ENTREVISTA Vicente Pastor, portavoz de la Asssociació de Carretillers i Tradicions d’ Elx (ACTE) Con catorce años lanzó sus primeras carretillas y desde entonces no ha dejado de hacerlo, salvo en contadas ocasiones y por circunstancias. Vicente Pastor, ilicitano de raíces extensas, no concibe unas Fiestas Patronales sin el olor a pólvora, el sonido de los cohetes y el lanzamiento de carretillas. Se le ilumina el rostro cuando se trata de defender una costumbre tan arraigada para todos los ilicitanos y afirma con rotundidad, que tanto él como sus compañeros de la Asociación siguen trabajando por conservar y disfrutar de esta tradición, porque según él mismo, no pretende cortarse la coleta y seguirá siendo carretillero hasta que el cuerpo aguante. ¿Cómo definiría a un buen carretillero? Un buen carretillero es aquel que procura no hacer daño y disfruta con el fuego y con la pólvora. ¿Recuerda ese primer momento en el que participó en las carretillas? El primer año no lo recuerdo. Recuerdo aquellos años en los que la brigada veintiuno nos perseguía y nosotros a ellos. Recuerdo cuando en el Marfil se lanzaba una docena de carretillas, en su interior, con gente dentro. Son salvajadas que no se deberían producir, pero la misma prohibición y lo salva-
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