Caminos de la autonomĂa Bajo la tormenta 13 de marzo de 2019
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Cien días de claridad Gustavo Esteva
La inmensa popularidad de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) al cabo de 100 días de gobierno se nutre de muy diversas fuentes: su nomadismo, su sencillez y sentido del humor, su lucha contra la corrupción y muchas más. Lo que más cala en la gente, empero, es que cumpla su promesa de ocuparse de los pobres. Millones reciben ya recursos que les hacían mucha falta y sienten que vienen más. Es una política sumamente popular. No le faltará ese impulso. Puede durarle los seis años, a menos que se agoten los recursos que hoy se derraman sin desequilibrar el presupuesto, gracias a la austeridad y la lucha contra la corrupción. Y no faltará, porque multiplica transferencias financieras para atender a los pobres y a la vez aumenta acciones para crearlos. Mientras alivia la grave situación de algunos creará otros, pues se apoyará sobre todo en la inversión privada, incluso en Pemex, como acaba de declarar el jefe de gabinete, y seguirá el patrón del desarrollismo convencional, que ha sido siempre fábrica de pobres. Quizás seguirá la austeridad de Ruiz Cortines o el desarrollo estabilizador, de Ortiz Mena, que tanto le atrae y culminó en el 68. López Obrador mantuvo la calma durante el episodio de las “calificadoras”, que provocó reacciones tan torpes como ansiosas de gente de sus propias filas. No le preocupan, porque sabe que pronto certificarán que el capital aprecia el valor de su política. No es solamente que cumplirá los mandatos neoliberales básicos: estabilización macroeconómica, liberalización del comercio y la inversión y expansión de las fuerzas del mercado. También recompondrá el estado de derecho, aunque no podrá ni querrá restablecerlo por completo. No se apartará de esa ortodoxia, de la que forma parte atender a los pobres mediante transferencias que los incorporan al consumo. La política por la que mucha gente lo clasifica aún en la “izquierda” es la que apela al Estado, más que a las fuerzas del mercado, para conducir la economía y atender necesidades sociales. Lo inspira una especie de dirigismo cardenista, que estaría devolviendo a los aparatos estatales la dignidad de un compromiso social y político con las clases populares y la justicia. 1
En realidad no está rompiendo con la ortodoxia ni puede regresar al pasado. En la sociedad capitalista, el Estado tiene como función principal crear y administrar los mercados y corregir los errores y excesos del capital. Por corrupción y por incompetencia, los gobiernos recientes dejaron de cumplir esa tarea y crearon el actual desastre. López Obrador está evitando el naufragio… pero en el mismo barco. Nada de lo que ha hecho o dicho puede considerarse anticapitalista. Al contrario. Es una postura realista. En las condiciones actuales del mundo no parece posible que los gobiernos asuman otra política. Hay muchas variantes en la forma de hacerlo, pero hasta los más “progresistas” tienen que hacer compromisos con el capital y la ortodoxia financiera. Los de AMLO lo enfrentarán cada vez más con un amplio sector de la población. No está claro cómo manejará las confrontaciones y rupturas que ya se observan. El nuevo gobierno no parece haber tomado en cuenta las propensiones actuales del capital al despojo ni su ímpetu destructivo, que arrasa todo a su paso. Pasó ya la era en que algo como el desarrollo estabilizador era viable. Muchos grupos, particularmente los pueblos indios, resistirán por todos los medios a su alcance el desarrollo capitalista depredador que se les promete como solución de todos sus males. No sólo amenaza sus territorios y todos los bienes comunes, sino también y sobre todo sus modos de vida. La política oficial consiste expresamente en “incorporarlos” a otra forma de vivir, que considera superior. No se trata de un choque de trenes que los conductores puedan evitar. Es una lucha abierta y múltiple en que un número creciente de personas sabe que luchar hoy por la supervivencia es necesariamente luchar contra el capital. Desde muy diversas posiciones y condiciones, tengan o no conciencia clara de lo que están haciendo, resistirán y enfrentarán lo que se les quiere imponer, defendiendo ante todo sus vidas y territorios. Los 100 días dejan claro, entre otras muchas cosas, que el nuevo gobierno no parece dispuesto a entender que mucha gente, precisamente aquella que cree estar beneficiando, no comparte sus convicciones y compromisos. L ejos de ver sus grandes proyectos como una bendición, los resiente como amenaza. Son ya posiciones antagónicas. 2
Están de moda las referencias históricas. Quizá valga la pena recordar una pertinente. El 24 de septiembre de 1913, en Hermosillo, Venustiano Carranza advirtió: “Sepa el pueblo de México que, terminada la lucha armada [...] tendrá que principiar formidable y majestuosa la lucha social, la lucha de clases”. No ha terminado la lucha armada que padecemos, muy poco revolucionaria, ni empieza ahora la lucha social. Pero sí ha entrado en una nueva fase, tan intensa como peligrosa. gustavoesteva@gmail.com
Apagón en Venezuela Luis Hernández Navarro
Sabotaje es el nombre del juego. Guerra eléctrica es su modalidad. Desde la tarde del 7 de marzo, Venezuela vivió un apagón que dejó sin electricidad 18 estados de ese país, más de las dos terceras partes de su territorio. El control automatizado de regulación del sistema de la Central Hidroeléctrica Simón Bolívar (Guri) fue atacado. La planta que abastece buena parte del territorio venezolano (la cuarta central hidroeléctrica más potente del mundo) sufrió una agresión cibernética. Fueron intencionalmente dañados también tres de los cinco generadores de respaldo. Casi todo el país quedó a oscuras. Y cuando el sistema eléctrico había logrado ser restablecido en 70 por ciento, volvió a sufrir embestidas electromagnéticas y cibernéticas. El presidente Nicolás Maduro informó que fueron atacadas 150 subestaciones del país. Los venezolanos aguantaron en calma las penurias provocadas por los cortes. Miles de chavistas salieron a las calles el pasado sábado para repudiar los atentados. El mandatario ubicó la agresión como parte de una “guerra eléctrica anunciada y dirigida por el imperialismo estadunidense”. Menos de tres minutos después de la agresión, Marcos Rubio, senador estadunidense por Florida y orquestador central de la guerra contra la nación caribeña tuiteó: “ALERTA: Informes de un apagón en todo #Venezuela en este momento; 18 de los 23 estados y el distrito capital se enfrentan actualmente a apagones completos. Aeropuerto principal también sin energía y generadores de emergencia han fallado”. 3
Curiosamente, en ese momento las autoridades no habían informado aún sobre el daño de los generadores de emergencia. Como si fuera el secretario de Estado de Venezuela y no de Estados Unidos, Mike Pompeo tuiteó: “No hay comida. No hay medicinas. Ahora no hay electricidad. Lo próximo, no habrá Maduro”. Y horas después (el 8 de marzo, pasadas las 5 de la tarde), el mismo Marco Rubio lanzó un nuevo mensaje: “La falla eléctrica en todo el país, en Venezuela que ahora está en su hora 25 está causando daños económicos devastadores a largo plazo. En un abrir y cerrar de ojos, toda la capacidad de producción de aluminio del país fue destruida por los daños causados por el apagón”. Elliott Abrams, el enviado especial para Venezuela de Donald Trump, señaló que “el apagón nacional en Venezuela es un recordatorio de que la infraestructura ha sido saqueada y se ha deteriorado bajo la mala administración de Maduro”. Negó que la causa de los problemas de ese país sean las sanciones impuestas por Estados Unidos. Para no desentonar con el coro de sus patrocinadores, el presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, dijo que el apagón se mantendría hasta el “cese de la usurpación”. Y, ya encarrerado, no descartó invocar el artículo 187 que autoriza la injerencia militar exterior en Venezuela “cuando llegue el momento”. Es decir, volvió a abrir la puerta a la invasión armada de su país por potencias extranjeras. Jorge Rodríguez, ministro de Comunicación e Información, denunció el sabotaje y lo ubicó como parte de la “arremetida brutal de la administración de Donald Trump”, contra el pueblo venezolano. “Vamos a presentar ante las instancias internacionales –dijo– los tuits de Pompeo, de Guaidó y de Rubio”. El senador de Florida le respondió irónico, ofreciendo disculpas por haber “presionado mal la aplicación de ataque electrónico que bajé de mi Apple”. El sabotaje eléctrico es el último eslabón del asalto estadunidense a Venezuela, después de su fracaso el pasado 23 de febrero, al tratar de dividir al ejército y establecer una cabeza de playa dentro del territorio nacional para el gobierno paralelo de Juan Guaidó, con el pretexto de la “ayuda humanitaria”. 4
Esta larga cadena de agresiones estadunidenses contra una nación soberana ha provocado una paradoja. Aunque la derecha venezolana encabezada por Guaidó tiene presencia social (y una relativa capacidad de movilización), y está envalentonada por el respaldo de Washington, vive su peor momento. Se ha liquidado a sí misma como fuerza política al asumirse explícitamente como una fuerza anexionista, absolutamente subordinada a la órbita imperial estadunidense. Ha perdido legitimidad ante otros sectores opositores que juzgan inadmisible la subordinación ante los capitales gringos, y que quieren que su país sea independiente. No le reconocen al autoproclamado liderazgo alguno. El antichavismo se ha vuelto especialista en lanzar bumeranes políticos que se le revierten. En 2017, perdió legitimidad y adhesión cuando su estrategia de montar guarimbas para forzar la salida de Nicolás Maduro llevó la violencia a los mismos barrios opositores que lo apoyaban. Hoy, esa tendencia se profundiza al soñarse como vasallos de Miami y volverse instrumento de la Doctrina Monroe contra la Doctrina Bolivariana. Al justificar el sabotaje eléctrico a pesar de los graves daños que provoca, y convertirse en peón de la estrategia imperialista de Estados Unidos para adueñarse del petróleo venezolano y acabar con la soberanía nacional, la oposición venezolana se suicidó. Twitter: @lhan55
Telesur y la ruptura del cerco comunicacional Carlos Fazio
Desde la llegada de Hugo Chávez al gobierno, y con mayor profusión desde 2014 a la fecha, Venezuela ha sido sometida a un brutal y sostenido asedio manipulador (des)informativo, cuyo principal objetivo es generar un cambio de régimen e imponer un gobierno al servicio de Estados Unidos. En ese lapso se han venido utilizando distintas nociones para analizar el hecho: guerra no convencional, guerra sicológica, bloqueo informativo, terrorismo mediático, guerra de cuarta generación, guerra híbrida, guerra en redes. En cualquiera de esas variables, es un hecho que la comunicación adquirió categoría militar. Y como nunca se ha estado tan cerca de una situación bélica real. 5
Los hechos del 23 de febrero (23/F), definidos por la administración Trump como el enésimo “Día D” para derrocar al presidente constitucional y legítimo Nicolás Maduro, dejan varias enseñanzas sobre la batalla comunicacional. Y en ella Telesur jugó un papel fundamental, desarticulando en tiempo real, con una serie de registros audiovisuales y a través de la cuenta de Twitter de su reportera Madelein García, las operaciones de bandera falsa y la tergiversación mediática reseñada por los medios hegemónicos desde la frontera entre Colombia y Venezuela, con motivo de la pretendida entrada al país de “ayuda humanitaria” de la Agencia Internacional para el Desarrollo de Estados Unidos (Usaid), que desde 1961 ha sido usada por la Agencia Central de Inteligencia (CIA) como una de sus armas más poderosas para sus intervenciones encubiertas. En el argot militar, las operaciones de bandera falsa son las que realiza una potencia agresora de forma clandestina, en aras de parecer agredida y culpar al enemigo. Desde el incendio en el edificio del Reichstag, sede del Parlamento alemán, en el ascenso del nazismo en 1933, hasta el supuesto ataque químico en Duma, cerca de Damasco, en Siria, adjudicado al gobierno de Bashar Assad en 2018, pasando por el montaje escenificado por el secretario de Estado, general Colin Powell, en el Consejo de Seguridad de la ONU en 2003, sobre las supuestas armas de destrucción masiva de Saddam Hussein, las falsificaciones han sido de uso corriente y ahora tocó el turno a Venezuela. El caso de los dos camiones con presunta “ayuda humanitaria” de la Usaid, incendiados con cocteles molotov en el puente internacional Francisco de Paula Santander el 23/F, del lado colombiano y por grupos violentos de la oposición venezolana bajo el visto bueno de la Guardia Nacional colombiana, fue adjudicado por el vicepresidente de EU, Mike Pence, y el Departamento de Estado de Michael Pompeo al “tirano” Maduro. Asimismo, el asesor de Seguridad Nacional del presidente Trump, John Bolton, dijo que Maduro contrató criminales para quemar alimentos y medicamentos, y en igual sentido se pronunciaron en Twitter el senador Marco Rubio y el diputado Juan Guaidó. La operación de bandera falsa dio la vuelta al mundo, pero no habría funcionado si de tiempo atrás no se hubiera posicionado la matriz de opinión “Maduro dictador” y la idea de una “catástrofe humanitaria” en 6
Venezuela. La elección de una fecha simbólica para las bases chavistas: el 23 de febrero y de Cúcuta como cuartel general de la provocación, incluido el concierto Venezuela Aid Live para sacar a la oposición de sus catacumbas virtuales y movilizarlas a la frontera colombovenezolana −con artistas, comunicadores y líderes de opinión actuando como influencers vía Internet y redes sociales− fue planificada para encubrir el intento de establecer una cabeza de playa en el estado de Táchira, a la manera de un “territorio liberado” donde instalar un “gobierno paralelo” y fomentar una guerra fratricida. El eje informativo de todos los canales tradicionales y digitales del mundo occidental siguió y viralizó la trama del montaje golpista de la escuadra Trump-Rubio-Pompeo-Bolton-Abrams, como parte de una campaña de intoxicación propagandística propia de la guerra sicológica que apuntaba a generar una emocionalidad negativa colectiva: promover rabia e ira contra el gobierno de Maduro. Es decir, estimulando una afectividad automática, y afectando la capacidad de discernimiento y razonamiento de las audiencias. Pero desde el lugar de los hechos el día del “ultimátum”, el equipo de Telesur (Madelein García y Frank Guzmán) recopiló las evidencias y desmontó la operación de bandera falsa que adjudicaba a miembros de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) la quema de los camiones. Pocas horas después, tras remover las cenizas, un miembro de la GNB explicó a García que parte de la “ayuda” de las gandolas/trampa contenía guayas (cables), pitos, máscaras antigás, miguelitos (clavos), es decir, todo un kit para fomentar las guarimbas (violencia callejera). La frustración emocional de Marco Rubio quedó exhibida cuando, tras mostrar una foto de Muamar Gadafi ensangrentado, incitó al magnicidio de Maduro. Junto con enviados de Misión Verdad y de la Agencia Prensa Rural, es evidente que la batalla comunicacional se la ganó Telesur a los enviados de CNN, Fernando Ramos y Fernando del Rincón. El 10 de marzo, mientras Venezuela era sometida a un ataque cibernético y electromagnético a las líneas de transmisión de la represa de Guri, que generó un apagón de 72 horas, The New York Times admitió que los camiones fueron quemados por los vándalos de Guaidó financiados por Washington. 7
Concejo de Ancianos denuncia manipulación de asambleas en Oaxaca Redacción Desinformémonos - 12 marzo 2019
El Concejo de Ancianos de Álvaro Obregón, Oaxaca, denunció que autoridades estatales del Partido Revolucionario Institucional (PRI) “trataron de montar una asamblea falsa en l parque de la comunidad” para imponer a Jacinto Alonso Jiménez, operador político del presidente municipal Emilio Montero, el pasado 10 de marzo. Además, acusaron la campaña de desprestigio a su movimiento, el cual lleva más de 6 años en trabajos de defensa y protección de los bienes naturales y culturales como pueblos originarios “sin ninguna remuneración, ya que todo el dinero que se destina a esta agencia municipal cae en manos de los políticos que quieren seguir controlando nuestras comunidades”. A continuación el comunicado completo:
El Concejo de Ancianos de Álvaro Obregón, Oaxaca denuncia manipulación de asambleas:
El día de hoy el Presidente Municipal Emilio Montero estuvo en nuestra comunidad , mostrando su apoyo a Jacinto Alonso Jiménez, por la mañana trataron de montar una asamblea falsa en el parque de la comunidad para imponer a su operador que es Jacinto Alonso Jiménez, a lo que los compas del Concejo de Ancianos, la Asamblea Comunitaria y el Concejo de Ancianos de Gui’ Xhi’ Ro’ les pidieron que no lo hicieran para evitar un conflicto mayor. Por la tarde de hoy llegaron los distintos grupos que controlan los partidos en Álvaro Obregón con César Vicente filial al PRI, y Jacinto Alonso Jiménez que se hace llamar independiente, pero bien sabemos que es el operador político de Emilio Montero Pérez en la comunidad , y pertenece a la jauría de estos políticos jóvenes que parecen ovejas, pero son controlados por los viejos lobos que ya conocemos, se reunieron , y posteriormente Emilio Montero Pérez salió de la comunidad. Nosotrxs El Concejo de Ancianos, La Asamblea Comunitaria del Pueblo de Álvaro Obregón y el Cabildo Comunitario nos deslindamos 8
de los acontecimientos sucedidos el día de hoy a Emilio Montero, y denunciamos la campaña de desprestigio a nuestro movimiento, recordando que llevamos más de 6 años defendiendo y protegiendo nuestros bienes naturales y culturales como pueblos originarios sin ninguna remuneración, ya que todo el dinero que se destina a esta agencia municipal cae en manos de los políticos que quieren seguir controlando nuestras comunidades. Al igual que nuestros hermanos en resistencia del pueblo Ikoots de San Dionisio del Mar, exigimos que Gloria Sánchez, Héctor Sánchez, Emilio Montero y toda la jauría deje de provocar y mentir sobre las decisiones de nuestras comunidades. Desde hace 6 años hemos decidió caminar y autogobernarnos de manera autónoma e independiente al sistema electoral de partidos políticos. Seguimos exigiendo el respeto a las decisiones que como pueblo hemos tomado. Desde las lagunas costeras de los Pueblos Mareños !La tierra , el mar y el viento no se venden, se aman y se defienden!! CONCEJO DE ANCIANOS DE GUI’ XHI’ RO’ ASAMBLEA COMUNITARIA DE GUI’ XHI’ RO’ CABILDO COMUNITARIO DE GUI’ XHI’ RO’ Asamblea de los Pueblos Indígenas del Istmo en Defensa de la Tierra y el Territorio ,(APIIDTT)
Las Flores en el Desierto, la voz de las mujeres en resistencia, son la voz de la tierra Sofía Herrera - 12 marzo 2019
Lo que se presenta en este libro, Flores en el desierto, son las historias de diez mujeres voceras del Concejo Indígena de Gobierno, iniciativa del Congreso Nacional Indígena para proponer a Marichuy (mujer indígena nahua) como candidata de los pueblos a la presidencia del país. Son historias que tienen muchas cosas en común: enfrentarse al racismo, la represión por defender sus territorios, la violencia que han 9
enfrentado de distintas formas y en distintos momentos contra los proyectos de despojo del gobierno y los poderosos, pero también contra el machismo que permanece en todas las comunidades. Rocío, Magda, Sara, Bettina, Gabriela, Myrna, Osbelia, Lucero, Lupita y Marichuy, mujeres de los pueblos comca’ac, yoreme, coca, binnizá, nahua, tsotsil, mazahua, maya y kumiai, comparten la historia de cárcel por luchar por la tierra, como el caso de Rocío y los comuneros, que se repite en la violencia y la persecución que han sufrido otras concejalas y las comunidades, tribus y pueblos a los que pertenecen. Sus testimonios nos recuerdan una y otra vez que el sistema en el que vivimos, el capitalismo, es un sistema ecocida, asesino de la vida, que necesita destruir la naturaleza para crecer. Es machista explotando el trabajo humano, y el de las mujeres doblemente en los hogares con montones de trabajo no pagado; es racista porque en cada historia se refleja que en este país se sigue atacando y obligando a olvidar la cultura y las historias de los pueblos indígenas. En las historias de las flores en guerra que emergen en este libro, lo que realmente aparece son las historias de las resistencias de sus comunidades en defensa de su territorio, sus luchas colectivas que a tantas nos han inspirado para seguir peleando en otros lugares y territorios. En este libro, Gloria Muñoz no solo hace retratos entrañables de diez mujeres, sino de muchas más, madres, tías y abuelas que son parte fundamental en las vidas de las concejalas porque han sido ejemplo, guía y camino para ellas. Mujeres insumisas y desobedientes que prepararon la tierra en la que hoy nos toca sembrar y hacer nacer mundos nuevos. Las historias y los testimonios de estas mujeres nos comprometen a todas las demás, son un llamado a que nos organicemos o continuemos fortaleciendo nuestras organizaciones para defender el territorio, la dignidad, la vida toda: • En el libro queda claro cómo las mujeres dan vida a las comunidades encargándose de la comida, de los niños, pero además yendo adelante en los procesos de resistencia contra los poderosos. Porque entienden que sin tierra no hay vida y no hay comunidad. Las mujeres en muchos territorios son la esperanza. • A través de sus voces hablan también las montañas, el agua del mar y la laguna, la isla, las piedras, los animales y plantas, el viento, los espíritus 10
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del cerro y el bosque, todo lo no humano en lo que los poderosos, los capitalistas, solo ven recursos y dinero, y ellas se ven a sí mismas. Con las Flores recordamos que hacia las mujeres siempre ha habido ataques del Estado-gobiernos, del capital, de los poderosos… pero también que la mujer ha sido protagonista de la resistencia, de asegurarse del sustento de la comunidad, de la lucha contra la privatización y destrucción de la tierra, contra proyectos de minería, de construcción de fraccionamientos y carreteras sobre sus bosques… Y también de la lucha para recuperar los saberes que han sido destruidos, como los de las medicinas tradicionales y la labor de las parteras, la memoria de los saberes de nuestras abuelas y tatarabuelas, el trabajo colectivo, luchando contra las formas individualistas, racistas y competitivas. Cada testimonio contenido en el libro reivindica la participación de las mujeres como algo fundamental en la continuidad de las formas de la reproducción de la vida en comunidad y demuestran que no existe posibilidad alguna de defender la tierra sin las mujeres; sin su inteligencia, su coraje, su valentía, sus corazones alegres y amorosos. Gloria y las flores en el desierto nos recuerdan que la historia y el amor son muy importantes en la lucha por el territorio. Y es que las palabras de las concejalas nos hablan de que las luchas de los pueblos se construyen en los tejidos de los afectos, donde el amor, la reciprocidad, el cariño con la comunidad, con la tierra, con nuestra historia y nuestros muertos; el apego entre las y los integrantes de la comunidad que más allá de la sangre, se construye por la historia, la memoria, y el territorio común, y que dan la rabia para superar el miedo a defender la tierra. Nos hablan de que sin memoria histórica estamos perdidas, y que esa memoria se construye en comunidad, así como solo en colectivo se puede sostener la resistencia frente a todas las formas de despojo. Como dice Gabriela de su pueblo los Comca´c: “te instruye tu clan y te cuenta historias de antes para que no traiciones a tu pueblo y no te vendas, para que veas por el bien de la comunidad”. Nos dicen que reconstruir y recuperar la historia, como lo hace Rocío con sus talleres, es lo que da sustento y construye a la comunidad y sus luchas. Porque la tierra es donde tus muertos son sepultados, y ahí está el tejido de nuestras historias; por eso, cuando te despojan de la tierra, te roban tu historia, tu cultura y tus muertos. Nos dicen todas de algún modo, que el horizonte se ve nublado y por 11
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eso hace falta aprender a escucharnos, articular las rebeldías y resistencias, construir desde los pueblos y barrios de las ciudades, organizarnos en todo el país antes de que esta tormenta de guerra termine por arrasarnos. Las voces que se reúnen en este libro nos muestran que no es posible pensar en una vida digna y sin violencia contra las mujeres sin derrotar al racismo. Que no será posible la construcción de una forma de vida diferente si no se destruye el machismo y no se tienen en cuenta los aportes de las mujeres en las luchas en defensa de la tierra, de la vida, dignidad y libertad para todas y todos. Las concejalas y sus compañeras en los pueblos son las que trabajan en las fiestas, alimentan a quienes se movilizan y son las que también se movilizan, son el centro de los tejidos colectivos de las comunidades contra el despojo. Las flores de la laguna, de la Isla y la sierra de Mezcala que defienden su territorio.
Este libro es un documento histórico invaluable. No solo porque documenta voces de mujeres que denuncian proyectos de despojo, violencia, represión, corrupción, racismo, discriminación, explotación, devastación ecológica, sino, sobre todo, porque guarda testimonios de esperanza en medio de una guerra que quiere imponernos la muerte en todos los espacios de la vida. La defensa que las mujeres hacen del territorio como espacio de vida, cultura, historia y símbolos, es una lucha central. Y como ha señalado otra mujer (Silvia Federici), en muchas partes del mundo, las mujeres son las que se han resistido con más determinación a la venta de la tierra porque saben que ahí está la seguridad para el futuro, y no en el dinero, que la tierra garantiza la vida de la comunidad, y que sin ella no hay vida, y las Flores en el Desierto son una clara muestra de ello. Por todo esto, para mí, leer las Flores en el Desierto ha sido como la experiencia refrescante y sanadora de quien se regala a sí misma el tiempo de admirar la vida -y mirarse- en el reflejo del agua cristalina de un arroyo tranquilo en medio del bosque, aun cuando todo alrededor le grita que no hay tiempo, que ya no tiene caso. Recuperando una de las frases más queridas por Gloria, (y dicha por el escritor John Berger) “la resistencia está en saber escuchar a la tierra”, y yo creo que las flores en el desierto, la voz de las mujeres en resistencia, es la voz de la tierra. Así que nos toca escuchar y aprender para luego unir nuestra voz a la suya e intentar hacer, de algún modo, más caminos juntas. Mezcala, marzo de 2019 12
Pueblos declaran a AMLO “persona no grata en Morelos por incumplir su palabra” Redacción Desinformémonos - 12 marzo 2019
El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) fue declarado “persona non grata” en Morelos por la Asamblea Emergente Nacional ante la Violencia de Estado y la Autodeterminación de los Pueblos “por incumplir su palabra empeñada en 2014”, cuando se pronunció en contra de la termoeléctrica en Huexca, cuyo gobierno ahora impulsa.La Asamblea, que el fin de semana reunió a pueblos, ejidos, organizaciones y colectivos indígenas, aseguró que la llegada de AMLO a la presidencia “no está significando un cambio de política”, sino que, por el contrario, “significa la continuidad del neoliberalismo en detrimento de nuestros derechos y territorios”. Denunció que cumplidos los cien primeros días del gobierno de AMLO “siguen asesinando a los defensores de derechos humanos, periodistas y comunicadores indígenas”, así como “se siguen impulsando nuevos proyectos de destrucción como el Tren Maya y el Corredor Transístmico en Oaxaca”, al igual que el Proyecto Integral Morelos (PIM), que incluye dos termoeléctricas, un acueducto y un gasoducto. “Con rabia vemos que el poder cambia de color, pero no de preferencias, el capitalismo sigue siendo el rey-gobierno que pretende acabar con los territorios de los pueblos originarios para convertirlos en mercancía a través de la explotación y destrucción de la vida”, indicó la Asamblea, integrada por Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra y Agua Morelos Puebla Tlaxcala y la Asamblea de la Resistencia de Amilcingo, entre otras. De la misma forma, exigió “la destitución del Delegado en Morelos Hugo Erik Flores y la atracción del caso de Samir por la Fiscalía General de la República”, luego de que el activista, opositor de la termoeléctrica en Huexca, fuera asesinado el pasado 20 de febrero en su domicilio. Los pueblos, organizaciones y ejidos convocaron a varias movilizaciones y acciones para manifestar su rechazo a la política de AMLO que atenta contra los derechos de los pueblos indígenas, entre las que se encuentran sumarse al una movilización nacional e internacional “cuyo epicentro será en Chinameca”, donde fue asesinado Emiliano Zapata. “No permitiremos 13
que la muerte de nuestro caudillo del sur sea insultada con la presencia de quien busca impulsar los proyectos de muerte en tierra zapatista”, señalaron. Además, acordaron “luchar por la cancelación del PIM y todos los megaproyectos de despojo que se están imponiendo por el gobierno de AMLO” y exigir justicia por Samir Flores, así como llevar a cabo las siguientes acciones: a) Reunión de solidaridad con Amilcingo y los pueblos afectados por el PIM y justicia para Samir, el 23 de marzo de 2019 en la Ciudad de México b) Congreso de Pueblos el 7 de abril en Anenecuilco, Morelos c) Impulso de la campaña nacional: Yo prefiero tierra y libertad, donde buscamos conjuntar todas las luchas y demandas que a nivel nacional siguen floreciendo en nuestro país contra el neoliberalismo salvaje, por lo que llamamos a todos los pueblos, comunidades, ejidos, organizaciones, colectivos y personas en general que, asuman esta campaña y consigna como propia y de todos nosotros. d) Fortalecer la lucha del campamento zapatista en Apatlaco, Morelos y las comunidades afectadas por el Proyecto Integral Morelos Por último, indicaron que todo el país debe articularse “para defender, como hace cien años, la vida, la tierra, el agua, los cerros, montes y el futuro de nuestros hijos”. “Nosotros, nosotras estamos seguros que si Zapata viviera en esta asamblea estuviera, somos los herederos de Zapata y como tal somos los que seguiremos defendiendo este país del terrateniente neoliberal”, aseguraron.
Autodefensas de abajo, sentido común de los pueblos Raúl Zibechi - En Movimiento
La Guardia Indígena del Cauca, nacida más de dos décadas atrás para defenderse de las incursiones de paramilitares, militares y guerrillas, marcó un hito en la historia reciente de esas formas de garantizar la vida de los pueblos. Fue reorganizada en grandes asambleas de los pueblos nasa y misak y cuenta con alrededor de 3.500 guardias elegidos por sus comunidades, en 18 cabildos o territorios ancestrales. 14
Prestan servicio varones y mujeres de 12 a 50 años, no sólo se defienden de enemigos externos, usando sus bastones de mando, eligen coordinadores y prestan gran atención a la formación y la educación de sus miembros, que tiene como una de sus tareas centrales aplicar la justicia comunitaria como forma de mantener la armonía en los pueblos. Una década atrás surgió la Guardia Cimarrona entre los pueblos negros de Colombia, inspirada en la historia de libertad y resistencia territorial del palenque. Ahora que las FARC dejaron las armas están apareciendo otros grupos armados, a menudos narcos y paramilitares, que deben ser abordados desde la autodefensa por la guardia. “La Guardia Cimarrona es una propuesta de protección y autoprotección comunitaria para la reconciliación, la construcción de convivencia y el logro de una paz con justicia social”, señala una ponencia que abordas las tareas de la guardia (goo.gl/yjoCPP). Sus formas de acción son múltiples: protección cultural desde los usos y costumbres; protección espiritual de los territorios y comunidades; protección político territorial y jurídica, con la aplicación de los sistemas de justicia propia; y protección individual y colectiva por las comunidades. Recientemente ha nacido una Guardia Comunitaria Wichi en la localidad de Sauzalito, en la región del Impenetrable Chaco, norte de Argentina (4 millones de hectáreas de bosques nativos en región semiárida) Cuenta con 300 integrantes que piensan llevar a más de mil para proteger sus 100 mil hectáreas del narco que saquea madera, peces y miel y pretende introducir drogas entre las y los jóvenes. Días atrás se formó una nueva autodefensa, la Guardia Indígena Whasek, en Nueva Pompeya. Hace más de un mes la guardia interceptó una camioneta del Centro de Integración Comunitario dependiente del gobierno nacional e incautó el vehículo, que ahora se usa para el patrullaje del territorio. Finalmente, el año pasado se creó el Consejo de Recuperación Territorial (CRT), que volvió a reunirse en Miraflores a fines de 15
febrero, que promovió la recuperación de 3.700 hectáreas, donde “están implementando pequeñas represas para almacenar agua para animales, huertas, fabricación de ladrillos, corrales para los chivos, chanchos y aves”, según relata Alfredo Galarza. Además quieren construir una escuelita, mientras las viviendas van dejando la improvisación del plástico y los palos para levantar paredes de adobe y ladrillos. Las tres localidades del Chaco son pequeños pueblos de cinco a diez mil habitantes. “Dentro del CRT hay compañeros qom que integran el Consejo Qarashe, que es una organización indígena piquetera, que a su vez es un desprendimiento de la Organización Toba Qompi, legendaria organización indígena”, sigue el relato. El concepto de organización indígena piquetera me parece alucinante, y revela la profundidad que adquirieron los movimientos en los últimos años, que van trenzando sus experiencias vitales. El Consejo consiguió que se construyan muchas viviendas en Miraflores, que en su mayoría “están a nombre de las mujeres de la organización, que son las que sostuvieron los piquetes y formaron la primer cooperativa de canastos Onolec Lagaraiq. Algunas de las mujeres de la cooperativa, han participado de los encuentros de mujeres a nivel nacional y a fines de 2018 hicieron el primer encuentro de Mujeres y Saberes sin la ayuda de ninguna organización, partido, ni sindicato”. Onolec Lagaraiq (una sola palma en lengua qom), es una cooperativa de artesanas que nace en 2011 para evitar la explotación de los coyotes que lucraban con su trabajo (goo.gl/kWM2HP). El consejo Karashe ha conformado cooperativas de cestería, miel, madera y se disponen a inaugurar una radio, que nos dice Alfredo “consiguieron con sus propios recursos, además de una salita de primeros auxilios manejada por un enfermero qom”. Van a poner en marcha canchas de basquetball y ya tienen tres equipos de fútbol femenino indígena. Como hubiera dicho León Felipe, vengo a cantar “cosas de poca importancia”…esas pequeñas cosas que están cambiando el mundo, abajo y a la izquierda. 16
Samir, Obtulia e Hilario: rostros del “exterminio selectivo” en México Pietro Ameglio - Pensar en voz alta la justicia y la paz
Y la guerra sigue atravesando a México, por si alguien creía que había parado o disminuido… El 20 de febrero se dio el brutal e impune asesinato del líder de la resistencia, activista social y comunicador comunitario Samir Flores Soberanes, en Amilcingo, Morelos. Samir fue un ejemplar y muy generoso luchador social sin tregua, delegado ante el Congreso Nacional Indígena por años, gran opositor al Plan Integral Morelos (PIM) y a las dos Termoeléctricas de Huexca, al gasoducto y al acueducto del río Apatlaco. Había participado el día antes de su asesinato contra la termoeléctrica en un foro oficial en Jonacatepec, donde se enfrentaron dos Flores muy opuestas (Samir y Hugo Eric-presidente del PES), una luminosa y otra oscura. Todos lo conocíamos y lo habíamos oído hablar en público de muchos años, siempre solidario, animoso y de empuje en luchas por la ecología, la defensa territorial y la organización de la autonomía. Fundador de la combativa radio comunitaria Amilkcingo y del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra y el Agua de Morelos, Puebla y Tlaxcala (FPDTA), herrero de profesión, joven padre de cuatro hijos y sobrino de un luchador social emblemático de Morelos, Vinh Flores Laureano, fundador en los setenta del municipio de Temoac a partir de la conjunción de cuatro pueblos indígenas y de la Normal Rural femenina de Amilcingo. Días antes, el 12 de febrero en Tierra Colorada, Guerrero, fueron desaparecidos los dirigentes de la Organización de los Pueblos Indígenas Me’ Phaa (OPIM), Obtilia Eugenio e Hilario Castro, mientras se desplazaban de Ayutla a Chilpancingo por las fuertes amenazas de muerte que habían aumentado. Obtilia había denunciado la omisión de las autoridades ante esas amenazas desde noviembre y además el gobierno le había quitado las medidas cautelares. Fueron dejados en libertad el 16 de febrero, ante una gran presión nacional e internacional. Recordemos también que frente a Palacio Nacional hay, desde el 19 de febrero, un plantón de cientos de desplazados de la sierra de Guerrero 17
-en representación de miles- que huyen de la brutal violencia del delito organizado y los cultivos de drogas en su región. Y asimismo que en Chiapas son miles aún los desplazados en Chalchihuitán y Chavajebal. Para comprender la magnitud de este drama, en la presentación del reciente libro “Entre la invisibilidad y el abandono: un acercamiento cuantitativo al desplazamiento forzado en México”, la especialista Brenda Pérez de la CMDPDH señaló que “de 2011 a 2017 cada año hubo un promedio de un millón 200 mil personas que cambiaron de domicilio” (La Jornada, 16-2-19). He aquí las formas y rostros principales del “exterminio selectivo” que acosa a México: asesinato, desaparición y desplazamiento, de activistas sociales, defensores de derechos humanos y del medio ambiente, periodistas, miembros de la clase política; principalmente indígenas y campesinos. Se trata de un proceso que no se detiene. Según la base de datos del Servicio Paz y Justicia (Serpaj) acerca del costo humano de la conflictividad social en el país, en enero-febrero de este año han sido asesinados 13 activistas sociales, 7 autoridades gubernamentales y miembros de partidos políticos, 3 periodistas; y han sido desaparecidos 3 activistas sociales y 2 candidatos políticos. Los asesinatos fueron sobre todo en Chiapas y Oaxaca, aunque también en Guerrero, Morelos, Baja California Sur, Hidalgo, Veracruz y Tabasco. ¿Qué lugar ocupa la “pacificación”? Hacemos esta reflexión colectivamente desde un plano constructivo de paz y de autocrítica, no con afán de destruir, porque creemos que todavía con este nuevo gobierno hay más márgenes positivos de construcción de un mejor orden social en nuestro país. Respondiendo a la pregunta: si por pacificación se entiende “militarizar la seguridad pública”, ésta sigue ocupando un lugar central en el proyecto del actual gobierno -al igual que en los últimos 12 años- más aún con la reciente aprobación de la Guardia Nacional: “Sorprende que el Estado mexicano insista en fortalecer una lógica militar que privilegia la muerte de quienes considera ‘enemigos’, en lugar de reconocer sus garantías individuales, comenzando por el derecho a la vida” ( Jan Jarab, representante del Alto Comisionado de la ONU para los DDHH). En cambio, si por “pacificación” se entiende “construir una cultura de justicia y paz”, ésta ocupa todavía un lugar secundario, a pesar de 18
algunos valiosos esfuerzos federales en el terreno de la justicia social. Creemos que López Obrador perdió una gran oportunidad de mostrar concretamente sus deseos de pacificación, al no posponer -o cancelar- la Consulta sobre la Termoeléctrica de Huexca, ante el cobarde asesinato de Samir. El hecho de continuar a pesar de todo con esta Consulta -cuatro días después del asesinato-, muy manipulada e impuesta desde ‘arriba’ en todo sentido, demostró una gran insensibilidad ante el dolor de los pueblos y parte de la sociedad de Morelos, Puebla y Tlaxcala particularmente, y del CNI a nivel nacional, y se evidenció así el reforzamiento de un ejercicio disfrazado de democrático, pero que acabó siendo una muestra más de autoritarismo vertical. Confiábamos que el presidente, al menos por su trayectoria de lucha social y conociendo la tradición de lucha en Morelos, iba a hacer prevalecer esa parte de su identidad y a mostrarse humana y políticamente más sensible ante esta brutal ejecución. Se trataba de una coyuntura histórica para mostrar claramente su decisión de ¡Ya Basta de violencia e impunidad!. En cambio, optó por aumentar la estrategia de polarización, que ya había iniciado en el fin de semana anterior en Cuautla (10 de febrero) al defender abiertamente la opción del “Sí” a la termoeléctrica, y denostar a los opositores luchadores campesinos y ambientalistas -Samir entre ellos- llamándolos puerilmente “conservadores” y “radicales de izquierda”, usando para ello dos definiciones patéticas para estos conceptos. La polarización se ha ido construyendo desde la “estigmatización” del adversario, sin base histórica ni principio de realidad, sólo a partir de juicios de valor descontextualizados y a-históricos. Esta acción que pareciera atacar la “fuerza moral” de los adversarios de López Obrador, en realidad, en una forma de “judo político”, ha acabado golpeando la propia fuerza moral del presidente. “Radical”, en su sentido etimológico y sociológico, y no en su sentido ideologízado y estigmatizante, viene de “ir a la raíz” y precisamente es un elogio para cualquiera que busca construir justicia y paz, como quieren en su mayoría los pueblos campesinos e indígenas de Morelos. Ir a esa “raíz”, como también acusaban a Gandhi en su tiempo, no significa un regreso mecánico al pasado sino una “equilibración” entre formas de vida y relaciones sociales históricamente humanizantes y de pleno respeto a la integración con el medio ambiente, con otras necesidades actuales, siempre respetando ante todo la autonomía y primacía de los habitantes de esa región en la toma de decisiones, y los 19
estudios científicos de afectaciones de todo tipo. ¿A quién se le ocurre que habitantes de Cuernavaca tengamos capacidad de decisión sobre la vida y el futuro de pobladores indígenas y campesinos de los ríos Cuautla y Apatlaco, que ni conocemos? Esa fue la Consulta… Es perfectamente claro el modelo desarrollista negativo y de progreso arrasador capitalista que está detrás del PIM en la zona oriente del estado y los estados vecinos: devastación y enorme riesgo ambiental, destrucción del modo de cultivo campesino, hiper desarrollo industrial e inmobiliario…Resulta por demás paradójico que en la tierra madre de Zapata, precisamente en el Año declarado por AMLO “dedicado a Zapata”, se impulse un proyecto que de raíz “traiciona los ideales zapatistas”, como bien señala la Asamblea Permanente de los Pueblos de Morelos (APPM). Sabemos que López Obrador es alguien interesado en la historia, y nos extraña que defienda concepciones de “progreso”, que ya desde la primera guerra mundial ningún historiador serio sostiene. Además, en 2014 el mismo López Obrador decía a los habitantes de esa región que “Vamos a defender con todo lo que podamos a los pueblos, no queremos ese gasoducto, esa termoeléctrica, y no queremos tampoco esas minas que nada más van a destruir el territorio y van a contaminar las aguas” (El Sol de Cuernavaca, 6-3-19). ¿Qué es humanamente más negativo: ser radical, conservador o mentiroso? Claro, que se argumentará que esas obras aún no estaban acabadas de construir en ese año, pero si en ese entonces se tenía esa claridad en la reflexión no se vale ahora imponer y estigmatizar así a quienes siguen pensando hoy día igual a él en 2014, porque él sabe bien que tienen la razón científica, histórica y cultural. No es correcto justificar acciones deshumanizantes y depredadoras por someterse ante “fatalismos políticos, sociales y económicos”, justificados en el avance de la obra y el gasto, que destruirán en el corto, mediano y largo plazo a todo y a todos. Los que hemos luchado ambientalmente, sabemos que una de las principales estrategias de los adversarios es avanzar lo más rápido posible en las manifestaciones de impacto ambiental y las obras devastadoras, para que cuando empiece la resistencia quienes luchan contra ellas sientan como “inevitable” la construcción. Pero la especie humana siempre ha tenido la capacidad de no rendirse y construir alternativas más humanas para los más, si dialoga y negocia. 20
Eso nos enseñan la historia y la esperanza bien leídas. ¿Qué le hemos hecho a López Obrador los habitantes de Morelos? El gobierno federal y estatal han quedado muy “mal parados” en Morelos, con esta Consulta y el asesinato de Samir, aún reconociendo que no exista ninguna responsabilidad directa de ellos en esa ejecución, para así tampoco reproducir la estigmatización y polarización desde el otro bando. No queremos ayudar a reproducir la espiral de la guerra. La realidad política, ambiental, económica, educativa, de seguridad estatal es digna del peor maquiavalismo, deprimente…por no decir otra cosa. Primero se nos “colocó” a un gobernador -Cuauhtemoc Blanco- y a un secretario de gobierno -José Sanz- incompetentes en todo sentido y prepotentes a más no poder, aunque seguramente muy hábiles para sus negocios personales; a un “presidente municipal” de Cuernavaca -Francisco Villalobos- fantasmal en las boletas y la realidad; un fiscal del Estado -Uriel Carmona- de complicidad e inhumanidad totales que dice que los jóvenes desaparecidos en un 80% de los casos se van de la casa de manera voluntaria (8-2-19) y -sin ninguna investigaciónafirma que el crimen de Samir fue por el delito organizado, perdiendo o inventando la cartulina que en el lugar del crimen se dijo haber encontrado; un super-delegado presidencial como Hugo Eric Flores, encargado ahora de toda la “guerra sucia” y compra de conciencias a favor de la termoeléctrica, y con un antecedente brutal: haber sido testigo de la defensa de los paramilitares de Acteal en la “revisión del debido proceso” que encabezó, en un academicismo legaloide vergonzoso, el CIDE -donde él además es profesor- y que logró la liberación de los victimarios de la masacre de Acteal. ¿Los morelenses todavía seguiremos co-operando con nuestro silencio o apatía para que estos personajes sigan en sus puestos, cobrando y aplastándonos con el dinero de nuestros impuestos? Nos entra un poco la duda acerca de quiénes “rodean” al presidente, empezando por Morelos, quiénes le están ayudando a reflexionar y actuar acerca de qué significa realmente construir justicia y paz en medio de la guerra que nos atraviesa. Qué poco saben éstos de cultura de paz, y qué pobreza resultó de la simulación de esos Foros de Escucha de finales del año pasado. En el caso de la termoeléctrica y el PIM nos parece increíble que la comisión de registro de esos Foros 21
aquí en Morelos, no le haya pasado a López Obrador un apunte que seguramente salió en las participaciones, que dijera algo así: “Convocar a mesas de diálogo abierto y plural, con los mejores especialistas técnicos y científicos universitarios y de gobierno de todos los múltiples campos involucrados en los efectos de ese Plan de Desarrollo, junto a los diferentes actores sociales de esa amplia región del oriente de Morelos, Puebla y Tlaxcala, empezando por la población campesina e indígena, para explorar nuevas y mejores opciones humanas, ambientales y económicas de un proyecto que si bien está prácticamente acabado y viene de la corrupción y el autoritarismo de los gobiernos anteriores, es siempre factible consensar colectivamente algunas alternativas que beneficien a los más posibles en todo sentido. Cerrar los caminos civiles del diálogo, la negociación y los consensos es abrir las puertas a la guerra y la destrucción”. Esa es la apuesta de la construcción de paz.
Huexca: caen las máscaras Silvia Ribeiro - El sueño de la razón
El Proyecto Integral Morelos (PIM) es, como dicen los pueblos afectados, un proyecto de muerte. No sólo si se pusiera en funcionamiento, sino ya mismo, como lo ha demostrado el asesinato del comunero y activista contra el proyecto, Samir Flores. Crimen directamente ligado a la oposición de Samir contra la termoeléctrica Huexca y el PIM, pero también al señalamiento del propio Andrés Manuel López Obrador cuando pocos días antes llamó “radicales de izquierda” y “conservadores” a los comuneros que defienden su tierra y agua, abriendo el coto de caza contra ellas y ellos, que desde antes ya venían sufriendo represión y violencia por parte de los gobiernos estatales involucrados en el proyecto (Morelos, Puebla, Tlaxcala). Todo lo sucedido es además una prueba flagrante de la retórica vacía del gobierno de López Obrador sobre escuchar a los pueblos y tener en cuenta sus demandas. Al parecer, lo que le importa es construir un “pueblo” que “vote” a favor de proyectos decididos de antemano. Como explica Carlos Gónzalez, abogado del Congreso Nacional Indígena, este ejercicio y otros similares no son consultas, sino apenas 22
encuestas, que el gobierno pretende imponer sobre las consultas reales que México está legalmente obligado a realizar con los pueblos y comunidades indígenas, por ser firmante del Convenio 169 de la OIT y de la Declaración de Naciones Unidas sobre Pueblos Indígenas. Una de estas “encuestas” llamada consulta se realizó el 23 y 24 de febrero 2019 sobre el Proyecto Integral Morelos, pese a que varios de los pueblos afectados, y especialmente Amicilngo, el pueblo de Samir Flores, demandaron que se suspendiera, tanto por la afrenta del asesinato del compañero, como porque las comunidades tienen sus propias formas de discutir y consultarse. Además, como expresaron los habitantes de Huexca, lugar donde se está construyendo la termoeléctrica, ¿por qué poner a votación su derecho a la vida? ¿por qué tienen que votar sobre la destrucción de la tierra, agua y vida de la comunidad quienes ni siquiera viven en ella, ni serán afectados? “No pueden votar para decidir si vivimos o morimos, esto sería irresponsable por parte de la gente”, declaró Teresa Castellanos de Huexca, integrante de la Asamblea Permanente de los Pueblos de Morelos. Agrava la situación que el propio AMLO, estando en campaña en 2014, aseguró a los pobladores de esas comunidades que no permitiría la construcción de la termoeléctrica en estas comunidades, que es “la tierra de Zapata (…) sería como construir un basurero en Jerusalén”, afirmó. Pese a todo ello, la encuesta se realizó a solo dos días del asesinato de Samir Flores, con desprecio por la demandas de la comunidad. Según el gobierno, “ganó el sí al PIM” dato que no se puede corroborar porque el propio gobierno hizo las boletas que no estaban numeradas, hizo la instalación de casillas y recolección de votos y su conteo, sin intervención de actores independientes, por lo que claramente fue juez y parte, habiendo además hecho abundante propaganda a favor de la termoeléctrica y del proyecto. No obstante, aún en ese conteo (que reconoce 40 por ciento de negativas al proyecto), el supuesto “sí” ganó en las áreas donde no hay pueblos directamente afectados. El argumento de la administración AMLO para no respetar la voluntad de los pueblos afectados fue que ya existe una inversión de 23
25,000 millones de pesos que no hay que perder. Pese a que lo que se ha hecho hasta ahora ha sido contra la voluntad de la mayoría de las comunidades afectadas, avanzando con una mezcla de corrupción, represión e ingeniería de conflictos y división en comunidades. Es un argumento que tampoco no toma en consideración los altos riesgos ambientales, ni las alternativas que se han mostrado al proyecto. En efecto, el PIM se compone de dos termoeléctricas, una en Huexca ya construida, que funcionaría con gas “natural”, un gasoducto de 160 km que funcionará al 70 por ciento con gas importado de Estados Unidos, y un acueducto que tomará agua del Río Cuautla, para enfriar la termoeléctrica. Entre las críticas que han presentado los pueblos afectados, ambientalistas y expertos de la UNAM y la Universidad Autónoma del Estado de Morelos están: la invasión de territorios campesinos por el “paso de servidumbre” que establece la CFE; el gran volumen de agua que tomarán, que afectará el consumo de agua de los pueblos, de la que sólo se devolvería una parte, que podría estar contaminada; que el gasoducto pasará cerca del volcán Popocatépetl, aumentando el riesgo de explosiones; que el funcionamiento de la planta tendrá alta contaminación sonora (110 decibeles) afectando la población cercana. Además, el gas “natural” del que alimentaría la planta será importado de Estados Unidos. De éste, la gran mayoría proviene de la extracción con la técnica fracking o fractura hidráulica, que es brutalmente destructiva de las áreas donde se extrae, es altamente contaminante de suelos y agua en las zonas de explotación, provoca temblores por la desestabilización de rocas profundas, además de ser un combustible fósil que contribuye más que el carbón al cambio climático. Para los funcionarios todo esto no es importante, porque sucedería en Estados Unidos. Pero la lucha contra el fracking es una amarga y dura lucha de los pueblos en ese país, donde los más afectados son pobres, afroamericanos e indígenas. Finalmente, la dependencia de gas natural, también será un justificativo para desarrollar fracking en México. El hoy director de la Comisión Federal de Electricidad Manuel Bartlett, declaró en 2014 al Senado (siendo entonces senador) sobre el PIM, que ” México tiene un margen de reserva por exceso 24
de producción de energía del 50 por ciento, tres veces superior a los estándares internacionales recomendables que son de 18 por ciento, lo cual pone de manifiesto lo innecesario de la obra que atenta en contra de los pobladores de la región Ixtla-Popo y pone en riesgo a cerca de 20 millones de habitantes”. Elena Burns, de la organización ambientalista Agua para tod@s, agua para la vida, explica que lo que aunque ya se han pagado 22 mil millones de pesos a la trasnacional española Abengoa, en toda la vida útil de la termoeléctrica, que se calcula en 30 años, los costos de operación será de 100 mil millones de pesos, que se pagaría a las empresas españolas Elecnor y Enégas, concesionarias del gasoducto que surtiría la planta. En lugar de esto, Burns plantea que “si realmente se requiriera [si México no fuera ya excedentario en producción de energía], se podría construir, operar y mantener una planta solar de la misma capacidad de la termoeléctrica de Huexca durante 30 años por $60 mil millones de pesos, o sea $40 mil millones menos de lo que costaría operar la termoeléctrica de Huexca” Pero para la administración AMLO, ni las razones de los pueblos afectados, ni las razones de los expertos de universidad nacionales y expertos ambientalistas son razones, sino pura “ideología” o “política” y además de izquierda, como si eso en sí fuera un insulto. No existe en su horizonte que los pueblos de México llevan décadas luchando en defensa de su territorio, tierra, agua, semillas y derechos. Esto no sólo no cambió con una elección, sino al contrario: la agresión aumentó, pero ahora recubierta de una nueva capa de nociva demagogia de “progreso”. Cayeron en pedazos las máscaras que quedaban. El PIM es devastador e innecesario. También lo es la farsa de consulta, cuya urgencia justificadora no pudieron posponer ni siquiera por el asesinato de Samir, al que ninguna importancia le dado el gobierno, pese a haberlo provocado. Terrible precedente para este y otros megaproyectos que planean, como el Tren Maya y el Corredor Transistmíco. Como siempre, la lucha de los pueblos de abajo es la que muestra la verdadera realidad y además pone los muertos. Y como desde hace más de 500 años, no está en su agenda rendirse. 25
Conclusiones, acuerdos y plan de acción de la Asamblea Emergente Nacional ante la Violencia del Estado y la Autodeterminación de los Pueblos 9 de marzo de 2019, Amilcingo, Morelos
Estando reunidos en la comunidad de Amilcingo, Morelos, pueblos, ejidos, organizaciones, colectivos y personas preocupados por defender la vida de nuestro país y nuestros derechos humanos e indignados por el asesinato de nuestro compañero Samir. Vemos que la llegada de Andrés Manuel López Obrador a la Presidencia de la República, no está significando un cambio de política en nuestro país, por el contrario, significa la continuidad del neoliberalismo en detrimento de nuestros derechos y territorios. Vemos que siguen asesinando a los defensores de derechos humanos, periodistas y comunicadores indígenas, como lo es el asesinato de nuestro hermano Samir Flores Soberanes, Noé Jiménez Pablo y más compañeros que han perdido la vida en estos 100 días de nuevo gobierno. Así como los compañeros desaparecidos Álvaro Bernando Reyes Cruz y Federico Cruz Morales de la comunidad de San Miguel Cajonos, Oaxaca, desapariciones que se suman a las que venimos sufriendo de por sí los pueblos al defender nuestro territorio, como la del compañero Sergio Rivera quien se oponía a la instalación de la hidroeléctrica Coyolapa-Atzala, en la Sierra Negra de Puebla. Que se siguen impulsando nuevos proyectos de destrucción como el Tren Maya y el Corredor Transístmico en Oaxaca. No bastó que millones de mexicanos, hartos del sistema neoliberal, buscaran cambiar las condiciones de desigualdad e imposición del país a través de depositar un voto en la urna el 1 de julio de 2018. Con rabia vemos que el poder cambia de color, pero no de preferencias, el capitalismo sigue siendo el rey-gobierno que pretende acabar con los territorios de los pueblos originarios para convertirlos en mercancía a través de la explotación y destrucción de la vida. Existen más de 800 conflictos medioambientales en nuestro país que, lejos de solucionarse con este nuevo gobierno, se busca concretar el despojo y destrucción en favor del capital y contra la vida. Frente a 26
esta emergencia del continuismo neoliberal que sigue acabando con nuestro país, ahora con disfraz de izquierda, en esta Asamblea Nacional reiteramos: los megaproyectos no son progreso, ni desarrollo, son la muerte de los pueblos originarios del país y de la madre naturaleza. Por ello hemos concluido en esta asamblea que es preciso que en todo el país nos articulemos para defender, como hace cien años, la vida, la tierra, el agua, los cerros, montes y el futuro de nuestros hijos. Nosotros, nosotras estamos seguros que si Zapata viviera en esta asamblea estuviera, somos los herederos de Zapata y como tal somos los que seguiremos defendiendo este país del terrateniente neoliberal. La traición a Zapata que vivió primero con Madero y después con Guajardo es la misma que estamos viviendo los pueblos de Morelos, Puebla y Tlaxcala con la decisión del Presidente de la República de impulsar el Proyecto Integral Morelos. Por eso hemos determinado: 1. Sumarnos al Encuentro de Pueblos del 9 de abril de 2019 en la comunidad de Amilcingo a las 10 am, acordado previamente por el Congreso Nacional Indígena y el Consejo Indígena de Gobierno. 2. Realizar una movilización nacional e internacional cuyo epicentro será en Chinameca, Morelos el 10 de abril de 2019. No permitiremos que la muerte de nuestro caudillo del sur sea insultada con la presencia de quien busca impulsar los proyectos de muerte en tierra zapatista. 3. Luchar por la cancelación del PIM y todos los megaproyectos de despojo que se están imponiendo por el gobierno de AMLO y exigir justicia para nuestro compañero Samir Flores Soberanes. Para cumplir estos acuerdos y comenzar un nuevo proceso de lucha y articulación nacional se llevarán a cabo las siguientes acciones: a) Reunión de solidaridad con Amilcingo y los pueblos afectados por el PIM y justicia para Samir, el 23 de marzo de 2019 en la Ciudad de México b) Congreso de Pueblos el 7 de abril en Anenecuilco, Morelos c) Impulso de la campaña nacional: Yo prefiero tierra y libertad, donde buscamos conjuntar todas las luchas y demandas que a nivel nacional siguen floreciendo en nuestro país contra el neoliberalismo salvaje, por lo que llamamos a todos los pueblos, comunidades, ejidos, 27
organizaciones, colectivos y personas en general que, asuman esta campaña y consigna como propia y de todos nosotros. d) Fortalecer la lucha del campamento zapatista en Apatlaco, Morelos y las comunidades afectadas por el Proyecto Integral Morelos Por último señalamos en estas tierras zapatistas que vieron nacer a nuestro hermano Samir Flores, que Andrés Manuel López Obrador es una persona no grata en Morelos por incumplir su palabra empeñada en 2014 y del mismo modo exigimos la destitución del Delegado en Morelos Hugo Erik Flores y la atracción del caso de Samir por la Fiscalía General de la República. A 100 años de la muerte de nuestro general Zapata ¡Viva tierra, agua y libertad! ¡Agua sí, termo no! ¡Samir vive, la lucha sigue! ¡Zapata vive, la lucha sigue! Red de apoyo al CIG-Morelos, Organización Popular Francisco Villa de Izquierda Independiente, Trabajadores de Morelos, UPCI, Cholultecas Unidos en Resistencia-CHUR, Nodorolidente, MOPIMCNPA-MN, Instituto Cultural Autónomo Rubén Jaramillo, UPVA 28 de octubre, Red contra la Represión, Red Coyoacan, Praxis en América Latina, CNI Tepoztlan, CNI Puebla, Colectivo Resistrenzas, Red de Resistencia y Rebeldía Cineteca, IMRYT, Red de Rebeldías y Resistencias, UPCD, EPM, Colectivo Obrero, JEN, Comunidad de Huazulco, Zapatistas del sur de Morelos, UCIZONI, MAIZ, Integrantes UAM-Azcapozalco, Solidaka, Unión por la Soberanía Popular, Escuela Normal Rural Popular Mactumactzá, Ejido Tenextepango, Ruacig, Rebelión, Hecho en Tlalpan, Colectivo El Zurdo, Mov. por la libertad de los defensores del agua Tlanixco Edo. Mex., San Miguel Cajono Oaxaca, Universidad de Chapingo, Libertad bajo Palabra, Flor de la Palabra, Organización Nacional del Poder Popular, Huexca en Resistencia, Asamblea Permanente de los Pueblos de Morelos, Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra y Agua Morelos Puebla Tlaxcala, Asamblea de la Resistencia de Amilcingo. Publicado originalmente frentepueblos.pueblatlaxcala/ 28
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Caminos de la autonomĂa Bajo la tormenta 13 de marzo de 2019