EL QUILOMBOO EDICIÓN ESPECIAL
13 de Octubre de 2010.
Publicación de Alianza Única del Valle A.C.
*A todos los vecinos y vecinas dignos y trabajadores de Naucalpan: *A los representantes de COPACIS: Nos dirigimos respetuosamente a ustedes saludando y apoyando sus legítimas exigencias y aprovechamos el espacio para compartirles lo que somos, lo que pensamos y lo que les proponemos en esta ocasión, consideramos les puede interesar: La Alianza Única del Valle es una asociación civil convertida en movimiento social, que luchamos por los derechos de la gente humilde y trabajadora de nuestro municipio, así como en los de Atizapán, Nicolás Romero y Jilotzingo. Estamos convencidos que la gente de abajo puede cambiar sus condiciones de vida para conseguir una mejor, tenemos derecho a esto, pero para conseguirlo es necesario organizarnos y movilizarnos. Pensamos que ya no debemos esperanzarnos en que los partidos políticos y sus candidatos van a venir a resolvernos nuestras problemáticas porque nos han demostrado a través de los años que la gente sólo les preocupamos en tanto son tiempos electorales, en
campañas nos prometen todo, llegan hasta a abrazar a las amas de casa en las colonias populares, pero cuando logran lo que se proponen ya no reciben a nadie en sus oficinas, niegan su palabra empeñada al pueblo para ya nada más darnos la espalda, darnos largas, darnos vueltas y vueltas sino es que hasta nos tratan con prepotencia. Y esto que quede claro lo hacen todos, es lo que hemos visto y vivido. Pero así como somos testigos de lo anterior, también comprobamos que si un vecino dirigía alguna petición a las autoridades muchas veces su documento terminaba en el cesto de la basura, pero si ya eran 10 los vecinos que solicitaban, por lo menos había respuesta aunque no necesariamente satisfactoria, si ya eran decenas los que se presentaban a las oficinas se nos atendía y empezábamos a obtener las primeras respuestas. Se trata de matemática simple, entre más seamos los que luchamos por nuestras exigencias, más fácil y rápido lograremos lo que propongamos. Esta fórmula de organización y movilización se la contraponemos a todos los gobiernos de todos los colores, porque no hay autoridad que aguante la presión de un pueblo organizado. Cabe señalar que somos participes de que la lucha social debe ser pacífica y muy enérgica porque la razón y el derecho están de nuestro lado, la gente digna y trabajadora no solemos solicitar cosas descabelladas, siempre exigimos a lo que tenemos derecho, ni nada más pero nada menos. Con la fuerza de la razón y la movilización se conquistan las demandas populares como: regularización, escrituración, pago justo por el servicio eléctrico, agua potable, obras públicas de distintas naturalezas, seguridad pública etc. etc. etc.