Antilha REVISTA LATINOAMERICANA DE HISTORIA, ARTE Y LITERATURA
Año 5
N°13
Enero-Abril 2016
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Antilha REVISTA LATINOAMERICANA DE HISTORIA ARTE Y LITERATURA
Editores
El contenido de los artículos y opiniones ex-
América Malbrán Porto
presadas en Antilha son responsabilidad
Enrique Méndez Torres
exclusiva de sus autores. Antilha es una publicación cuatrimestral edi-
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tada y publicada por el Centro de Estudios
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Portada, cenefa y viñeta: F.68r. Ms.Harley 4751. Bestiary, with extracts from Giraldus Cambrensis on Irish birds. Catalogue of illuminated manuscript, British Library. http://www.bl.uk/ catalogues/illuminatedmanuscripts/welcome.htm 3
Antilha REVISTA LATINOAMERICANA DE HISTORIA ARTE Y LITERATURA
Comité Editorial Dr. Jorge Angulo Villaseñor
DEA-INAH, México.
Dra. María Elena Ruiz Gallut
IIE-UNAM, México.
Dr. Enrique Tovar Esquivel
INAH, México.
Dra. Lourdes Budar Jiménez
Universidad Veracruzana, México
Dr. Daniel Schávelzon
CAU-UBA, Argentina
Dra. Ana Igareta
UNLP, Argentina.
Mtra. América Malbrán Porto
FFyL-UNAM, México.
Mtro. Alfredo Feria Cuevas
INAH-México.
Antrop. Alejandra Gómez Colorado
INAH, México.
Arqlgo. Enrique Méndez Torres
ENAH, México.
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Antilha REVISTA LATINOAMERICANA DE HISTORIA ARTE Y LITERATURA
CONTENIDO P. 7
Editorial
La estructura de los Primeros Memoriales de Fray Bernardino de Sahagún América Malbrán Porto P. 9 Magia, Alquimia y Superstición en Secretos de la naturaleza de la Imprenta Vanegas Arroyo Estefanía Eurídice Guerrero V. P. 38 Resumen de dudas y propuestas diferentes sobre lo que los libros de Historia y Arqueología dicen Jorge Angulo Villaseñor P. 56
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Antilha REVISTA LATINOAMERICANA DE HISTORIA ARTE Y LITERATURA
EDITORIAL
I
niciamos este 2016 con nuestro número 13, con la esperanza de que sea de muy buena suerte, pues como dicen por ahí, no hay quinto malo, y esperamos superar este quinto año para ratificarnos como un pequeño puerto de
conocimiento. Este número lo abre América Malbrán Porto quien nos hace un análisis codicológico de una rica fuente primaria, importante para conocer algunos detalles de la vida y espiritualidad nahua al momento de la conquista, Los Primeros Memoriales del franciscano Bernardino de Sahagún. Por su parte Estefanía Eurídice Guerrero nos brinda el relata sobre algunos trabajos realizados por la imprenta Venegas Arroyo del editor Antonio Vanegas en nuestro México del siglo XIX donde analiza un cuadernillo con recetas mágicas y su similitud con otros. Y por último Jorge Angulo cierra nuestra revista con algunas ideas propias que le han llevado hasta donde está gracias a su mente que desde niño se planteaba interrogantes sobre los textos de primaria que no le convencían del todo y lo que hizo que fuera cultivando una mente curiosa que cuando estudió Arqueología lo llevó a replantearse sobre cómo obtener más información científica de objetos que no se veían a simple vista de contextos arqueológicos y que en conjunto con las distintas corrientes teóricas se ha ido nutriendo para indagar sobre sociedades pretéritas de México. Esperamos que este número sea grato a los lectores. Los Editores
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8
LA ESTRUCTURA DE LOS PRIMEROS MEMORIALES DE FRAY BERNARDINO DE SAHAGÚN1 América Malbrán Porto2
M
ucho es el legado y el trabajo que nos ha dejado por delante el franciscano Fray Bernardino de Sahagún, tal vez su escrito más conocido sea la Historia General de las Cosas de la Nueva España, basado éste en la tra-
ducción del Códice Florentino, sin embargo existen otros textos de gran importancia como los denominados Códices Matritenses. Estos manuscritos se encuentran divididos en dos secciones y están depositados en la Biblioteca del Palacio Real y Biblioteca de la Real Academia de la Historia, ambas en Madrid, y de ahí su nombre. El Manuscrito de la Biblioteca del Palacio Real, con referencia 3280, está formado por 303 folios, en papel europeo, que miden aproximadamente 32 x 22 cm y fueron encuadernados, de acuerdo con Bustamante García (1990), en pasta valenciana, hacia mediados del siglo XVIII, momento en el que considera que fue foliado. En el primer folio, aparece escrito: “En este volumen se contienen seis libros del original de los libros historiales de las cosas desta Nueva España tocantes a lo espiritual y temporal, que son todos doce libros” (Ruz Barrio, 2010:190 ). Mientras que el Manuscrito de la Biblioteca de la Real Academia de la Historia, con referencia 9-5524, está compuesto por 343 folios, cuyas medidas aproximadas son de 31 x 21 cm. Éste fue encuadernado en pergamino, según Bustamante, cerca del siglo XVIII (Bustamante García, op.cit.:278), todo el volumen está foliado, tal vez por la misma mano que lo hizo en el Manuscrito del Palacio Real.
1 Este trabajo surge del Seminario de Cultura Nahuatl dirigido por el Dr. Miguel León Portilla. En el Instituto de Investigaciones Históricas de la Universidad Nacional Autónoma de México. 2 Maestra en Estudios Mesoamericanos. Profesora en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México. Directora del Centro de Estudios Sociales y Universitarios Americanos S.C. 9
Sobre este tema, José F. Ramírez
niego le envió el de la Academia,
(1885:90) menciona que el volumen es-
que por su examen y las apostillas
taba sin foliar, ocupándose de ello el Sr.
castellanas reconoció pertenecía á
Goicoechea, bibliotecario en 1867 y aña-
la Historia del P. Sahagún, lo mismo
de:
que el cuaderno de Sanz. EncareEl legajo llevaba el número de orden
ciendo su importancia recomendaba
118 y se intitula: «Historia y gobier-
se procurara adquirir, incorporándo-
no de las Indias». Las noticias son
lo en el Códice de la Academia, y
de Fr. Martín Sarmiento, escritas en
agrega: «Uno de los antiguos po-
un pliego de papel común, de su pu-
seedores de este Códice lo hizo ridí-
ño. En ellas dice, sustancialmente,
culo con la encuadernación y con el
«que el día 1.º de Agosto de 1762
rótulo por de fuera: Obras de Sor
se presentó en su celda el Sr. Anto-
María de la Antigua, etc.» (Ídem.).
nio Sanz, impresor mui conocido en
El orden original de estos manuscritos
Madrid, mostrándole un cuaderno
se ha perdido, por lo que se utiliza el
viejo en folio y en papel, cuyos ca-
que les asignó del Paso y Troncoso
racteres eran castellanos, pero el
(1905) quien publicó la edición facsimilar
idioma era extraño: que contenia
entre 1905 y 1907. El Vol. VI aparecido
varias pinturas de animales, aves,
en 1905, fue dividido en tres cuadernos:
etc.... que por acaso ocurrió á su
el primero debía contener el estudio y la
celda el Sr. D. Felipe Samaniego, y
descripción de todos estos códices, pero
habiendo visto el cuaderno del Sr.
no se sabe si llegó a redactarse; el se-
Sanz dixo que se parecia mucho á
gundo reproduce los manuscritos más
otros cuadernos en lengua mexica-
antiguos que del Paso y Troncoso llamó
na que formaban un Códice Ms. que
“Primeros Memoriales” y “Memoriales
poseia la Academia Real de la His-
con escolios”; el tercero contiene 27 es-
toria, y no sin bastante fundamento
tampas a colores de las ilustraciones de
sospechó, si el cuaderno de Sanz
los dichos “Primeros Memoriales”. El vol.
seria algun cuaderno desfalcado del
VII, aparecido en 1906, contiene el Códi-
dicho Códice Ms.» Que el Sr. Sama-
ce Matritense del Real Palacio, cuyos 10
manuscritos dividió en “Memoriales en
y ministros que los doctrinan. Recibi-
tres columnas”, con el texto en lengua
do este mandamiento, hice en lengua
mexicana de los libros I a V y VII, y
castellana una minuta o memoria de
“Memoriales en castellano”, libros I y V.
todas las materias de que había de
Dichos escritos han sido estudiados por
tratar” (Sahagún, 2002:129).
diversos autores entre los que destacan:
Esta primera etapa se realizó en Tepea-
José F. Ramírez (1885); Francisco del
pulco donde Sahagún reunió a algunos
Paso y Troncoso (1905-1907); Donald
de los principales del pueblo para que le
Robertson (1959); Miguel León-Portilla
señalasen personas hábiles y experi-
(1966, 1999); Manuel Ballesteros-Gai-
mentadas sobre los temas que le intere-
brois (1964); Manuel Ballesteros-Gai-
saban. Reunidos en breve entre diez, o
brois et al. (1962); Wigberto Jimenez
doce ancianos, estando presentes tam-
Moreno (1974); Jesús Bustamante Gar-
bién cuatro latinos, discípulos suyos del
cía (1990); Thelma Sullivan (1997); Car-
Colegio de Santa Cruz de Tlatelolco,
men Hidalgo Brinquis (2008); Arthur J.
cuenta fray Bernardino que:
O. Anderson (1994); Enrique Floresca-
“Con estos principales y gramáticos,
no (2002); entre otros.
también principales, platiqué muchos
Estos manuscritos corresponden a eta-
días, cerca de dos años, siguiendo la
pas anteriores de lo que más tarde se
orden de la minuta que yo tenía
convertirá
Florentino
hecha. Todas las cosas que conferi-
(1979). El mismo Sahagún nos dice en
mos, me las dieron por pinturas, que
el Prólogo al libro II de su Historia Gene-
aquella era la escriptura que ellos an-
ral que:
tiguamente usaban y los gramáticos
en
el
Códice
“a mí me fue mandado por sancta
las declararon en su lengua, escri-
obediencia de mi prelado mayor que
biendo la declaración al pie de la pin-
escribiese en lengua mexicana lo que
tura; tengo aún agora estos origina-
me pareciese ser útil para la doctrina,
les. También en este tiempo dicté la
cultura y manutenencia de la cristian-
postilla y los cantares. Escribiéronlos
dad destos naturales desta Nueva
los latinos en el mismo pueblo de Te-
España, y para ayuda de los obreros
pepulco” (Ibíd.:130). 11
El manuscrito Se podría decir que los Primeros Memoriales (1993) es un trabajo híbrido en el que se observan tanto la influencia indígena como la europea, donde claramente se reconoce la mano de varios tlacuilos y escribanos. La estructura básica del Libro sigue la tradición europea en cuanto al papel, el corte del mismo y la distribución de las imágenes. Para su elaboración se trazaron, sobre papel europeo, marcas guías realizadas en una delgada línea color sepia claro, que dividen cada folio en dos columnas (Fig.1). Por lo general en Fig.1. Foja de los Primeros Memoriales en la que se observan las líneas guía. Sahagún, 1993.
la columna de la izquierda se ha colocado el texto en náhuatl mientras que en la derecha se aprecian las ilustraciones, aunque esto no es una regla a lo largo
División de la obra
del manuscrito. La columna que corres-
De acuerdo con la más pura tradición
ponde a las figuras fue delineada en co-
clásica, Sahagún organizó los temas de
lor rojo y cada escena separada por una
su obra según un orden descendente;
línea horizontal.
es decir, de las categorías superiores a
El texto fue acomodado en capítulos y
las inferiores, de tal suerte que la prime-
párrafos y en éste se emplearon carac-
ra parte versa sobre los dioses y el mun-
teres latinos en letra gótica y enlazada o
do superior, y se concluye con la des-
cursiva (Quiñones, 1997:17) (Fig.2).
cripción del llamado reino mineral, esto es, lo más terreno que un hombre de la época pudiera imaginar.
12
Fig. 2. Detalle de los distintos tipos de letra utilizados en los Primeros Memoriales. SahagĂşn, 1993.
13
Según señala López Austin “en la lectu-
al pasar a vivir a San Francisco de Méxi-
ra de las palabras testadas da una pri-
co, Sahagún tuvo la paciencia de rees-
mera impresión de que el manuscrito del
tructurar la obra, tal y como él mismo
Códice Matritense es copia de un docu-
nos lo dice:
mento anterior, no conocido. En efecto,
“...pasé y repasé a mis solas todas
parece que el escribano en ocasiones se
mis escripturas y las torné a enmen-
adelanta en su lectura, se da cuenta de
dar y dividílas por libros, en doce li-
su error, tacha las palabras que ha anti-
bros y cada libro por capítulos y algu-
cipado y sigue copiando una narración
nos libros por capítulos y párra-
en la que después aparece lo testa-
fos” (Sahagún, 2002:130).
do” (López Austin, 1974:46) (Fig.3). Es
Es evidente que en la realización de es-
probable que esta sea parte de la razón
te texto, el franciscano, se basó en trata-
para la acumulación de información que
dos de historia natural europeos, que
se aprecia en el primer intento que es el
debía conocer, ya que algunas de estas
Códice Matritense y que posteriormente,
obras se encontraban depositadas en la
Fig.3. Detalle de la foja 259r. donde se observan las tachaduras en el texto a las que hace referencia Alfredo López Austin. Sahagún, 1993. 14
biblioteca del Colegio de Santa Cruz de
Son varios los autores que coinciden en
Tlatelolco, entre las que se figuraban las
que una de las fuentes fundamentales
historias naturales de los latinos, como
que ocupó Sahagún para la disposición
Plinio; “los bestiarios, lapidarios y herba-
en general de toda la obra, ha sido la
rios latinos y romances y las enciclope-
Naturalis Historia de Plinio, esta influen-
dias medievales y de la tardía Edad Me-
cia la podemos observar en que se res-
dia. El mundo natural europeo, a diferen-
peta desde un inicio en la disposición y
cia del indígena, estaba “modelado” por
el orden utilizado por el latino: tierra, aire
un sistema de clasificación “escrito” y
y agua (Palmeri Capesciotti, op. cit.;
sistemático, subdividido en categorías
León-Portilla, 1966; Garibay, 1971).
dispuestas según un orden preciso y
De acuerdo con Garibay (Ídem.), la dis-
jerárquico. Partiendo de esta forma del
tribución de la Historia General se ase-
saber, e interviniendo en materiales
meja notablemente a la de Plinio (1733).
esencialmente orales, Sahagún comen-
La Naturalis Historia está ordenada en
zó el largo proceso de recolección, orga-
treinta y siete libros que siguen un mo-
nización y transcripción de la informa-
delo jerárquico que va de la cosmología
ción” (Palmeri Capesciotti, 2001:194).
(Libro II), a la geografía (Libros III-VI), al
El escrupuloso orden jerárquico que le
hombre (Libro VII), a los animales
da al manuscrito, es producto del estu-
(Libros VIII-IX), a la botánica (Libros XII-
dio previo de obras similares, que le pre-
XIX), a la medicina (Libros XX-XXXII),
cedieron, la utilización de su minuta, es-
para terminar con los metales, los colo-
pecie de cuestionario subdividido por
res y las piedras (Libros XXXIII-XXXVII).
temas y articulado en una serie de pre-
Del mismo modo, tanto las primeras re-
guntas de tipo general a las que sus in-
dacciones de la obra de Sahagún como
formantes respondían ya sea de manera
la versión más tardía del Códice Floren-
verbal, o como menciona en el libro dos,
tino están articuladas según una misma
a través de pinturas. Este método utiliza-
disposición jerárquica de los temas tra-
do por el fraile fue en todo similar al usa-
tados (Palmeri Capesciotti, op. cit.: 202-
do por los antropólogos a lo largo de una
203; Garibay, Idem.).
investigación (León-Portilla, 1966).
Por otro lado Robertson (Op.cit.) consi15
dera que una posible influencia pudo ser
En el siglo XIX Del Paso y Troncoso es-
la obra de Bartholomaeus Anglicus
tudió el documento y le asignó el título
(1482), la cual está dispuesta en un es-
de “Primeros Memoriales”, de acuerdo a
quema tripartito y jerárquico frecuente
la reconstrucción que hizo, la obra cons-
en gran parte de las enciclopedias me-
ta de cuatro capítulos, los dos primeros,
dievales. Los diecinueve libros de De
54 folios, se encuentran en la Biblioteca
Proprietatibus rerum siguen un plan
del Real Palacio y los restantes, 34 fo-
metódico que va de lo espiritual a lo te-
lios, en la Biblioteca de la Academia de
rreno. Sin embargo en Los Primeros Me-
la Historia (Baird,1993:15). Estos a su
moriales, es significativa la ausencia de
vez se han subdividido en 49 párrafos.
varias categorías usadas por Anglicus,
De las 176 páginas (88 folios), 99 mues-
aunque algunas de ellas se incorporaron
tran imágenes que ilustran el texto en
posteriormente en el Florentino, y a es-
nahuatl. La presencia de éstas depende
tas se sumaron temáticas como las que
del contenido del párrafo.
se relacionan con la vida política y la or-
La escritura de estos folios no fue dis-
ganización social, que Anglicus no toca
puesta en un solo formato, como ya se
en su manuscrito (Quiñones, op. cit.:17).
mencionó, en la mayoría de los pliegos,
Es probable que Sahagún conociera es-
cuando hay texto e imágenes, se ha di-
tas obras y que se haya inspirado en
vidido la hoja en dos columnas y del la-
ellas, y algunas otras, para desarrollar
do izquierdo se coloca el texto, mientras
su recopilación, que terminó siendo la
que en el lado derecho la imagen. En el
primera “enciclopedia” del Nuevo Mun-
caso de texto sin figuras, la disposición
do. Pero no debemos minimizar el im-
de éste puede variar, algunas veces el
portante aporte de los informantes y tla-
escrito se mantiene del lado izquierdo,
cuilos ya que también aparecen textos e
como si hubiera existido la intensión de
imágenes que evidencian la pervivencia
colocar alguna imagen posteriormente.
de elementos prehispánicos, como la
En otros ejemplos el escrito se extiende
representación glífica o pictográfica de
por toda la página. Y en sólo dos ocasio-
tradición nahuatl del nombre de anima-
nes son las figuras las que ocupan el
les o plantas.
total del folio, como podemos apreciar 16
en las fojas 254r y 269r (Figs.4 y 5).
hecha con hilos metálicos de cobre o latón sujetos a los corondeles y puntizo-
Las Filigranas
nes y se suele colocar en una de las mi-
Otro elemento llamativo en el manuscrito
tades del pliego, por lo que su situación
son las marcas de agua o filigranas, mis-
en el libro es importante para determinar
mas que auxilian a datar el papel hacia
su formato (Ibíd.:14).
el siglo XVI y a reconocer el orden co-
El papel del manuscrito del Real Palacio
rrecto de los folios, así como aspectos
tiene seis tipos de filigranas, tres de las
de la planeación del escrito. Este papel
cuales se repiten en el documento de la
se caracteriza por la presencia de distin-
Academia de la Historia (Quiñones, op.
tas huellas producidas por los hilos
cit.:20).
metálicos que conforman el recipiente o
Estas marcas de agua eran comunes en
formadera de la que se obtienen, entre
los papeles del siglo XVI en Europa y la
las que destacan las denominadas fili-
Nueva España. La primera de ellas es la
granas, marcas de agua o verjuras
figura del Peregrino, ésta se encuentra
(Batalla Rosado, 1999:9).
dentro de un círculo en el que se obser-
En este caso se trata de un libro en
va un personaje que lleva un sombrero
cuarto, es decir, producto de doblar cada
de ala ancha y un bordón o bastón, ele-
pliego dos veces. En la primera, se con-
mentos que identifican al peregrino de
siguen dos bifolios u hojas, y tras la se-
Santiago de Compostela (Fig.6).
gunda, cuatro folios u ocho páginas,
En el Manuscrito del Real Palacio esta
quedando la filigrana en el doblez del
filigrana aparece con cuatro variantes
lomo. Lo normal en este formato, es que
cada una de ellas acompañada por le-
cada cuadernillo esté compuesto de dos
tras que, de acuerdo a Carmen Hidalgo,
pliegos (ocho folios) o tres (doce folios)
en algunos casos son confusas o ilegi-
(Ídem.).
bles debido a que el texto no permite
La filigrana, verjura o marca de agua, es
visualizarlas (Carmen Hidalgo citada por
la contraseña o emblema del fabricante,
Ruz Barrio, op. cit.:194), sin embargo
dueño o arrendatario del molino de pa-
Quiñones presenta las siguientes: NG,
pel en el que se elaboró éste. Está
que se relacionan con los folios 250, 17
Fig.4. Imagen que ilustra la fiesta de Atamalcualiztli, que se celebraba cada ocho años. Ocupa toda la foja 254r. Sahagún, 1993.
Fig.5. Foja 269r. Sahagún, 1993.
18
253, 254, 265 y 266; Br, correspondientes a los folios 255, 256, 257, 268, 271, 272 y 273; Iml al 298 y BA al folio 300 (Fig.7). En el caso del Manuscrito de la Biblioteca de la Academia de la Historia, sólo hay dos variantes de esta filigrana que son las que corresponden al tipo IML correspondientes a las fojas 52, 54, 55, 56, 58, 60, 62, 66, 67, 81 y BA que pertenecen a las fojas 71, 75, 76, 77, 79, 80, 86 y 87 (Fig.8). La otra marca de agua que se presenta
Fig.6. Filigrana del Peregrino, donde se aprecian los atributos del sombrero de ala ancha y el bordón. Tomado de Quiñones, 1997:21.
en ambos documentos es la de la mano extendida con guante y una flor o estre-
Fig.7. Variantes de la filigrana del Peregrino en el Manuscrito del Real Palacio Tomado de Quiñones, 1997:21. 19
Fig.8. Variantes de la filigrana del Peregrino en el Manuscrito de la Biblioteca de la Academia de la Historia. Tomado de Quiñones, 1997:21.
lla en la parte superior de sus dedos
cio, presenta las letras MJ y se encuen-
(Fig.9). Esta filigrana es característica
tra en las fojas 282, 283, 285, 289, 290,
de la Península Ibérica y se la relaciona
291 y 293 (Fig.10). La siguiente repre-
con un talismán contra el mal de ojo y
sentación de esta filigrana tiene las ini-
demás maleficios, creencia que aún per-
ciales BA y lo que parece ser un botón o
siste entre los musulmanes que, en la
círculo con una cruz en la parte inferior
fachada opuesta a su casa, suelen es-
del guante o muñeca (Fig.11), esta co-
tampar la mano empapada en alma-
rresponde a las fojas 301 y 302.
zarón u otro colorante, siendo también
En el caso del Manuscrito de la Acade-
usada como amuleto, conocida como “la
mia de la Historia se repite esta marca
mano de Fátima” (Hidalgo Brinquis,
de agua con las iniciales MJ en la foja
2008:230).
85.
En este caso aparecen dos variantes, cada una de ellas con iniciales en la pal-
Las imágenes
ma de la mano. La primera, que se en-
De acuerdo con Quiñones, después de
cuentra en el manuscrito del Real Pala-
que se hubieron preparado los cuaderni20
Fig. 9. Marca de agua que representa una mano extendida o un guante con una flor en la parte superior.
Fig. 10. Filigrana de la Mano de Fátima con las iniciales MJ. Tomado de Quiñones, 1997.
Tomado de Quiñones, 1997.
21
nes, en total 546, distribuidas de la siguiente manera: Capítulo
Total de imágenes
I
81
II
334
III
64
IV
67
En el capítulo I las ilustraciones tienen tres formatos diferentes: Fig. 11. Filigrana de la Mano de Fátima con las iniciales AB en el Manuscrito del Real Palacio. Tomado de Quiñones, 1997.
1º Fojas de la 250r a 253r. Las figuras se colocaron del lado derecho, enmarcadas por una gruesa línea roja que las
llos y de haber trazado las líneas guías
divide en conjuntos de dos o tres por fo-
en las fojas, se procedió a colocar las
ja.
imágenes, antes de que el texto en
2º Fojas en las que sólo hay una imagen
nahuatl fuera copiado. Lo que contrasta
sin texto en nahuatl, corresponden a es-
con la preparación europea en que pri-
te grupo sólo las fojas 254r y 269r.
mero se escribe el texto dejando el es-
3º Figuras sin margen, esta categoría
pacio para que después se añadan mi-
podemos dividirla en dos grupos el pri-
niaturas
mero corresponde a las fojas en las que
y
figuras
(Quiñones,
op.
cit.:24.).
se colocaron las imágenes alineadas del
El formato de las páginas ilustradas no
lado derecho que corresponden al párra-
es uniforme y varía entre capítulos e in-
fo, V y está compuesto por 13 fojas.
clusive de página a página.
Mientras que el segundo grupo son figu-
Quince de 49 párrafos en los Primeros
ras que se han intercalado en el mismo
Memoriales, 98 folios, presentan imáge-
texto, el cual se va acomodando a la for22
ma de cada dibujo. Este grupo está
En este capítulo tenemos 69 figuras re-
compuesto por las tres fojas que abar-
lacionadas con los gobernantes, sus
can el párrafo III.
atuendos y adornos,
En el capítulo II hay gran cantidad de
En el capítulo IV las pinturas tampoco
ilustraciones, que abarcan los cuatro pri-
tienen márgenes y sólo una sección,
meros párrafos, llegando a un total de
aquella relacionada con las cosas huma-
334, ubicadas del lado derecho de la
nas, tiene ilustraciones: los 67 trajes mi-
hoja. Las imágenes no tienen margen en
litares y las insignias de los gobernantes
los tres primeros párrafos; versando las
del párrafo 8, folios 72r-80r.
figuras sobre los astros y demás fenómenos atmosféricos. En el cuarto párra-
Los capítulos
fo las pinturas están dispuestas en car-
El manuscrito fue dividido en cuatro
tuchos o cuadretes rojos dentro de los
capítulos, Capítulo I, “Ritos y dioses”;
cuales se han representado los días,
Capitulo II, “Cielo é infierno”; Capítulo III,
con excepción del último día que no tie-
“Señorío”; Capítulo IV, “Cosas huma-
ne margen.
nas”. Estos capítulos, como ya se dijo
En el capítulo III las figuras no tienen
fueron divididos en párrafos. Es proba-
margen y se acomodaron de dos for-
ble que el libro contuviera un quinto
mas:
capítulo sobre la historia natural, que
1. Los dibujos están ubicados en la co-
también está perdido (Ídem.), lo que co-
lumna derecha, en el caso de los Se-
rrespondería con la disposición europea
ñores de México, Tezcoco o Huexotla
de una enciclopedia.
con el nombre de cada uno del lado
Los capítulos en el manuscrito se distri-
derecho, sobre su cabeza. Propia-
buyen de la siguiente manera:
mente vestidos y con glosas identificando los detalles de sus atavíos. Es-
Capítulo I
tas figuras conservan el estilo de los
Capítulo II Del cielo y del Infierno.
códices prehispánicos.
Capítulo III Señorío.
2. El texto es escrito debajo de una figu-
Ritos, Dioses.
Capítulo IV Cosas humanas.
ra sin cuadrete o márgenes. 23
Capítulo I En el caso del Capítulo I éste inicia con el párrafo segundo ya que el primero se ha perdido y desgraciadamente no tenemos en escritos posteriores de Sahagún algún indicio sobre el contenido del mismo (Baird, op. cit.:15). Por lo que desconocemos el título original. El título actual de “Teteo” o dioses se le debe a Jiménez Moreno (1974) y el de “Ritos, Dioses” a del Paso y Troncoso (Op.cit.). El capítulo consta de 13 párrafos divididos de la siguiente manera: Párrafos 1º
Temática
Fojas
Perdido
¿?
¿?
2º lnic ii. Ipan mitoa ym inilhui-
Fiestas de los dioses
BRP 250r-254r
Las varias cosas con que eran servidos los dioses.
BRP 254v-258r
4º lnic iiii. parapho ypan moteneva íz yn izquinti tatequipanovaya yn lchan çeçeyaca teteu.
Se enumeran todos los que servían en las casa de cada dios
BRP 258v-260v
5º lnic V. parapho ypan mitoa in quenin muchichivaya yçeçeyaca teteu. 6º lnic vi. parrapho ipan mitoa in quezqui tlamantlj tlatquitl, yn vnca[n] monenequia tlacatecolocalco.
Se dice cómo se ataviaban cada uno de los dioses.
BRP 261r-267r
24 vocablos enumerando objetos necesitados en los templos.
BRP 268r
uh, in teteu 3º lnic iii parrapho ipan mitoa yn izquitlamantli ynic tlayecoltiloya teteu.
24
Párrafos
Temática
Fojas
7º lnic vii. parrapho ipan moteneoa in tlein itotoca catca, y çeçecni tlacatecvlocalco
15 vocablos enumerando varios templos, edificios, objetos y localidades relacionados a ellos, con una pintura.
BRP 268v-269r
8º lnic viii. parrapho in quezqui tlamantli in intetlavelil, in tetev.
Sin texto.
BRP 269v
9º lnic ix. parrapho ipa[n] moteneva in intotoca teteuatzitzi[n].
Nombres o títulos de cinco jerarcas mexicanos. Y la anotación: Ojo
BRP 270r
10º lnic x. parrapho ypan moteneoa in tlein intech tlamjloya teteo.
Enumeración de 23 de los dioses con vocablos indican do sus oficios, sus poderes, sus atributos.
BRP 270v-271r
11º lnic xi. parrapho ipan moteneoa in quenjn tlayecoltiloya tonatiuh ioa[n] quezquipa in tlapitzaloya in cemjlhuitl in ceyoual, ioa[n] quezquipa in tlenamacoya ioa[n] neçavaloya.
Cómo era servido el sol y cuántas veces de día [y] de noche tañían las flautas; además, cuántas veces se ofrecía incienso y se ayunaba
BRP 271v-272r
12º Inic xii. parrapho. ipan mitoa yn quezqij tlamantij, yn vncan mochivaya tlatequipanoliztli y[n] vnca[n] tlacatecolocalco.
En que se relatan algunas de las tareas que se realizaban allá en las casas de los demonios.
BRP 272v
13º Inic xiii. parrapho ipan moteneva in quenin tlatlauhtiloya diablome iva[n] jurame[n]to.
En que se informa cómo se suplicaba a los diablos y [cómo se hacían] juramentos.
BRP 273r-281v
25
El segundo párrafo versa sobre los ritua-
ortografía del texto en nahuatl como en
les que se realizaban en honra de los
muchos de los títulos de los capítulos, a
dioses en cada una de las dieciocho
lo largo de los Primeros Memoriales en
veintenas del año que corresponden a
que se encuentra que fueron tachados y
las descritas en los capítulos 20 a 38 del
sustituidos (Fig.12), hasta quedar con-
libro II del Códice Florentino. También
forme con el resultado, mismo que cam-
está presente la descripción de la fiesta
biaría una vez más al juntar la documen-
de Atamalcualiztli, que se celebraba ca-
tación en el Códice Florentino.
da ocho años, la cual se encuentra en el
El párrafo 5 versa sobre los dioses y sus
apéndice del mismo libro (Anderson, op.
atavíos y aquí se presenta una serie de
cit.:55) y en el caso de los Memoriales
41 figuras que representan 37 deidades
ocupa la foja 254r (Fig.4).
o sus personificaciones. Las imágenes
Esta sección fue ilustrada con diecinue-
fueron colocadas del lado derecho de la
ve pinturas explicadas en los textos en
página, mientras que en la parte izquier-
náhuatl, las cuales fueron dispuestas en
da aparece la descripción de los atavíos,
la columna derecha, de ellas sólo se uti-
en nahuatl. Es probable que los dibujos
lizó el texto de la descripción de Atamal-
sean copias de un códice prehispánico.
cualiztli en el Códice Florentino.
Un dato interesante es que parecen ser
Los párrafos 3 y 4 forman parte del ma-
reproducciones hechas por los “gramá-
terial utilizado por Sahagún en el apéndi-
ticos trilingües” más que representacio-
ce del libro II del Códice Florentino. Un
nes hechas por un tlacuilo. Estas mate-
trabajo más extenso sobre la compara-
rias no se reprodujeron en el Códice Flo-
ción de cada párrafo de los Primeros
rentino, pues lo que se incluye en el libro
Memoriales y el Códice Florentino es el
I “De Los Dioses”, se reunió más tarde
de Anderson “Los Primeros Memoriales
en Tlatelolco. Es evidente que de los 22
y el Códice Florentino” aparecido en Es-
dioses pintados en las seis planchas
tudios de Cultura Nahuatl (Ibíd.:56).
que preceden el texto del libro I, 20 son
Aquí se hace evidente la revisión reali-
copias en estilo europeizado de los re-
zada por el franciscano, ya que existen
producidos
modificaciones en el texto tanto en la
Además, interesante es notar que aun26
en
este
quinto
párrafo.
Fig.12. Detalle del folio 271v en el que se observa que el título fue tachado por Sahagún y sustituido para integrar el Capítulo 12 del Códice Florentino. Sahagún, 1993.
que las descripciones de los atavíos en
titula quezqui tlamantli in intetlavelil, in
el Códice difieren en general de los de
tetev.
los "Primeros Memoriales", hay cuatro,
El párrafo 9 enumera los 5 nombres o
las de Xipe, Macuilxochitl, Yiacatecuhtli
títulos de dignatarios mexicanos.
y Nappatecuhtli, que corresponden es-
El párrafo 10 hace referencia a los 23
trechamente a las recogidas en Tepepol-
dioses indicando sus oficios, poderes y
co (Anderson, op. cit.:59).
atributos.
En el párrafo 6, foja 268r, no aparecen
En el párrafo 11 se relatan los rituales al
figuras y sólo se escribieron 24 vocablos
sol.
enumerando objetos necesitados en los
El párrafo 12 refiere los rituales y tareas
templos.
que se realizaban en tlacatecolocalco.
El párrafo 7 está conformado por 15 vo-
El párrafo 13 refiere los 20 himnos o
cablos que enumeran templos, edificios,
cantares.
objetos y localidades relacionados a ellos, es ilustrado por la pintura corres-
Capítulo II
pondiente a la mencionada foja 269r
Este capítulo es el más corto de los cua-
(Fig.5).
tro que conforman los Primeros Memo-
El párrafo 8 es el que no tiene texto, y se
riales. Está conformado por sólo siete 27
párrafos a los cuales se les asignaron números seguidos por un párrafo incompleto sin número (Anderson, op. cit.:63). En las cuatro primeras secciones hay 334 ilustraciones. El capítulo está conformado de la siguiente manera:
Párrafos
Temática
Fojas
Inic ce parrapho ipan mitoa in into-
Cuerpos que resplandecen
BRP 282r-282v
Cuerpos formados en el aire
BRP 282v-283r
Cuenta de los años
BRP 283r-286r
Cuenta de los días
BRP 286r-303r
De los agüeros, los sueños
BRP 303v
ca y[n]tech tlanextilia Inic ome parrapho ypa[n] mitoa in jntoca yn tlacpac eecaticpac muchiva Inic yei parrapho ypan mitoa yn xiuhpovalli Jnic navi parrapho ypa[n] mitoa in tonalpovalli Inic macuilli parrapho ypa[n] mitoa in tetzavitl y[n] temictli
BAH 85r-85v
Inic chicuaçe parrapho ypa[n] mi-
De las varias cosas que se con-
toa yn izquitlamantli yn ompa tlami-
sumían en la región de los muer-
loia yn mictlan
BAH 84r-84v
tos
Inic chicome parrapho ypan mitoa
De las varias ofrendas que perte-
yn izquitlamantli in ventli yn itech
necían a Mictlantecuhtli y a Mic-
povia in mictla[n]tecutli y[n] micte-
tecacihuatl
caçihoatl 28
BAH 84v
El texto en nahuatl fue acomodado en
Los párrafos 6 y 7 no se utilizaron en el
dos formas: en los dos primeros párrafos
Códice Florentino, aunque ambos tratan
se encuentra del lado izquierdo del folio;
de materias reunidas y organizadas en
en el tercer párrafo las figuras están
Tlatelolco y México-Tenochtitlan, para
acompañadas por los términos en nahu-
formar el primer capítulo del apéndice
atl pero los números son arábigos o ro-
del libro III (Ibid.69).
manos. Sin embargo en el cuarto párrafo los números fueron escritos en nahuatl.
Capítulo III
En este caso al finalizar cada trecena se
Está conformado por 17 párrafos que se
añadió un breve párrafo explicativo
relacionan con el contenido del libro VIII
(Baird, op. cit.:31).
del Códice Florentino.
Ninguno de estos textos fue utilizado por
El primer párrafo versa sobre los seño-
Sahagún en el Códice Florentino, aun-
res de México, Tezcoco y Huexotla. Y
que bien pueden observarse ciertas si-
esta sección fue utilizada en los capítu-
militudes en los libros III, IV, V y VII del
los 3 y 4 del libro VIII del Códice Floren-
Códice y es evidente que algunas de las
tino (Ibid.:70).
pinturas que ilustran el capítulo sirvieron
Al igual que el párrafo anterior los párra-
como
fos 2º y 3º se relacionan con el libro VIII
modelo
para
el
Florentino
(Anderson, op. cit.:64), aunque en algu-
del Florentino.
nos casos se observa cierta influencia
4º Párrafo de las comidas y bebidas,
europea.
está relacionado con el capítulo 13 del
En el caso del quinto párrafo, de los
libro VIII del Códice Florentino, aunque
agüeros, la primera parte sirvió como
la descripción es más completa en los
base del libro V del Códice Florentino,
Primeros Memoriales (Ibid.:72).
en que se añadieron datos sobre la in-
Párrafos 5º a 7º tratan de los adornos de
terpretación y los efectos de los agüe-
los señores en distintos momentos y ac-
ros, de los modos utilizados para mitigar
tividades.
sus efectos, de modos de resistirlos,
8º Párrafo es un vocabulario de los ins-
etcétera. El ordenamiento es igual en
trumentos usados en las tareas femeni-
ambos manuscritos (Ibid.68).
nas, empieza enumerandolos de las se29
Párrafos
Temática
Fojas
1º Inic i. parrapho ypan mitoa yn otlatocatque yn mexico yn tenochtitlan yoa[n] yn acolhuacan
Los que gobernaron MéxicoTenochtitlan y Acolhuacan
BAH 51r-53v
2º Inic ome parrapho in itoca in ixq[ui]chti in itepaleuicava, in tlatoque, ioan teupixque catca
Auxiliares de los señores
BAH 53v-54r
3º Inic iii parrapho ipan mitoa in izquitlamantli in ipan tlatoaya in tlatoque
De las cosas que se encargaban los señores
BAH 54r
4º Inic. iiii. parrapho ipan mitoa in izquitlamantli in itlaqual in imauh in tlatoqz yoan in tlaçocioapipiltin
De la comida y bebida de los señores
BAH 54v-55r
5º Inic v. parrapho. ipan mitoa in izquitlamantli in inechichioaya in tlatoque ioa[n] in cioapipiltin
Vestido y compostura de señores y señoras
BAH 55v-56r
6º Inic. vi. parrapho ypan mitoa in izquitlamantli in inechichioaya tlatoque in iquac maçeva
Adornos de los señores cuando bailaban
BAH 56r-56v
7º Inic vii. parrapho ipan mitoa in izquitlamantli inic melelquixtia inic maviltia in tlatoque
Las cosas con las que se recreaban los señores
BAH 56v
8º Inic. viij. parrapho ipan mitoa in izquitlamantli in itlatqui inic tlatequipanoa in çioapipiltin
Artículos con los que trabajaban las señoras
BAH 56v-57r
9º Inic. ix. parrapho ipan mitoa in tecpancali tlatocacali
Se enumeran los palacios, las casas del señor
BAH 57r-57v
10º Inic. x. parrapho ipan mitoa in izquitlamantli tlatquitl yn onca [n] moneneq[ui].
Se enumeran todos los artículos necesitados allí
BAH 57v
11º Inic. xi. parrapho ipan mitoa in itlavelilocatoca in oquichtlaveliloque
De los nombres de los hombres malos
30
BAH 58r-58v
Párrafos
Temática
Fojas
12º Inic. xii. parrapho ipan mitoa in itotoca in çioatlaveliloque in auianime
De los nombres de las mujeres malas, las putas
BAH 59r
13º Inic xiii. ipan mitoa in itelpopochti ioan yn ichpopochtin ynic moapavaya
Cómo se educaban los jóvenes y las doncellas
BAH 59v
14º Inic xiiii parrapho ipan mitoa inic chicomuztoc valquizqz in chichimeca
Cómo salieron los chichimeca de Chicomoztoc
BAH 60r-61r
15º Inic xv parrapho ipan mitoa inic tenonotzaya, tecentecaya muchi tlacatl muce[n]tlaliaya in çivatl yn oquichtli
Amonestaciones de los magistrados al pueblo
BAH 61v-64v
16º Inic xvi parrapho in queni[n] qualania, in tlatoani yn ipan mitoa
Motivos para el enojo del gobernante
BAH 65r-65v
17º Inic xvij parrapho ypan mitoaya inic tepapa tlavcoyaya in tlatoani
Motivos para la tristeza del gobernante
BAH 65v-66r
ñoras nobles y termina con los propios
En los párrafos 11º y 12º, entre los hom-
para las mujeres plebeyas. El capítulo
bres malos, Sahagún incluyó a algunos
16 contiene la misma información, dife-
médicos, magos y curanderas, que se
renciándose el orden.
relacionan con los capítulos 3, 11 Y 14
Los párrafos 9º y 10º están relacionados
del libro X, en el Florentino.
y versan sobre las casas de los gober-
El párrafo 13º se relaciona con la educa-
nantes y los elementos relacionados con
ción y corresponde al apéndice del libro
ellas, así como las actividades de los
III del Códice, capítulos 4 a 8, trata ex-
oficiales. Ambos párrafos se encuentran
clusivamente la de los muchachos y los
en el Códice Florentino, aunque en éste
jóvenes; la de las niñas y las doncellas
los textos fueron enriquecidos, debido a
se limita a los capítulos 39 y 40 del libro
la complejidad relacionada con una gran
VI (Ibid.:76).
urbe como Tenochtitlan.
14º Párrafo conjuga el elemento mítico 31
como la salida de Chicomostoc, de la
sean arábigos.
que se habla brevemente, para conti-
Como ya se mencionó, es probable que
nuar enumerando las necesidades de la
Sahagún haya incluido un quinto libro en
vida, las riquezas, los lujos que poseen
el que tratan los temas relacionados con
los señores y que han ganado como su
la Historia Natural, de igual manera en
justa recompensa por haber triunfado en
que lo hizo con el Libro XI del Códice
la guerra.
Florentino, sin embargo no existen refe-
El 15º párrafo es uno de los más largos
rencias que indiquen la existencia de
del capítulo, contiene cuatro arengas
dicho capítulo en los Primeros Memoria-
amonestadoras dirigidas a los nobles,
les.
por no haber cumplido con sus deberes
Cabe destacar que los Primeros Memo-
y en las que se amenaza con severos
riales son un trabajo concluido, un traba-
castigos.
jo completo, sin embargo es probable
Los párrafos 16º y 17º están relaciona-
que Sahagún, al mudarse a Tlatelolco,
dos con el anterior, y al igual que aquel
se diera cuenta de que su información
fueron omitidos en la versión final del
correspondía a una localidad provincial,
Códice Florentino.
que no tenía las mismas capacidades económicas de Tlatelolco o Tenochtitlan,
Capítulo IV
encontrando que los rituales variaban,
En este capítulo se trata de las cosas
por lo que consideró que este trabajo
humanas. Este material no fue utilizado
era insuficiente y por lo tanto decidiera
íntegramente en el Códice Florentino.
ampliarlo con nueva información propor-
Está dividido en 11 párrafos, la mayoría
cionada por nuevos informantes dando
de los cuales no presentan imágenes.
origen a lo que más tarde sería el Códi-
Es en este capítulo donde se observa el
ce Florentino.
mayor desorden en la distribución de las
Para concluir consideramos que sería
fojas, sobre todo en los párrafos 8º y 9º.
necesario e importante, para recuperar
Es interesante que cada uno de los títu-
el contenido e intención que los nahua-
los de los párrafos estén escritos en
tlatos le dieron a los Primeros Memoria-
nahuatl pero los números, en este caso
les, realizar una traducción fiel del na32
Párrafos
Temática
Fojas
1º Inic. 1. parapho ypa[n] mitoa yn itoca in tlacamecayutl
Los términos relativos al linaje
BAH 82r
2º Inic. 2. parapho ypa[n] mitoa yn intoca y[n] oquichti y[n] çioa çan oc tecemaxca etc.
Los términos masculinos y femeninos
BAH 82r
3º Inic. 3. parrapho ypa[n] mitoa yn intoca in oquichti ça[n] teneixcavil etc.
Nombres de los hombres
BAH 82r-82v
4º Inic. 4. parrapho ypa[n] mitoa yn i[n]toca y[n] çioa çan teneixcavil etc.
Nombres de las mujeres
BAH 82v
5º Inic. 5. parrapho ypa[n] mitoa yn itotoca yn itech ca y[n] tonacayo y[n] pani neçi.
Los nombres de lo que está, lo que en la superficie aparece
BAH 82v-83r
6º Inic. 6. parrapho ypa[n] mitoa yn itotoca yà itic ca y[n] tonacayo yn amo ualneçi
Nombres de lo que está dentro, lo que no se muestra, en nuestros cuerpos
BAH 83v
7º Inic. 7. parrapho ypa[n] mitoa yn i[n]toca y[n] tlaca y[n] mauiztililoni tlatoani pilli teuctli çiuapilli etc.
Títulos de las personas, ilustres, señores, nobles
BAH 83v-68r
8º Inic 8 parrapho ypa[n] mitoa yn i[n]tlaviz yn i[n]tlatqui y tlatoque y[n] capitanes.
Se enumeran insignias y vestidos de los capitanes
BAH 68r-69r 72r-80r
9º Inic. 9. parrapho ypa[n] mitoa yn izquitlama[n]tli cvcvliztli ypa[n] mochiva y[n] tonacayo
Se relata todo género de enfermedad
BAH 69r-69v 81r-81v
10º Inic. 10. parrapho ypa[n] mitoa y[n] tlatolli ynic motlapaloa y [n] pipilti y[n] çioapipilti yoa[n] y [n]tlatolli ynic maoa
Las palabras con que se saludan los señores y las señoras nobles y las palabras con que riñen
BAH 70r
11º Inic. 10. parrapho ypa[n] mitoa y[n]quenin motlapaloa yn quenim maoa yn maceoalti yn oquichti yoan yn çiva
Cómo se saludan y riñen los hombres y las mujeres plebeyas
BAH 70v-71r
33
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Ediciones José Porrúa Turanzas.
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37
MAGIA, ALQUIMIA Y SUPERSTICIÓN EN SECRETOS DE LA NATURALEZA DE LA IMPRENTA VANEGAS ARROYO1 Estefanía Eurídice Guerrero V.
E
l Archivo Vanegas Arroyo se caracteriza por la versatilidad de sus temas y las diferentes perspectivas que puede reflejar en cada uno de ellos (vid. Castro, González y Masera, 2013). Sin duda alguna Antonio Vanegas, el editor, pose-
ía un negocio redondo publicando impresos que atendían a cada uno de los gustos del público. Quizás uno de los tópicos más importantes era el mágico ya que, recordemos, en el siglo XIX hubo un creciente interés en los temas de espiritismo y afines 2. De ese modo en la imprenta aprovecharon la oportunidad y, además de relatar historias de aparecidos y demás, publicaron oráculos, pronósticos zodiacales, trucos de magia, manuales para leer el porvenir por medio de cartas y de los sueños. Entre todos estos impresos existe una peculiar joya que resalta entre todas las demás; me refiero a un breve recetario de remedios el cual es un punto intermedio entre la medicina doméstica y las artes mágicas titulado Secretos de la naturaleza, antiguos y modernos3 (Fig.1). Circuló en formato de cuadernillo, con un total de 16 hojas. No tiene año de impresión ni forma parte de alguna colección. Presume de tratado de quiromancia4, argumentan-
1. Este artículo surgió como parte del Proyecto PAPIIT (IG400413) Impresos Populares Mexicanos (1880- 1917) rescate documental y edición crítica, coordinado por la Dra. Mariana Masera. 2. Las razones por las que se cree que el espiritismo tuvo tanto éxito en el s. XIX son: “… [el] desarrollo tecnológico, del debilitamiento de la institución eclesiástica y su control sobre la esfera pública, así como también de numerosas guerras imperiales y civiles que arrasaron con gran parte de la población de distintos países, el espiritismo ofrecía a sus adeptos un marco capaz de integrar y darle sentido a todas estas experiencias nuevas que traía consigo la modernidad decimonónica” (Sabau, s/f). En cuanto a una prueba del impacto que tuvo en la élite intelectual la encontramos de adeptos que pertenecían a dicha religión: “José María Vigil, Rafael Reyes Spindola, Juan de Dios Peza, Santiago Sierra, Pedro Castera, José Martí y el más conocido Francisco I. Madero entre otros muchos” (Campos, s/f). 3. Opto por el término recetario para designar al cuadernillo Secretos de la naturaleza, ya que a diferencia de un tratado de medicina, no estudia a las enfermedades, ni establece una relación entre los malos hábitos del paciente y las consecuencias de sus actos. Tampoco requiere ser leído por un público especializado o un mediador. Basta con la buena voluntad del lector y su esfuerzo por seguir las instrucciones al pie de la letra. 4.Secretos de la naturaleza en ningún momento hace alusión a prácticas de quiromancia, seguramente catalogarlo así era una estrategia de venta. 38
Fig.1. Portada de Secretos de Naturaleza. Grabado en plancha de metal de zinc. Diseñada por José Guadalupe Posada, Testamentaría Vanegas Arroyo. Ciudad de México.
39
do estar basados en los conocimientos
De este modo descubrimos que el cua-
de Golls y La Voiten, personajes de cuya
dernillo Los secretos de la naturaleza
existencia podemos dudar debido a la
abarca diferentes tradiciones mágicas,
falta de documentación que la comprue-
en sus hojas no sólo encontramos
5
ben y, por lo tanto, de sus escritos .
fórmulas maravillosas, en constante co-
El cuadernillo contiene 53 recetas, entre
queteo con varias creencias populares,
las cuales resaltan los siguientes propó-
sino que también descubrimos con
sitos: remediar o provocar relaciones
asombro que muchos de estos remedios
amorosas, predecir el futuro, atraer la
poseen raíces cultas, o como bien nos
suerte, restaurar la salud y controlar el
advierte Vanegas sobre el contenido del
clima. También es importante resaltar
impreso, desde el título del mismo:
que estas cuentan con seis diferentes
“Secretos de la naturaleza, antiguos y
clases de ingredientes: animales, plan-
modernos”.
tas, piedras, objetos mágicos; así como de elementos como son el tiempo sagra-
Definiciones de los tres rubros gene-
do y números mágicos. A su vez es im-
rales
portante resaltar que dividí en tres diferentes rubros los métodos mágicos de
Alquimia
los que se vale el autor para desarrollar
“Esta ciencia se basa en la creencia de
las recetas: el primero es la alquimia, el
que cualquier metal que esté en reposo
segundo es la superstición y por último
ctónico, con el paso de miles de siglos
la magia con sus cuatro subdivisiones:
se transmutará en oro, ya que la natura-
magia ritual, natural, simpática y demo-
leza tiende a la perfección” (Eliade,
níaca.
2001:49-50). La función de los alquimistas consiste en servir como mediadores que aceleren este proceso, utilizando la
5. Al parecer crear autores ficticios era un recurso común en la imprenta Vanegas Arroyo, ya que en diversos ocasiones podemos encontrar impresos que están atribuidos a autores inexistentes, quizás tenía la finalidad de otorgarle credibilidad a los remedios mágicos que son descritos en el cuadernillo.
legendaria piedra filosofal, puesto que de ese modo adquieren “la inmortalidad y la libertad absolutas” (ídem). La alusión a la práctica alquímica no es 40
común en el cuadernillo, sólo dos rece-
tipos diferentes de magia:
tas la mencionan directamente desde el
Magia ritual: es la unión entre tres
título y la desarrolla a lo largo del conte-
elementos.
nido: “Para hacer el famoso elixir de la
1. Mago: Sirve de intermediario en-
larga vida” (Vanegas Arroyo, op. cit.:10-
tre lo divino y lo humano.
11) y “Secreto de los secretos misterio
2. Encantamiento: uso mágico de
admirable triunfo de la alquimia” (ibíd.:14
las palabras.
-15). En otras ocasiones se alude a esta
3. Ritual: acciones que son reque-
práctica de modo indirecto por el léxico
ridas durante el culto.
empleado, como por ejemplo en la rece-
Magia natural: no se distingue de la
ta: “Para componer el terrible fuego grie-
Ciencia, sino que es una rama de
go”
ella. Refiere a los poderes ocultos en
utilizan
el
término
“azufre
vi-
vo” (ibíd.:9-10). En casos aún más raros
la naturaleza (ídem.).
se identifican las bases alquímicas por el
Magia simpática: funciona por una
uso de ingredientes o tiempos recomen-
empatía simbólica entre causa y
dados como son: el excremento de ca-
efecto, es decir si alguien porta, usa
ballo o los legendarios 40 días de espe-
o ingiriere algunas plantas, animales
ra a que esté listo el menjunje, por ejem-
o piedras adquirirá las cualidades del
plo en la receta: “Para curar los retortijo-
objeto.
nes que las mujeres padecen antes o
Magia demoníaca6: También llamada
después del parto” (Ibíd.:12), se menciona tanto el tiempo de espera como las
6. En el cuadernillo no se menciona de manera directa el uso de la magia demoniaca, no obstante el editor eligió tres remedios que tienen por principal ingrediente la sangre de la abubilla, ave asociada con la invocación demoniaca. Esto se debe al simbolismo que le fue atribuido al ave en la edad media: por el hecho de vivir a la orilla de los ríos pero nunca sumergirse en ellos. En el imaginario religioso se interpreta como la oportunidad de seguir el dogma cristiano y no obstante aferrarse a lo mundano (Vid. Malaxecheverria, 2002). Uno de los tres ejemplos que podemos encontrar en Secretos de la naturaleza se titula “Para hacer general asombro en una reunión”: Mézclese la yerba llamada centaura con la san-
heces equinas. Magia De manera general puede definirse como la acción de invocar fuerzas naturales o sobrenaturales con el fin de manipularlas (Kieckhefer, 1992:16-25). Dentro del cuadernillo se encuentran cuatro 41
nigromancia, invoca a los demonios
Ingredientes y elementos en las rece-
mediante círculos mágicos. Kieck-
tas
chefer menciona que en esta clase
Como ya mencioné con anterioridad, en
de rituales a menudo se sacrificaba
el cuadernillo existen cinco clases princi-
un ave llamada abubilla en honor a
pales de ingredientes y un elemento
dichos espíritus, la cual sirve para
temporal, de los cuáles daré ejemplos
obtener una buena posición social,
de cada clase y sobre en qué receta se
conseguir favores sexuales, enlo-
encuentra.
quecer a alguien o simplemente
Animales: su uso se basa en la efi-
crear una ilusión (Ibíd.:14).
cacia de la magia simpática y en otras ocasiones por una asociación
Superstición
con alguna divinidad pagana. Por
Es la mezcla de lo sagrado con lo profa-
ejemplo: en la receta “Para infundir
no, la creencia de que algunos objetos
amor” (Vanegas Arroyo, op.cit.:1)
poseen habilidades mágicas o milagro-
los ingredientes principales son
sas (ibíd.:197). A diferencia de los ritua-
aves asociadas con la diosa Afrodi-
les mágicos no requiere de un oficiante,
ta como son la paloma “…el cabro
cualquiera puede llevar a cabo las accio-
está también, como el morueco, la
nes necesarias para obtener los resulta-
liebre, la paloma y el gorrión, con-
dos deseados (Ibíd.:20). Suelen ser del
sagrado a Afrodita, en cuanto ani-
dominio público y de transmisión oral.
mal
Dentro de Secretos de la naturaleza al-
ca” (Chevalier, 1986:223).
gunas recetas son deformaciones de ri-
Plantas: es lo más cercano a los
tuales practicados en las festividades
remedios naturistas, incluso en al-
que se llevaban a cabo en ritos paga-
gunas recetas los poderes medici-
nos.
nales que se les atribuyen a alguna
“de
naturaleza
y
prolífi-
hierba han llegado hasta nuestros días. Incluso en raras ocasiones la
gre de una abubilla hembra y poniéndose esto con una lámpara con aceite cuantos estén presentes la verán con la cabeza abajo y los pies arriba (Vanegas Arroyo, op. cit.:7).
Ciencia confirma la veracidad de lo que divulgaba la superstición. Ej.: 42
En la receta “Para hacer bailar a
Objetos peculiares: fetiches relacio-
una joven desnuda” (Vanegas Arro-
nados con las prácticas de brujería.
yo, op. cit.:2) se requieren varias
Por ejemplo: la cuerda de ahorcado,
plantas que están asociadas a los
espejos, velas, etc. Ej.: en la receta
cuidados femeninos en la actuali-
“Para conocer una joven que hom-
dad, un ejemplo es el hinojo: que
bre le toca en matrimonio” (Ibíd.:4)
excita los nervios y estimula la
requiere de velas y espejos.
sexualidad, también se cree que
Tiempo Sagrado: refiere al momento
ayuda a que los senos crezcan por
exacto cuando se deben realizar las
su fuerte carga de estrógenos7.
actividades para conseguir el efecto
Piedras: su uso está relacionado
deseado. En el cuadernillo suelen
principalmente con la superstición y
ser medianoche, el día primero del
la alquimia, especialmente los meta-
novilunio, la noche de San Juan,
les. Ej.: “Para sanar el mal de pie-
etc. Ej.: En la receta “Para hacer
dra” (Vanegas Arroyo, op.cit.:6) re-
bailar a una joven desnuda” (Ibíd.:2)
8
quiere una especie de bezoar que
necesita de ciertas hierbas recogi-
se encuentra en la cabeza de los
das en la Noche de San Juan9.
peces.
Números mágicos: es la creencia de que ciertos números tienen la facultad para potencializar un hechizo,
7. El Instituto Nacional Indigenista (INI), actualmente Comisión de los Derechos Indígenas (CDI), en conjunto con la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) crearon una versión virtual de la Biblioteca Digital de la Medicina Tradicional mexicana, en la cual explican que el hinojo tiene propiedades estimulantes del lactógeno, lo cual podría explicar el crecimiento de los senos, en períodos muy específicos en la vida de una mujer. En cambio, “En la segunda década del siglo XX, Alfonso Herrera menciona que se le atribuye al hinojo propiedades diuréticas y afrodisíacas. Los frutos se usan como estimulantes. Maximino Martínez, la consigna como afrodisíaca y carminativa. Finalmente, la Sociedad Farmacéutica de México reporta que es afrodisíaca” (Biblioteca Digital de la Medicina Tradicional Mexicana).
8.Bezoar o bezoard “deriva del persa badzahar, designa en sentido estricto las concreciones líticas o cálculos que se forman en el cuerpo de ciertos animales […] La idea de que las concreciones de origen animal contienen, como coagulados, los poderes más profundos del ser al que pertenecen, ha llevado a la creación de toda una serie de piedras minuciosamente codificadas en los lapidarios medievales o en las obras de ciencias naturales, en base a la especia animal de la que derivan” (Izzi, 2000:75). 9. Se cree que en esa noche el Santo bendice todo lo que está en la tierra potencializando las cualidades curativas y anulando las venenosas (Caro Baroja, 1986:97). 43
por ejemplo en la receta “Para lograr
crear un ser artificial. Esta afirmación la
que una mujer se conserve siempre
podemos corroborar si comparamos la
fiel” (Ibíd.:7) es necesario arrancar
receta anterior con la del célebre Para-
siete cabellos a la esposa durmiente.
celso cuya finalidad es crear un homúnculo, curiosamente usando casi los mis-
Análisis de recetas
mos ingredientes y el método de prepa-
Para curar los retortijones que las
ración del cuadernillo de Vanegas Arro-
mujeres padecen antes o después del
yo. A continuación la receta de Teofras-
parto
to para comparar ambas recetas:
“Tómense iguales partes de caracoles
“... dejar que el esperma del varón
rojos y de romero, desmenuzándo-
se
pudra
en
una
calabaza
los bien y metiéndolos por cuarenta
(alambique), sellada con la suma pu-
días en estiércol de caballo, dentro
trefacción del vientre de un equino
de una cajita de plomo bien cerrada
durante cuarenta días, a todo el
y se obtendrá un aceite que se pon-
tiempo preciso (sic) hasta que em-
drá en una vasija de barro bien ta-
piece a vivir y a moverse y agitarse,
pada exponiéndola inmediatamente
lo cual puede verse fácilmente. Des-
al sol, cuyo aceite cura en poco
pués de un tiempo será de algún
tiempo los mencionados retortijones,
modo semejante a un hombre, pero
y también se obtiene con dicho acei-
transparente y sin cuerpo. Si ya des-
te otro maravilloso efecto, pues
pués de esto, cada día se le alimen-
untándose con él su vientre arruga-
ta y se le nutre cauta y prudente-
do, las mujeres que han parido va-
mente con Arcano de la sangre
rios hijos, es muy cierto que en po-
humana, y durante cuarenta sema-
cos días la piel se volverá a poner
nas se conserva en perpetuo y cons-
tan lisa y tersa como si aún fuesen
tante calor del vientre del equino, se
doncellas” (Ibíd.:12).
hace después un infante verdadero y
Aunque a primera vista no lo parezca,
vivo, que tiene todos los miembros
esta es una receta derivada de una anti-
de un infante que ha nacido de una
gua ambición humana: la capacidad de
mujer, pero mucho menor. A éste 44
nosotros le llamamos homúnculo, y
sofal (Ibíd.:844), sugiere la idea de
tiene que ser educado después con
que un material sin valor, si se tra-
mucho cuidado y diligencia como
baja en él arduamente, logrará su-
cualquier otro infante, hasta que se
blimarse hasta lo más preciado, en
desarrolle y empiece a tener juicio y
este caso el oro.
a entender. Este es uno de los ma-
La vasija de barro: evoca a la matriz
yores secretos que Dios reveló al
(Ibíd.:952 y 1048.).
hombre mortal y sometido al peca-
Si bien la mayoría de los ingredientes
do...” (Chinchilla, 2001:9).
encuentran su paralelo en ambas rece-
Al momento de cotejar ambas recetas es
tas, quedan dos que sólo aparecen en el
importante analizar los ingredientes bajo
remedio de la Vanegas Arroyo: los cara-
el simbolismo alquímico:
coles y el romero, lo que invita a plante-
Tiempo sagrado: Ambas recetas re-
arnos varias dudas: ¿En qué momento
quieren de una preparación de 40
se decidió incluir estos ingredientes?,
días. Dicho número resulta ser alta-
¿Con qué finalidad? ¿Resulta pertinente
mente simbólico ya que está asocia-
analizarlos bajo el lente del simbolismo
do cabalísticamente con la espera y
alquímico? En caso de que la última pre-
la prueba (Chevalier, op. cit.:378-
gunta tenga una respuesta afirmativa,
379), recordemos los años que los
cabría agregar que los caracoles son un
judíos erraron por el desierto, los
símbolo de renovación y eternidad (ibíd.:
días que duró el diluvio, la cuares-
250), mientras que el romero está rela-
ma, etc.
cionado con la búsqueda de la purifica-
Estiércol de caballo: tiene un simbo-
ción (ibíd.: 812).
lismo de la flor de loto, lo bello en
No obstante, por más afortunada que
ocasiones nace de la inmundicia, es
sea esta coincidencia debemos recordar
una metáfora de cómo lo puro y su-
que, probablemente, quien haya creado
perior pueden vencer a lo profano
esta receta, carece de todo conocimien-
(Ibíd.:656-657).
to relacionado con el arte de la alquimia;
Plomo: está relacionado en la alqui-
o por lo menos no podrían alcanzar la
mia y su búsqueda de la piedra filo-
misma profundidad que los de Paracel45
so.
Esta receta es de las pocas que entran
La contraposición de ambas recetas invi-
en la categoría de magia pura, acorde
ta a la observación y reflexión de cómo
con el criterio descrito anteriormente.
el secretismo que floreció en la transi-
Tiene varios motivos a analizar:
ción de la Edad Media al Renacimiento,
Tiempo sagrado: la medianoche, la
llega al siglo XIX de una manera defor-
hora favorita para lo mágico.
mada y nada hermética. La comparación
Conjuro: su magia reside en el sim-
entre ambas recetas nos demuestra
bolismo de los sonidos, denominado
cómo la cultura popular retoma algunos
fonosimbolismo, puesto que las pa-
discursos eruditos y los modifica hasta
labras carecen de significado y sólo
redefinir sus propósitos.
procuran un ritmo. Objetos: las velas y los espejos aco-
Para conocer una joven que hombre
modados en pares no deben sor-
le toca en matrimonio
prendernos tomando en cuenta que
“Váyase a media noche a un apo-
se trata de una fórmula para cono-
sento apartado en el que debe tener
cer al futuro cónyuge.
preparados antes dos espejos igua-
El uso de las velas en esta receta tal
les colocados uno en frente de otro
vez sea una rememoración que nos re-
y alumbrados por dos velas de cera.
fiere a una tradición latina que podría
Siéntese y pronuncie en alta voz
haber llegado en algún momento a los
por tres veces Kto enog sonnjoy kto
oídos de los habitantes de la península
moy viagnog tot pokjetin nitit. Dirija
ibérica y posteriormente se enraizó: Este
después de esto su vista a uno de
rito procede quizá del ceremonial nup-
los dos espejos, que por medio del
cial de la antigüedad, observado entre
reflejo de uno y otro presenta una
los griegos y los romanos. “La novia era
serie de ellos. Su vista debe fijarse
conducida en cortejo solemne a la luz de
en un espejo lejano y el más oscu-
las antorchas de su casa a la del futuro
ro, en donde de fijose (sic) verificará
marido” (Chevalier, op. cit.:152).
la aparición” (Vanegas Arrollo, op.
Por otro lado los espejos han sido consi-
cit.:4).
derados como objetos mágicos desde 46
tiempos muy remotos y es que las su-
En el folklore popular es más frecuente
perficies reflejantes siempre han tenido
que las respuestas proporcionadas me-
fama de portales que conectan con nu-
diante esta clase de mancias sean adju-
merosas dimensiones10, sirven como
dicadas a algún espíritu, alguien que
una especie de mapa para encontrar ob-
responde a través del espejo. Por ejem-
jetos o personas11; incluso han sido utili-
plo, en el cuento de Blancanieves, la
zados como artículos para practicar la
Reina Malvada consulta a diario su es-
adivinación denominada captotromancia
pejo de cristal. Incluso en la España ac-
(Moreta y Álvarez, 1992:221).
tual existe una leyenda urbana sobre
Ambos objetos entremezclan sus cuali-
una chica llamada Verónica12 (Pedrosa,
dades para dar paso a distintas creen-
2004: 87-98), quien en su mayoría reali-
cias, en diversos lugares y tiempos, por
za las misma predicciones que tiempo
ejemplo: en la región andaluza existe
atrás se podían vislumbrar en la mágica
una superstición muy parecida a la rece-
noche de San Juan.
ta mágica descrita en el cuadernillo: se
Esta receta es una clara muestra de
cree que en la noche de San Juan,
cómo un ritual social puede adquirir con-
“cuando se encienden las hogueras se
notaciones mágicas, las cuales de igual
toma una vela encendida en la mano y,
manera se modifican una y otra vez con
frente a un espejo, se verá la cara de la
la finalidad de poder sobrevivir a la épo-
persona con la que se casará” (Moreta y
ca en que se divulgan. A su vez, se des-
Álvarez, op. cit.:140). Prácticas muy pa-
cubre cómo a partir de un rito, en abso-
recidas, que deben realizarse en la mis-
luto mágico, puede derivar una leyenda
ma noche, aseguran al consultante visio-
urbana con todos los recursos retóricos
nes sobre su funeral o un vistazo de
como para tener su propia saga de te-
cómo lucirá su rostro en la vejez.
rror “hollywoodesco”.
10. Un claro ejemplo lo encontramos en la obra de Lewis Carroll Alicia a través del espejo. 11. En el cuento Blancanieves la Bruja Malvada encuentra a la protagonista gracias a su espejo mágico.
12. Con su correspondiente americano Bloody Mary, ambos son espíritus de mujeres que murieron de modo misterioso y a los cuales se pueden conjurar al pronunciar tres veces su nombre (ya sea Bloody Mary o Verónica) frente a un espejo. 47
Versiones reelaboradas
una breve selección comparativa, prime-
El editor no sólo ocupó el recurso de in-
ro citaré la receta de Vanegas Arroyo
ventar autoridades en el tema, y fuera o
(Op. cit.), posteriormente señalaré las
no de su conocimiento cometió el crimen
diferencias con el librillo hispano y por
de plagio, ya que por lo menos ocho re-
último explicaré los simbolismos que se
cetas son remedios reelaborados que
le han atribuido en el paradigma del ima-
pueden también encontrarse en el librillo
ginario hispanohablante.
español titulado El Libro Negro de la Magia, las Ciencias Ocultas, la Alquimia y
Para que una mujer alumbre sin dolor
Astrología, con Secretos y Recetas Ad-
“La
lengua
del
mismo
animal
mirables, sacados de los más célebres
[camaleón] atada sobre el vientre de
autores cabalísticos tanto antiguos co-
la mujer que vaya de parto hará que
mo modernos13 (Flamel, 1866) (Fig.2),
dé a luz sin sentir dolores ningunos.
publicado en el año de 1866 en Barcelo-
Otros aseguran que se logra el mis-
na por la Imprenta Manuel Sauri. En
mo fin, presentando a la mujer una
contadas ocasiones los cambios son in-
víbora” (Ibíd.:9).
significantes, por ejemplo: los ingredien-
En el Libro negro de la magia se omite
tes son descritos de manera más rim-
la lengua y sólo se alude a la víbora
bombante con la finalidad de otorgarles
(Flamel, op. cit.:82). Curiosamente esta
un toque de exotismo, en otros, menos
receta nos recuerda a miles de mitos
frecuentes, redacta versiones más am-
que giran en torno a los poderes curati-
plias a las ofrecidas en la Vanegas Arro-
vos asociados con las serpientes, como
yo.
el caduceo de Mercurio, a la sierpe que
Con la finalidad de ahondar en la expli-
se le consagraba al dios Esculapio, o a
cación sobre el parecido entre el cuader-
la vara de Aarón que curaba a los judíos
nillo y El Libro Negro de la Magia realicé
en el desierto. No obstante dicha explicación deja una pregunta sin resolver: ¿Por qué se su-
13. Las negritas son mías. Nótese que también en el cuadernillo de Secretos de la Naturaleza lleva el subtítulo “Antiguos y modernos”.
giere como alternativa la lengua de un camaleón? Y es que independientemen48
Fig.2. Portada de El libro Negro .
49
te de las facultades medicinales de la
En resumen la magia simpática produci-
sierpe, también es importante la forma
da por la contraposición entre nudo/liso
que tiene. Ambas al ser lisas y malea-
es un arma de doble filo, usada con be-
bles representan la oposición nudo-liso,
nevolencia ayuda a las mujeres embara-
que reinterpreta el mito del hilo del desti-
zadas, pero usado con malicia puede
no. A través de la magia simpática influ-
acarrear la muerte tanto de la madre co-
yen en la vida y la salud de la mujer, si
mo de la criatura.
se les hiciera un nudo, sería una especie de amarre que le impediría dar a luz, en
Para que las mujeres se conserven
cambio cómo es lisa refleja la plenitud,
bellas
todo surge con facilidad, impide los pro-
En el cuadernillo Secretos de la natura-
blemas en el momento del parto como
leza la receta indica:
posteriormente, cura el entuerto, es de-
“Cada mañana se tomará un peda-
cir las tripas torcidas. “impiden el parto y
zo de carne de ternera, degollada a
lo facilitan; protegen a los recién naci-
la hora de la dominación del sol;
dos, y los enferman; traen la muerte y la
divídase en lonjas delgadas y se
alejan” (Eliade, 1999:56).
aplicará por espacio de una hora a
Este “hilo” no está solamente aso-
las mejillas, la frente, la garganta,
ciado con la vida o las “tripas” de la
etcétera, y las partes donde se pon-
madre, sino que por magia simpáti-
gan en contacto se conservarán
ca puede ayudar en el parto o perju-
frescas y tersas y hasta recobrarán
dicar en el embarazo, hay una su-
su
perstición que previene a las fémi-
Arroyo, op.cit.:11-12).
pérdida
morbidez”
(Vanegas
nas: “Una mujer embarazada no de-
En cambio en el Libro negro de la magia
be enredar hilaza o hilo, no sea que
menciona que es una:
el cordón umbilical, por magia de
“receta sacada14 del libro de Cleopa-
imitación, se enrede alrededor del
tra: Tómese todas las mañanas car-
feto estrangulándolo en el instante
ne de ternera muerta a las horas en
del alumbramiento” (Kenny y de Miguel, 1980:252).
14. Las cursivas son mías. 50
que domina Urano, córtese en taja-
so del alma. Recordemos a dos perso-
ditas muy delgadas y aplíquese por
najes que han dejado sus nombres gra-
espacio de tres cuartos de hora á
bados con sangre en la historia: Erzsé-
[sic] las mejillas, los ojos y todas las
bet Báthory y Gilles de Rais, quienes
partes sensibles que uno quiere evi-
casualmente actuaban de manera para-
tar que se marchiten y se man-
lela. Ambos fueron personas muy influ-
tendrán frescas y tersas aunque la
yentes en su época, de sangre azul, ob-
persona
sesionados con la idea de conservarse
sea
de
avanzada
e-
dad” (Flamel, op.cit.:87-88).
jóvenes a cualquier precio. Operaban
El primer cambio que resalta a la vista
del mismo modo: secuestraban a joven-
comparando ambas recetas es que
citos de su mismo sexo, los torturaban,
mientras que en el cuadernillo se usa un
en algunos casos abusaban de ellos
léxico sencillo, el Libro Negro de la Ma-
sexualmente, los asesinaban de las peo-
gia procura usar frases más misteriosas
res maneras imaginables para finalmen-
como: “a las horas que domina Urano”.
te bañarse en su sangre y robar así la
El cuadernillo promete incluso: “cuando
juventud que por ella circulaba16 (Pen-
la carne esté marchita recobrará su lo-
rose, 2001:189).
zanía”, en el Libro Negro es más bien de
Curiosamente en la ternera, animal ca-
carácter preventivo.
racterizado por su juventud y suavidad
Para el lector atento resalta una increí-
de la carne, coincide de manera asom-
ble alusión a las prácticas vampíricas, ya
brosamente con una cierta receta des-
que desde épocas muy tempranas la
crita por Penrose en la biografía novela-
sangre ha sido considerada como el vehículo de la vida15, renovación e inclu-
las características principales del donante al receptor: “En el Extremo Oriente, el cisne es por su blancura un símbolo de pureza y de belleza, al mismo tiempo que de elegancia, de nobleza y de valor. Es por esta razón, según Lie-tse, que los mongoles dieron de beber sangre de cisne al emperador Mu de los Tcheu” (Ibíd.:307). 16. En cuanto a Gilles de Rais, mariscal francés se dice que: “tuvo que hacer frente a la acusación de haber conjurado al demonio y de haberse bañado en la sangre de los niños degollados para rejuvenecer” (Penrose, 2001).
15. La sangre es transmisora de vida así como de diversas virtudes; por ejemplo en algunas culturas se hacían sacrificios a los dioses: “Entre los aztecas la sangre humana, necesaria para la regeneración periódica del sol, se llama chachivat, agua preciosa, es decir, el jade verde” (Chevalier: op. cit.:58). Por otro lado se cree que por medio de dicho fluido son transferidas 51
da sobre Erzsébet Báthory, donde relata
Conclusiones
la creencia de que bañarse en agua de
El cuadernillo Secretos de la naturaleza
ternera funciona para permanecer joven:
resulta ser una joya peculiar para los es-
“En aquella época en que aún no
tudiosos de los tratados sobrenaturales
tenía hijos, la Condesa solitaria se
por diversos motivos: es un amplio cor-
mantenía joven, muy pálida y muy
pus sobre antiguas creencias de diferen-
adornada. Había estado macerando,
tes tradiciones, guía en la búsqueda de
para ser más blanca, en una suave
rastros de antiguos rituales, informa so-
agua de ternera y se había frotado
bre los conocimiento herbarios y como
con ungüento de mano de corde-
fueron readaptados por la cultura popu-
ro” (Ídem.).
lar y modificado acorde a sus intereses.
No obstante debo aclarar que con esta
Por otro lado sorprende que en pleno
comparativa no busco que se sobreen-
siglo XIX pervivieran ideas rudimentarias
tienda que realmente Báthory se bañaba
como la creencia en la magia simpática,
en agua de ternera, sino que es intere-
rastros de la alquimia o los vestigios de
sante como dicho animal se repite en
cultos a antiguas deidades. Incita a in-
diferentes recetas y se le atribuyen las
vestigar más sobre el contexto en el que
mismas propiedades mágicas.
se desarrollaron dichas prácticas, a en-
La clave en las recetas coinciden en que
contrar de dónde provienen, e incluso,
la sangre sacrificada en pro de la eterna
¿por qué no?, en un ocio creador, com-
e inmarchitable belleza debe ser joven,
probar si algunas son eficaces.
recordemos la persistente creencia de la
Puesto que si estas recetas llegaron al
magia simpática, no sólo el derrama-
siglo pasado y probablemente a este, se
miento prematuro de la sangre de la
debe a que todavía hay personas que
víctima transfiere al victimario sus años
confían en la eficacia de estas prácticas,
y la lozanía sino también la belleza que
personas desesperadas o incautas que
ésta conlleva.
prueban cualquier remedio con la finalidad de restaurar su salud o saciar el libido; aunque para ello deban intentar recurrir a artimañas mágicas, como hacer 52
bailar a doncellas desnudas; dejar de
Caro Baroja, Julio
vivir en las dudas sobre la fidelidad de
1979 La estación del amor: fiestas popu-
su pareja. Si las recetas mágicas exis-
lares de mayo a San Juan. Editorial
ten, se debe a que aún existe la gente
Taurus. Madrid, España.
que sigue esperando que los remedios caseros, que rayan en la superstición,
Castro, Briseida, Rafael Gozález y Ma-
sean verdad o quizás sólo se deba a
riana Masera
que les gusta entretenerse con su credu-
2013 “La Imprenta Vanegas Arroyo, per-
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55
RESUMEN DE DUDAS Y PROPUESTAS DIFERENTES SOBRE LO QUE LOS LIBROS DE HISTORIA Y ARQUEOLOGÍA DICEN1 Jorge Angulo Villaseñor2 Antecedentes o lo que aprendimos cuando niños
E
sta es solo una compilación de las miles de dudas por las que he pasado desde que tengo memoria de lo que acontece alrededor de la célebre pregunta ¿De dónde venimos y a dónde vamos? en esta trayectoria sociocultural del
siglo XXI. A manera de antecedentes personales y culturales, señalo que siendo de la generación Cardenista, crecí y estuve convencido de las Teorías de la Evolución Biológica Darwinista y las múltiples variantes de homínidos que la conllevan hasta el Homo sapiens, así como los últimos refinamientos que Frederich Engles (1981) señala sobre el papel que el trabajo manual tuvo en la evolución biológica del pre-homínido y la tardía consecuencia que Childe (1978) señala sobre el desarrollo de los grupos que se convierten en sociedades políticas y económicas. Fue desconcertante sin embargo, que en los niveles secundarios de la educación tradicional, se aprendiera la historia como “columnas aisladas” que, sin ninguna filtración u otra conexión cultural entre ellas, habían surgido en forma espontánea, independiente y con gran esplendor, hasta que desaparecieron misteriosamente sin muestras de relación importante con las otras culturas. Esos cursos de historia seguían repitiendo ideas establecidas que obligaban a las nuevas generaciones a memorizar los chismes de los Reyes Europeos y las “gloriosas” hazañas épicas de los conquistadores que transformaron el mundo. Proezas como las
1. Este trabajo fue presentado como ponencia en el Coloquio Internacional Arte, Arquitectura, Cosmovisión y Patrimonio Cultural en el mundo mesoamericano y andino. Celebrado en Quito, Ecuador del 21 al 25 de mayo de 2012. 2. Dr. Profesor investigador emérito de la Dirección de Estudios Arqueológicos del Instituto Nacional de Antropología e Historia, México. 56
de Alejandro el Magno, Hernán Cortés,
heroicos acontecimientos de la vida de
Francisco Pizarro y otros, que en mi
esos supuestos titanes, sin entender
concepto personal solo eran los voraces
qué utilidad tendría saturar el “disco du-
saqueadores y depredadores de otras
ro” de mi mente con esas falacias y en-
culturas (Fig.1). Una confusión que no
gañifas que se seguían repitiendo para
supe resolver en la lucha por la acepta-
justificar las mismas artimañas con las
ción académica y la comprensión dual
que se glorificaban corruptelas socioe-
(entre lo intelectual y lo emocional) que
conómicas y actos político-religiosos de
se enfrentaba en las dos partes de mi
imposición cultural, ejercidos por quie-
cerebro.
nes siempre se han autodenominado
Desconcertante y odioso siguió siendo
“triunfadores”.
para mí, que para aprender la Historia
Tal vez por esto reprobé dos veces los
debía memorizar fechas, nombres y los
cursos de Historia y conducta en secun-
Fig.1. Matanza de indígenas realizada por los conquistadores. Ilustración de Theodor De Bry para la Brevísima relación de la destrucción de las indias de Bartolomé de las Casas, 1614:70. 57
daria.
(ENAH), que se encontraba en el enton-
No fue un escape, sino la búsqueda de
ces Museo de Antropología, ubicado en
satisfacciones personales por lo que me
la calle de Moneda 13 (Fig.2), en el Cen-
refugié en el deporte, a la vez que incur-
tro, ahora convertido en el Museo de las
sionaba en el aspecto técnico y creativo
Culturas; y donde tuve la oportunidad de
de las artes plásticas. Por años estuve
trabajar como museógrafo (Fig.3). Las
fascinado, o enamorado, tanto como in-
diversas eminencias que tuvimos como
trigado por la expresión de las culturas
maestros invitados, tanto como los de
prehispánicas, en las que quise compe-
planta, nos llenaban de información que
netrarme de lo profundo de las ideas y
no muchas veces coincidía con la
conceptos que originaron tales formas…
“verdad oficial” que se manejaba a nive-
sin tener que memorizar fechas preci-
les nacionales. Desde entonces se forta-
sas, ni los otros chismes de la historia.
leció en mi mente la costumbre de dudar
Durante mis primeros años en la Escue-
y cuestionar todo lo que la política, la
la Nacional de Antropología e Historia
economía, las Ciencias y las religiones
Fig.2. Fachada del viejo Museo de Antropología, hoy Museo de las Culturas. Foto, América Malbrán Porto, 2010. 58
Fig.3. Montaje de una de las salas del viejo Museo de Antropología en Moneda 13. Foto, Jorge Angulo.
establecen como irreversibles o verda-
del pensamiento que las culturas indíge-
des absolutas.
nas ejercían, evidenciando las incon-
Por igual observé que la lógica de los
gruencias pregonadas.
métodos analíticos seguidos por las
Lentamente me obligué a comparar el
Ciencias Exactas, no siempre eran coin-
conocimiento linear o racional y a respe-
cidentes con los fenómenos que se ob-
tar las ideas y conceptos diferentes que
servaban en la naturaleza o en los con-
personas de extracción indígena presen-
ceptos sociales, políticos, económicos y,
taban en todas las ramas del conoci-
mucho menos con los religiosos que les
miento social y académico por años es-
atribuían a las culturas prehispánicas.
tablecido. Tales incongruencias abrieron
Así, la verdad oficial ocultaba o distorsio-
la percepción de mi propio criterio y pen-
naba la influencia, préstamo o simbiosis
samientos, procedentes del lado dere59
cho del cerebro que, una vez filtrados
solo por el manchón dejado en el sub-
por del lado izquierdo del mismo cere-
suelo, donde quedaron las llamadas
bro, proporcionaban una comprensión,
“huellas fantasma”. Ofrendas alrededor
poco más integral de los acontecimien-
del manchón dejado en el subsuelo por
tos pasados y presentes que trataba de
el elemento perdido y muestras someti-
comprender.
das a los análisis de laboratorio, propor-
Este procedimiento me auxilió profunda-
cionan nuevas evidencias con las que
mente en las excavaciones de campo en
se pueden identificar los elementos no
las que, al no encontrar suficientes re-
detectables por otro medio (Fig.4).
manentes materiales en contexto, agu-
Tales observaciones se extendieron al
dicé mis observaciones en la presencia
ámbito de los entornos para ampliar y
de materiales ya destruidos por tiempo y
cotejar el conjunto de datos duros o con-
la acidez de los terrenos, identificados
cisos, con una perspectiva más acorde a
Fig.4. Remanentes arqueológicos en las excavaciones de Tlatelolco. Foto, Jorge Angulo. 60
la “realidad oculta o invisible”, en la que
américa por el estrecho de Bering
en un enfoque indirecto, equivale a lo
(Fig.5).
que algunos escrutadores llaman la
En el mismo ambiente académico, se
“lectura entre líneas”. Es decir, lo que no
mencionaba la imposibilidad de la anti-
está escrito, pero contiene la esencia de
güedad de que los hallazgos en Su-
lo que se quiso decir.
damérica,
A consecuencia de esas vivencias, llevo
(1958, 1959), a partir de la previa desca-
más de medio siglo tratando de entender
lificación, en el siglo XIX, de Ameghino
las motivaciones que influyeron en los
sobre la antigüedad del hombre en Su-
desarrollos por los que los grupos huma-
damérica, a pesar de que en los confi-
nos pasan y han pasado a lo largo del
nes australes se habían encontrado
tiempo.
puntas de flecha asociadas a megafau-
confirmados
por
Cardich
na del Pleistoceno (fechadas entre 12 y La Verdad Oficial y la Verdad Nacio-
15 000 a.C.) (Cardich, 1977; Orquera et
nalista o Regional
al., 1977).
Consciente de que la relación tiempo y
En cambio, las teorías de Alex Herdlicka
espacio estimula diversos enfoques o
(1937) y demás Paleontólogos que enfo-
nuevas teorías que amplían la perspecti-
caban sus estudios en Norteamérica,
va y el panorama global del interminable
repetían que las migraciones por el es-
proceso de desarrollo humano. Se seña-
trecho de Bering eran las únicas com-
la que los problemas académicos ocu-
probadas.
rren al enfrentar los prejuicios locales,
Respecto a las teorías que Paul Rivet
regionales, nacionales y hemisféricos
(1964) presentaba sobre las posibles
con los que uno crece en el medio cultu-
migraciones por los archipiélagos de
ral en que se desarrolla. En esos prime-
Nueva Zelanda o por la semicongelada
ros años en la ENAH, aprendí que antes
Antártica hacia América del Sur, se de-
de que la capa de hielo se retractara du-
cía por igual, que solo se trataba de
rante la última era glaciar, hubo una se-
hipótesis sin una posible confirmación
rie de largas oleadas migratorias proce-
arqueológica.
dentes de Asia que ingresaron a Norte-
Los entierros excavados en Tierra del 61
Fig.5. Migración por Bering. Izquierda: mapa expuesto en el antiguo Museo de Antropología, Derecha: Mural de Iker Larrauri en el actual Museo de Antropología. Fotos, Jorge Angulo.
Fuego y otros sitios en la Patagonia des-
físicos y el desconcierto de los demás
cubrieron cráneos dolicoides que fueron
investigadores que los obligó a buscar
clasificados como Australoides, confir-
otras formas de conocimiento. Análisis
mando la antigüedad del hombre con
de C14 y ADN han sido manejados por
materiales líticos y cráneos similares a
los norteamericanos y mesoamericanis-
los encontrados en las islas de la Mela-
tas que siguen aferrados a la teoría de
nesia y la Polinesia, que no solo ocupa-
Bering, argumentando que los datos Su-
ron los litorales del Océano Pacífico sino
damericanos son poco precisos.
algunos restos humanos en Lagoa San-
En sus mediciones antropométricas Ri-
ta y otros sitios del Brasil (Proas, 1992,
vet (op.cit.) compara índices craneanos
2008).
de los grupos polinesios, melanesios y
Tales encuentros incrementaron las du-
micronesios con los sudamericanos y
das y confusiones de los antropólogos
extiende su estudio a los tipos sanguíne62
os en los que, en ambos hemisferios
rar como ilógico, que tan mediocres na-
americanos predomina el grupo “O”. Un
vegantes australianos pudieran haber
dato de suma importancia que, aunque
conocido las rutas y corrientes trans-
no favorece a ninguna de las teorías,
pacíficas que los condujeran hasta el
señala las migraciones que cruzaron el
Nuevo Mundo, sin dejar huella de su
Estrecho de Bering, así como las que
presencia
pasaron por el Océano Pacífico o la
dias” (Ibíd.:99).
Antártida, proceden de grupos asiáticos,
Debemos recordar que las investigacio-
mongoloides y negroides que poblaran
nes que Paul Rivet realizó en el área su-
ambas Américas por rutas de los exten-
damericana, fueron antes aún de haber-
sos manglares costeros.
se terminado la Segunda Guerra Mun-
Paul Rivet extendió su investigación a
dial una guerra que proporcionó a la
los radicales lingüísticos de las múltiples
humanidad (aparte de injustos abusos y
lenguas malayo-polinésicas, que con
los millones de muertes), muchas inno-
una serie de variantes se hablaban en
vaciones tecnológicas, nuevas invencio-
las islas del Pacifico. Comparó esos ra-
nes y una serie de descubrimientos
dicales con los de las diversas lenguas
científicos, que desde entonces han am-
habladas en Sudamérica, Mesoamérica
pliado los recursos sobre el conocimien-
y con algunos grupos de Norteamérica,
to arqueológico.
en los que encontró una serie de pala-
Es decir que ahora ya se puede recons-
bras fonéticamente muy parecidas entre
truir el ámbito paleo-ecológico, recono-
los grupos australianos y los fueginos
cer los cambios geográficos, los climáti-
que forman parte del grupo de los “Ona”
cos, las posibles migraciones de plantas
de la Patagonia (Ibíd.:70-90). Términos
y animales sin la intervención humana y
de gran parecido sonoro, especialmente
otros factores de cambio cultural que
cuando nombran las mismas partes del
antes no se podían hacer fácilmente. La
cuerpo humano, así como algunos con
aplicación de la fotografía aérea, de la
los que se designan los fenómenos na-
infrarroja, la Ultravioleta, Rayos X y
turales. Sin embargo, la honestidad del
Gamma, así como los análisis físicos y
investigador francés le obligó a conside-
químicos de los subsuelos arqueológi63
en
las
islas
interme-
cos y muchos otros recursos tecnológi-
cos fueron fechados en ambos hemisfe-
cos que cada vez más enriquecen los
rios entre 9 000 y 4 000 años antes de
recursos de la antropología integral. Ta-
nuestra era (a.n.e), considerando sus
les adelantos técnicos, tanto como los
formas de subsistencia desde el nivel de
conceptuales no podían difundirse en
cazadores-pescadores
ámbitos fuera de la milicia hasta 15 o 20
incipientes.
años después de terminada la guerra.
En algunos sitios de Canadá, así como
Más de 25 años después, Anne Chap-
en el Este y el Oeste de Estados Unidos
man (1986 y 1990) publica sus estudios
fueron detectados asentamientos pre-
en los confines australes de la Tierra del
cerámicos que contaban con una agri-
Fuego donde aún quedaba un pequeño
cultura incipiente (horticultura), fechados
grupo de hablantes de Selk’nam, en cu-
por Carbono 14 alrededor de 6 000
ya memoria narraban que sus ancestros,
(a.n.e). Un caso similar se mencionaba
navegantes de lejanas tierras habían vi-
para los asentamientos dispersos en el
vido de la pesca, la recolección de
desierto de Atacama, Chile (Nuñez y
“frutos” del mar y de la caza ocasional.
Santoro, 1990) en los que, sin un claro
Conforme las Ciencias Exactas auxilia-
dato cronológico, se decía eran del inicio
ban con mayor firmeza a la Arqueología
de la producción cerámica.
en el hemisferio Norte tanto como en el
Casos de este mismo tipo han subsisti-
Sur del mismo continente americano, el
do aún en algunos grupos del Amazo-
conocimiento integral de la investigación
nas y del Orinoco, así como en las Islas
antropológica, se fue ampliando, al ir
de la Melanesia y la Polinesia en cuyas
identificando los paleoambientes, los
áreas tropicales de selva húmeda cadu-
cálculos de la concentración demográfi-
cifolia, todavía o hasta poco antes de
ca por medio de los análisis de fosfatos
iniciarse el Tercer Milenio, vivían de la
remanentes en el subsuelo, las etapas
caza, la pesca y de la horticultura con
cronológicas se afinaron por el fecha-
vasijas-calabazo y muestras incipientes
miento de isótopos y muchos más estu-
de cerámica de baja cocción.
dios.
A lo largo del ancho cinturón intertropical
Restos culturales de grupos precerámi-
de nuestro planeta, se han encontrado 64
y
recolectores
grupos de recolectores-cultivadores inci-
posibles rutas de la comunicación trans-
pientes. Algunos con restos de montícu-
pacífica, sin olvidar que por igual experi-
los funerarios, tallas de madera con vo-
mentó con los “caballitos de totora” (Fig.
lutas y meandros calados, piezas de al-
6). En esas incursiones exploratorias
farería con efigies zoo y antropomorfas y
diversos autores han señalado un buen
pintura facial o corporal entre otros dise-
número de semejanzas iconográficas y
ños simbólicos, por lo general geométri-
ciertas “coincidencias iconológicas” que
cos (Malinowski, 1977, 1986, 1989,
merecen se efectúen estudios más pro-
2001).
fundos.
La Arqueología experimental que no ne-
Es posible que incursiones de ese mis-
cesariamente ha estado en manos de
mo tipo se hubiesen realizado bordean-
los eruditos teóricos, tomó un mayor au-
do los litorales desde el Perú, Colombia,
ge desde que Thor Heyerdahl (2010) se
Panamá, Costa Rica, Guatemala, Chia-
aventuró a cruzar el Océano con una
pas y la costa del Pacífico, hasta Colima
balsa de bejuco, tratando de comprobar
y Nayarit o tal vez más al norte aún,
Fig.6. Embarcación de totora, conocidas en la costa Peruana y ecuatoriana como “Caballitos de Totora”. Foto, Enrique Méndez Torres, 2009. 65
abriendo la posibilidad de haber existido
Cada uno de estos grupos es congruen-
un tipo de intercambio y comunicación, a
te con el tipo de comunidad familiar, tri-
juicio de la semejanza de materiales
bal, clánica o multiétnica, acomodados
cerámicos y otros rasgos o conceptos de
en asentamientos de diversos tipos que
idiosincrasias paralelas, manifiestas en
varían desde casas aisladas, aldeas dis-
aspectos simbólicos muy relacionados
persas, aldeas concentradas, poblados
entre sí.
pequeños (30 casas), pueblos medianos (50 casas), poblados grandes de alrede-
Comportamientos semejantes duran-
dor de 100 casas y ciudades de diversos
te la etapa pre-neolítica en las Améri-
tamaños, ya con una traza urbana.
cas
Un largo y profundo estudio sobre los
Sin apegarnos a las lógicas secuencias
procesos de cambio por los que pasaron
del proceso de evolución racional ni a la
las culturas mesoamericanas desde la
cronología comparada de horizontes, el
etapa de cazadores-pescadores e inci-
desarrollo de la Etapa Neolítica en los
pientes recolectores, fue realizado por
ámbitos americanos (Norte, Medio y
Richard MacNeish y sus colegas en el
Sur), tiene tres fases por las que pasa-
área de Tehuacán, Puebla (1970, 1972).
ron los grupos de cultivadores para obte-
En esas investigaciones encontraron
ner su sustento y su asentamiento habi-
huellas de los primeros asentamientos
tacional:
de cazadores-tramperos y de recolecto-
1. Recolectores de temporal y cultiva-
res ocasionales que hicieron campa-
dores incipientes seminómadas que
mentos abiertos cercanos a los cuerpos
continuaron su actividad de cazado-
de agua durante el verano, cuando las
res-tramperos y pescadores.
bandas familiares de cuatro a ocho
2. Cultivadores de bajos o medios re-
miembros se encontraban en el proceso
cursos de irrigación en aldeas tem-
de convertirse en macrobandas de va-
porales.
rias familias. Algunos clasifican esta eta-
3. Cultivadores superiores con irriga-
pa como pre y protoneolítica que fechan
ción y asentamientos permanentes.
entre 10 000 y 7 000 a.n.e. Una etapa que en las investigaciones de MacNeish 66
et al. denominan como fase Ajuerado,
De acuerdo a los análisis de MacNeish,
(MacNeish et al., 1972:497).
en la fase Abejas (3 400 a 2 200 a.n.e),
La segunda fase de su cronología evolu-
las formas de cultivo fueron más esta-
tiva nombrada como El Riego (7 000 a 5
bles y continuas. Se encuentran restos
000 a. n. e), señala que las macroban-
de casas semisubterráneas distribuidas
das estaban compuestas de 80 a 120
al azar (Pit houses) cercanas al agua.
miembros de familias amalgamadas,
Paralela a esa etapa, Alberto Rex
probablemente exogámicas, quienes de-
González trabajó en la parte norte de
jaron huella de haberse asentado cerca
Argentina donde el complejo cultural lla-
de los mismos y otros cuerpos de agua
mado “Diaguita”, en el que, desde fases
por periodos más largos. En ese periodo
tempranas hay asentamientos urbanos
se formaron aldeas cuatro veces mayo-
de planta cuadrangular y circular, cerca-
res a las anteriores y entonces comen-
nas a los terrenos de cultivo con irriga-
zaron a distinguir y a seleccionar las
ción (Márquez Miranda, 1936; Serrano,
plantas alimenticias y a diferenciar las
1942; González y Pérez, 1983). En sus
plantas
meticulosas excavaciones y procesos de
con
propiedades
curativas
(Ídem.).
conservación, recobra objetos tallados
En la fase denominada Coxcatlan (5 000
en madera y tabletas en las que se pre-
a 3 400 a. n. e), las microbandas y ma-
paraba tabaco y algunas trituras de hier-
crobandas seminómadas establecieron
bas para aspirar o para inspirar sueños
sus asentamientos durante la época de
alucinatorios.
lluvias, recolectando plantas o dando
Correspondiente a este mismo periodo
inicio a lo mencionado con anterioridad
cronológico,
sobre la horticultura (Ibíd.:498). Es decir,
(1976) encuentra en Zohapilco (2 500 a
seleccionando y trasplantando los brotes
1 900 a. n. e), un sitio cerca de Tlapaco-
a otro sector. Este fue un claro principio
ya, desde materiales cerámicos de baja
de la llamada “domesticación” de plantas
cocción hasta tiestos de vasijas con di-
como la del amaranto, el frijol, el chile,
seños geométricos incisos o en bajo re-
tres tipos de calabaza y en especial, la
lieve, algunas de pasta muy fina (Pili)
del maíz.
semejantes a las de caolín y una infini67
Christine
Niederberger
dad de fragmentadas figurillas antropo-
conocimiento sobre las culturas de Co-
morfas, 90 % femeninas. Estas figurillas
lombia, Ecuador, Perú, Panamá y Costa
del tipo D2 y otros materiales cerámicos
Rica se encuentra al mismo nivel de un
muy similares a las de Tlatilco y otros
turista despistado, me atrevo a señalar
sitios alrededor de la cuenca de México
algunas diferencias y coincidencias cro-
que por lo general abundaron durante el
nológicas, y culturales que se encuen-
Preclásico Medio, se les atribuye una
tran en Mesoamérica tanto como en Su-
correspondencia con el horizonte olme-
damérica.
ca (1 200- 600 a. n. e).
Los fechamientos de Carbono 14 en
En
el
mismo
trabajo
Niederberger
Valdivia, Ecuador, que Meggers, Evans
(Ibid.:213) compara sus tiestos cerámi-
y Estrada (Op.cit.:149) obtienen varían
cos más antiguos con algunos tiestos de
entre 3 200 a 1 400 a.C., asociadas a
la época Jomón en el Japón, y con los
cuencos de cerámica con diseño de vo-
reportados por Meggers, Evans y Estra-
lutas y meandros, muy parecidas a los
da (1965, Lam.117) correspondientes a
platos y escudillas procedentes de San
la fase Machalilla en el área de Valdivia,
Lorenzo, Veracruz. Solo que hay una
Ecuador.
discrepancia cronológica entre ambos
Por su lado, Ken Flannery (1986) descu-
sitios, puesto que cuando ese estilo se
bre terrazas con pozos de irrigación en
termina en el Ecuador, en el Golfo de
Tierras Largas y en Etlatongo, Oaxaca,
México apenas se inicia.
(2 400 a 1 900 a. n. e), mientras que en
La siguiente fase correspondiente al sitio
San José Mogote encuentra asenta-
de Machalilla fue fechada con las técni-
mientos con construcciones monumen-
cas del C14 por los mencionados ar-
tales que corresponden al Formativo o
queólogos, entre 1 030 y 890 a.C. en
Preclásico Inferior, que se continúan
materiales asociados a vasijas silueta
hasta después del Formativo Medio (1
compuesta, escudillas con diseños inci-
500 a 600 a. n. e).
sos, excavados o en relieve sobre la su-
Es en esta etapa en la que se enfocan
perficie de los botellones de cuello largo
estas reflexiones, advirtiendo que aun-
y los “asa de estribo”, muy parecidos a
que estoy totalmente consciente que mi
los de Chavín de Huantar, que caracteri68
zan esa etapa. Larco Hoyle (1941) señala que ese estilo cerámico de Chavín es semejante al de la cerámica funeraria Cupisnique encontrado en el Valle de Chicama. Esa extensión territorial de un mismo estilo lo motiva para clasificarlo como “Complejo Chavín de Huantar”. El concepto es apoyado por Lumbreras (1969), quien después de haber trabajado en las costas, planicies y altiplanos andinos del Perú y Ecuador, considera que ese complejo Chavín es una etapa cultural en el extenso desarrollo de las culturas andinas que data desde 3 000 o 3 500 hasta cerca de 500 antes de la era cristiana. Objetos similares a los descritos, se en-
Fig.7 Botella gollete asa estribo, Cupisnique, representando la dualidad. Museo Larco, Lima, Perú. Foto. América Malbrán Porto
cuentran en Chiapa de Corzo (1 300-800 a.C.) y en la etapa Capacha del Preclásico Inferior de Colima, la Costa de
Esas mismas formas se encuentran por
Nayarit y otros sitios del Occidente de
igual en Tlapacoya, Tlatilco y otros sitios
México. Solo que la mayoría de botello-
en el Altiplano Central de México como
nes de la costa andina están copiosa-
ofrendas a entierros. Antropólogos físi-
mente decorados, mientras que los me-
cos han confirmado que esa mayoría de
soamericanos solo están esgrafiados.
ofrendas se asocian a dolicocéfalos o
En esta área también hay un predominio
individuos cuyas características somáti-
de vasijas silueta-compuesta que en
cas son muy similares a las localizadas
realidad son dos vasijas formando una
en los sustratos óseos sudamericanos y
unidad (Fig.8).
melanesios (Rodríguez Cuenca, 2003: 139-149). 69
entrelaces y volutas que caracterizan algunas vasijas teotihuacanas de la primera etapa cronológica (Bennett y Bird, 1960; Coe, 1962; Kauffmann Doig, 2002). Ha sido tema de muchas elucubraciones la insistente presencia de la figura felina, considerado jaguar u ocelotl, en las dos culturas desde cuando menos, un milenio o más antes de la era presente (Piña Chan y Covarrubias, 1964) (Fig.9). Aunque pocos investigadores han hecho referencia a la frecuencia con que la misma especie felina, de la etapa Shang, aparece representada en China. El cuerpo de los felinos, correspondiente a la misma época que los de las culturas americanas (1500-1100 a. C.) está marFig. 8. Vasija de silueta-compuesta, procedente del Occidente de México.
cado con diseños de la letra “ese”, solo
Algunos investigadores encuentran en la
(Fig.10), a diferencia de las “eses” que
cerámica de la Cuenca de Kotosh y en
abundan en esa misma especie en las
los tiestos de las laderas bajas de los
representaciones americanas.
Andes del Perú, donde está Chavín de
La semejanza de esos diseños en las
Huantar, los mismos tipos de vasijas asa
culturas andinas, mesoamericanas y las
de estribo y botellones de cuello largo,
de China, con algunas diferencias cro-
acompañados de escudillas y vasijas
nológicas respecto a su manufactura,
decoradas con motivos geométricos de
fueron observadas desde los inicios de
carácter simbólico similares a los dise-
la segunda mitad del siglo XX, por Mi-
ños de los olmeca y muy parecidas a los
guel Covarrubias (Ídem.).
que abierta
70
y en posición vertical
cas en el sitio de Las Haldas en el valle de Virú, y en la cuenca del Kotosh donde está Chavín, se encuentran plataformas superpuestas con la apariencia de muchas de las pirámides mesoamericanas solo que las de la costa andina no se concretan a monumentos piramidales, sino a verdaderos complejos residenciales de piedra labrada, sin huella de templos en la cima (Kauffmann Doig, op.cit.; Kaulicke, 1994; Silva Sifuentes, 2000) Esas estructuras, un tanto conFig.9. Mortero con diseño de felino. Museo Larco, Lima, Perú. Foto. América Malbrán Porto.
temporáneas a la de Cuicuilco, Ciudad de México, y a la Venta en el estado de Tabasco (también han sido fechadas
Otro punto de fuerte desconcierto fue el
alrededor de 1200 a.n.e.
encuentro de objetos de metalurgia loca-
En cuanto a los sistemas de producción
lizados en Chavín, en etapas que ante-
alimentaria, se señala que en ambos
ceden a la era cristiana. Esa tecnología
hemisferios, al igual que en otras áreas
que en el Viejo Mundo marca el fin del
montañosas que existen dentro de la
Neolítico, en Colombia es todavía más
gran franja intertropical que circunda la
antigua (Plazas de Nieto, 1998) y se di-
esfera terrestre, las laderas de las mon-
ce, que en Costa Rica se presenta cerca
tañas eran acondicionadas con muros
al 800 después de la Era Cristiana
de retén a manera de terrazas, donde
(Aguilar, 1972; 1981). Parece que los
colocaron sus cultivos (Fig.11).
objetos de metal que se encuentran en
Es obvio que había muchas soluciones
Mesoamérica más tempranos, corres-
tecnológicas para irrigar los escarpados
ponden al inicio del primer milenio de la
relieves de las abundantes montañas
era en la que vivimos (Maldonado 2012).
que se encuentran en Mesoamérica tan-
Respecto a las estructuras arquitectóni-
to como en Ecuador, Perú y otras partes 71
Fig.10. Bronce en forma de felino. Dinastía Zhou. Colección Freer Gallery of Art , Nº de catalogo F1935.21. Smithsonian Institution .
del mundo donde idearon formas para
las mesoamericanas, pues esa idea de
que la misma agua no acelerara los des-
consagrar el recinto en que vivimos y del
laves naturales de las fuertes caudas de
que obtenemos nuestro sustento es con-
la lluvia o la de los manantiales que bro-
ceptuado, en la cosmogonía politeísta,
taban a diversas alturas de la cima. Tal
como la Madre Tierra que proporciona
vez esta práctica idea que beneficiaba el
los mantenimientos en todas estas cultu-
sistema alimentario y la economía de la
ras.
sociedad, estaba por igual intencionada
El mismo concepto de Madre Tierra y su
a conservar la vida original que las
principal componente Montaña Sagrada
“montañas sagradas” les habían propor-
se encuentra en Corea, en las vastas
cionado ancestralmente.
agrupaciones que ocupan la China, en
El término de “Montaña Sagrada” no es
la península Malaya (Jener, 2006) y en
privativo de las culturas andinas ni de
algunas comunidades Celtas y Escoce72
Fig.11. Antiguas terrazas de cultivo en Pisaq, Perú. Foto, América Malbrán Porto, 2010.
sas (Green, 1995), así como en muchos
transformaciones de cambio.
otros grupos que veladamente conser-
Con esta concepción cosmogónica, se
van sus tradiciones ancestrales.
consideraba que esas fuentes de ener-
Este tipo de idea conlleva a la compren-
gía que existen en los compendios de la
sión de que en todas las culturas prísti-
misma naturaleza, las de mayor contac-
nas se conceptuaba que los seres
to o mejor conocidas por el ser humano,
humanos solo eran una entidad más,
son el agua, el viento, el fuego y la mis-
entre las varias que ocupaban la Madre
ma tierra. Tres potentes elementos car-
Tierra. Uno más, entre los elementos
gados de facultades creativas y destruc-
vivos u orgánicos como plantas y anima-
tivas, inherentes en cada uno de los ex-
les, tanto como los inorgánicos, consti-
tremos de su misma dualidad. Es decir,
tuidos por rocas y minerales con sus pe-
que en su carácter dual pueden crear y
culiares formaciones, que también tie-
conservar la vida o causar la muerte so-
nen vida, aunque con otro ritmo en sus
bre todo lo que se encuentre sobre el 73
cuarto elemento llamado Tierra.
culturas politeístas, se considera que
Las acciones antagónicas ejercidas por
ese conjunto de elementos creativo-
los extremos opuestos de esas dualida-
destructivos actúa en forma coordinada
des sobre todos los elementos orgánicos
con la tierra, considerada como la Madre
e inorgánicos, se ejemplifican en los ac-
que incondicionalmente provee de ali-
tos extremos que un solo elemento pue-
mento y recursos materiales a sus cria-
de producir:
turas, entre las que encuentran los gru-
1. Cuando el agua se presenta en su-
pos humanos.
perabundancia causando inundacio-
Parece que la materialización de esas
nes o tsunamis.
energías imbuidas dentro los elementos
2. Cuando los vientos se intensifican
ya mencionados, era manifiesta o perso-
con gran fuerza, originando tornados
nificada en figuras zoomorfas, fitomor-
o huracanes.
fas, geométrico-abstractas y en una
3. Cuando el fuego producido por los
gran mayoría con rasgos antropomorfos,
rayos de la tormenta devasta las zo-
en las que, discreta o abiertamente
nas boscosas o el entorno biológico
están imbuidas de los poderes o atribu-
en que vive el Homo, no siempre tan
tos esenciales de las deidades duales
sapiens.
que encarnaban o representaban.
En otro extremo del mismo elemento
Si esa concepción cosmogónica privaba
agua, como la principal fuente de vida
en las culturas politeístas que anteceden
que compone el 85% del cuerpo huma-
a las religiones monoteístas, no es de
no y lo mantiene vivo y activo; se com-
extrañar que las aves y sus vistosas plu-
plementa con el aire que penetra en los
mas estuviesen asociadas a los dioses
pulmones dando aliento de vida y nu-
del viento, al esplendor del sol o de al-
triendo al cerebro. Y el fuego, como ter-
guna otra idea que utilizaron como em-
cer elemento que cuece los alimentos,
blema de su jerarquía y poder.
calienta y estimula el cuerpo y transfor-
La discusión si esa homogeneidad en el
ma las materias primas a voluntad del
pensamiento cosmogónico-cultural pro-
ser humano.
cede del oriente y llegó al poniente o si
En el pensamiento cosmogónico de las
se originó en el sur y se extendió hacia 74
el norte o viceversa, queda fuera de lu-
rante el desarrollo de las culturas prísti-
gar al resumir el dato que proporcionan
nas, a lo largo de las primeras etapas de
los estudios interdisciplinarios, como son
su desarrollo.
propuestos por la Antropología Integral.
Uno de ellos es el llamado “creciente
Un proceso de investigación que engen-
fértil” ocurrido en Egipto y en Mesopota-
dra nuevos aportes (no estadísticos) so-
mia que propició el desarrollo de las pri-
bre los diferentes componentes tecnoló-
meras culturas urbanas en tan tempra-
gicos, demográficos y los del pensa-
nas fechas que fluctúan, dependiendo
miento que motivara a todas las culturas
del autor entre los 4 y 6 mil años antes
en esa etapa prístina, a resolver de for-
de nuestra era (Speiser, 1941; Service,
ma similar, el mismo tipo de problemas a
1975; Manzanilla, 1986).
los que se enfrentaban otros grupos cul-
Ampliando un poco lo más difundido en
turales en ámbitos fisiográficos de gran
la historia de la cultura occidental, se
semejanza, con los mismos factores tec-
sabe que otras áreas tuvieron factores
nológicos, a la misma lucha de sobrevi-
similares en el proceso de su desarrollo,
vencia.
como el ocurrido en diversas cuencas,
Una lucha normal por tener abrigo, ali-
sin conexión geográfica continua, de los
mentación, convivencia y otros meneste-
ríos Yangtzé, el Amarillo y otros de me-
res sociales que dejaron remanentes
nos cauda, en la extensa área de la ac-
materiales que ahora, cuatro milenios
tual China. Un proceso similar ocurrió
después, tratamos de entender el por-
también en Harappa y en Mohenjo Daro,
qué son tan parecidos.
y en las márgenes del río Ganges en la India (Childe, op.cit.).
Consideraciones sobre la homotaxia-
En todos estos sitios en los que el mis-
lidad cultural
mo fenómeno de la naturaleza se les
Las múltiples disciplinas antropológicas,
presentaba como un reto de devastación
apoyadas en las diversas Ciencias
o de conveniencia y desarrollo socio-
Exactas, complementan y afinan los pro-
económico, la intervención humana su-
cesos del estudio para comprender los
po hacer fructificar tal acontecimiento
factores de influencia que existieron du-
anual, para producir más de dos cose75
chas al año. Un evento que les permitió
miento cultural de los recursos naturales
alcanzar ese status de Altas de manera
que, con ingenio pero sin gran esfuerzo
más o menos paralela.
fueron aprovechados.
Por años se ha tratado, y se sigue tratando, de comprender cuáles son o han
Sistemática de los Análisis
sido los componentes humanos, no los
En el análisis de los factores sociales y
naturales, que propiciaron el desarrollo
psicológicos que formaron las culturas
de los grupos tribales del Neolítico que
extintas en estudio, resulta imperante
alcanzaron ese alto status cultural.
conocer las condiciones del ámbito natural que se encuentran ahora, así como
Metodología aplicada por la Antropo-
en el que se encontraba la cultura du-
logía Cultural
rante la época de su inicio, florecimiento
Consciente de que tanto en la Naturale-
y decadencia para profundizar en lo que
za como en las relaciones humanas, to-
existió durante el abandono del sitio re-
dos los componentes que actúan en
ferido popularmente como “misteriosa
ellas, están íntimamente relacionados
extinción”.
entre sí. Con esta premisa como base,
El análisis de los factores naturales
se analizan factores y elementos que, de
que determinan las tres etapas del desa-
una manera u otra contribuyen en el de-
rrollo de cada cultura, puedes sintetizar-
sarrollo de las culturas. El método ha
se en cuatro puntos:
agrupado los dos aspectos más determi-
N-1) Localización del sitio con me-
nantes, separándolos en los géneros na-
ridianos y paralelos dentro la esfera
turales (N) que se encuentran en el me-
terráquea, incluyendo la altitud so-
dio ambiente y en las acciones o activi-
bre el nivel del mar (m.s.n.m.), aho-
dades que promueven las sociedades
ra factibles con el GPS.
(S) para satisfacer sus necesidades fi-
N-2) Condiciones paleogeográficas y
siológicas y conseguir sus deseos y as-
fisiográficas. Condiciones geográfi-
piraciones psicológicas, durante los mo-
cas del actual paisaje. Aspectos del
mentos de la vida por la que transitan.
entorno antiguo y moderno del
Factores mixtos (M) o de aprovecha-
asentamiento (Proximidad dentro o 76
cerca de las montañas, valles, lade-
ográficas entre el lugar de pro-
ras, cuencas, costas, etc.).
cedencia de esas materias pri-
N-3) Ámbito del entorno natural del
mas y el sitio.
Sitio enfatizando su condición ecoló-
N-4.3 Señalamiento de las posi-
gica:
bles rutas de comunicación y
N-3.1 Selvática, árida, desértica,
obstáculos
físicos
y
socio-
pantanosa, con follaje caducifo-
políticos entre el sitio arqueoló-
lio, etc.
gico y sus fuentes de abasteci-
N- 3.2 Cercanía y accesibilidad
miento.
a las fuentes de agua, barrancas, montañas, etc.
Los Factores culturales (S)
N-3.3 Clima actual y paleoclima
Estos factores se señalan con la sigla
que se calcula existió en cada
(S) para indicar que se trata de intromi-
periodo de la ocupación cultural,
siones humanas que afectaron el entor-
determinados por análisis paleo-
no en el que ancestralmente se asenta-
botánicos y otros elementos de-
ron sus progenitores. Al igual que los del
ntro del suelo y el subsuelo.
apartado anterior que trata los elemen-
N-4) Materias primas procedentes
tos de la naturaleza (N), la intervención
del sitio o importadas de otros luga-
o participación de los grupos culturales
res.
está íntimamente interrelacionada entre N-4.1 Identificación de las mate-
sí, puesto que estos grupos son quienes
rias primas empleadas en la
provocan, modifican o aceleran los cam-
construcción y de las transfor-
bios ecológicos que transforman el en-
madas en objetos de uso coti-
torno de su asentamiento original, de
diano, ceremonial y de prestigio
acuerdo a los diferentes grados del co-
u ornamento.
nocimiento tecnológico y al respeto que
N-4.2 Porcentaje comparativo de
tengan por el entorno de su estancia.
materiales autóctonos y foráne-
Respecto a los factores sociológicos o
os que se encuentran en el sitio.
de participación del ser humano en la
Distancias y condiciones ge-
formación y conducta de las comunida77
des asociadas, hay otros cuatro puntos
S-1.2. Vestimenta y enseres de uso
con sus incisos correspondientes que
práctico, jerárquico, ornamental y
requieren ser analizados, desglosados y
ritual o ceremonial.
estudiados para tener una mejor com-
S-2) Demografía. Interrelación de facto-
prensión de cada comportamiento cultu-
res en la homotaxialidad cultural.
ral.
Este ha sido un factor considerado en
Sin llegar a ser una repetición del inciso
muchas investigaciones arqueológicas,
N-4, éste amplia y profundiza los puntos
como un dato estadístico que ha sobre-
que caracterizan el ámbito ecológico del
vivido como comparación en los desa-
nicho fisiográfico en que se desarrolla el
rrollos culturales de otras partes del
grupo cultural y las obras de su infraes-
mundo, tal vez como un dato anexo son
tructura.
la correlación de las obras de infraes-
Hay aspectos que en la prospección ar-
tructura resultantes de la cuantía de-
queológica pasan desapercibidos o son
mográfica.
poco observados por tratarse de facto-
Algo de suma importancia sobre el creci-
res mixtos o de aprovechamiento de los
miento poblacional no solo tiene que ver
recursos naturales que, ya sea por cer-
con la producción alimentaria que podría
canía, acceso o simple inversión de tra-
estudiarse en el renglón de la economía,
bajo manual organizado, se adaptan o
sino en la extensión de los terrenos de
mimetizan
urbano-
cultivo y los sistemas tecnológicos que
arquitectónica a los componentes de la
se apliquen de acuerdo a la etapa del
naturaleza a la que se integran como
desarrollo en que se encuentren y el
parte de su ideología.
momento dado de su trayectoria evoluti-
S.1) Aprovechamiento de los recursos
va.
naturales en un lugar del asentamiento.
Observando la interrelación demografía,
su
presencia
S-1.1. Palafitos, iglúes, cabañas de
tecnología territorial y apegándose al
madera en la montaña, composición
principio en que se juntan la estabiliza-
en ámbitos rocosos, arreglos en el
ción ecológica, por el tiempo que esta
interior de las cuevas, etc.
sea, ya que, cuando uno de los componentes que la constituyen es alterado, 78
los demás tienen que compensar el
mismo tipo de recursos naturales en el
equilibrio alcanzado de antemano o
que por siglos han sobrevivido, con las
cambiar alguno de los factores principa-
mismas condiciones. Un ejemplo similar
les en los que se sustentaba ese equili-
se observó en algunos sectores del
brio ecológico.
Amazonas así como en muchas de las
Un ejemplo claro de esta interrelación en
islas de la micronesia, melanesia y la
la ecología humana la presentó Robert
polinesia hasta poco antes de terminar-
Carneiro (1979) en un estudio sobre los
se el siglo XX, cuando las voraces em-
Yanomami de la cuenca selvática del
presas caucheras y madereras obtuvie-
Río Orinoco, señalando que esos grupos
ron las concesiones de explotar esos
tribales, que por siglos han vivido de la
recursos naturales, no renovables por
caza, la pesca y la recolección, están
dos siglos, si no acaban antes con la so-
compuestos de pequeñas comunidades
breexplotación.
que solo se relacionan con otros grupos
S-2.2) En otras regiones se ha visto que
en el mismo estado de desarrollo. Sin
cuando ese fenómeno de crecimiento
embargo, cuando el grupo crece de-
poblacional crece y las posibilidades de
mográficamente por las naturales rela-
expansión territorial o recursos naturales
ciones de fisión o fusión (como las defi-
son limitadas, el grupo soluciona su pro-
ne Service, op.cit.), el área de recolec-
blema de alimentación, cambiando su
ción y cultivo incipiente, así como los si-
tradicional método de producción, inven-
tios de pesca y cacería comienzan a
tando, copiando, adquiriendo formas o
mermar en el orden alimenticio que no
implementos para aumentar la obtención
logra satisfacer a una población mayor,
alimentaria requerida por el incremento
entonces se buscan nuevas soluciones:
demográfico. Por supuesto que en am-
S-2.1) Este grupo y otros en el mismo
bas soluciones los grupos en nuevos
estado de desarrollo técnico económico
terrenos o nuevos implementos y utensi-
han solucionado el incremento poblacio-
lios de trabajo se enfrentan a nuevos
nal, movilizando a las nuevas familias a
retos por resolver.
otra sección de esta extensa selva tropi-
Es decir, se trata de un axioma implícito
cal lluviosa, en la que se conserva el
en todos los procesos históricos por los 79
que ha transitado la humanidad a lo lar-
alto nivel. Aquellas distancias geográfi-
go de los siglos.
cas, económicas y culturales que sepa-
S-3) Tecnología y Tiempo. Esencia en la
raban los núcleos de conocimiento en el
comprensión de la Homotaxialidad:
siglo XIX y en la primera parte del siglo
Tal vez el conocimiento tecnológico apli-
XX, casi han desaparecido, transforma-
cado requiera de menores explicaciones
das en separaciones generacionales,
puesto que quienes han observado la
integradas a un nuevo sistema de comu-
transformación cultural por la que ha pa-
nicación cibernética.
sado el mundo desde la segunda mitad
Parece que en estas últimas décadas
del Siglo XX, se han adaptado a las sor-
los calificativos que se han venido apli-
presas diarias que el desarrollo tecnoló-
cando al desarrollo cultural por el que
gico lleva, con tan frecuentes cambios
pasa el mundo, se han venido transfor-
que solo son comparables con las aso-
mando al mismo ritmo que el desarrollo
ciaciones y des asociaciones socioeco-
que genera una nueva Edad Tecnológi-
nómicas que ocurren a nivel mundial,
ca.
que ya no causan sorpresa alguna.
La llamaríamos “Edad del Plástico” para
El mismo caudal de nuevos conocimien-
seguir la trayectoria terminológica utiliza-
tos y conceptos asociados a esa casca-
da por el uso de materiales en la Ar-
da de cambios y transformaciones tec-
queología, al referirse al Paleolítico, Me-
nológicas, ha ocasionado una clara se-
solítico, Neolítico, Edad del Bronce,
paración generacional que va distan-
Edad del Hierro y su correspondiente
ciando los conocimientos y costumbres
“Edad del Plástico” que rápidamente se
tradicionales que cada grupo étnico, re-
modificó por el desarrollo de la Era Ató-
gional, nacional o cultural practica o
mica o de la energía nuclear. Términos
practicaba.
aún no consolidados en el lenguaje colo-
Esa nueva ola de conceptos de vida que
quial, puesto que son compartidos con
se realiza a través de un sistema más
los de lenguaje coloquial, puesto que
abierto y accesible de comunicación, se
son compartidos con los de The New
encuentra en manos de quienes mane-
Age y el de las incursiones en el espacio
jan esos conocimientos tecnológicos de
sideral. 80
S-4) Organización social y todas sus ad-
Se refiere sin duda a las grandes chapo-
herencias.
poteras que causaban la pérdida de mu-
Mucho se ha escrito en trabajos de gran
cho ganado, engullido en las pozas de
erudición sobre este amplio, complejo y
betún semidenso (Riguzzi y Gerali,
determinativo factor de cambio y desa-
2015:750), de las que se van a quejar a
rrollo, en los que se analizan los aspec-
lo largo de los siglos los ganaderos de la
tos socioeconómicos, los políticos y los
región. Es decir, que en la mentalidad
religiosos. La tendencia académica ha
de un hispano procedente de las tierras
venido tratando de analizarlos como fac-
áridas en las que pastaba el ganado,
tores independientes, dejando de consi-
esas fangosas tierras con una resina pe-
derar que todos ellos están mezclados
gajosa que inmovilizaba a su ganado, le
entre sí, tanto como con el conocimiento
impedía
y la aplicación tecnológica que se en-
económicos.
cuentre al alcance del grupo que se es-
En las culturas de Remojadas cercanas
tudie.
a la misma área, el chapopote se utiliza-
Ejemplos históricos de esta interrelación
ba para decorar los ojos y bocas de las
tecnológica, sociológica y demográfica,
figurillas de barro que le daban una filia-
vinculada con el asentamiento o pose-
ción especial y especifica de estatus so-
sión territorial, considerada dentro del
cial a ese grupo étnico. Un dato de su-
ámbito ecológico, fueron plasmados en
ma importancia para el arqueólogo que
varios relatos del siglo XVI, uno de ellos
al encontrar la presencia de las figurillas
presentado por Andrés de Tapia en
con ojos y bocas pintadas en negro por
1540, quien menciona:
el chapopote, determina el periodo
Hay en mis pueblos, cerca de la cos-
Clásico en el que las hicieron (Fig.12).
ta, en una parte fuentes de pez retida
Otro aspecto recurrente de interrelación
(sic) que sale como brea o como miera,
Tecnología-organización social-ecologí-
sino que no hiede, y cociéndola se es-
a, ocurrió con Melchor Alfaro de Santa
pesa; y es buena para calafetar, y no
Cruz en 1579, quien al querer colonizar
entra por ella broma, porque amarga
el área de Tabasco, escribió:
(De Tapia, 1866:597).
obtener
grandes
beneficios
“esas chapopoteras como le llaman 81
Fig.12. Figurillas de la tradición Remojadas, con aplicación de chapopote alrededor de la boca y ojos. Procedencia, Sala del Golfo, Museo Nacional de Antropología, México. Foto, América Malbrán Porto.
los indígenas, son tierras malditas y
extranjeras obtuvieron en concesión, pa-
estériles (…) son un penoso estorbo
ra procesar el petróleo en la producción
para quienes les otorgaron esos te-
de gasolina que abastecía a los vehícu-
rrenos, pues representan una ame-
los de motor, con lo que se enriqueció la
naza para el ganado… que se que-
Standard Oil Company y otras compa-
da pegado a la brea” (De Santa
ñías que los refinaron… ya sin preocu-
Cruz, 1983).
parse por la reproducción del ganado.
Esos mismos “malditos y estériles terre-
Un ejemplo más de transformación del
nos” que eran una molestia para aquella
medio ambiente por medio de la tecno-
etapa, a finales del siglo XIX eran usa-
logía y la organización socio-religiosa
dos para recolectar el combustible para
fue un modelo que se aplicó a terrenos
las lámparas de petróleo y, poco años
desérticos de Palestina, cercanos a la
después, se convirtieron en el codiciado
ribera sudoriental del mar Mediterráneo,
elemento para la industrialización de la
en donde por siglos los arenales no ha-
producción petrolera que las compañías
bía producido ningún brote agrícola. Fue 82
durante la segunda parte del siglo XX
nuevos explotadores y cazadores del
cuando un grupo con otra mentalidad y
vecino a quien despojaban de sus tie-
un sistema de trabajo y técnicas inventa-
rras (Pappé, op.cit.).
das en el momento comenzaron a irrigar
A manera de observación generalizado-
el desierto y aplicar programas de refo-
ra, se podría decir que todos enfoques
restación de esos áridos terrenos una
en los que se ha combinado la tecnolo-
innovación sorprendente fue la de crear
gía con la organización social (como
grandes pozas para almacenar agua del
término global de los demás aspectos
mar en la que depositaron carpas y otros
correlacionados), que en secuencias
peces que a través de algunos años fue-
cronológicas contables por los siglos de
ron depositando sedimentos en los que
dominio político o religioso, no se han
una vez secas las pozas pudieron ser
podido salvar del binomio demografía-
utilizados para cultivo. La organización
medio ambiente, ya que cuando se rom-
de esos grupos de trabajo con una men-
pe el equilibrio por alguno de los facto-
talidad unitaria asociada a conceptos
res mencionados la durabilidad se con-
religiosos puestos a trabajar, permitió la
vierte en algo correlativo.
florescencia de estos sistemas de cultivo
Se ha visto y se sigue viendo que cuan-
que hasta ese momento habían sido im-
do el territorio puede ser ampliado por
pensables (Lobo Molto, 2003; Morris,
medios pacíficos, la disposición del te-
1999; Pappé, 2006).
rreno se obtiene por acciones agresivas
La trayectoria que siguió ese
grupo,
y medios de conquista con los que ani-
como suele suceder, cambió una vez
quilan, esclavizan o en último grado des-
que habían alcanzado un status político-
alojan a los habitantes que han ocupado
económico floreciente y el concepto polí-
el sitio por generaciones, para posesio-
tico-religioso llevado a un fanatismo ex-
narse de los demolidos terrenos en los
tremo, el enfoque inicial con el que ha-
que utilizan a las esclavizadas nuevas
bían modificado el medio ambiente, para
generaciones para reconstruir otras es-
convertirse en lo que por siglos se ha-
tancias sobre las ruinas de sus ances-
bían quejado de lo que otras culturas
tros.
habían hecho, transformándose en los
Sin olvidar el enfoque referido en los pri83
meros párrafos de este método de análi-
cuenta que todo proceso de transforma-
sis en los que se toma la participación
ción conlleva una serie de factores en-
básica de las Ciencias Exactas (Geolo-
trelazados determinados por las diver-
gía, Biología, análisis de suelos y de-
sas etapas por las que pasa todo el de-
más) para situar al grupo en estudio, en
sarrollo económico, político y religioso.
relación a la convivencia entre grupos
Razón por la que se aclara que, todos
etnolingüísticos y las relaciones que ge-
estos componentes socio-culturales son
neran por tener diferentes hábitos, cos-
modelados por otras variantes de esos
tumbres y otros aspectos de su idiosin-
mismos elementos, así como por el
crasia, el estudio de los materiales ar-
número y distribución poblacional dentro
queológicos difícilmente detecta la moti-
del espacio físico del asentamiento habi-
vación mental y la emocional que diera
tacional y del terreno de producción dis-
origen al objeto material que se estudia,
ponible al aprovechamiento de los recur-
excepto por los análisis iconológicos e
sos naturales. Es decir, cuando se man-
iconográficos, en los que dejaron plas-
tiene un equilibrio entre los espacios de
mados sus ideas y conceptos que, siglos
producción alimentaria y los demográfi-
después analizamos y estudiamos en
cos, considerando los niveles del cono-
los remanentes arquitectónicos así como
cimiento tecnológico y a la organización
en lo que se ha llamado, generalmente,
social que manejaba ese grupo durante
obras de las artes plásticas. Obras en
el periodo en que se efectúe el estudio.
las que, para acercarse a la compren-
Entre las culturas prístinas, y aún entre
sión de su concepción psicológica hace
las contemporáneas, hay rastros de un
falta información complementaria sobre
mismo estado de desarrollo homotaxial,
su expresión musical, poética, verbal
que puede ser observado en remanen-
gustativa y de otros aspectos no plasma-
tes arqueológicos de diversas culturas,
dos en objetos materiales.
en las prácticas etnológicas de las tradi-
Lo estricto del pensamiento lineal consi-
ciones culturales, así como en el vestua-
dera que la trayectoria evolutiva socio-
rio, utensilios, adornos, prácticas depor-
cultural lleva una clara e ininterrumpida
tivas o de entretenimiento, aparatos tec-
secuencia de progreso, sin tomar en
nológicos, sistemas de comunicación y 84
otra infinidad de elementos materiales y
nológico que, a partir del periodo Neolíti-
prácticas sociales que observamos a
co, se hicieron más evidentes con res-
diario en nuestra y en las demás cultu-
pecto a la adaptación y condicionamien-
ras occidentalizadas, cuyos estatus son
to al medio ambiente en que vivían y se
considerados dentro la misma contem-
adaptaban o transformaban los sistemas
poraneidad, a pesar de que pequeños
de producción y distribución económica,
rasgos y variantes que su propia idiosin-
según sus formas de organización social
crasia las distinga dentro de esa misma
y el acomodo demográfico en el que se
homogeneidad cultural.
encontraban.
La presencia de materiales similares,
Parece claro que en esa etapa, la visión
ornatos corporales, hábitos y costum-
cosmogónica que tenían, respecto a las
bres parecidas, estancias habitacionales
fuerzas de la naturaleza, era la de consi-
del mismo tipo y otras manifestaciones
derar que los grupos humanos solo eran
de gran semejanza entre culturas ge-
otro componente más de los seres orgá-
ográfica o cronológicamente distantes
nicos y los inorgánicos que constituían
originan elucubraciones de diversos ti-
el ámbito natural del mundo que los ro-
pos que en los estudios históricos o ar-
deaba. Esta visión inherente a las cultu-
queológicos los han clasificado como de
ras politeístas, consideraba a la vez que
“Influencia”, “filtración” y hasta “migra-
en esas energías, manifiestan en el
ción de símbolos”, cuando la respuesta
ámbito del agua, aire, fuego y el de la
no puede ser otra que la de los Desarro-
tierra, actuaban en forma aislada o co-
llos Homotaxiales.
rrelacionada en los tres niveles en los que eran identificadas como las deida-
Conclusiones
des que controlan la vida y la muerte de
Como parte de las semejanzas cultura-
todo lo que se encuentra sobre la piel de
les entre los grupos en estudio hay be-
la misma tierra.
neficios y problemas de adaptación, ab-
Ámbitos en los que ahora podemos se-
sorción y acomodo de los rasgos cultu-
pararlos en:
rales, siempre de acuerdo a las condi-
1.El ámbito superior, donde se mue-
ciones de los niveles del desarrollo tec-
ven las estrellas, la vía láctea y los 85
astros lejanos así como los cerca-
montañas y que se consideran la
nos correspondientes al sol, la luna,
piel que la cubre con grandes y pe-
Venus y otras estrellas brillantes.
queñas rocas, arboles de todos los
Colindando con este primer nivel el
tipos que varían de acuerdo a la alti-
sol, la luna y las estrellas fulgurantes
tud y las enormes diversificaciones
se encuentran las nubes contenedo-
de la flora y la fauna que retroali-
ras del agua y los vientos que las
mentan ese medio ambiente.
arrastran provocando tormentas, ar-
Diversos aspectos de la variedad de
coíris y otros fenómenos ambienta-
elementos
les que modelan el clima y los cam-
ámbito terrestre en que se crea y
bios registrados a lo largo de los ci-
procrea la vida que abarca desde la
clos del tiempo. Fenómenos regis-
cima de la montaña más alta, hasta
trados por las culturas con esos
el nivel del mar en donde desembo-
pensamientos filosóficos.
can los ríos y se filtra el agua de los
2. El segundo nivel es más fácil de comprender
por
nuestra
que
constituyen
este
lagos y lagunas a través de caminos
cultura,
subterráneos.
puesto que habitualmente lo consi-
3. El tercer nivel en el que se enfoca
deramos solo cuando se trata de los
el
componentes de la biosfera. Esta
nuestras culturas prehispánicas, co-
biosfera que como para comodidad
rresponde a lo que se encuentra en
de los estudios científicos y los de
los niveles bajo la tierra, a los que se
concepción popular se ha subdividi-
llega por ciertos caminos que se in-
do en lo que hay debajo de la at-
troducen a los recintos cargados de
mosfera, hasta lo más alto de las
energías telúricas que mueven la
montañas. Por supuesto en este ni-
misma tierra causando los sismos,
vel de la biosfera se encuentran los
erupciones y otros fenómenos del
elementos más conocidos y aprecia-
desgajamiento de las montañas, le-
dos por los grupos humanos, puesto
vantando los acantilados y horadan-
que se trata de los que por naturale-
do las barrancas que conforman el
za sobrevienen desde la cima de las
sinuoso paisaje de nuestro planeta. 86
pensamiento
cosmogónico
de
Los caminos para llegar o penetrar den-
del agua y de la tierra que nada tienen
tro de esas cavidades llenas de las
que ver con el concepto de Infierno que
energías de vida y renovación se en-
le fue aplicado durante la conquista.
cuentran en las cuevas de la montaña,
Sin eliminar las teorías mencionadas
en lo profundo de las barrancas, en el
con anterioridad este cúmulo de obser-
fondo de los manantiales, en los panta-
vaciones solo conduce a la reflexión ba-
nos y demás cuerpos de agua, especial-
sada en el método de recopilación de la
mente en los manglares en donde resi-
historia y en la psicología enfocadas a
den esas energías en forma de animales
las acciones individuales del ser huma-
y por donde se comunican y manifiestan
no, pero no registran, como lo hace el
como los elementos primordiales en los
estudio de la antropología integral, el
que reside la vida compuesta de tierra y
valor de las respuestas que los grupos
agua, al igual que todos los seres orgá-
humanos han hecho cuando se encuen-
nicos que habitamos el Planeta.
tran en ámbitos ecológicos similares y
No es de extrañar que, iconográficamen-
en estados de conocimientos tecnológi-
te estos elementos se representen por
cos dentro la misma etapa del desarrollo
los diversos símbolos abstractos o en
en la que se establecen los sistemas de
imágenes de los animales que habitan
producción y distribución socioeconómi-
dentro de las cuevas. Ahí se incluyen
ca, correlacionados con los regímenes
jaguares, coyotes serpientes, murciéla-
de organización político religiosa con-
gos y otros saurios y batracios que habi-
gruente con la concepción ideológica en
tan en los ámbitos acuáticos de prefe-
el momento por el que transitan cultural-
rencia oscuros.
mente.
Cocodrilos y otros anfibios que viven en
A pesar de sonar como complicadas,
manglares, pantanos y otros estancos
todas estas condiciones circunstanciales
de agua con diversos tipos de plantas
se efectúan y se han efectuado en el tra-
como el amamacolli o nenúfar se mo-
yecto histórico de todas las sociedades
vían en ámbitos o entradas al mundo
humanas, determinando las etapas de
interior, popularmente denominado Infra-
desarrollo que se han clasificado en
mundo. Una residencia de las deidades
igualdad de circunstancias y respuestas 87
de la trayectoria evolutiva, en etapas
más antiguas bandas nómadas que viv-
equivalentes en las que los resultados
ían como cazadores-recolectores duran-
de las combinaciones arriba referidas
te el Paleolítico y el Mesolítico (juzga-
como:
dos por su desarrollo del trabajo de pie-
1) Demografía estable dentro del ámbi-
dra) o las del Neolítico, dedicadas a la
to ecológico de su asentamiento.
sistemática producción agrícola, con la
2) Desarrollo tecnológico adecuado pa-
gran variedad de aspectos evolutivos,
ra subsanar las necesidades del
formas de asentamiento y expresiones
conjunto socio-cultural en forma
de una política-religiosa de la que solo
equilibrada.
vemos reflejos de sus ideas y juzgamos
3) Organización socio-económica que
sus conceptos cosmogónicos en compa-
sin grandes diferencias jerárquicas
raciones gráficas que privan en el cono-
permitan la coexistencia pacífica en-
cimiento de cada investigador.
tre trabajadores y dirigentes en todo
Una expresión gráfica que no llega a ex-
nivel de relación.
plicar el significado verdadero de los
4) Dirección político-religiosa sin mie-
mensajes grabados en los tatuajes, la
dos ni amenazas de carácter mate-
escarificación, la pintura facial y corpo-
rial ni espiritual, que permitan la co-
ral, ni en los diseños bordados u otras
laboración comunal de los miembros
grafías, condensadas en signos, símbo-
de la comunidad por convicciones
los emblemas y otros diseños que, por
de creatividad, ajenas a beneficios
no entenderlos, se han clasificado como
particulares.
arte.
Parece que todos los grupos sociales,
Muestras de las etapas de desarrollo o
en todas las etapas de su desarrollo,
estados Homotaxiales no son aceptadas
han luchado, o por lo menos soñado,
como un fenómeno natural de las socie-
con estas utópicas condiciones a lo lar-
dades, puesto que tanto en las reseñas
go de las asociaciones más simples que
históricas regionales o de carácter na-
comienzan con las: familiares, tribales,
cionalista, buscan razones para atribuir
clánicas, gremiales, políticas y demás
los adelantos, innovaciones, invenciones
formas que se encuentran desde las
o que las influencias culturales fueron 88
difundidas por la cultura dominante, sin
pirámides de Egipto y las de Mesopota-
aceptar que los conocimientos, concep-
mia, Palenque, Machu-Pichu y otras es-
tos y credos viajan al igual o más rápido
tructuras de gran monumentalidad, así
que los materiales y objetos de inter-
como las creaciones, logros y erudicio-
cambio o trueque comercial. Una situa-
nes irradiadas por los avanzados cono-
ción que ha existido durante todos los
cimientos sobre Astronomía y otros des-
tiempos y etapas culturales por las que
cubrimientos, invenciones y conceptos
han pasado todos los grupos humanos.
aplicados por las culturas politeístas, mi-
No puede negarse, sin embargo, que
lenios antes de la era cristiana, a la
desde el siglo XVIII o XIX cuando los
constante
grandes descubrimientos de las culturas
alienígenas que supuestamente han vi-
extintas siguieron asombrando a los ex-
sitado nuestro planeta esporádicamente.
ploradores-investigadores
abrían
Ideas que son fácilmente aceptados por
una perspectiva del desarrollo cultural
la generalidad de individuos con niveles
ocurrido en el mundo, fue visto con es-
de conocimiento basado en los progra-
cepticismo por encontrarlo ajeno a las
mas de televisión.
que
o
eventual
presencia
de
ideas que imperaban en la cultura Occidental. Era un tanto inaudito que cultu-
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