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de Mercados de la Universidad de Jaén
“Prestemos atención a la demanda. Fabriquemos clientes y tendremos la oferta” MANUEL PLANAS ROSA, CATEDRÁTICO DE COMERCIALIZACIÓN E INVESTIGACIÓN DE MERCADOS DE LA UNIVERSIDAD DE JAÉN
ontinuar insistiendo en concentrar la oferta, en apostar por la calidad, por la venta de aceite envasado y por la buena gestión, ante los bajos precios en origen del aceite de oliva en el mercado, por el que protestó el sector olivarero este pa sado jueves, es desde el punto de vista del catedrático de Comercialización e Investigación de Mercados de la Universidad de Jaén, Manuel Parras Rosa, es lo que hay seguir fortaleciendo. También por exigir a las ad ministraciones competentes mayor compromiso con el sector y, sobre todo, con las normas que tratan de equilibrar la cadena de valor y la regulación de la ofer ta. “Combinar autocrítica con demandas a las administraciones es un ejercicio necesario y responsable”, indica.
Desde el punto de vista de Manuel Parras, estas pro testas como “necesarias” para llamar la atención de las administraciones y de la sociedad sobre la situa ción del sector. “Hay que ser consciente de que la situación de bajos precios no se va a arreglar inmediatamente, entre otras cosas, porque hay una sobreoferta. En consecuencia, la clave es diseñar estrategias de au mento de la demanda, sobre todo, y paradójicamente, en los países productores, incluido España. El olivare ro no entiende que haga un importante esfuerzo en el campo y, sin embargo, el olivar tradicional sea ruinoso y no facilite el relevo generacional”, explica. Ante esta situación, asegura que “no se trata de buscar culpa bles, sino de hacer un diagnóstico certero de las circunstancias que han llevado al sector a esta situación para atajarlas y corregirlas, a la vez que hay que ser autocríticos”. C
Factores que influyen en la situación actual
En su opinión, un cúmulo de circunstancias ha propiciado en la actualidad estos bajos precios. En primer lugar, considera que existe una sobreoferta sobre la demanda, ya que la demanda mundial lleva años es tancada en tres millones de toneladas, produciéndose incluso una tendencia a la baja, “que no se explica porque los denominados países emergentes no aumenten la demanda, sino que el problema lo tenemos
en los países productores”. En este sentido, Manuel Parras señala que España, Italia y Grecia, principales productores, han dejado de consumir en la última dé cada 500.000 toneladas de aceites de oliva. “A veces ponemos demasiada atención en los países emergen tes y nos olvidamos de los países productores, en los que debemos hacer mucho hincapié en temas de co municación de las bondades de los AOVEs, no solo para nuestra salud, sino para la salud del planeta, para la biodiversidad, para la mitigación del cambio climáti co, etc., ocupándonos, además, de los jóvenes, y aquí el Consejo Oleícola Internacional, la Interprofesional del Aceite y otras instituciones de este tipo tiene que incidir en ello”.
En segundo lugar, hay que prestar atención al com portamiento del oferente y el demandante, en referencia a la concentración del sector de la distribución y al desequilibrio en la cadena de valor, “donde la adminis tración sí que tiene un papel determinante como garante del cumplimiento de la ley”. Además, considera que se han dado otras circunstancias negativas en es te momento, porque los precios bajos se han dado en otras campañas, aunque con unos costes menos ele vados. Ahora, todo ha coincidido de forma negativa: los bajos precios, unos stocks importantes en las alma zaras, los aranceles de Estados Unidos y un almacenamiento privado “que hasta la tercera licitación había sido decepcionante” o las consecuencias que tendrá el Brexit “que va a significar 13.000 millones menos de la PAC”.
Por ello, el catedrático de la Universidad de Jaén in dica que hay que continuar insistiendo en la concentración de la oferta, la apuesta por la calidad, por el envasado y por la buena gestión en el sector oleícola. “No es cierto que la calidad no se pague. De hecho, mien tras que ha decrecido el consumo de los aceites, en general, y de los de oliva, en particular, en el mercado español se ha incrementado el de Virgen Extra. Es probable que el intermediario no pague la calidad, pero el consumidor final sí. Prestemos atención a la demanda. Fabriquemos clientes y tendremos la oferta colocada en el mercado”, recalcó.