S • E • M • A • N • A • R • I • O Año LXVII Nº 6077
ÓRGANO OFICIOSO DEL ARZOBISPADO DE SAN SALVADOR. 20 de octubre de 2019
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20 de octubre de 2019 Documento
“…Hoy
lo consideran, dentro y fuera de El Salvador como un Maestro, un pastor, una lámpara”
– Homilía del señor Nuncio Apostólico, Su Excelencia Santo Rocco Gangemi. Celebración del I Aniversario de Canonización de Mons. Oscar Arnulfo Romero Galdámez. Catedral de San Salvador. 14 de octubre de 2019 – Excelentísimo Mons. José Luis Escobar, Excelentísimos Obispos de El Salvador aquí presentes, Un recuerdo a nuestro querido Señor Cardenal, que con su recuerdo espiritual está presente en medio de nosotros, Queridos Hermanos en el Sacerdocio, Religiosos, Religiosas, Seminaristas, fieles todos: Podrán matar al Profeta, Pero su voz de justicia no, Y le impondrán el silencio, ¡Pero la historia no callará! Ha pasado un año de aquel memorable día de la canonización de Mons. Oscar Arnulfo Romero y en esta tarde, el mismo Espíritu que con fuerza ha soplado en una soleada Plaza San Pedro, hoy nos convoca de nuevo para rezar, para dar gracias, para presentar nuestras almas en ofrenda al Señor junto con la ofrenda de la vida de nuestro Mártir y de la vida del Primero de los Mártires, que dentro de poco de nuevo se hace nuestra bebida y alimento para el sustento de nuestro itinerario cristiano. “No hagan mártires”, he leído una vez en un periódico, decía un jerarca de un país totalitarista; no hagan mártires, porque los mártires son más incómodos de muertos que de vivos. y yo añadiría, mientras tanto que están vivos podemos callar su voz; podemos relegarlos en el silencio más absoluto y en el olvido más recóndito, pero, en cuanto muertos, salen de nuestro alcance y de nuestras manos; no hay cómo callarlos; no podremos nunca más obligarlos al silencio; su voz se hace grito, su grito se transforma en llamado y, como aguas caudalosas rompen nuestra sordera, nos obligan a escucharlo y hacerle caso. Hoy, los que estamos aquí, mejor dicho ustedes más que yo; sí exactamente ustedes, y entre ustedes los que pueden decir yo estaba cuando la voz del Profeta se levantaba “para cuidar en nombre de Dios a los que le habían sido confiado; velaba por ellos y buscaba que ninguno de ellos se perdiera”; yo al revés, no puedo negar sentirme un poco incómodo tomando la palabra durante esta santa celebración eucarística; mirando a alguno de ustedes, me siento como un enano que marcha sobre las espaldas de unos gigantes o, para utilizar una frase de San Pablo quisiera decir: “Y en último término se me apareció también a mí, que soy como un aborto” (1Cor 15,8). Si pensamos en los acontecimientos que han acompañado la vida de nuestro Santo; si reflexionamos sobre las múltiples trampas y los tantos engaños que el demonio ha puesto en el camino de la canonización ¿cómo no podríamos nosotros también exclamar que todo es gracia? ¿Cómo no podríamos hacer nuestras las palabras del apóstol San Pablo a los Romanos: “Si Dios está en nuestro favor, ¿Quién estará en contra nuestra?” Sin duda, hoy es muy fácil hacer estas consideraciones, pero cuánto tuvo que ser difícil vivirla en la cotidianidad. Estar callados no sólo por miedo a la persecución que hubiera podido venir desde afuera de la Iglesia, sino también por las desconfianzas, las sospechas y la marginalización que ha venido de dentro la misma institución que hubiera tenido que defender a un hombre y su misión profética. Mirando hoy con los ojos de la fe, de una fe que nos hace pedir perdón y abrazar hasta quien suponemos
no tenga las manos totalmente limpias, hoy nos sentimos alentados y hasta purificados por la palabra magisterial del Papa, que hace un año ha proclamado Santo a Mons. Oscar Arnulfo Romero, liberándolo de ciertas etiquetas que una lectura distorsionada y marginal de su vida le había dado –muchos o todos ustedes lo saben bien– que “hubo equivocación hasta en la comprensión de la doctrina social de la Iglesia así que la defensa de los derechos humanos fue interpretada como si fuera una opción política más que evangélica”. A pesar que, dentro y fuera de El Salvador hubo personalidades de larga visión, como el Card. Achille Silvestrini, quien algunos años después de la muerte de nuestro santo, siempre lo había considerado un mártir; también al conocer la noticia del asesinato de los jesuitas de la UCA, no tuvo escrúpulo al gritar que había que declararlos mártires enseguida, sin esperar 50 años, sin caer en las dudas o en las largas disquisiciones que habían acompañado la muerte de Mons. Romero. El Papa Francisco no vaciló ni fue indeciso a dar este paso, al declarar con fuerza que “las almas de los justos están en las manos de Dios… Los insensatos pensaban que los justos habían muerto… pues Dios los puso a prueba y los halló digno de si”. Proclamándolo como uno de los santos de la Iglesia universal, lo señala como el santo de todos, el santo de toda la Iglesia; lo siento por los salvadoreños que de esta manera están llamados a hacer un sacrificio más para no considerar al primer santo de su tierra como un “tesoro celoso” y aceptar compartirlo con tantos que hoy lo consideran, dentro y fuera de El Salvador como un Maestro, un pastor, una lámpara. Con este término “lámpara” me gusta resumir la vida de nuestro santo, y me ha seducido desde el primer momento que me he acercado más en la comprensión de nuestro mártir. Lámpara, una palabra que he pronunciado por primera vez después de la misa en el “Hospitalito” el 15 de octubre de 2018. A nuestro santo, lo pongo en analogía con la hermosa expresión que encontramos en el Evangelio de Juan y que el mismo Jesús se la atribuye a Juan el Bautista: “Él fue la lámpara que arde y alumbra y vosotros quisistéis recrearos a la hora con su luz” (Jn 5,35). Ésta, me parece la definición más encantadora que se le puede dar al arzobispo Romero. ¡No una bandera, sino una lámpara! Para ver la bandera necesitamos levantar la cabeza; la luz, al revés, no necesita un movimiento: nos envuelve incluso si no la miramos; podemos cerrar los ojos, es cierto, pero no por eso la apagamos. Y poniéndonos en el cauce de los antiguos sabios y pensadores espirituales podríamos añadir: ¡ahora la verdad está desnuda! Ahí sobre la cruz del martirio la contemplamos y es una respuesta contundente, a quien tal vez por pusilanimidad o hipocresía puede hoy, como ayer, preguntar: ¿qué es la verdad? El esfuerzo de Mons. Romero, cuando se lee su biografía, no fue otro que el esfuerzo de un Pastor que busca la verdad a la luz de la enseñanza evangélica, así que su verdad no está hecha por conquistas científicas o
por un conjunto de adquisiciones eruditas, sino por una familiaridad orante y adorante con Aquel que dijo “Yo soy la verdad”, por esto estaba siendo visto con enojo y con resentimiento. Bien lo había entendido L’Osservatore Romano, en su edición semanal de la Santa Sede en lengua española, del 6 de febrero de 2015, que al reportar la noticia del reconocimiento del martirio por parte del Papa, “había... un clima de persecución contra un pastor que, como consecuencia de la inspiración evangélica, de los documentos del Vaticano II, de Medellín, había elegido vivir para los pobres. No había motivos ideológicos de cercanía o pensamientos políticos particulares” (3 de febrero de 2015 p.10). Desde aquel momento ustedes los salvadoreños han sido llamados a hacer otro sacrificio grande al perder una vez más a Mons. Romero, pero esta vez es un sacrificio que les debe llenar de orgullo, porque el Profeta de una pequeña porción de Iglesia se ha vuelto como “un don extraordinario para toda la Iglesia… no sólo para los católicos, sino también para todos los cristianos y para todos los hombres de buena voluntad” (p. 10), como lo expresó el Postulador de la Causa romana. Esta universalidad de Mons. Romero fue sin duda también la intención del Papa Francisco, que la pone en relieve en la Carta Apostólica enviada a S. E. Mons. José Luis Escobar Alas: “En este día de fiesta para la Nación Salvadoreña, y también para los países hermanos latinoamericanos... ‒y añade‒ …. La fe en Jesucristo, cuando se entiende bien y se asume hasta sus últimas consecuencias, genera comunidades artífices de paz y de solidaridad. A esto es a lo que está llamada hoy la Iglesia en El Salvador, en América y en mundo entero” (OR, viernes 29 de mayo de 2015, p. 5). ¡Miren qué maravilla este documento pontificio!, nos parece que asistimos a un “crescendo” en una sinfonía musical. Se empieza por notas bajas, con poca instrumentación, hasta alcanzar el máximo del sonido, diría hasta despertar a los que se habían quedado dormidos. Está muy claro el mensaje: ¡no se puede enmudecer la santidad! Me vuelve a la mente una maravillosa frase del Deuteronomio: “no pondrás bozal al buey que trilla” (29,9), que interpretado a la luz de esta palabra de Papa Francisco se podría leer: ¡no se puede amarrar la gracia de Dios! A esta altura es casi espontáneo preguntarnos el por qué de esta universalidad del mensaje de un Obispo que podríamos definir de periferia, la respuesta nos la ofrece el mismo Papa Francisco: “San Oscar Romero supo encarnar con perfección la imagen del buen Pastor que da la vida por sus ovejas. Por ello, y ahora mucho más desde su canonización, pueden encontrar en él un «ejemplo y un estímulo» en el ministerio que les ha sido confiado. Ejemplo de predilección por los más necesitados de la misericordia de Dios. Estímulo para testimoniar el amor de Cristo y la solicitud por la Iglesia, sabiendo coordinar la acción de cada uno de sus miembros y colaborando con las demás Iglesias particulares con afecto colegial…”. (OR, 19 octubre 2018, p. 5)
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Primer aniversario de Canonización de San Oscar Romero En las vísperas del primer aniversario de canonización de San Oscar Romero, el día 13 de octubre se inició las actividades con un concierto musical y una Santa Misa en la Cripta de Catedral Metropolitana, presidida por el Arzobispo de San Salvador, Mons. José Luis Escobar Alas.
Mons. Santo Rocco Gangemi, Nuncio Apostólico (centro) junto a Obispos de la Conferencia Episcopal, durante la Misa del 1º aniversario de Canonización de San Oscar Romero
El día 14 de octubre continuaron las celebraciones, en Catedral Metropolitana de San Salvador, con una Santa Eucaristía presidida por el señor Nuncio Apostólico, Mons. Santo Rocco Gangemi, y concelebrada por los señores Obispos de la Conferencia Episcopal de El Salvador, junto a sacerdotes invitados. De la Eucaristía participó Cecilia de Rivas y su esposo Alejandro Rivas, quienes obtuvieron un milagro por intercesión de San Oscar Romero, hecho autenticado por el Vaticano y que sirvió para que el Santo Padre Francisco declarara que se incluyera su nombre en el libro de los santos. Pbro. Juan Carlos Cuéllar (a la izq, última fila), junto a Mons. José Luis Escobar (al centro) posan junto a la delegación de peregrinos provenientes de parroquia Santo Tomás, de Los Angeles
En las vísperas del primer aniversario de canonización Mons. José Luis Escobar (al centro), Obispo de San Salvador, presidió la Santa Misa en la cripta de San Oscar Romero
Nuncio Apostólico visita Centro Pastoral de Promoción Humana San Oscar Romero En el marco del primer aniversario de la Canonización de San Oscar Romero (14 de octubre) y la Fiesta de la Virgen de los Remedios (10 de octubre), S.E. Mons. Santo Rocco Gangemi, Nuncio Apostólico de Su Santidad en El Salvador [En la imagen al centro ] , visitó el Centro Pastoral de Promoción Humana “San Oscar Romero”, donde presidió la Santa Misa, que fue concelebrada con el Pbro. Edgar Winter, párroco [A la der. en la imagen], y el vicario parroquial, Pbro. Javier Mela.
Fiestas en parroquia San Daniel Comboni El 10 de octubre se conmemoraron las fiestas en honor a San Daniel Comboni, hijo de campesinos pobres, que llegó a ser el primer Obispo de África Central y uno de los más grandes misioneros de la historia de la Iglesia. La vida de Comboni nos muestra que, cuando Dios interviene y encuentra a una persona generosa y disponible, se realizan grandes cosas. La parroquia ubicada en Cimas de San Bartolo, Ilopango, está dedicada a su memoria, por lo que para celebrar su fiesta patronal se invitó a Mons. Santo Rocco Gangemi, Nuncio Apostólico en nuestro país, para presidir una acción de gracias. De la Misa también participó concelebrando el Pbro. Fernando Madaschi, MCCJ, párroco, entre otros sacerdotes invitados.
El señor Nuncio dio gracias a Dios por compartir la Palabra y el Pan Eucarístico, decía que nadie puede quedarse al margen de la gratitud, además que manifestó su alegría al encontrar una comunidad que trabaja por el engrandecimiento del Reino de Dios, impulsados por el espíritu de San Oscar Romero. Continúo su homilía resaltando la figura de la Virgen Santísima bajo la advocación de los Remedios que se venera en esta comunidad, para podamos proclamar las grandezas del Señor, que podamos escuchar las palabras de Jesús: “levántate, tu fe te ha salvado”. Dentro de la celebración Eucarística bendijo un Sagrario donado para esta comunidad. Al finalizar. El señor Nuncio compartió con los feligreses y después degustó un almuerzo con los sacerdotes, religiosas y representantes del consejo parroquial.
Procesión de entrada a la Misa patronal de la Parroquia San Daniel Comboni, en Ilopango. Presidió Mons. Santo Rocco Gangemi (der.)
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VOZ DEL PAPA
Un cambio de mentalidad fundamental en los apóstoles
Francisco explicó durante la audiencia general del 16 de octubre, cómo Dios generó “un cambio de mentalidad” en Pedro para acoger “la universalidad de la salvación”.
El Papa recordó cómo este hecho generó desconcierto de la primera comunidad cristiana. Sin embargo el paso dado por Pedro fue fundamental para entender que las personas no son “puras” o “impuras” por defecto, sino que depende de lo que salga “de dentro, corazón”. Pedro, después de ser testigo de la efusión del Espíritu Santo sobre el colegio apostólico, presencia ahora cómo ese mismo Espíritu se derrama sobre los paganos. Dios, para suscitar en Pedro un cambio de mentalidad, le presenta
“Transparencia” Papa pidió a la en la crisis siria Virgen por Ecuador El Papa lanzó un fuerte llamamiento a la Comunidad Internacional. Pidió transparencia y una rápida resolución de la crisis en el norte de Siria, una zona que está siendo atacada por tropas turcas. “A todos los actores implicados y también a la Comunidad Internacional, por favor, renuevo mi llamamiento a comprometerse (…) con transparencia en el camino del diálogo”.
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EN EL MUNDO
(Cf. Romereports.com 14 oct. 2019)
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un lienzo lleno de animales considerados impuros para los judíos, haciéndole entender que todo lo que Dios ha purificado no debe ser ya considerado profano. Es necesario mirar la intención del corazón, porque sólo de dentro, del corazón, nace la impureza. De ese modo, Pedro acepta ir a predicar en casa de Cornelio, un oficial romano temeroso de Dios, y el Señor confirma sus palabras derramando sobre ellos el Espíritu. Pidamos hoy la gracia de dejarnos sorprender por Dios y de no ser obstáculos a su creatividad, reconociendo y favoreciendo los caminos siempre nuevos por los que Dios derrama su Espíritu en el mundo, para atraer a todos hacia Él. (Cf. Romereports.com 16 oct. 2019)
El Papa en el ángelus del domingo encomendó a la Virgen a Ecuador, para que Ella ponga paz y acompañe sobre todo a los indígenas.
“Encoméndemos a nuestra Madre a los hermanos ecuatorianos que han sido muertos en estos días, heridos, perseguidos, presos, que Ella ponga paz y los acompañe en este momento de tanto sufrimiento, sobre todo entre los indígenas del Ecuador”. (Cf. Vaticannews.va 14 oct. 2019)
50,000 fieles participaron en la canonización de nuevos Santos
En la mañana del 13 de octubre de 2019, ha comenzado la ceremonia, con la procesión de entrada de los cardenales y patriarcas, obispos y sacerdotes que han participado en la Eucaristía y el rito de canonización.
El rito de la canonización se ha abierto con el himno Veni creator y con las palabras del cardenal Angelo Becciu, acompañado de los postuladores de las causas, con las que ha presentado a los cinco beatos: un cardenal, tres religiosas consagradas y una laica. Acompañados del canto del Iubilate Deo, las personas curadas por los milagros de los nuevos santo han depositado las reliquias a los pies de la imagen de la Virgen, junto al altar, y el Pontífice las ha incensado. (Cf. Zenit.org 13 oct. 2019)
Bolivia Lanzan rosario digital para rezar Obispos demandan unas “elecciones para democracia auténtica” por paz en mundo claras “Vamos a estas elecciones en un clima del sistema democrático y se basan en el En distintas ocasiones el Papa Francisco ha pedido a los jóvenes que recen por la paz en el mundo, sin embargo, ante los intentos que ha realizado la Iglesia para regresar a la fe a la juventud estos no han sido suficientes, por lo que ahora el Vaticano buscó la manera de darles un empujón en la oración y sacó a la venta el Click To Pray eRosary, en forma de brazalete, el cual se conecta con el móvil por medio de una aplicación dedicada al mismo, y que además ofrece contenido exclusivo sobre la oración del Rosario.
de desconfianza por temor a una posible manipulación del proceso electoral”, declaran los obispos de Bolivia. Estas palabras se incluyen en un comunicado titulado “Elecciones claras para una democracia auténtica”, difundido por la Conferencia Episcopal Boliviana ante las próximas elecciones, que se celebran este día, 20 de octubre.
respeto al voto individual y, por tanto, “deben ser realizadas de manera transparente y bajo el estricto control de los observadores internacionales, los jurados electorales, los partidos políticos y los propios votantes”.
En ellas se elegirá al presidente, al vicepresidente, a 130 diputados y a 36 senadores del quinquenio 2020-2025, indica la agencia de noticias Fides.
Por último, subrayan que “la importancia trascendental de este momento nos impulsa a orar al Dios de la vida y de la verdad, para que todos los ciudadanos y autoridades, a través de elecciones transparentes y pacíficas, contribuyan a construir una Bolivia más democrática y un verdadero hogar para todos”.
Aclararon que las elecciones son la base
(Cf Es.zenit.otg 15 oct. 2019)
Crisis en Honduras
Los obispos: necesario trabajar por el bien común
Este “rosario inteligente” elaborado con forma de cruz tendrá un costo de 99 euros, es decir un aproximado de US $109, y saldrá a la venta a finales de este mes de octubre. (Cf. Ansalatina.com 15 oct. 2019)
La tensión política y social sigue siendo alta en Honduras. En un mensaje para el Mes Misionero Extraordinario, los obispos exhortan a los fieles y a todos los ciudadanos a no ceder a la resignación y a trabajar juntos por el bien común y la paz, porque el cambio es posible. Ellos como pastores no pueden “permanecer indiferentes” ante la situación del país. A partir del narcotráfico que “ha logrado en nuestro
país, podría haberse alcanzado sin la colusión de los órganos que, por razón de su ser, estaban llamados a defender la vida y proporcionar seguridad a todos”, escriben. La exhortación requiere “una seria revisión de los valores (…) y de los actores que tengan la mejor disponibilidad para servir con transparencia, fidelidad en el cumplimiento de la ley, luchadores por establecer la justicia”. (Cf. Vaticannews.va 15 oct. 2019)
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ditorial ¿Cómo hablar de Dios hoy? El anuncio del Evangelio no tiene nada que ver con las seducciones retóricas de las técnicas de comunicación. “En el principio era el Verbo”, dice san Juan. Verbo, Palabra. Hecho a imagen de Dios, es precisamente la palabra lo más específico del hombre. La palabra es lo que nos distingue de los animales. Hay un infinito entre la Palabra divina y la palabra humana, pero ese infinito no rompe la relación: la palabra humana, con todo su deterioro e imperfecciones a causa del pecado original, no cesa de beber en su fuente original y silenciosa que es la Palabra divina, origen de todas las cosas. Por eso, hablar de la palabra humana es remontar el curso que nos lleva a la fuente: a Dios. Y hablar de Dios es reflejar la Palabra que nos da la existencia. Por eso, hablar de Dios es un acto de amor a la persona a la que hablamos: porque es reflejar la Palabra que le da la existencia y le mantiene en ella, y por tanto desea infinitamente que Él exista, que es la señal del amor. Hablar de Dios requiere humildad: la del que sabe que sus palabras son un pobre balbuceo, que no llega a explicar apenas nada de la hondura de su significado. Y la humildad del que comprende que incluso en el interlocutor más hostil hay un corazón a hechura de Dios, capaz de darle lecciones. Quien intenta hablar de Dios ha de saber que no es mejor que los demás. Dios está presente hasta en el más anticristiano: si no con su presencia de gracia, sí al menos con su presencia de creación, de inmensidad. Si hablo de Dios a quien se considera mi enemigo debo ser consciente de que Dios se aplica a crear a ese enemigo con amor.
Desde luego, eso no garantiza una eficiencia irresistible, porque la Palabra de Dios, que penetra hasta la médula puede no ser aceptada si encuentra un alma soberbia. Pero no le hablaría con propiedad de Dios si no tuviera en cuenta el hecho de que Dios le ama infinitamente. Para el cristiano, el anuncio es una cuestión de ser, y no de hacer. No se trata de hacer evangelización, sino de ser (verdaderamente) cristiano. “Ay de mí, si no evangelizara”, dice san Pablo. Se juega la condenación. Hablar de Dios tiene una urgencia soteriológica (de salvación), pero también tiene un fundamento antropológico, porque separar la palabra y el ser sería inhumano: el hombre es un animal de palabra, y no puede no hablar de lo que le es más sustancial. Lo esencial es ser, con Cristo, una palabra viviente y entregada al otro, ser una palabra de Dios, más que tener una palabra sobre Dios. Ser, cada uno, una respuesta (que no comprendemos del todo, pero somos), siguiendo al Verbo en su camino de Cruz y alegría. Porque no hablamos de Dios para promocionar valores (aunque por supuesto los promocionamos: Dios es la Justicia, la Bondad, la Belleza, el Bien, la Misericordia, el Perdón, la Alegría…) sino ante todo para facilitar el encuentro con una Persona. El objetivo no es seducir (que significa atraer, conducir hacia sí) sino hacer volverse hacia ese Otro, que es el Mismo que nos hace balbucear. La conversión es siempre un encuentro libre del que oye con Cristo. Se trata pues, “sencillamente”, de pedírselo a Él en la oración e intentar ser una respuesta viva que se entrega.
Por Pbro. Carlos Chavarría, Subdirector de Semanario Orientación
El asteroide que pasó cerca de la tierra, volverá en 2021 Si un asteroide gigantesco chocara con la tierra no tendríamos tiempo ni de darnos cuenta. Nos pasaría la de los dinosaurios y la vida humana se Sigfrido Munés tioziggi@hotmail.com extinguiría en un zas. Grandes ciudades, enormes campos de cultivo, pozos petroleros y otros signos de riqueza material pasarían a ser ruinas y con ellas se extinguirían los poderes del zar de Rusia, del emperador chino, de la reina y del magnate, lo mismo que los oropeles de los pequeños líderes del tercer mundo. Vanidad de vanidades. Calma. Según los científicos de la NASA y sus colegas europeos no existe posibilidad que tal desastre ocurra a breve plazo. Pero no cantemos victoria, porque algo igualmente grave está ocurriendo, nada más que la vida en el planeta se extingue no de una vez, sino poco a poco, al ritmo en que se derriten los cascos
DIRECTORIO
Pbro. Simeón Reyes DIRECTOR
polares y el mar sube sus niveles. Cualquier cosa que diga el presidente Trump tiene un rápido eco universal; sin embargo, cuando dice que no existe el, calentamiento global no podemos creerle porque lo estamos sintiendo lo mismo en El Salvador que en Groenlandia. Según el mandatario norteamericano eso del calentamiento es un invento de los mismos que inventaron la pólvora y las pastas comestibles: los chinos. Este año el verano desesperó a los europeos, a punto que muchos de ellos desafiaron los reglamentos y se bañaron en las fuentes públicas. En las plazas céntricas de San Salvador también hemos visto a los niños bañarse alegremente en las fuentes luminosas jugando con los colores y mitigando el calor casi por instinto. Y eso que los pipiles y sus descendientes somos tropicales y estamos acostumbrados a los calores. Pero, dejando a un lado lo pintoresco de las escenas provocadas por los intensos calores, es necesario que los líderes de este mundo piensen que las consecuencias del cambio climático van produciendo mutaciones severas en el ritmo vital de
Pbro. Carlos Chavarría SUBDIRECTOR
Roger Herrera EDITOR EN JEFE
la naturaleza y que trae consigo consecuencias de dimensiones imprevisibles en la agricultura y la pesca que nos brindan alimentos y en los bosques que nos dan oxígeno y vida. Lo que está pasando equivale al choque de docenas de asteroides con nuestra amada Tierra y afectará a los descendientes de pobres y ricos, incluidos los de los líderes que todavía pueden hacer algo para evitarlo. Dios nos dio la Tierra como hábitat y dispuso todo para preservar la vida de la naturaleza, incluida la nuestra. Los seres humanos en cambio estamos empeñados en destruir el medio ambiente, unos más otros menos, pero ya es hora de recapacitar e iniciar una cruzada para la salvación del planeta y la humanidad. Cada uno de nosotros puede contribuir a descontaminar, pero corresponde a los organismos internacionales y los gobiernos liderar y facilitar las acciones en esta dirección. Unamos nuestras oraciones para pedir al Señor la preservación de la vida en el hermoso planeta azul. En Dios confiamos.
Jacqueline Arriaza
Roger Herrera
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REALIDAD NACIONAL
Comunicado La parroquia de San José de la Montaña, en 1992 fundó una escuela parroquial en sus instalaciones, con el paso del tiempo cada vez la población estudiantil es menor, el Párroco, los maestros y padres de familia han venido buscando en los últimos años la forma de salir adelante de una situación muy difícil a causa de tan pocos alumnos. Este año los alumnos son 188 en total, distribuidos en 9 grados, del 1º al 9º, atendidos por 16 maestros. La iglesia pensó en cerrarla para el siguiente año 2020, pero los padres de familia pidieron que al menos funcione el próximo año para tener tiempo de ubicar con calma a sus hijos en otros centros educativos. En el arzobispado compartimos totalmente la preocupación de los padres de familia y atendiendo su petición, hemos intervenido para que no se cierre el próximo año y hemos creado una comisión para el caso, presidida por Vicario de Educación, el Padre Guadalupe Aguilar e integrada por el Párroco de San José de la Montana y el Padre vicario parroquial, para que estudien el caso juntamente con los padres de familia y los maestros y podamos tomar las decisiones que más favorezcan a los alumnos y alumnas de la escuela. Por otra parte, aprovecho la ocasión para invitar a todos a celebrar el día de mañana 14 de octubre, el Primer Aniversario de la Canonización de Monseñor Oscar Arnulfo Romero. Por la mañana en cada parroquia la santa Misa tendrá esa intención, agradecer a Dios por darnos tan gran Santo y a las 5.00 p.m. habrá una solemne eucaristía en esta catedral, presidida por el Señor Nuncio Apostólico, Mons. Santo Rocco Gangemi y concelebrada por nuestra Conferencia Episcopal y todos los sacerdotes presentes; y el día de hoy, en la víspera de dicho aniversario, en la Cripta de esta Catedral, desde las 3.00 p.m. habrá un concierto de música en honor a San Oscar Romero y se concluirá con la santa Misa a las 6.00 p.m. Todos, laicos y sacerdotes estamos invitados a celebrar con gozo tan gran acontecimiento, el Primer Aniversario de la Canonización de nuestro querido Monseñor Romero. Muchas gracias por su atención, que Dios nos bendiga a todos. San Salvador, 13 de octubre de 2019
Diálogo con la prensa P. 1.- Ingrid Castellanos, de El Noticiero, Canal 6. Quisiera conocer su opinión con respecto a las declaraciones del testigo criteriado con nombre clave Noé, del caso Cuscatlán, donde señaló a los partidos FMLN y ARENA de haberles entregado dinero a las pandillas. Incluso dice que el FMLN si les pagó $15 millones, cuando ganaron las elecciones presidenciales, donde participó Sánchez Cerén, y se habla incluso también de que ARENA les había dado $69 millones, para que les ayudará a tener más diputados dentro de la Asamblea Legislativa.
R/ En verdad no conozco a fondo la situación, no conozco los detalles, solamente he recibido la información que ustedes nos presentan sobre el caso, las notas que ustedes han publicado, pero pensaría, como cualquiera de la población, que es un tema preocupante y que las instituciones del Estado tienen la palabra para hacer la investigación que corresponde y que se haga justicia. No voy a pronunciarme, ni a favor ni en contra, porque desconozco el caso, además creo que todavía no se ha hecho la investigación a fondo, pero es bueno que se haga y que la población conozca la verdad de los hechos y que también se aplique la justicia que corresponde; independientemente que si es verdad o no, será la investigación la que confirme los hechos. Pero ojalá que se pueda ahondar en el fenómeno y se pueda establecer justicia. P. 2.- Daniel Pérez, de Diario Uno. Yo quiero consultarle sobre el caso del señor Molina Nieto, esta semana hubo una audiencia y la última supuesta víctima que lo había denunciado a él, se retractó, entonces en la audiencia el señor Molina Nieto dijo que había un documento donde las dos primeras víctimas se habían retractado de los que habían dicho y que ese documento, también está firmado por usted. Uno quiero confirmar si es cierto que existe ese documento y dos qué va pasar con el padre, al final ¿No se tuvo un proceso donde se pudo defender o cómo fue eso? R/ Contesto por lo último, el proceso se llevó a cabo fue como debía llevarse, o sea con todas sus partes, se llevó bien; pero hay que decir que aquí estamos de frente a dos legislaciones: la legislación de la Iglesia y la legislación civil del Estado. Ahora bien el Tribunal que conoció el caso del padre y dictó sentencia fue el Tribunal de la Santa Sede, de la Congregación para la Doctrina de la Fe y, naturalmente, que para llegar a la conclusión deben tener toda la información pertinente y escuchar a ambas partes. Y eso se hizo. Nosotros, o sea el Tribunal de la diócesis solo reúne la información y la envía en sus actas originales y son ellos los que van a determinar. En este caso se encontró culpable tristemente al sacerdote, y se dimitió del sacerdocio. Él no estuvo conforme con esa determinación y es cierto que demandó a las víctimas, demandó a quienes lo habían denunciado, pero conciliaron con las primeras personas que él demandó. Tengo entendido que llegaron, el abogado de él con el abogado de ellas, llegaron al acuerdo que si ellas decían que no se acordaban bien, él ya se daba por satisfecho. Lo hicieron y así terminó el proceso porque estaban siendo demandadas, enjuiciadas estas personas y pidió que estuviéramos ahí el señor Cardenal y su servidor, como testigos. Nosotros estuvimos y firmamos como testigos, pero fue una declaración de ellas a petición de él para darse por satisfecho. Y bueno tengo entendido que él presentó ese documento al Vaticano y, creo yo que fue después de esto, demandó a la otra persona que también lo había denunciado. Se ha seguido un proceso y esta vez sí me parece que llegó al final, o no sé si se interrumpió… - La víctima otra vez se retractó. R/ Sí, la víctima otra vez se retracta y eso es lo que se ha conocido. Entonces, si se retracta la víctima ¿En qué afecta al proceso que la Iglesia llevó? Pues yo no sabría darle una respuesta,
sinceramente. No sabría porque nosotros solo hemos cumplido, haciendo lo que teníamos que hacer, porque nosotros estamos obligados –porque representamos la Iglesia– a atender las víctimas; y cuando la víctima llega tenemos que escucharla, por supuesto, y acogerla. Y su declaración, si vemos que hay mérito en la denuncia, iniciamos el proceso. Todas esas declaraciones van a Roma. Claro que también la otra persona va a dar también su punto de vista y sus declaraciones. Luego en actas originales, como hemos dicho, el Tribunal envía la información de ambas partes. Y como todo Tribunal hay una parte que pone la denuncia y la otra parte afectada que se defiende, por supuesto. - Después que llegan las víctimas a dar su declaración o a poner denuncia y dice que el Tribunal sigue el proceso ¿En este caso verifica o intenta verificar lo que dicen las víctimas o qué hacen? Porque en este caso, al menos yo leí ahí, que el señor Molina Nieto ni siquiera conocía de vista a la última víctima. R/ Nosotros estudiamos el caso e incluso presentan evidencia las personas y en este caso hubo evidencias que se presentaron y se enviaron a Roma. Que, si son falsas, eso ya es otra cosa, pero el proceso se perfeccionó con todo su tiempo, con todos los pasos, que tenían que hacerse. Entonces, ¿Qué puede hacer ahora el Tribunal? ¿Lo va reconsiderar? ¿No lo va tomar en cuenta? No sabríamos nosotros decirlo, porque es un Tribunal que nos excede, nosotros más bien estamos para coadyuvar la información. Todas las diócesis del mundo, mandamos la información al Tribunal de la Santa Sede y es quien dirime el caso, conoce el caso y dicta sentencia. - ¿En este caso si él quiere ser restituido al estado clerical, tendría que ir a pedirlo a Roma, ya no a ustedes a la Iglesia salvadoreña? R/ Es lo que le digo, nosotros no podemos modificar las cosas, en definitiva, ni siquiera podemos en estos casos llevar el proceso, por eso lo llevó la Santa Sede y las resoluciones del Tribunal nos exceden totalmente. - Para terminar solo una última pregunta, ¿Qué garantías hay, y tomando en cuenta este caso, de que alguien que sea inocente, no sea condenado y al revés, que alguien que sí es culpable, salga absuelto? Es decir ¿Qué garantías hay? ¿Quién atiende a las víctimas en estos casos? R/ Precisamente eso es lo que busca realizar el tribunal de la Santa Sede, el cual es un tribunal de conciencia que busca la verdad y que reúne las informaciones para luego determinar, para hacer justicia –verdadera justicia, como usted dice– de no dar una resolución en contra de la verdad, en contra de la justicia. Entonces las garantías son como en cualquier otro tribunal, por supuesto, porque tienen que conocer a fondo y llegar a la sentencia. Pero diría que en este caso hay todavía un punto a favor que son tribunales de conciencia, cómo decirle, es frente a Dios es como se trabaja. De que somos humanos, somos humanos y pudiera haber algún fallo, pero no mala intención nunca, no estoy acusando tampoco a los demás tribunales, solo estoy diciendo cómo son los tribunales de las Iglesias y este que es el máximo tribunal. (continúa en página
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20 de octubre de 2019 P. 3.- Gerardo Castro, de YSUCA. En primer lugar, hablar sobre la Ley General de Aguas, desde marzo los diputados prácticamente la han “engavetado” y cada vez que se menciona se hacen los “locos”, no responden, incluso a las organizaciones sociales se les ha vetado la entrada a la Asamblea Legislativa. Hubo un altercado con las organizaciones sociales hace quince días en donde se les sacó de la escucha de la Comisión de Medio Ambiente, ¿Cómo mira la Iglesia este atraso? Mientras la Asamblea Legislativa no discute esta ley, hay lugares donde no hay agua, las empresas siguen pues comercializando el líquido ¿Qué piensa la Iglesia? R/ Nosotros vemos el caso con máxima preocupación y cuánto no quisiéramos que a este momento estuviera ya aprobada la ley que venimos proponiendo. La Ley General de Aguas que de veras garantice el derecho humano al agua para todos los salvadoreños. Lamentamos mucho que haya estos impases y nosotros esperaríamos que la situación cambie, que se escuche al pueblo, pues somos un estado democrático; y como Iglesia vamos a seguir unidos al pueblo apoyando esta causa. Ya presentamos trescientas mil firmas el año pasado y vamos a continuar con la campaña, estamos todos los obispos unidos en esta preocupación, pero también los sacerdotes y los laicos. Y es que este es un problema, una preocupación, de toda la nación, vital. El agua es el agua, no podemos vivir sin el agua. Entonces el intento de privatizar el agua fue un golpe muy duro para el país. Yo esperaría que ya no se continúe por esa vía. De hecho hemos visto que se ha detenido, que más bien como usted dice se ha “engavetado”. Tal vez este sea un mal menor, pero no es lo que pretendemos. Lo que pretendemos es que se apruebe la Ley, que se viene proponiendo, ya de tanto tiempo y que ya se han aprobado 92 artículos en la legislatura anterior y que de repente quede esto como nada, no puede ser. Además, es el interés del pueblo. A mí sinceramente me cuesta mucho pensar que los señores diputados que han sido electos por el pueblo, para cuidar de los intereses del pueblo no puedan aprobar la ley del agua en beneficio del pueblo; me parecería que es lo más natural que ellos deberían de hacer, lo más propio, porque es propio de los funcionarios velar por los intereses del pueblo y este es un interés vital. Naturalmente el pueblo tiene derecho a exigir este beneficio, que les garantice su vida y su salud. El agua potable, para la propia vida y el saneamiento, es un derecho irrenunciable mundial, el Papa abunda en sus catequesis sobre el tema. La ONU incluso lo ha reconocido el derecho humano al agua de forma universal y entonces esto tiene que hacerse. Yo esperaría que los señores diputados lo hagan pronto, que entren en reflexión y que vean que es necesario hacerlo, sino el pueblo seguirá demandando. Eso es así, eso dar largas a algo a lo que el pueblo tiene derecho y que seguramente van a tener que cumplir, sino esta Asamblea, será otra, pero es así. A menos que el pueblo cambiara de idea y al hacerle una consulta popular saliera que el 85% dice que privaticen el agua, entonces está bien, pero ahora sucede que al hacer la consulta, al hacer una encuesta el 85% dice que quieren que se garantice el derecho humano al agua y que no se privatice. Entonces habrá que escuchar al pueblo, la voz del pueblo es la voz de Dios, yo espero que entren en razón. Yo siempre digo pidamos al Señor, para que el Señor ilumine las mentes y que lejos de caer en una
situación tensa, conflictiva y demás, que ya bastante tenemos de conflictos en este país, podamos sentirnos completos satisfechos que al final se consiga una ley en beneficio de todos; de todos incluyendo de aquellos que están en favor de la privatización, porque a ellos tampoco les conviene, porque al final esto puede provocar una descomposición social grave. Todos deberíamos velar por el bien común y entonces salimos ganando todos. Primero Dios que la razón prime y no los intereses particulares. Muchas gracias por la pregunta. - Monseñor también en otro tema con respecto al TPS el próximo mes de enero está a punto de vencer este permiso temporal, ¿cómo mira usted o cómo evalúa el trabajo que viene haciendo cancelaria en favor de estos migrantes? Y ¿Cuáles deberían ser las interrogantes que se deberían de llevar a las autoridades estadounidenses para que brinden una nueva extensión o un permiso de forma permanente a estas personas? R/ Este tema es muy difícil. Si yo tuviera la respuesta se la daría inmediatamente. ¿Qué hacer para que Estados Unidos conceda la prolongación del TPS o mejor aún la residencia a nuestros hermanos? es muy difícil. Pero yo creo que estamos obligados a hacer todo lo que podamos, todo el esfuerzo, todas las iniciativas posibles, yo no estoy informado exactamente de lo que el Gobierno está haciendo, veo las noticias que ustedes presentan, como la señora Ministra del Exterior, la Canciller, está trabajando, mediando y dialogando, etcétera. Estoy seguro que el señor Presidente también ha tratado ese tema con el señor presidente de Estados Unidos y ojalá que surta efecto. Yo no tengo una respuesta para decirle cómo solucionar, cuál tiene que ser la actitud, deberíamos hacer todo lo que está en nuestra parte y expresar nuestro total apoyo a nuestros hermanos que están en esa situación y no solo a los que están en este programa del TPS, sino también a los que están bajo el DACA y a todos los migrantes. En definitiva estamos con ellos y como Iglesia estamos muy solidarios, muy preocupados y queriendo lo mejor para ellos. Yo siempre digo –y lo digo con total conciencia– que pidamos al Señor. Yo sé que Dios está con nuestros hermanos y que sufre con ellos, el Señor fue el primer migrante, ha ido a Egipto perseguido por la violencia de Herodes desde niño y el Señor camina con nuestros hermanos migrantes. Yo espero que el Señor ilumine las mentes y mueva las voluntades para que no se sigan cometiendo los abusos, las violaciones a los derechos humanos de nuestros hermanos, pero es necesario que también nosotros hagamos todo lo que podamos, lo que nos corresponde y libremos con nuestros hermanos que sufren esta situación tan delicada. Estamos a la espera, primero Dios, que se resuelva la situación del TPS antes de la fecha perentoria de enero. Es un tema muy difícil que debemos enfrentar y todos unidos. Yo haría un llamado a que nos unamos en una misma actitud de lucha –en el mejor sentido de la palabra– en favor de nuestros hermanos de solidaridad y cuando nuestros hermanos son deportados, también, acogerles como mejor podamos. El Señor va actuar, pero nosotros hagamos lo que nos corresponde y pidámosle al Señor. Primero Dios que las cosas las hagamos para bien. P. 4.- Manuel Pacheco, de YSKL. Los diputados de la Asamblea Legislativa han incumplido nuevamente el plazo para elegir Procurador o Procuradora de los Derechos Humanos, la Iglesia católica ¿Cómo mira o como califica este caso?
R/ Lo lamentamos mucho, porque esta es una institución importante, es la que vela por los derechos humanos y es uno de los mejores frutos –diría yo– de los acuerdos de paz y que se haya llegado a la fecha perentoria sin haber elegido al nuevo Procurador de Derechos Humanos es muy triste. Yo, con todo respeto, haría un breve llamado a los señores diputados a que se pongan de acuerdo y elijan a la mejor persona, el mejor perfil, porque da la impresión, no lo digo yo, lo dicen varios comentaristas, que no se consiguió elegir a tiempo no, porque no se conocieran los distintos perfiles y poder ver cuál convenía más, sino por los intereses de partidos. Si esto es así, pues que lastima porque deberían de elegir a la persona que más convenga a la nación para llevar adelante esta tarea. Y tiene lógica, la critica que han hecho, la observación que han hecho los comentaristas, porque elegir el mejor perfil, la persona más preparada, más capacitada, me parece que no lleva mucho tiempo, si los están entrevistando, etcétera. Pero ya si a esto lleva una discusión de intereses, ya ahí sí se complican las cosas. El llamado que haríamos es que procuren hacer esa elección y como debe ser para el mejor interés de la nación, de la sociedad.
Mons. José Luis Escobar durante la Conferencia de Prensa que compartió con los medios de comunicación
P. 5.- Eugenio Palumbo, de The New York Times. En los casos cuando hay acusaciones de abuso sexual de parte de un sacerdote a un niño se dice que además de tratar el asunto la Iglesia también, tiene que avisar a las autoridades civiles como, PNC y Fiscalía. Supongo que lo mismo sería en el caso aquí de las supuestas amenazas a muerte y golpiza de parte del padre Molina, mi pregunta es ¿Al escuchar esto, usted lo llevó a la Fiscalía y a la PNC? ¿Les presentó un informe a ellos? Porque en la nota a la cual se refirió antes decía que habían rastreado, incluso con la ayuda de un padre que es capellán de la Policía, y no encontraron ningún indicio de una denuncia o de un informe, ¿pero usted sí informó a la PNC o la Fiscalía al escuchar esto de Isaí? R/ Le agradezco la pregunta. Él dio su declaración al Tribunal que estaba recogiendo la información y presentó la denuncia que hizo él a la Policía como una de las evidencias de lo que había sufrido; presenta la denuncia que hizo a la Policía. Eso es lo que yo tengo entendido, es lo que me dijo el Tribunal y se mandó eso a Roma naturalmente, son las evidencias. No tiene sentido que nosotros vayamos a dar el aviso porque, él lo había hecho ya.
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REALIDAD NACIONAL (Viene de página 7) - Porque lo que yo tenía entendido, que él dijo esta semana, es que de verdad él nunca hizo eso. Pero bueno, otra pregunta es ¿Cuándo dice que mandaron toda la información al Vaticano, a esta Congregación, ellos entonces sabían que este hombre que dijo haber sido acólito cuando fue supuestamente abusado, que ni existían acólitos, y este hombre que decía que vivía ahí en Panchimalco, cerca de la parroquia, cuando todos los vecinos que tenían décadas de vivir, decían nunca lo hemos visto y cuando aun así habían pruebas de que vivía en otra parte en Merliot. ¿Ellos tenían esta información también? R/ Lo que se hace es acumular toda la información o mejor todas las denuncias, pruebas y evidencias, de una parte y de la otra, y se manda todo. - ¿Y esto se les mandó, de que no había ninguna prueba de que él sí fue acolito y de que vivía cerca de la parroquia? R/ Lo que pasa es que él sí presentó pruebas. No tengo ahora en este momento en memoria qué clase de pruebas, pero él defiende lo contrario, que sí ayudaba a la Misa, que sí vivía con estas personas, etcétera, y presenta sus testigos y la otra parte presenta los suyos. No es así tan claro, si bien ahora él se retracta, pero en su momento defendió lo contrario. - En esta nota a la cual se refirió antes, al final cita a Monseñor [Rafael] Urrutia, que asegura que “ya trabajan ustedes en la restitución del padre Molina”. Y él termina diciendo “Antonio, va salir bien”. Mi pregunta es en este año y medio pasado ¿Qué cosas ha hecho la Arquidiócesis para promover la restitución del padre Molina? R/ Decía que la legislación de Iglesia es una y la legislación civil es otra. Entonces, en la legislación canónica, el proceso concluyó y se dimitió al padre. - Pero esta nota se hizo después de la sentencia del padre ¿Si él estaba hablando de que “estamos trabajando para su restitución” o está diciendo que, en este caso inapelable, significa que ustedes, aunque quisieran, no pueden hacer nada para ayudarle al padre?
R/ Tengo entendido que sí, que es una sentencia “ex officio”, inapelable como usted dice, de ese carácter es la sentencia que el Tribunal de la Santa Sede le dio; entonces ya no depende de nosotros, tiene usted razón. - Pero digamos el Papa también tiene la facultad. Entonces mi pregunta es ¿Piensan ustedes ahora mandar al Vaticano, la información de lo que dijo el testigo Isaí esta semana para que ellos puedan tomarlo en cuenta para posiblemente sacar otra conclusión? R/ Nosotros estamos en espera de la información que el Tribunal nos va mandar, que todavía no la ha mandado, la va mandar a la Nunciatura y a nosotros, según se informó. Nosotros tenemos que estudiar el caso. A la vez no hemos sido todavía oficialmente informados. Pero usted ha dicho bien, la sentencia que se dio es inapelable, pero de informarlo al Vaticano, sí se va informar en su momento y ya serán ellos quienes tomen la decisión. - Aunque tengo entendido verdad que en el derecho canónico y en otras modalidades el Papa, si puede dar, lo que llaman “Gracia” puede perdonar. ¿Entonces este camino si estaría abierto? R/ El Papa es el supremo legislador y está por encima de todo proceso y puede muy bien hacer eso que usted dice. - Mi última pregunta es que cuando el padre pidió a su abogado, que pidiera del Arzobispado el archivo para poder hacer su defensa, que supuestamente según el artículo la respuesta que recibió fue “que todo se había mandado a Roma y ya no lo tenemos”; pero se consultó con un hombre de apellido Funes, que había trabajado en la CDF y él dijo que no, que las reglas del juego son que sí se mande todo a Roma, pero que la Arquidiócesis mantiene una copia. ¿La Arquidiócesis tiene una copia de lo que se mandó a Roma? R/ Creo que en este caso el Tribunal no dejó copia, estamos en los primeros casos y creo que se mandó todo a Roma. - ¿Pero y ustedes podrían pedir una copia de este documento y se lo mandan? R/ Sí, claro los documentos originales están en el Vaticano y en el momento que los necesitemos nos dan copia, cómo no. No se pierde nada, pero nosotros los mandamos todos y no dejamos copia. Muchas gracias. Gracias por todo. buen día.
Documento
(Viene de página 2) Asimismo, en la mañana del jueves 24 de enero, hablando a los Obispos de América Central reunidos en Panamá para la JMJ, añadía, o, mejor dicho, completaba su pensamiento diciendo: “Su vida y enseñanza son fuente constante de inspiración para nuestras Iglesias y, de modo particular, para nosotros obispos. El lema que escogió para su escudo episcopal y que preside su lápida expresa de manera clara su principio inspirador y lo que fue su vida de pastor: “Sentir con la Iglesia”. Brújula que marcó su vida en fidelidad, incluso en los momentos más turbulentos”. Ahora él se convierte como el orante para su pueblo querido, así como el Cristo ruega por los suyos antes de irse de este mundo, San Oscar Romero en el aula eclesial del cielo, no se cansa de interceder y pedir por nosotros; suplica a Dios que nos proteja del mal, pero no que nos aísle… “No ruego que los retires del mundo, sino que los guardes del mal”. San Oscar, había bien entendido la enseñanza del evangelio, que Jesús nos quiere en medio del mundo, entre las gentes, en cualquier lugar y ámbito.
Como el Maestro, él es consciente de que el mal está al alcance de todos, que nos acecha y nos persigue, que intentará entorpecer nuestra misión, pero sabe también que Dios no nos deja solos, en sus manos paternales nos ha dejado su Hijo. ¡No hay mayor garantía para nosotros! En este día en el cual recordamos el primer aniversario de la canonización de San Oscar Arnulfo Romero, miramos a Él y a su ejemplo. La figura, el legado y la enseñanza del obispo mártir salvadoreño, fueron el paradigma de la vida y la actividad de muchos salvadoreños y de tantos pastores, dentro y fuera de las fronteras de El Salvador, durante su vida y más aún después de su muerte. Que hoy nos aliente su palabra y nos llene de consuelo al recordarnos que “… Dios está presente, no duerme, está activo, observa y ayuda” (San Oscar Romero, Homilía, 16 diciembre 1979) y le pedimos al Señor “…que imitando la constancia de tu mártir Oscar Romero merezcamos recibir de sus manos el premio prometido a la paciencia”. Amén.
Discernimiento Vocacional
Discernimiento en la Biblia Pastoral Vocacional Arquidiocesana El apóstol Pablo expresa el discernimiento de forma concisa en su carta a los colosenses: “Por eso nosotros, desde que nos enteramos, no cesamos de orar por vosotros, pidiendo que os colméis del conocimiento de su voluntad con toda sabiduría e inteligencia espiritual” (Col 1,9-10). Por inteligencia espiritual se refiere Pablo a la sabiduría discerniente, intuitiva y perceptiva, que a menudo se da en soledad y cuyo fruto es una profunda comprensión de la interconexión de todas las cosas entre sí, mediante la cual podemos situarnos en el tiempo y en el espacio para conocer la voluntad divina y llevar a cabo la misión de Dios en el mundo. El discernimiento como “ver a través de”. Ejercitando la comprensión espiritual, llegamos a ver con más claridad y a oír más profundamente la interconexión de todas las cosas (lo que los padres del desierto llamaron theoria physike, una percepción de cómo las cosas dependen unas de otras). El discernimiento nos permite “ver a través de” la apariencia de las cosas hasta su significado más profundo y llegar a conocer los entresijos del amor divino y nuestro lugar único en el mundo. El discernimiento nos ayuda a conocer nuestra verdadera identidad en la creación, nuestra vocación en el mundo y nuestro lugar único en la historia como una expresión del amor divino. Percibir, ver a través de, comprender y ser consciente de la presencia de Dios es lo que se entiende por “discernimiento”. Abrir el corazón a lo que real y verdaderamente está “ahí” es un fruto de la contemplación y la vida espiritual. Quienes practican el discernimiento son a menudo más contemplativos que aquellos cuya excesiva actividad no les permite reflexionar acerca del sentido interno de las apariencias. Las cosas más interesantes de la vida son imperceptibles para nuestros sentidos, pero son visibles para nuestra percepción espiritual. En gran medida, pueden pasar inadvertidas para la persona distraída y super ocupada en la que todos podemos convertirnos fácilmente. La contemplación no mira tanto a las cosas cuanto a través de ellas, a su corazón, a su centro, y a través de ahí trata de descubrir ese mundo de belleza espiritual que es más real, tiene más masa y densidad, más energía e intensidad que la materia física en su aspecto más burdo y crudo. Por eso se conoce a los padres griegos, que fueron grandes contemplativos. Por eso sabían leer los corazones y las almas atormentadas de aquellos que les consultaban; porque a través de las apariencias sabían ver el yo más recóndito. Jesús tenía esta capacidad de ver verdaderamente. Juan, por ejemplo, nos dice: “Pero Jesús no se fiaba de ellos, porque sabía lo que había en sus corazones” (Jn 2,24). Este conocimiento intuitivo y perceptivo constituye la naturaleza del discernimiento. Es esa la importancia del discernimiento, detenerte, respirar y descubrir la voluntad de Dios.
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Romereando por Chalate
“Verdaderamente la mies de Chalatenango es inmensa”1 † Fray Oswaldo Escobar, OCD Obispo de Chalatenango
La creación de la Vicaría Episcopal de Chalatenango obedece a que en aquel tiempo había muchos pueblos sin sacerdotes. La atención pastoral era difícil, y queriendo dar respuesta a este desafío es como se crea la Vicaría Pastoral.
nuevo en la Arquidiócesis, que unido al obispo, otro sacerdote con poderes episcopales se va a dedicar a la organización, a la vida, a un mejor caminar de esta Iglesia de Chalatenango y todo su departamento.
San Oscar vino a dar ejecución a dicho decreto. La fecha determinada fue el 24 de septiembre de 1977. El lugar designado, la iglesia de San Miguel de Mercedes, ya que ese día se celebraría la fiesta titular de Nuestra Señora de las Mercedes, ocasión que se prestaba para dicho fin.
Es cierto el que, como en el Evangelio de hoy dice, se siente –ante la muchedumbre hambrienta de Dios, ante los pueblos sin sacerdotes, sin religiosas–, a pesar de haber hecho surgir aquí tantas vocaciones sacerdotales y religiosas, la necesidad de que sean recompensados esos pueblos, esos hogares, que han sabido cristalizar vocaciones tan bellas como las que están considerando ahora en este presbiterio o las que allá en sus lugares de trabajo, en sus comunidades están dando honor a esta tierra tan fértil de Chalatenango”.
Romero pronunció aquel día una preciosa homilía, la cual gracias a Dios se conserva íntegra. Los elogios de Romero para Chalatenango son abundantes, es por eso es que me gusta decir que Romero es el Santo que mejor ha hablado de nosotros. Entresacaré algunas ideas esenciales de lo que dijo en aquel histórico día. Por ejemplo: “La Iglesia mira con preocupación ese maravilloso departamento de Chalatenango que ha sido una mina de vocaciones fervorosas, sacerdotales y religiosas tanto de varones como de mujeres, consagradas a Dios. Y aquí está la respuesta de Dios por medio de esta Iglesia”. San Oscar define así la importancia y significación de tal suceso en nuestro departamento con estas palabras: “Eso significa que esta mañana histórica de Chalatenango es el momento en que la Iglesia extiende su organización jerárquica y la hace más presente en medio del pueblo de Chalatenango, para que sienta más viva esa acción de Cristo que da la verdad en su revelación, que da la vida eterna en sus Sacramentos, en su ministerio sacerdotal, y que suscita la santidad de las familias cristianas que abundan por estos horizontes, para que en vez de apagarse esa llama de fervor cristiano, sea más encendida y haya más santidad en los hogares, y haya más fervor en nuestros pueblos, y haya muchas vocaciones sacerdotales para el servicio de toda la Arquidiócesis y de toda la Iglesia universal –porque el sacerdote se ordena para toda la Iglesia del mundo–, y surjan también, de la juventud de este Chalatenango y de sus pueblos filiales, las vocaciones de los varones y de las mujeres que quieran consagrase a Dios y darle, así, un sentido tan bello, tan divino, a su vida en servicio de la humanidad, pero consagradas a Dios”. El Vicario Episcopal de Chalatenango tendrá variadas tareas pastorales. La feligresía chalateca asumió esta novedad con mucha alegría: “Y yo advierto en la intuición de ustedes, queridos católicos, al aceptar con tanto entusiasmo esta disposición jerárquica de la creación de una vicaría, que podríamos decir es un episcopado
San Oscar Romero preside Eucaristía en Catedral de Chalatenango
La alegría del pueblo, se unía con la de nuestro santo, pues ambos estaban pletóricos de alegría por esta nueva realidad pastoral: “Yo les felicito, queridos hermanos de Chalatenango, de todo el departamento convertido en una vicaría episcopal, les felicito y les agradezco su acogida tan cariñosa, tan fervorosa que ustedes han tributado a esta disposición. Y sepan, que a cambio de este servicio que este humilde servidor ha prestado al departamento, les agradece el estímulo poderoso que la presencia abigarrada de ustedes, la oración de tantas familias, el fervor de tanta gente está dándole al obispo de la diócesis. Porque una respuesta como esta, hermanos, uno no sabe qué es más, si el favor que por medio de uno hace Dios o la respuesta del pueblo hacia Dios, pasando también por el corazón humano del obispo. Sepan que dejan en mi corazón de pastor esta mañana, una huella imborrable. Y si he sentido siempre una gran admiración, un gran cariño, una gratitud inmensa por las familias, para los pueblos de Chalatenango por ese fervor de respuesta a Dios, de ahora en adelante bajo el cuidado directo del padre Fabián, del padre
Efraín y de todos los sacerdotes que sirven en las parroquias del departamento, que mi presencia episcopal se sentirá más viva, ya que cuento con esa cordialidad y esa lealtad de tantos sacerdotes buenos, que en comunión con el obispo, estamos construyendo esta Iglesia de Chalatenango”. También hizo la invitación a que los laicos se comprometieran para que esta nueva realidad fuera más fecunda no se hizo esperar, pues Romero confiaba muchísimo en el trabajo laical: “Y no solo sacerdotes y religiosas, queridos hermanos, mi llamamiento pastoral se dirige ahora a rodos ustedes los laicos. Laicos son todos los cristianos bautizados, marcados con la señal de Cristo, pertenecientes al pueblo de Dios, responsable de la historia de la Iglesia porque sobre sus hombros también descansa la responsabilidad pastoral. A ustedes, que en sus hogares como padres de familia, como madres de familia, como jóvenes en el mundo, están viviendo la belleza de esta hora cargada de esperanzas. Sean protagonistas de la historia de la Iglesia, préstenle todos sus brazos, toda su fuerza, todo su corazón. Que al ejemplo de esos católicos que van comprendiendo su compromiso –dando catecismo, celebrando la palabra, atrayendo a la gente al servicio de la Iglesia, al servicio de Dios– no se quede un solo bautizado sin responder a esta hora en que la Iglesia viene a poderles un reto para decirles de parte de la jerarquía: hacemos todo lo que está de nuestra parte, ahora toca al pueblo responder generosamente a esta Iglesia que s instrumento de Dios, para traer santidad, vida, gracia y todo eso que deriva de esos grandes valores eternos, también para los grandes compromisos temporales”. Los tiempos no eran nada fáciles para ese entonces, así que San Oscar, animaba a los feligreses chalatecos a que siguieran, siendo valientes, aún en medio de las persecuciones: “No sean miedosos y mucho menos traidores de esta Iglesia, porque lamentablemente en el departamento tenemos que luchar por implantar un reino de Dios auténtico y, en esta lucha, tenemos que encontrarnos, con lástima, con aquellos que decía San Pablo, que antes fueron cristianos, pero ahora, por una ventaja política, por una ventaja social o económica, por una paga tal vez miserable, traicionan su bautismo y se convierten en espías y en perseguidores de sus propios hermanos”. Quedando establecida la Vicaría Pastoral de Chalatenango, siendo designado, como ya habíamos dicho Vicario Pastoral, el Padre Fabián Amaya (Q.E.P.D.) 2 y como Provicario el Padre Efraín López Núñez 3.
Notas: 1 Así lo dijo Romero durante la homilía en que oficializó la Vicaría Pastoral de Chalatenango 2 Pbro. Fabián Amaya, nacido en Arcatao, Chalatenango. Era también párroco de Ilopango y le tocó la difícil tarea de llevar su parroquia capitalina y además la Vicaría Episcopal chalateca. 3 Pbro. Efraín López Núñez, originario de San Rafael, Chalatenango. Actualmente es párroco en San Juan Opico.
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20 de octubre de 2019
La Palabra de Dios para cada semana Mes Misionero Extraordinario, Octubre 2019 Éx 17, 8-13; Sal 120,1-8; 2Tim 3,14-4,2; Lc 18,1-8 Domingo 20 de octubre de 2019 • Domingo Mundial de Misiones • Ciclo “C” • Año impar
Bautizados y enviados Mensaje del Santo Padre Francisco para la Jornada Mundial de las Misiones 2019 Bautizados y enviados: La Iglesia de Cristo en misión en el mundo La primera lectura, que narra la batalla entre Amalec e Israel, coincidiendo precisamente con el domingo dedicado por la Iglesia a su misión evangelizadora en el mundo, puede causar un cierto embarazo a quien quiera hablar de la importancia de tal empeño cristiano. El texto puede ser interpretado erróneamente como un estímulo a la guerra santa o a un proselitismo fanático, sino que, por el contrario, la misión se centra en el anuncio de la Pascua de Jesús y en la reconciliación divina. Tiene como finalidad testimoniar a Jesucristo, comunicar su Evangelio, fundar su Iglesia, en un clima de sincera fraternidad, de auténtica y respetuosa libertad religiosa en la búsqueda común de una mayor comunión y justicia en el mundo. Sin olvidar que el Evangelio, de acuerdo con el ejemplo de Jesús, también nos enseña el amor hacia los enemigos y la oración por los que nos persiguen. El cristiano bautizado y enviado no posee un producto para vender y para imponer al mundo. Como Iglesia de Cristo en misión, el cristiano recibe la vida divina para anunciar, testimoniar y comunicar, por su salvación y por la salvación de todos. El texto bíblico de Éxodo 17,8-13 contiene la memoria de un episodio en el que Israel, pueblo expatriado en búsqueda de una tierra donde establecerse, se ve amenazado de exterminio y lucha por su propia supervivencia. Convencido de conseguir la victoria –así como la liberación de Egipto– gracias solo a la ayuda de Dios, el pueblo de Israel conserva el recuerdo de esta batalla, y de las otras que seguirán, como testimonio de su fe en el verdadero Dios, Señor del cielo y de la tierra, Dios de los ejércitos, que socorre a los débiles y libera a los opresores. Es esta la alabanza que el salmista, con confianza y agradecimiento, eleva al Señor, el guardián de Israel: «Levanto mis ojos a los montes: ¿de dónde me vendrá el auxilio? El auxilio me viene del Señor, que hizo el cielo y la tierra» (Sal 121,1-2). Los elementos de agresividad, odio y venganza que históricamente acompañaban este modo veterotestamentario de interpretar la fe fueron gradualmente purificados a lo largo de los siglos por personas santas, como los profetas y los sabios, y sucesivamente, y de una manera definitiva, por el Señor Jesús, el príncipe de la paz y de la justicia, anunciado en sus oráculos y esperado por los siglos. Todo lo que venía significado con la fuerza y la violencia por el exterminio de los ídolos y de los paganos, en Jesús se convierte en pasión ardiente y amor incandescente para la salvación de todos. La cruz de Jesús es el lugar donde el mal es derrotado por el amor de Aquel que muere por nosotros, que muere en nuestro lugar haciendo suya la experiencia de nuestra muerte. Él también muere por la salvación de sus perseguidores y enemigos. Cada alteración es derrotada por el Dios de Jesucristo, en quien el odio y la muerte causan y provocan, en la comunión trinitaria, un amor cada día más grande y una misericordia cada día más eficaz. Dios ha destruido nuestro pecado, la injusticia y la muerte haciéndoles suyos, y los ha derrotado a través de su inmenso amor.
«En su [de Cristo] muerte en la cruz se realiza ese ponerse Dios contra sí mismo, al entregarse para dar nueva vida al hombre y salvarlo: esto es el amor en su forma más radical. En el Misterio pascual se ha realizado verdaderamente nuestra liberación del mal y de la muerte» (Benedicto XVI, Sacramentum caritatis, 9). El Nuevo Testamento y la unidad de las Sagradas Escrituras nos introducen y nos educan en este modo de actuar salvífico de Dios dentro del mundo. En esta prospectiva, la segunda lectura nos muestra cómo Pablo enseña a Timoteo la importancia de las Escrituras: «Desde niño conoces las Sagradas Letras: ellas pueden darte la sabiduría que conduce a la salvación por medio de la fe en Cristo Jesús» (2Tim 3,15). Timoteo, de hecho, las ha estudiado desde pequeño, como todo muchacho hebreo; desde entonces, también los niños cristianos tratan de conocerlas, con la ayuda de los padres y de la comunidad. Timoteo es un joven que, junto con su familia, ha abrazado la fe durante el primer viaje misionero del apóstol Pablo y que, a continuación, pasó a ser miembro de su grupo misionero. Hijo de madre hebrea y de padre griego, Timoteo recibió desde la infancia una profunda y firme educación religiosa de su abuela Loida y de su madre Eunice, que lo introdujeron en el conocimiento de las Sagradas Escrituras. Este requisito se basa en el hecho de que las Escrituras están inspiradas por Dios y, si se explican bien –en lugar de manipular y distorsionar, como dice la segunda carta de Pedro (cf 2Pe 1,1921)–, nos animan a practicar las buenas obras y nos edifican en la justicia y en la santidad. El auténtico celo misionero no es el proselitismo violento, sino el deseo de un corazón fraterno lleno de Cristo y motivado por el Espíritu Santo a cooperar para la salvación y la felicidad de todas las personas, de todos los grupos étnicos, compartiendo valores éticos y culturales, esperanzas y alegrías, en busca de una vida plena y de una paz verdadera, que es Jesucristo muerto y resucitado. Por eso Pablo exhorta enérgicamente a Timoteo para que, anticipándose a la parusía del Señor, se dedique en cuerpo y alma a la enseñanza de la Palabra. El apóstol a menudo menciona en sus cartas el servicio prestado por Timoteo a la obra de evangelización: siempre disponible y atento, acompaña a las comunidades eclesiales con generosidad y afecto. Pablo les recuerda a los Filipenses su testimonio y su fidelidad: «Con la ayuda del Señor Jesús, espero mandaros pronto a Timoteo. [...] Conocéis su probada virtud, pues se puso conmigo al servicio del Evangelio como un hijo con su padre» (Flp 2,19.22). Escribiendo a los Tesalonicenses, él resalta su coraje y su carisma misionero: «Y enviamos a Timoteo, hermano nuestro y colaborador de Dios en el Evangelio de Cristo, para afianzaros y alertaros en vuestra fe, de modo que ninguno titubease en las dificultades presentes» (1Tes 3,2-3). Timoteo, por lo tanto, viaja con prontitud y diligencia para ponerse al servicio de las Iglesias recién fundadas, cada vez que necesitan aclaración de sus dudas o apoyo en sus luchas. El apóstol menciona frecuentemente en sus cartas los servicios prestados
por Timoteo a las tareas de la evangelización: siempre disponible y atento, acompaña con generosidad y cariño a las comunidades eclesiales. La Palabra de Dios es su fuerza y su compañía. El canto al Evangelio nos ofrece, con su impresionante lirismo, con su lenguaje sofisticado, un himno sublime dedicado a la Palabra de Dios, descrita como «viva y eficaz», ya que penetra en nuestra conciencia exactamente como una espada de doble filo. El Dios justo –como dice el salmista– sondea los corazones y las mentes y ve todos nuestros caminos.
También en la carta a los Efesios nos encontramos con la metáfora de la espada: atribuida al Espíritu, representa el poder intenso y penetrante de la Palabra de Dios (cf Ef 6,17). Un cruel instrumento de guerra se pliega, por tanto, para simbolizar otra lucha: ese conflicto espiritual que produce arrepentimiento y conversión, alegría y nueva vida, bondad y fidelidad. Estos son los frutos de la Palabra divina, espiritual, viviente y personal; los frutos de la sabiduría que lo ve todo y que lo sabe todo, que todo lo impregna y todo lo juzga, que está presente en la parte más profunda de la conciencia y brilla de tal manera que nadie puede esconderse de su luz. El Evangelio de Jesús, sabiduría divina, es Espíritu y vida, hace levantar a los caídos, restaura la dignidad de los excluidos, da alegría a los afligidos, renueva a toda criatura, transforma, santifica y da vida eterna. Cuando la Palabra ilumina, sin embargo, al mismo tiempo juzga, porque despoja al alma de sus máscaras, revelando la verdad que se expone en la conciencia. En el corazón donde se derramó el Espíritu del resucitado, el juicio de la Palabra penetrante es siempre para el perdón y para la purificación. La parábola de Jesús en el Evangelio de este domingo retrata a una mujer a quien un juez corrupto le ha negado el derecho a expresarse, una experiencia que incluso hoy en día sufren muchas personas en todo el mundo. La parábola está ambientada «en una ciudad» (Lc 18,2), una ciudad sin nombre, ya que lo que se cuenta parece tener lugar en todas partes: para los enemigos, la ley debe aplicarse; para los propios amigos solamente debe ser interpretada. La viuda de la parábola no es amiga del juez, por eso no recibe audiencia. Esta viuda perdió la ayuda de su esposo y, en el mundo palestino del primer siglo, no pudo heredar su propiedad.
(Continúa en página sig.)
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20 de octubre de 2019 Las viudas eran económicamente vulnerables y podían ser explotadas, como Jesús recuerda agudamente cuando acusa a los líderes religiosos de devorar las casas de las viudas (cf Lc 20,46-47). Al no poder pagar un abogado, la viuda se presenta sola para representar su causa contra su oponente. Jesús expone el razonamiento interno del juez, profundamente corrupto, completamente desinteresado en la denuncia de la viuda y totalmente indiferente hacia su persona: no teme a Dios y no le importa el bien de los hombres. La viuda está decidida a no permanecer invisible e inaudible, ni siquiera ante un juez deshonesto, hasta que el caso se resuelva definitivamente en su
favor. La parábola, de hecho, le sirve a Jesús para ejemplificar la necesidad de la oración, su urgencia y continuidad. Si la oración constituye el corazón de la misión de la Iglesia es porque dentro de esta relación personal y eclesial con Dios (liturgia) la persona y las comunidades se renuevan de acuerdo con los criterios de la salvación ofrecidos y operados por Jesús. Su pregunta sobre la fe en el momento de su regreso parece indicar una cierta preocupación del maestro sobre la efectividad de la misión y la autenticidad del testimonio de los discípulos misioneros. Estos, asociados al misterio pascual, gracias al bautismo, se encuentran ya enviados al mundo como Iglesia de
Cristo, es decir, como la comunidad de los redimidos, colocada como una semilla y comienzo del Reino para que toda la historia y la humanidad sea transfigurada y redimida. La eficacia de la oración continua, de la súplica constante, de la búsqueda insistente del amor por la verdad y la justicia, forja al discípulo en la misión. Solo aquellos que rezan insistentemente ponen a Cristo en el centro de sus vidas y de la misión que se les confía, creciendo en la fe. Solo aquellos que oran insistentemente se vuelven atentos y son capaces de escuchar, comprender y descubrir las necesidades y las peticiones de redención material y espiritual tan presentes en el corazón de la humanidad de hoy.
Domund 2019
Tercera Catequesis: La misión inculturada 1. Motivación No es posible evangelizar sin tomar en cuenta la cultura. Esta afirmación implica al menos dos aspectos. En primer lugar, si agredimos la cultura a la cual dirigimos nuestra empresa evangelizadora o la consideramos inferior a la nuestra, entonces aseguramos el fracaso de nuestra iniciativa. Pero, si profundizamos en conocer el contexto cultural en el que ejercemos nuestro apostolado, aseguramos el éxito de la misión. Uno de los aciertos del Papa Benedicto XV, en 1919, cuando escribió la Carta Apostólica Maximum Illud, fue precisamente exigir que las culturas locales, destinatarias de la evangelización, normalmente realizada por extranjeros, fueran respetadas y que los misioneros promovieran la cultura local y los agentes de pastoral originarios de dichas culturas. Mandato que, hasta la fecha, algunas congregaciones religiosas, se niegan a respetar, al punto que algunos países latinoamericanos cuentan con un alto número de obispos extranjeros, bajo la excusa de que dichos países no cuentan con candidatos «idóneos» para el episcopado. 2. La voz del Papa El Papa Benedicto XV inicia exaltando la obra de evangelizadores insignes como lo fue Bartolomé de las Casas, cuyo aporte reside en la defensa jurídica de los indígenas en las cortes de España y el haber propuesto un método no violento para evangelizar a los indígenas. De él dice lo siguiente el pontífice: Más aún: tras el descubrimiento de América, ejércitos de varones apostólicos, entre los cuales merece especial mención Bartolomé de las Casas, honra y prez de la Orden dominicana, se consagraron a aliviar la triste suerte de los indígenas, ora defendiéndolos de la tiranía despótica de ciertos hombres malvados, ora arrancándolos de la dura esclavitud del demonio (Maximum Illud, n. 6).
Uno aspecto medular a la hora de ejercer la misión, además de dominar la legua del país destinatario de nuestra misión, es la promoción del clero nativo. Un aspecto que recalca con firmeza el pontífice. Al respecto nos dice: es de lo más principal e imprescindible, para quienes tienen a su cargo el gobierno de las Misiones, el educar y formar para los sagrados ministerios a los naturales mismos de la región que cultivan; en ello se basa principalmente la esperanza de las Iglesias jóvenes (Maximum Illud, n. 30). Esto es así, dice el Papa, porque nadie mejor que un sacerdote indígena puede infiltrar la fe en las almas de los naturales, el contacto de un sacerdote indígena del mismo origen, carácter, sentimientos y aficiones que ellos, ya que nadie puede saber cómo él insinuarse en sus almas (Maximum Illud, n. 31). El Papa Francisco sale al paso de toda tendencia etnocéntrica o nacionalista que ponga en riesgo la identidad de los pueblos originarios: El destino universal de la salvación ofrecida por Dios en Jesucristo condujo a Benedicto XV a exigir la superación de toda clausura nacionalista y etnocéntrica, de toda mezcla del anuncio del Evangelio con las potencias coloniales, con sus intereses económicos y militares (Mensaje Domund, 2019). 3. La misión compartida Como modelo de un clero nativo ejemplar, últimamente el Papa Francisco propone a San Oscar Arnulfo Romero, del cual dice: Entre esos frutos proféticos de la Iglesia en Centroamérica me alegra destacar la figura de san Oscar Romero, a quien tuve el privilegio de canonizar recientemente en el contexto del Sínodo de los Obispos sobre los jóvenes. Su vida y enseñanza son fuente de inspiración para nuestras Iglesias y, de modo particular, para nosotros obispos. Papa Francisco sostiene que el éxito del testimonio de Monseñor Romero fue su amor a Dios y al pueblo.
El amor de Romero, dice el Papa, es un amor con sabor a pueblo. Y para caracterizarlo dice que: el pastor, para buscar y encontrarse con el Señor, debe aprender y escuchar los latidos de su pueblo, percibir “el olor” de los hombres y mujeres de hoy hasta quedar impregnado de sus alegrías y esperanzas, de sus tristezas y angustias (cf. Const. past. Gaudium et spes, 1) y así escudriñar la Palabra de Dios (cf. Const. dogm. Dei Verbum, 13). Escucha del pueblo que le fue confiado, hasta respirar y descubrir a través de él la voluntad de Dios que nos llama (cf. Discurso durante el encuentro para la familia, 4 octubre 2014). Sin dicotomías o falsos antagonismos, porque solo el amor de Dios es capaz de integrar todos nuestros amores en un mismo sentir y mirar (Discurso a los obispos de Centroamérica, 24 enero de 2019). El Pontífice cita el magisterio de Monseñor Romero para poder caracterizar a la Iglesia que quería Romero y la Iglesia que quiere el Papa Francisco, una Iglesia humilde, servidora: Para él, en definitiva, sentir con la Iglesia es tomar parte en la gloria de la Iglesia, que es llevar en sus entrañas toda la kénosis de Cristo. En la Iglesia Cristo vive entre nosotros y por eso tiene que ser humilde y pobre, ya que una Iglesia altanera, una Iglesia llena de orgullo, una Iglesia autosuficiente, no es la Iglesia de la kénosis (cf. S. Oscar Romero, Homilía 1 de oct. 1978). A partir de lo dicho, podemos preguntarnos: ¿Qué nos sugiere el texto de Romanos 12,1-2 para nuestra reflexión? ¿Qué esfuerzos estamos haciendo o podemos hacer para relacionar Evangelio y Cultura? ¿Cuál es el ideal de pastor que los miembros de nuestras comunidades esperan?
Lecturas de la Semana
• Del 21 al 26 de octubre 2019 •
Lunes 21: Rm 4,20-25; Sal Lc 1,69-70.71-75; † Lc 12,13-21
Martes 22: Rm 5,12.15b.17-19.20b-21; Sal 39,7-10.17; † Lc 12,35-38
Miércoles 23: Rm 6,12-18; Sal 123,1.3-8; † Lc 12,39-48
Jueves 24: Rm 6,19-23; Sal 1,1-4.6; † Lc 12,49-53 Viernes 25: Rm 7,18-24; Sal 118,66.68.76-77.93-94; † Lc 12,54-59 Sábado 26: Rm 8,1-11; Sal 23,1-6; † Lc 13,1-9
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20 de octubre de 2019 Invitación
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2020
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Nuncio Apostólico visita Centro Pastoral de Promoción Humana San Oscar Romero – Pág. 3 –
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