La vuelta al mundo en 80 peces

Page 10

CRIATURAS MARINAS

Ilustraciones de Marcel George

LA VUELTA AL EN Y OTRAS
Helen Scales 80 PECES MUNDO

Título original

Around the Ocean in 80 Fish

Edición Katherine Pitt

Diseño Masumi Briozzo

Ilustración Marcel George

Traducción Antonio Díaz Pérez

Revisión de la edición en lengua española

Dr. Manuel Ballesteros Vázquez

Departamento de Biología Evolutiva, Ecología y Ciencias Ambientales, Facultad de Biología, Universidad de Barcelona

Coordinación de la edición en lengua española Cristina Rodríguez Fischer

Primera edición en lengua española 2023

© 2023 Naturart S.A. Editado por BLUME Carrer de les Alberes, 52, 2.° (Vallvidrera)

08017 Barcelona

Tel. 93 205 40 00 e-mail: info@blume.net

© 2023 Laurence King Publishing, The Orion Publishing Group Ltd, Londres

© 2023 del texto Helen Scales

© 2023 de las ilustraciones Marcel George

I.S.B.N.: 978-84-19499-53-0

Depósito legal: B. 3909-2023 Impreso en China

Todos los derechos reservados. Queda prohibida la reproducción total o parcial de esta obra, sea por medios mecánicos o electrónicos, sin la debida autorización por escrito del editor.

WWW.BLUME.NET

C008047
Para Claire, Dipali, Nancy y Nicole, mis mejores amigos desde hace mucho tiempo.

LA

MUNDO

CRIATURAS MARINAS

80 PECES VUELTA
AL EN
Y OTRAS

Contenido

Introducción 8 Los animales marinos ATLÁNTICO Noriega o raya, Dipturus intermedius 12 Sepia común, Sepia officinalis 14 Esturión, Acipenseridae 16 Lapas, Patellidae 18 Pez sierra, Pristis spp. 20 Anguila europea, Anguilla anguilla 24 Tiburón peregrino, Cetorhinus maximus 28 Atún rojo del Atlántico, Thunnus thynnus 30 Pez de san Pedro, Zeus faber 32 Cangrejo herradura del Atlántico, Limulus polyphemus 34 Calderones, Globicephala spp. 36 Caracoles cono, Conidae 38 Mixinos, Myxini 40 Cachalote, Physeter macrocephalus 42 Peces linterna, Myctophidae 46 Mielga, Squalus acanthias 48
Tremielga o raya torpedo, Torpedo torpedo 50 Nacra, Pinna nobilis 52 Ostras espinosas, Spondylus spp. 54 Esponjas, Porifera 56 Argonautas, Argonauta spp. 58 Octocorales, Octocorallia 60 Pulpo común, Octopus vulgaris 62 Gran tiburón blanco, Carcharodon carcharias 66 Rémoras, Echeneidae 70 Carabela portuguesa, Physalia physalis 72 ÍNDICO Gasterópodo de pie escamoso, Chrysomallon squamiferum 74 Lábrido limpiador azul, Labroides dimidiatus 76 Celacanto de las Comores, Latimeria chalumnae 78 Mantarraya, Mobula birostris 80 Almeja gigante, Tridacna gigas 82
MEDITERRÁNENO
Tiburón tigre, Galeocerdo cuvier 84 Pez luna, Mola mola 86 Placodermo de Attenborough, Materpiscis attenboroughi 88 Nautilo común, Nautilus pompilius 90 Pez remo gigante, Regalecus glesne 92 Pepinos de mar, Holothuroidea 94 Pez payaso común, Amphiprion ocellaris 96 Cangrejo boxeador, Lybia tessellata 98 Peces del fango, Oxudercidae 100 Cauri, Monetaria moneta 102 Morena gigante, Gymnothorax javanicus 104 Sardina del Pacífico, Sardinops sagax 106 Abulones, Haliotis spp. 108 Peces loro, Scaridae 110 Pez duende, Macropinna microstoma 114 PACÍFICO Pintarrojas colilargas, Hemiscyllium spp. 116 Pez arquero de bandas, Toxotes jaculatrix 118 Medusa de cristal, Aequorea victoria 120 Pez mandarín, Synchiropus splendidus 122 Pez napoleón, Cheilinus undulatus 124 Totoaba y vaquita marina, Totoaba macdonaldi y Phocoena sinus 128 Cangrejo yeti, Kiwa hirsuta 130 Tiburón linterna ninja, Etmopterus benchleyi 132 Pez caracol de las Marianas, Pseudoliparis swirei 134 Ostra perlera de labios negros, Pinctada margaritifera 136 Gusano de Pompeya, Alvinella pompejana 138 Pez con manos liso, Sympterichthys unipennis 140 Estrella girasol, Pycnopodia helianthoides 142 Nudibranquios, Nudibranchia 144 Dragón negro del Pacífico, Idiacanthus antrostomus 148 Calamar vampiro, Vampyroteuthis infernalis 150 Blénido de colmillos cola de lira, Meiacanthus atrodorsalis 152
CARIBE Peces león, Pterois spp. 154 Mero gigante, Epinephelus itajara 156 Peces voladores, Exocoetidae 158 Vacas marinas, Sirenia 160 Tiburón galano o limón, Negaprion brevirostris 162 Peces globo, Tetraodontidae 164 Peces damisela, Pomacentridae 166 Caballitos de mar, Hippocampus spp. 168 Peces ángel y peces mariposa, Pomacanthidae y Chaetodontidaee 172 Caracol pala, caracol rosado, caracol cobo o botuto, caracol reina o carrucho, Aliger gigas 176 Tiburón cabeza de pala, Sphyrna tiburo 178 MARES POLARES Narval, Monodon monoceros 180 Peces de hielo antárticos, Notothenioidei 182 Ballena de Groenlandia, Balaena mysticetus 184 Tiburón de Groenlandia, Somniosus microcephalus 186 Fletán negro, Reinhardtius hippoglossoides 188 Krill antártico, Euphausia superba 190 Para saber más 192 Cómo proteger la vida marina 195 Índice 197

Tiburón peregrino

Cetorhinus maximus

Nunca subestime las capacidades de los tiburones peregrinos. Estos serenos devoradores de plancton navegan con su enorme boca abierta filtrando pequeñas presas del mar sin parecer que tengan que ir a gran velocidad. Y, sin embargo, si siguiéramos a uno durante el tiempo suficiente, es muy probable que de repente lo viéramos sacar de un salto todo el cuerpo fuera del agua. Los tiburones peregrinos pueden saltar un metro o más por encima de las olas, una hazaña impresionante si se tiene en cuenta que estos animales pueden medir más de 10 metros y pesar entre 3 y 4 toneladas. Al ser el segundo pez más grande del mundo, claro está que salpica lo suyo al caer.

Gracias al análisis de los vídeos de estas acrobacias aéreas, los científicos han calculado que los tiburones peregrinos que saltan nadan a 18 kilómetros por hora mientras salen disparados hacia la superficie. Es la misma velocidad que alcanza el tiburón blanco cuando realiza acrobacias similares. Tiene sentido que el tiburón blanco sea capaz de alcanzar tal velocidad, ya que es un activo depredador ápex que persigue presas que nadan rápido, como las focas. En el caso del tiburón peregrino, demuestra que, aunque la mayor parte del tiempo opta por tomar el sol, puede acelerar el ritmo de una forma considerable si lo desea.

El motivo por el que el tiburón peregrino (y, en realidad, también el tiburón blanco) gasta tanta energía saltando desde el mar es otro de los grandes misterios sin resolver del océano. Los científicos barajan muchas ideas al respecto. Los tiburones podrían estar enviándose mensajes entre sí, presumiendo ante sus parejas, afirmando su dominio o, quizás, quitándose de la piel parásitos que les pican.

El tiburón peregrino realiza largos viajes. Una hembra marcada con un rastreador satelital que partió de la isla de Man surcó el Atlántico y nadó casi 10 000 kilómetros en menos de tres meses hasta llegar a Terranova, Canadá. Los tiburones de Cape Cod nadan hasta la desembocadura del río Amazonas, quizá para llegar a las zonas de apareamiento y cría.

Al tiburón peregrino se le ha solido cazar por sus hígados enormes y grasos, ricos en vitamina A y escualeno, una sustancia utilizada para fabricar lubricantes industriales y cosméticos. En Noruega, Escocia e Irlanda existen pesquerías desde el siglo xviii. En la década de 1940, antes de escribir Ring of Bright Water (El círculo de agua clara, 1960), su exitoso libro sobre las nutrias, el naturalista británico Gavin Maxwell intentó establecer una pesquería de tiburón peregrino en la isla escocesa de Soay. Escribió sobre sus experimentos en cuanto al sacrificio de animales con ametralladoras, escopetas y arpones, y describió el sangriento desafío que suponía

28 ATLÁNTICO

extraerles el hígado. En aquella época, en Escocia pagaban pequeñas recompensas a los pescadores que mataban tiburones peregrinos porque estos peces se consideraban una plaga, ya que dañaban las redes de pesca al enredarse en ellas, y, además, por aquel entonces la gente pensaba que, como tienen esa boca tan descomunal, los tiburones peregrinos se comían todas las valiosas poblaciones de peces. Algo parecido le sucedió a la población de tiburones peregrinos de la Columbia Británica, en Canadá, que también fue objeto de persecución. Entre 1955 y 1964 funcionó un programa federal de erradicación y navegó un buque patrulla con una cuchilla montada en su proa diseñada para cortar a los tiburones peregrinos por la mitad.

En la mayoría de los lugares, las pesquerías de tiburón peregrino colapsaron cuando las poblaciones casi se agotaron y dejaron de ser fáciles de capturar. Se cree que se pescaron 100 000 ejemplares en el Atlántico Norte, incluso ya en la década de 1990 en el Reino Unido. En la actualidad, la especie está en gran medida protegida frente a la pesca, y su número en estado salvaje parece relativamente estable. Se siguen capturando algunos ejemplares de forma accidental, y sus enormes aletas son muy valiosas, no tanto para elaborar sopa como para colgarlas como trofeos.

Es probable que el tiburón peregrino sea la explicación de muchas de las fábulas sobre monstruos marinos de la historia, ya que cuando sus cadáveres aparecen de forma natural en las playas, pueden estar en tal estado de descomposición y desarticulación que la gente que los encuentra no tarda en empezar a conjurar sobre terribles bestias.

Lábrido limpiador azul

Labroides dimidiatus

Si alguna vez siente la tentación de creerse las historias de que los peces solo tienen una memoria de siete segundos o son incapaces de sentir dolor o alegría, piense en el lábrido limpiador. En los arrecifes de coral que recorren los trópicos se desarrollan escenas de gran actividad en los territorios de los lábridos limpiadores. Otros peces llegan y esperan con paciencia su turno para que les quiten de la piel los parásitos chupadores de sangre. Cada día, los lábridos limpiadores atienden a cientos de clientes, a los que recuerdan y a los que se adaptan para darles servicio. Es esto lo que mantiene a la empresa de limpieza en el negocio y, sobre todo, lo que permite que siga viva.

En cada estación de limpieza, todo el mundo observa una estricta etiqueta y se desarrolla una intrincada coreografía. En primer lugar, los lábridos limpiadores, que actúan solos o en parejas, anuncian sus servicios realizando bailes y moviendo la cola rítmicamente. Después, cuando comienzan a limpiar, su cliente se mantiene inmóvil, como en estado de trance. Aunque muchos de estos clientes son depredadores que podrían comerse sin problema a los pequeños limpiadores, que son del tamaño de un cigarro, una vez que terminan sus tareas de limpieza, se hace una tregua y nadie se come a nadie. El lábrido limpiador nada con valentía hacia las bocas abiertas de morenas, meros y otros cazadores de afilados dientes. Es como si un domador de leones no solo metiera la cabeza en las fauces del animal, sino que se metiera entero dentro. Para esos clientes, el lábrido limpiador siempre se comporta de la mejor manera, sobre todo para los depredadores que llevan un tiempo sin comer, cosa que de algún modo puede percibir este pez. Cuando su cliente es peligroso o está hambriento, el lábrido limpiador se limita a quitarle parásitos y pieles muertas. Pero los herbívoros inofensivos, como el sigano y el pez cirujano, no siempre reciben tan buen trato: hay veces en las que el lábrido limpiador engaña a estos clientes y se come trozos de piel viva. Lo hace para conseguir un poco de la mucosidad que recubre la piel de los peces, lo que le ayuda a prevenir los daños causados por los rayos UV que sufre por vivir en aguas tropicales bañadas por el sol. Los peces no generan el protector solar por sí mismos, sino que lo obtienen a través de la dieta, de ahí que el lábrido limpiador a veces muerda más fuerte, pero siempre lo enmienda después dándole al cliente un masaje por toda la aleta. Es obvio que los clientes disfrutan de este contacto físico, ya que se les ponen los ojos en blanco y parecen entrar en un dichoso trance. Los científicos han observado el descenso de las hormonas del estrés en la sangre de los peces tras recibir un buen masaje. Es probable que estos sigan visitando las estaciones de limpieza,

76 PACÍFICO

en ocasiones cientos de veces al día, no porque tengan parásitos, sino simplemente porque les hace sentirse bien.

El lábrido limpiador también aprende qué peces viven en territorios pequeños y no disponen de otras estaciones de limpieza a su alcance. Tal vez estos se vayan molestos cuando los muerden, pero el lábrido sabe que volverán porque no tienen otra opción. Además de su impresionante memoria a largo plazo y su capacidad para percibir la motivación de otros peces, el lábrido limpiador muestra otros indicios de capacidades cognitivas avanzadas. Incluso es posible que tenga autoconsciencia. En 2019, un grupo de científicos de Alemania publicó un estudio en el que tuvieron a diez lábridos limpiadores en acuarios individuales equipados con un espejo. Al principio, los peces se lanzaron hacia su reflejo, al que confundieron con un intruso no deseado. Un día después se calmaron y comenzaron a mirarse en el espejo. A continuación, los científicos pusieron gel de color a cada pez en la cabeza, y nueve de cada diez de ellos observaron su reflejo, quizás por ser conscientes de que su aspecto había cambiado. Algunos se frotaron la cabeza contra el tanque como si trataran de quitarse el punto de color. Los peces a los que se les había aplicado un gel incoloro no hicieron nada parecido.

El estudio suscitó controversia, si bien se han realizado pruebas similares en delfines, chimpancés, cuervos y elefantes que sí se han considerado concluyentes.

Sumérjase bajo las olas para conocer a ochenta de los habitantes más extraños y sorprendentes del océano.

En este recorrido por el mundo acuático, bellamente ilustrado, se narran las fascinantes historias de deslumbrantes criaturas marinas y sus ingeniosas hazañas de supervivencia (desde producir anticongelante hasta soportar temperaturas elevadísimas) y se revelan las formas en que estas criaturas aparentemente remotas han dado forma a nuestras propias vidas, tanto a través de la medicina como de la cultura y el folclore.

La vuelta al mundo en 80 peces y otras criaturas marinas conforma una pertinente y magnífica celebración de nuestro mundo acuático y de las maravillosas especies que lo habitan.

ISBN 978-84-19499-53-0 9 7 8 8 4 1 9 4 9 9 5 3 0 C008047

Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.