5 minute read

Conectando con mi alimentación

«Comer es una necesidad, pero comer de forma inteligente es un arte».
de La Rochefoucauld. Escritor, aristócrata y militar francés
  • DIRIAM RODRÍGUEZ J. Y BRENDA MORENO M. | Alumnas 8o. cuatrimestre de la Licenciatura en Psicología, campus Mexicali

El objetivo es sensibilizar a la comunidad sobre los trastornos alimenticios en la actualidad y dar a conocer cómo se desarrollan estos trastornos desde temprana edad, afectando nuestro desarrollo psicosocial si no se realiza un diagnóstico, intervención y tratamiento adecuados.

Los trastornos de la conducta alimentaria se caracterizan por una alteración persistente en la alimentación o en el comportamiento relacionado con la alimentación, lo que conduce a una alteración en el consumo o la absorción de alimentos y provoca un deterioro significativo en la salud física o el funcionamiento psicosocial (DSM-V).

Tipos trastornos de la conducta alimentaria (DSM-V):

1. Pica: Es un trastorno de la ingestión y de la conducta alimentaria de la infancia o la niñez. Se define como el consumo persistente de sustancias no nutritivas durante un periodo de al menos un mes, de manera inadecuada evolutivamente y siempre que su práctica no esté culturalmente sancionada.

2. Trastorno de rumiación: Es una afección en la cual la persona regurgita la comida sin digerir o parcialmente digerida varias veces; esta comida se vuelve a masticar y se traga o se escupe.

3. Anorexia nerviosa: Se manifiesta por cambios

fisiológicos, psicológicos y del comportamiento. Se caracteriza por una pérdida significativa de peso corporal, normalmente producto de la decisión voluntaria de adelgazar.

4. Bulimia nerviosa: Caracterizada por la presencia de episodios recurrentes de atracones y conductas compensatorias inapropiadas y frecuentes con el fin de evitar el aumento de peso.

5. Trastorno de atracones: Es una condición en la cual la persona consume generalmente una cantidad de comida mucho mayor de lo normal, todo al mismo tiempo; la persona se siente fuera de control durante estos atracones, comiendo incluso cuando está llena o no tiene hambre.

6. Trastorno por evitación: Es un trastorno alimentario en el que los afectados comen muy

poco y/o evitan el consumo de ciertos alimentos; las personas con trastorno por evitación/restricción de la ingesta de alimentos no tienen miedo de aumentar de peso.

En la actualidad, existen muchas enfermedades en las cuales se involucran dimensiones biopsicosociales, en especial los trastornos de la conducta alimentaria, ya que se incluyen aspectos inherentes a la persona y a la manera de relacionarse en la sociedad.

Las características biológicas, sociales y psicológicas de los trastornos de la conducta alimentaria han sido objeto de estudio en los últimos años, y es difícil determinar las causas de estos trastornos, ya que son multifactoriales.

Entre los factores más comunes se encuentran las restricciones dietéticas, el deseo de mantenerse delgado, el temor a tener sobrepeso y los estereotipos culturales, que son algunos rasgos presentes en algunas personas con estas afecciones. Las mujeres son las más afectadas, ya que existe una mayor preocupación por mantener su peso y forma corporal; la imagen corporal constituye un componente importante en los trastornos alimentarios.

Los trastornos alimenticios están relacionados con la depresión, la ansiedad, las autolesiones, los pensamientos y comportamientos suicidas. Se consideran una afección médica y pueden afectar el funcionamiento del cuerpo, ya que una nutrición inadecuada puede provocar enfermedades graves e incluso conducir a la muerte.

Cómo afectan los trastornos de la conducta alimentaria a nuestro cerebro

En algunas investigaciones, se ha descubierto que las personas con trastornos alimenticios presentan una mayor dificultad al distinguir, explicar y especificar las emociones que experimentan, llevándolas a conductas poco adaptativas como la evitación y la negación.

Se ha comprobado que los individuos que sufren alteraciones en la ingesta de nutrientes están relacionados con otras alteraciones cognitivas, conductuales y emocionales. Los trastornos alimenticios alteran el proceso de respuesta de recompensa del cerebro y

el circuito de control de la ingesta de alimentos, lo que puede reforzar estas conductas.

Diversos estudios, que incluyen medidas de neuroimagen, revelan cambios en áreas cerebrales extensas (corteza frontal y parietal), así como en áreas específicas (núcleo caudado, tálamo y corteza frontal ínfero-lateral) en pacientes con un trastorno de la conducta alimentaria que se encuentran en fase aguda.

¿Cuándo sospechar si tengo un trastorno alimenticio?

Aunque este tipo de trastornos puede presentarse en cualquier tipo de población, suele observarse con mayor frecuencia en personas jóvenes, quienes a menudo están en negación y justifican la condición mediante argumentos que intentan convencerse a sí mismos y a los demás.

Algunas señales que pueden indicar la presencia de un trastorno alimenticio durante las comidas incluyen la evitación de alimentos que podrían provocar aumento de peso, comer muy lentamente, «jugar» con la comida, cortar y distribuir la comida en el plato, protestar por las cantidades de comida, entre otras. Además, el individuo puede emplear estrategias para evitar comer con familiares y amigos, con el fin de ocultar las pequeñas cantidades de alimentos que consume.

Para los familiares, pueden detectarse señales de un trastorno alimentario en un miembro de la familia, como desapariciones durante y después de las comidas, encerrarse en el baño durante períodos prolongados, donde se perciba olor a vómito e incluso encuentren restos de este; también podrían notar una repentina falta de alimentos en la cocina, lo que podría indicar que la persona involucrada está experimentando un atracón.

  • Referencias: Barcia M, Pico. L., Murillo. R., & Vélez. D. (2019): “Las emociones y su impacto en la alimentación”, Revista Caribeña de Ciencias Sociales. https:// www.eumed.net/rev/caribe/2019/07/emociones-alimentacion.html American Psychiatric AssociaPon. (2014). Manual de diagnós5co y estadís5co de los trastornos mentales (DSM-5). (5th ed.). Medica Panamericana. Maldonado-Ferrete, Rubén, Catalán-Camacho, María, Álvarez Valbuena, Vanessa, & Jáuregui-Lobera, Ignacio. (2020). Funcionamiento neuropsicológico en los Trastornos de la Conducta Alimentaria: un estudio comparativo. Journal of Negative and No Positive Results, 5(5), 504-534. Epub 19 de octubre de 2020.https://dx.doi.org/10.19230/jonnpr.3398

This article is from: