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4.4.7 Educación Estética
✓ Formar estudiantes sensibles y autónomos.
4.4.7 Educación Estética
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La inclusión de un eje de educación estética busca dar suficiente peso a las áreas expresivas y de trabajo que las niñas, niños y adolescentes hagan sobre sí mismos en los campos formativos, colocando en las artes y en la perspectiva estética la promesa de producir mejores aprendizajes tanto para la integración social como para el desarrollo cognitivo y la expresión personal.169
Por educación estética se entiende una dimensión didáctica, metodológica y pedagógica que ofrece a las y los estudiantes la posibilidad de crear relaciones con el mundo que atienden a los aspectos reflexivos y emocionales, con la finalidad de contribuir al autoconocimiento y a una mejor relación con la comunidad desde lo sensible, lo plural y el ejercicio del pensamiento crítico. Este Eje busca valorar la exploración sensible del mundo al reconocer y recuperar el valor formativo de las experiencias estéticas que se producen en las y los estudiantes en la relación con las manifestaciones culturales, las producciones artísticas y la naturaleza, así como con los contenidos de los demás campos formativos.
Cuando hablamos de educación estética no proponemos el estudio de la disciplina filosófica que así se denomina, sino el acercamiento a un conjunto de procesos que se pueden poner en juego en la relación con
169 Inés Dussel, Definición de dominios de conocimiento para efectuar nuevas progresiones de aprendizaje asociadas al marco curricular de referencia nacional, op. cit., p. 44.
diversos objetos y sucesos. Entre ellos cabe destacar la ampliación de la percepción, el desarrollo de la sensorialidad, el desarrollo y regulación emocional, el sentimiento de pertenencia, la empatía, la posibilidad de cooperar y afrontar conflictos, y la capacidad de disentir a partir del ejercicio del juicio crítico. Si bien tradicionalmente se ha unido la dimensión estética a las artes, y éstas pueden ser una vía para su desarrollo, a partir del arte contemporáneo, particularmente en las propuestas latinoamericanas, y de las perspectivas feminista, decolonial170 e intercultural, se han hecho profundos cuestionamientos a la idea de que solo el arte (masculino y occidental) permite la experiencia estética.
El campo de la estética presenta a las y los docentes estrategias de enseñanza y aprendizaje, herramientas didácticas y ejemplos diversos que pueden ilustrar y propiciar aprendizajes significativos al abordar los contenidos específicos de los cuatro campos formativos. Considera, asimismo, los avances científicos en el campo de las neurociencias, sociología, pedagogía, historia, etcétera, los cuales han demostrado que la estética genera lazos profundos de cohesión social, potenciando el desarrollo cognitivo, crítico171, emocional y que tiene incidencia en la formación de la conducta ética.172
Acercar a las y los estudiantes desde temprana edad al goce y la producción de la música, la danza, el juego, la pintura, los artefactos artísticos y la belleza natural, tiene la virtud de ampliar su espectro reflexivo y emocional, pues en esta clase de experiencias el individuo se
170 Para profundizar en el tema de la estética y decolonialidad, Cf. Mignolo, W.: Reconstitución epistémica/estética: la aesthesis decolonial una década después. https://revistas.udistrital.edu.co/index.php/c14/article/view/14132 171 cf. N. Carroll (2003), ‘Aesthetics and the Educative Powers of Art’, en Randall Curren (ed.) A Companion to the Philosophy of Education, Blackwell Publishing, pp. 365-383. 172 cf. Howard Gardner (1994), Educación artística y desarrollo humano, Barcelona, Paidós.
interroga por sus emociones y sentimientos, por sus sensaciones y los pensamientos que conlleva la emoción estética; además, se cultiva el ejercicio de la creatividad, la cual tiene incidencia en todos los campos formativos.173
La dimensión estética, en la mayoría de los casos, favorece también una formación ética al contribuir a crear ciudadanos libres, tolerantes y sensibles ante las diversas manifestaciones culturales que se ofrecen en el entorno. La experiencia estética, de acuerdo con Rodolfo Wenger, es un modo de encuentro con el mundo, las personas, objetos, fenómenos y situaciones ya sean naturales o creados por los seres humanos, que produce en quien lo experimenta un placer, un conjunto de emociones y un tipo de conocimiento sensible, es decir, de tipo sensorial, que contribuye al desarrollo corporal, cognitivo, afectivo y sociocultural.
El eje de educación estética en este plan de estudios:
✓ Favorece un clima de respeto y cordialidad, en todos los campos formativos, en el que sea posible, para todos y todas, la expresión de las ideas, las emociones y los juicios, sin temor a represalias o exclusiones. ✓ Crea un ambiente estético en las escuelas, a partir de las manifestaciones culturales propias de sus comunidades, en cuya producción todos y todas puedan participar. ✓ Permite aprovechar los materiales y recursos de las artes para promover experiencias estéticas dentro de todos los campos
173 De acuerdo con Guilford: una persona creativa está “dotada de iniciativa, plena de recursos y de confianza, lista para enfrentar problemas personales, interpersonales o de cualquier otra índole”. La creatividad, para este autor, es “la clave de la educación en su sentido más amplio” Guilford, J. P. et al. Compilador: Strom, R. D. (1983). Creatividad y Educación. España. Ediciones Paidós.
formativos, a partir de los momentos creativo y apreciativo.
Pueden considerarse, entre otros, el movimiento, el sonido, la expresión corporal y verbal, la composición escrita de poemas y relatos, la experimentación con el color y el uso de las formas, la producción de instalaciones, videos, performances, o el uso de objetos cotidianos de modos no cotidianos. ✓ Fomenta momentos de producción individual y colectiva y momentos de apreciación de las producciones, en todos los campos formativos. Y encontrar modos de articulación de estos momentos y modos de producción. ✓ Da tiempo a los procesos, hacer pausas, permitir que las y los estudiantes permanezcan con atención en lo que están haciendo. Generar momentos para compartir las experiencias, procesar las emociones y reflexionar, individualmente y en colectivo. ✓ Permite diseñar secuencias de actividades, en todos los campos formativos, en las que los estudiantes puedan apreciar los detalles, los ritmos, el equilibrio, los contrastes, las distintas relaciones entre los elementos, entre otros. ✓ Favorece que las y los estudiantes tengan momentos de encuentro gozosos, lúdicos y sorprendentes con todos los contenidos escolares: que experimenten la alegría de producir en conjunto, que tengan el gozo de cooperar en proyectos colectivos con sentido (multi e interdisciplinarios), que puedan ser críticos de las producciones propias y ajenas, así como recibir la crítica; que sientan la satisfacción de proponer y ver plasmadas sus ideas, que puedan volcar su atención plenamente en un proceso, etc.