96 Balcei 201 mayo 2022
#alcorisasaleunida
la buena mesa
Guía de alimentación y salud GUÍA DE LOS BULOS EN ALIMENTACIÓN
¿Es seguro el consumo de alcohol si padeces diabetes? Los bulos sobre alimentación copan las informaciones falsas que circulan por internet y se comparten en redes sociales y aplicaciones de mensajería instantánea. La temática relacionada con la nutrición supone más de la mitad (54%) de las fake news detectadas por los médicos que han participado en el I Estudio sobre Bulos de Salud, editado por el Instituto #SaludsinBulos y Doctoralia. ¿Es seguro el consumo de alcohol para las personas con diabetes? La respuesta corta: no, de ninguna manera. La respuesta larga: no, de ninguna manera pero argumentada. Vamos a justificarlo. En primer lugar, el consumo de bebidas alcohólicas es un riesgo para la salud de cualquier persona, tenga o no diabetes. En ocasiones este consumo es de alto riesgo, es decir, se ingieren más de 1 bebida* al día en mujeres y 2 bebidas al día en hombres de forma regular, o más de 4 bebidas en mujeres o 5 en hombres en un solo día. Mientras que en otras ocasiones es de bajo riesgo (menos de la cantidad anteriormente), pero siempre existe algún riesgo. Por otra parte, esto es común a cualquier exposición a tóxicos ambientales. A bajos niveles del tóxico estamos aceptablemente seguros, pero a partir de cierto umbral el riesgo es difícilmente asumible sin padecer consecuencias. Un ejemplo sería el mercurio que ingerimos con la dieta. En nuestra dieta ingerimos cantidades mínimas de mercurio, si estas cantidades aumentan por encima de un nivel determinado podemos padecer diversas complicaciones médicas. Y a mayor exposición mayor probabilidad de daño por mercurio. El alcohol no es diferente al mercurio en este sentido. No menos importante es el riesgo que padecen las personas con alguna patología concreta (problemas hepáticos, cáncer, etc.) cuando consumen cualquier cantidad de alcohol. Es decir, el riesgo aumenta si tienes enfermedades que empeoran con el consumo de alcohol, la diabetes entre ellas. Cualquier consumo de alcohol está contraindicado, además, en menores de edad, embarazadas y lactantes, y personas que toman medicación que puede interaccionar con el alcohol. — Más probabilidad de sufrir infecciones El consumo regular de alcohol provoca una alteración del sistema inmune que incrementa la probabilidad de padecer infecciones. La diabetes también se asocia a mayor riesgo de enfermedades infecciosas por disminución de la capacidad inmune. En resumen, el consumo de bebidas alcohólicas supone un riesgo para cualquier ciudadano. Alguno de ellos, los que tienen enfermedades como la diabetes, tienen un umbral de riesgo más bajo y pueden tener mayores consecuencias con menor cantidad de alcohol ingerida que una persona que no padezca una enfermedad previa. La toma de decisiones de los ciudadanos sobre su salud en una sociedad democrática debe ser libre. Para ser libre, deber ser informada adecuadamente. Para ello, se requiere información veraz, cierta, neutra y contrastada. La decisión de beber o no beber alcohol no debe de ser una excepción. (Continuará…)
La receta SOPA DE TOMATE CON MEJILLONES Ingredientes para 4 personas: 50 cc de aceite 1 litro de agua 0,5 cebolla 1 hoja de laurel 250 gramos de mejillones 2 patatas 0,5 cucharaditas de pimienta negra molida 1 pizca de sal 2 tomates pelados y troceados Elaboración Poner un chorrito de aceite y un poco de agua y abrir los mejillones a fuego vivo. Mientras, calentar aceite en otra cazuela y añadir la cebolla cortada en trozos grandes. Cuando pasen unos minutos, agregar las patatas también cortada a tacos y la hoja de laurel. Colar los mejillones que ya estarán abiertos y reservar. Agregar a la cazuela el agua, el caldo que se ha colado de los mejillones, los tomates pelados y troceados y la pimienta. Dejar cocer hasta que las patatas estén tiernas. Retirar la hoja de laurel, comprobar el punto de sal y servir adornando el plato con los mejillones que teníamos reservados.
EL TOMATE O JITOMATE El Tomate o Jitomate, es el fruto de la planta tomatera, perteneciente a la familia de las Solanáceas (Solanaceae Lycopersicum esculentum), nativa de los Andes. Es la hortaliza mexicana por antonomasia, junto con el chile, y uno de los más importantes legados de Meso América al mundo, junto con el guajolote, el chocolate y la vainilla. La primera mención en Europa del tomate la realizo Bernal Díaz del Castillo en su “Historia Verdadera de la Conquista de la Nueva España”. Hasta entonces, se la consideraba venenosa por su parecido con bayas y frutos que tenían esta particularidad en Europa, como la belladona, la mandrágora y el beleño. A fines del siglo XVII, el tomate ya había logrado vencer en todo el Mediterráneo los prejuicios de casi doscientos años y pasó a constituir la base de sus cocinas. La italiana y la española, de hecho, serían hoy inconcebibles sin su presencia. En Italia, por su versatilidad, se le llama “manzana de oro”. En los últimos años, el tomate o jitomate ha generado un gran interés entre la comunidad científica por el efecto beneficioso que parece tener sobre nuestro organismo. Los primeros estudios se centraron en los beneficios que aportaba en la prevención de ciertos cánceres, puesto que quienes lo consumen con frecuencia están menos expuestos a cánceres de colon y de próstata. Otros estudios posteriores han demostrado las propiedades antienvejecimiento de una sustancia únicamente presente en el tomate, el licopeno. Las personas de edad con índices mayores de licopeno en la sangre tienen una mayor agilidad a la hora de realizar todo tipo de actividades. Por otra parte, el tomate destaca por su alto contenido en carótenos y por ser una fuente de fibra. Contiene minerales, como el potasio y el fósforo, y de vitaminas, como la C, E, provitamina A y vitaminas del grupo B, en especial B1 y niacina o B3.
CONSEJOS DE COCINA CÓMO COCINAR SIN SAL
Cómo sustituir la sal según el alimento Si se trata de cambiar la sal por otro condimento, debes tener muy en cuenta que no puede ser al azar, ya que cada alimento o preparación tiene condimentos que le combinan mejor que otros. Además, si quieres una comida más gustosa, lo ideal sería mezclar varios trucos a la vez, por ejemplo, la forma de cocción y los ingredientes precisos para aliñar las comidas sin sal. Por esta razón, a continuación te contamos cómo condimentar las comidas sin sal eligiendo los condimentos adecuados según el tipo de alimento: Pollo: ajo, zumo de limón, hojas de laurel, romero, comino, albahaca, paprika, tomillo y curry. Es interesante mencionar que a las aves en general les funciona muy bien los condimentos preparados a base de especias y mantequilla. Con esta pasta se puede cubrir la pieza de carne para dejarla reposar unos minutos antes de cocinarla. Pescado: cebolla roja, ajo, perejil, romero, tomillo, paprika (pimentón dulce), eneldo, hinojo, nuez moscada, zumo de limón, pimienta y romero. En el caso de los pescados grasos (como el salmón), la salvia y el eneldo son la mejor elección. Por otra parte, si se trata de guisos de pescado, usa pimienta verde. Huevos: ajo, perejil, romero, tomillo, zumo de limón, estragón, pimienta y orégano. Si se trata de mantener estable las claras de los huevos, sustituye la sal por cremor tártaro o limón (u otro ingrediente ácido). Mariscos: romero, tomillo, ajo, orégano, perejil, pimentón, pimienta, limón. (continuará...) Juan Alonso