ME HABLA WALT WHITMAN

Ama la vida y ámala de tal modo que , de pensar que vives , te tambalees beodo , y, con el vigor de quien se siente fuerte , lo abrupto del repecho serenamente advierte, y doblega tus hombros para toda la carga, que la jornada es corta aunque parezca larga ...

Anda en el convencionalismo de la Ciudad con la sabia firmeza de tu animalidad, y , lejos del sendero conocido, abre tu senda , en tu propia selva perdido .. .

Hiende los árboles decrépitos con el labio único de tu hacha para que levante juven tud el polen que viene del viento en la racha, y , en el rumor de lo que nace y lo que muere, haz tu yo el fruto y separa amorosamente la zarza que te hie r e .

Templa tu corazón en la tempestad de los rugidos del león y aprende la dulce melancolía en la melodía del pájaro qut silba en la umbría, y, fuera de toda norma , tu soledad alegra -nuevo Adán,- en la Eva de cabellera negra y en la de los caudales rubios, y húndete en el ensueño d e todos los connubios ...

Mira hacia arriba los regueros fecundos del germen que da mundos, y mira, a tus plantas, cómo el prado, abierto al vital efluvio, tiende el verde aliño de la fre sca yerba sobre el ser que ha muerto, para que en su alfrombra se solace el niño . ..