ARTE PALEOCRISTIANO VS. ARTE RELIGIOSO MEDIEVAL Y ACTUAL Noé Cano Vargas UN DEMONÍACO ENCANTO DE TRANSGRESIÓN INTELECTUAL Francisco Hernández Echeverría SIN PALABRAS Vera Milarka ALIENACIÓN, ANGUSTIA Y EXISTENCIA Juan Carlos Pérez Castro REGLAMENTO DE PROSTITUTAS Manuel Pérez Chalini DESDE LA FACULTAD Mariano Torres Bautista POLICULT QUINCE Jorge Meléndez Preciado DE PLANTAS Y ANIMALES Cecilia Vázquez Ahumada REINCIGRAMA Fernando Contreras AQUÍ, PUROS CUENTOS Paco Rubín FRANTASÍAS José Fragoso Cervón ARITMOMANÍA Gabriela Breña OLTERO
Año VII, Número 135, 1ra. quincena de diciembre de 2016
Noé Cano Vargas*
Una de las tareas del arte [es] menos representar al mundo que representarlo de tal manera que sea la causa de que lo veamos de un modo especial y con cierta actitud” (Fodor, 1993).
J
esús Cristo en la tradición judeo-cristiana es considerado el Mesías, el hijo enviado de Dios. Su vida transcurrió entre el año 0 al 33 de nuestra era y fue el fundador de una nueva forma de percibir al mundo, Este acontecimiento dividió nuestra era en dos, en un antes de Cristo (a.C.) y un después de Cristo (d.C.), permitió el surgimiento de una ideología que dejó de proyectar la vida del hombre como un eterno retorno para posicionarlo como un proyecto con una trayectoria histórica futura hacia el fin de los tiempos; es decir, progreso y continuidad. Por último, es el punto de partida para el surgimiento del cristianismo y la religión católica. Jesús Cristo murió en un madero con estructura en forma de T -con los siglos fue modificado para representar una cruz-, fue bajado y sepultado a la usanza judía, su cuerpo fue envuelto y puesto en una catacumba, el resto es interpretación. Después de ese acontecimiento, del año 33 al 313 d.C., el cristianismo se presenta como una nueva opción de culto, sus discípulos y los seguidores de Cristo empiezan a propagar su fe alrededor del imperio romano, hacen lo posible por seguir sus mandatos y continuar su obra. A eso le sigue una época de vigilancia y persecución en contra de los cristianos por Diocleciano, a finales del siglo III. La persecución hace que los nuevos creyentes oculten su fe, se escondan y busquen un lugar en donde congregase. Amparados en que la ley general romana prescribe respeto a las tumbas, no les queda otro lugar más para formar comunidades subterráneas clandestinas en las afueras de la ciudad; al amparo de las catacumbas pudieron plasmar, oficiar y organizarse para realizar su obra: hacer discípulos en Roma, Alejandría, Siracusa, Nápoles y así sucesivamente en otras regiones. El hecho vivencial e histórico de los primeros cristianos tiene como base sus creencias, el resultado es una expresión externa que se manifiesta no de manera aislada sino como resultado de la convivencia del hombre y sus circunstancias, es producto de sus necesidades sociales, psicológicas y económicas en el sentido estricto de vivir, de hacerse, entenderse y comprenderse; entonces se vuelve acción, creación, artefacto, manifestaciones plásticas de un tiempo y espacio determinado, herramientas de la su vida cotidiana. La propagación del cristianismo en sus primeros años fue acompañada de manifestaciones artesanales “específicas” para representar la fe en Cristo: el anagrama o nombre de Cristo en griego [XP]; Dios como principio y fin de todas las cosas mediante el alfa y el omega, primera y última letra del abecedario griego; el pez (iesus xristos theous uios soter), el crismón, el cordero, la figura del orante, el buen pastor; todo esto, actualmente denominado arte paleocristiano, se presenta en los primeros tres siglos de nuestra era en concordancia con la ley de Dios presente en el antiguo testamento, en el libro de * Reincidente no incluye sección de Sociales
Éxodo capítulo 20, versículo 4: ”No debes hacerte una imagen tallada ni una forma parecida a cosa alguna que esté en los cielos arriba o que esté en la tierra debajo o que esté en las aguas debajo de la tierra.” Pero cuando esa creación espontánea y subjetiva es utilizada para un fin diferente, la pieza cambia, se transforma y se bizantiniza, la historia se vela; esa pieza material paleocristiana es usada e interpretada en épocas futuras a conveniencia del vencedor de la contienda, es vinculada a diversos intereses -económicos, comerciales, políticos, ideológicos-, se transforma en arte bizantino, cristiano, medieval y trabaja en función de razones institucionalizadas. Primero el proceso es lento: Constantino el grande con el Edicto de Millán en el año 313 d.C. decide llevar una política de tolerancia religiosa al cristianismo en vez de intentar destruirlo mediante persecuciones. Y a finales de siglo, el 27 febrero del año 380, se convirtió en la religión exclusiva del Imperio Romano por decreto del emperador Teodosio; el cristianismo es implantado como obligación, y de ahí en adelante la obra es financiada por emperadores, alto clero y clases patricias. Para que las masas se conviertan había que invertir, por lo que el poder económico permite crear obras arquitectónicas, escultóricas y pictóricas. Es un arte con tendencia muy considerable al lujo, por tanto, con materiales especialmente costosos. Las nuevas obras permiten un periodo de transición en que las formas clásicas van transformándose a formas medievales. Así, las condiciones históricas garantizaron que la sociedad continuará con los valores culturales de la antigüedad incorporando como base los preceptos de la cristiandad. Y el arte se expande no siguiendo ya la regla base de adorar a Dios y a Cristo, como puede advertirse en la decoración de catacumbas, monolitos, bajorrelieves en sarcófagos, elementos romanos con nuevo valor simbólico: Eros y Psiquis representan a Cristo y el alma; El mito de Orfeo simboliza la resurrección; se ilustran oraciones y pasajes de textos sagrados mediante escenas del Antiguo Testamento, surgen baptisterios, grandes basílicas y, pasado el tiempo, se incorporan imágenes de apóstoles, santos, vírgenes, mártires, religiosos, etc. La lista continúa hasta la actualidad. Con lo antes descrito, ¿cómo definir el arte religioso actual?, ¿qué le da identidad y valor si tomamos como referencia que su base es el arte paleocristiano?, ¿cuál es su utilidad? Analicemos: ¿el arte paleocristiano está presente en el arte religioso o es el resultado de decisiones institucionales?, Si la respuesta es afirmativa, entonces, su uso presenta una actitud transgresora e irónica, “porque irónico es todo acto en que suplantamos un movimiento primario con otro secundario, y, en lugar de decir lo que pensamos, fingimos pensar lo que decimos” (Ortega y Gasset, 2001, pág. 30). Pero, ¿quién trasgrede a quién?, si definimos transgredir como “Actuar en contra de una ley, norma, pacto
o costumbre”. ¿Será que el arte paleocristiano es el transgresor por atentar por las formas de comportamiento actual, o el arte religioso medieval el que trasgrede al paleocristiano por transformar el sentido claro y preciso que pretendían proyectar los cristianos de los tres primeros siglos de nuestra era? Un análisis adecuado evitará caer en un utopismo cultural, pues “…se cae en él siempre que se reciben sin previa revisión ciertos principios intelectuales, morales, políticos, estéticos o religiosos, y dándolos desde luego por buenos se insiste en aceptar sus consecuencias. Nuestro tiempo padece gravemente de esta morbosa conducta”. (Ortega y Gasset, 2001, pág. 24)
Bibliografía
L. Gowing: Historia del Arte, arte paleocristiano y medieval. Folio, Barcelona, España, 2001. M. Herrera Lima: La estética filosófica y la interpretación del arte contemporáneo. Ensayo crítico sobre las razones del arte. Crítica, revista hispanoamericana de filosofía, agosto 2005. pp. 61-73. J. Ortega y Gasset: El tema de nuestro tiempo/La rebelión de las masas. Porrúa, México, 2001.
* El autor es Maestro en Historia por la BUAP y miembro activo en Óclesis, Víctimas del Artificio A.C.
LA ÚLTIMA Y NOS VAMOS
“¿Tomamos la última y nos vamos?”, se dice cuando está por concluir una fiesta, reunión, comida de trabajo o el reventón, y los asistentes, amigos, socios, novias/novios deben partir. Y es con un ron, un tequila, un brandicillo o un desempance con lo que se acostumbra en estas tierras darle mate al momento social, de negocios, amoroso o simplemente etílico y anunciar “aquí se rompió una taza y cada quien se va a su casa”. En nuestro caso, se trata de la última edición de Reincidente de este 2016 y nos vamos de vagaciones, como todos, hasta después del 6 de enero cuando concluye el puente Guadalupe-Los Reyes, el más largo del mundo. Eso sí, nos empeñaremos por pasarla bien e invitamos a todos nuestros lectores, amigos, críticos y hasta adversarios a sumarse a este esfuerzo porque todos necesitamos cargar energía para aguantar el año 2017, que pinta feo. ¡Pásenla bien!
Mariano E. Torres Bautista*
La palabra “trabajo” deriva del término latino, “tripalium”, que significa tres palos, es decir, era un instrumento de tortura y, en forma de trabajo forzado, llámese esclavo, existía prácticamente por todo el mundo de manera legal.
E
s con la revolución francesa y el desarrollo de la mecanización, no solo en las fábricas sino en la agricultura también, que en el mundo occidental empezó a cuestionarse el trabajo forzado aunque, como bien sabemos, existen nuevas formas de trabajo clandestino y explotación laboral; tal y como aparece en los testimonios de la obra reciente de Naomi Klein No logo. El poder de las marcas. Mientras no se logre redistribuir la riqueza en forma de salario mínimo universal y la robotización de la producción no alcance el total de los trabajos repetitivos y poco creativos, el “tripalium” seguirá ocupando mucho tiempo en nuestras vidas y será base de la subsistencia de la mayor parte de los seres humanos. En México además, siendo el país de la OCDE con las jornadas de trabajo más extensas, es una forma de control y freno de la creatividad, por lo que los bajos niveles de productividad seguirán siendo base de pasiva resistencia. No en balde la sabiduría popular ha acuñado el axioma de “Hacen como que nos pagan y nosotros hacemos como que trabajamos”. Mientras tanto, el ambiente de trabajo será todavía un medio para la evolución y tendrá un impacto innegable sobre nuestros niveles de bienestar. ¿Cómo crecer profesionalmente en el trabajo, nuestro medio ambiente que todavía ocupa tantas horas de la actividad humana? Aquí hay 6 actitudes que promueven el bienestar en el trabajo, y al mismo tiempo de su realización profesional.
C
ontinúa y seguirán por buen tiempo los análisis acerca de Fidel Castro y el régimen que pudo hacer en Cuba. Para la inmensa mayoría, en la isla hubo logros indudables en salud, educación, ciencia y no olvidar los deportes. En este último caso, en béisbol hay cantidad de jóvenes que salieron de Cuba y son de los más brillantes en las llamadas Ligas Mayores. Para los críticos, no se dieron las libertades en el terreno político, el de expresión y el de convivencia en muchos terrenos. No olvidamos que Carlos Monsiváis expresó su desacuerdo en la represión a los homosexuales y otras minorías, lo que le costó salir de una publicación. Después yo pude ver en una visita a La Habana, la famosa película: Fresa y Chocolate, de Tomás Gutiérrez Alea (1984), la cual se exhibía y muchos no entraban por cierto temor. Pero fue una muestra que era imposible parar la rueda de la historia por más que se quisiera. Fui en otra ocasión con mi hijo Alejandro y con Rosa, la vez que enviaron un barco con alimentos de Estados Unidos. Difícil poder tomar imágenes del desembarco de los víveres, por más que las fotos eran 2
1. Autenticidad. La autenticidad es ser fiel a uno mismo. Esta es una acción esencial para ayudar a que uno se sienta bien y pueda prosperar en su trabajo. Para ayudarle a ser una persona auténtica hay que partir del respeto; así tendrá un comportamiento coherente con sus emociones, sus pensamientos y deseos. Hay que recordar que mentir a sí mismo conduce al malestar, que es lo contrario de bienestar buscado. 2. La positividad. Ser una persona positiva contribuye a un ambiente de trabajo agradable. Para llegar allí, primero hay que guardar distancia de colegas que están constantemente negativos y aproximarse a los positivos, que pueden incluso llegar a ser una fuente de motivación. Además, vea sus errores como una manera de mejorarse a sí mismo, no como un fracaso. Tenga en cuenta sus dificultades como retos que requieren soluciones en lugar de problemas. Su actitud positiva le ayudará a obtener una sensación de bienestar, además de motivarlo aún más en el cumplimiento de sus tareas profesionales. 3. Respeto. No hace falta decir que el respeto es una actitud importante para salir adelante y desarrollarse de forma saludable en un lugar de trabajo. De hecho, ser respetuoso de su lugar de trabajo y sus colegas, que están promoviendo un ambiente armonioso, siempre será beneficioso. Al hacerlo, usted contribuye a su propio bienestar y al de sus colegas..
importantes para los periódicos. La burocracia, a pesar de algunos amigos míos, no posibilitó que Alejandro tuviera más material que una foto muy parecida a la que editó la agencia estadounidenses, AP. Pudimos, empero, conversar en casa del presidente de la Unión de Periodistas de allá, Ernesto Vera. Un experimentado tecleador que vivía, como muchos de su generación, modestamente y trataba de insistir en que el único periódico, Granma, se abriera más a los jóvenes, quienes habían tenido uno por un tiempo breve: El caimán barbudo, en el que por cierto, Gabriel García Márquez escribió algunos textos, los cuales pude reproducir en El Búho de Excélsior, cuando estuve junto con René Avilés Fabila. Con Vera tuve antes un incidente desagradable y otro casi mágico. Fuimos a la patria de Fidel a un congreso de la Federación Latinoamericana de Periodistas (Felap) varios compañeros de la Unión de Periodistas Democráticos (UPD) de México. Entre otros asistimos: Juan Antonio Zúñiga, Elías Chávez, que era presidente de la Unión, Luis Suárez, directivo de la Federación, y yo. En las votaciones se tomaban acuerdos apresurados y casi automáticos y nosotros exigimos que fueran por delegación y alzando la mano. Logramos nuestro objetivo pero hubo molestia de los isleños. No sabíamos que un día después del Congreso, Fidel había citado a un encuentro internacional contra la deuda externa, problema mayúsculo en nuestro país. Llegamos al acto y preparamos un documento que me tocó leer ante el comandante, diciendo que estábamos de acuerdo en unir esfuerzos para evitar el pago exorbitante entre capital e intereses y que eso también debería hacer Cuba, la cual erogaba puntualmente sus dineros para un empréstito con España. Terminó el acto y en la noche hubo una recepción en el Palacio de los Congresos. Acudimos y al saludar a Castro, él, amablemente me reclamó que había sido muy audaz y atrevido por haber planteado que Cuba también siguiera los lineamientos acordados. Los que después se llamó la “deuda eterna”, que es exactamente lo que padecemos y padeceremos.
4. Proactividad. ¡No tenga miedo de seguir adelante, participar y superar sus límites! Sea creativo, vaya a compartir y defender sus ideas, colaborar en proyectos que necesitan responsabilidad. Al hacer planes de carrera que se ajusten a sus intereses y sus habilidades, usted se sentirá más comprometido, lo que aumentará su motivación. Por lo tanto, estar comprometido con su organización le ayudará a sentir una sensación de bienestar en el trabajo. 5. confianza. Para sentirse competente, uno debe tener confianza en sí mismo y en sus capacidades personales y profesionales. La confianza en sí puede superar los obstáculos con más facilidad. Una forma de mantener su sentido de competencia es el desarrollo de sus conocimientos a través de cursos, de lecturas, de documentales, etc. 6. La paciencia. La paciencia es probablemente la actitud subyacente a las otras cinco actitudes, debido a que tomará tiempo para integrarlas y adoptarlas. Haga una prueba: llénese un día de paciencia y, quién sabe, si su nuevo comportamiento pueda llegar a ser contagioso e infectar a sus colegas. * El autor es Doctor en Historia por la Universidad de París I, Phantèon- Sorbonne. Actualmente, se desempeña como profesor/investigador en el programa de Maestría en Antropología Social de la BUAP.
En otra ocasión, un ex presidente del Colegio Nacional de Economistas, quien llegó a jefe de gobierno del entonces Distrito Federal, me llamó para una encomienda importante. Me explicó que se necesitaba llevar 30 computadoras de apoyo a la Asociación de Economistas Cubanos, ya que debido al periodo especial la situación era gravísima. Acepté encantado, lo mismo para apoyar a los antillanos como para conocer la difícil situación en que se encontraban los compañeros. Me entreviste con un diplomático de la isla en México y acordamos que se enviarían por una agencia a la que estaban asociados ellos. Así se hizo, y al desembarcar en la Habana y ser recibido por el dirigente de los economistas, le indiqué que verificara si habían llegado las máquinas. Me dijo que no había problema y que fuéramos a conocer varios lugares, ya que la ceremonia de entrega sería cuatro días después. Así lo hicimos y cuando se llegó la fecha, me informó que habían desaparecido las computadoras. Como la ceremonia era en la embajada mexicana, encabezada por Carlos Tello, busqué una salida: llenar con periódicos unas cajas para hacer una entrega ficticia, lo cual logramos sin decirle nada al maestro Tello. La crisis era real y a fondo. Tanto que había obsesión por un alimento para las gallinas: el pienso. Cuando ocurrió el incidente del espía estadounidense que trabajaba en la embajada mexicana en Cuba, Humberto Carrillo Colón, mi hermano Hugo Tulio era funcionario de la presidencia de la República, en el sexenio de Díaz Ordaz. Me comentó antes de que se hiciera público el asunto y me pidió que se lo dijera a los cubanos. Lo hice de inmediato ya que el primer secretario de la embajada era un muy buen amigo mío. Fue un apoyo a quienes estaban asediados por todos lados. Cuba y Fidel han estado presentes en parte de mi vida. Y lo estarán más debido a sus grandes aciertos y a pesar de sus terribles errores. Sobre todo porque trataron de lograr el gran sueño: un país con justicia y libertad. *El autor es profesor de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM y periodista.
Francisco Hernández Echeverría*
Es común creer que conservadurismo carece de ánimo transgresor, pero podemos poner como ejemplo al escritor José Ortega y Gasset quien pese a su progresivo conservadurismo ideológico y a su aristocrático pensamiento no renunció a la tentación de la transgresión en su obra.
I
gualmente, podemos decir del crítico literario italiano Mario Praz, quien transgrediendo el canon teórico funda una prolífica obra escrita con largos rodeos y dispersiones, que no le impidió convertirse en una reputada autoridad en literatura inglesa y un profundo conocedor de la cultura europea. Sabio y de signo a menudo esotérico, la obra más importante de Praz es La Carne, la Muerte y el Diablo en la Literatura Romántica”, texto fundamental para comprender la sensibilidad y la mentalidad europea entre finales del siglo XVIII e inicios del XX, que se ha convertido en un clásico de la historiografía y en un verdadero hito en el campo de la crítica literaria. Pero a pesar de su llamativo título, para Antonio Colinas (1999), no responde de manera justa a cuanto el libro ofrece. Acaso otro título —el de su versión en inglés, The romantic agony— resuma mejor el sentido abarcador que posee esta obra. El libro recuerda al lector —aunque Praz sea el pionero entre sus coetáneos— otras obras de similar fundamento aparecidas en el ámbito anglosajón. Así, por citar sólo dos ejemplos: Literatura Europea y Edad Media Latina (1948), de Ernest R. Curtis, y La Tradición Clásica” (1949), de Gilbert Highet. Guardando las debidas distancias en los temas propuestos y en el planteamiento (más teórico) de estas obras, ambas guardan cierta similitud estructural y analítica con el libro de Praz, aunque éste se escribió antes de 1930. No es raro, por ello, que el autor, en el prólogo a la edición de 1976, no sólo se sienta orgulloso del carácter precursor de su libro, sino que lamenta la influencia (“no confesada”, nos dice) ejercida sobre obras que vinieron detrás. La importancia académica de La Carne, la Muerte y el Diablo… radica, en primer lugar, en el hecho de que engloba tres literaturas: inglesa, francesa e italiana (complementa esta lectura las de Albert Béguin o Hans Georg Schenk), desde las cuales realiza un pormenorizado documento comparativo que en su búsqueda y fijación de los temas recurrentes visita una serie de motivos eróticos y necrofílicos recurrentes en las literaturas antes mencionadas, determinando con exactitud los medios a través de los cuales se efectuó la transmisión de esos temas tan ocultos, y a la vez tan familiares entre los artistas del Romanticismo y el Simbolismo. Y aunque Praz no va más allá de los límites puramente “románticos”, se aparta de la sensibilidad erótica de los autores románticos, desafiando abiertamente a la crítica idealista de la época representada por la demoledora diatriba moralista de Benedetto Croce, que exigía ver en el romanticismo, tal como en la vida misma, una mayor complejidad desde la cual no pudiera predominar “la patología sexual”, debido a su “exigencia por la distinción, y por ende, a la armonía de todas sus partes”. Tan es así que, nos dice De Fazi (2011), hasta cierto punto cabe preguntarse cuándo o, incluso, si ha concluido realmente el siglo XX (romántico), dado que la principal sospecha crítica de Praz ha sido cuestionar radicalmente las recurrentes fórmulas historiográficas que componen un “todo” indivisible —ya sea el romanticismo (y no sólo sus ramificaciones que comúnmente conocemos), la “Scapigliatura”, el verismo, y hasta el mismo decadentismo— que prolonga el período romántico en su conjunto hasta gran parte de la literatura del siglo XX, o al menos a lo que le fue contemporáneo a Praz mientras vivió (murió en 1982).
Sin embargo, para Croce es engañoso que Praz señale de una manera tan débil la diferencia entre romanticismo y decadentismo, y que llegue a “hacer que el llamado romanticismo consista en la formación de una nueva sensibilidad, que se manifiesta puntualmente en las tendencias y figuraciones que tan ampliamente expone”. En la introducción a la segunda edición de 1942, Praz le responderá al famoso filósofo de manera elegante y basándose justamente en la crociana Historia de Europa en el siglo XIX, que la suya no es una síntesis del romanticismo “tout court”, sino una monografía sobre temas particulares de la sensibilidad romántica (De Fazi, 2011). “El epíteto romántico y la antítesis clásico-romántica son aproximaciones que desde hace mucho tiempo se han incorporado al lenguaje de uso común. El filósofo las pone con toda solemnidad en la puerta, con lógica rigurosa, y ellas vuelven a entrar a escondidas por la ventana, y están siempre ahí, entrometidas, evasivas, inoportunas, indispensables” (Praz, 1969: 21). Así comienza nuestro autor La Carne, la Muerte y el Diablo…, para lanzarse inmediatamente a la observación de que la crítica literaria requiere de la historia de la cultura: “La historia de la cultura de un entorno y la historia de la cultura de un individuo”. De este modo, a través de más de cuatrocientas densas páginas cargadas de citas en francés, géneros literarios, ambientes pre-románticos, mitos y pasiones, Praz pasa lista a la belleza medusea cantada por Percy Bysshe Shelley, a la metamorfosis de Satanás de Lord Byron, al marqués de Sade como antecedente directo de las novelas de Gustave Flaubert, a la belleza diabólica celebrada por John Keats, a la “Salomé” de Oscar Wilde, a la algolagnia sadomasoquista de Charles Swinburne, a las contradictorias actitudes críticas de Baudelaire y, finalmente, el decadentismo que llega hasta bien entrado el siglo XX (con los plagios de Gabriele D’Annunzio a la cabeza). Todo este acervo de personalidades extrañas, ambiguas, visionarias o sublimes proporciona al libro un carácter flexible y abarcador que pone al autor en relación directa con las características que distinguen a la estética decadente europea: la evolución de la idea de belleza, a menudo asociada con la idea de la muerte; el tema de la corrupción y la tristeza; la recurrencia a personajes satánicos; la figura sádica de la “mujer fatal”; la fascinación por la lujuria, el vicio y el exotismo; la sensualidad de la palabra. Un ensayo anormal, moderno, en el que el pensamiento crítico se nutre de ideas sutiles y la literatura se convierten en una experiencia apasionada que funciona como si fuese un rompecabezas, o mejor dicho, un encuentro con resquebrajaduras y de pasajes subterráneos de los que es imposible dar un resumen exhaustivo. Pero esto no implica que Praz no sea capaz de elaborar una fascinante valoración de los tópicos, en particular, del binomio clasicismo-romanticismo, para que ambos puedan ser entendidos en su justa medida. Otras veces sus apreciaciones son más de contenido, como cuando reconoce que, en el fondo, lo romántico tiende a identificarse con lo místico, y prueba a poner límites a su análisis cuando plantea de forma muy atractiva —incluso para un lector no especializado en problemas históricos, literarios y psicológicos— los sugestivos enunciados antes mencionados:“belleza medusea”, “metamorfosis diabólica” o “bajo la enseña del divino marqués”. Sólo el último de los apartados —“D’Annunzio y el amor
sensual de la palabra”—, parece remitirnos a lo monográfico (Colinas, 1999). En virtud a la imaginación católica, la gran literatura decadente a partir de François-René de Chateaubriand está llena de epicureísmo por lo sensual, voluptuosa, entregada a los placeres. Joris- Karl Huysmans camina con el Marqués de Sade para recoger verdades que transgredir, precisamente por el hecho de ser creídas (de lo contrario no habría nada por romper). Tenemos la sospecha que Praz trata la neurosis de estos autores como una cura (o alivio) a través de la “delectatio morosa”, es decir, deleitándose ante la idea de la desgracia ajena, como una especie de inevitable residuo que no puede resolverse en la vida. Este asunto sin solución le parece al escritor italiano que encaja perfectamente, porque también es su asunto, y sigue siendo tan suyo cuando trata de darle respuesta o contextualizarlo en un sinnúmero de narraciones, proyectivas o exclusivas, con la participación de los géneros menores y las artes visuales, especialmente la pintura prerrafaelista. En otras palabras, podemos identificar un cristianismo confuso en Fiodor Dostoievski, que altera la irrealidad como justificación y satisfacción de los instintos: el pecado en un convento o en relación al ceremonial de la misa, después de la compulsión sexual, equivale desde el plano filosófico asumir la profundidad de lo profano y no como su necesaria contradicción. Huysmans prefiere el latín post-clásico porque es posible recuperar mucho más en la falta de equilibrio senecana y en la complacencia de Petronio, que en el esfuerzo del período cristiano por llegar a una mediación entre el paganismo y la nueva religión. André Gide recibirá sustanciales ofensas por oscilar siempre entre el temor de comprometerse —a diferencia de Wilde, que desafió aquel miedo volcándolo en provocación, hasta un punto en que ya era un estúpido error de cálculo masoquista (la algolagnia) —y el deseo de comprometerse. Gide es visto por Praz como un “hermafrodita moral, suspendido entre diversas posibilidades y, en consecuencia, negativo, estéril”. En todo caso, lo que importa de esta obra de Praz, es la afinidad que muestra hacia Charles Augustin SainteBeuve (véase por ejemplo en la introducción de 1942, o las relaciones que observa entre Byron y Chateaubriand, que en cualquiera de los casos no siempre esquematiza), que, como es bien sabido, desprecia a Stendhal (De Fazi, 2011). A pesar de que Mario Praz fue un personaje de gran influencia, actualmente es muy poco conocido, pero está a la par de un Keats, un Shelley o un Gœthe.
Bibliografía
DE FAZI, Sandro: (2011): La carne, la morte e il diavolo nella letteratura romantica di Mario Praz. Una recensione, en Filosofiprecari (Italia), 21 de Julio. Recuperado el 14 de Octubre de 2016, desde: http://www.filosofiprecari.it/wordpress/?p=757 PRAZ, Mario (1969): La Carne, la Muerte y el Diablo. Caracas: Monte Ávila Editores C.A. COLINAS, Antonio (1999): La Carne, la Muerte y el Diablo en la Literatura Romántica, de Mario Praz, en El Cultural, Sección Libros Clásicos (España), 28 de Noviembre. Recuperado el 15 de Octubre de 2016, desde: http:// www.elcultural.com/revista/letras/La-carne- la-muertey-el- diablo-en- la-literatura- romantica/18047
* El autor es Maestro en Educación Superior por la Facultad de Filosofía y Letras de la BUAP y Director General de Óclesis, Víctimas del Artificio. A. C. 3
Juan Carlos Pérez Castro*
SIN PALABRAS Vera Milarka *
Cuervo de plata, sombra de tinta morada negras astillas trazando el papel a palos... Eres lápiz y color Naranjo Los golpes certeros de tu malicia rechinan los dientes en tu partida. Eras la bocanada de humor libre y malhumorado plumilla rijosa asediando a la política rudo el martillo del silencio impreso cincelando monumentales atropellos el cinismo reverbera fuego sobre la plancha de metal de tu dibujo. De tu mano sale el mudo y estruendoso grito contra la infamia testimonio de la revuelta el justo epitafio sobre la lápida de los anónimos si no hubiera sido por tu línea decidida continuamente señalando lo abyecto habrían desaparecido —en el inmenso charco de sangre de nuestro país… la justicia y la esperanza sepultadas en la fosa común y sin fondo de la ignominia carcomidas por los gusanos del poder de ésos los sobornados gobernantes. Naranjo muerde la calavera tu caricatura impone en su impostura tu alma es turba manifestándose todavía en nuestros acorazados corazones de hueso andamos rotos y agujerados reconstruidos con cuernos de diablo judas de cartón, alebrijes de madera y nahuales de brebajes de ayahuasca senda de polvo de cempasúchil allá vas pintando el inframundo de tu color favorito: Naranjo, elevando el eco de tu bayoneta justiciera sin palabras. * La autora es textoservidora. 4
Cuando pensamos en nuestra vida, casi siempre lo hacemos desde algún aspecto que parece verdaderamente banal, ya que lo hacemos a partir de las vivencias más repetitivas de nuestro existir (trabajar, estudiar, alimentarnos, relaciones de pareja, pagar las cuentas, etc.). ¿Qué significa eso?
¿P
or qué damos tanta prioridad a los aspectos más mundanos y simples de nuestra existencia olvidando aspectos más importantes, circunstancias de nuestra vida que verdaderamente nos ponen, cara a cara, con el hecho que significa “vivir”? Por un lado, debemos de reconocer que estamos en una sociedad que nos ha alienado y enajenado de la circunstancia que significa la construcción de nuestra vida. Pasamos horas frente a una “caja idiota”, observando y escuchando como debemos de vestir, pensar, que comer, en fin, un verdadero absurdo que nos impide observar la existencia en su crudeza. “Es fácil siempre ser lógico. Pero es imposible ser lógico hasta el fin. Los hombres que se matan (los suicidas) siguen así hasta el final la pendiente de su sentimiento. La reflexión sobre el suicidio me proporciona, por lo tanto, la ocasión para plantear el único problema que me interesa: ¿hay una lógica hasta la muerte?” (Albert Camus 1966). Entonces, debemos observar que, para el hombre, el sentido y el significado de la muerte puede ser una confrontación con su límite, que se le manifiesta en el momento en que se vuelve consciente de la pregunta por la muerte, su estado más enajenado, pues intentara por todos los medios eludir esta pregunta como si, con esa evasión, pudiera evitar el desenlace al que se encuentra sometido desde el momento de su nacimiento. El aspecto cuasi patológico con que algunos se refieren a la muerte, nos invita a pensar en una sociedad verdaderamente alterada, donde la propensión por adquirir más bienes y más servicios sin que ellos sean verdaderamente necesarios, nos permite formularnos la cuestión: ¿es tan terrible la existencia humana que se busca evadir su confrontación real? ¿El hombre de nuestra época ya no puede encararse ante “su” existencia en condiciones de responsabilidad? Por supuesto, sabemos que un gran número de personas se ha negado a erigirse como portadores de su libertad, que la responsabilidad en nuestra época es algo que desearía evitarse, y sin embargo, en el momento en que hacemos uso de la palabra (sea oral o escrita), tomamos una condición que intenta emancipar de la falsa ilusión de nuestro acontecer actual. Así, Albert Camus dirá: “toda interrogación, toda palabra, es rebelión, mientras que en el mundo de lo sagrado toda palabra es acción de gracias” (El Hombre Rebelde”. Alianza-Losada, Madrid, 1986. p. 29). En consecuencia, la palabra nos significa una manera de desalienar la condición de evasión, evocándo-
nos a un encuentro con el otro y aceptando la condición de nuestra existencia no como un llegar a ser, tampoco como “algo” cerrado, ya finalizado, sino como un constructo existencial que deviene y se transforma a cada instante, en cada momento, y por el cual el sentido de fatalidad se vuelve en un absurdo si no se encara de acuerdo con su libertad y, por ende, con su responsabilidad. En suma, podemos pensar que los sentimientos de derrota, de angustia existencial nos provocarán una condición absurda ante nuestra existencia, pero no debemos olvidar que estos sentimientos forman parte del constructo que significa “vivir”, y, por ello, denotan una nueva consideración frente a nuestra existencia, pero mostrándonos siempre que no hay una sola vía en nuestro camino. “En el apego de un hombre a su vida hay algo más fuerte que todas las miserias del mundo. El juicio del cuerpo equivale al del espíritu y el cuerpo retrocede ante el aniquilamiento. Adquirimos la costumbre de vivir antes que la de pensar. En la carrera que nos precipita cada día un poco más hacia la muerte, el cuerpo conserva una delantera irreparable.” (Albert Camus: El Mito de Sísifo. Losada, Buenos Aires, 2004.) * El autor es estudiante de la licenciatura de Filosofía en la Facultad de Filosofía y Letras de la BUAP.
ESCRÍBENOS • Para cualquier aclaración • Para algún comentario • Para hacer alguna contribución • Para externar una crítica • Para protestar por algo • Para alguna mentada (pero leve) • Para discutir el futuro de la humanidad • Para dudas (que no sean existenciales) • Para preguntas (no capciosas) Si quieres recibir Reincidente, nuestro correo electrónico es:
buzon.reincidente@gmail.com
Cecilia Vázquez Ahumada*
E
“Un cuarto de litro de cerveza equivale al platillo de un rey.” William Shakespeare (1564-1616)
l origen de esta planta trepadora perenne es el norte de Europa y Medio Oriente. El lúpulo (Humulus lupulus), emparentado con el cannabis, brota en primavera y trepa en cualquier punto de apoyo. Con el lúpulo se han hecho tintes, papel y sogas; sirve también para atender problemas hepáticos y digestivos. Pero en la actualidad el 98% del lúpulo que se cultiva es para conservar cerveza y potenciar su sabor. El lúpulo es dioico (dos casas en griego), es decir, produce flores de ambos sexos en pies distintos. La planta femenina da pequeños racimos de flores resinosas almizcleñas que se recolectan y secan antes de ser enviadas a las fábricas de cerveza. El lúpulo silvestre trepa por arbustos hasta sofocarlos con tal de alcanzar la luz. Por ello se cultiva controladamente guiando sus tallos con cuerdas de alambre o yute atadas a una estructura metálica por la parte superior. Esta estructura se afianza con gruesos postes de castaño (árbol que contiene potentes conservadores naturales), así las parcelas de lúpulo parecen jaulas vegetales. Esta planta crece hasta el otoño. Hoy se recolecta de manera mecánica, pero antaño había jornaleros trashumantes que hacían este trabajo a destajo, viajando con todo y sus familias. Los hombres se subían en zancos para alcanzar las flores y el resto de la familia permanecía a ras de tierra, recogiendo el lúpulo (los racimos de flores) en cestas de lona. Una vez recolectados se secaban en hornos especiales de forma alargada, se depositaban en sacos de arpilla y se llevaban a vender. En 1826 el ilustrado William Cobbett (17631835) escribió en su libro Cottage Economy que el lúpulo había podido conservar la cerveza y aportarle un agradable sabor. El cervecero añade el lúpulo a su producto en las primeras y últimas fases del proceso, para esterilizar la cerveza y añadirle su amargor. Previamente se hierbe el lúpulo con el mosto de la maceración de la malta, este sobrecalentamiento debe durar una hora y media. Y eso fue lo que cambió la ale por la cerveza. La ale, del anglosajón ealu, era la bebida normal del norte de Europa; se fabricaba con cebada germinada y seca, se conservaba con especias y hierbas como el mirto de tubera. Ya hervida y fermentada, la alem prácticamente no tenía microbios y era una garantía de no enfermarse a diferencia del agua que se tomaba entonces de los pozos directamente. Pero desgraciadamente la ale se descomponía con mucha facilidad, sobre todo en verano, agriándose y volviéndose intomable. El Lúpulo cambió la ale en cerveza. Desde los egipcios se sabía que el lúpulo tenía estas propiedades de conservar, por ello lo dejaban fermentar y elaboraban una bebida llamada symthum, pero ni los egipcios, ni los sumerios, productores estos últimos de ale, ni los griegos, ni los romanos, tuvieron la ocurrencia de hervir el lúpulo exactamente una hora y media. O si lo hicieron no esperaron lo suficiente para observar la conservación del ale.
ERMITAÑO Clementino vivía solo. Estaba solo. Hasta su soledad lo había abandonado y desde hacía mucho tiempo no escuchaba la voz de nadie. El día que sucediera, el sonido le afectaría, puesto que sus tímpanos se habrían hecho vulnerables al ruido. En donde habitaba, no existía el eco, así que por más que gritara, Clementino no escuchaba ni siquiera su propio grito. Clementino iba enloqueciendo de a poco. Cierto día y falso día, un loro llegó a su árbol. Clementino lo miró y el loro habló. Clementino no conocía a los loros, y al escucharlo quedó loco. También sordo.
Los estudiosos suponen que fue en la Edad Media cuando un monje o monja descubrió el punto exacto de la incorporación del lúpulo al ale y crearon la maravillosa cerveza. Existe un monasterio en Suiza, de principios del siglo IX, que muestra tres cocinas, cada una de ellas con un espacio para la elaboración de cerveza. En Alemania, en el año 736, la unión del lúpulo y la cerveza ya se registran en documentos benedictinos en Weihenstephan, cerca de Múnich. En el siglo XII, cuando se crearon las universidades en París y Oxford, la abadesa Hildegarda de Bingen, (1098-1179), conocida como la sibila (mujer sabia a quienes los antiguos griegos y romanos atribuyeron espíritu profético) del Rin en su libro Physica Sacra (1150), habló de lo benéfico de la cerveza y de que el lúpulo se podía sustituir por un puñado de hojas de fresno y así la cerveza se conservaría. El monasterio de la benedictina Hildegarda y otros conventos producían cerveza para la venta, esta costumbre llegó hasta el siglo pasado con las legendarias cervezas trapenses de Bélgica y los Países Bajos. Pero también las amas de casa producían sus propias cervezas. Los monjes procesaban todo el producto, recibiendo los cereales de su entorno. Producida en Alemania, los Países Bajos y el norte de Francia, los ingleses la envidiaban. Así que los condados del sur de Inglaterra decidieron importar el lúpulo y desplazar poco a poco la ale. Los ejércitos ingleses se sostenían con pan, carne y cerveza. Los barcos la llevaban para cada tripulante. En México, la estudiosa María de Carmen Reyna en su libro: Historia de la Cerveza en México, explica que en 1542, Carlos V autorizó que en la Nueva España se elaborara cerveza. Los primeros tarros de este brebaje se tomaron en Amecameca, pero el maestro cervecero traído de España, consideró que era muy caro producirla en México y se optó por traerla de Europa. Luego de la Revolución de Independencia, muchos extranjeros venidos a México, preferían la cerveza al pulque. En la primera mitad del XIX los europeos comenzaron a fundar fábricas de cerveza, primero en la ciudad de México, cerca de un río. Pero importar el lúpulo era caro y la cebada de Estados Unidos no tenía la calidad suficiente. Entonces, se optó por producir la cebada en México. La cerveza desplazó al pulque, y en 1925 unos españoles crearon la cerveza Modelo en la ciudad de México. Para expandirse adquirieron una cervecera de Yucatán, luego fundaron la Corona que exporta cerveza a nivel internacional. En la ciudad de Toluca existe un museo dedicado a la cerveza, propiedad de la cervecería Modelo. México ocupa el décimo lugar en el consumo de la cerveza, atrás de Alemania, España, Francia, República Checa, Austria, Bélgica, Reino Unido, Dinamarca y Estados Unidos.
HORIZONTALES 3. Regalará, obsequiará. 1. (Telecomunicaciones y), una de 4. Río de Asia Central, el princilas más importantes reformas pal afluente del lago Baljash. instrumentadas por peña Nieto. 5. Pacto militar encabezado por 13. Delito que ha crecido en el país, EU. en el marco del aumento gene- 6. Símbolos del deuterio y oxígeralizado de violencia. no. 14. (Ley de), reforma llevada a cabo 7. Nota musical. durante el presente sexenio. 8. Parte superior del carpóforo, 15. Novela romántica de Jorge Isadel sombrerillo de algunas seacs. tas. 17. Apoyan sobre una base. 9. Nombre de una ciudad belga 18. Es eje de la violencia que se vive que, en tiempos romanos, era en el país. muy popular por sus baños de 21. Existe. aguas termales. 24. Un sector de trabajadores de 10. Ciudad de Rumania. esta secretaría se han inconfor- 11. Reza, hace oración. mado por la reforma educativa. 12. No nacido. 26. Abreviaturas de segundo y tem- 16. Remueva la tierra con el arado. peratura. 19. Carta de la baraja. 27. (Cártel de los), organización que 20. Símbolos del carbono y fósforo. se ha asentado en Ocozocoautla 22. Sociedad Anónima. de Espinoza Chiapas. 23. Compositor mexicano, autor del 30. Cártel que tiene a Tamaulipas vals Sobre las olas. como base de su centro de ope- 25. Pieza del ajedrez. raciones. 26. Símbolos del siemens y flúor. 32. De esta manera. 28. Escritor mexicano, obtuvo No33. La R en su sonido suave. bel de literatura. 34. Mercado público en Oriente. 29. Tratamiento de nobleza inglés. 36. La visita de éste personaje a 30. Símbolos del germanio y tesla. México, restó la escasa popu- 31. Unidad monetaria de Rumania. laridad de la que goza Peña 34. Presión que se ejerce sobre una Nieto. persona o entidad suprimiendo 39. Símbolo del osmio. o dificultando cualquier rela40. Partido que ha tenido fuertes ción con ella. reveses durante el actual sexe- 35. Moneda de cobre usada en la nio. antigua Roma. 43. Forma de pronombre. 37. Dos mil en números romanos. 45. ( Jalisco…Generación), cártel 38. Solicitará. que se ha hecho muy poderoso 40. Símbolo del plutonio. durante el presente sexenio. 41. Animal cuadrúpedo. 48. Se precipitará al suelo. 42. Cuatro en números romanos. 51. Instituto que, según sus regis- 44. Revista que investigó la violentros existe un índice elevado de cia en México durante el sexevíctimas por la violencia en el nio de Peña Nieto, y el resultapresente sexenio (inic.). do es que asciende a más de 78 54. Molusco del grupo de los lamemil el número de muertos. libranquios o bivalvos, estrecha- 45. Embarcación (pl.). mente emparentados con las 46. Fluido que respiramos. ostras. 47. Símbolos del selenio y tecnecio. 56. Levantar la voz más de lo nor- 49. Símbolos del arsénico y resismal. tencia eléctrica. 57. (En materia de), reforma que le 50. Río de Europa. incrementa facultades al IFAI. 52. (Joaquín), compositor español, autor de Danza ibérica. VERTICALES 53. Ciudad del óblast de Orembur1. Fundador de la XIX dinastía, go, en Rusia. perteneciente al Imperio Nuevo 55. Abreviaturas de norte y de padre. de Egipto. 56. Símbolos del gauss y roentgen. 2. Parte saliente de la vasija.
* La autora es Licenciada en Antropología Social por la BUAP; actualmente asignada al INAHPuebla.
FIESTA DE DISFRACES Un día, Dios aburrido de contemplar su creación y de saberse olvidado por ella, decidió jugar a los disfraces con Belcebú. Belcebú se vistió de Dios y Dios se disfrazó de diablo. Pero siendo ahora Belcebú todopoderoso, no permitió que el juego terminara. Llevan siglos con las ropas cambiadas. Por eso es que Dios permite que haya injusticias, guerras, miseria, hambre y dolor, y maldad y penas sin panes. Quién sabe si la humanidad lo entienda.
5
Manuel Pérez Chalini*
L
a sociedad tradicional, moralina y de doble cara, consideró siempre a la prostitución como “un mal necesario”. Horrible pero inevitable. En tanto las mujeres “decentes” debían mantener la virginidad hasta el momento del matrimonio y después ejercer el sexo “con recato” y para la reproducción, los varones necesitaban “un lugar” donde ejercer. Las mujeres en casa, cuidando niños y atendiendo labores domésticas; los hombres trabajando y, de vez en cuando, relajándose. Era necesario, en consecuencia, regular el hecho: separar y controlar a las manzanas podridas, cuidar a las sanas y honorables, al buen nombre de la sociedad y de la familia, evitar escándalos y actos bochornosos y perpetuar la situación. En la Puebla de 1870, se empezó a llevar el registro de prostitutas. El Reglamento de la Prostitución (adoptado para la capital del Estado de Puebla) debió ser promulgado en mil ochocientos ochenta y algo (el propio reglamento consultado en el Archivo Histórico Municipal de Puebla no lo dice, y casi con seguridad debe existir uno anterior) nos habla en 60 artículos de:
Obligaciones de las Mujeres Inscritas, artículos 1-8 De las Clases de Mujeres, artículos 9 al 12. De la Normatividad para el Funcionamiento de Burdeles y la Conducta de las Matronas, artículos 14 al 25 (cabe mencionar que no hay artículo 13). De las Casas de Asignación y sus Dueños, artículos 26, 27 y 28. De los Hoteles y Especuladores, artículos 29 y 30. De las Prostitutas Insometidas o Clandestinas, artículos 31 al 35. De la Separación de las Prostitutas, artículos 36 y 37. Sección de Sanidad, artículos 38 al 42. De los Médicos, artículos 43 al 47. Del Médico en Gefe (sic), artículo 48. De los Agentes, artículos 49 y 50. De los Fondos, artículos 51 al 60. A continuación, destacamos unas “perlas” del citado Reglamento. Se ha respetado la redacción y ortografía del documento original.
REGLAMENTO DE LA PROSTITUCION, ADOPTADO PARA LA CAPITAL DEL ESTADO DE PUEBLA Art. 1°. Toda mujer que vive de la prostitución, está obligada á someterse a la Gefatura sea cual fuere su nacionalidad y categoría. Art. 2°. La que se presentare á la Gefatura para ser inscrita, expresará su voluntad de entregarse á la prostitución, y dejará en la oficina dos retratos en forma de tarjeta; uno para el libreto y otro para el libro de registros. Clases de Mujeres (...) Art. 9°. Las clases son dos: aisladas, las que viven solas, y públicas, aquellas que viven en reunión. Art.10. Las aisladas pagarán mensualmente dos pesos asegurando el pago con fianza que otorgarán ám satisfacción de la Gefatura. El requisito de la fianza podrá ser dispensado; pero entonces la aislada pagará su cuota por quincenas adelantadas, y si no verificare el pago dentro de tres días después del en que deba hacerlo, se considerará como insometida ó clandestina, y sufrirá la pena que á estas se le aplica conforme al presente Reglamento. (...) Art. 13. Las prostitutas de ambas clases tienen los deberes siguientes: 1. ° Presentar su libreta de tolerancia cuando á ello sea requeridas por la policía siempre que la extraviaren la repondrán a su costa. 2. ° Portarse y vestirse con decencia. 3.º Abstenerse de hacer escándalo en la calle ú otros lugares públicos. 4. ° Abstenerse de pasear las calles reunidas en grupos que llamen la atención. 5. ° No saludar ni interpelar en la calle á los hombres que fueren acompañados de señoras y niños. 6. ° No provocar a la prostitución con señas ó palabras. 7. ° No permanecer en las puertas de los burdeles ni en los balcones ó ventanas de ellos. 8. ° No visitar familias honradas. 9. ° Evitar todo escándalo aún en su misma casa. 10. Vivir distantes de los establecimientos de instrucción y de beneficencia de ambos sexos. 11. Avisar al C. Gefe político cuando varíen de domicilio, así como cuando deseen cambiar de clase. 12. Pagar un peso por valor de las libretas que se les expidan, y que repondrán anualmente. Las infracciones 6
de estos deberes serán penadas con veinticuatro horas de prisión, y si hay circunstancias agravantes, podrá aumentarse la pena á juicio del C. Gefe político. Burdeles y Matronas 14. Toda casa en donde estén reunidas dos ó más prostituidas, estará precisamente bajo la vigilancia inmediata de una mujer mayor de treinta y cinco años. (...) 16. No se establecerá burdel alguno en casa de vecindad. 17. Los burdeles no tendrán señal exterior que indique lo que son. 18. Los cristales de balcones ó ventanas estarán opacados, y habrá además cortinas exteriores con el objeto que en ningún caso se perciba por la parte de afuera lo que pasa en el interior. 19. Son obligaciones de las matronas: 1. Pagar mensualmente la cantidad que se les señale por la Gefatura, á cuyo efecto otorgarán fianza a satisfacción del C. Gefe político. La fianza podrá sustituirse con una obligación de pago de la cuota respectiva en la que conste que este se hará por quincenas adelantadas, y que en caso de que la interesada no verificare el entero dentro del término de tres días después del en que deba hacerse, se cerrara inmediatamente la casa, retirándosele la licencia correspondiente. 2. No consentir en las casas á las mujeres no sometidas; la infracción será penada con cinco diez días de prisión y en caso de reincidencia el C. Gefepolítico acordará la clausura de la casa, ú otra pena, conforme a la gravedad de la falta. 3. Denunciar en el término de veinticuatro horas a la insometidas ó clandestinas que pretendieren asistir al burdel. 4. Las matronas son responsables a la visita de las mujeres que estén a su cargo, y se les aplicara la pena de cuatro pesos de multa por cada mujer que falte, sino avisaren oportunamente el motivo de la falta, para que en su vista se mande practicar en la casa el reconocimiento. 5. Cuidarán de que las mujeres que estén a su cargo vistan con aseo y decencia, las alimentarán convenientemente, y no las maltratarán. 6. Tendrán el burdel aseado en todas sus piezas. 7. Proveerán a las mujeres de jeringas, esponjas, de las sustancias que aconsejen los médicos como preservativos del contagio. 8. Evitarán todo escándalo que puedan ocasionar las mujeres que estén a su cargo, dentro o fuera del burdel. 9. No consentirán juegos de azar, ni que los concurrentes se embriaguen, á cuyo fin se les prohíbe expender licores y permitir la introducción de ellos en el burdel. 10. Tendrán su respectivo registro á donde conste el número de mujeres del burdel y las fechas de su entrada y salida; y remitirán mensualmente al Comisario de la Sección Sanitaria una a las prostitutas que se hubieren inscrito, y de que se hubieren separado de sus casas. 11. Si los concurrentes cometieren escándalos, darán aviso inmediatamente á la policía. 12. No permitirán que las mujeres del burdel salgan reunidas en grupos que llamen la atención. 13. Evitarán el comercio de las mujeres que estén a su cuidado, con hombres de quienes sospechen estén enfermos del mal venéreo, y por su parte mostrarán el certificado sanitario de dichas mujeres en el caso de que alguno lo exija. (...) Art. 20. Las domesticas de estas casas que tuvieren menos de cuarenta años de edad se considerarán como prostitudas, serán inscritas y sufrirán el reconocimiento respectivo. (...) Art. 21. La cooperación de cualquier género que sea empleada para prostituir doncellas, casadas y con niños de ambos sexos, será castigada con la clausura de la casa y las personas culpables serán sometidas á los tribunales. Art. 22. No vivirán en los burdeles niños de tres años. Casas de Asignación y sus Dueños Art. 26. Se llaman de asignación aquellas casas que, no siendo habitadas por las mujeres públicas, son frecuentadas por ellas para entregarse a la prostitución. Art. 27. Las personas que quieran establecer una casa de esta clase, se sujetarán en la parte conducente a las obligaciones impuestas á las matronas, y además, observarán las siguientes prevenciones: 1° Pagarán mensualmente la cantidad que se les señale por la Gefatura; y para asegurar el pago de la cuota, otorgarán fianza á satisfacción de la citada oficina. 2° No consentirán personas que hayan causado escándalos dentro ó fuera de la casa.
Art. 28. Sorprendida una casa de asignación clandestina, el dueño sufrirá un mes de prisión. Hoteles y sus Especuladores Art. 29. Los dueños de hoteles ó sus administradores que cosientan la prostitución en sus establecimientos sin tener la patente respectiva, quedan sujetos á las obligaciones y penas impuestas en su caso á los dueños de casa de asignación. Prostitutas Insometidas ó Clandestinas Art. 31. Son clandestinas aquellas mujeres que especulando con su prostitución, eluden la vigilancia de la policía especial y no están inscritas. A estas mujeres se les inscribirá de oficio, probada que sea su prostitución. (...) Art. 34. Es inhábil para la inscripción toda mujer tenga juicio del facultativo de la Sección y notoriamente sea impúber. Art. 35. Las no púberes prostituidas, se remitirán al C. Gefe político para su corrección con un informe detallado que contenga los datos respectivos. Separación de las Prostitutas Art. 36. Toda mujer que pretendiese abandonar la prostitución, dará aviso al Comisario, devolverá su libreto, manifestará los elementos con que cuenta para vivir honestamente y dará fianza de alguna persona honrada que garantice su conducta ulterior, é inmediatamente será borrada del registro respectivo. Durante seis meses será vigilada su conducta; y concluido este plazo, se le devolverá su fianza, si en efecto se hubiere apartado de la prostitución. En los casos en que el C. Gefe político lo creyere oportuno, podrá eximir de la obligación de dar fianza á la que lo solicite; pero entonces la vigilancia durará un año. Art. 37. Se borrará igualmente de los registros á las difuntas, así como á las que justificaren haberse casado. Sección de Sanidad Art. 41. Los deberes de este empleado son los siguientes. 1° Hacer las inscripciones de las mujeres sometidas, anotando las generales de la interesada y la causa porque se prostituye. 2° Expedirle un libreto que contenga las prescripciones de este Reglamento, su filiación, certificado de su estado sanitario, la clase á que pertenece, y por último, el retrato de la interesada, que la enteren del contenido de su libreto. (…) 6° Procurar disuadir á las mujeres que se presenten á inscribirse, cuando estas no parezcan estar completamente prostituidas; y en caso de que conforme á las circunstancias le ocurrieren medios que salven á las interesadas, los consultara desde luego al C. Jefe político. 7° Procurar por medio de sus agentes hacer efectivos los artículos relativos á la policía de la prostitución, vigilando cuidadosamente que dichos agentes no mantengan relaciones de ningún género con las prostituidas. De los Agentes Art. 49. Siendo los agentes las autoridades que mas inmediatamente se ponen en contacto con las prostituidas, están obligados á conservar en todo caso su respectabilidad; en consecuencia, por cualquiera falta ó abuso que se les advierta, serán castigados con la pérdida del empleo. Art. 50. Son obligaciones de los agentes: 1. ° Acompañar á los médicos á las visitas domiciliarias cuando estos lo crean necesario, y obedecer las órdenes relativas al servicio que les indiquen sus superiores. 2. ° De todos sus procedimientos y observaciones relativas á la policía de las prostituidas, darán parte diario por escrito al ciudadano Comisario, procurando en todo caso salvar su responsabilidad, ejecutando solo los acuerdos de sus superiores. De los Fondos Art. 51. Los destinados para cubrir el presupuesto respectivo, se formarán del producto de las multas en la visita semanaria, de las multas en general, del derecho de patente, etc. El deficiente, si lo hubiere se cubrirá según lo acordare el C. Jefe político, distribuyéndose entre tanto la cantidad que hubiere á prorateo entre los empleados; si por el contrario hubiere sobrante, se dará el correspondiente aviso al C. Jefe político, conforme lo previene la fracción 9° del Art. 41. (..) Art. 57. Anualmente se refrendarán las patentes de las aisladas, las de los burdeles y de las casas de asignación, pagando los interesados un peso por este refrendo. Art. 58. Las prostituidas de que habla el Art. 14. pagarán semanariamente veinticinco centavos.
M
urió a los 90 años, luego de 53 en el poder al frente de uno de los escasos gobiernos comunistas aún en pie. 29 salvas a un solo tiempo, en la Habana y Santiago. También en Santiago donde empezó todo en 1953. Nació el 23 de agosto de 1926. Hijo de terrateniente y una trabajadora doméstica. Recibió una buena educación católica. En 1948 casó con mujer rica y en 1952 Fulgencio Batista dio golpe de estado. Para 1953 ya andaba echando bala: Moncada. Apresado y sentenciado a 15 años, solo permaneció encerrado 19 meses por una amnistía. Llegó a México y conoció al Che. A fines de 1956 regresó a Cuba por mar, en compañía de 81 compañeros para hacer la revolución. En 1959 tomaron la Habana y todo cambió. En 1960 fueron nacionalizados todos los bienes privados. Así, los grandes negocios de ciudadanos estadounidenses se esfumaron. Empezó el embargo de EU contra Cuba.
En abril de 1961 ocurrió lo que parece el primer intento militar por desaparecer a Castro de la escena mundial por parte de EU: Bahía de Cochinos. En 1962 estuvimos a punto de ingresar en la tercera guerra mundial por unos misiles soviéticos en la isla. En 1975, organizó la intervención cubana en África: Operación Carlota, con el envío de 30 mil combatientes a Angola. “Nos enteramos cuando ya estaban ahí”, reconoció Henry Kissinger. En 1998 lo impensable: el Papa en la isla. 10 presidentes pasaron por su archienemigo EU mientras él dirigió Cuba, entre 1959 y 2008: Eisenhower, Kennedy, Johnson, Nixon, Ford, Carter, Reagan, Bush, Clinton y otro Bush. En diciembre de 2014 empezó el fin del embargo de EU. A fines de 2016 se fue. ¡Larga vida a sus ideales de justicia! Fuente: http://www.bbc.com/news/world-latin-america-38135021 http://www.bbc.com/news/world-latin-america-10744408
Solución al Reincigrama de este número
Director y editor: Enrique Condés Lara Consejo Editorial: Mariano E. Torres Bautista, Juan Lozada León, José Fragoso Cervón, María de Lourdes Herrera Feria, Hugo López Coronel, Gabriela Breña, Francisco Hernández Echeverría Cecilia Vázquez Ahumada y Eulogio Romero Rodríguez, Octavio Spíndola Zago Corrección: Enrique Condés Breña Diseño: El Errante Editor Correo electrónico: buzon.reincidente@gmail.com *No incluye sección de Sociales
RE~INCIDENTE. Año VII. No. 135. Primera quincena de diciembre de 2016. Es una publicación quincenal editada por el C. Enrique Condés Lara, domicilio Costado del Atrio de San Francisco 22 bis. Cuadrante de san Francisco, Delegación Coyoacán, CP. 04320, tel. (55) 55-17-76-63. Correo electrónico: buzon.reincidente@gmail.com. Editor responsable: Enrique Condés Lara. Reserva de Derechos al Uso Exclusivo 04-2011-032210460200-101. ISSN: 2007-476X. Otorgados por el Instituto Nacional del Derecho de Autor. Certificado de Licitud y Contenido No. 15198 otorgado por la Comisión Calificadora de Publicaciones y Revistas de la Secretaría de Gobernación. Impresa en los talleres de El Errante, Editor. Privada Emiliano Zapata No. 5947, San Baltasar Campeche, Puebla Pue. C.P. 72550. Este número se terminó de imprimir en diciembre de 2016 con un tiraje de 5000 ejemplares. Las opiniones expresadas por los autores no necesariamente reflejan la postura del editor de la publicación. Queda estrictamente prohibida la reproducción total o parcial de los contenidos e imágenes de la publicación sin previa autorización de RE-INCIDENTE.
7
8