Attacca Quartet by Sociedad Filarmónica de Lima

Â© Shervin Lainez

Attacca Quartet

Attacca

Quartet

Amy Schroeder – Alex Fortes, violines Nathan Schram, viola - Andrew Yoo, violonchelo

XI CONCIERTO

Temporada de Abono 2019 Jueves 8 de agosto – Auditorio Santa Úrsula

Auspiciadores

La energía que mueve tu Mundo

1/2 X 1/2 X 1/2 X

Contrucción de la caja de color institucional.

La energía que mue

Agradecimientos

Media partners

En la versión de logotipo sin slogan, se mantiene la caja desarrollada al inicio pero con el logotipo centrado en sus dos ejes.

ESTIMADOS SOCIOS, ABONADOS Y AMIGOS

Es muy grato para mí en representación de la Sociedad Filarmónica de Lima que me honro en presidir, brindarles la más cordial bienvenida al Auditorio Santa Úrsula y a esta nueva cita musical como parte de nuestra Temporada de Abono 2019. Esta noche nos complace en presentar por segunda vez en Lima al Cuarteto Attacca de Estados Unidos. Esta noche nos brindará un programa dedicado a Haydn, Mendelssohn y Beethoven. Nuestra programación continuará el próximo domingo 11 de agosto en el Gran Teatro Nacional con la presentación de la Orquesta Sinfónica Nacional de Chile. El martes 13 de agosto volvemos al Auditorio Santa Úrsula para presentar a la Orquesta de Cámara de la Sinfónica de Trujillo, como parte del Encuentro de Músicos Peruanos. Gracias una vez más a cada una de las empresas e instituciones por su generoso apoyo a nuestra labor de promoción de la buena música; y especialmente a ustedes, queridos socios, abonados y amigos que nos acompañan en esta nueva gran temporada.

SALOMÓN LERNER FEBRES Presidente Sociedad Filarmónica de Lima

Foto: Nancy Chappell

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Elogiado por la revista The Strad como una agrupación “impresionante” y por poseer “una madurez musical muy por encima de la edad de sus integrantes”, el Attacca Quartet celebra este año su 15ª temporada. Desde conciertos con entradas agotadas en el Carnegie Hall o Radio City Music en Nueva York, el Attacca celebra y comparte la belleza atemporal de este arte sublime de repertorio para cuarteto de cuerdas. Ganadores del Primer Premio del 7º Osaka International Chamber Music Competition, Listener’s Choice Awards, Primer Premio del Melbourne International Chamber Music Competition y ganadores del Gran Premio de la 60ª Colemann Chamber Ensemble Competition, el Attacca Quartet ha recibido el reconocimiento internacional de la prensa y el público, convirtiéndolos en una de las principales agrupaciones musicales jóvenes de los Estados Unidos. El Attacca ha actuado como Cuarteto Residente del Programa de Doctorado de la Juilliard School, Cuarteto Residente del Metropolitan Museum of Art, y Cuarteto Residente de la Texas State University. Recientemente completaron The 6, un proyecto de seis años en Nueva York donde ejecutaron todos los cuartetos de Franz Josep Haydn. Actualmente están produciendo dos nuevos ciclos de conciertos en Nueva York: Recently Added

en el teatro National Sawdust en Brooklyn donde ofrecen obras para cuarteto de compositores vivos, y Based on Beethoven, un proyecto que juxtapone todos los cuartetos de Beethoven y nuevas obras del ciclo Recently Added. El Attacca Quartet ha lanzado tres álbumes con Azica Records: Fellow Traveller: Cuartetos de cuerda de John Adams; Las últimas siete palabras de Cristo, de Franz Joseph Haydn (con arreglos de Andrew Yee, viola del cuarteto) y Songlines: Cuartetos de Michael Ippolito. Han tocado en importantes ciclos de conciertos a través de Norte América, América Latina, Asia y Europa. En 2014 tocaron con la Orquesta Nacional de España en el ciclo Carta Abierta a John Adams, bajo la batuta del compositor y ofrecieron un recital en el Auditorio Nacional de Música. Han tocado en principales ciclos de conciertos en España y regresan en 2018 para tocar con la Orquesta Sinfónica de Barcelona y Nacional de Catalunya la obra Jest del compositor John Adams dirigida por él. Sus integrantes se conocieron en la Juilliard School. Actualmente, el cuarteto está conformado por Amy Schroeder y Alex Fortes en los violines, Nathan Schram en la viola y Andrew Yee en el violonchelo.

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XI Concierto TEMPORADA DE ABONO 2019 Jueves 8 de agosto, 7:45 p.m. Auditorio Santa Úrsula

Programa JOSEPH HAYDN (1732 – 1809) Cuarteto en re mayor op. 71 Nº 2 Adagio-Allegro Adagio cantabile Menuetto: Allegretto Finale: Alegretto-Vivace FELIX MENDELSSOHN (1809 – 1847) Cuarteto de cuerdas en la menor op. 13 Adagio-Allegro vivace Adagio non lento Intermezzo: Allegretto con moto-Allegro di molto Presto-Adagio non lento INTERMEDIO LUDWIG VAN BEETHOVEN (1770 – 1827) Cuarteto de cuerdas Nº 12, en mi bemol mayor, op. 127 Maestoso, Allegro Adagio ma non troppo e molto cantabile Scherzando Vivace Finale – Allegro

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JOSEPH HAYDN (1732 – 1809)

Franz Joseph Haydn nació cerca de Viena, en la pequeña localidad de Rohrau, el 31 de marzo de 1732. Era el segundo de los doce hijos de Mathias Haydn y Anna Maria Koller, ambos servidores del conde de Harrach. Como los padres de Franz Joseph se percataron de la disposición del niño para la música, a los seis años lo enviaron a la casa de un pariente en Hainburg, donde tuvo la oportunidad de empezar su educación. En 1740 se mudó a Viena, ciudad en la que, gracias a su buena voz, integró un coro. Allí continuó su formación musical durante varios años en medio de dificultades que le exigieron, a partir de 1749, desempeñar diferentes tareas como profesor, músico callejero e incluso siervo. Los avances de sus conocimientos en el campo de la composición y el nombre que con esfuerzo iba adquiriendo, le permitieron conseguir el apoyo de la nobleza. Después de servir a varios aristócratas, llegó a la esplendorosa e ilustrada corte de los Esterházy, donde permaneció casi tres décadas. En 1791, luego de haber culminado sus compromisos con dicha

noble familia, viajó a Londres, donde fue recibido triunfalmente. En dicha ciudad británica estuvo por segunda vez entre 1794 y 1795. Durante las dos temporadas que pasó allí, compuso algunas de sus obras más importantes, entre las que destacan dos series de seis sinfonías cada una. En 1795 volvió a Viena. Allí pasó el resto de sus días hasta su muerte. Falleció el 31 de mayo de 1809, tras una vida relativamente larga durante la cual no se desplazó por muchos lugares. Su labor como creador musical fue especialmente fecunda. Las obras que compuso corresponden a los más variados géneros: música religiosa, óperas, piezas instrumentales, música de cámara, oratorios, etc. Entre sus creaciones destacan sus numerosas sinfonías (más de un centenar) y sus obras de cámara, en especial sus cuartetos de cuerdas y sus tríos (unos para cuerdas solas, otros para cuerdas con piano, y otros para cuerdas y vientos). Haydn puede ser considerado el creador del cuarteto de cuerdas como género musical. Un papel parecido

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correspondió a Luigi Boccherini, quien por la misma época (hacia 1760) trabajaba en semejante tarea. A partir de entonces el cuarteto de cuerdas se desarrolla como una obra en la que intervienen cuatro voces de igual importancia correspondientes a cuatro instrumentos de la misma familia: dos violines, una viola y un violonchelo. Con este músico, el violonchelo se independiza de su simple función de bajo continuo y adquiere voz propia. El cuarteto de cuerdas de Haydn no es una simple suma de piezas sucesivas, sino una arquitectura construida con inteligencia y un especial sentido de unidad del conjunto. Entre las varias decenas de cuartetos de cuerdas que creó este prolífico autor, que solía reunir tales obras en grupos de seis, se encuentran los tres del opus 71 más los tres del opus 74. Los del opus 71 fueron publicados casi simultáneamente en Londres y en Viena en octubre de 1795 y los del opus 74 en 1796. Marc Vignal destaca respecto a estas obras que se puede […] hablar de un «estilo londinense», y que una de las manifestaciones de ese estilo es el hecho de que por primera vez el autor se apegue sistemáticamente al empleo de una introducción en el comienzo del primer movimiento de la obra. Otro de los rasgos que atribuye a tal estilo es la brillantez, el virtuosismo en la escritura y las sonoridades1. El Cuarteto en re mayor op. 71 № 2 (Hob. III. 70) se inicia con una introducción lenta. Esta se presenta en Adagio y compás de 4/4. Ocupa solo cuatro 1 En La musique de chambre. Librairie Arthème Fayard. 1989. p. 409.

compases, a los cuales sigue un Allegro que se inicia con una original construcción de saltos de octavas descendentes que presentan sucesivamente y de modo precipitado el violonchelo, el instrumento de registro más grave, luego, la viola y después cada uno de los violines, instrumentos más agudos. Según Vignal, tal “inicio es uno de las más originales de todo el repertorio para cuarteto, y el movimiento es su conjunto, de un virtuosismo extremo, trata los saltos de octava con una invención si par (se tiene a veces, visualmente, la impresión de una partitura del siglo XX)”2. Para el crítico Domingo del Campo, “el Cuarteto en re mayor, op. 71 № 2, con su Adagio-allegro que configura su primer movimiento, tiene un claro lenguaje sinfónico”3. A esta audaz pieza la sigue el segundo movimiento, Adagio cantabile, en compás de 3/4 y tonalidad de la mayor, una hermosa pieza en forma sonata plena de riqueza melódica de sorpresas armónicas y de contrastes dinámicos. Un Menuetto con tempo Allegro y compás de 3/4 es el tercer movimiento. Según Marc Vignal, “es un ancestro directo del Scherzo de la Segunda Sinfonía de Beethoven”4. En la primera sección de este Menuetto se distinguen dos partes: la primera ocupa diez compases que resultan de la suma de dos subpartes de cinco compases cada una; la segunda ocupa dieciocho compases divididos en dos subpartes de nueve cada una. En el Trío, segunda 2 Ibidem. p. 410. 3 En Enciclopedia de los grandes compositores. Pamplona, Salvat, S. A. de Ediciones, 1984. Tomo 1, p. 272. 4 En Guide la musique de chambre, p. 411.

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sección de este movimiento, como hace notar Vignal, “una especie de cantus firmus en valores largos (blancas con puntillo) pasa de un instrumento a otro”5. Acabado el Trío, regresa el elegante Menuetto. El Finale, cuarto movimiento, en compás de 6/8 y tonalidad de re mayor, se inicia con un Allegretto que se desenvuelve en forma canción (A-B-A) en el paso de la parte A a la B, se produce un cambio de tonalidad hacia re menor, caracterizadora de esa sección. Después de la vuelta y el despliegue del material musical de la primera parte (A) se presenta “una breve transición que desemboca en un calderón. El tempo se vuelve entonces Allegro y la obra concluye en el virtuosismo reencontrado”6. Así se cierra este movimiento cargado de gracia y se cierra la obra.

5 Ibidem. 6 Ibidem.

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FELIX MENDELSSOHN BARTHOLDY (1809 – 1847)

Félix Mendelssohn nació el 3 de febrero de 1809 en Hamburgo en el seno de una familia de banqueros con tradición artística. Fue un genio precoz que se vio favorecido por una esmerada educación. De niño conoció a Goethe a través de su profesor de composición y teoría musical Karl Friedrich Zelter, y a los 9 años debutó como pianista. Entre sus primeras obras se encuentran sinfonías para cuerdas, algunas pequeñas óperas, un octeto para cuerdas y la famosa obertura de concierto op. 21 para la comedia Sueño de una noche de verano, la que compuso a los 17 años. En su madurez escribió música incidental (op. 61) para una puesta en escena de la misma obra, la cual incluyó la popular Marcha nupcial. En 1825 la familia se mudó a Berlín, donde su hogar adquirió el carácter de importante salón cultural de la ciudad. En 1827 ingresó a la Universidad de Berlín, en la que fue alumno de Hegel. A Mendelssohn se le atribuye el redescubrimiento de la obra de J. S. Bach cuya

Pasión según San Mateo fue reestrenada en 1829 por el joven hamburgués. Como pianista y director realizó giras por Europa, sobre todo por Inglaterra, donde fue admirado por la reina Victoria y el príncipe Alberto. En sus viajes conoció a Frédéric Chopin y otros compositores importantes de la época. Trabajó como director musical en Düsseldorf, director de la Gewandhaus de Leipzig y director musical del rey Federico Guillermo IV de Prusia. En 1842 colaboró en la fundación del Conservatorio de Leipzig, donde fueron profesores, entre otros, Robert y Clara Schumann. La muerte de la hermana preferida de Félix afectó mucho al compositor, el cual falleció unos meses después, el 4 de noviembre de 1847 en Leipzig. Sus numerosas obras comprenden sinfonías, conciertos, oratorios, oberturas, música para piano y música para cámara. Entre 1821 y 1823, cuando tenía entre 12 y 14 años

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de edad, compuso 12 sinfonías para orquesta de cuerdas, obras que no se publicaron hasta después de su muerte. Estas obras de la más temprana juventud del compositor muestran a un artista que ya se desempeña muy bien en los terrenos de la creación musical y que ha asimilado la destreza de sus predecesores barrocos y clásicos. F. Mendelssohn se interesó desde muy joven en la música de cámara. Cuando tenía once años escribió un Trio, diversas obras para violín y piano y una pieza para cuarteto. Al año siguiente, 1821, creó varias fugas para cuerdas y un cuarteto con piano en re menor. Un cuarteto para violín, viola, violonchelo y piano en do menor fue publicado en Berlín en 1823 como su opus 1. En ese mismo año elaboró su primer Cuarteto de cuerdas. Entonces ya estaba entregado al cultivo de la música de cámara, en la que obtuvo importantes resultados creativos. El Cuarteto de cuerdas en la menor op. 13 data de 1827, el año en que se estrenó su ópera Las bodas de Camacho. En ese mismo año la muerte de Beethoven (26 de marzo) le produjo un fuerte impacto emocional que generó consecuencias en la actividad creativa de Mendelssohn, quien veneraba a la obra del músico de Bonn, en especial sus cuartetos de cuerdas. Mendelssohn pasó la fiesta de Pentecostés de 1827 en Sacrow, una localidad cercana a Potsdam, donde creó el lied Ist es Wahr? (“¿Es verdad?”), opus 9 №

1, sobre un texto poético llamado Frage (“Pregunta”). El motivo musical de tres notas correspondiente a tal pregunta evoca al segundo movimiento de la sonata para piano op. 87 (Los adioses) de Beethoven. Ese mismo material musical asoma en los diversos movimientos del cuarteto op. 13 de Mendelssohn. A lo largo de este mismo cuarteto puede percibirse la presencia constante de los cuartetos de Beethoven, obras que el joven compositor hamburgués conocía muy bien. El cuarteto op. 13 consta de cuatro movimientos. El primero de ellos se inicia con una Introducción solmene y nostálgica en tempo Adagio, compás de 3/4 y tonalidad de la mayor que se extiende por dieciocho compases en los cuales ya aparece el motivo del Ist es Wahr? Al final un trino en crescendo de la viola conduce a un Allegro en compás de 4/4 y tonalidad de la menor. Este se inicia en intensidad forte y se desenvuelve en forma sonata de tres temas, con un carácter muy intenso y con material musical tratado en estilo contrapuntístico. Según destaca Jean-Alexandre Ménétrier “ninguna otra obra de Mendelssohn presenta un contraste tan abrupto de matices, de ritmo y de dinámica”1. En el desarrollo de esta pieza se emplea el primer tema de la exposición. A la reexposición sigue una brillante coda. 1 En Guide de la musique de chambre. Librairie Arthème Fayard, 1989. p. 574.

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El segundo movimiento, Adagio non lento, en compás de 3/4 y tonalidad de fa mayor, se inicia con carácter cantabile en dinámica mezzo forte. Tan dulce melodía no hace prever la aspereza de la fuga cromática que la sucede y que lleva a un agitado pasaje interpretado por el primer violín con aire dramático. Después de “una especie de reexposición del fugato, de una intensidad y de un virtuosismo contrapuntístico notables, la coda retoma el lied del inicio, le añade el tema del fugato en disminución, y concluye en el apaciguamiento”2. En la primera sección de este movimiento, rico de contrastes dinámicos y de cambios rítmicos, reaparece el tema del lied Ist es Wahr y asoma una cita de la Cavatina del Cuarteto op. 130 de Beethoven, mientras que la parte fugada evoca a la parte central del movimiento lento del cuarteto op. 95 del genial músico de Bonn muerto pocos meses antes; sin embargo, todo en esta juvenil obra maestra resulta nuevo y admirable. El tercer movimiento es el más personal. En vez de un scherzo, el joven Mendelssohn prefirió componer un Intermezzo. Esta pieza en compás de 2/4 está formada por un Allegretto con moto en tonalidad de la menor, un Trío Allegro di molto en la mayor y una vuelta al tempo inicial (Tempo I). Esta es una pieza elegante y ligera. En el Trío (parte central) parecieran asomar los elfos del Sueño de una noche de verano, obra cuya obertura había estado trabajando el autor unos meses antes. Al fin de la pieza, el autor combina 2 Ibidem.

hábilmente motivos musicales de las dos primeras partes. El cuarto movimiento, Finale, Presto, en tonalidad de la menor, compás de 2/2, con una forma de sonata muy libre incluye varios cambios de ritmo, de tonalidad, de tempo y de dinámica. “Trémolos en semicorcheas introducen un recitativo pasional del primer violín, fortissimo, muy cercano a aquel que inicia la sonata op. 31 № 2 de Beethoven (inspirada en la Tempestad de Shakespeare)”3. El desarrollo evoca al recitativo y a la fuga del segundo movimiento, que regresará en la coda de esta pieza. Luego volverán el Ist es Wahr?, reminiscencias de la introducción al tema principal del movimiento final, la fuga del segundo movimiento y el motivo principal del primero. Según Ménétrier, el joven “Mendelssohn muestra aquí una maestría, una originalidad de forma y de fondo sin equivalente en la Europa de 1830, y se afirma como el primer heredero de Beethoven”4.

3 Ibidem. 4 Ibidem. p. 575.

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LUDWIG VAN BEETHOVEN (1770 – 1827)

El 16 de diciembre de 1770 nació en Bonn Ludwig van Beethoven, quien desde niño mostró una notable disposición para la música. Debido a ello, el padre, tenor de la corte, obsesionado por ejemplo de Mozart, quiso hacer de él un niño prodigio, por lo cual lo obligó a estudiar sin consideración. En 1778 lo presentó en Colonia en un concierto de piano y en 1781 lo llevó en una gira de conciertos por Holanda, la que fue un fracaso. Beethoven recibió lecciones de Pfeiffer, van der Eeden, Rovantino, Koch y Zeese. Neefe lo hizo estudiar el Clave bien temperado de J. S. Bach, y las sonatas de Karl Philipp Emmanuel Bach y de Muzio Clementi. En el invierno de 1786 estuvo en Viena, donde conoció a Mozart, quien, según la tradición, le dio algunas clases y comentó: “Escuchen a este joven; no lo pierdan de vista que alguna vez hará ruido en el mundo”. La enfermedad de su madre lo hizo volver a Bonn, donde ella murió en 1787. Obligado

a hacerse cargo de sus hermanos, se vio en la necesidad de pedir el retiro de su padre y que se le entregara la pensión correspondiente para que no fuese despilfarrada. Las penas y sufrimientos que pasó fueron considerables. Sin embargo, encontró un generoso consuelo en la familia Breuning, y llegó a sentir un afecto especial por la gentil Eleonora, a quien dio clases de música a cambio de conocimientos de literatura. Ella se casaría más tarde con el Dr. Wegeler y Beethoven mantuvo con ellos una estrecha amistad durante toda su vida. Asimismo, halló un decidido protector en el conde Waldstein, hombre de gran cultura y pianista distinguido, que había ido a residir a Bonn por razones políticas; este personaje, después de haber oído a Beethoven, lo proclamó como el heredero legítimo de Mozart y Haydn, y lo ayudó eficazmente para que pudiera radicarse en Viena recomendándolo para que se abriese camino. En 1792 Beethoven dejó Bonn y llegó a Viena en noviembre con gran número de obras, la primera de

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ellas escrita a los diez años, y las publicó más tarde, después de haberlas revisado o refundido en otras que compuso en esa ciudad. Las recomendaciones que traía le abrieron los salones aristocráticos. Recibió clases de Haydn, Schneck, Salieri, Schuppanzigh, Alberchtsberger y Aloys Förster. Su primer concierto como pianista lo dio el 30 de marzo de 1795; pero su presentación ante el gran público con sonado éxito se concretó el 2 de abril de 1800. Sin embargo, ya había experimentado los síntomas de su penosa enfermedad, la sordera, desde 1796. A todos los sufrimientos que había soportado, se añadía ahora la tortura física y psicológica de ir perdiendo el sentido más necesario para su profesión. No obstante, su carrera como prolífico compositor comenzó a afianzarse y ya en esa época los rasgos de su carácter estaban bien definidos. Su sensibilidad se manifiesta en exaltados impulsos de fuerza, de alegría, de tristeza y de profunda melancolía. Ludwig van Beethoven falleció en Viena, el 26 de marzo de 1827. Beethoven compuso 16 cuartetos de cuerdas además de la Gran Fuga, obra concebida también para la misma combinación instrumental. Su inicio en el cultivo de este género fue algo tardío en su labor de compositor: en 1801 se publicaron sus cuartetos op. 18. Las seis obras que reúne esta colección corresponden al primer estilo del compositor, en el cual se perciben las huellas de Haydn y de Mozart. Un gran salto se dio entre dicha etapa y la segunda, a la

que pertenecen los cuartetos op. 59 compuestos en 1806 y dedicados al conde Rasumowsky, embajador ruso en Viena. Los cuartetos op. 74 (1809) y op. 95 (1810), si bien son considerados como parte de esa segunda etapa, ya anuncian a la tercera, a la cual pertenecen las cinco últimos, además de la Gran Fuga (op. 133), compuestos entre 1824 y 1826. Esos cuartetos son el 12 (op. 127), el 13 (op. 130), el 14 (op. 131), el 15 (op. 132) y el 16 (op. 135). Estas grandiosas y originales obras creadas en los últimos años de la vida del compositor se apartan de la estructura formal de los cuartetos clásicos de Haydn, Mozart y del propia Beethoven. El cuarteto № 12, en mi bemol mayor, op. 127 es el primero de los tres que el autor dedicó al Príncipe Nicolás Galitzin, noble ruso y chelista del Cuarteto de San Petersburgo, quien le había encargado la composición. La obra fue trabajada por el compositor desde 1823 y acabada en octubre de 1824 en Gutenbrunn, localidad cercana a Baden. En esta creación, según F-R. Tranchefort, domina “sin duda un lirismo caluroso regenerado por los espectáculos de la naturaleza en el paraje de Baden, y propicios a los «elevaciones» del espíritu, que domina en esta obra”1. Este cuarteto consta de cuatro movimientos. El primero empieza con una breve introducción en tempo Maestoso en compás de 2/4 y tonalidad de mi bemol mayor de aire potente. Tal 1 En Guide de la musique de chambre. Librairie Arthème, 1989. p. 93.

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introducción, en el compás sexto, finaliza con un trino en dinámica piano del violín que lleva hacia el Allegro en compás de 3/4, en el que los cuatro instrumentos interpretan un primer tema. Lo inicia el primer violín entonando una serena melodía acompañado por los otros instrumentos. La viola y el segundo violín la toman después haciendo crecer la intensidad. Vuelve en forte el primer violín con júbilo. Después, un puente lleva a un segundo tema. Este está compuesto en la tonalidad de sol menor con cierto aire nostálgico. Después de un pasaje en el que asoman trinos en los diversos instrumentos, regresa el Maestoso de la introducción, ahora en la tonalidad de sol mayor. Luego viene un desarrollo del primer tema. En la tonalidad de do mayor reaparece el Maestoso en un fortissimo majestuoso “que preludia a la segunda parte del desarrollo”2. La reexposición en mi bemol mayor modifica algo a los temas, especialmente al segundo con ornamentaciones. La pieza concluye, según Tranchefort, con un “«desarrollo terminal» sobre el primer tema en imitaciones”. Al final la dinámica pianissimo crea un clima de serenidad.

después se escuchan las respuestas del segundo violín y la viola. Acabada la presentación del original tema, se suceden variaciones. Como el autor no ha indicado la extensión de cada variación, los estudiosos no están de acuerdo sobre el número de ellas: para unos son cinco; para otros, seis. Según Tranchefort, la primera variación es “muy ornada, pero regular en toda su complejidad de detalle, ella presenta un ritmo vuelto fluido, con sus semicorcheas sobre el diseño aproximativo del tema en el violonchelo. La polifonía instrumental permite una intensificación de la frase sobre breves crescendos y diminuendos, además de una expresión de un patetismo contenido”3.

El segundo movimiento, Adagio ma non troppo e molto cantabile en compás de 12/8 y tonalidad de la bemol mayor, se inicia con un tema melódico amplio y elaborado en el que afloran notas prolongadas y síncopas con un ritmo constante. El primer violín presenta la segunda parte del tema. El violonchelo dialoga luego con el instrumento más agudo y poco

La segunda variación, Andante con moto, en compás de 4/4 acelera un tanto el tiempo e introduce valores más breves (fusas) en el diálogo entre los dos violines sobre el acompañamiento seco de los otros dos instrumentos. La tercera variación cambia de tempo, tonalidad y compás. Esta está en Adagio molto espressivo, tonalidad de mi mayor y ritmo de 2/2. Despojada de todo ornamento, se convierte en el centro espiritual del movimiento. Según Tranchefort, en esta variación hay “una especie de himno punzante en el primer violín, con una polifonía concentrada, desplegada en intensos crescendos en la segunda parte”4. La cuarta variación vuelve al tempo primo y el compás de 12/8. Asimismo, a muy poco de empezar el segundo compás, vuelve al la bemol del inicio del movimiento. La melodía con que

2 Ibidem.

3 Ibidem. 4 Ibidem.

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inicia el violín esta parte va acompañada por tresillos y trinos del violonchelo y de los otros instrumentos. Luego ella pasa al violonchelo. En la segunda parte se contrapone los trinos del primer violín al toque más lírico de los otros tres instrumentos. La quinta variación funciona como una transición al ritmo inicial, en la que solo los cuatro primeros compases mantienen algo del tema. La sexta variación, la última, vuelve a los trinos del primer violín, después de los cuales asoman series incesantes de semicorcheas que se extienden por ocho compases. Estas son interrumpidas de súbito y en el compás 118, después de un silencio, vuelven los tresillos rítmicos de corcheas de la cuarta variación. Luego todo se va apagando hasta el pianissimo final en tonalidad de la bemol mayor. Scherzando Vivace en compás de 3/4 y tonalidad de mi bemol mayor, es el tercer movimiento, una pieza que incluye cambios de tempo, de tonos, de textura y enriquecido por pasajes polifónicos. Cuatro acordes en pizzicato abren la pieza a modo de fanfarrias. Luego en pianissimo el violonchelo solo presenta una serie de notas ascendentes en staccato que llevan a una parte en la que interpreta trinos. La viola responde en movimiento descendente. Luego entra el segundo violín y, cuatro compases después, el primer violín para imitarse en una secuencia de nota blanca seguida de un trino sobre negra. “Es un motivo rítmico un tanto rústico, en staccato, el que anima todo el movimiento”, según destaca

Tranchefort5. Añade este autor a propósito de este vivaz movimiento: “Un firme diseño de tres notas se interpondrá, desarrollado en staccato en el registro grave mientras que el violín esperará el agudo. Esta parte es retomada –antes de un desarrollo en cuatro períodos bastante breves: el ritmo se afirma al unísono en el primero, se aligera en el segundo, vuelve con obstinación en el tercero, lucha contra los bajos rugientes en el cuarto. Luego hay una especie de reexposición sobre el diseño de las tres notas, -seguido de una coda siempre sobre el mismo ritmo. Sin embargo, se desvanece para dejar lugar a un trío acelerado surgido en crescendo de notas repetidas (Presto) en la luz dulce, casi feérica de un mi bemol menor”6. Este Trio, en efecto, encierra un carácter dulce y mágico. Finalizado el Trio, regresa el scherzando, el cual, antes de su conclusión, incluye un breve recuerdo del aire dulce y mágico del Trio. Tras las honduras de los tres primeros movimientos, el cuarto es un testimonio de la alegría de vivir. Su tonalidad es la de mi bemol mayor y el compás es de 2/2. Posee la arquitectura de sonata bitemática, aunque su riqueza podría inducir a pensar que son tres los temas de esta pieza de aliento popular. El primer tema, de carácter amable, se inicia en el compás quinto. Más adelante aparece un tema puente que pronto se combina con el primer tema. Luego asoma un segundo tema de carácter contrastante por su condición rítmica. Un desarrollo 5 Ibidem. 6 Ibidem.

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rápido se da a partir del compás 97, que se presenta primero en do menor y después en la tonalidad de la bemol. La reexposición, en el tono principal, remata en un largo trino del violín en crescendo. Entonces aparece la coda o desarrollo final en el que cambian el ritmo (pasa a 6/8), el tempo (meno vivace), la tonalidad (do reemplaza al mi bemol mayor).

CARLOS GATTI MURRIEL

Profesor emérito de la Universidad del Pacífico, de la Universidad Antonio Ruiz de Montoya y de la Pontificia Universidad Católica del Perú.

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ILUSTRACIÃ&#x201C;N PERUANA

Orquesta Sinfónica Nacional de Chile Director: Helmuth Reichel Solista: Luis Alberto Latorre, piano

II CONCIERTO – CICLO SINFÓNICO 2019 Programa: E. Soro: Danza fantástica D. Shostakovich: Concierto para piano N° 2 P.I. Tchaikovsky: Sinfonía N°5

DOMINGO 11 DE AGOSTO 5:00 p.m. GRAN TEATRO NACIONAL

NOTA: • Este concierto sustituye la presentación de la Armenian National Philharmonic Orchestra, que fue inicialmente anunciada como parte de nuestro Ciclo Sinfónico. • Los socios y abonados podrán asistir a este concierto con sus mismos boletos. • En el caso de aquellas personas que hayan adquirido entradas individuales, podrán utilizar sus mismos boletos para esta presentación, canjear su entrada por otra ya sea para el concierto de Mischa Maiky & Slovenia Symphony Orchestra (miércoles 6 de noviembre) o Jordi Savall (jueves 14 de noviembre) o, en último caso, solicitar la devolución de su dinero en nuestras oficinas, previa coordinación.

Avi Avital L’arte del mondo orchestra

Programa: Piezas de Sammartini, Vivaldi, Felice dall’ Abaco, Bach, Mendelssohn, Bártok y de Falla.

SÁBADO 24 DE AGOSTO

7:45 p.m. AUDITORIO SANTA ÚRSULA

Venta de entradas

Hecho el Depósito Legal en la Biblioteca Nacional del Perú N° 2019-09553 Impreso en Tarea Asociación Gráfica Educativa, Pasaje María Auxiliadora 156 Lima 05, PERÚ Tiraje: 600 ejemplares Publicado en agosto de 2019

Diagramación: JUDITH LEÓN MORALES

La reconstrucción. 2017. Ramiro Llona

Informes Sociedad Filarmónica de Lima Porta 170 Of. 307, Miraflores Teléfonos: 4457395 - 2426396 informes@sociedadfilarmonica.com.pe www.sociedadfilarmonica.com.pe SociedadFilarmonicaDeLima/ @SociFilarmonica @sociedadfilarmonica