ARQUEOLOGÍA BÍBLICA
Arqueología bíblica
YIGAEL YADIN, ENTRE LA GUERRA Y LA ARQUEOLOGÍA
Jordi Vidal Universitat Autònoma de Barcelona
El de Yigael Yadin (1917-1984) es uno de los nombres inevitables en cualquier historia de la arqueología bíblica. Hijo del también arqueólogo Eleazar Sukenik, Yadin realizó importantes contribuciones en yacimientos tan emblemáticos como el de Masada, así como en el estudio de los manuscritos del mar Muerto. Además, la figura de Yadin también tuvo una importante dimensión pública fruto de su actividad política y militar. Así, tras ser miembro de la Haganá (la fuerza paramilitar judía creada durante el Mandato británico en Palestina), en 1948 fue nombrado comandante en jefe del ejército de Israel. Más tarde, en 1973, tras la guerra de Yom Kippur, inició una intensa carrera política al frente del Movimiento Democrático para el Cambio (DASH en sus siglas hebreas), llegando a ser viceprimer ministro del gobierno de Menachem Begin, cargo que abandonó en 1981. Por consiguiente, la labor arqueológica de Yadin se concentró en el período comprendido entre 1952 y 1973. Con todo, su tesis doctoral no versó sobre un tema arqueológico, sino que consistió en el estudio del manuscrito de Qumrán conocido como “La Regla de la Guerra”, un texto apocalíptico que describe el conflicto entre “los hijos de la luz” y “los hijos de la oscuridad”. 6 RESEÑA BÍBLICA | Nº109
Fue posteriormente cuando pasó a encabezar algunos de los proyectos arqueológicos más importantes de los que se desarrollaron en Israel a mediados del siglo XX. En este sentido, trabajó en Hazor, donde creyó hallar las pruebas que confirmaban la conquista israelita de la ciudad, una idea que ha sido fuertemente rebatida con posterioridad. También excavó en Megido (1959-1960), interesándose especialmente por el estudio de las denominadas puertas salomónicas, así como por las murallas del Bronce Medio, una estructura que relacionó con las necesidades defensivas derivadas de las invasiones de los hicsos. Con todo, sin lugar a dudas, el trabajo que le valió un mayor reconocimiento fueron las excavaciones en la fortaleza de Masada (1963-1965). Allí encabezó un numeroso equipo de trabajo, que incluía a muchos de sus alumnos de la Universidad Hebrea de Jerusalén y a centenares de estudiantes procedentes de todo el mundo. Entre los principales resultados obtenidos destacan algunos hallazgos que Yadin relacionó con el relato de Flavio Josefo acerca de la conquista de la fortaleza por parte de las tropas romanas de Flavio Silva. Nos esta-
Yigael Yadin en 1960 (foto: Israeli GPO)
mos refiriendo, entre otros, a un ostracon que mencionaba a Ben Yair, el líder sicario de Masada, o al hallazgo de veinticinco cuerpos en el interior de una cueva situada en la ladera sudeste de la montaña, cuerpos que Yadin y su equipo interpretaron como pertenecientes a los últimos defensores de la fortaleza. Estudios posteriores, sin embargo, han puesto en tela de juicio aquellas afirmaciones. En cualquier caso, es indudable que el trabajo de Yadin en Masada generó una enorme expectación y tuvo un impacto que fue más allá del ámbito estrictamente académico, tal y como lo demuestra la extraordinaria difusión que tuvo su obra Masada. La fortaleza de Herodes y último bastión de los zelotes (1966), un auténtico clásico de la literatura arqueológica contemporánea.