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3.5.2 Susurros que irrumpen
3.5.2
irrumpen
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Figura 65 Visualización frontal del espacio Susurros que irrumpen, de la Instalación “Trujillo, una historia por contar”. Se perciben el arrume de candados y en el panel central, las 3 ventanas de las respectivas categorías. Comer, Celebrar y Jugar. Fuente: Elaboración propia.
Al conversar con los testimonios alcancé a percibir una cohesión de ellos con otras personas, un sentido de comunidad que estaba presente durante todo el relato. Era posible entrever que en algunos casos este sentido de comunidad se había alterado por algún tiempo y el mismo proceso me llevó a comprender que tales alteraciones correspondían a períodos donde la violencia se acrecentaba, pues durante estas fases, había una precaución para hablar libremente sobre ciertos temas y, por miedo o por prudencia, se vivía una reducción del tiempo de conversa.
Sin embargo, las personas cambiaron sus rutinas y sus horarios para compartir tiempo juntos, reconociendo así que la idea de comunidad nunca
Figura 66Instalación de Chiharu Shiota “La llave en la mano”, Bienal Internacional de Arte, Venecia, 2015. donde utiliza hilos, llaves, una barca y hace una analogía de la memoria, como contenedor de recuerdos. Fuente: Fotografía de Sunghi Man, www.chiharu-shiota.com
Figura 67 Fotografía de una puerta de madera en Trujillo, Valle que posee un sistema de cierre de candado y pasador. Fuente: Elaboración propia. Figura 68 Bocetos del espacio Susurros que Irrumpen que dan indicios sobre el papel de cada uno de los elementos en el espacio. Fuente: Elaboración propia.
desapareció del todo, por el contrario, se mantuvo firme conforme fueron sucediendo los hechos y fue la que permitió sobreponerse a la situación, pues al irse tranquilizando las cosas cualquier barrera, que el miedo hubiera podido construir, fue derrumbada por el diálogo, el sentimiento comunitario de sentirse parte de algo y la noción de que, a pesar de todo, esa vida cotidiana se mantiene vigente y activa.
Sentí la necesidad de reflejar ese derrumbe de barreras y al revisar mis archivos, descubrí un marcado interés por fotografiar las cerraduras de Trujillo que aún conservan un modo característico de cierre con candado y pasador. (Fig. 67) Me remití entonces a este elemento para simbolizar la relación de protección y de apertura que había ocurrido en el municipio y para figurarlo como el detonante que al abrirse, posibilita acceder a una serie de historias y recuerdos. Este tipo de analogías es utilizada por Chiharu Shiota (2015) que suele utilizar elementos, dotarlos de significados y convertirlos en portadores de conceptos. (Fig. 66)
Figura 69 Alfredo Jaar en su exposición “Alfredo Jaar: 25 Years Later” (2002) Foto: Periódico el PAÍS.
Figura 70 Esquema 3D de la ubicación del arrume en medio del espacio. Foto: Elaboración Propia. Para hacer hincapié en el concepto de apertura, ubiqué en el centro de esta sección de la instalación una montaña de candados y pasadores, abiertos, con una iluminación cenital que permite al visitante fijar la mirada en esta parte.
El arrume de candados abiertos, da cuenta de una sensación de despojo del miedo de los propios testimonios y una búsqueda por retomar las dinámicas, pues normalmente, arrumamos las cosas que ya no caben, y el silencio era un elemento que ya no tenía espacio en la vida de los Trujillenses. Esta disposición de los candados, surge después de una revisión de referentes, específicamente de Alfredo Jaar en su exposición “Masacre en Ruanda”, (1997) en la que el artista utiliza este tipo de repetición de elementos para reforzar las metáforas y hallar un equilibrio entre lo que es explícito e implícito en una instalación. (Fig. 69)
Como esta sección no tiene una iluminación general, utilicé esta luz cenital, al igual que la de las ventanas y proyecciones que también componen este espacio, para destacar puntos focales dentro de la narrativa de la Instalación y mantener un ritmo en el recorrido de la misma; fortaleciendo la idea de sumergir al espectador en un universo distinto. (Fig. 72)
Figura 71 Visuzalición 3D de arrume de candados abiertos en la instalación final de “Trujillo, una historia por contar”. (2002) Foto: Elaboración Propia.
Figura 72 Visualización de montaña de candados e iluminación, que hacen parte del espacio Susurros que Irrumpen, de la Instalación “Trujillo, una historia por contar” Fuente: Elaboración propia.
Figura 73 Visualización de montaña de candados y proyección lateral, que hacen parte del espacio Susurros que Irrumpen, de la Instalación “Trujillo, una historia por contar” Fuente: Elaboración propia.
JUGAR CELEBRAR COMER
120 cms
Figura 74 Visualización de panel intermedio, donde están ubicadas las ventanas que contienen el material sonoro y fotográfico relacionado con las 3 categorías mencionadas, Comer, Celebrar y Jugar. las etiquetas superiores con los nombres, son meramente explicativas y no hacen parte de la instalación final. Fuente: Elaboración propia.
Mediante las entrevistas realizadas, accedí a varios recuerdos de los testimonios e identifiqué elementos recurrentes en las narraciones que como mencione anteriormente, categoricé en tres partes: Comer, Celebrar y Jugar que priorizan el significado, sobre el orden cronológico.
Cada una de estas categorías contienen dentro de sí una variedad de historias que se van intercalando una tras otra, narradas de manera mixta por las 18 personas que conforman el archivo oral de este proyecto.
En esta sección, quise evidenciar la relación de cercanía y confianza que establecí con los entrevistados y viceversa; la que ellos establecieron conmigo, por tanto para poder acceder a estos relatos, el visitante debe acercarse a las ventanas que están dispuestas en un panel ubicado en la mitad de este espacio, (Fig. 74) y abrirlas, tal y como se abriría un baúl de los recuerdos, emulando esa sensación de conversar con alguien que está dispuesto a rebuscar en su memoria y a reconstruir recuerdos traídos de días pasados.
Estos elementos son también una alegoría a la costumbre que se ha cultivado en el municipio de abrir puertas y ventanas para contemplar las actividades de la calle o “tertuliar” entre vecinos y conocidos; costumbre que, aunque nunca desapareció, se vio alterada durante ciertos períodos de violencia, en los que las personas redujeron el hábito de dejar puertas y/o ventanas abiertas.
Actualmente es una de las características más marcadas de la comunidad y genera una invitación a adentrarse en la vida cotidiana de las personas y a conectarse como grupo social.
En términos técnicos, para proponer esta ventana como caja contenedora, me basé en el archivo fotográfico que realicé en mis recorridos por el pueblo, de manera que formalmente hubiera también una cercanía entre la instalación y el municipio, además elegí una paleta desaturada para que la atención del espectador se centre en el archivo visual y sonoro que se presenta aquí.
Este elemento, construido en MDF con unas medidas de 40cms de alto, 60cms de ancho y 20cms de profundidad, posee en su interior una muestra fotográfica de la categoría en cuestión, un bombillo led que permite apreciar dicha muestra y un parlante portátil, de aproximadamente 10cms de diámetro que reproduce en un bucle constante los audios seleccionados.
Tanto las fotografías como el archivo sonoro, son un collage de actores, lugares, y acciones sin dar protagonismo a ninguna voz en especial para fortalecer la idea de que, en esta construcción colectiva, no hay jerarquías entre los sujetos.
Es importante anotar, que las ventanas poseen su respectivo pasador de apertura, con el fin de que en la instalación estén entreabiertas, y propongan al visitante una dinámica de abrir una ventana a los recuerdos, de adentrarse en un pasado y en una memoria de una comunidad por medio de una sencilla acción, como abrir una ventana. (Fig. 75)
BOMBILLO LED
PARLANTE
20 cms 30 cms
60 cms 40 cms
Figura 75 Visualización 3D de las ventanas, de arriba hacia abajo, COMER, JUGAR Y CELEBRAR. Fuente: Elaboración propia.
Figura 76 Boceto de la distribución de los elementos en el espacio Susurros que irrumpen, en donde se evidencia las proyecciones en las paredes laterales. “Trujillo, una historia por contar” Fuente: Elaboración propia.
A pesar de que en ninguna de las historias narradas en las ventanas los testimonios mencionan su nombre, me pareció necesario que el visitante pudiera vislumbrar algunos de los gestos y expresiones corporales que las personas usaban durante nuestras conversaciones. Por ello, en este espacio, incluí en las paredes que son perpendiculares al panel intermedio, (Fig. 76) un par de proyecciones silenciosas del archivo fílmico recolectado durante las primeras entrevistas. Convertí a blanco y negro este archivo y lo intervine gráficamente, para generar composiciones que mezclen frames de las 8 entrevistas de las que se tiene material visual. Agregué sobre los videos, texturas que se asemejen a brochazos y tachones, (Fig. 77) los mismos que se hacen cuando se escribe descuidado o se necesita corregir algo, bajo la idea de que estas personas acceden a un pasado que no es estático sino
Figura 77 Frames de las proyecciones insonoras y en blanco y negro que hacen parte del espacio Susurros que Irrumpen, de la Instalación “Trujillo, una historia por contar” Fuente: Elaboración propia.
Figura 78
Visualización 3D del espacio Susurros que Irrumpen con todas las luces encendidas. Se percibe una de las proyecciones audiovisuales y el panel divisorio de la sala. Fuente: Elaboración propia. cambiante, a una serie de recuerdos, que lejos de ser estructurados, son reescritos cada vez que se narran; recuerdos que se configuran de acuerdo a la situación del presente, cuya validez radica en los significados y sentidos que el testimonio encuentre en ellos cada vez que los cuenta.
Decidí que estas proyecciones serían carentes de sonido para reforzar la idea de que, aunque existan sujetos que tengan historias por contar, el diálogo sólo podrá darse cuando haya alguien dispuesto a escuchar tales narraciones. Es una decisión de ambas partes, del que cuenta, pero también del que escucha.
Por esta razón, el sonido general que rige este espacio es el de varios candados abriéndose,haciendo alusión al arrume central de candados; para que el visitante solo tenga acceso a las historias cuando decida acercarse a cualquiera de las tres ventanas del panel central.
Figura 79
Visualización 3D de ventanas y proyecciones, que hacen parte de la espacio Susurros que Irrumpen con la iluminación que corresponde a la instalación final. Fuente: Elaboración propia.