Abracadabra 54

Nuestros

hijos

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del Gobierno de Mendoza

Revista de distribución gratuita - Año 8 - Nº 54 - Agosto 2012

Editor responsable: Editorial Abracadabra Directora: Jimena Garay Comercial y Publicidad: Laura Frías Redacción y producción peridística: Prof. Silvina del Pópolo, Fernando Gabrielli R.R.P.P : María Inés Hernández Ilustración y diseño: María Victoria Caruso Colaboradores: Departamento de Educación para la Salud II Dirección de Nivel Inicial II Lic. Graciela Rainieri II Dra. Mara Bastanzo II Lic. Lucas Malaisi II Equipo Luis Trombetta II Si querés anunciar comunicate: Laura Frías. Tel . 0261-156 332247 laura@abracadabrarevista.com.ar ventas@abracadabrarevista.com.ar Si querés contactarte con nosotros: info@abracadabrarevista.com.ar Abracadabra, la revista de chicos para grandes!® es una publicación

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Staff

EDITORIAL

Ingresá a nuestra web, vas a ver nuestros últimos números y los suplementos de eventos y fiestas infantiles, además de toda la informacion que necesites.

A medida que pasan los años parece que los seres humanos redescubrimos que las más sabias enseñanzas nos vienen de la naturaleza misma. Así, recuperamos costumbres y tradiciones que nos hacen bien y mejoran nuestra calidad de vida.

Con el paso del tiempo, la lactancia pasó de ser la única manera de alimentar un bebé a ser una incomodidad que podía evitarse. Por fortuna, y a la luz de estudios científicos, este hábito tan maravilloso para la salud física y mental de la mamá y el bebé ya no deja lugar a discusiones. Hoy, dar de mamar es natural y querido.

Compartimos con ustedes algunas ideas puestas en palabras, respecto al inicio de una nueva vida, al nacimiento del vínculo madre-hijo que comienza a formarse desde la gestación , pasando por el embarazo y la etapa de lactancia: pasos iniciales de una relación de amor único y maravilloso.

¡no te la pierdas!

mensual de distribución gratuita. Registro de propiedad intelectual en trámite. Queda prohibida la reproducción total o parcial de esta publicación, aún mencionando la fuente, sin autorización de la dirección. Abracadabra no asume responsabilidad alguna del contenido y los resultados de los avisos publicitarios en la presente edición.

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De Interés Educativo

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De Interés Legislativo

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Mimos para el alma

apoyar sobre el brazo materno, evitando que quede en el aire y las piernitas del bebé deben reposar sobre la mamá o un almohadón, sobre todo en los primeros meses, para que el bebé se sienta contenido.

Amamantar: Placer y salud Volviendo a las buenas costumbres que en algún tiempo fueron olvidadas, hoy los especialistas fomentan la lactancia materna exclusiva durante los primeros seis meses, la incorporación de la alimentación complementaria oportuna a partir de esa edad y el mantenimiento de la lactancia materna hasta los dos años o más.

Ya nadie pone en duda que la leche materna es el mejor alimento para el recién nacido.

Sus nutrientes aportan al bebé todo lo que necesita para crecer durante los primeros meses de vida y también ofrecen una protección inigualable frente a las enfermedades.

Sin embargo, para que este vínculo entre la madre y su bebé sea placentero, existen una serie de recomendaciones que es importante tener en cuenta. Una de ellas está relacionada con la posición ideal para amamantar. Si bien la Organización Mundial de la Salud (OMS) aconseja algunas posiciones específicas, lo importante es elegir el modo en que tanto la mamá como el bebé se encuentren relajados, cómodos y en actitud de “disfrute”.

Las posiciones No importa la preferencia de la mamá por estar sentada o acostada sino que lo haga con la espalda cómodamente apoyada, los músculos del cuello en descanso y las piernas acomodadas de manera que no “cuelguen” (apoyadas sobre una silla o una tarima). En ese momento es necesario evitar las tensiones, ya que ésto interfiere en la salida de la leche.

Otro aspecto importante es la postura del niño. Los expertos recomiendan que la línea de la espalda y el cuello sea continua y que el cuerpo del bebé esté pegado al de su madre. En tanto, la boquita debe estar bien abierta tomando la mayor parte posible de la areola; el labio inferior, evertido y el mentón, pegado al pecho. Por último, la cabeza debe

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Para lograr esta posición, hay que aprovechar tres reflejos importantes presentes en el amamantamiento. Por un lado, en la madre el reflejo de “erección del pezón” y, por otro, en el bebé los reflejos de “búsqueda” y “succión “.

Este reflejo se estimula en el bebé jugando con el pezón sobre sus labios. Esto provocará en la madre la erección del pezón, favoreciendo la prendida.

Además del aporte nutricional, dar la teta es una forma de dar al niño contención afectiva y cariño. Si tenemos en cuenta que el bebé dentro del vientre está

protegido y calentito, el abrazo materno no sólo le da sostén sino que le permite sentirse abrigado y seguro. Por otra parte, y si bien al principio el bebé duerme mucho, a veces incluso mientras se alimenta, busca la mirada de la madre y se regocija en ella. De este modo se va formando y fortificando ese vínculo madre – hijo. ¿Y el papá?

Si bien el acto de mamar es un vínculo entre la madre y su hijo, no debemos olvidar que en esta relación también hay, en la mayoría de los casos, un padre presente. En el amamantamiento, esta figura es pilar y sostén fundamental.

La presencia del papá permite mayor fluidez en la relación madre–hijo. El alivio de tensiones que produce la presencia paterna (o de familiares que cum-

plan esta función) favorece enormemente la tranquilidad materna. Además, el apoyo paterno es también muy importante en el descanso físico de la madre, ya que el gasto energético en este período está ampliamente aumentado. Por ello se recomienda que se alimente bien y aproveche los momentos en que el bebé duerme para descansar también ella. ¿Cómo sabemos que el bebé se está alimentando bien?

En la mayoría de los casos, la deglución es audible y mantiene un ritmo parejo, lo cual es una buena señal. Si bien es un error controlar el tiempo por reloj para amamantar; debemos considerar la duración teniendo en cuenta que la leche va cambiando en el transcurso de la mamada, aumentando hacia el final su contenido en grasa (la que permitirá mayor saciedad y aumento del peso corporal).

Por eso, para los bebés que se duermen mientras son amamantados se recomienda que la mamá ofrezca sólo un pecho por vez, intercalando en cada toma, para que el niño ingiera la leche “del final”.

Si un bebé aumenta su peso día a día durante el primer semestre, independientemente del valor de las tablas control, deben priorizarse la dirección de la curva de crecimiento (única para cada niño) y descartar

otros problemas (error en la técnica de medición, mala prendida, etc.) antes de incorporar complementación o reemplazar la teta con fórmula láctea u otro tipo de alimento.

También es importante controlar que el niño orine regularmente y que la orina no sea concentrada. En relación a las heces, los primeros meses tendrá como mínimo tres deposiciones diarias.

De todos modos, hay que recordar que siempre hay una pérdida normal de peso de hasta un 10% en los primeros 10 días de vida.

Preparar y cuidar las mamas • Alrededor de la areola se encuentran las glándulas de Montgomery, que son las encargadas de lubricar el pezón. Al utilizar jabones, esta secreción se elimina permitiendo la aparición de grietas.

• No realizar más conductas agresivas como cepillado del pezón, limpieza con jabón, detergente, etc.

• Solo es necesario utilizar agua, leche, aire y sol, (ALAS).

Lic. Lucía Quintana, Dirección Provincial de Maternidad e Infancia Consultas: dpmimza@mendoza.gov.ar

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Sana, sana...

CONTROLES PARA UN EMBARAZO PLENO Y SALUDABLE El control prenatal que realiza la futura mamá es necesario para seguir la evolución del embarazo y obtener una adecuada preparación para el parto y la crianza del bebé, con la finalidad de disminuir los riesgos de este proceso. También hay que controlarse si ya se han tenido hijos, porque cada embarazo es único.

Es importante que la mujer concurra al primer control apenas nota un atraso menstrual.

Una vez que se haya diagnosticado el em-

barazo, se podrá establecer fehacientemente la edad gestacional, posibilitar acciones de prevención y promoción de la salud y detectar factores de riesgo.

La frecuencia de los controles dependerá del nivel de riesgo médico, social y psicológico pero se recomienda realizar como mínimo cinco controles antes del parto.

Más allá de las visitas periódicas, la embarazada también debe consultar al equipo de salud si presenta signos de alarma como pérdidas; hinchazón marcada de piernas, manos, cara o pies; ardor al orinar; o si el bebé no se mueve durante el último trimestre.

Durante todo el embarazo, la mujer no tiene que tomar medicamentos sin la indicación médica ni remedios caseros (como tés de plantas medicinales).

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El médico te ayuda a cuidar tu embarazo Con los controles se evitan muchos problemas para la mamá y el bebé. Una de las primeras indicaciones que recibirá la emba-

razada será la de incorporar hierro y ácido fólico para prevenir la anemia infantil y de la madre, además de evitar defectos del tubo neural y trastornos neurológicos del bebé.

Una alimentación adecuada sumada a estos suplementos será una de las claves para un buen embarazo.

El médico también solicitará un papanicolau para prevenir el cáncer de cuello de útero y un examen de flujo para detectar infecciones.

Será importante también una consulta con el odontólogo para la detección y tratamiento de caries y en especial de focos sépticos dentarios.

En cada control, el equipo de salud: • Pesa a la embarazada.

• Controla la presión arterial.

• Aplica o indica las vacunas necesarias.

• Mide la panza para controlar el crecimiento del bebé.

• Examina las mamas y enseña a preparar los pezones para una buena lactancia • Escucha los latidos del corazón del bebé.

• Controla que las piernas no estén hinchadas o si hay otras complicaciones.

La medición de la tensión arterial es un elemento imprescindible en el control de la embarazada ya que la hipertensión es una patología frecuente y potencialmente peligrosa para la madre y el hijo.

Existen además una serie de exámenes complementarios de rutina que colaboran con el buen desarrollo del embarazo. Ellos son: Grupo sanguíneo y factor Rh. Hemograma completo.

Glucemia basal.

Urea.

Urocultivo.

VDRL (Sífilis), Chagas, Toxoplasmosis, HIV y Hepatitis B. Ecografía. Últimas consultas A partir de la semana 36 se producen las últimas consultas con el equipo de salud.

Además de las acciones realizadas en las consultas precedentes, en este período se evalúan las condiciones favorables para el parto y la lactancia. De ser posible, en esta fecha se realizará la última ecografía para descartar malformaciones, evaluar el correcto crecimiento fetal y determinar parámetros tales como cantidad de líquido am-

niótico, madurez y ubicación de la placenta y confirmación de la presentación del niño.

En estos contactos, el médico planificará con la madre un control para después del parto y la aconsejará cómo planificar su próximo embarazo.

Actividad física de la futura mamá La actividad física a programar deberá adaptarse a las modificaciones que experimente la fisiología de la embarazada, y centrar sus finalidades en el mejoramiento de las condiciones del organismo, llegado el momento del parto.

La estructura del programa de gimnasia pre parto se puede clasificar en tres partes: respiración, relajación, control tónico.

Ministerio De Salud Gobierno De Mendoza

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Trombetta

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Educación

UNA PATRIA GRANDE SE CONSTRUYE CON EL CUIDADO DE LOS MÁS CHICOS “Los Derechos humanos tendrían que empezar por casa”. Cita de Andrés Domínguez, en el Libro de los Abrazos de Eduardo Galeano. Todos los niños y niñas tienen derecho a una vida repleta para ser amados, mimados y respetados: ¿qué les parece si comenzamos dedicándole un fin de semana de rey y reina… ahora que se aproxima el día del niño?

Se podrán sugerir las siguientes propuestas para sentirse los REYES y REINAS de la casa: Para los más pequeños de la familia: • Dedicarles un lugar en la casa, tranquilo, cerca del resto de la familia y allí ubicar una alfombra para colocar al bebé acostado de espaldas y así favorecer sus movimientos autónomos y sus primeros juegos.

• Seleccionarle juguetes pequeños, de tela, de colores vivos y con poco peso para que el bebé pueda tomarlos y explorarlos sin dificultad.

• Ubicar los objetos a cierta distancia de la cabeza del bebé para que pueda mirarlos y movilizar su cuerpo para ir por ellos.

• Cuando el bebé llama o reclama la pre-

sencia del adulto, acostarse cerca de él, hablarle, expresarle con palabras la alegría de estar juntos en el piso y aproximarle los objetos que no pudo alcanzar.

• Si la economía familiar no permite comprar una alfombra para el bebé podemos construirle una más tibia aún, buscando una frazada vieja y cociéndole sobre ella una tela de algodón de las mismas dimensiones, con lanas de colores se puede hacer las terminaciones del borde.

Para los más grandecitos: • Seleccionarle recipientes de plástico blando (fuentones, palanganas, paneritas y bols de distintos tamaños) donde el niño y la niña puedan meter y sacar, llenar y vaciar (tapas plásticas, juguetitos de tela, pelotitas

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de plástico, de goma, hechas con medias de distintos tamaños) todas las veces que quiera.

• Buscar trozos de telas de distintos tamaños para jugar a aparecer y desaparecer.

Una vez desaparece el niño y luego desaparece el adulto.

• Buscar cajas de cartón grandes y firmes.

Pintarlas por dentro y por fuera con esmalte sintético, finalmente cubrirle los bordes con cinta aisladora de color. Estos serán objetos amados por los niños para meterse y salir, transformarlos en autos, en aviones, en casitas, en cuevas y castillos, sintiendo la alegría de que se los hizo papá, mamá, el tío o el abuelo…

• Dedicarles un tiempo y un espacio especial para: observar fotos, recuerdos, mostrarles ropas u objetos de cuando eran más pequeños o de sus familiares.

• Llevarlos a una plaza con juegos y ayudarlos a columpiarse, treparse, ¡Qué sientan su compañía!

• Jugar juntos en casa, compartiendo juegos tradicionales que aprendieron las familias cuando ellos eran pequeños.

• Disfrazarnos o confeccionar títeres con elementos descartables que despierten nuestra creatividad y fantasía.

• Reír mucho!!

• Cocinarles algo rico que ellos elijan y que ellos puedan ayudar en la cocina.

• Hacer masa, colorearla de diferentes tonos y jugar con moldes de tapas de envases.

• Leerles cuentos antes de dormirse • Transmitirles versos o poesías, adivinanzas y canciones que recordemos.

• Llevarlos a participar de una obra de teatro.

• Jugar con barro… haciendo tortitas, medialunas y bollitos para vender armando una hermosa PANADERÍA realizada entre todos.

• Comprar un set de jardinero y acompañarlo con macetas, tierra y semillas, para hacer crecer plantas nativas.

• Construir juguetes con materiales descartables o reciclar los que ya no usan.

El valor del juego en la constitución del niño y de la niña El tiempo y el espacio de juego se está perdiendo. Si los niños y las niñas no juegan, no construyen su subjetividad, su capacidad creadora.

Hoy, por diversas exigencias, el tiempo dedicado a los niños es muy acotado y los espacios son muy disciplinados. Los chicos viven con agenda tan completa, donde se deja de lado el juego libre.

En el siglo XXI éste es uno de los derechos más vulnerados hacia el niño. Ésto implica la pérdida de valores esenciales, entre ellos, la creatividad, la imaginación, la posi-

bilidad de pensar críticamente y de ejercer el derecho a elegir.

No permitirle jugar al niño y a la niña afecta profundamente su derecho a la alegría de aprender a través del placer.

Según consta en la Declaración por el Derecho del Niño y la Niña a Jugar, de la Asociación Internacional del Derecho del Niño a Jugar, reconocida por Naciones Unidas, UNESCO y UNICEF, “Se reconoce el derecho del niño y la niña al descanso y el esparcimiento, al juego y a las actividades recreativas propias de su edad y a participar libremente en la vida cultural y en las artes. (...) Se respetarán y promoverán el derecho del niño y la niña a participar plenamente en la vida cultural y artística y propiciarán oportunidades apropiadas, en condiciones de igualdad para participar en la vida cultural, artística, recreativa y de esparcimiento”.

Si pensamos a los juguetes y al juego como prácticas sociales, cuánto más variados sean estos, más posibilidades se les dará a los niños y niñas de jugar de diferentes formas, de relacionarse con distintos compañeros de juegos y de desplegar más variedad de herramientas afectivas, cognitivas y emocionales.

Permitir al niño jugar ahora... Ver al niño jugar ahora... Jugar con el niño ahora...

chicos frente al televisor, viendo dibujos animados, películas, videos o jugando con las computadoras cada día a edad más

Pensemos… ¿Cuánto tiempo de atención le dedicamos a los niños y a las niñas cada día?, ¿Sabemos realmente cómo nuestros niños y niñas comienzan a establecer sus primeras relaciones humanas? ¿Sabemos ciertamente qué hacen nuestros hijos cuándo juegan cada día?

Y continuemos analizando… ¿Sabemos cuánto tiempo pasan los

temprana?

Ahora, preguntémonos ¿Cuánto tiempo de abrazo y de

contención amorosa tienen nuestros hijos cada día? ¿Cómo y cuándo les decimos, sin palabras, lo mucho que nos importan y lo que necesitamos de sus palabras y de sus silencios?

Si les permitimos comunicar sus ideas a través de los gestos y las palabras y a reconocer sus sentimientos a través de las relaciones humanas que establezcan, facilitaremos la adquisición de un crecimiento profundo frente a cualquier situación que se les presente.

Una de las posibilidades más importantes que otorga el juego es que le permite relacionarse con los otros seres humanos y en ese “espejo de placer” identificarse.

Para darle al pequeño la oportunidad de desarrollarse integralmente desde la salud física, psíquica y emocional debemos garantizarle un vínculo afectivo privilegiado y una exploración libre que a través del JUEGO le permita el conocimiento y del mundo que lo rodea.

Dejar que el niño juegue hoy es asegurar su sentimiento de eficiencia, felicidad y valoración como hombre sano en el futuro.

Esperamos que disfruten un “Hermoso REINADO, mimado y amoroso en el Día del Niño y la Niña”

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Dirección General de Escuelas Nivel Inicial

Caperucita Roja

(la version del lobo)

El bosque era mi hogar. Yo vivía allí y me gustaba mucho. Siempre trataba de mantenerlo ordenado y limpio. Un día soleado, mientras estaba recogiendo las basuras dejadas por unos turistas sentí pasos. Me escondí detrás de un árbol y vi venir una niña vestida en una forma muy divertida: toda de rojo y su cabeza cubierta, como si no quisieran que la vean. Andaba feliz y comenzó a cortar las flores de nuestro bosque, sin pedir permiso a nadie, quizás ni se le ocurrió que estas flores no le pertenecían. Naturalmente, me puse a investigar. Le pregunté quién era, de dónde venía, a dónde iba, a lo que ella me contestó, cantando y bailando, que iba a casa de su abuelita con una canasta para el almuerzo.

Me pareció una persona honesta, pero estaba en mi bosque cortando flores.

De repente, sin ningún remordimiento,

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mató a un mosquito que volaba libremente, pues también el bosque era para él. Así que decidí darle una lección y enseñarle lo serio que es meterse en el bosque sin anunciarse antes y comenzar a maltratar a sus habitantes.

La dejé seguir su camino y corrí a la casa de la abuelita. Cuando llegué me abrió la puerta una simpática viejecita, le expliqué la situación. Y ella estuvo de acuerdo en que su nieta merecía una lección.

La abuelita aceptó permanecer fuera de la vista hasta que yo la llamara y se escondió debajo de la cama.

Cuando llegó la niña la invité a entrar al dormitorio donde yo estaba acostado vestido con la ropa de la abuelita. La niña llegó sonrojada, y me dijo algo desagradable acerca de mis grandes orejas.

He sido insultado antes, así que traté de ser amable y le dije que mis grandes orejas eran para oírla mejor.

Ahora bien, me agradaba la niña y traté de prestarle atención, pero ella hizo otra observación insultante acerca de mis ojos saltones. Ustedes comprenderán que empecé a sentirme enojado. La niña tenía bonita apariencia pero empezaba a parecerme antipática. Sin embargo pensé que debía poner la otra mejilla y le dije que mis ojos me ayudaban para verla mejor. Pero su siguiente insulto sí me encolerizó. Siempre he tenido problemas con mis grandes y feos dientes y esa niña hizo un comentario realmente grosero.

Se que debí haberme controlado pero salté de la cama y le gruñí, enseñándole toda mi dentadura y diciéndole que eran así de grandes para comerla mejor.

Ahora, piensen Uds.: ningún lobo puede comerse a una niña. Todo el mundo lo sabe. Pero esa niña empezó a correr por toda la habitación gritando y yo corría detrás de ella tratando de calmarla.

Como tenía puesta la ropa de la abuelita y me molestaba para correr, me la quité pero fue mucho peor. La niña gritó aún más. De repente la puerta se abrió y apareció un leñador con un hacha enorme y afilada. Yo lo miré y comprendí que

corría peligro así que salté por la ventana y escapé.

Me gustaría decirles que este es el final del cuento, pero desgraciadamente no es así. La abuelita jamás contó mi parte de la historia y no pasó mucho tiempo sin que se corriera la voz que yo era un lobo malo y peligroso. Todo el mundo comenzó a evitarme.

No sé que le pasaría a esa niña antipática y vestida en forma tan rara, pero si les puedo decir que yo nunca

Ma, me contás un cuento? pude contar mi versión. Ahora Ustedes ya lo saben.

Colorín colorado este cuento se ha acabado.

Autor Anónimo www.7calderosmagicos.com.ar

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¿Ya deben empezar a ordenar su cuarto?

Los hijos pueden y deben colaborar en las tareas domésticas cotidianas. Guardar los juguetes es algo para lo que están capacitados desde muy pequeños Ya a los dos años pueden ayudar a meter las piezas del rompecabezas en su caja o reunir las construcciones diseminadas por la alfombra. Si los habituamos desde chiquitos, cuando están ansiosos por colaborar, será fácil inculcarles el hábito.

de esos en los que cabe todo. Los juguetes se pueden ordenar por categorías (muñecos en uno; autos en otro, etc.), o por tamaños... Con stickers de ilustrativos sabrán que guardar en cada contenedor

No debemos imponer el orden como un castigo; así lo único que conseguiremos es que asocien el orden con una tarea pesada y aburrida. Lo ideal es que la tarea de ordenar se convierta en un juego. Podemos dividir las obligaciones entre padres e hijos, o entre hermanos, y jugar una carrera, a ver quién termina antes. O bien podemos poner música y animarlos a bailar mientras ubican cada cosa en su lugar. También funciona proponer que cuenten en voz alta los juguetes que van guardando (“Uno, dos, tres... ¿Hasta cuánto podés contar?”). Hay muchas posibilidades; sólo es cuestión de un poco de imaginación.

Una manera de simplificar esta tarea es disponer de baúles, cajas o canastos grandes,

Por último es importante recordar que nuestra paciencia ayuda en la formación del hábito.

Si al principio no lo hacen tan bien como nos gustaría. Cuando haya que corregirlos, que sea sin criticas ni retos.

Dedicar un tiempo relajado a guardar suele ser una buena opción. Esta tarea suele hacerse rápido y corriendo “vamos, la cena esta lista...”. Pero es mejor interrumpir el juego antes y dedicarle tiempo, sin apuro ni presiones.

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