Visión Empresarial #36

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visi n e m p r e s a r i a l

revista de la Escuela de Ciencias Económicas y Empresariales Año 7 • No. 36 • 2011

• Colaboración en línea

Edmundo Marroquín

Ivet Díaz de León Claudia Galindo Correa

• Cómo afecta a las universidades la crisis económica

Eduardo López Chávez

• Clase 2010: Reflexión sobre tecnologías educativas Daniela Noguez Enríquez

• Tu marca personal en las redes sociales Daniel Antón García

Administración por confianza Jorge Huerta Bleck


Estimados lectores: En este número de Visión Empresarial contamos con la participación de nuestra Academia de Informática. Tomando en consideración que vivimos en una época en la que es más frecuente el uso de nuevos recursos que le permiten a las personas, empresas y organizaciones mantenerse en contacto con sus clientes y amigos, decidimos –hace poco más de un mes– poner en marcha un nuevo proyecto: Visión Empresarial en las redes sociales. Con este proyecto pretendemos abrir un nuevo canal de comunicación con nuestros seguidores y posicionarnos como un foco de información para los alumnos, profesores y graduados de la Escuela de Empresariales de la UP e incluso, por qué no decirlo, para la sociedad en general. Los invito a contactarnos vía internet a través de nuestro sitio oficial o bien en nuestras redes sociales: Sitio oficial: http://empresariales.up.edu.mx/visionempresarial www.facebook.com/vision.empresarial.ecee www.twitter.com/VisionEmpreUP

http://rvempresarial.blogspot.com/

ECEE Escuela de Ciencias Económicas y Empresariales Dirección General Antonio Castro D’franchis Secretaría Académica Francisco A. Loría García de Acevedo Secretaría de Asuntos Estudiantiles Jefe del Área de Humanidades Ma. de los Milagros Avelar Soltero Secretaría Administrativa Alma Rosa Lima Álvarez Dirección de Administración y Finanzas Jefe del Área de Finanzas Eulalio González Anta Dirección de Administración y Recursos Humanos Jefe del Área de Recursos Humanos Ma. Luisa Pimentel Zamudio Dirección de Administración y Mercadotecnia Jefe del Área de Mercadotecnia Mario Luis Cortés Mencia Dirección de Administración y Negocios Internacionales Jefe del Área de Negocios Internacionales César H. Herrera Castillo Dirección de Contaduría Dirección de Administración y Dirección Jefe del Área de Administración y Dirección Jorge Huerta Bleck Dirección de Economía Jefe del Área de Economía Gabriel Pérez del Peral

Saludos cordiales, Eduardo López Chávez Coordinador general Revista Visión Empresarial

Dirección de Posgrados y Extensión Universitaria Pedro Salicrup Río de la Loza Jefe del Área de Control e Información Directiva Miriam Paniagua Pinto Jefe del Área de Matemáticas José Cruz Ramos Báez Jefe del Área de Informática Edmundo Marroquín Tovar Jefe del Área de Derecho Juan G. Araque Contreras

Responsable de esta publicación: Eduardo López Chávez elopez@up.edu.mx Tel: 5482 1600 ext. 5454 Diseño y cuidado de la edición: revista .


Jorge Huerta Bleck

Director de las carreras de Contaduría y Administración y dirección

Administración por confianza El nuevo juego

En 1905 se celebraba en la Universidad de Saint Louis Missouri un partido colegial de futbol americano. Lo especial de este juego es que fue el primero en el que se introdujo una nueva regla: el pase adelantado. Anteriormente sólo se permitía acarrear el balón corriendo o dando pases laterales y hacia atrás. Los dos equipos sabían sobre esa nueva regla, pero sólo uno comprendió que existía un nuevo paradigma y que debía adaptarse rápidamente. El otro equipo, simplemente perdió. El mundo actual ha cambiado de paradigmas, y quizá nosotros estamos en medio del juego sin conocer ni siquiera las nuevas reglas. —Tengo mi dinero invertido en un banco mexicano, no entiendo el asunto de la bolsa y ni siquiera me interesa comprar dólares, ¿por qué me va a afectar la crisis financiera? —¿No que México estaba muy bien en sus finanzas? ¿y que la Unión Europea es sólida económicamente? —¿Por qué está pasando esto? ¿por qué unas hipotecas no pagadas en Estados Unidos afectan tanto al mundo entero? Lo cierto es que en este año todo indica que vamos a enfrentar una crisis muy seria o, para ser más precisos, seis crisis entrelazadas: la hipotecaria, la del petróleo, la financiera, la crediticia, la comercial y la crisis de la confianza.

Existen numerosos artículos sobre las primeras cinco crisis, pero aquí nos interesa hablar sobre todo de la sexta, pues si nos enfocamos en ella podremos generar rentabilidad en nuestras organizaciones.

Activos financieros y activos personales

—De acuerdo, las reglas han cambiado. Ahora tengo que invertir más en mi negocio, mis clientes no me pagan, mis proveedores y acreedores están molestos y me presionan para que yo pague y lo peor de todo, nadie presta dinero. Mi empresa tiene 30 años en el mercado. Sus pronósticos de venta eran elevados, pero ahora debo lograr que mis proveedores surtan la mercancía y me den cierto margen de pago. La verdad no veo cómo sobreviviré. El asunto es, de manera inmediata, un problema de flujo, pero en el fondo es un problema de confianza. Nuestros proveedores, acreedores, clientes y toda nuestra cadena de valor pasan por circunstancias similares. La pregunta no es ¿vamos a tener problemas?, sino ¿cómo los vamos a enfrentar juntos? Todo empresario entiende que lo que le ayuda a generar riqueza son sus activos financieros, pero pocas veces nos enfocamos en otro tipo de activos que, aunque no aparecen en el balance­, son tan reales que efectivamente nos ayudan a generar riqueza. Estos activos no financieros son el profesionalismo, la experiencia, las relaciones laborales, los anhelos y los propios gustos.


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Los activos “intangibles”1 o “personales” se caracterizan porque –como el amor– crecen cuando se comparten. Si quiero hacer rendir los activos personales, debo compartirlos, y esta dinámica ayudará a que se incrementen, pues dependen y necesitan de la interacción para actualizar su fuerza.

Desear produce: la visión personal de oportunidad

Un buen amigo, Guillermo, me dio un ejemplo del alcance que tienen los activos personales. Memo siempre manifestó interés por dos áreas: la contaduría y el futbol; quiso jugar a nivel profesional, pero prefirió prudentemente apostar primero por su carrera. Resulta que al pasar de los años, Memo conoció a unos inversionistas internacionales quienes se dieron cuenta de su notable nivel como contador y le propusieron montar una empresa en México; así comenzó a realizar su primer deseo. Gracias a ese trabajo, conoció luego a otras personas que lo invitaron a colaborar con su organización en Finlandia. Guillermo quiso perfeccionar su formación en una universidad local y vio la oportunidad de participar en la selección representativa de la institución que juega a nivel semiprofesional... así cumplió con el segundo de sus sueños. Al paso del tiempo, regresó a México y por su trayectoria profesional y relación con el futbol, logró colocarse como gerente administrativo de uno de los clubes de futbol más representativos de nuestro país. ¿Qué podemos obtener de este itinerario? Las enseñanzas son muchas, pero aquí me ciño a subrayar una: Memo tenía una visión personal de oportunidad y cuando pudo aprovecharla, lo hizo. De no ser así, quizá hubiese jugado futbol unos años y luego perdido su futuro por una lesión o hubiese hecho una carrera estándar como contador en cualquier empresa trasnacional... pero hasta ahí.

Nuestra propuesta: administrar por confianza

Para lograr que nuestros activos financieros y personales participen en la misma dinámica presentamos un modelo al que llamaremos “administración por confianza” 2 y, conforme a él, propondremos una presupuestación novedosa.

Los modelos tradicionales de presupuestos nos indican que los negocios se hacen fundamentalmente con dinero y otros activos financieros. En este modelo, aunque dichos activos participan, lo realmente esencial son otros tres tipos de activos: 1. El deseo de querer llevar a cabo un proyecto. 2. La disponibilidad a arriesgar mis talentos. 3. La capacidad para compartir confiadamente en otros para ponerlos en actividad. Para ejemplificar, iniciemos nuestro presupuesto de la forma tradicional e imaginemos que se trata de una empresa dedicada a la capacitación de personal. Cuando esta empresa prepara un evento, su presupuesto podría quedar más o menos así: Ventas $100,000 (100 participantes a $1,000 por cabeza) Renta de auditorio (35,000) Publicidad escrita (10,000) Publicidad por correo (4,000) Conferencista (20,000) Equipo de sonido (7,500) Materiales del participante (3,500) Utilidad esperada $ 20,000

Varias conclusiones

Tal vez es demasiado esfuerzo como para ganar sólo $20,000. El financiamiento es de $80,000. Si no tengo el dinero, tampoco tendré el evento. Si alguien me prestara, la utilidad –de por sí escasa– se reduciría aún más. Una vez terminado el evento, tengo algunas posibilidades de continuidad sólo con base en la calidad de mi expositor y los potenciales clientes entre el auditorio (100 personas). Por tanto, si queremos mejorar el modelo, deberemos tomar en cuenta los activos personales: know how, red de contactos, conocimiento del sector, etcétera.

La ganancia

Posiblemente no cuento con un auditorio propio, con un diseñador in house o con el equipo de sonido; pero


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Ejemplo para potenciar activos Ventas Ventas online Renta de auditorio Publicidad escrita Publicidad por correo Conferencista Equipo de sonido Materiales del participante Utilidad esperada

$120,000 (120 participantes a $1,000 por cabeza) $100,000 (1000 participantes a $100 por cabeza) (31,500 a crédito) (10,000 como aportación) (0) (20,000 como aportación) (7,500 como aportación) (2,500 a crédito) $148,500

Tabla 1

otros sí tienen todo esto. Además, yo sé de capacitación, el manejo de la audiencia y la preparación de materiales de calidad. Dos observaciones: siempre hay algo que aportar y siempre se conocen personas con las que podemos multiplicar esa aportación. Por tanto, pensemos en un acuerdo con una empresa de eventos y un despacho de diseño. La primera empresa aportará la relación con el auditorio, obtendrá un descuento de 10%, crédito por 60 días sin ningún interés e instalará el equipo de sonido sin cobrar; además, podrá grabar sin costo el evento y crear un archivo apto para subir a internet. El despacho aportará el diseño y obtendrá un buen descuento de los impresores y el crédito necesario; también lanzará una promoción por correo electrónico, creará un sitio y aportará el curso online para potenciales nuevos usuarios a fin de incrementar las posibilidades de ventas. En nuestra empresa y proyecto imaginarios, podemos explotar las bases de datos disponibles y enfocarnos en ello mientras nuestros socios hacen lo mismo3. Es importante aprovechar la experiencia propia y realizar nosotros mismos la exposición sin contratar a un conferencista adicional. De esta manera potenciamos todos nuestros activos y desembolsamos lo menos posible (Tabla 1). ¿Quiere decir que ahora mi utilidad es de $148,500? Evidentemente no, pues ahora tengo una serie de socios entre los que hay que repartir el pastel; sin embargo, el pastel es más grande y la necesidad de efectivo radicalmente menor. De hecho, en el ejemplo planteado puedo arrancar el negocio con 0 pesos.

Si se repartiese el remanente directamente contra la aportación generada, la idea y cada servicio tendrían que tasarse como un porcentaje de las “acciones” del negocio y, al final, cada uno podría cobrar sus servicios y un porcentaje adicional, proporcional a su aportación. Ésta debe acordarse previamente según se valoren las diversas ideas, servicios, descuentos, créditos y demás activos personales en juego.

Algunas consideraciones

Este modelo nos obliga a considerar que en toda cadena de abastecimiento basada en la confianza, más que relaciones cliente-proveedor, requerimos relaciones de socios. Además, nos recuerda que tanto las empresas como las personas, tenemos muchos más activos de los que creemos y que, en la medida que generemos asociaciones inteligentes, con una mentalidad de ganar-ganar, todos lograremos nuestros propósitos. Por cierto, el marcador final del partido de futbol americano fue 400 puntos contra 11.

Para evitar confusiones con la clasificación contable de activo intangible de las normas de información financiera, a éstos les llamaremos activos personales. 2 Este modelo lo ha desarrollado Arturo Ortega Ibarra, CEO de Concepto Total. 3 Nótese que en el esquema tradicional a estas personas las hubiéramos definido como proveedores, ahora el término se he redefinido a socios. 1

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Daniela Noguez Enríquez

Profesora de tiempo completo de la ECEE Academia Informática

Clase 2010:

Reflexión sobre tecnologías educativas La Cumbre de Líderes en Acción por la Educación, CLASE 2010, se realizó del 25 al 27 de octubre de 2010. En este espacio se dio un diálogo nutrido de propuestas de innovación en torno a la educación, promoviendo bases para un nuevo debate educativo en nuestro país. Alrededor de treinta y cinco mentes brillantes en materia de educación se reunieron en México para compartir sus experiencias alrededor de tres ejes temáticos: 1. Cambio sistémico 2. Nuevas pedagogías 3. Tecnologías de información aplicadas a la educación A continuación comparto el análisis del tercer eje temático con la finalidad de aportar bases tecnológicas para un cambio educativo en nuestro país.

Tecnologías de información aplicadas a la educación

Una de las áreas educativas que ha formado parte de nuestro sistema educativo, en los últimos tiempos, es el área de tecnología de información aplicada a la educación. La realidad mundial nos da la pauta a seguir y justo esa realidad es la que nos impulsa a crear nuevos modelos educativos basados en la tecnología. Un ejemplo son las redes sociales que han revolucionado la manera de comunicarnos; concebir la realidad académica sin ellas sería dejar de lado las nuevas ten-

dencias globales, no sólo laborales sino sociales y por supuesto académicas. Para ello es preciso fomentar la búsqueda de un mejor profesorado que desarrolle las habilidades y competencias adecuadas al modelo pedagógico que plantea la realidad educativa; fomentar la creación de sociedades académicas, para generar sociedades de conocimientos, basadas en el trabajo colaborativo coadyuvadas de las herramientas tecnológicas, para que el alumno sea capaz de adquirir los conocimientos de una manera novedosa y creativa de tal manera que tenga un proceso de enseñanza y aprendizaje significativo. Enseñar a través de la tecnología de la educación permite formar alumnos flexibles a los cambios transversales de la sociedad, capaces de aportar una respuesta al mundo laboral con igualdad y profesionalismo. Es responsabilidad de todos los que nos dedicamos a la docencia entender las necesidades reales de nuestros alumnos, así estamos construyendo una educación más justa y más libre y desarrollamos una mejor calidad educativa para nuestro país. Parte importante de nuestro análisis es entender y asimilar que los organismos internacionales, recomiendan puntos que ayudan a elevar los indicadores educativos y que por medio de la tecnología educativa podemos incrementar los estándares educativos de manera más accesible.


Con base en la reflexión de las nuevas herramientas para el aprendizaje, comparto los siguientes seis puntos en la innovación de la educación: 1. La educación debe ser la prioridad más alta de innovación de un país y con ello se logrará expandir la capacidad del hombre. 2. La escalera de aprendizaje debe entenderse desde la niñez hasta el profesional adulto. 3. Contar con los mejores maestros, que deben estar preparados de manera integral en aspectos como: arte, deporte, salud, naturaleza, conocimiento, etcétera. 4. Adaptar las prácticas innovadoras de otros modelos mundiales para crear nueva educación. 5. Realizar el proceso de enseñanza y aprendizaje como una experiencia significativa. 6. Entender y asimilar que los medios electrónicos están cada vez más cerca y que debemos aprender a vivir con ellos como parte de nuestro desarrollo educativo y por consiguiente laboral. Con base en los medios electrónicos, podemos mencionar que la vida escolar debe ser cada vez más como la vida real, es decir, incluir medios electrónicos en la educación: correo electrónico, blogs, páginas web y redes sociales; de esta manera tendemos a crear una educación más auténtica y práctica. Los siguientes puntos nos permiten aportar temas de análisis para un mejor modelo educativo basado en las tecnologías: 1. Pensar en la nueva forma de educar la manera de actuar. 2. Realizar programas escolares con cambios sistemáticos en la evaluación (más creativa y más activa). 3. Aplicar la tecnología educativa, donde permita ampliar el tiempo de aprendizaje. Aprender todo el tiempo. Ahora bien, las tecnologías educativas debemos usarlas y demostrarlas, crear el espacio, que

permita que el profesor y el alumno se sientan en un ambiente cómodo para que logren una reciprocidad académica. A su vez, la tecnología es tan rica y tan versátil que ayuda a mantener evidencias sobre los elementos educativos que se desarrollan, siguiendo el modelo por competencias, que permite realizar portafolios de evidencias donde podemos almacenar y corroborar los conocimientos aprendidos en un tiempo determinado. Uno de los puntos que favorece el uso de la tecnología en la educación es apreciar la captación de atención que puede lograr casi inmediata del alumno, puesto que está diseñada, con base en modelos didácticos, a favorecer el proceso de enseñanza y aprendizaje, pero no podemos ser absolutos; el alumno es humano y puede ser que les sirva a algunos y, por supuesto, a otros no. Para tener un proceso cognitivo por medio de la tecnología educativa podemos individualizar la enseñanza, formando grupos pequeños que sean atendidos por profesores con las competencias tecnológicas que beneficien a la comprensión de los conocimientos. Mencionaré los puntos relevantes para crear grupos virtuales que favorezcan al aprendizaje: 1. Introducción de una infraestructura de informática educativa (programas de estudio y administración) 2. Una clase es un grupo de alumnos que están con medios digitales 3. Agrupaciones dinámicas con base a sus logros aprendidos 4. Individualización educativa basada en proyectos académicos: Tutoría de alumnos. • Recursos visuales • Experimentos en laboratorios de cómputo • Educación a distancia • Actividades de evaluación a distancia • Plataformas tecnológicas basadas en la educación


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Es importante señalar que las características que nos van a permitir desarrollar la tecnología educativa en nuestra instituciones son las siguientes: • • • •

Cooperación Comunicación Creatividad Tecnología

Algunos estudiosos han comprobado que la creatividad se da de manera más eficaz, cuando se desarrolla en grupos pequeños donde el aprendizaje se puede dar de manera colaborativa. Las tecnologías educativas se componen de artefactos técnicos que se utilizan como sustentáculo para lograr una mejor articulación del proceso de enseñanza aprendizaje. (Chávez, 2008, p.40). Es de vital importancia tener tecnología educativa en las instituciones educativas, en el presente y para el futuro por los beneficios que reportan al aprendizaje del alumnado. A continuación enlisto los beneficios de estas herramientas (Ibid. p.48 y 49): • Favorecen la colaboración e interacción entre profesores y alumnos. • Fortalecen las comunidades de aprendizaje a través de recursos virtuales. • Propician el desarrollo de habilidades para trabajar en red alejados del aula. • Facilitan el seguimiento y retroalimentación oportuna a las necesidades del profesorado y alumnos. • Fomentan la cultura de la información, la comunicación a través de redes y el manejo eficiente de las nuevas tecnologías. • Permiten tener acceso a otras fuentes electrónicas de información y a una mayor variedad de recursos tecnológicos, a la vez que facilitan el trabajo en espacios virtuales. • Ayudan a que los alumnos se responsabilicen y se comprometan con su propio aprendizaje. • Facilitan a los alumnos la organización de su tiempo. • Incrementan la colaboración de los estudiantes con sus compañeros y profesores.

Ahora comentaré los puntos que debe tener un maestro, cuyo objetivo será formar ciudadanos capaces de afrontar los desafíos del siglo XXI. Competencias docentes (perfil del profesor) • Coherentes • Cognitivas • Emocionales • Tecnológicas • Sociales • Autonomía personal • Capacidad de trabajo en equipo • Capacidad crítica • Capacidad de razonamiento, comunicación oral y escrita • Formación intelectual • Capacidad de innovación e investigación • Capacidad digital: ser capaz de utilizar y aplicar las TIC • Trabajar atendiendo la diversidad de alumnos • Dominio de otras lenguas • Comportamientos en contextos multicultural • Trabajo en equipo • Equidad • Políticas • Cohesión social A manera de conclusión, debemos centrar nuestros esfuerzos en generar, a través de la tecnología, aprendizajes que se correspondan con las necesidades del siglo XXI; promover un aprendizaje relevante; aprovechar el potencial de las tecnologías educativas que impulsen a un aprendizaje colaborativo centrado en el alumno; mantener una reformulación de la concepción, formación y actualización del profesorado. Debemos cimentar el significado de los recursos virtuales y de la tecnología educativa, que debe asemejarse a la realidad laboral y fomentar la cultura de la información, para que los alumnos tengan competencias adecuadas al entorno tecnológico y laboral al que con seguridad se enfrentarán. Bibliografía CHÁVEZ, José de Jesús. Práctica docente y nuevas tecnologías. Universidad de Occidente. México, 2008. p. 40-49


Daniel Antón García

Egresado de la carrera de Contaduría

Tu marca personal en las redes sociales El personal branding o desarrollo de una marca personal es un concepto relativamente nuevo introducido por primera vez en 1997 por el especialista Tom Peters en su obra 50 claves para hacer de usted una marca; consiste básicamente en convertirnos en nuestra propia marca y apuntar a saber venderse de la mejor forma, ir más allá de la experiencia de cada uno y contemplar quién es la persona, sus valores y habilidades para mostrar una ventaja competitiva. Las herramientas hoy existentes en la red, conocidas como sitios web 2.0, permiten la interacción y colaboración entre usuarios en un ambiente de intercambio de información, con diseños centrados en ellos. Esta tendencia de la web 2.0 a crear sitios de socialización nos lleva a preguntarnos el alcance real de estas herramientas, que va mucho más allá de sólo ser medios de interacción entre individuos, que incluso en algunos casos desconocemos. Debemos delinear qué uso queremos dar a estas herramientas, a fin de convertirlas, más que en medio de interacción social en una herramienta de marketing de nuestra marca personal. Para ello, antes que nada, debemos corregir nuestra imagen en la red.

Corregir la imagen propia en la red

Una imagen uniforme de nosotros mismos es imprescindible, hay que presentarse al mundo como una persona coherente y evitar el error de pensar que sólo

tus amigos visitarán tal o cual red social y nadie más verá las fotografías que tan apasionadamente etiquetas en tu perfil de Facebook y Flickr o aquellos videos que subes a YouTube, así como la foto graciosa de tu perfil de Twitter. La pregunta que debes plantearte es: mis perfiles en las redes sociales, ¿reflejan realmente mi imagen como quiero que el mundo la perciba? Si no reflejan a la persona que debes mostrar a fin de venderte como marca, tienes trabajo por hacer. Por ejemplo, puedes tener en LinkedIn un perfil profesional, expresar que eres experto en esto o aquello y por otro lado tener una colección de fotografías de parranda, del último viaje con los amigos o de tu novia en tu perfil de Facebook; todo esto quita coherencia a tu identidad profesional en internet. Recuerda que el mundo no sólo incluye a tus amigos o familiares, tal vez a algunas personas les pueden interesar tus servicios o productos, y algunas otras quisieran ofrecerte un empleo, sin embargo, esto no será posible si tú mismo saboteas tu imagen en la red. Puede sonar cruel y tajante para algunos, pero llegó el momento de preguntarse si queremos utilizar las redes sociales con fines de esparcimiento o como herramientas perfectas para marketing de tu marca personal, es decir, promocionarte a ti mismo como profesional. Para ello es importante crear una identidad congruente con la realidad; preguntáte quién


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eres, qué habilidades tienes y qué ofreces al mundo para que cuando llegue la hora puedas ser coherente con tu oferta y servicios. Una vez definida tu marca y uniformada tu presencia en la red debes identificar algunas herramientas disponibles que te ayudarán a aprovechar al máximo los beneficios de las redes sociales como medios de marketing, algunas te permiten evaluar los resultados de la participación de tu marca en la web. Sitios como oneforty.com brindan variedad de estas herramientas creadas por terceros para desarrollar el marketing de marcas en redes sociales. Revisemos 15 herramientas básicas para el marketing social de tu marca personal: 1, 2 y 3. Facebook, Twitter y LinkedIn son la norma y base de las redes sociales, pero algunos subestiman su importancia e impacto. Dependiendo del giro de tu actividad, probablemente LinkedIn esté más acorde a tu perfil. Facebook es ideal para presumir sólo un poco tu faceta personal y Twitter es ideal para pláticas cortas en tiempo real con gente de tu industria o interesada en tus actividades. 4. Google alerts te mantiene al tanto sobre lo que se dice de ti, tu blog o tu empresa. 5. Delicious es una excelente forma de señalar lo que es importante para ti y tu marca; a veces resulta frustrante no tener el control de todas las cosas que quisieras volver a ver, esta herramienta lo hace fácil. 6. Wordpress es un blog hecho a la medida. Puedes mostrar quién eres, lo que sabes y por qué la gente debería poner atención en tu marca personal. ¡Utiliza Facebook y Twitter para atraer tráfico a tu blog!

7. Flickr es la plataforma ideal para mostrar las fotografías en buena calidad de algún producto, servicio o evento al que asististe. 8. Ning unifica a Facebook y Twitter. Personaliza tu marca y construye una comunidad alrededor de ella. 9. Twitalyzer indica a cuánta gente impacta tu marca y cuándo es el mejor momento de llegar a ellos. Así podrás liberar tu contenido del blog en el tiempo apropiado para que sea visto por más personas y mantengas la presencia en medios de tu marca personal. 10. Postrank es de mucha ayuda para conocer la relevancia de los sitios así como de tus propios posts o publicaciones; sabrás lo que la gente comparte y podrás enfocarte en esos temas. 11. Bit.ly es ideal para acortar los links y compartirlos de forma eficiente en Twitter y otros sitios. También te permite llevar el control estadístico de cuántos clics lleva cada link publicado. 12. Backtype consiste en un motor de búsqueda en tiempo real para noticias y opiniones con relación a tu campo. 13. About.me te permite combinar y unificar la información y links de todos tus perfiles en redes sociales (que para estas alturas ya deberían estar uniformes), de esta manera tendrás un fácil acceso a tu marca personal desde un solo sitio. 14. Wisestamp. ¿Envías correos electrónicos? Incluye una firma digital con links a tu blog, página y redes sociales. 15. Plaxo. Al construir una marca personal es importante mantener el control de tus contactos, con plaxo puedes importarlos y acceder a ellos cuando lo requieras. Recuerda que construir una marca personal, ya sea un producto, servicio o marca corporativa lleva tiempo, esfuerzo, mucho cuidado y no se hace durante la noche.


1. Edmundo Marroquín 1

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Jefe de área. Academia de Informática

2. Ivet Díaz de León

Profesora de asignatura de la Academia de Informática

3. Claudia Galindo Correa

Profesora de asignatura de la Academia de Informática

Colaboración en línea Las Tecnologías de Información y Comunicaciones (TICs) han permeado a todo tipo de industrias y negocios y las universidades no son la excepción.

A finales del milenio pasado, Edmundo tuvo la experiencia de trabajar con dos profesores en un proyecto colaborativo en línea. Al inicio de su día laboral recibió vía correo electrónico un documento que trabajó un profesor en Inglaterra; Edmundo aportó su colaboración en ese mismo documento y al final del día lo envió a un profesor en Nueva Zelanda, quien a su vez continuó con las aportaciones. Al final de “su día”, el profesor de Nueva Zelanda envió la colaboración al profesor en Inglaterra. El documento estuvo activo prácticamente las 24 horas y los tres profesores concluyeron el proyecto rápidamente. Hace unos años, trabajar virtualmente para elaborar este artículo hubiera implicado un ir y venir de correos electrónicos con diferentes versiones de un documento anexo y llevar un control preciso para no perder las aportaciones de cada quien. En cambio, nuevas ideas surgieron y se plasmaron en este documento mientras trabajábamos en nuestras oficinas virtuales, sin enviar un solo correo electrónico, sin complicarnos por el control de versiones. Cada quien trabajó en su momento y si revisamos el documento al mismo tiempo fue mera coincidencia. En nuestros días actuar de manera virtual implica realizar actividades personales o profesionales en cualquier lugar (casa, transporte, restaurante o lugar público) en el que tengamos acceso a internet.

Esta era virtual ha revolucionado nuestra manera de trabajar a tal grado que ya no es indispensable disponer de un espacio fijo para realizar muchas actividades profesionales que hasta hace unos cuantos años hubiera resultado imposible llevar a cabo fuera de las tradicionales oficinas. No cabe duda que ha cambiado la manera de estudiar, de hacer negocios, socializar, investigar, comprar y viajar, y es por ello que no podemos dejar atrás el proceso de enseñanza–aprendizaje. Afortunadamente contamos con las TIC’s que posibilitan las nuevas formas de colaboración, pues hoy las necesidades educativas también están evolucionando. La educación de calidad derivada de la sociedad de la información se convierte en una herramienta al servicio del profesor. Los profesionales de la educación debemos afrontar los nuevos retos y estamos obligados a atender cuestiones locales con visión global de la problemática propia de la sociedad de la información; para lograrlo se requiere compromiso, innovación, desarrollo de competencias y planificación estratégica. La Universidad Panamericana fue la primera universidad en México en hacer una alianza con Google para ofrecer a todos los alumnos, empleados y egresados una cuenta de correo con el dominio @up.edu.mx, con un amplio espacio de almacenamiento y el uso de herramientas como chat, video, edición de documentos,


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presentaciones y hojas de cálculo en línea para facilitar el aprendizaje y la elaboración de proyectos de manera colaborativa. La UP invirtió en estas nuevas tecnologías para que todos los servicios estén disponibles vía internet: desde la consulta de calificaciones y saldos hasta la realización de proyectos y exámenes en línea, enriqueciendo así el proceso de enseñanza-aprendizaje. Una universidad de vanguardia necesita profesores que adopten las nuevas tecnologías y las utilicen para incentivar al alumno a desarrollar proyectos novedosos mediante el uso de estas herramientas. Por eso es fundamental que los docentes desarrollemos nuevas competencias colaborativas en el alumnado. Recordemos que son otra generación, que su manera de comunicar es totalmente diferente, utilizan diferentes dispositivos electrónicos, internet y redes sociales. Para llegar a ellos es preciso pensar como ellos. Debemos subrayar que el trabajo colaborativo tiene fuerte impacto en el proceso de aprendizaje, ya que no solo colabora en la adquisición de conocimiento sino en el desarrollo de habilidades informáticas, comunicativas, tolerancia, respeto, interacción social y confianza en sí mismo. Uno de los principales retos es hacer llegar el conocimiento al alumno y que desarrolle competencias colaborativas que le serán útiles en su vida estudiantil y profesional. Un ejemplo de que esto ya se lleva a cabo es la alianza que hizo la UP con iTunes University, una iniciativa de Apple para compartir videos y audios con la comunidad académica mundial y derivado de ello se lanzó a toda la comunidad estudiantil el proyecto “Cuéntamelo en 5 minutos”; en donde alumnos participaron creando videoclips que ya están disponibles para todo el mundo académico. Considerando las nuevas necesidades que generan los cambios tecnológicos, en el área de Informática desarrollamos una estrategia de enseñanza-aprendizaje de manera colaborativa, que no se limita al salón de clases sino que fomenta la colaboración con compañeros de otros salones e incluso del campus. La intención es desarrollar competencias como liderazgo, creatividad, trabajo en equipo, gestión de proyectos, autoaprendizaje y habilidades en el uso de herramientas informáticas, de comunicación y de organización. En una reunión de profesores de la academia de Informática se comentó la maravilla que implica ser alumno en estos tiempos. Los jóvenes tienen hoy enormes ventajas para encontrar información valiosa y la posibilidad

de comunicarse con compañeros de clase y profesores es prácticamente instantánea gracias a los adelantos tecnológicos que nos hubiera encantado tener en otros tiempos. En el área de Empresariales de la UP estamos trabajando un caso práctico que consiste en un proyecto colaborativo entre alumnos que cursan la materia de Sistemas de Información Gerencial tanto del campus Mixcoac como Santa Fe, con alumnos de distintos salones y campus. El proyecto consiste en que los jóvenes desarrollen un sitio de comercio electrónico trabajando por equipos de manera virtual. No se requieren reuniones presenciales, se trata de que lo lleven a cabo mediante las herramientas tecnológicas disponibles. Al principio, el proyecto causó incertidumbre y nerviosismo entre los participantes porque es un reto realizarlo con personas que no conoces; ahora que estamos a la mitad del camino hemos logrado captar el interés de los alumnos. Además, para ellos han sido sorprendentes los logros que pueden conseguir a través de las tecnologías y la variedad de herramientas que han conocido para desarrollarlo. No solo ha sido satisfactorio para los alumnos, los profesores también hemos aprendido a trabajar colaborativamente, de hecho, este artículo lo hemos realizado así. Habrá que esperar a que termine este semestre para ver el producto final, del que ya informaremos, pero por ahora, estamos muy satisfechos de los resultados. Escribimos este artículo utilizando “Google docs” y queda claro que hoy, para trabajar de manera colaborativa en línea no es necesario reunirnos físicamente, tampoco enviarnos el documento por correo electrónico ni llevar el control de las versiones, simplemente usar la tecnología a nuestro favor y dar forma al documento conforme cada uno aporta sus ideas y coincidir, quizá virtualmente, para editar el documento simultáneamente. En vez de que el documento se multiplique en los buzones de cada persona, todas acceden a un solo documento. Si eres de los que aún se pierde en la enorme cantidad de correos electrónicos y versiones, invita a tus colaboradores a utilizar estas herramientas. Te invitamos a vivir la experiencia y comprobar qué gratificante y enriquecedor es trabajar de manera colaborativa. Es importante que los docentes y empresarios no perdamos de vista la importancia de las competencias informáticas. Es un gran reto para la sociedad que exige además desarrollar competencias colaborativas, y no podemos dejar fuera a nuestros estudiantes, empleados y emprendedores si queremos competir en este mundo globalizado.


Eduardo López Chávez

Coordinador general del área de Comunicación e Información Institucional y de la revista Visión Empresarial de la ECEE

Cómo afecta a las universidades la crisis económica Una crisis de las magnitudes que tuvo la que vivimos en años pasados afecta a todos los sectores y personas del mundo. De aquí surge una cuestión: ¿qué tanto y en qué aspectos afecta? Aunque no lo parezca una de tantas víctimas son las universidades, repasemos un poco la situación. Empecemos por algo muy básico, la definición de universidad: según la Real Academia de la Lengua, universidad viene del latín universítas, -ātis, “Institución de enseñanza superior que comprende diversas facultades y que confiere los grados académicos correspondientes”. Por lo anterior podemos inferir que una universidad es un centro de conocimiento, innovación y creatividad; pero hay que analizar si este concepto o definición llega hasta ese punto o va más allá. Desde sus orígenes las universidades tanto públicas como privadas, son sede de las teorías económicas, políticas y sociales que han regido el destino del mundo, la trinchera desde donde las grandes mentes de la humanidad han intentado cambiar y mejorar el rumbo del planeta y su sociedad. Inclusive hoy en día, las más prestigiadas universidades del mundo son las que siguen sorprendiendo con sus grandes descubrimientos en todas las ramas del conocimiento; pero, ¿qué hay detrás de toda esa maquinaria? ¿de dónde vienen los recursos? Debemos ver el entorno que rodea a las instituciones educativas de nivel superior, es decir, qué otras

connotaciones tiene. Una universidad puede ser considerada una fuente de empleo y recursos, y como lo indica su propia definición, una fuente de conocimientos. Al mezclarse estos dan como resultado dos tipos de recursos: los humanos –el talento derivado de la adquisición de conocimiento, habilidades y competencias– y los monetarios –que ayudan a afrontar las necesidades básicas que día a día surgen. Cuando decimos que la universidad es fuente de empleo directa e indirectamente, nos referimos a los profesores que imparten su cátedra en las aulas, a los puestos administrativos y de servicio que son parte de la comunidad universitaria y a todo lo que rodea su quehacer diario: las editoriales con los textos que los alumnos demandan, las bibliotecas públicas, las típicas papelerías y tiendas de la esquina o bien los pequeños negocios de comida que apuestan por una ubicación cercana a estos centros de tránsito diario de personas, todos supeditados al paso de los estudiantes por las aulas y creando lo que se conoce como «economías a escala», es decir, aquellas pequeñas economías que surgen y se alimentan de una de mayor tamaño. Este esquema se corrompe cuando la economía de mayor nivel se ve afectada por variables exógenas, es decir, externas. El indicador por excelencia de una crisis es el desempleo, y las universidades no están exentas de este fenómeno; un ejemplo muy claro de esto es la Universidad de Harvard que durante la crisis


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de 2009 anunció la desaparición de un gran número de plazas y la reducción en algunos casos de la jornada laboral de sus empleados, debido a los gastos extraordinarios que la crisis económica les generó, situación que contribuyó al aumento del índice de desempleo en esos días. Este acontecer trasladado a una generalidad, nos permite entender la forma en que se ve afectada directamente la generación de nuevos conocimientos, es decir, si la universidad debe ser una fuente generadora de conocimiento, la reducción de personal en todos sus niveles afecta directamente a la investigación y el desarrollo que se produce en estas instituciones, ya que en muchos casos, y especialmente en nuestro país, los pocos investigadores que hay deben hacer trabajo administrativo, y utilizar en ello tiempo valioso de su investigación. De esta forma se perderán recursos como apoyos financieros nacionales e internacionales, y por qué no decirlo, el prestigio profesional de los profesores y el de la institución misma. Ahora podemos notar cómo afectará este panorama a la universidad. En primer lugar se afectará al talento humano que emerge de esas paredes, alumnos y profesores, ambos de igual importancia para el desarrollo de un país. Los profesores tratarán de inculcar en sus alumnos la mayor cantidad de conocimientos posibles considerando que ese conocimiento debería generar entre los jóvenes la curiosidad por crear algo nuevo, algo que les ayude a desarrollar sus habilidades y competencias, volviéndose innovadores y emprendedores en su caso. Sin embargo, una de las grandes deficiencias de la educación es la falta de valores inculcados en las aulas, situación que se refleja en las causas de la crisis económica de 2009, en donde observamos cómo la ambición y la avaricia por generar riqueza a partir de la nada, aplicando modelos financieros poco entendibles y difícilmente fundamentados, provocaron un desequilibrio muy marcado y difícil de nivelar en un lapso de tiempo tan corto. La falta de valores se pasó por alto durante mucho tiempo, lo significativo era reportar grandes ganancias, sin importar cómo se sustentarían en un futuro y es ahora una de las primeras afecciones que la crisis económica reclama en las universidades tanto públicas como privadas, ambas deben generar tres tipos de profesionistas egresados: los que saldrán al campo laboral a controlar los grandes emporios multinacio-

nales y nacionales con una sólida preparación técnica y moral, los que tendrán la vocación docente y sean a futuro los reemplazos de sus propios educadores, procurando dar a las generaciones futuras un enfoque más humano de la economía y la toma de decisiones, y finalmente los que al descubrir en sí mismos el sentimiento de innovación de nuevos conceptos, sean los futuros emprendedores y empresarios que busquen, además de la generación de riqueza, el bienestar de la sociedad que los rodea. Otro escenario es la universidad como fuente de recursos monetarios, donde alumnos y profesores ven truncadas sus actividades. Un ejemplo: cuando un profesor debe ser despedido a raíz de la falta de recursos en la institución o un alumno que por falta de recursos debe enfrentar la disyuntiva de seguir sus estudios o trabajar para subsistir. En el segundo caso, algunos dirían que por ello existen las universidades públicas, pero no sólo debe tomarse en cuenta el costo de la colegiatura, sino todos los gastos extras que conlleva ser estudiante universitario: transporte, comida, libros, copias, etcétera, cuestiones que a simple vista no son relevantes, pero que en realidad pueden ser determinantes para tomar una decisión. Para entenderlo mejor, debemos hablar de las universidades públicas y privadas por separado. Ambas instituciones, como mencionamos en un principio, tienen como consecuencia de sus actividades la generación de recursos, en el caso de las instituciones privadas es más evidente que en el caso de las públicas; sin embargo las últimas no sólo tienen un presupuesto asignado por el gobierno para su funcionamiento, sino que en su estructura, tienen otras formas de generar ingresos como los cursos de educación continua, seminarios para personas externas, patronatos (como en el caso de la UNAM), más todo aquello que se desprende de sus actividades de investigación y desarrollo. Ello les permite mantenerse en una situación más holgada, hasta cierto punto, que las universidades privadas, las cuales en general, para subsistir y competir en el mercado de la educación, deben enfocar buena parte de sus esfuerzos y recursos en la promoción de sus programas, ya que viven literalmente de la matrícula inscrita en sus planteles. Ambas instituciones en principio ofrecen lo mismo, educación; algunas con mayor oferta que otras, pero el gran dilema está concentrado en quién tiene mayor credibilidad y aceptación entre las empresas


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y los diferentes sectores económicos del país. Hasta hace algunos años, como consecuencia de los problemas que sufrió la UNAM con la última huelga estudiantil, las universidades privadas, parecían tener la delantera en la carrera de la credibilidad y fue éste el motivo por el que se dio un crecimiento desmesurado de la oferta educativa de universidades privadas en todo nuestro país. Surgieron nuevas opciones para los jóvenes que fueron rechazados por la UNAM, el IPN o la UAM y que no tenían las posibilidades de pagar las colegiaturas de ciertas escuelas privadas, pero sí algo un poco más mesurado e inclusive aludiendo al mercado de aquellas personas que para pagarse sus estudios debían trabajar, creando las famosas licenciaturas ejecutivas, cuyo lema gira alrededor de la frase «estudia mientras trabajas». Desafortunadamente, haber sufrido una crisis económica de grandes magnitudes, generó la necesidad de replantear todo el esquema, ya que no sólo influyó en el costo de las colegiaturas, sino en todos los complementos necesarios para la educación. En el caso de las universidades privadas, se inicia una problemática muy severa que consiste en atraer a los alumnos a las aulas, cobrando una colegiatura alta, pero que a la vez, es lo mínimo necesario para poder cubrir los gastos que se tienen para operar día a día. Para las universidades públicas, el problema está en que si bien sus colegiaturas son muy reducidas y esto les da más oportunidad a los jóvenes de estudiar una carrera; no tienen ni generan los recursos nece-

sarios para poder dar atención a la enorme demanda educativa que hay. En resumen, podemos finalmente dar una respuesta a las preguntas planteadas ¿Qué tanto y en qué aspectos afecta? ¿Qué hay detrás de toda esa maquinaria? ¿De dónde vienen los recursos? Detrás de todo hay muchos factores que influyen en el funcionamiento correcto del engranaje al que llamamos universidad, como el talento humano, los recursos monetarios, los valores socioculturales, la política, la innovación, etcétera, que por sí solos nos dan una idea del tamaño de la problemática, pero que en conjunto son cuestiones que permiten concluir que una crisis económica sí afecta a las universidades y no sólo en el aspecto monetario, hay mucho más debajo del agua que no podemos visualizar en su totalidad y que se debe atender a la brevedad posible. Debemos entender que la educación brindada en las instituciones de enseñanza superior, es factor clave en el desarrollo de la sociedad, dado que serán los futuros líderes que puedan dar una proyección distinta a la economía y política global. Tomando en cuenta ciertos valores e ideales, debemos hacer una reingeniería, aprovechando las oportunidades que toda crisis trae consigo. Hay que recordar que en época de crisis se despierta el sentido de creatividad de las personas, y es cuando podemos y debemos rectificar el camino para dar respuesta a los problemas inmediatos que la situación nos plantea, sentando las bases para evitar futuras problemáticas.

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