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LAIA AIZPURUA CRUZ 2F IK1.saria

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IÑIGO SASTRE 1E

IÑIGO SASTRE 1E

ASESINATO MILLONARIO

“Muere asesinado el hijo del millonario Pablo Ayala”. Este es el titular que ha aparecido esta mañana en los periódicos del país; el titular que ha generado un revuelo totalmente esperado entre la población. ¿Quién heredará ahora el dinero del mayor millonario de los últimos 50 años? Esta duda retumba en la cabeza de millones de habitantes en este momento, mientras que todos esperan a que yo, la detective a la que le han asignado encontrar el asesinato del pobre Mikel Ayala, no sabe ni por dónde empezar. ¿Quién no querría matar al joven de 18 años más rico e insoportable del país?

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―Empezamos por la escena del crimen ―dice Naia, posiblemente la mejor policía que he conocido; cuando todavía no me he incorporado.

―El cuerpo fue encontrado en una casa abandonada, por la que llevaba sin pasar una persona como mínimo 5 años. O eso pensaban los vecinos hasta que empezaron a oler a ácido ―sigue.

― ¿Quién lo encontró? ―preguntó con intención de interrumpirla antes de que se ahogue de la emoción.

―Todos en realidad, los vecinos se reunieron para comentar el problema con el dolor, y al darse cuenta de dónde venía, llamaron juntos a emergencias ―interviene Raúl, un novato que será el mejor, sin ninguna duda.

―Muy bien, entonces tenemos un cuerpo medio desintegrado por ácido en la bañera de una casa vacía, la víctima con la mayor cantidad de enemigos que podemos encontrar y ni una pista de quién ha podido hacer esta monstruosidad ―digo, ya completamente centrada en el caso―. El padre ha informado que salió de fiesta la noche del asesinato quiero saber dónde y con quién estuvo y que le dió para dentro de una hora. Manos a la obra.

A la media hora ya me han informado de todo; hemos contactado con la discoteca donde estuvo y tenemos a todos los amigos con los que pasó la noche en interrogatorio.

―Resulta que se separó del grupo hacia la medianoche porque vio a una conocida de él ―informa Raúl.

―Has ido a su mejor amigo ―interrumpen Naia, con esa seguridad de siempre―. No ha parado de dar razones para asesinarlo, y ha dejado caer que se lo merecía.

― ¿Estás segura? No puede ser tan fácil ―respondo.

Y es verdad, algo tan planeado no puede ser resuelto con tanta facilidad. Pero Naia nunca se equivoca.

Después de todo el día intentando unir los hilos, decidimos dejarlo para mañana, informamos a nuestro general; Alex, un hombre mayor, quien tiene como único objetivo solucionar los casos cuanto antes y jubilarse. Nos da un día más, si no encontramos nada, es el mejor amigo.

A la mañana siguiente, me encuentro con uno de los camareros de la discoteca nada más llegar a la oficina. Está alterado. Me explica que él fue quien serbio a Mikel toda la noche, y que vio cómo se iba con una mujer que no conocía, un poco perjudicado. Marca el hecho de no conocer a la mujer, puesto que es raro ver a Mikel Ayala con alguien que no sea famoso.

Llega a Alex, y sin dar ninguna explicación cierra el caso.

―El asesino oficial de Mikel Ayala, es su mejor amigo, Jesús López, por celos y odio hacia el pobre joven ―dice el general, con una sonrisa de oreja a oreja.

―Esto huele a chantaje del bueno ―me susurra Raúl.

Todos lo sabemos, está claro que el millonario Pablo ha decidido meterse en el caso con intención de ocultar algo. ¿pero qué?

―Ha sido la amante de Pablo Ayala―aparece Naia, más seria que nunca y con un montón de hojas de apuntes en las manos.

―Dijiste que era el mejor amigo ―comenta Raúl dudoso

―Lo sé, pero me equivoqué ―responde ella―. Se vieron esa noche. Hacia la medianoche se encontraron en la discoteca, tomaron algo, Mikel se empezó a encontrar mal, como mágicamente, y ella se lo llevó. La próxima vez que se le vio tenía medio cuerpo desintegrado.

― ¿Se puede saber cómo sabes tú todo eso? ―pregunto yo bastante alterada y sorprendida.

―Contactos ―responde con esas sonrisillas malignas que pone cuando sabe que ha ganado.

Así que la amante… Tendremos que encontrarla si es así… Pienso para mis adentros. Y como si de magia se tratase dicen mis dos compañeros:

―Aunque perdamos nuestros puestos.

LAIA AIZPURUA CRUZ –BATXI 2F-

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