4FNBOB EFM BM EF NBZP EF t "×P 7* t /
www.eldiadezamora.es
El MMT Seguros se juega mañana, en el último partido de Liga, ante el Granollers, la permanencia en pág. 18 ASOBAL
¿Quién será el alcalde del AVE?
Director: Eugenio Jesús de Ávila Juárez
El Lunes dePentecostés se celebra la 725ª Romería de La Hiniesta, en la que se esperan unos 5.000 pág. 19 romeros
El 24 de mayo, se celebran los comicios locales y regionales más inciertos de la democracia P . 3 11 ÁG
A
El PSOE llevará ante la Fiscalía los nuevos escándalos en tres fotovoltaicas en Toro P . 15 ÁG
Foto: Esteban Pedrosa
Votar o no votar, esa es la cuestión
En la fotografía del gran Esteban Pedrosa, obras en el complejo de la estación del ferrocarril, preparativos para recibir al AVE. El 13 de junio, día de la investidura del nuevo alcalde o alcaldesa de Zamora. La pregunta, como reza el titular, es saber quién será la máxima autoridad política de nuestra ciudad cuando el AVE penetre en la ciudad, desvirgando un sueño que parecía imposible. ¿Será hombre o mujer?
Si el Hombre no hubiera dudado, Dios existiría. Votar o no votar. Primera duda. Si logras despejarla, aguarda la segunda incertidumbre: ¿A qué partido votar? Un servidor, ha tiempo que no duda de que este sistema electoral es injusto, que nuestra democracia es una gran farsa, un fraude y que aquí no hubo ni un segundo de gobierno del pueblo. Sostengo que la castidad es la mayor perversion sexual, como votar es la depravacion máxima del intelecto. Sí, no he perdido la cordura. Votar unas listas elaboradas por los jefes de cada partido es poner la rúbrica a una cacicada. Votar con el actual sistema electoral forma parte de la injusticia. Votar, cuando no hay separación de poderes, perpetúa la partitocracia. La abstención se impondría tras un análisis profundo del sistema. Ahora bien, a una gran mayoría del personal, estabulada, le causa cierto placer votar, como si la urna fuese un gineceo. Absténgase, si es un demócrata radical. Vote, si cree que usted decide. Haga como un servidor: que el político piense que nos creemos sus mentiras. Y dude, incluso, después de votar o abstenerse. Por Eugenio J. de Ávila.