Sherezada Canta
Experiencias/Sentires/Conocimientos de mujeres en el Pop
No. 3 Octubre/2021
Fanzine producto del taller: Mujeres, música y escritura “Sherezada canta” de Colectivo Hékate
Colectivo Hékate. Taller de mujeres, música y escritura, “ Sherezada canta”. Este fanzine es producto del taller Mujeres, música y escritura que el Colectivo Hékate impartió de Mayo-Octubre del 2021. Cuenta con un tiraje de 35 ejemplares. Este material fue elaborado, diseñado y editado bajo el nombre de Jessica Solano Morantes y Ana Rosa Lozano González. Este material se realizó con el apoyo del Programa Social Colectivos Culturales Comunitarios 2021, de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México.
Corrección y cuidado editorial Ana Rosa Lozano González
Portada y diseño Jessica Solano Morantes “Jessicartica”
Organización Ilce Gómez Andrade
Colectivo Hékate @colectivohekate
Índice 7
El pop femenino
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La carta de una diva
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BDSM y Lollipop
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Colores en el viento
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Pop
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¿Realmente creo?
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Corrí por Dios que corrrí
Alelu Olmos
Kimberly Patricia Juárez Vázquez
Montserrat de Aguilera
Tesitapuma
Clío García García
Altazor
M. E. Gonz
LiH, 23 años, Lima, Estado de México. “Impulso” @le.miau.h
Introducción Ilce G. A. La música pop es la que realmente nos forma desde que nacemos, es nuestra primera interacción con el mundo y lo que es tendencia en el momento. Nos acompaña cuando estamos alegres, tristes, de mal humor... pero siempre encontramos en sus letras y melodías el sentimiento para cualquier ocasión y ninguna canción pasa de moda. Pero, sobre todo, quienes han hecho del pop lo que es ahora son las mujeres, tan transgresoras y tan multifacéticas que nos entregan todo en los escenarios y en cada canción que crean e interpretan. En la tercera edición del fanzine del Taller Mujeres, Música y Escritura “Sherezada Canta” que imparte el Colectivo Hékate, daremos voz a los sentimientos y pensamientos que las asistentes al taller tienen sobre la importancia de las mujeres dentro de la música pop y su experiencia escuchando este género. A través de lo visto en las sesiones sobre el pop, en las que no sólo se habló de forma teórica sino que también, compartieron sus pensamientos, experiencias y sentires sobre las creaciones de estas mujeres, para después plasmarlo en esta serie de escritos. Así mismo, el fanzine cuenta con distintas ilustraciones hechas por artistas que, al igual que las escritoras, se inspiraron en la música pop. Por lo que, este fanzine conjuga las plumas de las escritoras y los pinceles de las ilustradoras, todas ellas unidas por la pasión musical. El objetivo que tenemos al publicar y compartir la tercera edición del fanzine “Sherezada Canta” es que el trabajo realizado por las asistentes del taller y el de las ilustradoras coincidan, creando así una comunidad y red de mujeres artistas que se encuentren y colaboren en nuestro espacio con total libertad, comodidad y confianza. En nombre de nuestras escritoras, ilustradoras y de toda Colectiva Hékate, deseamos que disfrutes de este fanzine.
En nombre de la madre, la doncella y la anciana Colectiva Hékate
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El Pop femenino Alelu Olmos “El pop requiere de ritmo, alegría, buena letra y movernos a lo que quien canta siente, no es un género simple, es un género que acompaña.” Alelu Olmos
Me cuestiono bastante sobre ¿Por qué han convertido a la mujer en el pop como una imagen plástica y a la cual ponen siempre ante el reflector cuestionando su talento? El pop, incluso se ha visto desvalorizado por lo comercial que se ha vuelto, si bien está acompañado de una melodía pegajosa, que lo vuelve una mercancía más fácil de sonar en las radiodifusoras, creo todos somos libres de escuchar y cantar lo que nos haga sentir cómodos. En primer lugar, está Danna Paola, que se ha enfrentado a comentarios minimizando su trabajo vocal en los propios shows de televisión en los que se ha presentado; sin embargo, admiro mucho la fortaleza que tiene para demostrar todo lo que ella puede hacer, siempre sonríe ante ciertos comentarios, con empuje y garras, defiende lo que bien sabe hacer que es cantar. Su trayectoria le ha permitido encontrar con su música la madurez, para aceptar y decidir qué es lo que quiere cantar, y aunque el “hate” no se haga esperar por sus canciones reflejando sus experiencias amorosas, como es el caso de “Oye Pablo”, o por hacer burla de aquellos comentarios y rumores que inventan sobre ella como es en su canción, “Mala Fama” siempre encuentras en su música esta característica típica de ella convertida en alegría por decir: - “estoy aquí, cantando y bailando lo que yo he decidido y tú lo estás disfrutando conmigo”. Me parece una artista comprometida por aportar su granito de arena con su música rompiendo los prejuicios y las etiquetas sobre las
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relaciones con su canción “TQ Y YA” de igual manera busca con una melodía pegadiza, poner un alto hacia el maltrato con su canción “Calla tú” donde empodera a que nadie se quede aguantando malos tratos. Y así es como tenemos a Danna Paola, brillando con su estilo, su talento y sus millones de discos vendidos. También quisiera hablar de Kuve, que poco a poco sus letras profundas, su ritmo alegre está ganando espacio en el mundo del pop. KUVE , es el alter ego de la cantante, compositora y productora vocal Maryan Frutos, a la cual conozco gracias al modo alternativo de Spotify con su canción “El mundo es tuyo” esta es una canción llena de esperanza, de motivos para liberarnos; esta canción me he permitido dedicársela a mis alumnos, porque deseo siempre tengan las ganas de brillar siendo ellos mismos, sin miedos y dudas. Otra canción que me parece una joya para tener en nuestra lista de reproducción es “Bailar bajo la tormenta” con un mensaje claro, rítmico y poderoso. No importa cuánto estamos enfrentando en nuestra vida, siempre la tormenta nos permite disfrutar de cosas buenas, siempre la tormenta acaba y nos muestra que lo mejor está por llegar. El pop femenino ha puesto en marcha una revolución donde se habla de temas importantes, de temas que nos duelen, que nos motivan, que sobre todo vivimos. Empezamos a tomar nuestro propio camino, siempre hay nuevos talentos, siempre hay talentos sobre las tarimas apostando con ritmos pegajosos para hacer valer sus historias.
Laura Alejandra Rodríguez Ortiz “Lauralle”, 19 años, Bogotá, Colombia. “Las divas de mi infancia” @Lauralle.artz
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La carta de una diva Kimberly Patricia Juárez Vázquez
Hace algunos años comencé a cantar, aún recuerdo los zapatos que utilicé en mis primeras presentaciones. En mi memoria, siguen tan vívidos como la primera vez, no eran tan altos, pero solían ser los favoritos de mi abuela, una herencia que se me hizo lo más brillante de aquellos días. Pero como todo en la vida, dejaron de quedarme, crecí unos centímetros, era entendible a mis 17 años, todo parece tener un arreglo para adecuarlo a tu cuerpo. Mis curvas no eran demasiado pronunciadas y la vida entre canciones de amor, pintaba para ser a lo que me dedicaría a lo largo de mis años, aunque me faltaba conocer personas que, de verdad entendieran que uno de mis grandes objetivos era ser escuchada y tocar tantos corazones como me fueran posible. Yo sabía que no sería fácil, pues tendría que tener un sello o un sueño que nadie más tuviera. Pero lo logré, cuando debía graduarme de la educación básica, yo escuchaba aplausos de las personas que más admiraba; mi guitarra estaba en su mejor estado, pero mis vestidos y mi vida dieron un vuelco, no lo veo como algo malo, pero sí como el motivo ideal para que el sabor dulce se hiciera semiamargo. Las luces brillantes se convirtieron en flashes siguiéndome a donde quiera que fuera. Los coros con todas las chicas fueron sustituidos por alguien más que debía decirme en qué parte del escenario podría mirarlas; me asuste tanto que decidí escribirlo en lo único que tengo: mi música y letras. Yo pensé que aquel chico que terminó conmigo aquel viernes 13 por teléfono, sería un dolor difícil de olvidar, pero lo subestimé; quienes eran mi mayor soporte les molestó mi madurez y evolución. Dejé de ocupar aquellos vestidos floreados para utilizar faldas, mis íconos de inspiración cambiaron, no porque los anteriores
me avergonzaran, era porque maduré y como todo persona en el mundo evolucioné. Aunque el éxito avanzó, las grietas en mi corazón también; quisiera decir que no duele que personas por las que entregas el alma en cada presentación, busquen compararte y les asuste la idea de que salga de mi zona de confort por agregar gente a mis círculo de amistades o demeritar mis premios por el simple hecho de ser mujer y cantar por lo que pasa a mi corazón. Pero, sobre todo durante todo este tiempo, me di cuenta que quienes me observan debajo del escenario saben el dolor y la angustia de caminar entre la fina y delgada línea del olvido o la inmortalidad.
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Jessicartica, 29 años, CDMX. “Queen Riri” @jessicartica
BDSM y Lollipop Montserrat De Aguilera Flores @MonkyDraco Cuando de pop se trata no hay nada cursi o soso, si no todo lo contrario; el pop se disfraza en envolturas de celofán de color pastel y caramelo sabor vainilla, para hablar de emociones agridulces y temas picantes; lograr este balance requiere maestría y talento. Al mismo tiempo, el pop es muestra de la búsqueda inherente al ser humano de sentirse bien y ser feliz, y aunque de forma discreta, habla con honestidad sobre las enfermedades que nos aquejan como cultura global. El pop como arte performativo, define una era en la historia de la humanidad y genera un diálogo en el cual todos podemos participar, ahí reside su poder. Encuentro fascinante que aunque existen artistas pop de género masculino, quienes causan más impacto en la sociedad son las artistas pop femeninas. Son presentadas como semidiosas que imprimen hipersexualidad en su performance poniendo como ofrenda de sacrificio sus propios cuerpos y vidas privadas, despertando sentimientos pasionales que aluden a la barbarie del pueblo que ama con locura la delicioso dicotomía de idolatrarlas y flagelarlas al mismo tiempo. Es tan fascinante como es triste, porque en este juego de poderes, pasiones y castigo no hay equilibrio ni respeto al humano que está detrás del performance, como colectivo cruzamos las líneas de respeto, imponiéndoles destinos en donde se les castiga por ofrecer eso mismo que amamos consumir, se nos olvida que en este juego se necesita siempre del consentimiento de ambos. Mientras escribo esto no puedo dejar de pensar en el ejemplo de mi semidiosa de cabecera, Rihanna, una performer que ha manejado con maestría y estilo este baile entre semidioses y mortales del que hablo.
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Escucharla y mirarla es como comer un caramelo cítrico relleno de chamoy picosito, la música es lollipop y el relleno es todo eso sabroso, de lo que nadie habla porque es tabú. Rihanna es particularmente talentosa mezclando estos deliciosos sabores, porque justo en el punto de su carrera en donde todos estábamos dispuestos a castigarla por sus múltiples pecados confesados; ella nos arrebató el látigo de las manos, y nos enseñó con orgullo y maestría como usarlo correctamente, con una sonrisa en la cara nos dijo “A mi nadie me lastima sin mi permiso, si no lo vas a hacer bien mejor no lo hagas, te voy a enseñar cómo es que me gusta realmente.” nos recordó que ella nos ofrenda de sí misma, lo que a ella le viene en gana, se hizo dueña de su propio sufrimiento y dejó claro que la última palabra la tiene ella, entonces el mundo se inclinó a sus pies y la coronó. Rihanna a través del pop, transformó su vulnerabilidad en poder, y predicando con el ejemplo nos enseñó las reglas básicas del BDSM, que desde mi punto de vista deberían ser aplicadas en todos los ámbitos de la vida, no solo en el boudoir. En conclusión, el pop es la herramienta perfecta para poder hablar de lo que no se dice, y mostrar lo que se vive en secreto, mientras el celofán sea rosa, y uno pueda bailar a nadie le escandaliza el mensaje, sin embargo mientras bailamos, el mensaje se imprime exitosamente en nuestras psiques.
Ojo de Ópalo, 19 años, Ciudad de México. “Espacio acústico” @ojo_de_opalo
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Colores en el viento Tesitapuma
Colores en el viento, es una canción que muchos conocimos al ver la película de Pocahontas; y que, tal vez, muchos otros aún no conocen. La letra es realmente bella; puesto que nos conecta con las palabras de muchas mujeres del mundo; palabras que nos hacen pensar que no estamos solas, que existe una red que se teje por debajo de la tierra y que nos conecta a todas las mujeres que habitamos el planeta: las que fueron, las que somos y las que serán. Porque esta canción nos permite ver la sabiduría y la intuición de las mujeres; de esas mujeres que han sabido utilizar sus conocimientos para hacer de este mundo un mundo mejor. Mujeres que se conectan con la Tierra para ser ellas mismas y para ayudar a los demás; mujeres que saben que es mucho más sabio el que escucha y está abierto al aprendizaje (que nos da el mundo) que aquel que cree saberlo todo y que está cegado por prejuicios; negándose así, la oportunidad de ver la grandeza cuando está frente a él; perdiéndose la posibilidad de sentir y comprender (con el corazón) al mundo. Esta canción, nos recuerda también, las palabras contenidas en el libro Mujeres que corren con los lobos; en el cual se expresa que las mujeres pueden liberar su ser al conectarse con la naturaleza; puesto que, esta es la mejor manera para que la mujer encuentre la libertad que requiere para ser plena, debido a que también se conecta con su propia naturaleza…
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Stocks_721, 18 años, Nezahualcóyotl, México. “We don´t need them” @Stocks_721
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Pop Clío Garcia Garcia cliogciagcia@gmail.com Mi primer acercamiento con la música fue con el pop. De regreso de la escuela cuando mi mamá nos recogía e íbamos a la casa, siempre prendía la radio y sonaban canciones de Ha*ash, Jesse & Joy, SinBandera, Beyoncé, Lady Gaga…, En su momento, no les ponía mucha atención, pero usaba mi mente imaginativa propia de la niñez, para conectar con las canciones, me hacían sentir bien todos esos ritmos pegajosos y esas voces particulares que, se convertían en familiares, en la instrumental de mi día a día. Aunque la línea de lo que parece ser pop puede ser difusa, una característica es que es un género que se adapta y evoluciona constantemente. Actualmente, se ha podido derivar al alternativo, por ejemplo: el pop es un espacio que ha abierto muchas puertas a artistas y en parte, eso ha ocasionado que sea blanco de críticas, que si es cada vez más comercial, que los artistas ya no piensan en lo auténtico, que sólo importa el dinero, pero creo que hay cosas que se deben de apreciar… El pop contemporáneo y la colosal industria que se ha formado le dieron al artista reconocimiento y recursos para crecer. Podemos ver artistas mundialmente conocidos como Lady Gaga, Rihanna, Beyoncé, Miley Cyrus, y la lista continúa, todas ellas se han convertido en íconos de la industria, en símbolos y han representado a su generación y han inspirado a las futuras generaciones. El rol de la mujer artista en este campo, me parece muy importante y necesario de resaltar, muchas veces se critica que las artistas usen su cuerpo y sexualidad como estrategia de marketing, se les etiqueta de falsas y materialistas, pero lo que no se ve, es que precisamente esto es lo que permite que ellas tengan independencia. Su voz puede
llegar a ser escuchada por más gente y esa proyección puede usarse para ayudar en problemas sociales, y sobre todo, son claros ejemplos de mujeres con defectos y problemas como todos, pero con un gran talento. Para mí, no hay nada más inspirador que una mujer poderosa, que a pesar de la obvia presión que la sociedad tiene sobre ellas, se mantiene firme en su trabajo.
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MariguanaChan, 29 años, CDMX. “I just want your stupid love” @mariguanachan
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¿Realmente creo? Altazor
Aún recuerdo ver por el canal Mtv el estreno de un vídeo con el fondo de una voz extraña; no la conocía, era muy joven para recordar quién era. Mi madre dijo: “¡Es Cher!”. Mientras ella, emocionada, me contaba un poco de aquella mujer, yo miraba la historia que giraba en torno a la canción y aunque no comprendía nada de la letra, poco a poco me sumergí en ella. Pasaron los años y en cada época el clásico ¿Do you belive in life after love? resonaba en mi cabeza y representaba realidades distintas a las de aquella niña de siete años. ¿Quién me alejaba de su lado? ¿Qué fuerza me arrancaba de las garras de Believe? Las fauces voraces del prejuicio y el desamor. Quería sentir el dolor y una canción que sonaba con beats estridentes y manifestaciones de autotune no me daría la profundidad deseada. Por lo que guardé en mi memoria esa canción y la recuperé hasta hace unos años, arrumbada y llena de polvo, entre los archivos de mi inocencia y mi antigua familia. Al escucharla de nuevo, entendí por qué fue mi preferida cuando era tan solo una pequeñita con sueños: representaba felicidad, liberación y un sensación que no había comprendido… hasta ahora. El amor me sonreía, encontraba una dicha sincera en sus brazos, pero al escuchar cantar a Cher con su voz grave, algo en mí entristecía: no matter how hard i try/ you keep pushing me aside/ and i can’t break through/ there’s no talking to you… La distancia y el rechazo que sentía al escuchar esas palabras no me remontaban a un amor juvenil y dramático, sino a uno que creció desde la sangre y se alimentó del veneno, roto por el más triste de los adioses: el amor de mi padre. Cuando él decía se acabó, realmente todo terminaba; no había lugar para las llamadas ocasionales ni el famoso café estilo americano con refil de Sanborns. Quizás es eso lo que me ata a esta canción: mi primer
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año viviendo con papá y mamá en aquel departamentito a mediados del 98’, lejos de la casa de la abuela -a la cual regreso siempre porque es mi hogar-, con Cablevisión por primera vez y dos manos a las que me aferraba porque por fin tenía un familia completa. Tal vez solo sea un pretexto para sentirme mal, pero esta vez… bailando.
Ruth Verazas García, 32 años, Minatitlán, Ver. “Tardes Adolescentes” @tutillustration
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Corrí juro por Dios que corrí M.E.Gonz
Eran las tres de la mañana y mi cuerpo no podía seguir; mis piernas estaban por doblarse, mis brazos flotaban y mis ojos no paraban de llorar. Tenía que continuar, tenía que correr por mi vida. Sentía como el latido de mi corazón aceleraba y desaceleraba más y más, creo que estaba por infartarme. Mis manos sudaban al mismo tiempo que sentía el frío de la madrugada. No podía seguir, pero tenía que seguir. Parar en cualquier momento es la muerte. Mi espalda y mi pecho se sentían más helados, en cada gota de sudor se me iba el alma. Mis pulmones se llenaban de aire como nunca más en la vida, pero gracias a Dios, Buda o Shiva; corría a la misma velocidad, yo corría. Pablo antes de irse a la oficina colocó los sobres en la caja fuerte. Logré sacarlos y enviar tantas copias pude. Al volver, le preparé la cena como de costumbre y mientras el disfrutaba el postre, salí de la casa solo con mi bolsa y la ropa que traía puesta, empecé a correr. Me introduje en la oscuridad del bosque, un camino que nadie conocía o eso creí. Llevaba 3 horas corriendo hasta encontrar la carretera, cuando el auto de Pablo me empezaba a alumbrar. Estaba perdida, el fin de la espectacular María René era inminente. Comencé a correr más rápido, una fuerza inexplicable en mi cuerpo me permitió continuar, adrenalina le llaman quienes piensan racionalmente, milagro divino quienes piensan religiosamente. Mis piernas me querían hacer volar. Mi conciencia no paraba de parlotear: “si vives todos sabrán los pecados de Pablo, si mueres seguirá todo el daño”. Necesitaba sobrevivir a Pablo, para entregarlo por todo el fraude a tantas familias que quedaron sin hogar y por todos los golpes que me había dado. Corrí, juro por Dios que corrí.
El auto cada vez me alcanzaba más, hasta que como un deus ex machina, apareció otro auto frente a mí. De apariencia alcoholizada, el conductor iba directo hacia mí, sin embargo, logré saltar hacia un lado de la carretera. El auto se impactó con Pablo, atónita al acontecimiento, seguí corriendo. Comenzaba a iluminarse el cielo y logré ver como una ambulancia iba hacia el lugar del accidente. Y seguí corriendo.
(Inspirado en “Run for cover” de The killers)
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Xarel Donají Izaguirre Guzmán, 22 años, Xalapa, Veracruz. “We Vibin” @xarel.art
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