editorial
Por: Teresa Rodríguez Fragoso.
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acemos esta edición, número 40, a casi un año de haber iniciado esta extensa cuarentena y ahora sabemos, que no sabemos cuándo terminará. Conforme avanza vamos haciendo el recuento de los daños, los cuales crecen día a día y no tenemos para cuando dar parte. Claro, porque todo sigue ocurriendo. Nuestro futuro ahora mismo, no es claro, no tenemos certezas, los pronósticos son poco confiables. Dependemos de la desorganización u organización de las campañas de vacunación, pero al menos en nuestro país, al paso que vamos, quién sabe cuándo estarán vacunados una mayoría significativa y aún así, no sabemos los resultados y efectos que tendrá. Todo esto ha influido en el contenido de este número; tenemos temas sobre la logística para recepción y distribución de vacunas contra el virus SARSCOV2. Frente al reto del home office incluimos cuáles son las nuevas obligaciones fiscales para los empleadores. Con Yaneth Rubio tocamos el tema de la necesidad de atender las necesidades emocionales de los servidores funerarios. La Voz del Guardián nos invita a reflexionar sobre los aspectos positivos de la pandemia. David Bedoya nos escribe sobre los aprendizajes y expectativas para este 2021. Incluimos los desafíos que enfrenta el área de recursos humanos de toda empresa y por último, concientes de como la pandemia a afectado, positiva y negativamente al sector funerario, incluimos un texto sobre el impulso que el Covid a dado a los funerales digitales. No importa a que sector o grupo, género o gusto pertenezcamos, todos estamos cansados. Por tener que hacer mucho o no poder hacer nada, por la vida que tuvimos y ya no es, y quizás ya no será, por aburrimiento, hartazgo y desesperanza. Esperamos que este número les dé un respiro o un pequeño descanso para después, ¡continuar!. GM
Teresa Rodríguez Fragoso.
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