Rituales de identidad Poemario
Doris Melo Mendoza
Rituales de identidad Doris Melo Mendoza
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Rituales de identidad. Poemario
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Portada: Título del grabado: Doris Melo © Rituales de Identidad 1ra edición San Juan, P. R. ©Doris Melo Mendoza, 2011 Licencia de propiedad intelectual
©Todos los derechos reservados por el autor ISBN:
Ediciones Carnaval
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Rituales De identidad
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Presentación Yo soy eso que vez en este espacio, Mar, tierra, belleza tanto interna como externa. soy parte de ti y tengo como tu una pureza de espíritu que trato de mantener en este presente. Una conciencia de libre pensamiento, sin ataduras a las normas vigentes, siempre que puedo escapar. Soy rebelde y terca pero también soy flexible y me doy en amor hasta el tuétano de mis huesos. No Me gustan las controversias ni las discusiones y cuando me enfado trato de ver porque y no guardo rencor. Me veo en el espejo de esa otredad, que suelo ser yo misma. Soy librana y como tal, soy una mujer solidaria con los demás y disfruto de hacer amigos y vivo plenamente la vida porque me considero un ser gregario. Doris Melo Mendoza.
2013
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Honduras lúdicas… Me disuelve esta incapacidad de urgencia Inevitable soñada, descubriendo en el tacto de tu voz que me toca inevitablemente,
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cuando los suspiros se quiebran como
si
fueran ecos
más allá de mi alcance .
Entera, húmeda como un obstáculo me dispongo Simulando una madrugada erotizada, en éxtasis complicado me ahondo. me compongo en el testimonio del roce privilegiando la técnica del sudar y el acceso a mudas partes…
2013
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Para esparcir mis ráfagas al viento En este atardecer de palabras tras un adiós forjado en la costumbre convoco esa fragancia leve de violetas.
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para esparcir mis ráfagas al viento, sobre adoquinadas calles, que en su silencio de cenizas acallan Caminando en silencio amarillo, horas sensuales se filtran en el sin sentido, pétalos de fuego con su cálido encanto despiertan esta piel turgente. Son arpegios preñadas de rocío…
2010
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Decir silencio, soledad, vacĂo, olvido... Nadie puede cultivar la flor del no me olvides Vigilo la palabra
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que vislumbra tu presencia, que emergen en esta soledad tan lejana y me engaña de nuevo tu recuerdo.
Me invitas a soñar en las ternezas de estambre que solo son capaces de tejer las mariposas ellas, que
danzan discretamente .
Acompasadas y diáfanas con un timbre de libertad como las caracoles húmedas inmersas en mi mar profundo.
De pronto, aparece impecable tu sombra Y entonces, mis palabras bailan como
mar de luciérnagas.
Asidas de las manos, en noctámbulo rito Me seduce el misterio,
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y el deseo de tenerte
otra vez..
entonces, me miro en el espejo se refracta mi imagen entonces él, se hace eco y respuesta a lo que pienso. Sí, montada de nuevo me veo en un carrusel en un ensueño repetido y fragmentado de amores de papel…
Una ilusión descocida que se columpia de la que nunca he podido desprenderme, una mentira triste, irreal
¡Que ironía…! Mis horas sorprendidas en la pared del tiempo ¿De que forma decir tu nombre en el olvido? ¿Con qué dolor decir silencio , soledad, vacio.?
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Pintura de Paul Hedley
Ahora no sé si demando otro tiempo…
Una vez dijo Hemingway” “El mundo nos rompe a todos y nos hacemos más fuertes
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en las partes rotas”.
Mi poesía, la que escribo sin pretensión ninguna. esta, que se manifiesta, en un desordenado fluir de conciencias en mi diario morir y en volver a nacer sin siquiera saber... dónde termina uno y comienza el otro.
Me gusta meterme en el interior de lo externo, lo cual ha sido para mi una experiencia
trascendental.
es, lo que me ha permitido percibir la soledad como una marcha multitudinaria.
Y en esa soledad tan callada, de ideas muchas veces turbadoras las palabras son sumamente necesarias para poder expresar lo que
se siente 19
y lo que
sequiere
para poder decir, lo que demando en este que
Palabras de
es mi tiempo.
asombro, de dolor,
palabras de ausencia, tu ausencia. palabras con significados amorfos, palabras sin luz que no dicen nada. En fin, palabras que
muchas veces
se quedan cortas, para recoger lo que digo o
dejo de decir.
2010
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Plenitud‌
Plenitud, es todo lo que tengo porque nada busco, todo me llega, porque nada espero todo lo entiendo, porque nada se. Como dices tantas veces, cuando
me escribes en el
entre tanto
y en vez de llamarme ingenua, dices que soy inocente. Â
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El silencio ha
sido mi velero,
mi espacio sagrado y
fecundo.
El silencio, cuantas veces me ha acercado a lo profano al igual que a lo sagrado, a los mitos que me invento, los que encuentro ya inventados, A lo eterno, a lo sublime …
En el silencio me
hago frágil
y vulnerable al amor, pero también al dolor.
Me subyugan el tiempo y los alquimistas, las manos … de los que amasan ternura, como tu.
Tus manos, Suaves, otras veces frías, las que solo
he podido
sentir 22
a través de tus sencillas, pero siempre elocuentes palabras.
Tus manos, las que siempre espero. que acaricien
mi piel
con la ternura
que solo tu eres capaz de dar ya pronto… dijiste hace tanto tiempo… y me canso a la espera, me cansa esa espera porque tu nunca llegas…
2011
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Diálogos con nadie…
Los pájaros, esos, los que se acercan a mi cada mañana, esos seres
indefensas
me han dado lecciones de valor y de arrojo. cuando los veo, en su intento de volar la primera vez, luego lo intentan… hasta el cansancio …
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cuando son recogidos por sus madres y llevados de nuevo hacia el
nido…
En mis diálogos con nadie, escribo esto
y lo quiero compartir contigo
porque eres ya
Es en
también
parte de mi.
este espacio íntimo de mi habitación
recostada tarde en las noches, en las madrugadas o al levantarme con mi taza de café, cuando te escribo esto que lees, quizás sin tiempo.
Mis desestructuraciones … mis diálogos
con nadie,
mis sueños, mi música interna, pero
además la dulce
y a veces dura posibilidad de escribir estos versos, entre lágrimas y tristezas que provoca el desamor. 2008
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Atrapa el presente El presente se me resbala como a ti … pero lo atrapo, y corro tras él,
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muchas veces porque no se detiene pero yo quiero
y me gusta estar en él…
Ya esto que te comento acaba de pasar a la historia, que es la forma más elegante de llamarle olvido.
Vivo rodeada de ángeles y protegida por ellos para que no me pierda, y para ayudar a encontrarme … en el caso de inevitables extravíos.
2009
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Si yo pudiera un día…
Si algún día yo pudiera caminar por las calles libremente, sin catecismos, ni prejuicios de herrumbre, sin una Virgen como ejemplo, y golpear una piedra
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con mi pie de mujer sonreír, y
convencerme
que un hombre
sea en la exacta medida y fuerza que yo soy. Si yo pudiera, alborotar el mundo y trastornarlo, y devolverle la claridad rabiosa a su rostro ciego. Se me llenaría la cara con libertad de aguaceros. 2007
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Hombre
que
te
cuelas
en
mis
noches. Anda y ven, desnúdame no solo el cuerpo Sino todos los sentidos, Vierte en mi tu cálido silencio
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Enróscame en un ayer sin distancias Embriágame de tu simiente Y bébeme completa hasta el alma hasta embriagarte de mi ...
Vacíame de promesas incumplidas, Cólmame de certezas Enciende mis calendarios, Sin expectativas ni ataduras Hasta el cansancio dulce.
Te esperó allí, entre las sombras de la noche, en la memoria, donde tu nombre se perpetua, desde esta piel perfumada, ungida en almizcle y miel 2010
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Destinos inacabados
Mientras perdura el luto de los lienzos mustios atardeceres se suceden en la planicie de un imposible encuentro cuando se forjan Â
destinos inacabados 32 Â
en la oscuridad esquiva de un cronotopo sin tiempo.
Soy la viajera
perdida
la que guarda el secreto de lo nunca dicho, la que pasa los días y las noches rodando como valija inquieta preocupada siempre en esta nada de perderme en el limbo de la indiferencia.
Vivo en la eterna duda que, esta, mi
razón enturbia,
en la maldita hoguera más allá del hado donde Caronte me espera, con su barba tremebunda y sus ojos calcinados por el tiempo.
Quiero tejer encajes de corales
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tocar el fondo del mar, como Alfonsina‌ pero no puedo, Una sombra sin nombre me vigila desde esa otra realidad. 2013
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Redimiéndote del olvido. Se ha marchado la espuma de tus olas anudando caracolas a un pasado antiguo, chorreando pájaros y mieles desvergonzados ciegos y mal hablados,
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desde esta lluvia lánguida, en que mastico, este tiempo desgreñado donde te invento mojada de tristezas.
Desde el fondo de ese mar impetuoso, te huelo en la distancia, tu ambivalencia percibo como ausente, soliviantando tus devenires amanecidos e inciertos marcando el paso, devorando palabras sentadas en mi espalda.
Te escucho, cuando pasas entre sueños, desnudo, pisoteando caracolas que albergan tristezas en sus conchas, como si el mismo mar hubiese llegado a la conclusión de que somos esa playa sembrada de embarcaciones fantasmas…
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Ahora que soy esa canción de nadie, en que las ausencias y devenires son el sin fin de cada día, donde acorralo mis frustraciones indefensas en las cunetas exiladas del tiempo, redimiéndote del olvido.
2013
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Exilio en mi propio cuerpo. Regreso y
pretendo aceptar
que regreso con mi mejor historia Y aunque conozco el camino de memoria
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así mismo me sorprendo ¡Hay tantas cosas que no llegan nunca a ser!
He visto tanta luz convertirse en sombra y viceversa Y tanta energía gastada en
tiempos que ya no cuentan.
Vuelvo, y esta vez te pido perdón Por mis temores, por llegar tardíamente a
este encuentro, después de tantos años
Escribí mil borradores antes de verte cubrí mi cara con diez mil caretas frente al espejo biselado que
una
vez tu me
compraste
regalándome sonrisas que solo parecen muecas más todo fue inútil solo que me queda la nostalgia,
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Sí, la triste y penosa nostalgia, del exilio de mi misma, sentada en mi
propio cuerpo.
2009
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Te he buscado y ahora que llueve a carcajadas quisiera que me escribieras historias en el pelo Te he buscado, esculpiendo mis pasos sobre el tiempo.
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Te he buscado sin esperanza alguna en mis sueños lúdicos Pero no estas... Te he buscado En lo más profundo de mis sueños disfrazada de Eros, luchando por un devenir estéril.
Te esperado por tanto tiempo en cualquier tarde sentada en mi balcón y me miro aún tierna y húmeda desenredándome sin esfuerzos en las rejas de tus manos donde conocí la debilidad que habita en ti.
En medio de este vacío como noche de estrellas apagándose mientras a mi… me duele la caja del alma .
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Lo que me enreda en la pena el revolver los escombros, la basura, y ese collage de recuerdos
estrujados e inconclusos inéditos…
Me desvisto del pasado, Me emborracho de estrellas Llorando sin tiempo en los pasillos del mundo Para ver si te alejas de mis sueños. 2007
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En los bolsillos vacíos del tiempo… Viajo con las olvidadas en esta noche de luna llena, anda y ven desnúdame..
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entre las sombras de las nubes
único hombre que ha besado mi alma pero nada que ver … con esta realidad mía.
El absurdo se hace ecos de mis afirmaciones y en ese absurdo, leo detalles de tu rostro en los bolsillos vacíos del tiempo.
Una nostalgia lenta y pesarosa real como los ángeles, en momentos que vencen el miedo de todas mis ausencias, de naufragar, de ser fábula, resistiéndome al tedio, al ojo vago del hastío digamos que se llama desamparo. horizonte de tormentas.
Mientras me contempla el viento
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Aquí, en mi soledad con mi luna soñada donde las
garzas se desangran,
se azulan en humedad de mangles.
Sombras sofocadas, pétalos. en la irrealidad de la mirada. y entre la incertidumbre de este caos… comienzo a representar lo que es la vida hay tanto que mirar… y hay tanto por decir, tanta dulzura y vida me reclaman que soy ola sin mar, soy reguero de rosas sin ojal y en vano intento detener el alma…
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En soledad de azucenas. Me rindo ante la impotencia de no querer recordarte. Te siento , hasta en el silbo sudoroso de la brisa.
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Revienta tu sombra ante un grito del silencio y te haces presente. Pero ni eres cristal, ni eres espanto.
Y te contemplo en las sombras con silencio de papel lejano, todo se reduce a la nada, Un mar a bordo de vacíos Un mundo sin calor, sin alma. El que elegiste antes de tiempo…
Contigo raya la muerte en mi Corazón Pasa el tiempo y se muere el día Ningún cielo me alfombra.
La fuerza del amor late aún en mi carne. Me resisto ante el hastío
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de tus recuerdos. Se corta la tristeza Y sube la rosa desatada en mi No hay palabras, todo es armónico.
Quiero trepar del rosal al infinito Hasta alcanzar la sonata de estrellas. Unirme a los pájaros de espuma, en su blanco alar. Y allí, combatir ese reloj del tiempo En soledad de azucenas
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