A PERICLES
PARA EL DR. QUEVEDO BAEZ.
Jamás subió á la tribuna sin rozar á los dieses que .no permitiesen se escapase de su boca una palabra inúil para la cuestión de que iba á tratar PLUTARCO
:Oh ilustre procerde la antigua Atenas, orador, y filósofo «caudillo, como los viejos siglos, me arrodillo ante el recuerdo de tus glorias plenas!
Tus discursos y pláticas amenas dieron á Grecia inmarcesible brillo. y austero en tus costumbres v sencillo, un imperio fundaste sin cadenas.
Huérfana de tu- aliento, la tribuna :Cuán pocos la han hollado con fortuna .. "o Nadie á los dioses va, tiende sus brazos ... ..
Hacen falta, oh Pericles, caracteres que arrojen álos torpes mercaderes del profanado templo, á latigazos.
Félix Córdova Davila.
.h liustrada
D. NEe BARREIRO a CSCONTRERAS SERMAN DIAZ
D:A ECTOR DIRCTOR ARTISTICO EDITOCOR
Es sensible tener que empezar esta mi primera crónica para VIDA ALEGRE Con una nota triste. Doña Isabel Openheimer de Subirá, elemento distinguidísimo de la sociedad ponceña dejó de existir, después de penosa enfermedad, en los últimos días de la semana anterior.
Fué su entierro, al que asistieron los elementos.mas significados de la ciudad, una imponente manifestación de duelo. Más de cincuenta coronas, ofrendadas por familiares y amigos cnbrian el féretro como si quisieran aprisionar para retenerlo entre los vivos, el cuerpo gélido de la buena puertorriqueña que compartió las delicias de un - hogar dichoso con el amigo Subirá.
El venerable patricio don Ermelindo Salazar con tono reposado y en conceptos elevadísimos, despidió el duelo cerca del nuevo cementerio católico, donde Belita duerme, bajo la sombra de los saúces y los cipreses, el sueño augusto de la eterdidad.
**-?:
Germánico Belaval, que á juzgar por lo peco que le preocupa la vida - del espíritu, citra su lelicidad en la tierra, se ha detenido á pensar en la necesidad de hacer algo por el progreso de Ponce y si los elementos que le rodean secuncan sus felices iniciativas, volverá esta ciudad á ser la perla del Sur ó sea el Ponce de los buenos tiempos.
Pero no basta que Germánico lance la idea redentora y hava sido acogida con verdadero entusiasmo por prestigiosísimos elementos: es necesario que todós los ponceños nos demos cuenta de lo que esta asociación significa y nos dispongamos á conquistar - el triunfo, sin vacilaciones ni desmayos en en el camino que es largo y un tanta escabroso
Por culpa de los ponceños, es doloroso: pero es necesario confesar esta triste verdad, han pasado Á manos de extraños manantiales inagotables de riqueza exuberante
¡Quién supiera! dijimos después que la obra se había consumado y el mal no tenía remedio
Y Ponce, la ciudad progresista por excelencia,
la que fué un día indiscutiblemente el cerebro de la isla, se detuvo como la mujer biblica contemplando el gran desastre.
Pero llega Germánico, que no cree en los - mi lagros y sabe que las moyores conquistas del progreso se deben al esfuerzo colectivo, y le dice á Ponce -¿Qué haces Horando como una infeliz mendiga, tus desventuras á todo el que pasa?
Y Ponce, la ciudad altiva, se levantó gallarda como quien fia en sus propias fuerzas y surgió la Asociación para el progreso de Ponce que coranará el éxito más espléndido
Una comisión compuesta de los prestigiosos cubanos. Enrique Thomas, Fernando Salcedo Bonastra y Perfirio Caárcasses, ha llegado á esta ciudad en el vapor julia con el fin de _trasladar á Cuba los restos del que fué General del Ejército Libertador, Luis Marti Valdés.
Tierra que asi venera sus hijos, tiene derecho á la libertad.
Puerto Rico, pena dá decirlo, ni siquiera ha podido traer de Paris lus restos de Betances Y hablamos de independencia Ros Y CLER.
SIEMPREVIVA
Sobre la tumba de la s:ñora Isabel O. de Subirá.
Si es verdad que ni el dolor, ni el sufrimiento terminan donde empieza un sepulero, no es posibJe creer que las almas buenas puedan continuar su martirio después de la muerte.
Belita fué un ángel en la tierra y al abandonarla deja el recuerdo en las almas sensibles que supieron comprenderla.
Fué una elegida que vino al mundo á enseñar como debe practicarse el amor al prójimo y el amor al hogar. donde ella. como reina y señora hacía dichoso el santuario feliz cumpliendo con los más santos deberes de esposa modelo y madre ejemplar. Ya terminada su misión vuelve á la mansión del Altísimo dejando como estela luminosa el recuerdo de sus bellísimas cualidades.
La sociedad de Caguas, que la contó entre sus más valiosos elementos durante seis años, lamenta esta irreparable pérdida.
Al hogar lleno de dolor de la familia Oppenheimer-Subirá llegan las simpatias de las que conociamos á Belita.
Clara Aurora
Caguas, Oct. 1g11.
Alezántese don Celso que ya asoma la cabeza, dijo la sirvienta dando fuertes golpes en el seo con la armadura de un colador de café.
-Que es lo que asoma la cabeza, muchacha,? la díje, rebujándome en la sábana
El cometa Mírelo que grande, Y efectivamente, hácia el noroeste se veía el intrépido mensajero del espacio con una cola mas larga que una opinión del Attorney General.
Al anuncio del cometa se fueron levantando las vecinas y hubo los naturales comentarios que siguen siempre á la aparición de estos astros rabudos y barbudos
Y no crea uno en la voz del pueblo, dijo doña Anastasia, á lo vez que sacudía una chancleta.
Esto es la guerra de los italianos con los jóvenes turcos.
Anastasia no seas sandia, dijo <l marido Será la guerra de Italia con Turquía. r
¿No comprendes que eso de los j<'n'ení*s turcos es un epíteto?
¿Un qué?
Mira, sigue mirando el cometa.
Esto no es por la guerra, dijo á su vez doña María. Este cometa lo que trae esla peste,
¿La peste?
Pues que lo fumiguen, dijo desde un extremo de la azotea un vendedor de guarapo á quien lá nueva ley de sanidad no deja vivir tranquilo;
Y el cometa impávido, indiferente á todos los comentarios. Como si con el no fuera la cosa
Ríanse. volvi5 á decir doña Anastasia, ríanse todo l9 que quieran; pero mi madre decía:
Su madre!
-Paso.
Señores, dijo un tanto amescado el marido de doña Anastasia, restamos entre personas decentes ó estamos entre el chillo?
Nadie chille. Tengan en cuenta que son las cuatro de la mañana y estamos alterando la paz, dijo un ex-policía.
Y el cometa impávido, como si se pasara todo aquello por la cola.
Fué poco á poco cediendo la bayoya y entonces Zomó la palabra don Juan.
Este cometa, señores, no trae peste. ¡Foo!
Si vuelve á armarse el relajo no sigo. Que siga, dijimos todos.
Tampoco este cometa trae guerras.
Murió.
Su familia
Este cometa y que Dios me castigue si hago mas que expresar lo que me dicta el corazón, viene á anunciarnos que si nos vemos libres de las calamidades que pesan sobre el pais, estaremos- amenazados - de otras peoresSe irá el Attorneyv, y vendrá otro que nos lo haga desear.
Se irá también el Auditor Y vendrá otro mucho peor.
Se irá el del Tesoro, el de Obrae Públicas y el de Educación
¡Se irá hasta el Gobernador!
¿Y San Telmo? preguntó un jugador de gallos, que acababa de.despertar
Don Juan ahuecó la mano, cerró un ojo y á través del telescopio improvisado contempló largo rato la cola del cometa.
Al fin exclamó
San Telmo, no se va. Habrá que enterrarlo en el país
¡Para colmo de iesgracia! exclamaron todos.
Rianse ahora de los cometas, dijo doña Anastasia.
"II.I-
CELSO DE LOS RIOS.
ANTAÑO Y OGAÑO »
NuEeSTrO viejo amigo Don Ramón tenía la palabra.
Si, señores; aquel fué un suceso verdaderamente conmovedor. El muchacho era muy estimado en todo el pueblo tanto por sus virtudes como por su talento.... ¡y enamorarse de tal modo!.... Yo no puedo comprender como es posible chiflarse hasta tal punto....
Figuraos si tengo que considerar el caso como irreparable cuando aquel era mi amigo predilecto. Casi de una misma edad; estudiantes en las mismas Aulas:. Archivos mútuos de nuestras respectivas vidas.... en fin, lo más íntimo, lo más estrecho que pueda concebirse. ...
Y es el caso que de su carácter frívolo en cuanto á pasiones. extrañas conste que en mi concepto la amistad ño es una - pasión pues tiene demasiadas serenidades para merecer tal nombre que de su ca rácter, digo, no era de esperarse una trajedia tan lamentable.
Fué pues, que un día sorprendí . de pronto á mi amigo preodupado. Le interrógué en vano. Indagué: fué inútil Pasó tiempo y lacosa crecía. *A
Estábamos para concluir nuestras carreras Juntos habíamos entrado á aquel templo del saber y juntos íbamos á dejarlo. Nos doctoramos ,el en derecho y yo en medicina, y nos separamos con mues-ros títulos en 1a faltriquera, que llevábamos gozosos á ofrecerlo á nuestros padres como- premio á -sus desvelos impagables. No se porqué una inquietud interiór me avisabn que aquella mano iba á ser estrechada por última vez. En efecto, no hacía ún mes que estaba en casa cuando recibí la nueva triste del suicidio de mi amigo queridísimo:...
¿Qué cómo acaeció? .Veréis.... después
lo supe tedo por boca de otro de sus amigos f que logró arrancarle el secreto antes de cometer la grave falta.
Estaba frenéticamente enamorado y no era correspondido. Después de haber luchado mucho tiempo por vencer con lá constancia, concibió la terrible resolución. Acercóse un dia á la reja de su amada, la sín piedad, v y con acento sombrío, la dijo:
Por última vez, Carmen, ¿no mé ama Vd?
No! respondió ella secamente.
Reflexiónelo Vd. señorita.....
He dicho que no, caballero!....
Llevó sereno y dolieñte mi amigo, su mano al bolsillo delpan talón, sacó unrevo!rer y su sien quedó destrozada.
Fues mire WNd lo que son los tiempos, amigo mio, dijo entonces Andrés sonriendo.
Hace poco, mi amigo Paco Velez pretendía á Rosa M aquella trigueña guapísima que vive en en la calle X., y precisamente luchaba con el obstáculo de la indiferencia más fría por parte de la joven
Pues bien un día se llegó á ella con una pistola en el bolsillo y á poco más ó menos del mismo diálogo trágico por Vd.referido, Paco se guardó el arma, que también había mostrado, y dijo con impavidez flemática:
-¿Cree Vd, que he de ser yo tan ridículo que por esta contrariedad que mañana he de olvidar, voy á pegarme un tiro?
¡Le aseguro á Vd -Don. Ramón, -terminó Andrés que fué ella quien entonces estuvo á punto de suicidarse!
» TUaAN
JOSÉ DE.J. ESTEVES
Lo que no dice el Gobernador
Se me ocurre, amigo Parra Pues la experiencia demuestra, Que hahiendo tanto direro Y es del caso lo peor: Debier i aflojar un poco Que paga los vidrios rotos La mano del Tesorero. El pobre trabajador.
1. "Wm.
Después de una 'corta temporada en San Juan, donde cuentan con tantas y tan - merecidas simpatias, han regresado á su residencia de Vieques las distinguidas señorttas Eulalia
Sarria y María López, amigas nuestras estimadísimas.
Acompañada de su encantadora hija acaba de regresar de los Estados Unidos la distinguida señora Lacroix viuda de Soler, tan estimada en nuestros círculos sociales
ViIDA ALEGRE les envia el más afectuoso saludo.
Carlos Cid y su- encantadora esposa, han embarcado para los Estados Unidos en viaje de recreo.
Les deseamos las más gratas satisfacciónes en el continente. * +
El doctor Mayoral, prestigioso secretario de la Junta Superior de Sanidad contraerá ma.trimonio en los primeros días del mes entran-
Barba Corr¡da
«<En Londres se ha fundado la Socie/y for the propagation of the h;oard.»
Esta importante entidad que ha sido en Londres fundada tiene por único objeto la defensa y propaganda del uso, hoy abandonado, del bigote y de la barba. Por un extraño capricho de la moda casquivana, van muchísimas personas completamente afeitadas, como si fueran toreros, dignidades eclesiásticas ó cómicos ú otras gentes que no usan pelo en la cara.
-La Society nos demuestra las positivas ventajas que tiene para los hombres
Ki Ñ*' in 1ll km&dI WJ ,ñhm I|I
te con la distinguida señorita Isabel Suarez, delicada flor del vergel ponceño.
Que la felicidad sonría siempre en el muevo hogar, son. nuestros deseos.
% * *
Acompañamos al -querido amigo Timothée en 'su justísima pena por haber perdido en Fajardo á su anciana madre, suceso ocurrido en los primeros dias de la semana
A beneficio del conocido maestro don Justo Pastor Torres á quien nuestroslectores hal r .n aplaudido más de una vez, se celebrará en Yauco un espléndido concierto en el que tomarán parte elementos distinguidísimos de aquella culta sociedad.
X s
Valentín Monroig, uño de los buenos amigos de esta empresa, saldrá en breve para Europa
No hay que decir, pues ya lo habrán adivinado nuestros lectores, que Valentín va en viaje de recreo.
Bienaventurados los que pueden recrearse á través de la Europa pintoresca.
el llevar bigote y barba, apéndice capilar que embellece y que realza todas las fisonomías, aunque sean las más raras, Las facciones incorrectas en las caras rasuradas se denotan en seguida y no hay recursos ri nada, por mucho arte que se emplee, que puedan disimularlas. Pero, en cambio, los defectos que presenta nuestra cara, fácilmente, sin esfuerzo, con cuatro pelos se tapan. En fin, que la Society que tal teoría propaga se propone que seamos hombres.. .;con toda la burba! RENATO.
mu DNN i PUNE l" 4/3 / D Dq
.=
A
+
E *
+
Doctor, Doctor, por su madre!
zadera pe la re Le pide el país entero Cansado de soportar
Que ta anto tiempo ese mosquero. *
La vitriste. ...
-Qué tienes, Carmen....
Esto lo enardeció sobre manera.
Pero, es posible que no haya berros..?
--Nada.-...
E hizo un pucherito.
U Pero, vas á llorar....? Cuéntame, qué ocurre....?
DUnusted no sabe....?
- No, Papá se opone....!
Y retorció los brazos
A que me case con Lucas....
No te apures; si tudos los papás son lo mismo.
- Pero el mío es una fiera.
-No, hija, si don Patricio es un santo.... Santo....! Y yo oigo á mamita que á cada rato le llama demonio....
Jesus, niña....! Y por qué se opone tu papá.... .? -
Toma, porque Lucas es un arrancao y porque ... .(esto es lo que más me aflije) lo encuentra feísimo.... Sin duda papá está empeñado en que me case con un Adonis....
Bien feo era él cuando se casó....! Mamá me lo dice á cada rato....
Y en verdad, don Patricio no quería casar á su hija con Lucas. Capricho de viejo, pero capricho al fin y que no había quien se lo quitara de la cabeza.
Un día se convenció.
Ustedes verán:
Tenía don Patricio una. pasión. insensata por los berros, mátita que crece y se reproduce á vrilla de los manantiales.
Se los comía crudos, en ensalada, cocides fritos, de cualquier modo; vamos, que don Patricio era un berrízero en toda la exten_ sión de la palabra.
Un día, dvrante el almuerzo, pidió su plato favorito, sin que se lo trajesen.
Se puso tucioso.
Y. mis beiyos .?
No se han podido hallar.
Tuvo que C9 iarmarse.
A la comida ocurrio lo mism»: no hubo berros.
Don Patricio dió -un puñetazo sobre. la mesa.
Madre é hija permanecie:on impasibles como obedeciendo á un plan.
Ni uno; no se han podido encontrar....
Oh, he de averiguarlo....; he de averiguarlo:.. .
Y las amenazaba con el tenedor.
Poco añtes del anoche.er, don Patricio: se encontraba fuera del pueblo, en un sitio donde los berros crecían por millares. - AUf los había él, no comido, sino pastado.
Pero apenas anduvo un par de .metros, fué sorprendido ror la presencia de un sujeto que, no á larga distancia, entreteníase en arrancar matas, sin detenerse ni una vez.
Ese es el pillo que se los roba murmuró don Patricio, y por eso en la casa no los han podido co1aseguir.
Ocul:ándose tod lo posible, llegó hasta donde estaba el ladrón.
Parecía una persona decente, á no «er por las maros sucias, de 12 misma tierra, un pedazo d: faldeta que le colgaba por detrás, y un sudor pegajoso que le corría por la cara hasta gotearle por la nariz.
Al principio, como ya era Casi de noche, ro lo pudo reccnocer, pero le oía exclamar, c .da vez que arrancaba una mata:
Para don Patricio. .! .Para mi suegro..' Para la persona -más decente de la pobla. ción.:.! .Pará el padre de -Carmen.-.! -Esta matita se la comerá don Patricito..! Y ésta' Y todo el montón para don Patricio..! Para mi suegro..! Ay, qué matita linda para -don Patricito. ....!
Y seguía arrancando.
Don Patricio no pudo contenerse.
Salió Ce donde estaba, y abrazando. al pícaro de Lucas, díjole enternecido:
_over, has:a hoy le había tenido á usted por un hipopótamo y tan bruto como un avestruz: pero ahora.comprendo su valer y desde este instan e le concedo la mano de mi hija.
Lucas le besó filialmente, invitándolo allí mismo á comer de la fresca mata.
Se artaron como burros, llevándose el res to para la casa
Aquella noche hubo fiesta en el hogar de don Patricio.
Doña Facunda, su esposa, mucho tiempo después, decía que aquella noche había sido la noche de los-berros.
Cármen y Lucas, desde que se ca-a-on, se
a LOS BERROS 1 *
Ya nada....La noche
Y entonces la frente se cierne ligera; que el fuego caldea, la sombra domina más grande parece, del espacio dueña; colesal, inmensa y el mar á lo lejos roncando, Abarca el presente y la Historia dormido en la playa; ¿descifra? ¿adivina? parece que reza. ¡Tal vez es que sueña'
De pronto la luna
La noche tranquila. rasgando tinieblas, la noche serena, asoma rojiza, inspira en mi alma manchada, sangrienta, distintas ideas y el mar va dejando en las plavas, Esas noches quisiera pasarlas de copos de espuma, muy solo contigo.... rosarios ds perlas que nadie nos vea
Transcurren las horas Mirande en tus ujos calladas y lentas. lucir las estrellas, Rodando en el cielo besando los rizosse van las estrellas, de tu cabellera y las noches medrosas y obscuras, Vivir una noche los sueños las olas dormidas, que el alma acaricia, algo triste parece que cuentan.... ¡Qué noche suprema!
A ratos las nubes Transcurren las horas se vulven más densas, calladas y lentas y fingen fantasmas Rodando en silencio de formas siniestras se van las estrellas Retumba á intervalos el truenc, Y entonces mi espíritu, como una amenaza, á sclas comtigo, como una blasftemia. [ sonríe y te besa....
iban todas las tardes á brrrear, es deacir, á comer berros, y cuando don Patricio les preguntaba de donde venían, contestábale su hija con cárita maliciosa:
-Pues nada, papaito....: de berrear...
Y todos los años tenían un pequeñuelo....
En fin. que lo de los berros se convirtió en una felicidad
M: GONZALEZ GARCIA No puede ser
El Concejo Municipal de Mayagúez ssolicitó del Consejo Ejecutivo autorización para
emplear la suma de $2,500, sobrante del empréstito que realizó aquel Ayuntamiento en la reparación del teatro de aquella ciudad que ha sido clausurado por disposición sanitaria
Y el Consejo Ejecutivo negó la autorización
Pero la cosa cambiaría si al pedir la transferencia hubieran solicitado también un experto para dirigir las obras del teatro
A , ')¿
| PO - d. PEREZ LOSADA. « - = s
INSOMNIO
F A<
En el sitio de contumb:< en que el pú'nlii:n despide á los seres que esta vida 1an pobre y triste abandonan, yo recuerdo 2queila tarde, haber visto congregado á un gran público, afectado con la triste oración fúnevre, que un orador y poeta de altos vuelos p-onunciara:; Yo recuerdo haber sentido que brotarun de mi pecho y á mis ojos se asomaroa muchas lágrimas, que á mi cruel indiferencia -contener no fué posible:
- Yo recuerdo que igualmente á los ojos de o'ros muchos se asomaron también lágrimas; Yo recuerdo las palabras del poeta que allí hablara en memoria del poeta fenecido:
Las recuerdo en una mezcla de placer y de tristeza, y resuenan en mi oido, al igual que én el instante que el orador, inspiraco por el dolor, pronunciáralas;
«Eradjoven y po.ta - Dijo Poeta de una gran inspiració. y de un estro sobrehumano. Todas sus composiciones s0a ricas inspira. ciones, hijas sobrenaturales de su mente de hechicero, de aquella mente divina, pebetero de perfumes orientales.
Sus versos son filigranas, son tazas de po.celana rebosantes de -ambrosía, jovas riC.ment+ cinceladas y adornadas con valiosa pedrería.
Esta tarde, en que en todos aquí late un sentimiento de pena por la mucrte del gran vate, está de gala-
¿Lu ven ustedes?
Tan pronto como llegó á la Corte Federal un juez, puso en libercad á los generales dominicanos -
Porque por encima de ciestas combinaciones está la ley cuando al frente de los tribumales de justicia hay magistrados que saben interpretarla.
Morales y Jimenez estan en libertad y la redacción de ViDa ALEGRE los felicita.
Y ahora un encarguito:
Si vuelve á ser Presidente de la República, amigo Morales, bo se olvide de llevar á San Telmo al Ministerio de la Guerra.
Al distinguido amigó y compañero, Ferdinand R- Cestero.
Antójaseme que el alma del vate ha alzado el vuelo y ha derramado en el cielo su divina inspiración.
En cada nube dorada de esas que ahora contemplamos, veo una estrofa de las suyas retratada, y en cada rayo de luz hay algo de su mirada.... .
Pero, ¡triste realidad!, el poeta ha muerto! Ya no dará más canciones. Nuestros tristes corazones que hoy lloran en su amargura elvidarán su pasado ¡Nada en el mundo perdura! ¡Todo muere! Todo suc¡f1mbe al dolor y se olvida con las luchas de Ía vida.
Por eso yo pido á ustedes, ¿n memoriam del ya ido, que á cada puesa de sol que contempléis, recordéís al poeta fenecido:
¡Que ese recuerdo será como sagrada oración que musitada en su honor hasta el cielo subirá!
¡Como una nube de incienso quemado en memoria de é.'
¡Paz á sus restos!'»
Así, poco más ó menos, recuerdo habló el orador. -Después, bajamos al cementerio y el ca<1ávef se ente:ró
Desde entonices, cada vez que vo contemplo una de esas que aquí hacen tan variadas y brillantes ¡ ues:as Ce 'sol. me recuerdo del poeta que en aquella linda tarde nasta dejarlo en su tumba todo un pueblo acompañó.
CONRADO ASENJO.
No quiere ser
Mr. Barker no quiere ser alcalde de Bayamón.
*s lo dice en una carta que escribe á sus amigos de aquella localidad.
¿Quienes son los que se empeñan en que'
Mr.- Barker sea alc: 1 le?
Mr. Barker es un hombr-e honrado, y sabe que á ningun hijo de Cataño lo nombrarían alcalde de su pueblo,- del pueblo de Mr. Baker. . ¿Porqué ese empeño en nombrar á
Mr. Barker alcalde de Bayamón?
¿No han ovido que no quiere ser?
El muchacho es bueno.
EL DUELO DEL
POETA
Gazosa como una mariposita de luz, charla é hilvana cnsitas menudas esta Amelita precorísima amablemente tierna en su edad fresca de ocho años.
Pequeñina y brevísima, como si tal debiera ser para que asombre con su diszernimiento equilibrado; criaturita perfilada como línea imprecisa, ideal; boceto curioso de persona que será, pero que todavía no es sino una lijerisima y diminuta muestra, finje su fisoncmía rítmica la de una virgencita infantil cuva mística gracia busca errabunda adoraciones y holocaustos. Su cabecita itálica, primorosamente cubierta de rizos dorados y copiosos, que-caen, en harmónico desorden, sobre el gracioso busto de bebé, clama bendiciones y cariños inexpresables. No sabemos qué hay de admirable en esta ch:cuela alegre, de verba de viejo, de pensamientos de adolescente, de vivacidad mental sólo posible en gente cultivada en la vida ó en los libros. Amelita es ul caso de precocidad fuerte que mueve á reflxión. En esto de los miros precoces se nos antojan muchas particularidades, que, han de caer, seguramente, en la jurisdicción de sérios estudios psicológicos.
Esta niña que conversa con sindéresis increíble. sin descoyuntar las ideas: que pasa de un juicio á otro con una coherencia que intriga; que habla de gustos, y de -emociones de belleza, ó de terror. con una ingeénuidad que enagena, y, hasta hurgar suele eu la ética de las cosas que narra sin que nádie la asesore, deja un como agradable cosqu leo de curiosidad en que uno acaba por .creer que es niña solamente por su capacidad corpórea, niña que ha vivido otras vidas en edades remotas. Un espíritu viejo. Porque, no es posible,- salvo que álguien á estas horas haya descubierto y probado con mejores puntos de vista que en esto no hay fenómeno alguno no es posible que una criaturita que no ha vivido ni lo azul ni lo hoseo de nuestro Zov, lo preconciba, anhelándolo ó abominándolo, que ciega aún para sus manijiestaciones culturales y amorales, de todo sepa con su locuacidad de frescura de fontana y con su predis posición á exquisiteces espirituales. Amelita gusta de las óperas, y canta, con entonación y tiempos de pentagrama, algunos números de operetas que ha visto y escuchado
Recuerdo haber leído un caso de precocidad curioso como éste. En Ciudad Real, España. En etra niña He olvidado su. nom-
CORDOVA.
bre. Basta recordar lo esencial del caso Cuentan sus admiradores que delante de ella no podía conversagse, á menos que Se fuera correcto hablista. Apenas contaba seis años. La frase mal dicha, mal pronunciada delante de ella, requería su misericordiosa correución. El discurso tenía que ser delante de ella, correcto, recuidado, porque ella estaba pronta á enseñar cómo se expresaba conforme á las leves del idioma. . Había que hablar á ley de académico. Y digo yo, éstos son visibles casos de preciencia. Y nootra cosa. No hay nada de mejor factura cerebral ni de mejor armonía nerviosa que dicen algunos. Eso es muy simple. Y tal debe creer un pobre mozo de mulas, y no las gentes cultivadas. Eso es, simplemente, un espíritu superior que -salió de las imbecilidades y desatinos y se pliega en fulgores de sabiduría. Nada más. a Esta Amelita, que revela edades ancestrales. insistimos en esto - no dice tonterías. Conversa astnmtcs que merecen extática atención, sino por lo que interesen, por la lógica de la exposición que cuida inconsciente, en una maravilla de tino y de despejo increíbles. n
La decíamos el otro día:
Te querrán en tu casa, muchísimo ¿verdad?
Sí, mucho: pero, ¡Tulín sí!!
Y esta picaruela, sa/aa se perdió en vehementes predilecciones, para con su Tulín, con toda su personita; con el gesto; con sus ojitos vivaces y claros, con esa vehemencia que nace de las alegrías imperturbables y recónditas de los niños buenos que creen que cuanto les rodea y ha de s=guirles no es sino besos y caricias.... reclinados en el lírico madrigal de los serenos días que viven..-.
¡Pobrecitos! Siu saber que Vida, á la vez que les recibe con dulzores y salutaciones acariciantes, y les envuelve en túnicas de linones albos y sedosos, y riega y perfuma con alelías y resedá del prado de sus primaveras felices las silenciosas estancias que guardan su sueño de infantes deliciosos, lleva eculta y guarda, artera, una pócima de desilusiones y dolores con que amarga cruelmente la enig- -mática felicidad futura. ¡Pobrecitos! Tal vez son así, ¡oh cruel paradoja! para que en í su adivinación sepan antes de todas sus amarguras y todas sus punzadoras roalidades.
ENRIQUE LEFEBRE.
a ].
l AA _/ | u
NIÑOS
- VIEJOS AMELITA
Me cogió desprevenido
Como son ingenieros tienen talento v destreza: Y cuando dicen dar duro, Dan duro + en la cabeza
Cuando paso junto á el//a, en esas noches claras y hermosas, en que puedo contemplarla á mi antojo, y en vez de envolverme en sus miradas, fija sus negras pupilas en la luna, que callada y misteriosa cruza por el cielo, mi pensamiento se abisma en un mar de confusiones; y siento celos del astro pálico que en el misterio de la noche envía sus ravos- de amor sobre la tierra.
En sus miradas ardientes asómase un alma soñadora presa en.lá cárcel del hastío: alma que elevándose por sobre la vulgaridad que la rodea, busca sin duda en la triste viajera una esperanza ó un consuelo Y quisiera en esé instante cruzar el espacio» yendo á colocarme junto al astro nocturno para robarle el secreto de aquella confidencia.
Esa mirada que le niega á mis ojos esa mujer, en los instantes en que mi pupila desea fundirse en su pupila ¿qué dice? ¿qué significa?
A veces imagino que quiere decirme, tu esperanza está en el cielo; en la tierra no esperes jamás ver _<atisfecho el ano: que te ccnsume. ¿Vesel abismo que tiene que cruzar esta mirada para ir desde mis ojos á la luna? Pues esa misma distancia separa tu-corazón del mío.
Por-eso al verla mirar á la luna, siento que mi alma se' retuerce - dentro del pecho con la rabia desesperante de la impotencia.
Sí, tiene razón. Jamás los besos de su bcca han de chocar con los besos de mis labios.: jamás su voz, dulce y cariñosa, ha de resonar en mis oidos. Mis manos no han de acariciar jemás su cabecita soñadora: sobre su seno palpitante nunca se apoyará mi frente calenturienta.. ¿Es eso, amada. imposible, lo que dicen tus ojos?
A veces imagino que en esa mirada al espa-
cio, me dices: ama y espera; así como esa luva asoma todas las nmoches buscando á su amado Endimión, yo aparezco en este sitio, para decirte con el lenguaje mudo de los vjos, que en mi cerebro eres también luna que ilumina mis obcuros pensamientos.
Mi mirada también cruza -el espacio, amada mia, sin hallar en él la respuesta que anhela el corazón. Pero en los- ravos melancólicos de la luna, hallo siempre algo del fulgor de tú mirada:
Ese astro muerto, que rueda por el espacio es copia fiel de mi' vacío corazón: esas nubes que á veces. la empañan:; las sembras que cruzan por mi mente cuando pi'ers»> enti, amor sin esperanza.
Para mí es la luna un libro abierto, en el que leo la historia de mi pobre corazón. Ese astro frío fué quizás un día sol espléndido, mundo hermose, lleno de vida y movimiento, con pájaros, con flores y con plantas
¡Quién sabe si un cataclisto torroroso le lanzó cadáver al espacio, matando en él todo gérmen de vida'
Así mi-corazón, fué un tiempo urna sagrada, cuna de amores y ternezas:- pero la pasfón tronchó en él todas sus flores; y hoy, palido y sombrío, vá pór el mundo, como la luna por el espacio, lanzando ténues rayos de luz mortecina, semejante á la que arrojan esas lámparas solitarias que oscilan sobre las tum, bas
No sé lo que dice esa mirada que diriges á la luna, robándosela á mis ojos;: pero esa mirada de amor ó de desengaño, de esperanzas ó de dudas, yo la siento penetrar en mi corazón, como rayo de luz por entreabierta sepultura, .y mis labios se desplegan para murmurar un te amo-
MIRANDO
LA LUNA Se |
A
MARIANO ABRIL.
S MI PAISANITO a
El á modo de lema que lleva este articulo, lo creo necesario para calmar los gritos de mi conciencia , ó cuando menos, para justificarme á mi mismo.
Yo les empeño mi palabra de que por esta vez no he recurrido al archivo de miimaginación á buscarun asunto para escribir un artículo.
Este Paisaníto mio que voy á presentarles no es hijo de mi fantasía, es de carne y hueso, como mis lectores, como yo: y á poco que hagan un esfuerzo habrán de reconocerle, á cada paso con ustedes se codea en las calles.
No sé quien quiso jugarme la mala partida, dándele las señas de mí casa a.sujeto de quien voy á hablarles; pero sea quien tuere, á ese hay que suponerle más cantidad de buen humor de la que á mí me atribuyen.
!'1o que yo daría por vengarme!
Ya que no puedo hacerlo en la persona del desconocido, me cebo en la del protagonista (y cómplice), sacándolo á la picota, y aunque s:a á trueque de gastar mis reales en tafetán y árna,ica.
Relatemcs X.
Muy tranquilo, metido en mi alcoba, repantigado en mi cómodo sillón, leía las Cartas de Pereda , esperando la hora del yantar, cnando entra la criada y me dice:
Un joven pregunta por usted: dice que tiene gran necesidad de hablarle.
LUn jóven?
Sí, algo estropeado y no huele á rosas (La criada es una mozuela de carácter alegre y cosquilleso.)
Estoy muy poco accstumbrado á estas visitas, que por el modo de presentarse huelen, sino á rosas, si á refugio. (Mislectores comprenderan fácilmente el porqué.)
Seamos por una vez en la vida Zombre importante, me digo, y levantando la voz ordeno con la misma prosopopeya que lo haría un ministro:
Qué pase!
Válgame Zzabolín, y si - hubieran visto ustedes lo que pasó! -Una cabeza puyua, á manera de esos marimbos anchos en la base y finos en la cúspide. Enclavados en ella dos ojos redondos y pequeños de mirar adormilado; una nariz larga y redonda (gedeónica), y dos hileras de dientes caninos.
Se puede?
Vaya si se podía, como que ya estaba dentro de la habitación.
LUsted me perdonará que venga á distraerle de sus lecturas; más yo fío en....
No es molestia alguna, señor. Tome asiento.
(El famélico practica un reconocimiento en la habitación. y al notar que no hay en ella otro asiento que el mio, se acomoda tranquila-
mente en mi cama. - ¡Ay lo de las 7osas')
Pues verá usted, amigo. - (¡Eh!)- Yo tenía necesidad de encontrar una persona que del Artc amante fuera; la buscaba, la buscaba, no la encontraba, y cuando ya desesperaba, lo encontré á usted.
A mí?
Sí; á usted.- Y no es que á usted directamente lo buscara, sino que buscando á la perscna á quien antes me refería......
la del Arte7
Eso, á la del arte, me encontré con otra, no la del arte, pero esa otra me dió esta tarjeta, y por carambola he venido á ponerme delante de Vd.
Mientras mi heombre busca entre un manojo de tarjetas la que fpara mi le han dado, yo observo su rara manera de vestir:
Usa pantalones cenizos, tan estrechos que temo se le salten las costuras, y como le vienen cortos se de-tacan. con 77207 Ssus sÓlidos c'mientos. (Calza el 40.) Completan su vestimenta un chalequete del mismo color, que no le llega al ombligo, y un gaban de dril blanco. del que podía decirse que le huye á la humedad.... por no decir á otra cosa
Esta, esta es la tarjeta, dice, al tiempo que me alarga una cartulina amarillenta y sucia.
Leo el nombre: Juan José Sorelli. No, yo no conozco á este señor.
Ah, entonces será esta otra.
Leo otra vez: Pablo Emilio Jesús Corneil
Tampoco.
Bueno es igua'. Estoy seguro que de aquí tengo la que para Vd. traía: pero ahora no sale, no quiero molestarle más. De cualquier modo esté séguro que se trata de un íntimo suyo.
Adelante.
Pues bien, señor, yo voy á abrirme....
-A abrirse qué?
Mi alma de par en par.
Ah vamos.
Qué. se había Vd. asustado:
Yo no; pero ya ve usted, corre por aquí mucho aire y podría Vd. fácilmente resfriarse. No pase cuidado, estoy acostumbrado á aserenarme.
Entonces ábrase, digo, continúe.
Voy: Me vé Vd. vestido tan modestamente, y con este rostro que pregona mi debilidad. ... física?: pues, yo, señor, soy paisanito de Vd. y oriundo de una familia de noble ejecutoria. No la conocerá Vd porque ha ya mucho tiempo que partió de estas risueñas plavas. (Aquíse le adormecen aún más los ojos.) Y no es que haya yo nacido precisamente en este País: sino que mi madre de aquí era, y, cuando dió en pensar en mi vivía én Puerto Rico. Los primeros aldabonazos que dí para que me abrieran las puertas al mundo, los dí en Puerto Rico, y si es verdad que cuando me dejaron salir, digo al mundo
m i q
X.
NUESTRA MUSA ES LA INDISCRECION.
entrar, ya estaba muís allá del horizonte, do por eso pierdo mi derecho á ser natiro.... ¿No lo vé Vd. claro?
Clarc que si lo veo. dificultad.
Dificultad?
-Si, una, la de que yo no soy de Puerto Rico. - Yo nací en Cerro Gordo .
Cerro qué?
-Gordo.
Quien lo estuviera, cabal'ero! bostezo prolongado.)
Sólo que hay una (Aquí un
- Pues bien, conocido el orzgen de mi especie, tácil es también conocer mi tempera.mento soñador.
Es Vd. soñador? -
Si, caballero, soñador: sueño mucho, y si no fuera por lo ingra/o de mi lecho, aúa podría soña1 cosas más ideales de las que comunmente sueño. Porque mis sueños son los de un poeta, y yo aspiro á exteririzarlos dándoles forma tangible sobre....
Ya caigo, Vd. aspira á ser comediógrafo.
Justo; á eso aspiro y....
El amigo de la /a7je/a, le ha aconsejado que me vea Vd. para que yo le preste mi avuda.
Exacto, exacto ei ajeno pensamiento'
¡Per) como. lee Vd en
Y en qué consiste esa ayuda ?
Me abriré, digo, me explicaré: Lo primero es una recum=ndación para sus amigos los periodistas. Deseo que me pub:iquen unos sueltecitos que tengo escrit»s relacionado. con la comedía que pretendo esrenar. Lo segundo es que me ponga Vd. en relación can algunos artistas para irlos impresionando con detalles de la obra, y lo tercero. ... lo tercero es algo parecido al lugar donde me dijo Vd que había nacido.
-Gordo?
Eso, gordo, pues desearía que me adelantara usted aZvo á cuenta de los derechos que he de cobrar por las representaciones de la ER - a.
-Ay Paisanito! á usted lo han engañado ó esa tarjeta que usted no encontró no era para
mí. Mire: la primera ayuda no ofrece dificul tad pues que los periodistas de mi pais, digo del suvo, son fáciles de conocer, son gentes asaz sencilla que se da7 con todo el mundo. La segunda tampoco es difíci!; yo lo relacionaré con Sandoval, Evaristo Velez, Goicochea, artistas papulares. Pero la tercera, como dicen por agquí. Murió el Cochino ó Barbilla , que viene á ser lo mismo. = Venga acá, á este rincón del aposento, y le hablo bajito, para que no me oiga la dueña del Boarding, Aquí donde usted me vé con esta cara tan satisfecha, puedo decirle que si no salgoá la calle á hacer lo que usted hace es por....
Porqué?
Por no hacerle á usted la competencia. .!
- -Cóncho!; pero si me habían dicho que era usted un joven que contaba con posibilidades.
- lusto, con posibilidades de que me pongan el baúl en medio de la calle: y mo digo el catre porque es de la dueña de la casa.Pobre comedia mía! Y, digame: usted comió ya? -
No, no he comido, pero no me atrevo á llegarme á la mesa porque la Patrona en vez de servilleta me pone el recibo del trimestre vencido......
Pero teadrá siquiera una peseluña. Ni-eso.
Y unos pantalo=citos viejos, de los que ya usted no use. Ay compañero , tan mal estoy de fondos como de indumentaria.
De modo que no puede tirarm- con a'go?
Si hombre cómo nó!: le voy á tirar con un zapato sino embala ahora mismo de aquí.
A mi, á mi y con un zapato? Esolo veremos en el campo del honor....
Mi Zaisanito saca su manojo de amarillentas tarjetas, y acompañado de un gesto enérgico deja una sobre mi mesa.
Tomo la cartulina. leo el nombre en ella impreso, y me quedo patidifiso, pues dice:
¿Y cree usted don Jorge. que su Paisanito let un artículo tan largo?
Cráfico
Bajo la dirección de Rodrigo Cervantes apareció esta revista el lunes de la semana anterior.
El Gráfico viene á sustituir á El Carnaval y si ha de corresponder á su nombre vendrá eada día más interesante.
El número que tenemos á la vista trae notas de rigurosa actualidad.
Administra la nueva revista don Rafael Colorado, quien no necesita de nuestros elogios y está la ilustración artistica á cargo de Leoncio Mar-inez conocido ya por Leo seudónimo que sigue usando en el Gráfico. Próspera vida deseamos al nuevo periódico.
JORGE ADSUAR.
Ateneo Puertorriquéño
CLASES DE TAQUIGRAFIA
Restablecido ya de la enfermedad que lo retuvo en cama por espacio de dus meses, el profesor de taquigrafía de este centro, señor Conrado Asenjo, serán reanudadas las clases de esta asignatura, el Jueves 2 de Noviembre próximo.
El Sábado a, del mismo mes, empeu.rí también el nuevo curso, y al efecto, por la presente se avisa á todos los matriculados, para que asistan al Ateneo á las 8 de la noche del citado dia 4 de Noviembre, para la organización de las mismas.
SOLUCION A LOS PASATIEMPOS DZL NUMERI ANTERIOR.
Al enigmaDespabiladoras
A la fuga de vocales:
- De qué te sirve llorar y dar voces com> un luco si sabes qne soy mujer y te he de olvidar por otró?
A la charadoPreciosa.
VARIEDADES Y PASATIEM?OS
COSAS NATIVAS
Por leer una oprntón y tratar con un ex5-70, dicen que es por lo que ha muerto el pobre idiota Ramón.
ENIGMA
El sol fué quien me dió vida, y el sol me suele acabar; hago á la gente asombrar,
LABORATORIO HISTO - QUIMICO -MICROBIOLOGICO
DEL Lcpo. RAFAEL DEL VALLE SÁRRAGA, Químico-Farmacéutico y Bachiller en Ciencias de la Universidad de Michigan.
TELÉFONO, 406. APARTADO, 935.
OFICINA: ALLEN, 83.
Análisis de orina, sangre, heces fecales, jugo gástri9o, esputos. neopiasío, flujos, cálculo exámenes de aguas, alimentos, bebidas. materias sacarinas, minerales, terrenos, abonos.
Toda clase de reconocimientos ó trabajos de cualquier naturaleza que requieran el auxilio del laboratorio. Pídanse intormes.
Suero reacción de Wassermann y Noguchi. Asistencia á las clínicas para los reconocimientos especiales por los métodos modernos de laboratorio, antes de la aplieación del tratamiento específico de la avariosis por el 606, de Erlich-Hata Se suministra Oxígeno quí camente puro
y aunque del agua nacida; al aire vuelvo á pasar:
C. Pérez de Herrera.
VOX POPULI
Quien tiene tienda y no vende, necio es si la sostiene.
Con la mujer y el dinero no te burles ' compañero.
Amigo de uno, y enemigo de ninguno.
Fuga de vocales
N..m. mr.n ms ts js, n. m. mra ms, ip.r D.s:!
1 md.c. m. h. mad.d. d... a. m. d.-mch sl
Todo amante cuando dá una cita siempre dice: - A tal hora.en punto.
Y quien asegura esa hora correctamente? Solo un reloj Waltham de Kerhan.
La casa que no vende á plazos.
la jovería San Justo 14%
Manuel Mocete Padilla
AGENTE DE LA REVISTA
*VIDA ALÉEGRE
P:0..Box dz. TELÉFUNO 22 Agente Corresponsal de varios periódicos importantes de San Juan, de la Isla y del extranjero. Acepta agencias y comisiones.
POoNnceE.
GABINETE DENTAL
DEL Dr. Eligio F. Res CIRUJANO DENTISTA DE LA Universidad de Pennsylvania.
«Plaza de Baldorioty »
Altos de la Farmacia Guillermety.
Horas de oficina:
8 30 Á IT 30 AM
1 N- ...
Teléfono 123.
Los domingos á horas convencionales.
MANDE SUS TRABAJOS A VIDA ALEGRE
a VARIEDADES
PASATIEMPOS
Y
a