CAMINOS DE LA AUTONOMÍA BAJO LA TORMENTA 24 de marzo de 2021
Tsëyu’un. El machismo tras el chat Sierra XXX Yásnaya Elena A. Gil - El Pais - 22 Mar 2021
El mensaje que se lanza desde el comité estatal de Morena es que no hay opciones para la autocrítica que lleven a enfrentar la violencia de género En la Sierra Norte de Oaxaca las comunidades, mixes, zapotecas y chinantecas, preceden a las estructuras sociopolíticas del Estado mexicano. Una buena parte de estas comunidades fueron convertidas en municipios o en estructuras de administración submunicipal que en caso de Oaxaca se llaman agencias. Las comunidades se convirtieron así en municipios, en cabeceras municipales o en agencias, sin embargo, aun con este cambio de estatus la vida política siguió rigiéndose bajo un sistema propio y distinto en cada caso. De este modo, utilizando como ejemplo mi propio comunidad, Ayutla Mixe, las autoridades municipales son también autoridades comunitarias aunque es muy importante señalar que muchas autoridades comunitarias no son reconocidas como autoridades municipales del Estado. Nuestro sistema de autogobierno excede al que el Estado reconoce. El órgano máximo de autogobierno es la asamblea comunitaria. De los 570 municipios que hay en el Estado de Oaxaca, 417 de ellos tienen sistemas de elección y de organización propios. La mayoría son, en realidad, las comunidades históricas latiendo bajo el corsé llamado municipio con el que el Estado mexicano los reconoció. Las estructuras comunales históricas pueden ser leídas por el Estado mexicano solo a través de la lente municipal. El reconocimiento legal de estos sistemas normativos indígenas ha traído consecuencias interesantes que ponen en tela de juicio si el reconocimiento estatal es la mejor vía para fortalecer estos sistemas, pero hoy no abundaré sobre este punto en específico.
Mientras esto sucede y discutimos sus implicaciones, la realidad es que ha comenzado el proceso para elegir a quien será el representante del Distrito 10 Mixe-Choapam en el congreso local. Hemos de reconocer que históricamente no ha habido un gran entusiasmo por esta elección, en una buena parte de esta región los partidos políticos se siguen viendo con mucho recelo y como amenaza a nuestros sistemas aunque es innegable que han construido redes clientelares. Hace un año, una mujer de la región denunció la existencia de un chat de WhatsApp llamado Sierra XXX en donde participaban, como supimos después, políticos, operadores gubernamentales y funcionarios, en este chat se subieron fotos de mujeres de la región para evaluación de sus cuerpos desde un deleznable machismo. Ya la existencia de un chat con ese título es bastante problemático, pero las instrucciones del creador fueron muy claras: “aquí sí pueden mandar porno cabrones”, “acá sin pedos, puro amplio criterio ayuuk. De preferencia paisanas. No españolas porfi”. La imagen de la mujer que denunció la existencia del chat había sido colocada en este espacio por una persona que después fue identificada como funcionario del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI). Ante el escándalo, el INPI pidió la renuncia del funcionario y dio vista al órgano de control interno. Al paso de los días, la mujer que denunció en sus redes la existencia del chat interpuso un recurso en la Fiscalía, algunos integrantes del chat dieron incluso su testimonio de lo sucedido ahí. Hace unos meses, distintas mujeres comenzamos a denunciar que ahora el creador del chat pretendía convertirse en el candidato del partido Morena para la diputación del Distrito 10 Mixe-Choapam; sin embargo fue hasta que el caso de Félix Salgado Macedonio dio contexto de discusión que el reclamo y el impacto mediático del caso chat Sierra XXX se magnificó, ante la presión de las mujeres de la sierra, mujeres de otras regiones de Oaxaca, organizaciones de mujeres indígenas y organizaciones de derechos humanos, el comité estatal del partido, que antes había desestimado la denuncia, determinó que el creador del chat no contendiera. 2
Estos son los hechos muy brevemente relatados, pero quisiera llamar la atención a varios fenómenos que evidencian problemas complejos imbricados en este caso. Hace un año, una de las peticiones de la mujer que denunció, antes de decidir interponer una denuncia penal, era que se le ofreciera una disculpa en la lógica de un proceso restaurativo que planteaba reconocimiento y resarcimiento del daño, solo dos integrantes lo hicieron. Me parece muy interesante la manera en la que las mujeres agraviadas y varias denunciantes estaban planteando un proceso restaurativo que nunca tuvo eco del lado agresor; al contrario, la denuncia desató una serie de descalificaciones que continuaron la violencia machista y que incluyó presiones directas a las involucradas para callar. En su defensa, el exfuncionario del INPI, sin negar jamás la existencia del chat, mostró en conferencia de prensa la foto de la mujer que había subido a ese chat con el argumento de que, en la imagen, ella estaba vestida. Los agresores no entienden que no entienden, no entienden que la misma creación de ese chat con ese nombre y esas instrucciones, además de la inclusión de fotos de mujeres de la región, incluso vestidas, es ya un manifiesto grave del machismo que permea en este tipo de chats. Las imágenes, de mujeres desnudas o vestidas para consumo y opinión masculinas de sus cuerpos, adquieren un valor aún más violento dentro de la “sintaxis” y el contexto de un chat de esa naturaleza. Como se ha dicho muchas veces, las imágenes adquieren carga y significado según el contexto en el que son colocadas, se resemantizan y resignifican. La imagen de la mujer, incluso vestida, a la que agregaron además un signo de pesos sobre el cuerpo, toma otros sentidos y crea los actos violentos dentro de un chat de esa naturaleza. Lejos del reconocimiento del daño y la disculpa, el creador del chat se dirigió a los integrantes argumentando que “tenemos la conciencia tranquila todos, hay cosas bochornosas, es cierto, cosas groseras y más que hemos compartido, pero nada fuera de lo que un grupo de amigos de amplio criterio y de confianza no haga”. La normalización de ese tipo de chats es también una continuación de la violencia machista que no puede siquiera ser leída a los ojos de los agresores. Mientras que la lógica de las mujeres se movió en 3
un principio en plantear un proceso restaurativo, tanto el exfuncionario del INPI como el creador del chat insistieron en que no habían cometido ningún delito y que interpondrían recursos en la Fiscalía, en un sistema judicial que estructuralmente ha jugado a favor de ellos. Las mujeres plantearon soluciones como la disculpa para recuperar el equilibrio tras el agravio, los agresores apelaron al sistema judicial del Estado que recuerda la exigencia que se hace siempre a las mujeres de interponer recursos legales para que las denuncias de violencia machista tengan una mínima credibilidad. Pareciera que, dejando de lado los sistemas de justicia tradicionales de nuestras comunidades que se basan en la idea del reconocimiento y la restauración, los agresores han sido hipnotizados desde el poder del Estado para parapetarse tras procesos legales contra las que las denuncias de las mujeres se estrellan una y otra vez. Más que reconocer y restaurar, se han recrudecido las descalificaciones y las amenazas, la respuesta de manual es que la ola de indignación responde a una campaña de desprestigio con motivaciones políticas. El creador del chat negó rotundamente acusaciones que las mujeres denunciantes jamás esgrimieron, jugó a exagerar las acusaciones para desmentirlas: “se me acusa de ser violador, pero lo niego” “se me acusa de ser huachicolero y también lo niego”, pero siempre se negó a desmentir que él había creado un chat llamado Sierra XXX con todas sus letras y dio respuestas vagas cuando se le preguntó sobre las capturas de pantalla que se mostraron como evidencias. ¿Cómo se puede comenzar un proceso de autocrítica que lleve a un cambio en el estado de las cosas si la violencia continúa y no hay un reconocimiento del daño? ¿Qué posibilidades se habrían abierto si desde un comienzo hubieran reconocido sus actos y pedido las disculpas solicitadas que los llevaran a comenzar un proceso de autocrítica? Ante la presión de las mujeres y las organizaciones, el presidente del Comité Ejecutivo Estatal de Morena declaró que no se toleraría a ninguna persona en estas circunstancias por lo que el creador del chat quedó impedido de participar en la contienda. Lo que sucedió después desalienta cualquier esperanza y manda un duro mensaje de disciplina para las mujeres del partido que también alzaron la 4
voz: una precandidata denuncia que ninguna de las mujeres aspirantes a la candidatura fue incluida en la encuesta y que entre las opciones que se presentan se encuentra otro de los participantes activos del chat Sierra XXX, Jesús Diego, cuyo alias en ese espacio fue Chucho pito gordo. El creador del chat llamó en sus redes a apoyar a este aspirante que, en sus palabras, representa su proyecto y, por lo visto, el mismo nivel de machismo. Lamentablemente, el mensaje que se lanza desde el comité estatal es que, no importa de que modo, no hay opciones para la autocrítica que lleven a plantear otras maneras y procesos para intentar al menos enfrentar de algún modo la violencia de género. Habría que recordarle a la izquierda partidista que habla tanto de la transformación las sabias palabras de Paulo Freire: “Lo que distingue al liderazgo revolucionario de la élite dominadora no son solo los objetivos, sino su modo distinto de actuar. Si actúan en igual forma sus objetivos se identifican”. Si siguen actuando con ese nivel de machismo, rasgo que comparten con sus supuestos contrincantes de los otros partidos, sus objetivos en realidad se están identificando.
Tramas feministas y armas de casa
Silvia Ribeiro - Desinformemonos- El sueño de la razón - 17 · 03 · 2021 En plazas, avenidas, rincones y veredas de todo el mundo, las mujeres nos manifestamos colectivamente este 8 de marzo, pese a un año difícil que nos ha desafiado a encontrar nuevas formas de resistir y seguir construyendo. Las condiciones impuestas por la pandemia recargaron especialmente a las mujeres: por mayor desempleo, por teletrabajo, por recaer sobre todo en mujeres el acompañar a hijas e hijos en sus estudios, por ser sobre quienes cae la mayor parte del trabajo doméstico, por ser las que hemos asumido los cuidados de casi todo y de todas y todos -aún cuando esto no sea para nada una condición biológica con la que nacimos. Con el encierro obligatorio recrudeció el patriarcado, aumentaron los feminicidios, los abusos y violencias domésticas. Pese a eso, en este año de pandemia logramos también resonantes victo5
rias, como la aprobación del aborto legal en Argentina, arrancada con la organización y el trabajo colectivo de muchos años. En ninguna parte, quedarse calladas es una opción. No lo era antes, menos ahora. Pero hubo que buscar nuevas herramientas. En Uruguay han florecido las colectivas, organizaciones de diversos perfiles, tejidos organizativos, redes, tramas, coordinaciones feministas. La presencia de las jóvenes es muy visible y aparece mayoritaria, difícil saberlo en números, pero sí por la energía que colorea las calles de verde y violeta. Es un movimiento que tiene raíces centenarias, algunas organizaciones llevan décadas de acción luchando contra las múltiples formas de invisibilización. Ahora hijas y nietas cultivan la rebeldía con entusiasmo. Tanto en Argentina como en Uruguay, las acciones y marchas feministas en los últimos años han sido masivas, con decenas a centenas de miles de participantes. No se trata solo de marchas, sino de construcciones cotidianas complejas que han ido avanzando lentamente, desde abajo y muchas veces desde la sombra. Ahora los brotes florecen por todas partes. Este año, las organizaciones y coordinaciones feministas de Uruguay llamaron a movilizarse de muchas maneras, en avenidas, calles, barrios, plazas, todas juntas y también descentralizadas. Olas violetas barrieron las avenidas, pero también los barrios y plazas más lejanas. Un fenómeno que convergió con el impulso solidario y organizativo desde abajo, que ha crecido localmente en muchos barrios, por ejemplo con la instalación de más de 700 ollas populares, algo que se afirmó para enfrentar las crisis provocadas por la pandemia. Entre otras iniciativas parecidas en diferentes barrios, la invitación de un grupo de vecinas de Jacinto Vera y Larrañaga (en Montevideo) expresaba: “Somos maestras, cooperativistas, músicas, militantes, almaceneras, comunicadoras, ingenieras, amas de casa, bailarinas, deportistas: somos fundamentales para el funcionamiento de los espacios comunitarios de nuestros barrios. Queremos visibilizarnos y darle forma a ese nosotras que somos las vecinas. Conmemoramos este día como mujeres trabajadoras, para tejer juntas nuestra memoria como mujeres 6
del barrio, para pensar entre todas como defender nuestros derechos, para darnos fuerzas en tiempos de crisis, porque aquí estuvimos, estamos y estaremos” Viviana Barreto, de la organización REDES-Amigas de la Tierra, nació y creció en Jacinto Vera. Fue una de las vecinas que organizaron este encuentro el 8 de marzo. Lograron reunir algunos cientos de mujeres que marcharon por el barrio coreando consignas y sembrando ideas. Como en muchos otros eventos feministas, primó la auto-organización y el cuidado mutuo. La mayoría fueron jóvenes, pero también acompañaron muchas niñas, niños y mujeres que son parte de las raíces de los barrios. Al pasar la colorida caminata, otras que no habían podido asistir salían a acompañar cantando algún pedacito de la alegría compartida. Al fin, reunidas en una de las plazas de la zona, las jóvenes que organizaron la convocatoria, llamaron a una reunión el sábado siguiente, en un club deportivo del barrio. Comenta Viviana que a esa reunión llegaron obviamente muchas menos, pero que sin duda la semilla germinó y la cuidan para que crezca. “Algunas ya tenemos experiencia por nuestro trabajo en organizaciones, y podríamos haber acordado un plan de trabajo muy estructurado, pero ahora queremos encontrar los ritmos colectivos con la gente del barrio, con las mujeres que quizá se acercan por primera vez al feminismo”. Hay un redescubrirse, tanto por los dolores y posibilidades del presente, como por conocer más y saberse parte de una historia común. Acordaron pintar un mural e ir recuperando la historia feminista del barrio, escuchar a las abuelas, conocer quiénes vivían allí, que luchas tenía, qué mujeres estaban y están, cuáles son sus miradas, preocupaciones, construcciones, proyectos. En el mismo barrio hay otras experiencias y espacios colectivos, como ollas populares y huertas comunitarias, centros deportivos y barriales. Muchas vecinas ya participan en esas experiencias. Según el estudio de un equipo coordinado por Anabel Rieiro y otros docentes de la Universidad de la República sobre ollas populares en Uruguay durante la pandemia, cerca de dos tercios 7
de quienes organizan y mantienen esas iniciativas solidarias son mujeres. Así las historias, las redes e identidades se entretejen. Ahora su intención es construir también su historia colectiva como mujeres, desde una mirada feminista y desde el barrio, los hogares, los centros de actividad. Las condiciones impuestas por la pandemia, en lugar de aplastarlas, las multiplicó.
Mi cuerpo como en una jaula
Abel Barrera Hernández - Desinformémonos Montaña adentro - 15 marzo 2021 Mi mamá no pudo llegar al hospital. Nací al entrar a la casa de madera. Salí repentinamente de su vientre, y no le dio tiempo de “cacharme”. Me levantó del piso de tierra. Lloré. Inmóvil, mi madre, le pidió a Edith una toalla para envolverme. Cortó el cordón y la placenta salió bien. Luego llegó la partera que la recostó, le rezó y le dio un té para reanimarla. Me bañaron, y en medio del llanto, me dormí pegado a su pecho. Al séptimo día empezó el calvario de mi vida. Comencé a convulsionar y a vomitar la poca leche que con dificultades succionaba. Pensé que esa noche moriría. En el hospital de Tlapa, me mal atendieron. Solo me aplicaron suero, y mi madre que no habla español, sufría más, porque veía cómo lloraba y que mi pancita se inflaba. Las enfermeras no la dejaron que me abrazara. Lo único que quería era transmitirme su cariño, para calmar mi dolor. Sentí que moría cuando me introdujeron un tubito que me dejó inmóvil. Así me tuvieron dos días. Al final, lo poco que comprendió mi mamá del doctor, es que me iban a desconectar y que me iba a morir. A pesar de que la vieron llorar, me desconectaron. Su consuelo fue abrazarme. Al salir del hospital, cuando le dieron un papel donde puso su huella, mi hermana Edith recuerda la explicación de la trabajadora social: a Tevi se le subió la sangre al cerebro. Su enfermedad ya no puede curarse, porque tiene parálisis cerebral. 8
No sé cómo le hizo mi mamá para llevarme al hospital de Chilpancingo, porque el dinero que mi papá mandaba de Nueva York, no alcanzaba para los gastos de la casa. Su gran alegría es que vio que mejoré. Me daban leche con jeringa y poco a poco empecé a moverme. Ya no pude estar más tiempo, por falta de dinero. En Tlapa, mi mamá empezó a notar que no veía y que no tenía fuerza en mis manos ni en mis pies. A pesar de la tristeza y la soledad, mi madre no se dio por vencida. Logró que me canalizaran al hospital de pediatría en México. No cabe duda que en este mundo la suerte no está de mi lado. No me atendieron, porque dijeron que el doctor que me daría la consulta no se encontraba. Lo más que pudo hacer mi mamá, fue que me programaran para otra cita. Van más de 10 años que sigo postrado en espera de la cita. Se que ya nunca podré ir. La desdicha no es sólo mi enfermedad que me aprisiona en este cuerpo esperando la muerte. Lo que a diario me va matando es la desaparición de mi hermano Fredy, que desde el 2019, los de la maña lo levantaron y se lo llevaron con otro amigo. Mi padre Federico se ha dedicado a buscarlo. Puso la denuncia y dijo que un joven sabía qué había pasado esa noche del 17 de septiembre. Ante la indiferencia de las autoridades, mi papá se decidió a localizar al chavo que iba con mi hermano. Lo detuvo y lo llevó a la policía municipal para que lo presentara ante el ministerio público. Salió peor, porque los policías en lugar de escucharlo, lo acusaron de privación ilegal de la libertad. Para quedar libre, tuvo que darles dinero. Aún no salía de la cárcel mi papá, cuando llegó una camioneta con personas armadas. Se metieron a la comandancia y ordenaron a la policía que le entregaran a su compañero. Llevamos un año y medio viviendo con miedo. Acá en la orilla, solo los dos perros de la casa nos cuidan. La puerta de tablas solo sirve para que no entre fuerte el aire. Aquí en la colonia Contlalco, siempre hay balaceras. Es una colonia donde la ley la imponen los de la delincuencia. De por sí estoy muerto, sin embargo, aun siento lo que pasa en la casa. Ronda el miedo, por eso mi mamá con mis 3 hermanitos, nunca nos deja solos. Mas ahora que está sola, 9
porque a mi papá lo mataron en octubre del año pasado, allá en la Montaña. Fue a rezar a una familia que estaba enferma, y cuando regresaba, lo balacearon. Lo dejaron en una barranca y fue hasta el tercer día cuando lo encontró mi mamá y mi hermana Edith. Yo ni llorar puedo, encerrado en esta jaula. Quisiera morirme, pero tampoco puedo. Sé que el amor de mi madre es tan grande, que aunque no coma, va juntando algo de dinero para comprar maíz y frijol, con el sombrero de palma y las servilletas que teje. Me entristece mucho ser una carga, porque no puede salir a trabajar. Ella sabe que no puede dejarme un momento. Últimamente siento que mis manos y mis pies tiemblan más. No entiendo qué pasa. Solo siento que me carga sobre sus espaldas y me lleva a un lugar, donde otras personas me soban. Ya tengo 11 años y solo por el cariño de mi madre y mis hermanitos, no me he muerto. Gracias a las sensaciones que tengo con su presencia y por el privilegio de escuchar ruidos, logro imaginarme cuán bello es el mundo. Aunque no puedo reír ni llorar, siento que la vida es algo hermoso. Llego a imaginar la Montaña donde nacieron mis papás, allá en san Miguel Amoltepec el viejo. Siento que navego por las cañadas y barrancas y me hago la ilusión que camino en los cerros, y que también voy al tlacolol a sembrar maíz. Siento que soy un niño más de Cochoapa el grande, enfermo como muchos más, que no tuve la dicha de hablar el “tu un savi”, ni de ir al cerro a cuidar los chivos. Siento mucho la desaparición de mi hermano Fredy. Fue el segundo después de Edith. Siento que él también me cargaría y me cantaría alguna canción como la paloma o el toro meco. En la noche, cuando los perros ladran, siento que la muerte se acerca a la casa. No se si viene por mí o más bien, son los de la delincuencia que quieren hacerle daño a mi mamá o a mis hermanitos. Trato de sobreponerme. Mejor me imagino que se trata de una noticia buena, de que mi hermano Fredy está de regreso a la casa. Las tinieblas en que vivo hacen que se revele mi papá Federico, quien quiere llevarme para que esté a su lado. Siento que estaría mejor con él, porque se terminaría este tormento. Además, ya no se desangraría tanto el corazón de mi madre Amalia. 10
Salto al abismo
Gustavo Esteva - La Jornada - Lunes 22 de marzo de 2021 Otro episodio vergonzoso de la batalla por Siglo XXI Editores se produjo el pasado viernes. Por su flagrante ilegalidad, fue cancelada la asamblea en que se pretendía consumar el atropello en que cambiaría de dueños. Los lectores de La Jornada han recibido información oportuna del asunto. El 27 de febrero de 2021, en “Arnaldo Orfila y el fin de Siglo XXI”, Tatiana Coll denunció lo que se preparaba. Recordó que la editorial nació como un grito de independencia ante el despotismo gubernamental y se forjó con la dignidad, honestidad e inmenso talento editorial de don Arnaldo Orfila, a quien se estaba ahora traicionando en una operación que representaba, subrayó Tatiana, un “inmenso abismo ético”. El 3 de marzo La Jornada publicó un desplegado en que accionistas actuales de Siglo XXI dieron “Respuesta al atropello”. Mostraron cómo Jaime Labastida, su director, demolió tanto como pudo el legado de Arnaldo Orfila y convirtió la editorial en “espacio de negocios calculados”. Ahora entregó las acciones mal habidas que acumuló a lo largo de muchos años a una empresa fantasma sin experiencia alguna en el ramo editorial. “No nos quedaremos callados ante esta acción infame”, señalamos los accionistas. El 10 de marzo Jaime Labastida aseguró en La Jornada que no habría traición al espíritu de Siglo XXI y que él seguiría a cargo de la editorial para garantizarlo. Consideró que los temores de los accionistas eran infundados, que la empresa estaba en buena situación económica y que nada de lo que había hecho era “incorrecto” o “ilegal”. Afirmó, por cierto, que la empresa repartió utilidades en 2019. Quién sabe a quiénes las entregó, porque los accionistas no recibimos un centavo… y seguimos sin recibir información de lo que pasa, como ha ocurrido desde que Labastida tomó posesión. 11
En sólido reportaje, Judith Amador informó en Proceso el 14 de marzo sobre “Las horas inciertas de Siglo XXI”. Jaime Labastida hizo en él nuevas afirmaciones cínicas y mentirosas, como la de hacer “reuniones de accionistas por lo menos una vez al año”… cuando hace décadas eso no ocurre. Tampoco fuimos informados, como exigen la ley y los estatutos de Siglo XXI, de la sigilosa acumulación de acciones que Labastida estaba realizando. El reportaje incluye el absoluto rechazo de Elena Poniatowska, en cuya casa se fundó Siglo XXI en 1965. El 15 de marzo, en “Jaime Labastida, el golpe a Siglo XXI Editores”, Iván Restrepo completó la información anterior y subrayó lo esencial del asunto, “el dilema ético”. “Esta nueva batalla cultural del viejo sabio Orfila –obser vó– apenas comienza”. Y advirtió con firmeza: “No le vamos a fallar”. No le fallamos a don Arnaldo el pasado viernes y seguiremos peleando por su legado. Hasta aquellos accionistas a los que no nos dejaron entrar a la asamblea, como fue mi caso, quienes conservamos esas acciones como un tesoro simbólico de una gran lucha cultural, nos mostramos decididos a no cejar en el empeño. La asamblea no pudo realizarse. En nombre de un grupo de accionistas se hizo ver a quienes la convocaron su falta de validez y legitimidad, por la serie de irregularidades en que habían incurrido, las cuales no eran sino continuación de las que rodearon el tráfico de acciones que las fue poniendo en manos de Labastida. Intentaron inter venir en la asamblea los compradores de sus acciones. Anunciaron sus intenciones de modernizar la editorial y abrirle nuevos nichos de mercado. Fueron rápidamente silenciados, pues no tenían derecho a estar ahí: legalmente no existen aún para la empresa. Lo que dijeron bastó, sin embargo, para demostrar que nada tienen que hacer en Siglo XXI y que intentan comprar algo que no se vende y que desconocen por completo. 12
A final de cuentas, se trata solamente de un asunto ético. Apelaremos a todas las herramientas jurídicas disponibles para impedir que se consume el atropello. Nos apoyaremos en el inmenso prestigio de que aún goza el catálogo de la editorial, que Labastida no pudo desmantelar, y contaremos con la defensa solidaria que se manifiesta ya en los más diversos círculos. Daremos una batalla ética y jurídica. Tras 25 años de intenso trabajo, en que construyó una de las más grandes y prestigiadas editoriales de América Latina, don Arnaldo se retiró con una pensión del Seguro Social por 3 mil pesos mensuales. Tras varias décadas de realizar operaciones oscuras, en que puso reiteradamente en peligro a la editorial sin informar jamás a quienes participamos en su creación y contribuimos a construirla, Labastida quiere irse con 7 millones de dólares. Los resultados de las batallas legales son siempre inciertos en México. No podemos saber qué pasará con ésta. Pero Labastida perdió ya la batalla ética. Mostró su calaña. No perderemos tampoco la batalla cultural. El impulso que fundó Siglo XXI sigue vivo. Está en trabajadoras y trabajadores de la editorial que aún le entregan sus sudores y lealtades. Y está también en quienes seguimos decididos a no dejarlo caer en el abismo al que lo están lanzando unos cuantos avorazados. gustavoesteva@gmail.com
La lucha Kurda por la democracia y la Igualdad de Género en Siria Ruken Isik - Traducción: Ana Rivas periferias 3 | experiencias alternativas
Mujeres en la vanguardia de la liberación y del gobierno Kurdo Las luchas de las mujeres kurdas en Rojava, Kurdistán (norte de Siria), fueron conocidas por muchas personas en el mundo durante los brutales ataques de ISIS (Estado Islámico de Irak y Siria) con13
tra la ciudad de Kobane en el norte de Siria el 15 de septiembre de 2014. Mientras los hombres y mujeres kurdos trataban de defender la ciudad de los milicianos de ISIS con municiones limitadas y armas inadecuadas, en comparación con las sofisticadas armas en manos de ISIS, los kurdos de todo el mundo salieron a las calles para ser la voz de los kurdos en Rojava y Kobane. Desde la batalla para defender Kobane en adelante, los medios de comunicación y los políticos occidentales han empezado a hablar de las valientes mujeres kurdas que han luchado contra ISIS y su brutal trato -incluyendo la esclavitud- de las mujeres. Fueron las tropas bajo el mando de la comandante kurda, Rojda Felat, quienes derrotaron al ISIS en Raqqa, la capital del llamado ISIS en 2018. Las mujeres combatientes kurdas se unieron a todas las operaciones militares desde Raqqqa hasta Baghouz, el último bastión de ISIS, para derrotar a ISIS. En los territorios liberados, una de las imágenes más impresionantes ha sido la de las mujeres rasgando y quemando sus burkas negras (un atuendo negro que cubre el cuerpo de la mujer de pies a cabeza) con alegría. Pero sus logros no se limitan a operaciones militares y en este documento analizaré las formas en que el Movimiento de Mujeres Curdas es un ejemplo de organización de las mujeres en tiempos de conflicto y cómo tratan de garantizar sus logros en materia de igualdad de género para el período posterior al conflicto. Antes de analizar esto, una pregunta sigue resonando en muchos oídos: ¿cómo es que las mujeres kurdas se unen a la lucha contra ISIS en tal número y por qué las mujeres están en la vanguardia de la lucha? ¿Cuál es la historia detrás de esta notable desviación de la norma, y qué pueden aprender los defensores del cambio social y el feminismo de esta situación en Rojava? Las respuestas a estas preguntas se encuentran en la organización política, social y militar kurda en el Medio Oriente. Las mujeres kurdas en Siria se han estado organizando política y militarmente bajo ‘Yekitiya Star’, que es una organización paraguas del Movimiento de Mujeres Kurdas en Siria/ Rojava, desde 2005. Según Ruken Ehmed, miembro de Yekitiya Star, dado que el régimen sirio prohibió todo tipo de organización social, las mujeres no pudieron organizarse por 14
lo que toda organización social tuvo que llevarse a cabo bajo el partido Baaz. Por ejemplo, la organización por los derechos de las mujeres se hizo bajo el nombre de “Ittihad Nisa” (Movimiento de Mujeres), organización que pertenecía al Partido Baaz. En este contexto represivo, justo antes de que estallaran los levantamientos sirios, muchos políticos kurdos fueron encarcelados en las famosas cárceles de Siria, incluyendo activistas kurdas. Cuando las fuerzas del régimen de Assad abandonaron Kobane (Ayn-Al Arab en árabe) en 2012, los kurdos tomaron el control de la ciudad. Desde entonces han estado luchando por la institución de una nueva forma de autogobierno en Rojava, que adquirió una nueva dimensión con el establecimiento de los cantones autónomos en enero de 2014. En octubre de 2015, las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) se establecieron como una fuerza armada apoyada por la coalición liderada por Estados Unidos para incluir a diferentes grupos étnicos en la lucha contra ISIS. El 6 de septiembre de 2015, el Consejo Democrático Sirio (CDS) fue establecido como el ala política de las (FDS) que ha sido apoyada por la coalición liderada por los EE.UU en la lucha contra el ISIS y ganó territorios anteriormente controlados por el ISIS. Hay tres regiones administrativas en las que el CDS es eficaz: Afrin, Jazeera, Éufrates y Raqqa, Tabqa, Manbij, Deir ez-Zor se añadieron a las primeras regiones establecidas. El nombre para las regiones administradas por el CDS se denomina Administración Autónoma de Siria del Norte y del Este. Las mujeres kurdas han estado al frente de esta lucha y la han hecho suya. Las mujeres kurdas han estado al frente de esta lucha y la han hecho suya. Las comandantes que entrevisté en 2016 insisten en que no sólo luchan porque son kurdas, sino también porque son mujeres: para ellas, la lucha es también contra la dominación masculina dentro de la comunidad kurda y en todo el Medio Oriente. El logro de la igualdad de género es uno de los aspectos más importantes de la lucha en curso en Rojava, y un ejemplo sin precedentes en Oriente Medio. En una entrevista reciente en las Naciones Unidas, con Nubuhar Mustafa, una mujer kurda de la Junta Asesora de Mu15
jeres Sirias, dice que “la mentalidad patriarcal está arraigada en las sociedades en general y en Oriente Medio en particular. Donde se niega la participación de las mujeres en general, ya sea en el avance económico, en los procesos políticos, en la administración del país o en la toma de decisiones... La participación de las mujeres en cualquier lugar y momento es muy importante” (junio de 2019). Añade que en un país devastado como Siria, la participación de las mujeres en los procesos de paz, a pesar de que los hombres las menosprecien, es una señal de confianza en sí mismas y de esperanza para el futuro de las mujeres en Siria. Para las mujeres kurdas en Rojava, es importante buscar maneras de asegurar que las mujeres no sean sólo instrumental para la causa nacional durante la revolución y devueltas a sus hogares después, como se vio en las reacciones negativas que las mujeres enfrentaron después de las revoluciones en Vietnam, Rusia y Francia. Por lo tanto, las mujeres kurdas han comenzado a organizarse en áreas que mejorarían su estatus en la sociedad local. Por ejemplo, la construcción de nuevas instituciones educativas ha sido una forma de involucrar no sólo a las mujeres sino también a los hombres en el cambio social a largo plazo. El sistema de copresidencia conformado por un hombre y una mujer el cual se aplica en todas las instituciones a todos los niveles es otro indicador importante del cambio social a largo plazo. La declaración del Movimiento de Mujeres Kurdas sobre su visión de una sociedad igualitaria se basa en la idea del confederalismo democrático: “Mientras luchamos por la liberación de la mujer, también luchamos por todas las demás formas de opresión, bien sea relativas al género, la etnia, la clase o la religión. Frente a la amenaza de ISIS, creemos que nuestra mayor victoria sería construir una sociedad libre de toda opresión, en la que las personas de diferentes etnias y religiones puedan vivir juntas en paz y en democracia. Esto no puede lograrse mediante la continuación de las estructuras existentes de los Estados-nación, el patriarcado y el 16
capitalismo, que fue lo que ocasionó esta crisis, en primer lugar. A cambio, estamos estableciendo una alternativa a los sistemas existentes, una “tercera vía”. Esta tercera vía se llama confederalismo democrático. El confederalismo democrático se basa en el paradigma de una sociedad basada en la democracia, la ecología y la liberación de la mujer; una coexistencia pacífica de todas las etnias y religiones. Es un modelo democrático para una democracia directa y radical, organizado por el pueblo desde la base en comunas y asambleas. Este modelo, basado en la autoadministración más que en un Estado nacional centralizado y monocultural, fue desarrollado por Abdullah Öcalan, el fundador del movimiento de liberación kurdo”. (https://kurdishsolidaritynetwork.wordpress.com/2016/11/06/ the-womens-movement-in-rojava/) La organización social de base en Rojava (norte de Siria) se inspira en la filosofía del líder kurdo preso Abdullah Öcalan, que ha estado recluido en régimen de aislamiento en la isla turca de Imrali desde su captura en Kenia en 1998. Mientras ha estado en prisión, la filosofía de Öcalan ha experimentado un desarrollo significativo, yendo más allá de una teoría, bastante ortodoxa de liberación nacional basada en la tradición marxista-leninista, a un marco mucho más ambicioso basado en una concepción renovada de la libertad, la democracia y la comunidad. Por lo tanto, el objetivo original de establecer una nación socialista independiente de Kurdistán cambió hacia la autodeterminación que se cree pueda ser alcanzada a través de la democracia radical. Es más, Ocalan ha criticado al Movimiento de Libertad Kurdo por luchar para establecer un Estado-nación kurdo, sobre la base de que el Estado-nación era el resultado del resultado del ambiente politico y social del siglo XX y que el Estado-nación se consideraba entonces como la única forma de autodeterminación. En su nuevo paradigma ideológico radical, el Confederalismo Democrático, Ocalan argumenta que las formaciones de Estados-nación no necesariamente traerán la democratización, ya que los derechos 17
humanos, la libertad y la democracia han sufrido bajo la ideología de los Estados-nación ( Jongerden 2017). En ese sentido, hay tres cantones y cientos de comunas construidas en el norte de Siria como reflejo del Confederalismo Democrático el cual se organiza considerando las necesidades de las personas que forman las comunas en sus barrios, aldeas, pueblos y ciudades. Cada comuna tiene un representante en las asambleas ampliadas formadas por comunas. Por ejemplo, si un problema no es resuelto en la comuna local, se apelará en una asamblea ampliada representada por varias comunas. Bajo el sistema comunal del norte de Siria, las mujeres también han formado sus propias comunas para atender sus necesidades y problemas y es uno de los pasos importantes para institucionalizar la igualdad de género en la sociedad. Así, mientras que cada comuna está representada bajo el TEV-DEM (Movimiento para una Sociedad Democrática), las comunas de mujeres están representadas bajo el partido Kongreya Star, como mencioné brevemente en la introducción. Cada comuna tiene cinco comités que incluyen salud, educación, comité de resolución de problemas, comité de economía y comité de defensa personal.(https://kurdishsolidaritynetwork.wordpress. com/2016/11/06/the-womens-movement-in-rojava/). Academias Jineoloji La crítica profunda sobre los orígenes de la dominación tiene claras implicaciones feministas: al hacer esta crítica, las mujeres de Rojava no sólo se unieron a las filas armadas de YPJ (Unidades de Protección de la Mujer), sino que abrieron Institutos Jineoloji y centros de mujeres para educarlas ideológicamente para una nación democrática. En la Universidad de Qamislo, en el norte de Siria, hay un Departamento de Jineología que se parece a los programas de Estudios de la Mujer en Occidente pero con una filosofía diferente. El sistema que existía en Rojava bajo el régimen sirio era uno en el que las mujeres estaban en gran parte ausentes de la economía, la educación, la defensa y la organización social. La Revolución Rojava deconstruye el sistema anterior y creó alternativas, en primer lugar, estableciendo la presencia de 18
las mujeres en todos los sectores en los que antes estaban ausentes. Estos institutos son lugares donde las mujeres descolonizan el sistema educativo anterior mediante la implementación de un currículo intersectorial que abarca la diversidad del norte de Siria y la construcción de un movimiento en torno a estos institutos. ¿Qué es primero Jineoloji? Jineoloji como una nueva forma práctica y teórica de conocimiento surge de las múltiples opresiones de las mujeres kurdas ante el nacionalismo, el patriarcado, las dificultades económicas, el Estado y el colonialismo. Las mujeres kurdas critican los “esfuerzos académicos feministas” diciendo que se han hecho de forma limitada en asuntos modestos y restrictos al trabajo académico. Y la producción de conocimiento se mantiene bajo el control de un sistema hegemónico y se vende por un trabajo remunerado, por lo que argumentan que el retorno de las obras de los eruditos ha sido limitado. En el libro de jineoloji dice: “Jineoloji será una forma de conocimiento producido en las academias alternativas, donde el conocimiento producido se dedicará a toda la sociedad, y también tiene como objetivo infundir este conocimiento en las vidas de las personas. Por lo tanto, hablamos de las nuevas formas de academias, que emplearán un lenguaje sencillo y herramientas de comunicación a las que todas las mujeres puedan tener acceso”. Además, en una entrevista, una de las instructoras de estos institutos, Zozan Sima, dice: “Las mujeres que no pudieron encontrar su lugar en los movimientos feministas dominantes, formaron diferentes movimientos feministas y continuaron su lucha allí. Aunque esto ha tenido un impacto tremendo en la teoría feminista en términos de multiculturalismo, también ha causado que las mujeres actúen desorganizadamente y ha afectado la posibilidad de trabajar juntas sobre una base común. Ha habido solidaridades limitadas y periódicas, sin embargo, a pesar de los muy difíciles y graves problemas de las mujeres, no se ha desarrollado una lucha por la libertad sostenible e institucionalizada de las mujeres. Es más, ha habido esfuerzos para escapar de la organización. 19
En lugar de esperar a que la teoría y el movimiento feminista incluyan al Movimiento de Mujeres Curdas, con el objetivo de expandir el movimiento feminista, ellas encuentran necesario desarrollar el jineoloji en lugar de llamarlo feminismo curdo con las lecciones aprendidas de los años de experiencias de las mujeres curdas. Las mujeres kurdas sintieron la necesidad de transferir el dinamismo que se ha logrado en las esferas política y social al ámbito académico. Aunque el jineoloji no se limita al campo académico, es una de las bases importantes para ello. A Jineoloji le parece peligroso y problemático que los teóricos feministas delimiten el trabajo académico a las universidades. Autonomía e igualdad de género La circunscripción del norte de Siria no sólo incluye o reconoce a los kurdos, sino también a los armenios, sirios, árabes, turcomanos y ezidis. La idea de autonomía democrática se opone directamente a la ideología del Estado-nación, especialmente en Oriente Medio, donde está estrechamente ligada a las ideas de homogeneidad cultural y étnica. El nuevo sistema en Rojava es más bien un sistema multicultural, multilingüe y multirreligioso que está diseñado para “permitir la participación legal de individuos que sean capaces de movilizarse y organizarse en función de su etnia, religión, género y clase”. Es un sistema de autogobierno que rechaza el modelo de administración centralizada. Este es el modelo de autogobierno defendido también por el movimiento kurdo en la frontera con Turquía. El 6 de septiembre de 2018 se construyó un nuevo modelo de administración sobre la base del sistema cantonal declarado en 2014: Consejo Democrático Sirio que pretende ser un modelo para la Siria posconflicto y propone una Siria federativa que podría ser gobernada desde el gobierno local en lugar de un gobierno centralizado e incluir a todos los diferentes grupos étnicos y religiosos y que aboga por la igualdad de género en todos los segmentos de la sociedad. El Consejo Democrático Sirio es una ala política que gobierna tres regiones autónomas principales: Eurfrates, Jezeera y Afrin. Estas regiones no están reconocidas ni por el gobierno sirio ni por el Estado internacional. 20
Se establecieron refugios para mujeres en cada ciudad de Rojava, donde las abogadas defienden a las mujeres que se enfrentan a la violencia, ya sea política, social o doméstica. Hay centros llamados Mala Jinan (Casa de Mujeres) que comenzaron a establecerse en 2011, donde las mujeres buscan ayuda cuando enfrentan problemas. La violencia contra las mujeres es el foco principal de estas casas. Estas casas también funcionan como centros de mediación o de resolución de disputas; si los problemas no pueden ser resueltos en estas casas, sólo entonces son llevados a los tribunales. En mis entrevistas con Meryem Kobane y Roza Haseke, miembros de alto rango del YPJ, ambos subrayaron la importancia de Abdullah Öcalan en la Revolución Rojava y el espacio que se ha abierto para las mujeres dentro de ella, que se remonta a 1979, cuando visitó Siria por razones politicas y de organización. Estas mujeres luchadoras prefieren llamarse a sí mismas “unidades de protección”. Y dicen: “La revolución no cambió la vida de las mujeres en una noche, sino que les dio visibilidad, ¡las mujeres son visibles ahora ! Dicen que las mujeres luchadoras estuvieron entre los primeros mártires de Rojava; luchan para proteger su tierra y a su gente. Sin embargo, para que las mujeres sean reconocidas como agentes de la sociedad, es necesario cambiar todo el sistema. Dicen que es importante reconocer que las mujeres no son sólo luchadoras en Rojava, como se dice en los medios de comunicación occidentales, sino que también lo son en todos los campos. Estas mujeres definen la autoprotección de manera amplia, no limitándose a participar en la autodefensa militar de los cantones autónomos, sino protegiéndose a sí mismas contra la dominación masculina y la opresión étnica, protegiendo sus pensamientos, idioma y derechos culturales. Para las mujeres de Rojava, todo esto necesita ser protegido, y si no te proteges a ti misma, serás oprimida y atacada fácilmente. La autoprotección no debe entenderse sólo como tomar las armas, sino como organizarse y luchar por sus derechos sociales, políticos y cívicos, y el derecho a la protesta. El cambio que se está produciendo en las regiones kurdas autónomas de Siria no debe percibirse como un simple cambio de 21
poder, que pasa del control de un gobierno o de una etnia a otro, sino como una transformación social que permite que las minorías tengan voz y voto y participen en la dinámica del poder a medida que se construye una sociedad más igualitaria. En la región más amplia, hay una reacción violenta contra los derechos de las mujeres, y Rojava es un ejemplo prometedor de un camino hacia la igualdad de género que el mundo occidental debería apoyar. Mientras trabajan para construir una sociedad basada en un compromiso sistémico con la equidad de género, las mujeres de Rojava quieren dialogar con organizaciones internacionales de mujeres y compartir sus experiencias. Las mujeres kurdas y la guerra Mientras que los hombres son imaginados como guerreros, las mujeres son asociadas con la paz y en su mayoría representadas como personas que se oponen a los conflictos. ¿Ha cambiado el papel de las mujeres como “agentes de paz” para las mujeres kurdas o no, ya que han tomado las armas y luchado activamente en el campo de batalla, convirtiéndose en parte de la `violencia’? Cuando entrevisté a Roza Hasake, una comandante kurda de las YPJ (Yekineyen Parastina Jin - Unidades de Protección de la Mujer) en el norte de Siria[2], respondió a mis preguntas sobre la asociación de las mujeres con el pacifismo y si se ve a sí misma como pacifista o no: La existencia de movimientos de paz me da fuerza, es muy importante para nosotros. Luchan para detener la guerra. Sin embargo, veo que sus esfuerzos no son suficientes. Por ejemplo, hay guerras ahí fuera, y cómo responden a eso. Creo que sus esfuerzos no son contundentes. Las mujeres que lucharon en Afganistán, Libia, Egipto no son diferentes de las mujeres de Kurdistán/Rojava (Siria), nuestro dolor es el mismo, nuestra lucha por la paz también es la misma. Por esa razón, los esfuerzos de paz deben ser iguales para todas las personas. Cuando luchábamos en Kobane, millones de personas de todo el mundo se unieron en nuestro favor, lo que significa que hacemos lo correcto, que luchamos por la paz y que estas personas se unieron por nosotros, nos apoyaron. Sin embargo, los esfuerzos de paz no son suficientes contra esta guerra horrible... Tengo responsabilidades, no puedo vivir 22
sin hacer nada. Necesito detener esta guerra y protegernos. Ojalá pudiera hacer más en esta lucha. Hay una guerra en Siria y en los países vecinos. Hay tantas cosas que hacer. Soy uno de los camaradas de YPJ, pero no necesariamente luchamos y permanecemos en combate. Nos educamos a nosotras mismas, educamos a otras mujeres y personas y nos involucramos en el trabajo social. Dondequiera que la gente nos necesite, trabajamos allí. También hacemos trabajo político. (Isik, 2016)Ella no se identifica sólo como luchadora, sino como educadora, política y trabajadora social. Su respuesta también sugiere que necesitamos repensar el concepto de pacifismo con respecto a las mujeres combatientes kurdas. A medida que ha cambiado el lugar de la guerra, también ha cambiado el significado de los espacios que ocupan las mujeres. Hoy en día, los conflictos se producen en muchos espacios diferentes y a nivel local, nacional e internacional. Las mujeres pueden transformar estos lugares y de hecho lo hacen. Por ejemplo, el ejemplo de las Madres de Mayo, las madres de desaparecidos durante las guerras sucias en Argentina, o las Madres de los Sábados en Turquía, madres de kurdos desaparecidos en la década de 1990, son ejemplos de mujeres que ocuparon el espacio público durante o después de la guerra.
El Patriarcado como Negación del Matriarcado Perspectiva de una Quimera C. v. Werlhof - 2003 - Traducción del inglés Penélope Herrera
Comentario Preliminar Hasta el momento, he venido estudiando la sociedad patriarcal más que la matriarcal por la simple razón de que me considero a mí misma como una mujer matriarcal que en realidad no entiende el patriarcado. Es por esto mismo que me urge analizarlo, lo que justamente es otra manera de decir que el problema de hoy no es el matriarcado, sino el patriarcado. Mi análisis se apoya en la tesis de que el patriarcado no es un orden social independiente sino que, al invadir la sociedad matriarcal explota, cambia, y destruye los modos de vivir, sentir y pensar 23
originalmente matriarcales. Si bien este postulado -binario y antagónico en su aspecto formal- parezca pasar por alto la complejidad de la sociedad, le resulta útil al propósito de formular con la mayor claridad posible las diferencias entre el matriarcado y el patriarcado. Tan sólo sobre esta base se puede analizar adecuadamente la verdadera complejidad de la sociedad. ¿Qué es el “Patriarcado”? Tesis y campo de investigación Según mi propia tesis, y analizado desde un punto de vista matriarcal, el patriarcado no es, en o por sí mismo, un orden social completo, una cultura o una civilización como tal. No es independiente de la sociedad matriarcal: más bien se ha desarrollado a partir de su negación. Visto como tal, es factible llamar al patriarcado una quimera. El hecho de que éste no pueda existir o tener su propia realidad en el sentido de una definición propia acentúa aún más su carácter fantasmagórico. Patriarcado significa literalmente “el padre es el comienzo” o “padre útero”, ya que la palabra griega arché, que compone las palabras patriarcado y matriarcado, significa originalmente “comienzo, origen, útero”. No fue sino hasta mucho más tarde, en tiempos patriarcales, que “arché” adquiriría el significado de “dominio” o “dominación”. De este modo, el patriarcado se mantiene como una perspectiva, una idea, una Utopía, el proyecto de una sociedad que anhela profundamente privarse de la madre e independizarse de la naturaleza, hacia un estado de desconexión de su intervincularidad con todas las otras formas vivientes. No obstante, los esfuerzos para concretar esta Utopía se encuentran vigentes, lo que ha resultado en el “patriarcado” como “dominación paterna” (lo que viene a ser arché, en su sentido secundario y patriarcal). Este proyecto, sin embargo, al ser propio de la época moderna, no sólo busca una realización del dominio del “padre”, sino también su materialización “técnica” como el “padre útero”, único creador de la vida. Porque el patriarcado, en el sentido original de la palabra arché -si es que acaso existe- ha sido y es bastante escaso. 24
En el proceso de materialización del proyecto patriarcal, se ha desatado tal destrucción de la vida -especialmente de la mujer y la naturaleza-, que su enorme proporción indica un rayar del patriarcado en sus propios límites. Todo parece indicar que esta carrera entre destrucción y “producción”, que no es otra que la construcción del patriarcado, ha llegado a su último estadio y será, muy probablemente, decidida en un futuro muy cercano. El patriarcado, a la luz de esta perspectiva, debe ser entendido como un proceso que contínuamente extiende sus fronteras y que, al mismo tiempo, tiende a incrustarse cada vez más. Aunque este proceso obviamente se encamina hacia su conversión en un “sistema”, es decir un orden total y sin “afueras”, su naturaleza inacabable significa su propia imposibilidad de llegar a un término. Su actual fase capitalista como sistema global (“la globalización”) se muestra, hasta el momento, como su más violento y final período, en el que muchas tendencias patriarcales de la historia se acumulan o alcanzan su clímax. Con esta tesis me opongo y contradigo a todos aquellos que entienden al patriarcado solamente como “el dominio del padre” sin siquiera preguntar las razones que dan luz al deseo de dominar, como si este acto fuese en sí mismo una necesidad masculina. También me opongo y contradigo a todos aquellos que literalmente se yerguen en el otro extremo de mi tesis y se niegan a ver las conexiones entre el patriarcado y la modernidad, considerándolo más bien un fenómeno atávico, en naturaleza pre-moderno, anticuado y “tradicional” que –visto desde la perspectiva del progreso tecnológico – se muestra anacrónico y en vías de una extinción ¡supuestamente espontánea! ¡Qué ironía, puesto que el progreso tecnológico es lo más patriarcal de la modernidad como se verá! En general también me opongo y contradigo a todos aquellos que luchan en contra de toda periodización histórica que ahonda más allá de los tiempos modernos, la Edad Media o la Antigüedad y a aquellos que se rehúsan a echar una mirada a los tiempos “prehistóricos” y a los predecesores del patriarcado. Esta estrategia les permi25
te negar la existencia, tanto de las sociedades matriarcales como de los orígenes del patriarcado, para así considerar especialmente las primeras como irrelevantes. En contraste a esta visión, me permito hacer una advertencia con las palabras de Johann Wolfgang von Goethe: “Aquel que nunca suele mirar atrás por más de 3.000 años, permanecerá en las tinieblas, contento de vivir día tras día, sumido en el llanto (Diván occidental-oriental, 1819). Y por ultimo, sin duda alguna me opongo y contradigo a aquellos que simplemente piensan de forma inmanente al sistema al rechazar la visión del patriarcado como un fenómeno histórico. A cambio de esto, lo consideran ahistórico, en el supuesto de que ha existido desde tiempos inmemoriales como un orden social independiente, “necesario”, e incluso como el “mejor orden posible”, es decir, aquel que posee la capacidad especial de “evolucionar” hacia un estado de “civilización”, esto es, el único orden relevante al que valdría la pena atender. Desde mi punto de vista, el término patriarcado no debe ser tan sólo un término general, cargado de vaguedad y útil al combate político, sino que, más que cualquier otra cosa, debe ser un concepto teorético básico para lograr una comprensión tanto global como detallada del origen, desarrollo y futuro del orden actual de nuestra sociedad.
Las bases de Jineolojîs
Introducción “Una ciencia desarrollada en torno a la mujer será un primer paso hacia una sociología correcta” Así como durante el Siglo XXI la ciencia, la política, la ética y muchas instituciones sociales se encuentran establecidas, este siglo será también aquel en el que triunfe la libertad de las mujeres. Esta evaluación está basada en el ascenso de la lucha de las mujeres en varias geografías del mundo, particularmente en Kurdistán. La lucha de las mujeres por la libertad se ha convertido en una diná- mica principal del desarrollo de la libertad social. Mientras que la libertad de las mujeres, como un índice de la libertad de toda la sociedad, ha alcanzado un potencial capaz de progresar 26
más que nunca, es también el momento de enriquecer todos los valores so- ciales en el campo científico. La ciencia de las mujeres – Jineolojî – se define como una ciencia social que se corresponde con el espíritu de la época actual. Ji- neolojî es una definición de origen kurdo. Consiste en las palabras Jin; mujer y Lojî; ciencia. El líder kurdo Abdullah Öcalan utilizó por primera vez esta definición en su libro “Sociología de la Libertad” escrito en 2008. Ahí explicó por qué es necesario este concepto: En el discurso masculino las líneas que se refieren a la mujer, dejando su sello tanto en las ciencias sociales como en cualquier otro campo científico, tienen enfoques propagandísticos, que no tocan para nada la realidad. En estos discursos, la verdadera posi- ción de la mujer es ocultada cerca de cuarenta veces más de lo que de por sí las historias de la civilización ya ocultan; clase, explota- ción, opresión y tortura. En vez de feminismo, el concepto de Jineo- lojî (ciencia de las mujeres) puede ser más apropiado para alcanzar este objetivo (la Sociología de la Libertad). Esta conceptualización abrió una importante discusión en el Movimiento de Liberación de las Mujeres de Kurdistán. Después de que estas discusiones alcanzasen un cierto nivel, en el octavo congreso del Partido de la Libertad de las Mujeres de Kurdistán (PAJK), se creó un grupo que jugaría un papel fundamental en el estableci- miento de Jineolojî. En vez de ser un grupo reducido de investiga- ción, esta unidad trabajó con la perspectiva de transmitir el discur- so de la ciencia de las mujeres a la sociedad. El proceso de discusión que inicialmente comenzó en las academias en las Montañas de Kurdistán se ha expandido gradualmente a la sociedad. Actual- mente Jineolojî esta organizada en comités en las cuatro partes de Kurdistán, Europa y Rusia. Allí donde introducimos los conceptos de Jineolojî, la gente nos hace preguntas acerca de la relación entre ciencia y organización; ciencia y comunidad. Nosotras también te hacemos esas mismas preguntas: ¿por qué existe actualmente una distancia tan gran27
de entre ciencia y sociedad? ¿Por qué la relación entre ciencia y sociedad, y por tanto entre problemas sociales, es tan débil? Buscaremos respuestas a estas preguntas mientras in- tentamos explicar porqué Jineolojî es una necesidad. Este folleto incluye secciones relacionadas con qué tipo de necesidades dieron a luz a la ciencia de las mujeres y a las estructuras de conocimiento, métodos y áreas de aplicación basadas en el marco conceptual e institucional de Jineolojî. Esperamos que puedas encontrar respuesta a tus preguntas a cerca de la relación entre ciencia y comunidad, a sus métodos, a nuestras críticas a la relación de la ciencia con el poder, a nuestra relación y divergencias con otras líneas de pensamiento que tienden a la realización de la libertad de las mujeres. Lo que es más importante, este follto incluye las evaluaciones a cerca de cómo la información obtenida por el Movimiento de Liberación de las Mujeres de Kurdistán a base de la experiencia vivida creó una fuente de recursos para Jineolojî. En primer lugar Jineolojî responde a la pregunta ‘¿Por qué una ciencia de mujeres?’. De hecho, su fundación surge de dar respuestas a esta pregunta. Creemos que incluso este proceso, que es tan sólo un comienzo en la creación de esta ciencia, cambiará las ciencias sociales. Pensamos que las evaluaciones científicas de Jineolojî serán un paso progresivo hacia una renovación en el mundo conceptual, que a cambio traerá un contenido libertario a las instituciones sociales. Además, creemos que, con esta iniciativa, los lazos universales que tenemos, y que continuarán estableciéndose con los movimientos de muje- res en todo el mundo, se fortalecerán y las bases para los debates se multiplicarán. Jineolojî tiene el objetivo de transformar no sólo la autodeter- minación de las mujeres, sino que también con sus críticas al Esta- do, transformar los sistemas de poder, las institucionalizaciones y las mentalidades construídas en torno a él. Por tanto, puede jugar un papel crucial en el establecimiento de la Modernidad Demo- crática como una alternativa a la modernidad capitalista patriarcal. Por esta razón, como Movimiento de Mujeres Libres de Kurdistán trabajamos en el establecimiento de Jineolojî, 28
y creemos que ase- guraremos su desarrollo mediante nuestros esfuerzos morales, po- líticos e intelectuales. En la primera parte del folleto titulada ‘¿Por qué Jineolojî?’ ini- cialmente sentimos la necesidad de definir la ciencia. Examinamos y criticamos la relacion de las ciencias sociales con el poder en su establecimiento e institucionalización, y el positivismo que penetra en la ciencia y causa la fragmentación del tejido social. Intentamos responder a preguntas como: ‘¿de qué manera se ha desarrollado la relación entre las ciencias sociales y el poder y cómo esta relación ha distorsionado la ontología de la mujer?’; y ‘¿cuáles son los an- tecedentes de nuestro posicionamiento acerca del problema de la metodología en las ciencias sociales y la necesidad de un cambio?’. En la segunda parte, evaluamos las bases de Jineolojî. Hemos incluído aspectos de la experiencia obtenida del Movimiento de Liberación de las Mujeres de Kurdistán, que constituye los funda- mentos de esta iniciativa científica. Presentamos nuestros análisis acerca de las resistencias de mujeres en el mundo y las experiencias de las luchas de clases y los movimientos de liberación nacional. Intentamos responder a preguntas como “¿cuál es la importancia de Jineolojî en el paradigma de la Modernidad Democrática?”. Tam- bién discutimos sobre la relación de Jineolojî con la Sociología de la Libertad. Intentamos explicar la posición de Jineolojî en el sistema confederal de mujeres y el partido ideológico. Reflexionamos sobre los puntos de vista del feminismo junto con sus aspectos comunes y diferenciadores. La tercera parte está relacionada con los métodos de Jineolojî. Esperamos que puedas encontrar respuesta a preguntas como “¿qué tipo de método prevee Jineolojî para superar el positivismo en las ciencias sociales?”, “¿cuáles son los métodos para alcanzar conocimiento y cómo se relacionan con la sociedad?”. La cuarta parte incluye la relación de Jineolojî con las ciencias sociales, las diferencias metodológicas y las áreas propuestas en las que actuará Jineolojî. 29
Esperamos que cuando leas este folleto sientas la misma emoción que nosotras cuando Jineolji se enmarcó como concepto, y que desafíe las barreras y moldes de lo que antes habías pensado. Si esto ocurre, significará que vamos por el buen camino porque Jineolojî es una objeción radical a las estructuras mentales actuales. Así como las objeciones de Jineolojî sean conocidas, la sociedad cambiará en la misma medida. Fluirá en el mundo de la mujer como un río que encuentra su cauce. De este modo desarrollará una solución a la crisis social basada en la realidad. Las mujeres que son conscientes de sí mismas son su propia esperanza para el futuro, y su número crecerá junto con el crecimiento de Jineolojî. LAS BASES DE JINEOLOJÎ A. Una base principal de Jineolojî es la Lucha de Liberación de las Mujeres Kurdas El paradigma del Partido de los Trabajadores de Kurdistán (Partiya Karkerên Kurdistan, PKK) que se esfuerza por desarrollar una manera organizada en la búsqueda de la realización de la libertad colectiva, surgió bajo la influencia de las ideas de izquierda y los movimientos sociales de los años 70. Sin embargo, desde su fundación, la lucha de liberación de las mujeres fue expresada como un deber. La creencia de que la libertad de la mujer es requisito para la libertad colectiva es crucial para los conceptos y estructuras del PKK. Desde el comienzo de esta configuración, Sakine Cansız jugó un papel crucial luchando por asegurar una organización en torno a la mujer. En su tercer Congreso, el PKK dio los primeros pasos hacia una organización distintiva. La esencia de la Lucha de Liberación de las Mujeres de Kurdistán se manifestó en los primeros análisis de personalidad. Los análisis a nivel personal revelaron datos importantes sobre cómo la realidad social había influenciado en la formación de la personalidad. La evaluación llevada acabo por Öcalan en el tercer Congreso del PKK, “Lo que se está analizando es la sociedad, no el individuo; es la historia, no el momento” puede ser considerada como una contribución importante al análisis por la transformación social y su conceptualización. 30
El primer paso en la transformación de la lucha por la libertad en un poder organizado, que comenzó con el cambio individual, fue la fundación de la Unión de Mujeres Patriotas de Kurdistán ( Yekiti- ya Jinên Welatparezên Kurdistan, YJWK) en 1987. Esta organización cuestionó la construcción de la mujer y la familia en las condicio- nes históricas e inició debates sobre los problemas de la organiza- ción de mujeres. Con la manifestación de YJWK, se comenzó a des- tacar la liberación de las mujeres así como las perspectivas sobre la liberación nacional y de clase. Las primeras evaluaciones teóricas acerca de la explotación patriarcal sobre las mujeres fueron hechas durante este proceso. Estas evaluaciones teóricas fueron integra- das al tejido social y compiladas en el libro de Öcalan, “La cuestión de la mujer y la familia en Kurdistán”. YJWK, la primera organización de mujeres en Kurdistán, que se desarrolló con un carácter revolucionario y libertario, organizó y llevó acabo trabajos excepcionales en el período entre 1987 y 1993. Los logros que obtuvieron las mujeres y las transformaciones que consiguieron con su lucha por la libertad en este período, dieron como resultado una perspectiva y un marco teórico únicos sobre la liberación de la mujer dentro del PKK. Rompiendo con los esquemas mentales de la sociedad, este marco teórico encontró respuestas muy rápidas en una realidad práctica. Con la fundación del ejército de mujeres en 1993, se produjeron más cambios sociológicos fundamentales en el PKK. La fuerza y voluntad principales que se han obtenido con la lucha armada se utilizaron entonces para la continuación y amplitud de la organización de la YJWK. El ejército de mujeres jugó un papel importante en la multiplicación de las experiencias de las mujeres kurdas y en el conocimiento que se consigue a través de él. Gene- ró un espacio en el cual las mujeres que querían salir de la espiral de la modernidad capitalista y del patriarcado podían expresarse por sí mismas. La base de la participación masiva de mujeres en las fuerzas armadas del PKK consistió en la decisión de las mujeres de separarse de todo tipo de relaciones hegemónicas. 31
El levantar las armas en las montañas para luchar por la libera- ción de Kurdistán creó experiencias muy fuertes para las mujeres que querían enfrentarse a todo tipo de ataques de la modernidad capitalista. Mientras las mujeres kurdas lucharon por su existencia contra el Estado nación, también lucharon contra los hombres por su existencia en la primera línea de la guerrilla. El conflicto mental dentro de la guerrilla mostró que la alianza entre el patriarcado, el capitalismo y el Estado se ha filtrado por todas las grietas sociales; por tanto no es suficiente con solucionar el sistema mediante la perspectiva de la lucha de clases y los movimientos de liberación nacional. Se hizo claro que la liberación de la mujer tenía que ser desarrollada mediante un análisis más profundo del sistema. Al mismo tiempo se volvió evidente la necesidad de las mujeres por una alternativa, por estructuras organizativas autónomas. La lucha de las mujeres contra todo tipo de marginalización y discrimina- ción desafió el tejido social construido en base al poder fuera y den- tro del movimiento. En este proceso que se definió como la “lucha de género” dentro de la guerrilla, la mujer obtuvo conciencia sobre la auto-defensa contra las implicancias de la dominación mascu- lina y contra los ataques directos. Lo más importante: se entendió que la libertad de las mujeres no era un tema que podía posponerse para después de la solución de la cuestión kurda. La necesidad de luchar en cada momento contra las perspectivas dominantes mas- culinas se manifestó como una verdad básica en las organizaciones de mujeres de Kurdistán. El curso de las mujeres en busca de la libertad hasta la primera línea de la guerrilla está relacionado con la existencia de una orga- nización y funcionamiento dentro del PKK que eran vistos como una respuesta a esta necesidad. De este modo, era un escape de los centros urbanos donde la modernidad capitalista y las estructuras patriarcales delimitaban fronteras. Al mismo tiempo, se llevó aca- bo de forma exhaustiva un importante crecimiento en el activismo social y la búsqueda por la libertad. Las experiencias y acumulación a partir del ejército de mujeres creó una base para el avance de la lucha de liberación de las mujeres. La Unión por la Liberación de las Mujeres de Kurdis32
tán ( Yeki- tiya Azadiya Jinên Kurdistan, YAJK) fundada el 8 de Marzo de 1995, fue un paso decisivo en el surgimiento del vínculo entre libertad y organización. Con la declaración de YAJK, la organización autóno- ma de mujeres fue reflejada en todos los dominios de la lucha, lo que jugó un papel importante para lograr la auto-organización del potencial y la politización de la mujer. Su campo de acción se expandió en términos organizacionales de las montañas a las ciudades. El ejército de mujeres llevó a las mujeres a presentarse como poderosas y de voluntad fuerte en la lucha y la batalla por su existencia. Las mujeres en resistencia de un pueblo colonizado experimentaron en un sentido social cuánto podían mostrar su poder de voluntad cuando se organizaban. La organización de YAJK y sus resultados proporcionaron una base para la teoría de Abdullah Öcalan; “Matar al macho dominante”. El lado explotador, hegemónico, embriagado de poder de los hombres empezaba a ser cuestionado. Al mismo tiempo, se definió que los hombres también necesitaban liberarse a sí mismos de las pautas pa- triarcales. La teoría del “Divorcio ilimitado”, que tenía como objetivo el visibilizar la cuestión de la libertad para ambos, mujer y hombre, se convirtió en un paso importante que permitía a ambos géneros el ser conscientes de su propia realidad. Esta conceptualización contribuyó a la concientización de la mujer sobre su propio poder y al fortaleci- miento de su voluntad haciéndose eco de sus experiencias de vida. La Ideología de Liberación de la Mujer, que fue declarada en 1998 y válida hasta el día de hoy, se abrió al debate como una teoría. Es más, estas discusiones no se llevaban a cabo por un grupo de élite reducido; todos los hombres y mujeres en el PKK eran in- cluídas en este proceso de debate. La Ideología de Liberación de la Mujer fue conceptualizada en cinco principios básicos que crearon nuevos fundamentos de vida para las mujeres, el primer pueblo en haber sido colonizado.
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RECOPILATORIO CAMINOS DE LA AUTONOMÍA BAJO LA TORMENTA 24 de marzo 2021