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Palabras del Arzobispo
AUDIENCIAS
VARIAS.
PREPARATIVOS PARA LA CELEBRACIÓN DEL CENTENARIO DEL BEATO ROMERO. MISA DE ENVÍO Y PEREGRINACIÓN A CIUDAD BARRIOS. LLEGADA A EL SALVADOR DEL CARDENAL EZZATI, ENVIADO ESPECIAL DE SU SANTIDAD FRANCISCO. SANTA MISA EN CIUDAD BARRIOS – 367 – Durante la semana del 7 al 11 de agosto, con la colaboración de los Vicarios Episcopales y la Comisión de preparación del Centenario del Natalicio de nuestro Beato Monseñor Oscar Romero estuvimos en reunión permanente para disponer todo de la mejor manera posible. El jueves 10, en mi despacho recibí en audiencia a religiosas, sacerdotes y personas laicas que me visitaron para abordar distintos temas pastorales de interés parroquial o personal. El viernes 11, a las 5:00 a.m., en la Cripta de nuestra Catedral presidí la santa Misa de la gran peregrinación que parte de la tumba hacia la cuna de Monseñor Romero, Ciudad Barrios. Es la primera de las peregrinaciones que se inauguran en esta fecha tan significativa, el Centenario del nacimiento de nuestro Beato. Será una peregrinación de 150 kilómetros que durará 3 días. Concelebraron conmigo el señor Cardenal, Monseñor Gregorio Rosa Chávez; el señor Nuncio Apostólico, Mons. Léon Kalenga y el señor Obispo de la diócesis de Tarahumara, en México, Mons. Juan Manuel González; y una gran cantidad de sacerdotes, con la participación de más de unas 600 personas. Inmediatamente después de la santa Misa salió la peregrinación. Este servidor acompañó 7 kilómetros, luego volví para atender los compromisos de la Curia. El sábado 12, al mediodía me trasladé hasta el Aeropuerto Internacional Mons. Oscar A. Romero, acompañado del Ilmo. Mons. Rafael Urrutia y el Padre Reynaldo Sorto, ambos miembros de la Comitiva pontificia; además nos acompañaba el Padre Edwin Henríquez para recibir a Su Eminencia Cardenal Ricardo Ezzati, Arzobispo de Santiago de Chile, Enviado Especial de Su Santidad el Papa Francisco para presidir en su representación, las solemnes celebraciones del Centenario del Beato Monseñor Romero. En el Aeropuerto nos encontramos con nuestro Cardenal, Monseñor Rosa Chávez, el señor Nuncio Apostólico y con la mayoría de los obispos de nuestra Conferencia Episcopal. Todos con la misma finalidad, el recibimiento del Enviado del Papa. En efecto lo recibimos con mucha alegría expresándole nuestra más cordial bienvenida en nombre de todos los salvadoreños. Él por su parte brindó un saludo y breve mensaje a El Salvador, desde la puerta del Aeropuerto. Luego lo trajimos con nosotros a las instalaciones del Arzobispado donde estaría hospedado. Para nosotros fue un gran honor tener en nuestra casa al Enviado del Papa. El domingo 13, acompañando a Su Eminencia Cardenal Ricardo Ezzati, el señor Nuncio Apostólico, Mons. Léon Kalenga y este servidor, en horas de la mañana nos dirigimos a Ciudad
Barrios. Al mediodía alcanzamos la peregrinación en los últimos kilómetros ya cerca de Ciudad Barrios, nos bajamos del vehículo y nos encontramos con el señor Cardenal Gregorio Rosa, quien caminaba con todos los peregrinos. Nos unimos a la caminata junto a ellos y luego entramos a Ciudad Barrios, donde por la tarde, tuvo lugar la santa Misa de conclusión de la peregrinación. Presidió la santa Misa el señor Cardenal Ricardo Ezzati, Enviado Especial del Papa.
palabras en extremo duras: No está bien quitar el pan a los hijos para echárselo a los perritos (Mt 15, 26). La mujer muestra una actitud de enorme humildad. No se molesta ni cesa de pedir con fe inquebrantable respondiendo: Es verdad, Señor; pero también los perritos comen las migajas (Mt 15, 27). Jesús no puede más que alabar aquella fe, quizá, más grande que la del pueblo judío: Mujer, ¡Qué fe tan grande tienes! Que se cumplan tus deseos (Mt 15, 28).
Queridos hermanos, a continuación les comparto algunas ideas sobre la Liturgia de la Palabra de la santa Misa de este Vigésimo Domingo del Tiempo Ordinario: Las Lecturas de este domingo nos revelan la universalidad de Dios: Dios es de/para todos y su salvación también, exigiendo como requisito de sus hijos la fe. La PRIMERA LECTURA tomada del Libro del profeta Isaías trae un mensaje con tinte universal. El pueblo de Israel ha regresado del destierro y Dios le pide dejar atrás el exclusivismo. No son el único pueblo en el que Dios está interesado, ni al cual quiere salvar: A los extranjeros que se hayan unido al Señor… los traeré a mi Monte Santo, los alegraré en mi casa de oración (Is 56, 6-7). De todo aquel que practica el derecho y la justicia Dios dice: Dichoso el hombre que obra así (Is 56, 2). Es decir, es bienaventurado porque ha alcanzado la gracia de Dios y, por tanto, la salvación. El salmista pondera, también, la paternidad universal de Dios: Que se alegren y salten de gozo las naciones porque riges al mundo con justicia… que te den gracias los pueblos, oh Dios (Sal 66, 5-6).
El mensaje de este domingo debe dejar en nosotros una gran enseñanza. Antes que nada, no olvidar que la salvación es para todos y que Dios es un Dios universal como afirma Tritoisaías al negar el exclusivismo que los judíos practicaban, despreciando muchas veces a los pueblos extranjeros y creyendo que, por ser el pueblo elegido, tenían a Dios a su favor independientemente de si sus obras eran buenas o malas. Pablo, en la misma línea profética, nos dice que la salvación exige abandonar el exclusivismo y amar con universalidad como Dios lo hace; finalmente, Mateo pone el ejemplo de la mujer cananea con una fe que espera el accionar de Dios no en favor personal sino en favor de su hija.
San Pablo en la SEGUNDA LECTURA, lamenta la actitud de su pueblo Israel negándose a oír el mensaje de la Buena Nueva; mientras, que pueblos paganos se van convirtiendo conforme el avanza en sus viajes de misión. Sin embargo, intentando explicar la actitud de los judíos, el Apóstol nos dice que es parte del plan salvífico de Dios en su interés por salvar al mundo: Dios ha encerrado a todos en la desobediencia para apiadarse de todos (Rm 11, 32). La desobediencia de Israel es ganancia para los paganos. Más tarde, Dios que es Padre misericordioso cubrirá con su misericordia el pueblo de Israel y su aceptación será una especie de resurrección (Rm 11, 15). El EVANGELIO de San Mateo escrito y dirigido a judeocristianos les recuerda con el pasaje de hoy que Jesús quiere la salvación de todos: judíos y paganos. Presenta, entonces la historia de una cananea. Su hija está enferma y la pobre mujer camina tras el Maestro pidiendo a gritos su sanación. El Maestro al ver que sus apóstoles ruegan por ella para que la atienda le dirige unas
Sin embargo, Dios exige a cambio la fe porque no basta con que la salvación esté contemplada en el plan salvífico si las personas no hacen nada para alcanzarla. Así como el profeta pedía a Israel practicar el derecho y la justicia; ahora, se nos pide una fe que no sólo consiste en un cúmulo de creencias abstractas a recitar de memoria, sino una fe operativizada como los Padres Conciliares establecen en la Gaudium et Spes: La fe todo lo ilumina con nueva luz y manifiesta el plan divino sobre la entera vocación del hombre. Por ello orienta la mente hacia soluciones plenamente humanas (11). La fe debe traducirse en obras desde el sitio en que nos ha tocado nacer y desde el trabajo que nos toca desempeñar. Ejemplo de esto han sido nuestros mártires. Tradujeron y encarnaron la fe en un país lleno de violencia, injusticia, corrupción y muerte dando esperanza y llevando la salvación a un pueblo que sufría y moría a diario. Hagamos lo mismo. Transformemos El Salvador en un país solidario, fraterno, justo, pacífico, sincero y amante de Dios, operativizando nuestra fe de tal forma que el Reino se haga presente desde el ya todavía no; sobre todo, en aquellos corazones descorazonados por la realidad actual llena de violencia, impunidad, injusticia, corrupción, mentiras y pobreza. Si así lo hacemos llevaremos a otros la salvación de Dios, al Dios Padre universal, Padre de la humanidad, a la vez que seremos dichosos por obrar así. † Mons. José Luis Escobar Alas Arzobispo Metropolitano de San Salvador
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El Salvador peregrinó hacia la “cuna del Profeta” Nuestro país fue testigo, del 11 al 13 de agosto, de una manifestación masiva de fe, amor a la Iglesia y al beato Monseñor Romero. Miles de personas, entre sacerdotes, obispos y fieles recorrieron a pie el camino desde la tumba del beato Oscar Romero, en Catedral Metropolitana de San Salvador, hacia la ciudad natal de este, en Ciudad Barrios, a 157 kilómetros de la capital. El día 11, una hora antes de iniciar el recorrido, a las 5:30 a.m., se ofreció en la Cripta de Catedral una Misa de envío presidida por Mons. José Luis Escobar, Arzobispo de San Salvador. “Esta es la sangre de nuestros mártires que no pide venganza –dijo Monseñor durante su homilía–, sino que perdona como Cristo en la cruz, que se entrega por amor”. “Nuestros mártires (…) son la bendición más grande de este pueblo (…) debemos seguir sus huellas, continuar su obra y vivir su mismo espíritu”, finalizó.
A su paso por cada ciudad, los peregrinos fueron animados por los habitantes de la localidad
El Cardenal Gregorio Rosa Chávez, Obispo Auxiliar de San Salvador, quien realizó casi todo el recorrido, calificó la actividad como un espectáculo impensable, maravilloso y esperanzador. “Creo que Romero nos inspira, nos indica el camino y nos lleva a Jesucristo, que es el único Salvador del mundo. Sigamos caminando hacia la cuna del profeta”, explicó Su Eminencia.
La imagen del Beato Romero hace su llegada a Ciudad Barrios junto a gran cantidad de peregrinos
Feligreses de todas las edades peregrinaron durante los tres días
Una imagen de tamaño natural de Monseñor Romero encabezó la peregrinación “hacia la cuna del Profeta” (imagen sobre estas líneas).
Mons. Léon Kalenga, Nuncio Apostólico de Su Santidad, participó de la peregrinación
Con ese espíritu todos los peregrinos recorrieron las tres etapas previstas, haciendo paradas para descansar en Apastepeque el primer día, en Chapeltique el segundo, y realizar el último tramo hasta Ciudad Barrios el 13 de agosto.
Su Excelencia, Card. Ricardo Ezzati, presidió la Santa Eucaristía
Marina Segovia, una de las asistentes a la peregrinación, demostró su entusiasmo al ser parte de la actividad. “No es una procesión común; si usted se fija hay mucho cariño, mucho amor para Monseñor Romero. Y es que lo merece, porque es un mártir”, afirmó. Ya en la “cuna” del Beato Romero, gran cantidad de feligreses esperaba a los peregrinos, para todos participar de la Santa Misa, presidida por el Enviado Especial del papa Francisco, Cardenal Ricardo Ezzati, SDB.
Por la llegada de los peregrinos a Ciudad Barrios se ofreció una Misa concelebrada por los señores obispos de la Conferencia Episcopal y el señor Nuncio Apostólico
Un honor “acompañar a la Iglesia de El Salvador (...) en esta conmemoración centenaria” Una comitiva de obispos de la Conferencia Episcopal de El Salvador, encabezada por Mons. José Luis Escobar Alas, Arzobispo de San Salvador, recibió en el Aeropuerto Internacional al Cardenal Ricardo Ezzati, Arzobispo de Santiago de Chile y Enviado Especial del papa Francisco para celebrar el primer centenario del nacimiento de Monseñor Romero. El señor Arzobispo de San Salvador agradeció vehementemente al señor Cardenal por encontrarse en el país. “Agradezco mucho a Su Eminencia sus expresiones de afecto a El Salvador y a Monseñor Romero. Dios le pague”. También se avocaron a darle la bienvenida al señor Arzobispo de Santiago, el Cardenal Gregorio Rosa Chávez, Obispo Auxiliar de San Salvador; Mons. Elías Rauda, Obispo de San Vicente y Mons. Léon Kalenga Badikebele, Nuncio Apostólico de Su Santidad en el país.
El Cardenal Ezzati compartió su sorpresa al conocer que había sido elegido para representar al
DE IZQ. A DER.: Mons. José Luis Escobar Alas, Mons. Elías Rauda, Card. Ricardo Ezzati, Card. Gregorio Rosa Chávez y Mons. Léon Kalenga
Papa. “Que [el Papa] me haya invitado a celebrar los cien años del natalicio de un obispo tan benemérito, un obispo tan cercano a la gente, un obispo que ha entregado su vida por El Salvador, me parece un gesto tremendamente hermoso y que suscita mi gratitud al Santo Padre”, manifestó en una conferencia de prensa improvisada en una de las salidas de la terminal aérea. “El honor para mí es doble –continuó diciendo–. En primer lugar pisar la tierra de este país, que lleva un nombre tan hermoso, y al mismo tiempo acompañar a la Iglesia de El Salvador y la diócesis de San Salvador en esta conmemoración centenaria. Y en segundo lugar, es un honor también que el Papa haya querido fijarse en mi humilde persona para poderlo representar en este evento tan hermoso”.
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Centenario del natalicio del Obispo y Mártir
“Me atrevo a decir que el Beato Mons. Romero es un mártir de la esperanza” Cientos de sacerdotes concelebraron la Santa Eucaristía ofrecida por el primer centenario del nacimiento del Beato Mons. Romero, Obispo y Mártir
Este 15 de agosto, Solemnidad de la Asunción de la Virgen Santísima al cielo, el centro de San Salvador fue escenario perfecto para una celebración histórica: el primer centenario del natalicio del Obispo y Mártir, Beato Oscar Arnulfo Romero. Desde muy temprano fueron llegando a Catedral Metropolitana de San Salvador sacerdotes, obispos, autoridades, representantes de gobierno y feligresía en general. La Eucaristía fue presidida por Su Eminencia Cardenal Ricardo Ezzati Andrello, S.D.B., Arzobispo de Santiago de Chile y Enviado Especial de Su Santidad el papa Francisco. Le acompañaron en la concelebración unos 200 sacerdotes más, entre ellos los señores cardenales Mons. Leopoldo Brenes, Arzobispo de Managua, Mons. José Luis Lacunza, Obispo de David, Panamá; Mons. Luis Antonio Tagle, Arzobispo de Manila, Filipinas; Mons. Baltazar Porras, Arzobispo de Mérida, Venezuela y Mons. Gregorio Rosa, Obispo Auxiliar de San Salvador. Antes de subir al altar el Cardenal Ezzati se separó un instante de la procesión de entrada para ofrecer un breve saludo al señor Presidente de la República, Prof. Salvador Sánchez Cerén, y la señora Primera Dama, Margarita de Sánchez, que se encontraban participando de la Misa.
Luego de un saludo de bienvenida de Mons. José Luis Escobar Alas, Arzobispo de San Salvador (imagen sobre estas líneas), y posterior a las lecturas previstas para la ocasión, Su Eminencia
Su Eminencia inciensa las reliquias del Beato Romero durante la Santa Misa
procuró una valiosa y muy documentada homilía, en la cual compartió algunas nociones que el Papa le ofreció al momento de nombrarlo su Enviado (ver páginas centrales).
Cardenal Ricardo Ezzati preside la Santa Eucaristía
Para Su Eminencia “el martirio por causa del amor no existe sin la virtud de la esperanza, ya que lo propio del amor hasta el extremo, es adelantar los tiempos definitivos, es vivir un instante de cielo en medio de las calamidades más grandes de esta vida terrena. (…) Todos los mártires viven por causa de la esperanza, pensando, porfiadamente, que otro mundo es posible”, comentó. Por todo esto es que el Cardenal Ezzati, hacia el final de su homilía, enfatizó el título de la misma: “me atrevo a decir que el Beato Mons. Romero es un mártir de la esperanza. Lo es para los más pobres del continente, lo es para nuestra querida Iglesia, lo es para los que luchan por la justicia, la reconciliación y la paz que, con cariño renovado, ya lo llaman ‘San Romero de América’”. Interrumpido en varias ocasiones por los aplausos espontáneos de los fieles, el Cardenal Ezzati concluyó su homilía, dejando bien presente la semilla de esperanza que significa la figura del Obispo y Mártir, Beato Mons. Romero. Ya en un momento posterior, y refiriéndose a la homilía del Cardenal Ezzati, el señor Arzobispo de San Salvador destacó su profundidad teológica y la cantidad de afecto a nuestro Beato.
Convivio ofrecido en el Seminario San José de la Montaña en agradecimiento a Su Eminencia Cardenal Ricardo Ezzati
Entrevista al Enviado Especial del Papa, Card Ricardo Ezzati Orientación. Antes de venir a El Salvador tenía una imagen y alguna información sobre Monseñor Romero ¿Ha cambiado ahora su perspectiva respecto del Beato? Card. Ezzati. Diría más que cambiado ha aumentado en mí los sentimientos de aprecio, de admiración por este pastor contemplando justamente a la gente que lo siente de verdad como un pastor amigo, un pastor cercano, un pastor que ha sabido comprender el dolor del pueblo y ha sabido comprometerse con él. Creo que El Salvador tiene un tesoro grandísimo, no solamente para el presente, sino también para el futuro. Siguiendo la ruta que el beato Monseñor Romero ha recalcado en la vida de la Iglesia del país, ciertamente pueden esperar tener día de solidaridad, de paz y de reconciliación. Por eso me ha gustado llamarlo el mártir de la esperanza. Orientación. Como hermanos que somos los latinoamericanos, tenemos realidades muy similares ¿Cuál es la lección que pueden sacar del legado pastoral de Mons. Romero las personas en Santiago o en el país entero, Chile? Card. Ezzati. Sin duda alguna Monseñor Romero ha predicado que somos hijos todos del mismo Padre. Que somos hijos del Padre nos enseña que somos hermanos y que, por consiguiente, el tipo de relación humana que estamos llamados a vivir no es el del enfrentamiento, sino el del entendimiento, de la fraternidad y de la solidaridad. Creo también que la gran lección que América Latina sigue necesitando aprender es la lección de la solidaridad y el entendimiento fraterno; sea al interior de cada país o sea a nivel de los países: la integración de nuestros pueblos. Orientación. ¿Se promueve en su diócesis las enseñanzas o el contenido producido por el beato Oscar Romero? Card. Ezzati. Hay grupos y también en estos días, hay grupos celebrando y reflexionando en torno al legado pastoral de Monseñor Romero. Creo que este mensaje lo hace presente el Santo Padre recordando la conversión pastoral. Yo hablé de la conversión pastoral en la homilía como camino que el beato Romero emprendió para comprender a la gente y para anunciarles el Evangelio. Es un camino pastoral que a todos nos interesa y nos interpela. Además nos interpela el estilo de pastoral de Monseñor Romero que, desde los pobres, aprendió a anunciar el Evangelio de Jesús, quien se hizo pobre para enriquecernos a todos. [Monseñor Romero] le enseñó tanto a los pobres como a los ricos cómo asimilarse a Jesucristo que, siendo rico se hizo pobre para que todos alcancemos una plenitud de vida. Finalmente, creo que es muy actual para mi diócesis, también para mi país, el mensaje de esperanza que nos viene de la figura y del ministerio de Monseñor Romero. Lo que espera nuestra gente, lo que espera nuestro pueblo es realmente tener oportunidades mayores para alcanzar la estatura alta de personas humanas y la estatura alta de hijos de Dios; y esa esperanza pasa a través del sacrificio, de la entrega, del compromiso para construir de verdad una fraternidad grande más allá de los intereses individualistas que muchas veces nos oprimen.
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ditorial ¿Y después del Centenario? Con una Solemne Eucaristía, presidida por el Cardenal Ricardo Ezzati, la Iglesia en El Salvador quiso celebrar el Centenario del nacimiento del Beato Oscar Romero. Era el día de la Asunción de la Virgen María al Cielo. Para esta ocasión especial también acompañaron cardenales y obispos de América Latina. En Ciudad Barrios también los fieles se reunieron para dar gracias a Dios por la vida por el hijo de aquella tierra que ha llegado a los altares. Previo a este año Jubilar, la Iglesia invitó a los fieles en parroquias, movimientos y comunidades a prepararse con un triduo, donde se reflexionó en torno a tres dimensiones del Beato Romero: hombre de Dios, de Iglesia y servidor de los pobres. En este tiempo tuvimos la inmensa alegría de participar en la multitudinaria Misa de su Beatificación. A partir de esta fecha le invocamos cada día en la Liturgia y le tenemos en nuestros templos. En días recientes también tuvimos la oportunidad de palpar la multitudinaria peregrinación, en tres etapas, hasta su lugar natal. Con ilusión, alegría y optimismo los fieles peregrinaron bajo la inspiración del Profeta. En otras partes del mundo, también se hizo memoria del Beato Romero. Y ahora, nos preguntamos, ¿y después del Centenario? El propósito es animarnos a “convivir” con nuestro Beato en el día a día. Quizá no sea una tarea fácil ni encontremos un folleto que nos diga cómo hacerlo. Pero el papa Francisco, en su discurso a la delegación salvadoreña, decía: “el ejemplo de Mons. Romero constituye para su querida nación un estímulo y una obra renovada de la proclamación del
Evangelio de Jesucristo, anunciándolo de modo que lo conozcan todas las personas, para que el amor misericordioso del Divino Salvador invada el corazón y la historia de su buena gente”. Creo que aquí encontramos una valiosa ayuda para nuestro caminar después del Centenario. Hay que anunciar a Jesucristo, para que se le conozca y para que su misericordia habite en los corazones de nuestro pueblo. La Evangelización es una prioridad en nuestro plan pastoral, pero también debe ser una prioridad en cada bautizado. Unido a la evangelización hay que profundizar en el testimonio del Beato Romero. No podemos quedarnos con un par de frases, olvidando que toda su vida nos habla de las virtudes cristianas. Su martirio no fue improvisado, sino preparado por una profunda entrega a Dios. Las cualidades sacerdotales se pusieron en evidencia durante sus años sacerdotales en San Miguel. La vida de un santo se asemeja al Buen Pastor. Tomarse en serio la devoción al Beato Romero debe significar una imitación de Cristo. Que su Evangelio siga permeando la vida y costumbres de cada bautizado. Los fieles laicos están invitados a impregnar con los valores del Evangelio las más variadas realidades salvadoreñas: en el campo y la ciudad, en el trabajo y en la política, en las instituciones que buscan forjar en bien común, la paz y la solidaridad. Del mismo modo, los pastores tienen delante un ejemplo que no es fácil ni cómodo, pero es auténtico, y así será el ministerio de quienes busquen ser buenos pastores en su tiempo y lugar.
Por Pbro. Simeón Reyes, director de Semanario Orientación
A cien años del natalicio de Monseñor Romero No obstante su pequeñez geográfica, El Salvador ha producido personajes notables en el arte, la literatura y otros campos del conocimiento y la sensibilidad humanos, pero Sigfrido Munés uno es el más trascendente a tioziggi@hotmail.com nivel internacional: el Beato Oscar Arnulfo Romero Galdámez. Amado, respetado y también malinterpretado, Monseñor señaló pecados y pecadores de las fuerzas de la violencia descontrolada que sufrió el pueblo salvadoreño, así como la represión de dos colores, que segó vidas lo mismo de campesinos que de obreros, alcaldes, empresarios, estudiantes, del poeta Roque Dalton, del embajador sudafricano, de profesionales y sindicalistas; terror… en fin, que traumó a niños y jóvenes. Poner a Monseñor
DIRECTORIO
Pbro. Simeón Reyes DIRECTOR
Romero etiquetas de izquierda o derecha es irrespetar su estatura de pastor y mártir, es reducir la trascendencia de su mensaje cristiano, claro y transparente. “Mi reino no es de este mundo” (pero es aquí donde se gana o se pierde). Claro que Monseñor denunció enfáticamente las acciones de quienes asesinaron sacerdotes y martirizaron fieles, era su misión de pastor y guía desarmado al cuidado de sus ovejas. Esa violencia aberrante no era aceptable ni tolerable para el hombre de Dios, pero ninguna otra podía serlo para él. La vida es el máximo regalo de un Padre amoroso, que la da a sus hijos por el sólo hecho de serlo. Nadie puede privar de la vida a otro ser humano y mucho menos si la víctima está indefensa. En las tablas de la Ley que el Señor entregó a Moisés quedó grabado un Quinto Mandamiento que no admite excusas: “No Matarás”.
Pbro. Carlos Chavarría SUBDIRECTOR
Roger Herrera EDITOR EN JEFE
Como reverente amigo del Beato Oscar Arnulfo Romero (la Voz) pude platicar con él largamente y conocerle como ser concreto, como hombre de Iglesia y ser humano sensible, sabio, modesto y amistoso. En su humildad auténtica formulaba muchas preguntas antes que exhibir sus propias respuestas. A la hora de su cruel martirio se unió a mí el pesar de su muerte y la frustración de que no aceptara ser protegido ante la prepotencia de sus enemigos. Escribo estas líneas en la víspera del cumpleaños número 100 de Monseñor, quien vio la luz primera en la otrora pacífica Ciudad Barrios. En Dios confiamos para que el mensaje heredado de Monseñor Romero y su figura no sean distorsionados. Que él desde el Reino Celestial nos bendiga e ilumine para elevar las condiciones de vida, la seguridad y la tranquilidad de los salvadoreños. Así sea.
Efraín Caravantes
Roger Herrera
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Mons. Oscar Arnulfo Romero
– Homilía de Su Eminencia Ricardo Ezzati Andrello, sdb, Cardenal Arzobispo d para el centenario del nacimiento de Mons. Oscar Arnulfo Romero, Beato 1. Nacimiento de un Pastor Santo. En la Solemnidad de la Asunción de la Virgen Santísima a los cielos, del año 1917, poco antes de clarear el alba, abrió sus ojos a este mundo Oscar Arnulfo Romero Galdámez, segundo hijo varón de don Santos Romero y de doña Guadalupe de Jesús Galdámez. Nace en Ciudad Barrios, en una familia modesta. Su padre trabaja como telegrafista en la oficina de correos; su madre quiso ser maestra de escuela, pero se dedicó a su familia de ocho hijos. El niño Oscar aprendió la “doctrina”, como se le llamaba al Catecismo, de los labios de su padre y de su madre se fue formando un corazón creyente, con una profunda devoción mariana. Juntos rezaban el Ángelus con las campanas que anunciaban el término del trabajo y recitaban el Santo Rosario. Llama la atención la relación que existe entre el misterio de María, la Virgen Madre, que hoy celebramos, con Monseñor Romero. Él nace el día en que la Iglesia celebra el triunfo de María sobre todo mal, asunta en cuerpo y alma a los Cielos y muere cuando empieza a celebrarse la gran fiesta de la Encarnación del Hijo de Dios en las purísimas entrañas de la Virgen, día en que pasa desde los misterios dolorosos a los misterios gloriosos de ese Rosario que nunca dejó de rezar. El Papa Francisco, al nombrarme su Enviado, escribe: “Ya se cumplen cien años del nacimiento del beato Oscar Arnulfo Romero, obispo y mártir, ilustre pastor y testigo del Evangelio, decidido defensor de la Iglesia y de la dignidad del hombre. Hijo de la amada tierra de El Salvador, habló a la gente de nuestro tiempo de la obra salvífica de nuestro Señor Jesucristo y de su amor hacia todos, especialmente hacia los pobres y descartados. Tanto en su vida sacerdotal como en el comienzo de su ministerio episcopal experimentó un singular camino espiritual, que lo llevó a propagar la justicia, la reconciliación y paz”. Es impresionante y emocionante leer y releer algunas de sus homilías así como su Diario de Vida. ¡Cuánto bien al alma me han hecho! El Papa ha tenido la bondad de enviarme como 1
su Legado personal, para representarlo en este acontecimiento eclesial que los convoca en este día de júbilo. Ustedes saben tanto como yo, que él tiene un afecto muy grande por esta tierra “que lleva el nombre del Divino Salvador” 1, y saben también, de su reiterado deseo de que el martirio de Monseñor Romero no deje de dar frutos abundantes de comunión eclesial, de reconciliación y solidaridad entre los salvadoreños, a fin de edificar una sociedad justa y noble. Mucho es lo que ustedes han sufrido; difíciles las circunstancias que tienen que seguir enfrentando. Es demasiado valiosa la vida de cada salvadoreño como para no superar la violencia homicida con “la violencia del amor” 2. En esta esperanzada lucha por la vida, el Papa está con ustedes, los exhorta a humanizar y a compartir con equidad el desarrollo de su país y les envía su bendición apostólica. 2. Algo de su historia. Queridos hermanos y amigos: No es en momento para volver a contar la historia de quien celebramos, en esta mañana. Sé que, a lo largo de todo este año jubilar, se han enriquecido espiritualmente con ella, sin embargo, permítanme destacar sólo algunos de sus rasgos, para procurar adentrarnos en su corazón y en su mensaje. Algo tímido e introvertido, a los 13 años ingresó al Seminario Menor dirigido por los Padres Claretianos. A los veinte al Seminario de San José de la Montaña, de allí, enviado a Roma. Fue ordenado sacerdote el 4 de abril de 1942. Poco tiempo después, a causa la segunda guerra mundial, tuvo que adelantar su regreso a la patria, donde ejerció el ministerio presbiteral en varias comunidades, entre ellas, párroco en la Catedral de San Miguel. Más tarde es nombrado Obispo Auxiliar de San Salvador (1970), Obispo de Santiago de María (1974), hasta que el Papa Pablo VI lo nombra Arzobispo de San Salvador, un 23 de febrero de 1977: tiempos complejos y desafiantes para la Patria y para la Iglesia. Así se fue desarrollando la vida apostólica de este joven sacerdote de corte más bien tradicional. Hombre virtuoso, muy activo en su parroquia, cercano a la gente, caritativo con los pobres, algo distante de las opciones pastorales renovadas impulsadas por el post concilio.
Sin embargo, algo empezó a cambiar en él, especialmente en Santiago de María, al conocer más de cerca la pobreza extrema de los campesinos. El varón justo se empieza a inquietar por la injusticia y el Pastor Bueno, que quiere hacerse todo con todos y para todos, tiene la experiencia de que no basta con acompañar a los más pobres y dar consejos a los más ricos. Evangelizar, sobre todo después de la Exhortación Apostólica del Papa Pablo VI “Evangelii Nuntiandi” significa llevar la Buena Nueva a todos los ambientes, transformar con la fuerza del Evangelio los criterios de juicio, los valores determinantes, los puntos de interés, las líneas de pensamiento, las fuentes inspiradoras y los modelos de vida de la humanidad, que están en contraste con la palabra de Dios y con el designio de salvación” (Ib. 18-19). Y no hay equidistancia entre lo bueno y lo malo, lo justo y lo injusto, los pobres y los ricos. Así se comprende la opción preferencial por los pobres y excluidos, como opción del mismo Dios en la historia de su pueblo. Su ministerio pastoral continúa y llegan acontecimientos trágicos que remecen sus entrañas. Uno de ellos fue la matanza de un grupo de peregrinos que regresaban a su pueblo después de visitar un Santuario. Poco tiempo después, fue el asesinato el P. Rutilio Grande, acribillado por “desconocidos”, junto a dos parroquianos en un camino rural de su parroquia 3, empeñado en la formación de comunidades Eclesiales de Base y apoyando la organización campesina. Esto fue demasiado. El fuego de Dios incendió el corazón del Arzobispo. Exigió al Presidente de la República una investigación inmediata y, al domingo siguiente, celebró una sola Misa en San Salvador con más de 100,000 participantes. Venciendo su timidez pasó a ser “voz de los sin voz”, para clamar “la violencia del amor” que destierra la violencia del odio. No a la violencia del régimen. No a la violencia guerrillera. Sí a una paz, basada en la justicia y en la verdad, respetuosa de los derechos de los pobres. Y pasando de la palabra a los hechos, crea la oficina del “Socorro Jurídico” 4, para ir en ayuda de los derechos humanos de los campesinos más
Carta a Mons. Escobar Alas, Arzobispo de San Salvador, con ocasión de la Beatificación de Mons. Romero. Romero, Oscar Arnulfo, 27 de noviembre de 1977: “Jamás hemos predicado violencia. Solamente la violencia del amor, la que dejó a Cristo clavado en una cruz’’. 3 Asesinato acontecido el 12 de marzo de 1977. 4 Homilía sobre la paz 3 de julio del 1977; y primera página de su Diario de Vida 2
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, mártir de la esperanza
de Santiago de Chile, Enviado Extraordinario de Su Santidad el papa Francisco y Mártir. Catedral Metropolitana de San Salvador. 15 de agosto de 2017 – pobres, iniciativa que tuvo una relación muy cercana con la Vicaría de la Solidaridad, creada por la Iglesia en Chile, para acoger a las víctimas de la dictadura. Por otra parte, esta “voz de los sin voz” se escucha por radio en todo el país, cada domingo, haciendo una lectura evangélica y cristiana de los acontecimientos; una palabra que forma e informa, un mensaje de esperanza y respeto a la vida, en un lenguaje que entienden los más pobres. La voz del Pastor traspasa las fronteras de San Salvador, remece el corazón de la Iglesia en América y de otros continentes. Como es propio de una figura controvertida, su palabra es rechazada por algunos y aplaudidas por otros. Quienes se detienen en el pórtico occidental de la Abadía de Westminster, importante templo anglicano, en un lugar destacado de la galería de los diez mártires, podrá contemplar una estatua de Mons. Oscar Romero, flanqueado por el pastor Martin Luther King 5 y el teólogo luterano, Dietrich Bonhoeffer 6. 3. Una conversión pastoral. ¿Qué pasó en el corazón de Monseñor Romero para dejarse transformar de esa manera por el Espíritu de Dios? Humanamente hablando no cabe duda que su cercanía con los pobres, en la medida que fue asumiendo responsabilidades pastorales mayores, lo llevó a ver con sus ojos la injusticia que sufrían los campesinos y a constatar con Jesús, cuán difícil es que un rico ciego entre en el Reino de los Cielos. “La Iglesia tiene una buena noticia que anunciar a los pobres, –decía–. Aquellos que, desde hace siglos, han escuchado malas noticias y han vivido la peor realidad, están escuchando ahora, a través de la Iglesia, la palabra de Jesús: “el Reino de Dios está cerca”, y de ahí, también hay una buena noticia que anunciar a los ricos: que se vuelvan pobres para compartir con Él los bienes del Reino.” 7 5
Hoy, basados en la Conferencia de Aparecida, podemos decir que nuestro Mártir experimentó una profunda “conversión pastoral” 8. Se trata de una conversión decididamente misionera que toca directamente la vida pastoral y sus opciones. Según Aparecida “la Iglesia no puede prescindir del contexto histórico en que viven sus miembros”. Por eso debe estar “disponible a abandonar las estructuras caducas que ya no favorezcan la transmisión de la fe”, pasando “de una pastoral de mera conservación a una pastoral decididamente misionera” 9. ¿No fue eso lo que vivió Monseñor Romero años antes de Aparecida? Haciendo real esta conversión dio un paso que a todos nos concierne y nos cuestiona. No será posible de escuchar con nitidez la voz de Dios en la historia si no estamos insertos en el acontecer vital de nuestro pueblo. Así lo expresó nuestro Beato: “Como quisiera yo grabar en el corazón de cada uno esta gran idea: el cristianismo no es un conjunto de verdades que hay que creer, de leyes que hay que cumplir, de prohibiciones. Así resulta muy repugnante. ¡El cristianismo es una persona que me amó tanto y que me reclama mi amor! ¡El Cristianismo es Cristo!” 10. La conversión pastoral lleva a desear vivir como Jesús con los más débiles, los más pobres, los que no cuentan. Y, desde esa experiencia purificadora, anunciar la Buena Nueva con la vida, el testimonio y la palabra, asumiendo la defensa integral de la vida que incluye la justicia social. Recuerdo, a propósito, el llamado urgente que hizo San Juan Pablo II hace treinta años en su visita a Chile, en la sede de la CEPAL, para todo el Continente americano: “¡los pobres no pueden esperar!”, dijo 11. En un mundo de tanta riqueza, de tantas posibilidades, de tantos adelantos tecnológicos, es incomprensible que los pobres deban seguir esperando. Y más incomprensible aún, que esto
siga sucediendo en un Continente cristiano. Quienes como Monseñor Romero entran decididamente por el camino de Jesús..., quienes dicen y obran a la manera de Jesús, saben que están expuestos a pasar –a hacer pascua– de manera semejante al Maestro. Así le sucedió. Terminada su breve homilía, en el rito del ofrecimiento de los dones, antes de entrar en el corazón de la Eucaristía, la bala asesina apuntó a su corazón... El francotirador recibió como Judas unas cuantas monedas. Pocos días antes, el mismo u otro sicario, había perdido la ocasión de dar muerte a Monseñor Romero junto a otro altar de la Arquidiócesis 12. Esa demora hizo posible escuchar el testamento espiritual del este gran Arzobispo Mártir, en su breve homilía antes de morir: “si el grano de trigo no cae en tierra y muere...” 13 Y dicho esto, entregó su espíritu. 4. Mártir de la esperanza. Sin embargo, no es solo la bala, la daga, o la espada la que produce el martirio. De hecho, al decir del Papa Francisco el martirio de Monseñor Romero continuó después de su muerte en la incomprensión, la maledicencia, la calumnia. El martirio, que es un don de Dios. Es Dios quien regala el martirio como don supremo del amor hasta el extremo. Es Dios quien por su Espíritu sostiene al mártir, como lo hizo con su Hijo Jesús, clavado en una Cruz. La figura de Monseñor Romero no se explica sin esta “virtud”, es decir, sin la fortaleza divina que acompaña el martirio. Hay mártires que lo son por causa de la fe, “en odio a la fe”; otros lo son por causa de la caridad; otros, y especialmente en nuestro continente americano, lo son por causa de la justicia. Es legítimo preguntarse: ¿habrá mártires que lo sea por causa de la esperanza?
(pasa a la página siguiente)
Pastor bautista asesinado a los 41 años de edad, luchando por el fin de la discriminación racial en USA. Pastor Luterano, declarado ‘‘Justo entre las naciones”, ahorcado a los 39 años de edad, el 9 de abril de 1945, en el Campo de Concentración de Flossenburg, Alemania. 7 Romero, Oscar Arnulfo; al recibir el doctorado Honoris Causa, en la Universidad de Lovaina, Bélgica, 2 de febrero de 1980 8 DA 365 ss. 9 DA 365, 367, 370. 10 Homilía, 6 de noviembre de 1977. 11 CEPAL, Comisión Económica para América Latina, abril de 1987. 12 El día 9 de marzo de 1980. 13 Jn 12, 24. 6
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(viene de página anterior) La esperanza es la más humilde de las virtudes teologales. Pero, no puede haber fe teologal, si no se tiene ante los ojos el punto de llegada de la vida humana y de la creación, es decir: la tierra nueva y los cielos nuevos. Por su parte, el martirio por causa del amor no existe sin la virtud de la esperanza, ya que, lo propio del amor hasta el extremo, es adelantar los tiempos definitivos, es vivir un instante de cielo en medio de las calamidades más grandes de esta vida terrena. También tener hambre y sed de justicia es causa de martirio, sobre todo cuando se vive con la certeza moral de que luchar por ella es motivo de rechazo y hasta de muerte por quienes producen la injusticia. Todos los mártires viven por causa de la esperanza, pensando, porfiadamente, que otro mundo es posible. Coherente con estas reflexiones, me atrevo a decir que el Beato Mons. Romero es un mártir de la Esperanza. Lo es para los más pobres del continente, lo es para nuestra querida Iglesia, lo es para los que luchan por la justicia, la reconciliación 14
y la paz que, con cariño renovado, ya lo llama “San Romero de América”.
Termino con las palabras que el Papa Francisco dirigiera al querido Arzobispo de San Salvador con ocasión de la Beatificación de nuestro Mártir: “Quienes tengan a Monseñor Romero como amigo en la fe, quienes lo invoquen como protector e intercesor, quienes admiren su figura, encuentren en él fuerza y ánimo para construir el Reino de Dios, para comprometerse por un orden social más equitativo y digno. Es momento favorable para una verdadera y propia reconciliación nacional ante los desafíos que hoy se afrontan. El Papa participa de sus esperanzas, se une a sus oraciones para que florezca la semilla del martirio y se afiancen por los verdaderos senderos a los hijos e hijas de esa Nación, que se precia de llevar
el nombre del divino Salvador del mundo”14. Hermanos y hermanas:
En esta celebración eucarística cobran todo su significado las palabras proféticas de Mons. Romero: “El martirio es una gracia de Dios que no creo merecer. Pero, si Dios acepta el sacrificio de mi vida, que mi sangre sea semilla de libertad y señal de que la esperanza será pronto una realidad... Si llegaran a matarme, perdono y bendigo a quienes lo hagan”. Junto al Beato Oscar Romero, al Arzobispo de esta Ciudad, a todos los Pastores de la Iglesia en El Salvador, junto a cada uno de ustedes, poniendo el corazón y la mirada en esta tierra, los invito a invocar a la querida Madre y Patrona de este pueblo: Nuestra Señora de la Paz, ruega por nosotros. Amén.
Papa Francisco, Carta a Mons. Luis Escobar Alas, Arzobispo de San Salvador, con ocasión de la Beatificación de Mons. Romero.
Caritas realiza encuentro regional en el país por el 50 aniversario de la Encíclica Populorum Progressio La distancia o disparidad entre los ricos y pobres descritos por Pablo VI hace cincuenta años están muy presentes hoy en día. En el marco del 50 aniversario de la Encíclica Populorum Progressio, Caritas Internacional desarrolló en nuestro país un Encuentro Latinoamericano y Caribeño del 13 al 16 de agosto. El evento, organizado por el Departamento de Justicia y Solidaridad del Consejo del Episcopado de América Latina y El Caribe (CELAM) y el Secretariado de América Latina y el Caribe de Caritas (SELACC), reúne a cardenales, obispos, sacerdotes y laicos de más de 22 países de América Latina, Norteamérica, Europa y El Caribe.
Card. Luis Antonio Tangle, presidente de Caritas International, durante su intervención en el encuentro
Luego de la Oración inicial y el acto inaugural, el Cardenal Luis A n t o n i o Ta g l e , Arzobispo de Manila y presidente de Caritas International, realizó una relectura sobre los aportes de este importante d o c u m e n t o Al final de las actividades del encuentro regional los representantes posaron d e l a I g l e s i a . para una foto de grupo En ella el señor Cardenal señaló que la encíclica ponencia señalando: “En Populorum Progressio se afirma la obligación moral de la solidaridad como anunció la creación de la Comisión Justicia y Paz, el modo de desarrollar las naciones y lograr la paz 50 años después ésta se une a nuevos consejos y social. “En el último Foro Económico Mundial la pasa a llamarse Dicasterio para la promoción del organización internacional Oxfam denunció que Desarrollo Humano Integral”, un gran legado que actualmente ocho personas del mundo, concentran deja la Encíclica. la riqueza de la mitad de la población mundial. (…) Esta y las jornadas siguientes incluyeron Eso mientras una de cada 10 personas sobrevive con ponencias, panel foro y mesas de trabajo; pero el menos de dos dólares al día, es obsceno”, enfatizó. día 15 de agosto, las y los participantes abrieron Para Tagle, el asunto de la pobreza y el espacio en su agenda de trabajo para acudir, a crecimiento no es asunto de estadísticas, somos la Misa en conmemoración de los 100 años del seres humanos, no números. natalicio del beato Oscar Romero y presentar Finalmente, el Cardenal Tagle terminó su conclusiones en la Cripta de Catedral Metropolitana.
Celebraciones en el mundo por el nacimiento del Beato Romero
En la Catedral de San Jorge, de Southwark, Inglaterra, este 12 de agosto se celebró una Misa por el centenario de nacimiento del Beato Romero. Mons. Vincenzo Paglia, postulador de la Causa de Canonización, predicó la homilía
Por su parte, este 13 de agosto, en la Catedral de Nuestra Señora de los Ángeles, Mons. José Gómez, Arzobispo de Los Angeles, celebró una Santa Misa dedicada al centenario
La Parroquia del Sagrado Corazón, de Washington, celebró dos Eucaristías el 15 de agosto (una bilingüe inglés-español y otra en inglés), por el cien aniversario del nacimiento de Mons. Romero
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Ángelus en la Solemnidad de la Asunción de la Virgen María
Luego del rezo del Ángelus en la Solemnidad de la Asunción de la Virgen María, este 15 de agosto, el papa Francisco le pidió a la Madre de Dios el don del consuelo y un futuro sereno para quienes sufren ante los desastres naturales y los conflictos que golpean muchas partes del mundo. “A María Reina de la Paz, que contemplamos hoy en la gloria del Paraíso, quiero confiar una vez más las ansias y los dolores de las poblaciones que en muchas partes del mundo sufren a causa de los desastres naturales, tensiones sociales o conflictos”, dijo el Papa. “¡Que obtenga nuestra Madre celeste para todos el consuelo y un futuro de serenidad y concordia!”, exclamó. Tras saludar a los fieles llegados desde distintas partes del mundo, el Santo Padre deseó a todos “una buena fiesta de la Asunción y, por favor, no se olviden de rezar por mí”. (Cf. Aciprensa.com 15 ago. 2017)
En un telegrama al Arzobispo de Freetown (Sierra Leona), Mons. Edward Tamba, el papa Francisco expresa sus condolencias por las consecuencias de un alud que ha causado la muerte de casi 300 personas.
Además, también expresa su solidaridad hacia “los trabajadores del rescate y todos los involucrados en proporcionar el alivio tan necesario y el apoyo a las víctimas de este desastre”.
A través del Cardenal Secretario de Estado, el Cardenal Pietro Parolin, el Santo Padre afirma estar “profundamente entristecido por las devastadoras consecuencias del derrumbe en las afueras de Freetown” y asegura su cercanía “a aquellos que han perdido a seres queridos en este momento difícil”.
El 14 de agosto, a primera hora de la mañana, las fuertes lluvias causaron fuertes inundaciones en Regent, a pocos kilómetros de Freetown. Estas lluvias derivaron en ríos de lodo y provocaron el derrumbe de parte de una colina.
“Reza por todos los que han muerto, y sobre sus familias y amigos afligidos invoca las bendiciones divinas de fuerza y consuelo”.
Según el diario local “The Sierra Leone Telegraph”, de los primeros 200 muertos, al menos 60 eran menores de edad.
Horóscopos, ideologías, modas y slogans: barcas que se hunden
Mensaje del Papa al encuentro “Mediterráneo: puerto de fraternidad”
No a los “horóscopos”, a las “ideologías”, a las “modas y a los “slogans”: son barcas que se hunden, observó el papa Francisco, mientras que la barca de la Iglesia se mantiene firme gracias a la Palabra de Cristo. El Papa ha proclamado por tres veces la palabra de los apóstoles a Jesús, con la gente reunida en la plaza San Pedro: “¡Verdaderamente, tú eres el Hijo de Dios!”.
El papa Francisco hizo llegar su aliento, aprecio y participación espiritual al encuentro internacional culminado con la “Carta de Leuca”, firmada en la Basílica-Santuario de Santa María de Finibus Terrae, que lleva la fecha del 14 de agosto de 2017, con el anhelo de que “el evento suscite un compromiso cada vez más generoso, favoreciendo la cultura de la acogida y de la solidaridad y promoviendo la paz y la fraternidad entre los pueblos”.
El papa Francisco comentó el Evangelio antes del Ángelus de este 13 de agosto, desde la ventana del despacho del palacio apostólico del Vaticano que da a la Plaza San Pedro. Comentando el episodio evangélico de la marcha sobre las aguas, el Papa ha hecho observar la falta de fe del bautizado que consulta los horóscopos. Al contrario, invitó a volverse hacia Cristo como Pedro que grita: “¡Sálvame!” y Cristo le coge por la mano y lo salva. También invitó a permanecer en la barca de la Iglesia, que no se hunde mientras que se hunden las otras barcas de las ideologías o de las modas. (Cf. Romereports.com 13 ago. 2017)
(Cf. Aciprensa.com 16 ago. 2017)
El Pontífice alienta “a la comunidad cristiana de este territorio, a los jóvenes provenientes de los países que se asoman al Mediterráneo, así como a todas las personas de buena voluntad, a considerar la presencia de tantos hermanos y hermanas migrantes como una oportunidad de crecimiento humano, de encuentro y de diálogo”.
Video mensaje del Papa Francisco al pueblo peruano
“Unidos en la esperanza” “Queridos hermanos y hermanas peruanos, dentro de poco los visitaré, tengo muchas ganas de ir, ustedes son un pueblo de mucha reserva. Y la reserva más linda que puede tener un pueblo es la reserva de los santos, ustedes tienen tantos santos y grandes santos que marcaron Latinoamériaca”, es el saludo que el papa Francisco envió un video mensaje al pueblo peruano, a través del Cardenal Juan Luis Cipriani, Arzobispo de Lima y Primado del Perú, con motivo de su próxima Visita Apostólica a este país en programa del 18 al 21 de enero de 2018. Asimismo, el Arzobispado de Lima informó que el Santo Padre pidió a todos los peruanos que trabajen por la “unidad” siguiendo el ejemplo de los santos peruanos. “Los santos hicieron la construcción de la Iglesia –afirma el
Papa–, es decir de la dispersión a la unidad, un santo siempre trabaja en esa línea, de lo que está disperso a la unidad, que es lo que hizo Jesús. Un cristiano tiene que seguir ese camino y, ¿por qué no?, un peruano –también– con tantos santos peruanos, trabajar por la unidad; quien trabaja por la unidad mira adelante, y adelante se puede mirar con escepticismo, con amargura, un cristiano no puede, un cristiano mira adelante con esperanza, porque espera lograr eso que el Señor le prometió”.
Dirigiéndose a los poderosos de la Tierra y a todos los hombres y mujeres de buena voluntad, la “Carta de Leuca 2017” pide entre otros puntos: la creación de corredores humanitarios nuevos y más amplios, que brinden sostén, acogida e inclusión social a los migrantes, que se ponga fin de forma clara al comercio de armas y que se invierta más bien en arados para el desarrollo humano integral, además del derecho a permanecer en paz en las comunidades propias.
Finalmente, el papa Francisco dejó una tarea a todos los peruanos en espera de su Visita el próximo 18 de enero de 2018. “Nos veremos pronto –dice el Papa– pero mientras tanto: unidad y esperanza, trabajen en eso. Rezo por ustedes, ustedes háganlo por mí”.
Más de 200 jóvenes, de 31 países, de diversas culturas y religiones, compartieron cuatro días de reflexiones dedicados a la fraternidad y a la cooperación, con la participación, entre otros, de la Conferencia Episcopal Italiana, Pax Christi y Caritas italiana.
(Cf. Radiovaticana.va 7 ago. 2017)
(Cf. Radiovaticana.va 14 ago. 2017)
VOZ DEL PAPA
Papa Francisco pide a María consuelo para quienes sufren desastres naturales y conflictos
Papa muestra su dolor por víctimas de inundaciones en Sierra Leona
EN EL MUNDO
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Cardenal Urosa rechaza injerencia extranjera en Venezuela, sea de Estados Unidos o Cuba El Arzobispo de Caracas, Cardenal Jorge Urosa, señaló que la crisis que sufre Venezuela debe ser resuelta por su pueblo y el Gobierno –que la ha provocado–, y no por medio de la injerencia militar extranjera, sea la cubana “presente desde hace algún tiempo”, o de Estados Unidos, tal como insinuó su Presidente Trump. El Purpurado dio estas declaraciones al término de la Misa que celebró en la Catedral de Caracas, con motivo de los 150 años de consagración del templo. En conversación con la prensa, el Cardenal se refirió a las declaraciones de Trump del viernes pasado, en las que dijo que en Estados Unidos “tenemos muchas opciones para Venezuela, incluyendo una posible opción militar si es necesario”. El Purpurado expresó que “la crisis que sufrimos los venezolanos es tan grave que ahora surge un problema externo, las amenazas de una opción militar por parte del Presidente Trump”. Frente a esto aseguró: “Yo –y estoy seguro, todos los Obispos venezolanos– rechazo toda injerencia militar extranjera, como la cubana, presente desde hace algún tiempo en Venezuela, y no estoy de acuerdo con la amenaza de una opción militar”, expresó. Según informó la Oficina de Información de la Arquidiócesis de Caracas, el Cardenal Urosa señaló que “el problema, sin embargo, es que la crisis social, política y económica que sufrimos es cada vez más grave; tanto, que da pie para que alguien piense en una opción militar. Somos los venezolanos, y en especial el Gobierno que la ha creado, los que tenemos que resolver la crisis actual”. (Cf. Aciprensa.com 14 ago. 2017)
Hace 400 años había pena de muerte para católicos suecos, ahora hay conversiones El catolicismo en Suecia ha tenido una historia difícil. Después de la Reforma Protestante, ser católico suponía la condena a la pena de muerte. Sin embargo, en el año 2000, el país la reconoció como una religión, incluso, y dio la bienvenida al papa Francisco en octubre de 2016. “Hace 400 años, había pena de muerte para los católicos suecos pero las cosas han cambiado mucho, gracias a Dios. Desde el año 2000 tenemos los mismos derechos. La Iglesia Católica fue reconocida y tenemos las mismas posibilidades”, dice el recién creado Card. Anders Arborelius Arzobispo de Estocolmo, Suecia. En la actualidad hay 117 mil católicos registrados en este país indiferente a la religión, con una población de casi 10 millones de
En el especial, que publica el diario Panorama Católico en Panamá, hay una serie de artículos como el que escribe el Cardenal Gregorio Rosa Chávez, Obispo Auxiliar de San Salvador, titulado “El triunfo de la verdad”.
“Los católicos suecos son minoría en su Iglesia. Pero los hijos de emigrantes ya sí son suecos. Así que podríamos decir que la Iglesia católica está cada vez más integrada en la sociedad sueca. Tenemos que construir nuevas iglesias porque el número de católicos aumenta. Esto es muy esperanzador pues es un país muy secular. Por supuesto, también hay personas que dejan la fe y abandonan la Iglesia, pero hay muchas más que se convierten y eso es muy raro en Europa”, aseguró. (Cf. Romereports.com 12 ago. 2017)
Recorrer el Vaticano Agenda Oficial del Papa desde casa... Francisco en Colombia El 6 de septiembre el Papa llegará a Colombia, ¡es posible! para iniciar una agenda de 4 días, que incluye las
Quien no haya visto el Vaticano y sus diversos ángulos, es porque no quiere. No hay excusas, desde la web vaticanstate.va es ya posible observar distintos rincones del Vaticano desde cualquier pantalla. Desde cámaras web se puede ver en tiempo real una panorámica de la Plaza de San Pedro, entrar a la Tumba de Juan Pablo II, observar desde las alturas la famosa cúpula de San Pedro y la Basílica y también el Palacio del Governatorato dentro del Vaticano. Pero no solo los territorios Vaticanos de la Ciudad Eterna. También es posible desplazarse a los jardines de Castel Gandolfo, que se encuentra a 43 kilómetros. Esta residencia fue el lugar de veraneo de decenas de Papas y ahora es un museo. (Cf. Romereports.com 10 ago. 2017)
Edición para Panamá de L’Osservatore Romano publica homenaje al Beato Romero La edición para Panamá y América Central del diario del Vaticano L’Osservatore Romano (LOR) publicó este 13 de agosto un especial en ocasión del centenario del nacimiento del beato salvadoreño Oscar Arnulfo Romero.
habitantes. Sin embargo, el Cardenal sueco asegura que el número de católicos crece, sobre todo por los inmigrantes. Y, aunque muchos no han nacido en Suecia, las generaciones posteriores están renovando la Iglesia.
Silvina Pérez, narra la visita que Mons. Romero hizo a las oficinas del diario vaticano en 1977. En el especial también se puede encontrar un artículo resumen de la Carta pastoral del Arzobispo de San Salvador, Mons. José Luis Escobar Alas, titulada “Ustedes también darán testimonio, porque han estado conmigo desde el principio”. El artículo resumen es un escrito sobre la importancia de los mártires en este país hecha por Rocío Lancho, entre otros artículos. En mayo de este año Silvina Pérez anunció la edición de LOR para Panamá y América Central, que fue lanzada en julio.
Por su parte, el Arzobispo de Panamá, Mons. José Domingo Ulloa, ha escrito el artículo “Una Iglesia martirial”, mientras que el director de LOR, el italiano Giovanni Maria Vian, escribió “El Obispo y el Papa”, en el que analiza la relación del Beato Romero con el papa Pablo VI.
Esta nueva edición es coordinada entre el Vaticano y la presidencia de la Conferencia Episcopal de Panamá.
La jefa de la edición española de LOR,
(Cf. Aciprensa.com 13 ago. 2017)
ciudades de Bogotá, Villavicencio, Medellín y Cartagena. Así lo dio a conocer la Santa Sede y el Comité Ejecutivo para la visita del Santo Padre.
El primer saludo de Francisco a los colombianos tendrá lugar el 7 de septiembre a las 9 a.m. en la Plaza de Armas de la Casa de Nariño. Luego tendrá una reunión con el Presidente Juan Manuel Santos. Ese mismo día dará su bendición a los fieles desde el Palacio Cardenalicio, donde también se encontrará con los Obispos. En la tarde se reunirá con el Comité Directivo del CELAM y finalizará su primera jornada en territorio nacional con la celebración de una Eucaristía en el Parque Simón Bolívar. El 8 de septiembre, el Santo Padre viajará a Villavicencio, donde llevará a cabo la celebración de la Santa Misa. Por la tarde presidirá el Gran Encuentro de Oración por la Reconciliación Nacional. Al final visitará el monumento Cruz de la Reconciliación. En la ciudad de Medellín, el 9 de septiembre, el Sumo Pontífice oficiará una Eucaristía en el Aeropuerto Olaya Herrera. A las 3 de la tarde se reunirá con la comunidad que reside en el Hogar San José. Sostendrá un encuentro con sacerdotes, religiosas, consagrados, seminaristas y sus familias en el Coliseo La Macarena. La agenda del Papa Francisco culminará en Cartagena el 10 de septiembre, donde hará la oración del Ángelus en el Santuario de San Pedro Claver. Previamente, llevará a cabo la Bendición de la primera piedra de las Casas para las personas sin casas de la obra Talitha Qum y más tarde visitará la casa Santuario de San Pedro Claver. El cierre de la agenda oficial en Cartagena será a las 4:30 de la tarde en Contecar, donde celebrará la Santa Misa. (Cf. Cec.org.co 23 jun. 2017)
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La Palabra de Dios para cada semana Is 56, 1. 6-7; Sal 66, 2-8; Rom 11, 13-15. 29-32; † Mt 15, 21-28 Preparado por:
Pbro. y Dr. Luis Alonso Coto
Domingo 20 de agosto de 2017 • Vigésimo domingo del Tiempo Ordinario • Ciclo “A” • Año impar
“¡Mujer, qué grande es tu fe! ¡Que se cumpla tu deseo!” Dios se revela como fuente de vida para todas las gentes. La frase “Mujer, qué grande es tu fe” es una de las escenas más sorprendentes de la vida del Maestro, sus discípulos le contemplan ahora en una tierra extranjera, poco agradable para el recuerdo de Israel. A ello se agregará un milagro en favor de una mujer. Prácticamente, los dos aspectos (don gratuito-exigencia de vida) de la 1ª lectura, se ofrecen en el mensaje del Evangelio, lo que diremos a continuación.
sus gritos. Cuando hacemos algo para que no nos molesten nos sentimos mal. Cuando hay un enfermo en la casa que lleva mucho tiempo de enfermedad, ya nos cansamos un poco de él, uno se cansa, se agota y reacciona por cansancio o maltratando, o como los apóstoles, para que no lo molesten.
Algunas ideas clave del texto † Jesús inicia su diálogo con aquella mujer rechazándola en su calidad de extranjera que no conoce el rostro de Dios. Su actitud no debe de extrañar a primera vista, pues en el misterio de su Encarnación, él ha querido compartir inclusive el modo de pensar de la cultura de su tiempo (vv. 21-24). La mujer tiene una hija enferma y comienza a gritar: “¡Señor, hijo de David, ten piedad de mí!”. Y las palabras que dice son desgarradoras porque uno se pone a mirar dentro de ella y ve reflejada la situación de todo aquel que no encuentra solución cuando tiene alguna dificultad. “Mi hija está terriblemente atormentada por un demonio”. Terriblemente atormentada, es como un superlativo para decirle que esto es verdaderamente fuera de lo común, realmente está sufriendo muchísimo, está muy, pero muy mal y ya no sabe qué hacer. Y si uno se pregunta cuál fue la respuesta de Jesús, fue el más absoluto silencio, no dijo nada. Él iba caminando y la mujer venía atrás gritándole y Él se quedó callado y siguió caminando como si nadie le hubiese dicho nada, como si nadie le hubiere gritado, como si nadie le hubiese pedido un milagro. † Cómo será, que los mismos discípulos, que evitaban que los niños se acerquen a Jesús para que no lo molesten, vienen y le dicen: “Maestro, atiéndela porque nos persigue con sus gritos”. Ellos interceden por esta mujer para que Jesús la atienda, pero no interceden porque les duele la situación de ella, sino porque los persigue con
† Pero la respuesta de Jesús es todavía más dura aún, no es que no la escuchó, sino que no quiso escuchar: “Yo he sido enviado solamente a las ovejas perdidas de Israel”. Solamente a los que están en Israel, los judíos, los demás no me interesan, si sufren, si les va mal, si tienen problemas, lo siento por ellos. Jesús todavía no se había abierto al mensaje para todos, un mensaje universal. Y Mateo tiene dos envíos de los apóstoles mostrando esto: primero cuando los manda a evangelizar solamente a la casa de Israel, capítulo 10; y el segundo, cuando Jesús ya ha resucitado y los envía a bautizar y evangelizar a todo el mundo, capítulo 28. † Ante la actitud de fe insistente de la mujer, Jesús abre la abundancia del don de la vida. Lo hace concretamente devolviendo la libertad del demonio a la joven enferma, pero sobre todo dejando abierta la puerta para todo aquel que crea (vv. 25-28). La enseñanza aquí es doble. Hay una sola condición que se pide a todos para tener acceso al Reino y sus bendiciones: creer en Aquel que Dios ha enviado, y actuar en consecuencia con la fe en Cristo. Este tema aparecerá luego en otros momentos del Evangelio de San Mateo.
Lecturas de la Semana
• Del 21 al 26 de agosto de 2017 • Lunes 21: Jue 2, 11-19; Sal 105, 34-44; † Mt 19, 16-22 Martes 22: Jue 6, 11-24a; Sal 84, 9. 11-14; † Mt 19, 23-30 Is 9, 1-3. 5-6; Sal 112; † Lc 1, 26-38 (Memoria obligatoria) Miércoles 23: Jue 9, 6-15; Sal 20, 2-7; † Mt 20, 1-16 Jueves 24: Ap 21, 9b-14; Sal 144, 10-13. 17-18; † Jn 1, 45-51 Viernes 25: Rut 1, 1. 3-6. 14b-16. 22; Sal 145, 5-10; † Mt 22, 34-40 Sábado 26: Rut 2, 1-3. 8-11 – 4, 13-17; Sal 127, 1-5; † Mt 23, 1-12
† En este proceso, Jesús fue abriendo su corazón a todos aquellos que también eran paganos, a todos aquellos que no compartían la fe del pueblo de Israel. Pero, por ahora, está cerrado y no quiere atender a los demás. Y mientras tanto la mujer va y se pone delante de Él, se postra, se tira en el suelo con la cabeza baja y le dice: “¡Señor, socórreme!”. Ya no hay palabras para explicar lo que sufre, ya no hay palabras para decir lo que siente. Ahora es solamente: ¡Ayúdame! Y Jesús que le dice: “No puedo darte el pan de los hijos para que coman los perritos”. Casi la insulta, le está diciendo que no es digna de mirarla, que Él no la va a atender y que no corresponde que Él la atienda, que se vaya a buscar a otro lado la solución para su vida. Y de la misma manera y con la misma inteligencia, ella le dice: “Sin embargo, Señor, los perritos comen las migas que caen de la mesa de sus dueños”. Le está diciendo, casi con ironía: “Los milagros que no te aceptan los judíos, en la fe que ellos no tienen, la tengo yo. Ayúdame a mí, lo necesito, dame una limosna, dame una migaja”. Y Jesús, sorprendido, le dice: “¡Mujer, qué grande es tu fe! ¡Que se cumpla tu deseo!”. † Muchos piden y creen que porque han pedido cinco minutos ya está, ya consiguieron; y cuando no se da lo que ellos piden, o rechazan a Dios o se cambian de religión, sin darse cuenta que la clave no está en irse a otro lado, sino en insistir, seguir luchando, perseverar, poner todos los medios, ser humilde y constante en la oración.
Algunas preguntas para la meditación • ¿Compartimos la apertura con que el plan de Dios se introduce en el mundo de todos los hombres? ¿O son más fuertes los muros que hemos creado al interno de la comunidad o con los de fuera, y que nos impiden hacer más discípulos de Cristo? • Nuestra actitud ante el paso de Cristo ¿Es semejante al de aquella mujer? (paciencia, humildad, perseverancia). Como creyentes, ¿cómo nos comportamos con los extranjeros o no cristianos?
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IGLESIA LOCAL
La peregrinación “Caminando hacia la Cuna del Profeta” partió de Catedral de San Salvador el 11 de agosto. Acompañados de nuestros pastores cientos de personas recorrieron a pie, 98 de los 157 kilómetros que supone el “Camino de Monseñor Romero”, en una caminata que se espera poder realizar anualmente a iniciativa de l a C o n f e re n c i a Episcopal de E l S a l v a d o r. L a peregrinación hecha en tres etapas concluyó con una acción de gracias, el día 13, en la ciudad natal del beato Oscar Romero, Ciudad Barrios. La Eucaristía fue presidida por el Enviado Especial de Su Santidad, Card. Ricardo Ezzati, SDB