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María Aranguren Vergara pág
HISTORIA DEL BELÉN EN ESPAÑA
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Recopilado por Leopoldo HERRERO NIVELA
Hay que señalar que, si bien es cierto que Italia es la cuna del Belén, no lo es menos España que hizo suya desde el principio esta tradición y, al superar con creces a cualquier otro país del mundo, se convirtió en la mejor transmisora de la misma. En la península ibérica, la tradición del belén fue introducida por franciscanos y clarisas, en el siglo XV, posiblemente a través del puerto de Valencia, dado el continuo tráfico comercial y cultural con Nápoles y Sicilia existente en la época, se extiende por toda la Corona de Aragón inicialmente y a toda España con el pasar del tiempo. Con figuras labradas hacia 1480, el llamado “Belén de Jesús “, ubicado en la iglesia de la Anunciación de Palma de Mallorca (Hospital Provincial), conocida popularmente como de la “Sangre”, de estilo gótico y documentado en el siglo XVI, es el más antiguo de España, por lo que también pudiera ser el más antiguo en uso de la Cristiandad. Sus autores son los Alamanno, su taller realizó varios de los primeros belenes en Nápoles, en el último tercio del siglo XV, perteneciente por entonces a la Corona de Aragón. la crónica sitúa la llegada del Belén de Jesús apenas tres años después de que
Belén de Jesús de Palma de Mallorca Belén Catedral de León
San Cayetano de Tiene revitalizara la costumbre del belén como práctica devocional para las comunidades religiosas, lo que supuso un nuevo impulso y una mayor demanda de elementos para su elaboración, que incluiría el reciclaje de figuras antiguas, incluso en estilos como el gótico, medio pasado de moda en la franja mediterránea, pero vigentes aún en el entorno castellano y su área de influencia, como pueda ser la corte del Duque de Calabria, virrey de Valencia. Hay indicios, sin embargo, de que pudieron existir en Mallorca -y quizá en otras islas de las Baleares- varios belenes de parecidas características, posiblemente en poder de la misma orden franciscana del convento de Jesús, que redistribuiría las figuras más antiguas en un área que podría incluir las costas peninsulares más cercanas a las islas, como Alicante o Valencia. El documento más antiguo que atestigua el uso del belén en España es una noticia de la catedral de Valencia, donde, en 1468, se renovaron las figuras del misterio, que se colocaban en Navidad. Es decir, en esa fecha, las figuras ya eran viejas y estaban usadas hasta el punto de que se debían sustituir, dato que indica una cierta antigüedad en la costumbre. En la misma catedral de Valencia, aparece por primera vez la mención al acto de poner el belén, nada menos que en 1502. También del siglo XV es el belén de la Catedral de León, auténtica joya cuyos autores son desconocidos, pero probablemente centroeuropeos. Los siglos XVI y XVII abonarán el terreno para su explosivo florecimiento en el siglo XVIII, a partir del cual la costumbre arraiga profundamente. Del siglo XVI todavía se conserva el Belén de Coral en el Monasterio de las Descalzas Reales de Madrid, todas las figuras están talladas en coral, plata y bronce, de
Natividad de Berruguete
autor o autores desconocidos. Datado hacia 1570, fue un regalo de la ciudad italiana de Trápani a Felipe II. Alonso de Berruguete, en el mismo siglo, irrumpe, como otros grandes tallistas y es-