Folclor colombiano práctica de la identidad cultural Octavio Marulanda Morales Lector amigo: Este libro trata de conjugar dos aspiraciones fundamentales: la primera, situar en un plano fácil y práctico el folclor (o folklore, según la catalogación internacional) de nuestro país; y la segunda, poner en relación conceptual los elementos constitutivos del patrimonio autóctono con el pensamiento y las razones históricas que ilustran la identidad cultural. Para tal fin hemos procurado aportar la información sin pontificaciones, con las miras puestas en el problema existente de la gran escasez de conocimientos que la mayoría de nuestra población tiene sobre la cultura vernácula, en los nuevos enfoques de materias estéticas aplicados a la educación pública y en la devastadora ofensiva de los gustos foráneos. En ningún caso agotamos el tema. Por el contrario, estimamos que este trabajo es apenas una introducción ampliada. En un solo volumen no sería posible sintetizar, comentar y proveer de ilustraciones gráficas el vasto acervo de folclor colombiano, ni menos aún, ubicándolo, como lo hemos hecho, en el necesario marco teórico exigido por la realidad actual y el fermento del mestizaje. Hemos escuchado también las voces de los autores y tratadistas que se han ocupado del tema con autoridad, advertidos de que falta mucho por hacer y de que algunas manifestaciones autóctonas no son aún bien conocidas, por carencia de un inventario cultural. Y en este empeño de convertir la identidad cultural en algo vivo y actuante para los colombianos, es imprescindible recordar la obra y los sacrificios de aquellos investigadores, recopiladores y divulgadores del folclor nuestro, que desde distintas especialidades, posiciones y criterios, con el telón de fondo de nuestra nacionalidad, han contribuido a evitar que desaparezcan de la mentalidad pública, los perfiles de nuestra fisonomía cultural. Hemos preferido mencionar únicamente los más conocidos a través de los medios editoriales o por su trabajo en organismos institucionales: Manuel Zapata Olivella, Javier Ocampo López, Guillermo Abadía Morales, Misael Devia, Euclides Jaramillo Arango, Delia Zapata Olivella, Julián Bueno Rodríguez, Inés Rojas Luna, Luis F. Camacho Mateus, Jacinto Jaramillo, Ciro Quiroz, Miguel Ángel Martín, Luis Flórez, Milina Muñoz V., María Luisa Rodríguez de Montes, Yolanda Mora Jaramillo, Agustín Jaramillo Londoño, José Antonio León Rey, Antonio Escobar Uribe, Raúl Silva Holguín, Antonio Molina Uribe, Miguel A. Caicedo, Jenny Figueroa Lorza, Luis Francisco Suárez O., Ricardo Savio, Joaquín, R. Medina, José Vargas Tamayo, Lucio Pabón Núñez, sin olvidar a Joaquín Piñeros Corpas, Andrés Pardo Tovar, Benigno Gutiérrez, Juan de Dios Arias, Octavio Quiñones Pardo, Gustavo Otero Muñoz, Antonio José Restrepo, Sergio Elías Ortiz y muchos más, reconocimiento que hacemos extensivo a la larga lista de antropólogos, lingüistas, etnólogos, musicólogos, sociólogos, historiadores, coreógrafos, intérpretes de música, maestros de escuela, gentes de cátedra y 15