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Agro Negocios
POR NUESTRO CAMPO
PRODUCTORES DE ALIMENTOS LANZAN SOS
PRESENTAN iniciativa para enfrentar los impactos de las sequías, cambio climático y la inseguridad; se adhiere el Consejo Nacional Agropecuario (CNA).
POR Héctor Rendón
Productores de alimentos lanzaron un SOS frente al impacto que registra el campo por las sequías y fenómenos naturales por efectos del cambio climático. Ante ello, y en medio de un ambiente social, económico y geopolítico mundial enrarecido, lanzaron el movimiento “Por Nuestro Campo”, con el que pretenden contener, frenar y encontrar soluciones a la difícil situación por la que atraviesan.
La propuesta, presentada a finales de octubre de 2023, busca proteger e impulsar al sector agroalimentario y asegurar la producción de alimentos para casi 130 millones de mexicanos.
“Hoy en día estamos viendo el cambio climático con un clima más seco y lluvias más intensas, donde no se puede aprovechar el agua, y temperaturas más altas que afectan la producción de alimentos; estamos enfrentando problemas difíciles que nos afectan; los productores son los que conocen toda esta problemática y son los que tienen que alzar la voz para decir qué se necesita para seguir creciendo en el campo y podamos seguir teniendo alimentos”, dijo Juan Cortina Gallardo, presidente del Consejo Nacional Agropecuario (CNA).
El empresario advirtió que las presas del país están por debajo de 48% de su capacidad, mientras que 78% de los municipios de México se declaran en sequía, lo que impacta directamente a los agricultores.
Resaltó el potencial del sector que ubica a México como séptimo exportador de alimentos y en la posición 11 como productor, de ahí la importancia de atender los problemas del campo.
Apuntó que la iniciativa pretende el diálogo entre todos los mexicanos, en aras de rescatar a un sector que hasta en los momentos más difíciles, como fue la pandemia por Covid 19, se mantuvo produciendo los alimentos que se necesitan.
El líder del CNA mencionó que otro de los problemas que aqueja al sector, pero del que se habla poco, es la falta de infraestructura para trasladar los alimentos desde el campo y los mares hacia las ciudades, por lo cual solicitó a las autoridades apoyo logístico que facilite esa tarea.
Para Gerardo García Menaut, presidente de la Confederación Nacional de Productores de Papa (Conpapa), el tema de la inseguridad representa uno de los mayores retos en el agro. Dijo que muchos agremiados están siendo víctima de extorsión por parte de la delincuencia organizada, aunado al robo de transporte con sus productos.
Hay que mencionar que en el país existen 8,700 productores de papa, de los cuales 8,520 son pequeños productores que están a cargo de 60 por ciento de la producción nacional.
Georgina Gutiérrez, representante de Global Farmer Network, que agrupa a más de 260 productores de 65 países, manifestó que el movimiento es un primer paso para afianzar una gran alianza en favor de ese sector del que depende no solo nuestro presente, sino nuestro futuro.
“Es una lucha por el rescate de la industria agropecuaria; aquí debemos caber todos, pues, sin duda alguna, el campo es el corazón de la economía de México”, afirmó, por su parte, Margoth Hernández, representante de la Asociación Agrícola de Productores de Plátano del Soconusco, Chiapas.
Finalmente, Luis Fernando Haro, director general del CNA, señaló: “es un tema de responsabilidad del gobierno y de una asignatura pendiente de voltear a ver al campo con la importancia que tiene el sector: viene un tiempo de cambios (administración) y hay una coyuntura para que las y los candidatos a diferentes cargos miren al campo no como un problema, sino como parte de la solución a temas como la pobreza, inseguridad, empleo y abasto de alimentos”.
Y añadió: “Los productores están preocupados por la falta de políticas públicas en el sector…este movimiento surge de esa preocupación y de una situación donde el cambio climático y la sequía, y los precios de commodities, los están impactando”.
Cinco premisas del acuerdo
Que la voz del sector se escuche.
Que exista apoyo económico al sector.
Que haya inversión para infraestructura de agua.
Que las decisiones del campo se tomen con fundamentos técnicos y científicos.
Que todos tengan seguridad para trabajar.
