las más puras abstracciones de repente ven asomarse entre sus manchas y tersos planos de gris inesperadas siluetas, caras, seres y enseres que desconciertan al ojo obligándole a replantearse el escenario vacío donde creía aposentarse. De este modo, lo que en algún momento parece una composición abstracta geométrica, de súbito se nos revela como el escenario vacío de un Vermeer, o el campo de actuación de no se sabe bien qué personajes que están allí disimulados o a punto de saltar al plano del cuadro… El mismo ejemplo que citábamos arriba vuelve a servirnos aquí: un simple rectángulo partido en dos mitades, una blanca y otra negra, deviene paisaje. En otra ocasión serán las formas redondeadas las que se revelen como glúteos, cinturas, senos. Esgrafiados en piedra de ascendiente prehistórico; cuerpos atados; el vilano de los chopos está en esas motas apenas manchadas, ¡sí! Frente al remolino de un garabato hay un rectángulo: he aquí una corriente de aire doblando cualquier esquina, una nube de polvo en una alcoba… Alusiones a lo que está más allá del propio dibujo: a un mundo referencial cuya cara visible se apoya de vez en cuando en estas obras. La ventana albertiana se abre y a través de ella nos colamos —se cuela en el papel— una 25
realidad ficcional. La indiferencia en el tratamiento de esos dos mundos que para sus mayores permanecieron por regla general completamente separados, excluyéndose, es un signo claro de la actualidad del dibujo de Martins. Entre el caos abstracto de líneas es posible ver cuerpos, y en cuanto se repara en ellos, verlos además con claridad, sin poderlos obviar. Están ahí no como una proyección imaginativa de quien mira, sino como una malicia del artista que los ha emboscado, disimulado, escondido casi para que tarde o temprano sean descubiertos por un ojo que, bien lo sabemos ya, está programado para reconocer, para extraer del mar de información no configurada algún tipo de elemento semántico, reconocible, estable, tranquilizador. Desde la simple pareidolia (detectar patrones organizados semánticamente) ante estímulos ambiguos y aleatorios, hasta la necesidad final de sobreponernos a la suspensión del sentido, urdiendo un significado completo y complejo de las tramas argumentales. Martins aquí, pues, también como un maestro del relato balbuciente, entrecortado; de la enunciación interrumpida que a menudo por eso resulta más pregnante: cuando amagar con pronunciar la palabra, aludir a lo que opera antes de hacerlo explícito, o insinuar, es lo verdaderamente sobrecogedor. El trasfondo performativo de no pocos de sus dibujos nos empuja a interpretarlos en esta dirección: como el registro plástico, el rastro que ha 26
dejado el cuerpo del dibujante en su ejecución, la huella de lo que ya no está presente. Hic fuit («yo estuve aquí»), parecen decirnos… En los mayores formatos es donde el alcance del reto se presenta con todo su potencial: en esos papeles de más de metro y medio, frente a cuya presencia proyectamos imaginariamente el tamaño del artista al realizarlos, reconocemos la gama de movimientos que arrancan del eje muñeca-codo-hombro, y nos llevan hasta la cadera, donde, para la ejecución de determinadas líneas, en ocasiones repetidas sistemáticamente un número asombroso de veces, el dibujante se ha convertido en atleta, repitiendo series casi idénticas, refinando una figura corporal concreta, superando su marca… La narrativa que observábamos en este tipo de digamos dibujo-performance, una plasmación de kinesia coreológica, una suerte de sistema notacional del cuerpo en acción plástica, fluida. Desde la estética nos abordan rápidamente los referentes de Eadweard Muybridge, Ettiene-Jules Marey o Harold Edgerton, entre otros muchos que despiezaron la fluidez de las cadencias corporales en el juego y el deporte (la carrera, la caída, el salto, la locomoción, etcétera), en secuencias atomizadas, lista para su análisis, siguiendo los ejemplos de las fotografías de larga exposición practicados en el arranque del siglo XX por Frank and Lilian Gilbreth, cuyo estudio de las conductas corporales y la sistematización de los movimientos operati27
vos de los trabajadores en las cadenas de montaje preveían la rentabilización capitalista de cada gesto o tic. Pero en Martins, obviamente, la idea de eficacia o del incremento del valor tiene mucho que ver con la pérdida, el despilfarro (de lo inútil, especialmente), con el resto, con las sobras… De hecho, tiene un dibujo que ya ha llamado con anterioridad la atención de la crítica, cuyo título especifica el tiempo exacto que el artista ha tardado en realizarlo: cinco minutos y treinta segundos «de línea»; es decir: ése del nombre fue el intervalo durante el cual el lápiz se movió incesantemente sobre la superficie de la tela hasta concluirla. ¡Qué ironía!, con los antecedentes citados en el análisis lineal de las secuencias productivas, más de uno entenderá que frente a este breve tiempo invertido el precio de la obra será siempre excesivo… ¿Es que podría Martins haberlo hecho aún más rápido, pues? Pero, lector, por favor, no se trata de ganancias (de tiempo, de inversión y rentabilidad, de capital empleado en la operación, o de infraestructuras) en la economía del gesto: se trata de narrativa; y el tiempo, en este plano simbólico del arte, es oro. Las frases que a modo de citas o de subtítulación/traducción aparecen al pie de algunos de sus dibujos; las retículas que como alfabetos primitivos o Piedras de Rosetta diríase nos ofrecen equivalencias entre signos y significados; es más: los propios títulos (siempre un desafío para la interpretación) que están y no están en la imagen… Todo esto nos estimula a organizar algún tipo de narrativa al sumergirnos en una obra que, por lo demás, y con no poca frecuencia, nos niega la mirada con el hermetismo de su pulcritud y perfecta belleza abstracta. Pero, ¿la narración de qué, más allá del propio dibujo? ¿Qué relato organizaría el inmenso corpus de dibujo que Jorge 28
Martins ha desarrollado, ha acumulado a lo largo de sus más de sesenta años de trayectoria, que aquí revisamos? ¿De qué habla, o qué nos cuenta, en definitiva, esa voluntad suya tan loca de levantar una imagen con los medios más pobres y el más refinado de los gustos? La luz, el tiempo y el lenguaje, objetos intangibles, que no inmateriales. Esta es la respuesta. El tiempo es oro, decíamos. Pero la verdad es que todo en el dibujo de Jorge Martins lo es. Sólo he podido verlo al final, tan cegado estaba por el resol. Tiempo condensado y luz que refulgen en sordina. Qué paradoja. Lenguaje que abre el mundo hasta hacerlo brillar, puliéndolo, espejeándolo… Transmutación alquímica, de la cual saben todos los artistas de oscura manera: la conversión del más humilde de los materiales en oro, el metal perfecto cuya superficie no le pertenece, pues todo lo refleja. Las heces, el carbón (que brilla como el diamante que contiene, sólo hace falta más presión para que «cuaje»), los restos de una pobreza material que entre sus manos se transforman en el rey de los materiales. Y así, le he oído decir en algún momento al propio Jorge, que «existen realidades cuya única verdad es su representación». A la vista de sus dibujos no me cabe ninguna duda… Y que así sea. Naz de Abaixo, Lugo, junio de 2018
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dibujar es reconstruir el universo desenhar ĂŠ reconstruir o universo to draw is to rebuild the universe
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A pedra de Roseta, 1964
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Sem tĂtulo, 2014
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Lengalenga, 2002
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Sem tĂtulo, 2014
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dibujo para comprender lo ;ue es dibujar desenho para compreender o ;ue ĂŠ o desenho drawing to understand what drawing is
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Isto não é isto!, 2007
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Fuga, 2015
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Mudanรงa de fase, 2011
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una lĂnea en dibujo y en pintura no es nunca lo mismo uma linha em desenho e em pintura nĂŁo sĂŁo a mesma coisa a line in drawing and a line in painting are never the same thing
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Sem tĂtulo, 1978
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Petites catastrophes, 1979
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Paliรงada, 1977
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Sem tĂtulo, 1979
128
Sem tĂtulo, 1979
129
Sem tĂtulo, 1981
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Three to Darkness, 2004
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Outros destinos, 2003
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«Cosi fan tutte», 2004
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Subtracção, 2016
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Adição V+M, 2018
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el color en pintura es el color en pintura cuando pinto una manzana verde el verde es el verde del cuadro no el verde de la manzana! a cor em pintura é a cor em pintura ;uando pinto uma maçã verde o verde é o verde do ;uadro não o verde da maçã! colour in painting is the colour in painting when I paint a green apple the green is the green of the painting not the green of the apple!
Jorge Martins biobibliografía | biobibliografia | biobibliography
Nacido en Lisboa, el 4 de febrero de 1940. Entre 1957 y 1961 realiza estudios de arquitectura y de pintura en la Escuela Superior de Bellas Artes de esta ciudad. Expone su obra regularmente desde 1958, realizando su primera individual en 1960. Al año siguiente se traslada a París, hasta 1991. Estancia interrumpida en el periodo 1975-76, en que el artista se instala en Nueva York. Regresa definitivamente a Portugal en 1991, donde en la actualidad vive y trabaja. Nasceu em Lisboa, a 4 de Fevereiro de 1940. Frequentou os cursos de Arquitectura e Pintura na Escola Superior de Belas-Artes de Lisboa, entre 1957 e 1961. Expõe regularmente desde 1958. A sua primeira exposição individual data de 1960. Em 1961 parte para Paris, onde vive e trabalha até 1991. Esta estada é interrompida em 1975 e 1976, período em que se instala em Nova Iorque. Regressa definitivamente a Portugal em 1991, onde vive e trabalha desde então. Born in Lisbon, on 4 February 1940. Attended the Architecture and Painting courses of Escola Superior de Belas-Artes de Lisboa from 1957 to 1961. Exhibits regularly since 1958. His first solo exhibition was held in 1960. In 1961, he left for Paris, where he lived and worked until 1991. This Parisian stay was interrupted between 1975 and 1976, a period during which he resided in New York. Returned to Portugal in 1991, and has lived and worked there since then.
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Exposiciones Individuales (Selección) Exposições Individuais (Selecção) Selected Solo Shows
2018 Sombras y Paradojas. MEIAC, Badajoz 2017 Ficção e Deriva. Galeria do Tap-Seac, Macau Interferências. Fundação Arpad Szenes – Vieira da Silva, Lisboa 2016 Histórias. Museu da Taipa, Macau Gota a Gota (fotografia). Artistas Unidos, Lisboa 2015 Aforismos. Giefarte, Lisboa 2013 A Substância do Tempo. Museu de Arte Contemporânea, Fundação de Serralves, Porto e Fundação Carmona e Costa, Lisboa Dessins. Kogan Gallery, Paris Desenhos. Galeria João Esteves de Oliveira, Lisboa 2011 Eros Cromático (fotografia). Fundação Arpad Szenes – Vieira da Silva, Lisboa 2010 Jorge Martins: Pintura. Fundação Casa de Mateus, Vila Real 2008 Projet Dessin 2002-2007. Fundação Calouste Gulbenkian, Paris Jorge Martins. Galeria Fernando Santos, Porto 2007 Jorge Martins. O Instante de Um Corpo. Giefarte, Lisboa 2006 Jorge Martins. Simulacros – Uma Antologia. Centro Cultural de Belém, Lisboa 2005 Pintura Recente e Desenho. Galeria João Esteves de Oliveira, Lisboa 2004 Fronteiras da Ilusão. Conjunto Cultural da Caixa Econômica Federal, Brasília Fronteiras da Ilusão. Museo del Antiguo Colegio de San Ildefonso, Ciudad de México 2003 Fronteiras da Ilusão. Museu Nacional de Belas-Artes, Rio de Janeiro
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Fronteiras da Ilusão. Pinacoteca do Estado de São Paulo, São Paulo Jorge Martins. Fundação Arpad Szenes – Vieira da Silva, Lisboa Pintura. Galeria Filomena Soares, Lisboa Preto e Branco com Cor (Anos 70). Galeria João Esteves de Oliveira, Lisboa 2001 Jorge Martins. Pintura. Culturgest, Lisboa Anos Luz 1967-1979. Edifício do Banco de Portugal, Leiria Desenhos. Escola António Arroio, Lisboa Pintura. Galeria Fernando Santos, Porto Pintura Pequenos Formatos. Giefarte, Lisboa 1998 Pintura «Real /Virtual». Galeria Fernando Santos, Porto Desenhos. Fundação Casa de Mateus, Vila Real 1997 Pintura «Sobre Corpos». Galeria Luís Serpa, Lisboa 1995 Sleeping Shelter. Escultura. Galeria Luís Serpa, Lisboa Grafite / Papel. Galeria Diferença, Lisboa Papéis Inéditos 1957-1993. Casa da Cerca – Centro de Arte Contemporânea, Almada Drawings. Corcoran Gallery of Art, Washington, D.C. 1993 Jorge Martins. Pintura 1958-1993. Fundação Calouste Gulbenkian, Lisboa 1991 Jorge Martins: Pintura. Galerie Lina Davidov, Paris De revolutionibus orbium cœlestium. Galeria EMI – Valentim de Carvalho, Lisboa 1990 Peinture. Galerie TH, Lyon Desenhos. Galeria EMI – Valentim de Carvalho, Lisboa 1989 Dessins. Galerie Gilbert Brownstone & Cie, Paris 44 Desenhos para «Mensagem» de Fernando Pessoa. Museu de Macau, Macau 1988 Desenhos 1957-1987. Fundação Calouste Gulbenkian, Lisboa Jorge Martins Peinture et Dessin. Galerie Pascal PolarArt, Bruxelles
Jorge Martins: Dessins. Galerie L’Entracte, Lausanne 1986 Pintura. Galeria EMI – Valentim de Carvalho, Lisboa 1985 O Fazer Suave de Preto e Branco (em colaboração com o fotógrafo Jorge Molder). CAM – Fundação Calouste Gulbenkian, Lisboa 1984 Saint-John Perse, CAM – Fundação Calouste Gulbenkian, Lisboa 1983 Jorge Martins en Noir et Blanc. Dessins et Peintures. Centre d’Art et de Culture, Meudon Jorge Martins. Galeria Arcano XXI, Lisboa Jorge Martins: Preto e Branco. Desenhos. Fundação Calouste Gulbenkian, Lisboa 1978 Jorge Martins. Dessins. Ateliers Aujourd’hui. Musée National d’Art Moderne – Centre Georges Pompidou, Paris 1974 Galeria 111, Lisboa 1970 Herbert Lust Gallery, Chicago 1962 Galeria Diário de Notícias, Lisboa 1961 Galeria Alvarez, Porto 1960 Sociedade Portuguesa de Gravadores Portugueses, Lisboa
Exposiciones Colectivas (Selección) Exposições Colectivas (Selecção) Selected Group Shows
2011-12 Quatro (com Nikias Skapinakias, Sofia Areal, Manuel Casimiro), Lisboa, Guarda, Aveiro, Alcobaça, Sines, Cascais 2008 Múltiplas Direcções. Museu Nacional de Arte Contemporânea – Museu do Chiado, Lisboa
2006 50 Anos de Arte Portuguesa. Fundação Calouste Gulbenkian, Lisboa Trazos Cercanos. Centro Cultural Caixanova, Vigo Mulheres. Encontros de Fotografia. Centro de Artes Visuais de Coimbra 2005 Densidade Relativa. CAM – Fundação Calouste Gulbenkian, Lisboa 2004 Meio Século de Arte Portuguesa (1944-2004). Museu Nacional de Arte Contemporânea – Museu do Chiado, Lisboa 2003 Colecção de Arte Contemporânea da Caixa Geral de Depósitos. MEIAC, Badajoz 2002 Diferença e Conflito. Museu Nacional de Arte Contemporânea – Museu do Chiado, Lisboa 1999 Circa 68. Museu de Arte Contemporânea – Fundação de Serralves, Porto Linhas de Sombra. CAM – Fundação Calouste Gulbenkian, Lisboa 1997 Hors Catalogue. Centre Culturel d’Amiens 1996 Quatro Pintores no Levante (com René Bertholo, Costa Pinheiro, Manuel Baptista). Casa das Artes, Tavira 1995 Arte Moderna em Portugal II. Caixa Geral de Depósitos, Lisboa 1994 Waves of Influence. Snug Harbour Cultural Center, New York 1993 Orientations. Akemi Foundation, Osaka Tradición, Vanguarda e Modernidade do Século XX Portugués. Auditorio de Galicia, Santiago de Compostela 1992 Arte Portuguesa no Parlamento Europeu. European Parliament, Strasbourg Arte Contemporânea Portuguesa na Colecção da Fundação Luso-Americana para o Desenvolvimento. CAM – Fundação Calouste Gulbenkian, Lisboa
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1989 Trienal de Desenho. Fundació Joan Miró, Barcelona 4 Peintres Portugais à Paris. Palais de Tokyo, Paris Arte Portugués Contemporáneo. Centro Cultural Conde Duque, Madrid 1987 Arte Contemporáneo Portugués. Museo Español de Arte Contemporáneo, Madrid 1986 Le XXème au Portugal. Centre Albert Borschette, Bruxelles III Exposição de Artes Plásticas. Fundação Calouste Gulbenkian, Lisboa 1985 Representação Portuguesa na 18.ª Bienal de São Paulo, São Paulo Diálogos sobre Arte Contemporânea. CAM – Fundação Calouste Gulbenkian, Lisboa 1984 Le Labyrinthe dans l’Art Contemporain. Centre Culturel Portugais – Fundação Calouste Gulbenkian, Paris 1982 Aspectos da Arte Abstracta: 1970-80. Sociedade Nacional de Belas-Artes, Lisboa 1979 Hyllning till Nobelpriset [Homenagem ao Prémio Nobel / Nobel Prize Homage]. Galerie Börjeson, Malmö 1978 Bilder, Briefe, Noten II [Quadros, cartas, notas II]. Autoren Galerie, München 1977 Grands et Jeunes d’Aujourd’hui. Grand Palais, Paris 1976 Arte Portoghese Contemporanea. Galleria Nazionale d’Arte Moderna, Roma Art Portugais Contemporain. Musée d’Art Moderne, Paris 1975 La Réalité et son Image. Galerie Etienne de Causans, Paris 1974 Comparaisons/Oppositions. Centre Culturel de Limoges, Limoges Au-delà de l’Image. Galerie Bellechasse, Paris
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1973 Pintura Portuguesa de Hoje: Abstractos e Neofigurativos. Sociedade Nacional de Belas-Artes, Lisboa 1972 Inicia colaborações com as galerias Bellechase (Paris) e Börjeson (Malmö) Twenty Artists from Portugal. Hudson River Museum, New York 1971 Inicia a colaboração com a Galeria 111, Lisboa 1970 Exposição Mobil de Arte Moderna. Sociedade Nacional de Belas-Artes, Lisboa IIe Biennale Internationale de Gravure. Musée d’Art Moderne, Paris Pintura Portuguesa de Hoje: Abstractos e Neofigurativos. Sociedade Nacional de Belas-Artes, Lisboa, Barcelona e Salamanca Exposição Prémio Soquil de Arte Moderna. Lisboa 1969 Gravure Contemporaine. Maison de l’Unesco, Paris 1968 Bienal Internacional de Gravura. Buenos Aires Ie Biennale Internationale de la Gravure. Musée d’Art Moderne, Paris 1967 Inicia uma colaboração com a Galeria Virginia e Herbert Lust, Chicago e Nova Iorque Salon de la Jeune Peinture. Musée d’Art Moderne, Paris Novas Iconologias. Galeria Buchholz, Lisboa 1966 Seis Pintores Portugueses de Paris. Galeria Buchholz, Lisboa 1965 IVe Biennale Internationale d’Art. Musée d’Art Moderne, Paris 1961 II Exposição de Artes Plásticas. Fundação Calouste Gulbenkian, Lisboa 1960 II Salão de Arte Moderna. Casa da Imprensa, Lisboa 1959 Exposição dos Artistas Independentes. Sociedade Nacional de Belas-Artes, Lisboa
I Salão de Desenho Moderno. Casa da Imprensa, Lisboa 1958 1.º Salão de Arte Moderna. Sociedade Nacional de Belas-Artes, Lisboa Salão de Arte Moderna. Casa da Imprensa, Lisboa
Premios Prémios Prizes
2003 Prémio Consagração 2003. CELPA – Fundação Arpad Szenes – Vieira da Silva 1988 Prémio Artes Plásticas SEC-AICA. Associação Internacional de Críticos de Arte, em parceria com a Secretaria de Estado da Cultura 1986 Prémio de Desenho da III Exposição de Artes Plásticas. Fundação Calouste Gulbenkian, Lisboa 1984 Prémio Gulbenkian de Ilustração de Literatura Infantil (ilustração d’O Livro das Sete Cores) 1971 Prémio Artes Plásticas AICA (Menção Honrosa). Associação Internacional de Críticos de Arte 1970 Prémio Soquil de Arte Moderna (Menção)
Colecciones Públicas (Selección) Colecções Públicas (Selecção) Selected Public Art Collections
Casa Museu Anastácio Gonçalves, Lisboa CAM – Fundação Calouste Gulbenkian, Lisboa Fundação Arpad Szenes – Vieira da Silva Fnac – Fonds National d’Art Contemporain, Paris Fundação Carmona e Costa, Lisboa Fundação EDP Fundação Luso-Americana para o Desenvolvimento, Lisboa Fundação PT Mairie de Paris, Paris Ministério das Finanças, Lisboa Musée National d’Art Moderne – Centre Georges Pompidou, Paris Museu Carlos Machado, Ponta Delgada Museu de Arte Contemporânea – Fundação de Serralves, Porto Museu de Arte Contemporânea – Museu do Chiado, Lisboa Museu de Arte Contemporânea, Funchal Museu de Luanda, Luanda Museu Nacional de Soares dos Reis, Porto Statens Museum for Kunst, København
Obras Públicas Obras Públicas Public Work
Câmara Municipal de Lisboa (sala de jantar e escada norte) Complexo Industrial SOVENA (concepção cromática), Almada Edifício ECRAN, Parque Expo, Lisboa Estação de Metro Chelas, Lisboa Estação de Metro Pontinha (revestimento cerâmico), Lisboa Lagos, Espírito Santo Plaza, Miami Ocean Piece, Washington D.C. Metro
Bolsa de Valores de Lisboa Caixa Geral de Depósitos, Lisboa
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Bibliografía (Selección) Bibliografia (Selecção) Selected Bibliography
Monografías y catálogos de exposiciones individuales Monografias e catálogos de exposições individuais Monographs and solo-exhibition catalogues Jorge Martins: A Substância do Tempo. Lisboa: Documenta, Fundação Carmona e Costa e/and Museu de Arte Contemporânea de Serralves, 2013 (textos de António Mega Ferreira, João Fernandes, José Gil, Manuel Castro Caldas, Pierre Georgel, Sara Antónia Matos) Jorge Martins: Projet Dessin 2002-2007. Paris: Fundação Calouste Gulbenkian, 2008 (textos de Manuel Costa Cabral, Rita Fabiana, Raquel Henriques da Silva, José Gil) Jorge Martins. O Instante de Um Corpo. Lisboa: Giefarte, 2007 (texto de José Gil) Jorge Martins: Simulacros – Uma Antologia. Lisboa: Civilização, 2006 (textos de Luís Henriques, Raquel Henriques da Silva, Margarida Veiga) Jorge Martins: A Luz e a Pintura. Lisboa: Editorial Caminho, 2005 (texto de Eduardo Paz Barroso) Jorge Martins. Lisboa: Publicações Dom Quixote, 2005 (textos de João Lima Pinharanda, Paulo Herkenhoff, José Gil) Fronteiras da Ilusão – Jorge Martins – Pintura. Lisboa: Gabinete das Relações Culturais Internacionais, 2003 (texto de João Lima Pinharanda) Jorge Martins: CELPA, Fundação Arpad Szenes – Vieira da Silva, Prémio Consagração 2003. Lisboa: Fundação Arpad Szenes – Vieira da Silva, 2003 Jorge Martins: Preto e Branco com Cor, Trabalhos dos Anos 70. Lisboa: Galeria João Esteves de Oliveira, 2003 Jorge Martins: Obra Recente. Porto: Galeria Fernando Santos, 2001 (texto de João Lima Pinharanda) Jorge Martins: Pintura. Lisboa: Culturgest, 2001 (texto de José Gil)
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Anos Luz: Pintura 1967-79. Leiria: Câmara Municipal de Leiria, 2001 (texto de João Lima Pinharanda) Jorge Martins: Real/Virtual. Porto: Galeria Fernando Santos, 1998 (texto de Eduardo Paz Barroso) Jorge Martins: Papéis Inéditos 1957-1993. Almada: Câmara Municipal, 1995 (texto de Rogério Ribeiro) Jorge Martins: Sleeping Shelter. Lisboa: Galeria Luís Serpa, 1995 (textos de Jorge Martins, José Gil) Jorge Martins: Pintura, 1958-93. Lisboa: CAM – Fundação Calouste Gulbenkian, 1993 (textos de José Sommer Ribeiro, José Gil, Manuel Villaverde Cabral, Isabel Carlos) Jorge Martins. Paris: Galerie Lina Davidov, 1991 (texto de José Gil) Jorge Martins: Grafite sobre Papel. Lisboa: EMI – Valentim de Carvalho, 1990 (prefácio de Alberte Grynpas Nguyen) Jorge Martins. Lisboa: EMI – Valentim de Carvalho, 1989 (prefácio de João Miguel Fernandes Jorge) Jorge Martins. Dessins. Paris: Gilbert Brownstone & Cie, 1989 (texto de Alberte Grynpas Nguyen) Jorge Martins: Desenhos, 1957-1987. Lisboa: Fundação Calouste Gulbenkian, 1988 (textos de José Gil, Maria Filomena Molder, Manuel Castro Caldas) Jorge Martins: Dessins. Lausanne: Galerie L’Entracte, 1988 (texto de Pierre Georgel) Jorge Martins. Lisboa: Galeria EMI, 1986 (prefácio de José-Augusto França) O Fazer Suave de Preto e Branco: 20 Desenhos de Jorge Martins, 20 Fotografias de Jorge Molder. Lisboa: CAM – Fundação Calouste Gulbenkian, 1985 (texto de João Fatela) Jorge Martins. Lisboa: Imprensa Nacional-Casa da Moeda, 1984, Colecção Arte e Artistas (texto de Maria Filomena Molder) Jorge Martins: Preto e Branco: Desenhos. Lisboa: Fundação Calouste Gulbenkian, 1983 (textos de José Sommer Ribeiro, Pierre Georgel, Fernando Gil) Jorge Martins. Dessins (Ateliers d’Aujourd’hui). Paris: Centre Georges Pompidou. Musée National d’Art Moderne, 1978 (texto de Pierre Georgel)
Jorge Martins. Porto: Galeria Zen, 1972 (texto de Gérald Gassiot-Talabot) Jorge Martins. Lisboa: Galeria 111, 1970 (introdução de Gérald Gassiot-Talabot) Jorge Martins: En Noir et Blanc: Dessins et Peintures. Meudon: Centre Culturel de Meudon, s/d (texto de Brigitte Cornand)
Catálogos de exposiciones colectivas Catálogos de exposições colectivas Catalogues of group exhibitions 50 Anos de Arte Portuguesa. Lisboa: Fundação Calouste Gulbenkian, 2007 (texto de Raquel Henriques da Silva) Desenho: Desenhos e Uma Escultura. Lisboa: Fundação Calouste Gulbenkian, Lisboa, 2007 (textos de Jorge Molder, Leonor Nazaré) Trazos Cercanos: Artistas en el Siglo XX Portugués. Vigo, Espanha: Centro Cultural Caixanova, 2006 (textos de Marisa Oropesa, Fernando Castro Flores, Rui Mário Gonçalves) Arte Portuguesa em Brasília. Brasília: Editora 21, 2005 (textos de Francisco Seixas da Costa, Roberto Lima) Linhas de Sombra. Lisboa: Fundação Calouste Gulbenkian, 1999 (textos de João Miguel Fernandes Jorge, Jorge Molder, Maria Helena de Freitas) 5 Esculturas em Mármore. Lisboa: Cevalor e Parque Expo’98, 1998 (texto de Alexandre Pomar) Pinturas com Luz. Lisboa: EDP – Electricidade de Portugal, 1997 (texto de João Lima Pinharanda) O Desenho do Desenho. Lisboa: Casa da Cerca, Centro de Arte Contemporânea, 1995 (textos de Ana Isabel Ribeiro, Renata Araújo) Arte – Metropolitano de Lisboa. Lisboa: Metropolitano de Lisboa, 1995 (texto de João Castelo-Branco Pereira) Dacosta, Pomar, Cargaleiro, Jorge Martins: 4 Peintres Portugais à Paris. Lisboa: Fundação Calouste Gulbenkian, 1989 I Trienal de Dibuix Joan Miró. Barcelona: Fundació Joan Miró, 1989. Representação portuguesa à 18.ª Bienal Internacional de
São Paulo. Lisboa: Fundação Calouste Gulbenkian, 1985 (apresentação de José Sommer Ribeiro) Exposição Saint-John Perse: bio-bibliografia e poema Amers. Lisboa: CAM – Fundação Calouste Gulbenkian, 1984 (texto de André Siganos) Moderna Mästere. Malmö: Galerie Börjeson, 1980 (textos de Gunnar Brahammar, Kristina Garmer)
Capítulos o ensayos en libros sobre arte Capítulos ou ensaios em livros sobre arte Chapters or essays in art books Gil, José, Sem título: Escritos sobre arte e artistas. Lisboa: Relógio D’Água, 2005 Fernandes Jorge, João Miguel, Um quarto cheio de espelhos. Lisboa: Quetzal Editores, 1987 Castro Caldas, Manuel, Dar Coisas aos Nomes: escritos sobre arte e outros textos. Lisboa: Assírio & Alvim, 2008 Mendonça, Mindy, Gosto, Coleccionismo e Criação – Jorge Martins e o Mercado da Arte, tese de mestrado em Gestão de Mercados da Arte, ISCTE. Lisboa, 2008 Rosa Dias, Fernando, Arte Contemporânea Portuguesa do Século XX, tese de doutoramento, Faculdade de Belas-Artes da Universidade de Lisboa. Lisboa, 2006
Artículos en publicaciones periódicas Artigos em publicações periódicas Articles in periodicals Carlos, Isabel, «Landscape Posts / PostLandscape», Flash Art, International: vol. XXV, n.º 164, May/June, Informação Literária, n.º 4, 1990 Fernandes, Maria João, «Um universo mutante: Jorge Martins na Culturgest», Arte Ibérica, Lisboa: Arrábida, n.º 47, Junho de 2001 Gil, Fernando, «Elogio do…», Colóquio. Revista de Artes Visuais, Música e Bailado, Lisboa: Fundação Calouste Gulbenkian, n.º 59, Dezembro de 1983
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Gonçalves, Rui Mário, «Jorge Martins», Colóquio. Revista de Artes Visuais, Música e Bailado, Lisboa: Fundação Calouste Gulbenkian, n.º 13, Junho de 1973 Molder, Maria Filomena, «Jorge Martins», Colóquio. Revista de Artes Visuais, Música Bailado, Lisboa: Fundação Calouste Gulbenkian, n.º 67, Dezembro de 1985 Oliveira, Emídio Rosa de, «Jorge Martins, ou a modulação rítmica da cor», Artes Plásticas, Lisboa: Agil – Artes Gráficas, Informação Literária, n.º 4, 1990 Sartori, Alberto, «Jorge Martins: Il Disegno Assoluto», Futurismo – oggi (periódico mensal), Roma: Anno XXIV (JuglioAgosto 7, 8), 1992 Weelen, Guy, «L’Œil voit/pense», Colóquio. Revista de Artes Visuais, Música Bailado, Lisboa: Fundação Calouste Gulbenkian, n.º 9, Dezembro de 1983
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Obras ilustradas Obras ilustradas Illustrated works Gil, José, Cemitério dos Desejos. Lisboa: Relógio D’Água, 1990 ——, Sem Título. Lisboa: Altamira, 1985 Júdice, Nuno, Raptos. Lisboa: Livros Quetzal / Casa Fernando Pessoa, 1998 ——, Lira de Líquen. Lisboa: Edições Rolim, 1986 Menéres, Maria Alberta, Torrado, António, O Livro das Sete Cores. Lisboa: Editorial Caminho, 1983 Neto Jorge, Luiza, O Ciclópico Acto. Lisboa: Livraria-Galeria 111, 1972 Pessoa, Fernando, Mensagem. Lisboa: Círculo de Leitores/Publicações Dom Quixote, 1988 Sasportes, José, Os Dias Contados. Lisboa: Dom Quixote, 2005 ——, Daisy: Um Filme para Fernando Pessoa. Lisboa: Edições Salamandra, 1986 Shakespeare, William, Os Sonetos de Shakespeare. Lisboa: Bertrand, 2002 Tabacaria, revista de Poesia e Artes plásticas. Lisboa: Casa Fernando Pessoa, n.º 1, 1996 Nova Magazine: poesia e desenho. Lisboa: Inverno, n.º 1, 1975/1976
Traducción Traduções Translations
[apresentação]
S
ombras e Paradoxos. O desenho de Jorge Martins é a primeira exposição individual de vulto que em Espanha se dedica a um dos nomes cimeiros da arte portuguesa do século passado. Aos setenta e oito anos, e ainda em plena actividade criadora, Jorge Martins (Lisboa, 1940) conseguiu tornar-se uma referência dentro do rico panorama criativo actual do país vizinho, tanto pela firmeza e independência do seu compromisso estético — em boa medida alheio ao vaivém das modas internacionais que década a década vai ditando o devir colectivo da criação — como pela singular posição que ocupa no mapa geracional. De facto, a atenção que o seu trabalho ultimamente suscita entre os jovens artistas é um importante elemento a ter em conta quando chega o momento de avaliar a pertinência de uma obra como a sua, onde uma impecável formalização se combina com uma procura contínua de novos processos e soluções no momento de delinear as imagens plásticas. Algo que muito contribuiu tanto para a vitalidade da obra como para o prestígio do artista foi sem dúvida a infatigável exploração do desenho que Martins desenvolve desde as suas primeiras exposições, precisamente sessenta anos atrás; de facto, foram os seus desenhos que o levaram, já nos finais da década de setenta, ao Centro Georges Pompidou de Paris, que lhe dedicou uma exposição individual. O desenho, disciplina outrora «secundária», para não dizer subordinada, atravessa actualmente um momento feliz de interesse renovado em todos os seus aspectos, tanto conceptuais como processuais e formais; na figura de Martins, encontra um nome incontornável, não só em termos da avaliação dos seus sucessos e limites históricos durante a segunda metade do século XX mas também em relação à linha do horizonte que o rodeia no nosso presente estético. A nossa exposição concentra-se precisamente no desenho, essa parte da sua abundante produção em que o artista tanto se destaca. Desenhos de grande formato e versatilidade assombrosa, onde a nota predominante é a abundância de registos: da geometria ao gesto expressivo; da ordem matemática ao enunciado verbal em forma de escrita, palavra, letras ou anotações; da silhue-
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ta à mancha; da figura ao monocromo… Martins não se limita a uma fórmula susceptível de se multiplicar até ao infinito por meio de variantes: ao contrário do que costuma ser habitual nos criadores da sua idade, que exploram até à exaustão território já conquistado, o nosso protagonista evita constantemente a repetição de um repertório reconhecível de gestos, marcas, fórmulas ou iconografias previamente por si estabelecidas e colocadas sob a égide da assinatura. Para a mostra do MEIAC, optámos por uma ampla selecção de obras de todas as fases produtivas do artista. Desde o início, evitámos a ideia de retrospectiva (queremos ilustrar com a nossa exposição o fenomenal momento por que actualmente passa a obra do artista, com um estúdio aberto e activo de onde saem alguns dos seus melhores trabalhos), escapando assim ao carácter de museu-mausoléu associado a esse tipo de eventos. Por essa mesma razão, recusámos a organização cronológica dos elementos expostos, bem como tudo o que possa criar a impressão de um falso desenvolvimento linear em toda a vasta trajectória de Martins, onde sucessos passados parecem conduzir de forma sequencial e um tanto inevitável a outros, derivados e causais, que os englobam. As coisas quase nunca são assim, e no nosso caso tal constituiria certamente uma tergiversação. Pelo contrário, tanto o nosso critério de selecção como o plano expositivo e a ordem interna da publicação que o leitor tem nas mãos sublinham como as preocupações do artista se renovam continuamente ao longo dos anos e décadas da sua trajectória, crescendo em espiral, digamos, em vez de numa ordem sucessiva. Por isso, organizámos o percurso do artista em núcleos temáticos onde a obra actual lança olhares oblíquos em todas as direcções — incluindo o passado —, de modo a alinhavar sequências imprevisíveis e realçar reflexos e iluminações transversais no tempo. Além disso, trata-se de desenhos muitas vezes inéditos, alguns dos quais estavam ainda a ser terminados no momento da sua selecção, que mostram a assombrosa versatilidade da sua sintaxe, a singularidade, riqueza e refinamento dos seus processos formativos e o variado leque de interesses icónicos com que opera. A nossa exposição propõe novos ângulos de leitura da obra de Martins, que completam e actualizam a abundante fortuna crítica do artista ao longo da sua carreira. Assim, analisaremos o desenho enquanto sismógrafo dos estados anímicos e do pulso «vital» e emocional do artista, mostrando como este se combina, em boa parte destas obras, com um notável rigor analítico e uma igualmente notável capacidade de organização dos componentes da imagem no plano da representação. A este equilíbrio de momentos «quentes» e «frios» dedicaremos uma sala da nossa exposição. De igual modo, os aspectos performa-
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agradecimientos | agradecimentos | acknowledgments Al MEIAC y a su director Antonio Franco por invitarme para esta exposición que tiene lugar cuando se cumplen exactamente sesenta años desde que, en1958, expuse mi trabajo por primera vez. A Óscar Alonso Molina por su magnífico texto y por su comprensión de mi trabajo. A Pedro y Anabela Reigadas por su colaboración y apoyo. A Manuel Rosa que concibió y realizó este libro. Finalmente quiero manifestar mi más profundo agradecimiento a la Fundação Carmona e Costa, y en particular a María da Graça Carmona e Costa, que patrocinó este proyecto con gran generosidad y el mayor entusiasmo. Ao MEIAC e ao seu director Antonio Franco pelo convite para esta exposição que acontece exactamente sessenta anos após, em 1958, ter mostrado o meu trabalho pela primeira vez. Ao Óscar Alonso Molina pelo magnífico texto e pelo seu entusiasmo e compreensão do meu trabalho. A Pedro e Anabela Reigadas pela colaboração e apoio. Ao Manuel Rosa que concebeu e realizou este livro. Finalmente, a minha gratidão para com a Fundação Carmona e Costa e para Maria da Graça Carmona e Costa que patrocinou este projecto com grande generosidade e o seu proverbial entusiasmo. My thanks to MEIAC and its Director Antonio Franco for the invitation to this exhibition which happens exactly sixty years after, in 1958, I had shown my work for the first time. A big thank you to Óscar Alonso Molina for the magnificent text and for his enthusiasm and understanding of my work. I also want to thank Pedro and Anabela Reigadas for their collaboration and support. My thanks to Manuel Rosa who conceived and carried out this book. Finally, my gratitude to the Fundação Carmona e Costa and to Maria da Graça Carmona e Costa who sponsored this project with great generosity and her proverbial enthusiasm. J.M.