5. DISEÑO DE UN PLAN DE ACTUACIÓN INDIVIDUALIzADO

Como podemos observar, los dos cronogramas tienen semejanzas en cuanto a su estructura. Esto no son más que ejemplos, podemos encontrar muchos tipos dependiendo de lo que queramos alcanzar y aquello que mejor nos ayude a elaborar la representación.

Pero, independientemente de lo que queramos alcanzar, los cronogramas

siempre deben:

• establecer acciones que temporalizar.

• secuenciar las acciones: de lo global a lo particular o a la inversa.

• mostrar el periodo de tiempo en el que se van a desarrollar estas

acciones (meses, semanas, días, horas…). Esto dependerá de la concreción que tenga el cronograma.

Si observamos con detenimiento cada uno de los gráficos, podemos observar que hay una diferencia importante entre uno y otro. Los dos son cronogramas porque los dos secuencian actividades o tareas que hay que llevar a cabo pero, uno lo hace globalmente (temporaliza la acción tutorial completa) y el otro, temporaliza una sesión concreta de acción tutorial (en este caso, la primera). La gran diferencia se encuentra en el nivel de generalización de las actividades que se desarrollan en cada uno de ellos. Como podemos apreciar, en el primer cronograma las acciones son de planificación general mientras que, en el segundo, se planifican acciones concretas y puntuales.

Para finalizar este apartado debemos saber que es muy importante establecer una temporalización para prever las acciones que se van a llevar a cabo. Esto nos permite conocer como vamos a alcanzar las metas propuestas y que vamos a necesitar para ello. El buen profesional de orientación debe siempre planificar teniendo muy en cuenta el tiempo disponible.

5. DISEÑO DE UN PLAN DE ACTUACIÓN INDIVIDUALIzADO.

La actuación individualizada en el marco de la tutoría se extiende como un paso necesario en el conocimiento de los alumnos y en la forma que tienen de establecer las estrategias de aprendizaje. Permite el acercamiento, el encuentro y la oportunidad de compartir espacios más íntimos en los que el alumno pueda sentirse libre para transmitir al profesor-tutor aquello que le preocupa, aquello que no sabe cómo resolver o aquello con lo que se encuentra realmente satisfecho.

IMPORTANTE

El objetivo general de la atención individualizada en el marco de la acción tutorial es facilitar el desarrollo de los recursos o potenciación de los mismos para garantizar una serie de competencias en el alumno que le permitan resolver problemas, tomar decisiones y evaluar de forma crítica el procedimiento que ha seguido y los resultados obtenidos. El plan de actuación individualizado utiliza como instrumento de recogida de información las reuniones entre tutor y alumno. En estas reuniones (=entre-

vistas) el tutor debe extraer la máxima información del alumno y establecer con él el procedimiento de aprendizaje de estrategias que le permitan desarrollarse personal y profesionalmente. esto conlleva la

planificación de varias sesiones de trabajo en las que se intentarán facilitar herramientas para la capacitación de una búsqueda autónoma de estrategias que permitan ese desarrollo.

El plan de actuación individualizado pretende:

• recabar información del alumno: conocimientos, experiencias, situación familiar, expectativas profesionales, dificultades económicas, etc.

• Detectar posibles dificultades para poder establecer las necesidades del alumno.

• conocer el nivel de motivación, autoestima y expectativas de los alumnos.

• conocer la atribución causal que generalmente atribuye a los he-

chos. Nos referimos a la explicación que el alumno da del porqué se producen ciertas situaciones conflictivas o incómodas. Hablamos de atribución causal externa cuando todo lo que ocurre es causado por otros (el alumno no se responsabiliza) y atribución causal interna, en la que el alumno considera que todo lo que sucede es causado por su comportamiento, actitud o aptitud (se hace único responsable).

• conocer su rol dentro del grupo y el nivel de participación dentro de éste.

“El plan individualizado de orientación permite optimizar la eficacia de las actividades que una persona pone en marcha para conseguir su inserción profesional”. AUPEx (2004) (p. 39).

• asesorar al alumno en cuantos temas sean necesarios para alcanzar el desarrollo autónomo.

Para lograr el clima de confianza es necesario que el tutor, en primer lugar, explique al alumno qué es una acción tutorial y qué es un plan de actuación individualizado, los objetivos que pueden alcanzarse y la necesidad de establecer unas pautas y un compromiso inicial por ambas partes. Para ello, es necesaria la existencia de una actitud empática por parte del tutor, una muestra constate de ayuda y colaboración. Es importante tratar también el carácter voluntario que presenta esta acción. Esto significa que el alumno debe estar de acuerdo en el proceso que se va a iniciar como primera garantía para conseguir un resultado positivo.

Una vez que se ha logrado, generalmente en la primera sesión, en las siguientes se debe comenzar a implementar el plan individualizado que, convenientemente ha debido se consensuado en la primera reunión. Este plan debe recoger aquellos aspectos considerados de interés para que el alumno sea capaz de alcanzar por si mismo el conocimiento y uso de estrategias de aprender a aprender. El alumno, debe sentirse el protagonista de este plan de acción y debe implicarse y comprometerse en su desarrollo.

La implementación de la planificación puede hacerse en una o varias sesiones. No debemos estandarizar el proceso y establecer las mismas sesiones para todos los alumnos. El número dependerá de las necesidades y de la complejidad que la situación requiera.

Un plan de atención individualizada debe finalizar haciendo balance del proceso seguido. Es recomendable hacer una comparativa entre la situación inicial (antes de comenzar la acción tutorial) y la situación actual para ser consciente de los logros alcanzados.

Un plan de actuación individualizado debe finalizar con:

• Revisión del cambio producido.

• Establecimiento de metas futuras alcanzables.

• Valoración de los beneficios conseguidos.

Ventajas de la orientación individual

Desventajas de la orientación individual

• Adaptada a las necesidades del alumno. • Flexible. • Acercamiento y relación más estrecha entre tutor y alumno. • Se logra la empatía en ambos. • Se fomenta la autonomía. • Ausencia de experiencias grupales. • Oportunidades limitadas para compartir con otros. • Reducción del feed-back.

Para alcanzar los objetivos anteriores, en el plan de actuación individualizada, podemos abordar los siguientes contenidos:

• Conocimiento de sí mismo y del contexto en el que se encuentra.

• Nivel de autoestima.

• grado de motivación.

• Procedimientos y habilidades: ¿cómo puedo hacerlo?

• Conocimientos sobre el desarrollo personal y profesional.

• Recursos propios y ajenos.

BÚSQUEDA DE SOLUCIONES

Son muchas las dificultades que podemos encontrarnos en la implementación de un plan de actuación individualizado en el marco de la acción tutorial. La que

primero podemos apreciar es el carácter voluntario o no de asistencia a las sesiones de tutoría. En muchas ocasiones ocurre que el alumno acude porque no tiene otra opción. Puede ocurrir entonces que el alumno descubra lo interesante que puede resultar aprender estrategias de este tipo o, por el contrario, que acuda “renegado”, desmotivado y muestre desinterés constante.

Otra dificultad con la que podemos encontrarnos es la generalización sistemática que se hace de las informaciones recibidas. Esto provoca ausencia de análisis de la información y pérdida de elementos clave para su comprensión.

También puede ocurrir lo contrario y resultar ser también otra limitación de la orientación individual: sesgo de la información. Ahora, el alumno selecciona aquella información que le resulta relevante sin contemplar otros elementos de la misma. Esto provoca la ausencia de información clave.

Compleja es la barrera que puede acechar la tutoría cuando el alumno toma decisiones orientado únicamente por los sentimientos que presenta. Esto hace que las decisiones no se sopesen, no se razonen y se actúe con precipitación. Indudablemente el riesgo que esta situación provoca es muy alto y los resultados son nefastos en el desarrollo del alumno.

Para hacer frente a estas y otras dificultades, es necesario que el tutor adopte una posición atenta en todo momento en la interacción con el alumno. Así podrá ser consciente de aquello que distorsiona la realidad del alumno y conocer aquellos mecanismos que le invitan a ello.