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Cómo elegir una firma jurídica para que me represente?
Siempre tendremos dudas respecto de nuestro actuar y la forma de afrontar un conflicto legal, por ello es importante tomar en cuenta diversas herramientas y sobre todo realidades objetivas en nuestra toma de decisiones, para legitimar una firma legal, un despacho o simplemente el actuar de la abogacía en los asuntos en los que nos han de representar.
Los seres humanos por naturaleza, somos especialmente conflictivos y no solo nos referimos a los conflictos que surgen ante la ley, sino también a los de intereses, emocionales, ideológicos, políticos, religiosos, culturales, intrapersonales, armados, sociales.
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Es entonces cuando nos preguntamos ¿qué tiene que ver nuestra naturaleza en el aspecto legal?, pues bien es evidente que, así como nace un conflicto, buscaremos también las posibles soluciones al mismo. Es por ello que en el mundo legal nos rigen diversas materias que seguramente se adaptan a cada uno de los casos específicos.
Nos encontramos en una época donde si nos preguntamos a nosotros mismos si consideramos que la violencia ha disminuido, es evidente que la respuesta será un NO, cada día observamos al alza la Violencia, la falta de respeto y sobre todo la falta de confianza en las Instituciones, pero además la falta de confianza entre las mismas personas que día a día se relacionan por algún trámite legal, de todas las materias. Esta pregunta general resulta detonante para que cada una de las personas que podrían verse como victimas u ofensores de la ley recurran a la asesoría legal de los expertos, casi siempre pensamos que un abogado lo sabe todo, o podría resolver todo tipo de asuntos, la pregunta es ¿una sola persona puede saberlo todo en todas las materias? Lo primero que debo tener en claro si seré un usuario del medio legal, es que los conflictos legales son de diferente índole, sí me refiero a una demanda para todo, tal vez debo acuñar que el derecho no es el mismo en todas las áreas; por ejemplo, si me refiero a un problema legal donde se encuentra de por medio una sanción que pudiera ser restringir mi libertad, me refiero al campo del Derecho Penal, si me encuentro inmenso en un tema donde el origen tiene que ver con mi familia especialmente con los hijos y su alimentación, la materia resulta ser la Familiar, pero si en su caso me gustaría saber qué debo hacer para cobrar un adeudo con motivo de un pagare, o compromiso de pago, la materia es la Mercantil; ahora bien si me tema tiene que ver con una relación laboral, es más que claro que debería acudir con un experto en materia Laboral.
Atendiendo al contenido de nuestra carta magna en su artículo 1 primero, se establecen algunos datos importantes donde podemos observar que “…todas las personas gozarán de los derechos humanos reconocidos en esta Constitución y en los tratados internacionales de los que el Estado Mexicano sea parte, así como de las garantías para su protección, cuyo ejercicio no podrá restringirse ni suspenderse, salvo en los casos y bajo las condiciones que esta Constitución establece…” (sic) evidentemente debemos interpretar que lo primero que deberá privilegiar el estado mexicano es el respeto a mis derechos humanos y que a su vez la única forma en la que se podrán restringir es a través de los medios
legales que la misma constitución establece, por ejemplo, un juicio donde estos se limiten, en casos urgentes etc. Pero no solo eso sino también existe algo sumamente relevante en este artículo “…Todas las autoridades, en el ámbito de sus competencias, tienen la obligación de promover, respetar, proteger y garantizar los derechos humanos de conformidad con los principios de universalidad, interdependencia, indivisibilidad y progresividad. En consecuencia, el Estado deberá prevenir, investigar, sancionar y reparar las violaciones a los derechos humanos, en los términos que establezca la ley…” (Sic)
Lo anterior solo para contextualizar que el Derecho es un campo donde la Justicia tendrá diversos colores y matices, donde siempre el usuario de esta maravillosa profesión tendrá muy seguramente tres necesidades básicas:
La necesidad de que realmente se respeten sus derechos humanos, de acceso a Justicia y lograr el conocimiento de la verdad.
Ahora bien, una vez empapados de las necesidades generales que deberemos atender en nuestro posible conflicto, es más que evidente que ahora estaremos enfrentando una difícil decisión, ¿Cómo elegir a la firma legal, corporativa o al abogado que me represente? Pues bien, lo primero que debemos pensar y validar nuestra decisión son 6 puntos básicos:
EXPERIENCIAS PROFESIONALES
En este caso no implica que sea una firma de muchos años, o una firma joven, sino más bien si han logrado atender asuntos que se asemejen al mío y cuales han sido sus resultados.
TUS NECESIDADES...
Se adecuan a su experticia es decir tu asunto es parte de su especialización, ya que las firmas pueden contar con expertos en algunas áreas y en otras no, así que no podemos improvisar, debe existir idoneidad.
MATCH EN EL ACERCAMIENTO DE TU PRIMERA ASESORÍA
Pareciera el viejo truco de si me agrado, pero no me resuelven mis dudas o en su caso se acrecentaron y no comprendí, la traducción de tecnicismos jurídicos a un lenguaje más flexible nos genera mayor confianza y credibilidad al momento de escuchar las posibles estrategias.
HONORARIOS
Un punto crucial para escoger a la firma o corporativo que llevará mi caso, ya que, si los números y costes no son claros desde el principio, es probable que pierdas la confianza.
UBICACIÓN
En este punto nos referimos a la distancia que se encuentra la firma o el corporativo que me representará, ya que si está situado en otro estado, no cuenta con una filial, además de los honorarios y costes probablemente deberé asumir los viáticos de traslado.
Por último y como un consejo muy valioso
En suma con todo lo anterior nos daremos cuenta que se verán reflejadas las Técnicas y herramientas que la firma, el corporativo o el abogado que elijamos, han de utilizar para nuestra defensa o representación, presentándonos como mínimo una posible estrategia de solución o en su caso la exposición con objetividad para tener la conciencia de recibir los menores daños a posibles.
NO ELEGIR A MIS AMIGOS Parientes o conocidos de manera definitiva como mis representantes, por la sencilla razón de que por si por algún motivo los objetivos no se logran cumplir vendrá la insatisfacción y probablemente hasta nuestra relación amistosa o familiar se vea dañada.
MARÍA DEL CARMEN CRUZ GONZÁLEZ
Coordinadora de Mecanismos Alternativos de Solución de Controversias en materia penal, especializada en Violencia de Género de la Fiscalía General del Estado de Puebla