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CIUDADES
Inspiradas por otros esquemas similares en Curitiba y Bogotá, Jakarta construyó un sistema de transporte rápido de 12,9 kilómetros en nueve meses. En la actualidad hay seis rutas más y se planea su ampliación, todas con autobuses de diésel y gas natural comprimido. Se estima que el ahorro de este sistema sea de 120.000 toneladas de CO, anuales; además, se ha producido una mejora en la seguridad y en la eficiencia.
La ciudad de México ha sustituido 3.000 taxis por otros modelos más eficientes. El gobierno municipal, con el apoyo del banco local, está proporcionando 15.000 pesos (1.375 dólares americanos aproximadamente) a cada conductor que desee sustituir su viejo taxi por un nuevo vehículo, que supondría un coste de 70.000 pesos (unos 6.420 dólares americanos). La cantidad restante se liquida mediante un préstamo bancario de unos cuatro años, con mensualidades de 760 a 870 pesos (cerca de 70 u 80 dólares americanos). Los 103.000 taxis de la ciudad registran el 35% de las emisiones originadas por el transporte. El programa pretende haber reemplazado 10.000 taxis para el 2012. Este proyecto muestra también que es de vital importancia trabajar en cooperación con otros sectores del gobierno, incluyendo los ministerios de medio ambiente y transporte.
Seúl está tratando, con éxito, de mostrar a sus habitantes que existen otras maneras de moverse por la ciudad, además de en coche. Mediante un programa que propone prescindir del coche un día a la semana, se ha conseguido una mejora de la calidad del aire, gracias a la reducción de los atascos y al ahorro de energía. Cada año, son 2 millones de coches los que dejan de circular mediante este programa, reduciendo las emisiones de CO, de los vehículos en un 10% (un total de 2 millones de toneladas menos). La calidad del aire hace mejorar la salud de los habitantes y ahorrar millones a la ciudad cada año. El programa, que es de carácter voluntario, funciona porque se aplica entre semana, lo cual anima a los residentes a buscar otras maneras de llegar al trabajo y de regresar a casa. Los participantes reciben incentivos, como descuentos en gasolina y aparcamiento gratis, entre otros, por utilizar medios de transporte alternativos. Se les anima a que participen tantas veces como puedan. Aquellos que participen sólo tres veces al año, por ejemplo, verán reducidos o eliminados sus incentivos.
La bicicleta puede ser una opción atractiva incluso en el frío norte de Europa. En la capital danesa, Copenhague, la Ciudad de los Ciclistas", más del 36% de la población va a trabajar en bicicleta, con lo que la ciudad ahorra cerca de