el pegollu nยบ5
para o esperamos novidades ano.
que este
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el pegollu nº5
asumir el rol de mujer paciente que ha de explicar (y reiterar) tranquila y con mesura, como si este fuera un papel “predestinado” para nosotras.
Quien llegue a comprender esto, podrá entender porqué los espacios no mixtos son básicos para nuestro crecimiento interno.
Se celebra nuevo 8M y, como en muchas otras fechas señaladas en el calendario feminista, se plantea una vez más el eterno debate: si reivindicamos igualdad ¿por qué espacios no-mixtos? ¿Por qué vetar el espacio a los hombres? La cuestión del machismo en los movimientos sociales que, entre otras cosas, se supone que luchan por la erradicación de los privilegios de unas personas sobre otras, es ya un clásico sobre el que muchos colectivos intentan trabajar. En los ambientes de izquierdas y libertarios todo el mundo nos declaramos abiertamente feministas, sin embargo, en momentos de distensión, comienzan a producirse y reproducirse las actitudes machistas. Todas las mujeres que trabajamos en estos entornos nos hemos encontrado en situaciones violentas en espacios sociales supuestamente feministas, a las que se les resta importancia con pretextos como la relajación, el alcohol o las drogas, entre otros. Aquí el lema “si nos tocan a una, nos tocan a todas” parece no servir y, no solo eso, sino que además en ocasiones se criminaliza a las compañeras que hacen frente a estas agresiones y las
denuncian. La problemática del asunto radica en que es aquí, partiendo de estas actitudes, donde se fraguan otros comportamientos machistas sutiles que, al estar normalizados, no se denuncian. En este sentido, a las feministas se nos plantea una contradicción: por un lado, al sentirnos atacadas, respondemos de una forma agresiva, algo que por supuesto es necesario para dejar clara nuestra postura inflexible; pero por otro lado, no podemos olvidar la labor pedagógica, necesaria para que el movimiento pueda crecer y regenerarse, logrando que se respire un ambiente realmente feminista. Si conseguimos que todas las personas de la organización aprehendan y reivindiquen como suya la posición feminista, al igual que lo hacen por ejemplo con la de clase o la antirracista, seremos capaces de construir verdaderos espacios de igualdad; pero para ello hay que entender que no basta con cuatro consignas unos días señalados, pero sobre las que no se trabaja y que, por lo tanto, no llegan a adquirir un significado propio. En cualquier caso, no debemos
Que las mujeres podamos trabajar y desarrollarnos de forma autónoma es la clave del empoderamiento, de aprender desde nosotras mismas a liberarnos de los roles que el patriarcado nos impone y de los que muchas veces no somos conscientes. Claro que el feminismo busca la igualdad, pero no podemos actuar como si esta ya existiera en nuestros entornos, porque es más que obvio que no es así. Esto no significa que no sea necesaria la lucha de los hombres a nuestro lado, si no que tal lucha debe comenzar por aceptar que la sociedad patriarcal los coloca en una situación privilegiada, trabajando por destruirla en uno mismo. Es solo desde este estado cuando podrían comenzar realmente a sentirse próximos a las feministas y llevar a cabo una lucha que no adquiere sentido si no se pone de manifiesto día tras día, tanto por parte de unos como de otras. El hecho de que persista el debate y sigamos obligadas a ofrecer explicaciones muestra un presente aun muy gris en lo que a feminismo se refiere. Repensemos nuestras vidas y trabajamos en conjunto para conseguir que las relaciones de poder en nuestros entornos sean un fantasma del pasado, creando espacios de libertad donde realmente se puedan formar tejidos sociales fuertes, como base de la revolución.
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El Consejo de Derechos Humanos de la ONU ya condenó al Estado español por la detención "arbitraria" e internamiento en un CIE de Adnam el Hadj, inmigrante que, tras denunciar los malos tratos sufridos en el centro madrileño de Aluche, fue inmediatamente expulsado a Marruecos
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E
l 28 de febrero de 2015 se celebró un concierto en el llamado Hogar Social Zaragoza en el que participaron bandas de ideología nazi. El HSZ es una organización alegal de ultraderecha que utiliza para sus actividades un edificio abandonado del barrio zaragozano de Las Fuentes. Días antes, tanto los propietarios del edificio como varias organizaciones denunciaron públicamente su celebración, por el riesgo que suponía concentrar en un evento a neonazis de todo el Estado español, pero pese a la clara alarma social, las autoridades públicas no tomaron medidas para evitar el concierto. El día del mismo, un grupo de jóvenes fue a manifestarse contra su celebración por su carácter xenófobo y racista, saliendo los ultraderechistas a enfrentarse con ellos. Tras esto, la policía realizó trece detenciones, a varios cientos de metros, entre manifestantes y personas que no tenían nada que ver, por ninguna de los neonazis asistentes al concierto. Aunque las declaraciones de policías y ultraderechistas son contradictorias, la fiscalía decide acusar a la mayoría de los detenidos, que afrontarán un juicio este mismo año.
¿A QUÉ PENAS OS ENFRENTÁIS LOS ACUSADOS Y CUÁL ES LA SITUACIÓN ACTUAL DEL CASO? En total hablamos de peticiones de más de 66 años de cárcel. El 9 de julio se juzgará a uno por supuestamente agredir a un neonazi, pidiéndole la fiscalía 2 años y 6 meses de prisión por un delito de lesiones, además de multa de 4.800 euros. El 17 de octubre comienza el juicio contra otros ocho por un presunto atentado y desórdenes públicos, a los que la fiscalía pide 8 años de prisión para cada uno y una multa por responsabilidad civil de más de 21.400 euros entre todos.
La inclusión en la campaña de varios familiares y amistades ha sido vital ¿CÓMO
ESTÁIS LLEVANDO LOS ENCAUSADOS
VUESTRA ESPERA?
De diferentes maneras, pero en general con una mezcla de sentimientos e inquietudes bastante difíciles de llevar. Por un lado, la solidaridad hace que se ganen fuerzas para afrontar lo que tenga que venir pero, por el otro, estamos hablando de gente con una media de edad de 20 años y no poder hacer planes a largo plazo, en previsión de lo que venga, teniendo que esperar más de dos años para saberlo, es algo que psicológicamente hace mella. Además, hay que sumar el acoso policial al que estamos siendo
sometidos, lo que ha hecho que algunos se aparten de la campaña a nivel público y estén más tranquilos viviendo fuera de Zaragoza. En este sentido ha sido vital la inclusión de padres, madres, familiares y amistades en la campaña. Su participación en las asambleas y en los actos está siendo fundamental, ya que sin esa aportación, la campaña ya hubiese muerto. ¿QUÉ
RESPUESTA ESTÁ DANDO LA SOCIEDAD ARAGONESA Y SUS MOVIMIENTOS SOCIALES ANTE ESTOS SUCESOS?
La respuesta, allá donde tenemos la oportunidad de explicar el caso, es buena y la gente se solidariza con el caso. El mayor problema es llegar, porque los temas de represión despiertan cierto recelo en el conjunto de la sociedad y se tiende a mirar mucho hacia otro lado, pero donde tenemos oportunidad de explicarlo recibimos de forma instantánea el apoyo incondicional. En cuanto a los movimientos sociales, estamos trabajando y hemos sumado ya decenas de apoyos de organizaciones sindicales (CCOO, OSTA, CGT, CUT, IA y SOA), políticas (Podemos, IU, CHA, PCPE, PCE, Zaragoza en Común, Estado Aragonés y Puyalón), vecinales (Federación de Asociaciones de Barrios de Zaragoza, Arrebato, Calle y Libertad y Puente Santiago-Actur), sociales (Derechos Civiles 15M, Pedalea, Gusantina, Marchas por la Dignidad, Treziclo, CSC Luis Buñuel, Asamblea 15M Delicias, Caracol, Ecologistas en Acción y Komando Feminista),
el pegollu nº5 juveniles (Purna, Chobentú, FEL, CJC y UJCE) y del mundo de la cultura (Radio La Granja, Radio Topo, Sensa Yuma, Non Servium, Manolo Kabezabolo, Los Chicos del Maiz, La Brigada del Vizio, Epilepssia, Eskorbuto, Sisayo, Relunatics, Kruger Rap, Eskejes Herejes, Jaime Ocaña, Adversiones, Adebán, Tertulia Albada y A.C.P. Alborada). Por último, también tenemos el apoyo del Gobierno de Zaragoza y de la Presidenta de las Cortes de Aragón.
Querella que fue archivada con la excusa de que “no se crearon incidentes”, por lo que el sistema judicial tampoco parece preparado, o no sabe, o no quiere, atajar el problema de los grupos fascistas. ¿SE MANTIENE ACTIVO EL HSZ?¿CÓMO ESTÁ LA SITUACIÓN DEL FASCISMO EN ZARAGOZA? No, su actividad fue decayendo desde los acontecimientos y ahora mismo no realiza actividad ninguna. El peso de las convocatorias y actos fascistas lo lleva el partido neonazi MSR, aunque se limitan a organizar charlas con poca asistencia y la peculiar recogida y reparto de alimentos solo para españoles. En las calles, como desde hace décadas, los ultras zaragocistas de extrema derecha del Ligallo Fondo Norte siguen siendo los más violentos y sus agresiones estando a la orden del día, en otro de los problemas que ni el club ni las Instituciones han querido atajar nunca.
¿POR
QUÉ
MUNICIPAL
PENSÁIS DEL
QUE
PSOE
Y
EL EL
GOBIERNO RESTO
DE
AUTORIDADES FUERON TAN PERMISIVOS CON EL CONCIERTO?
¿Y CÓMO ESTÁ LA SALUD DEL ANTIFASCISMO? Si bien la lucha antifascista en Zaragoza siempre se ha mantenido activa, nuestro caso la ha reavivado.
Existe la Plataforma Antifaixista de Zaragoza, que funciona como respuesta a los actos y agresiones fascistas y que, unido a que decenas de colectivos y asociaciones, organizan actos de carácter antifascista durante todo el año. También son fechas imprescindibles cada año el Mundialito Antirracista de Zaragoza, el Noviembre Antifaixista y los Barrios Mestizos. PARA
FINALIZAR, ESTÁIS LLEVADO LA CAMPAÑA
POR LA ABSOLUCIÓN MÁS ALLÁ DE INCLUSO DE ACOGIDA?
ARAGÓN ¿CÓMO
ZARAGOZA
La acogida está siendo buena. Hemos contado ya nuestro caso en Huesca, Barbastro, Valencia, Alicante, Madrid y León. Estaremos de nuevo por vuestra tierra el 25 de marzo, esta vez en Salamanca. También tenemos previsto ir a más ciudades del territorio estatal. En muchos casos se sorprenden de las penas de prisión a las que nos enfrentamos y es de agradecer que en todos los lugares se muestren predispuestos a colaborar y a difundir el caso de los 10 de Zaragoza.
Por falta de voluntad política. Tanto en cuestiones de memoria histórica como con los grupos neonazis estamos acostumbrados a que miren para otro lado y se le reste importancia. Como en muchas otras cosas, los políticos se llenan la boca de tolerancia cero contra el racismo y la xenofobia, pero a la hora de la verdad, nada de nada. TRAS
AQUELLOS HECHOS
¿HAN
VUELTO A
REPETIRSE CONCIERTOS Y ACTOS DEL MISMO ESTILO?
Sí, pero en otra ubicación. El Camping de Zaragoza, de suelo municipal, acogió hasta dos conciertos más tras los sucesos. En ambos casos, el actual Ayuntamiento de Zaragoza (gobernado por la confluencia Zaragoza en Común) presentó una querella a instancias de la Plataforma Antifaixista de Zaragoza.
E
ESTÁ SIENDO LA
Foto: Pablo Ibáñez - Arainfo
www.absolucion10dezaragoza.com
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BIOGRAFÍAS DE LA REVOLUCIÓN (V):
ALEKSANDRA KOLLONTAI ECONOMISTA
POLÍTICA Y REVOLUCIONARIA RUSA. DIPLOMÁTICA DE CARRERA Y PRIMERA MUJER MINISTRA. DEFENSORA DE LA EMANCIPACIÓN DE LA MUJER. LA BÚSQUEDA DE UNA NUEVA MORAL, LA SEXUALIDAD DE LA MUJER Y SU ACTIVISMO POLÍTICO, FUERON SUS PRINCIPALES CAMPOS DE TRABAJO.
Aleksandra "Shura" Mijailovna Domontovich nace en San Petersburgo en 1872, dentro de una familia acomodada de la nobleza rusa. Pasa buena parte de su infancia en las tierras de su abuelo materno en Karelia (territorio en la actualidad dividido entre Rusia y Finlandia). Ella misma reconoce que en esa época fue una niña mimada que creció con toda la atención de su familia, lo que llegó a causarle hastío. Hasta tal punto llegaba el recelo de sus padres por los cuidados de la pequeña “Shura” que, en lugar de estudiar en la escuela, recibía educación en su domicilio. Sin embargo, durante los ratos de ocio convivía con los hijos de los campesinos, a quienes consideraba sus compañeros; siendo ya capaz de analizar con cierta madurez que mientras ella lo tenía todo, aunque sin grandes lujos, ellos pasaban necesidades. Su educación no la mantuvo aislada de las ideas progresistas de la época, pues la profesora encargada de su instrucción, María Strachova, se movía en los ambientes revolucionarios
de la Rusia imperial, siendo un gran ejemplo para la joven. Pese a que sus padres no fuesen tan reaccionarios como lo común de la casta nobiliaria de la época, el plan para Aleksandra era el de cualquier dama de la época, casarse joven con quien su familia le asignara por pura conveniencia. Tras ver que su propia hermanastra fue casada a los 19 años con un hombre que rondaba los 70, decidió rebelarse y casarse por amor con un primo suyo, ingeniero de profesión pero sin gran poder económico, de quien toma el apellido Kollontai, por el que luego sería más conocida. Su siguiente decisión liberadora fue la separación de su marido, con quien ya tenía un hijo, a los tres años de casada, pues la vida de “ama de casa” no era para ella y se sentía enjaulada. Por aquél entonces se sentía atraída e interesada por el movimiento obrero industrial, sus condiciones de vida y sus demandas, en una época en la que Lenin no era más que un principiante todavía y Plejánov era el referente entre los marxistas rusos. El hecho que marcó a Kollontai e hizo que se decidiera a formar parte del movimiento, fue una visita a una fábrica textil que
el pegollu nº5 empleaba a más de 15.000 personas en condiciones de semi esclavitud, lo que provocó que considerara que no podía mantener su privilegiada vida despreocupada mientras el pueblo trabajador era explotado de esa manera. Precisamente una de las razones del distanciamiento con su marido fueron las cuestiones políticas. Así, en 1896 decide irse a Zurich (Suiza) a cursar estudios sobre economía política. En 1899 vuelve a Rusia e ingresa como militante del movimiento obrero, interesándose particularmente por la situación de las condiciones del proletariado industrial de Finlandia, a lo que dedicó su primera publicación; implicándose también de forma decidida en la lucha emancipatoria de la patria de su familia materna respecto del imperio zarista. En esos momentos Kollontai se centró sobre todo en la lucha del pueblo trabajador, pero sus ideas sobre las relaciones sentimentales y la liberación de la mujer tampoco se hicieron esperar. Así, en 1905, cuando las aspiraciones de la clase trabajadora estaban ya por la revolución (recuérdese el Domingo Sangriento), Aleksandra se da cuenta de la poca atención del partido y el movimiento obrero hacia los problemas de la mujer. Kollontai se encontró ante el problema de que, por una parte el movimiento feminista organizado era mayoritariamente burgués, más preocupado por las reivindicaciones sufragistas que por los problemas reales de las mujeres trabajadoras y, por otra parte, estaba el escaso papel que jugaban las mujeres trabajadoras dentro del movimiento obrero y el
poco interés por parte de los camaradas masculinos. Se dedica entonces a organizar el movimiento femenino de mujeres trabajadoras y a escribir en medios clandestinos sobre los problemas de la mujer. Sus textos, en especial “Los fundamentos sociales de la cuestión femenina” (1907), fueron calando con el tiempo e integrando esas ideas entre las aspiraciones de la clase trabajadora, consiguiendo la adhesión de las mujeres a la causa revolucionaria, lo que supuso una bomba para las feministas burguesas. Aleksandra pertenecía entonces al ala Menchevique del Partido Socialdemócrata Ruso, por considerar provechosa la participación del movimiento obrero en la Duma (pseudoparlamento del régimen para aparentar ser democrático) como herramienta unificadora y reivindicativa; pero era considerada por sus camaradas mencheviques como “sindicalista”, por su “excesiva” preocupación por las condiciones de vida del proletariado industrial y sus pretensiones revolucionarias; y “feminista”, por darle demasiada importancia, según ellos, a los problemas de la mujer. En 1907 participa, como delegada rusa, en la primera Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas en Stuttgart (Alemania), que nombra secretaria a Clara Zetkin. Al año siguiente surge
el pegollu nº5 en Rusia una asociación de mujeres trabajadoras ─entre las que se encontraban Kollontai y otras mujeres posteriormente relevantes en el Partido Comunista Ruso─ que se presentan como independientes en el Congreso Panruso de Mujeres, celebrado en San Petersburgo. Asiste a dicho congreso, pero antes de su clausura se ve obligada a escapar, pues es perseguida por las fuerzas del régimen que tenían orden de su detención por la publicación del trabajo “Finlandia y el Socialismo”, que consideraban subversivo, por lo que decide exiliarse en Alemania, donde entrará en contacto con el movimiento obrero local y con personalidades como Rosa Luksemburg y Clara Zetkin. Durante el exilio colabora y milita en el socialismo alemán, mientras sigue escribiendo para el partido ruso. También cabe destacar la publicación en 1911 de un texto de gran repercusión en el que defiende las relaciones de pareja como camaradería entre iguales. En esta época, a petición de sus camaradas, ejerce de representante tanto de las mujeres rusas como de la clase trabajadora de su país
en numerosos eventos internacionales en Europa (viajando a Bélgica, Inglaterra, Suecia, Suiza) e incluso se le encarga la redacción de algunas leyes propuestas por la facción menchevique para la Duma, en especial una sobre protección de la maternidad. En 1914 asiste a la traición de los socialistas alemanes al internacionalismo cuando, contaminados por el patrioterismo bélico, deciden apoyar una guerra imperialista votando a favor del presupuesto de guerra. Aleksandra decide pasar entonces a Suecia donde sería detenida por su situación irregular como refugiada y por su actividad propagandística. Después de ser expulsada a Dinamarca, en 1915 viaja, invitada por exiliados alemanes, a los Estados Unidos de América, donde pronunciará discursos en alemán, ruso y francés (lengua que ocupaba entonces el estatus internacional que hoy se le da al inglés). Finalizada esta gira, decide instalarse cerca de Oslo (Noruega), donde el movimiento se mantiene contrario a la participación en los intereses de las castas estatales, lo que hace que comience a acercarse más al ala bolchevique, defensora más firme del lema “Guerra a la Guerra”, en consonancia con la postura de Lenin, entonces exiliado en Suiza, con quien Kollontai mantendrá entonces correspondencia.
el pegollu nº5 «Por mucho que las feministas burguesas traten de reprimir el verdadero objetivo de sus deseos políticos, por mucho que aseguren a sus hermanas menores que la participación en la vida política promete beneficios inconmensurables para las mujeres de clase trabajadora, el espíritu burgués que impregna todo el movimiento feminista da un colorido de clase incluso a la demanda de igualdad de derechos políticos con los hombres(...)Diferentes objetivos e interpretaciones de cómo deben usarse los derechos políticos crea un abismo insalvable entre las mujeres burguesas y las proletarias. Esto no contradice el hecho de que las tareas inmediatas de los dos grupos de mujeres coincidan en cierta medida(...)Sin embargo, el interés de clase determina que la actitud de los dos grupos hacia estas reformas sea profundamente contradictoria…». EXTRACTO DE "LOS FUNDAMENTOS SOCIALES DE LA CUESTIÓN FEMENINA", PUBLICADO EN 1907
En 1917 crece la tensión en Rusia y se produce la Revolución de Febrero que derroca al Zar. Viendo la necesidad de trabajar en los retos que tenían por delante los nuevos procesos revolucionarios, Aleksandra decide regresar a la Rusia ya republicana, donde con el gobierno burgués aún no se han frenado los conflictos sociales: los campesinos se levantan y queman las casas de los nobles terratenientes y, no solo continúa la agresión del estado contra el proletariado urbano, sino que directamente se persigue a los bolcheviques. Siendo necesaria una labor de organización y agitación, escribe sobre la escasez y la carestía, llamando a la insumisión de las mujeres de los soldados, que protagonizan concentraciones y huelgas contra el gobierno. desde el Comité Central del Partido, Kollontai se enfrenta a las facciones inmovilistas que apoyan al gobierno burgués, proclamando que para la clase obrera la única representación con legitimidad es la de los Soviets (consejos obreros). Este pronunciamiento se gana la preocupación de Kérenski ─ministro de justicia en el gobierno provisional y vicepresidente del Soviet de Petrogrado (antes llamada San Petersburgo)─ que ve en los bolcheviques una amenaza
a la que combatir. Así, el gobierno ruso acaba ordenando la prisión para los miembros del partido. Aleksandra fue detenida en la frontera suecofinesa cuando se dirigía a un acto internacionalista en Estocolmo. Tras las protestas en el Soviet de Petrogrado, a cuyo comité ejecutivo ella pertenecía, éste asume su fianza y es liberada, imponiéndole entonces Kérenski (ya presidente del gobierno provisional) una orden de arresto domiciliario. Recobraría la total libertad apenas un mes antes de la Revolución de Octubre, tras la que le son asignados cargos políticos en el Comité Central del Partido y en el gobierno, como la Comisaria de Asistencia Social, convirtiéndose en la primera mujer con rango de ministra en la Historia. El nuevo gobierno soviético inicia una serie de reformas en favor de las mujeres y las libertades sexuales: el matrimonio será de libre voluntad, se despenalizan el aborto (que será libre y gratuíto), el adulterio, las relaciones homosexuales, el divorcio y el reconocimiento de hijos fuera del matrimonio. Sin embargo, Aleksandra
el pegollu nº5 considera que los avances son mínimos e incluso le parece que la nueva constitución se queda corta en algunos temas. Además, durante su labor en el ministerio se producen colectivizaciones de centros de asistencia privados, así como de monasterios y otros bienes de la Iglesia Ortodoxa, quien la declara hereje e inicia una campaña falaz contra ella (secundada por la prensa afecta al antiguo régimen) afirmando que pretendía obligar a las adolescentes a ser madres. También desde dentro hay burócratas y funcionarios que boicotean el funcionamiento de los sistemas, por lo que abandona el puesto por las desavenencias dentro del partido. Dentro del mismo, forma parte de la corriente interna Oposición Obrera, que desaprueba la declaración de la paz con Alemania al mantener que continuando con la guerra forzarían la revolución en aquellos países, como ocurrió en Baviera y Hungría (aunque finalmente no triunfaron). También se opondrán a la Nueva Posición Económica por entender que permitía la propiedad privada y el estraperlo de alimentos. Esta corriente es derrotada dentro
del partido y se producen una dispersión y una desvinculación de sus integrantes. En 1918 Kollontai presenta una moción dentro del partido a favor de la representación femenina en los altos cargos públicos, tanto del partido como del gobierno, que es aprobada. El mismo año impulsa el I Congreso de Mujeres Trabajadoras y Campesinas de Toda Rusia, contando con más de 1.100 delegadas de los distintos territorios del estado soviético, donde presentó su intervención titulada “La familia y el socialismo”. También crea el Zhenotdel o Departamento de la Mujer para tratar asuntos sobre la vida, derechos e igualdad de las mujeres. En 1921 defiende la necesidad de una nueva moral que ataje los problemas y la hipocresía de la moral burguesa, atacando también el problema de la prostitución. En 1923 es nombrada embajadora soviética en Suecia, país con el que la URSS mantendrá relaciones comerciales y que será uno de los primeros en reconocer a la soyuz como estado. Durante sus años como embajadora el trabajo la absorbe, pero encuentra tiempo para seguir escribiendo, llegando a producir una novela y varios relatos breves de trasfondo feminista. También representa a la Unión Soviética en México. Con los achaques de la edad regresa a Moscú a los 73 años, donde fallecería en 1952, convertida ya en todo un ejemplo internacional de lucha por la emancipación de la mujer trabajadora.
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