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November 2, 2023
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Las raíces colombianas de Laryssa Leone le ayudaron a forjar su carrera de reportera Por Christina Fernández-Morrow, Hola Iowa
Laryssa Leone presentadora de fin de semana y reportera de WOI-TV Local 5 News Foto por Tar Macias/ Hola Iowa
Hace veintitrés años, Laryssa Leone, de casi un año de edad, viajó 2,741 millas desde su ciudad natal en Medellín, Colombia, hasta Logan, Iowa, cuando fue adoptada junto con sus cuatro hermanas. No tiene recuerdos del orfanato y no ha vuelto a Colombia, pero sonríe cuando dice: “Soy latina y estoy orgullosa”. Leone tardó varios años en sentirse cómoda con sus raíces. Al ser tan joven cuando se mudó a Iowa, nunca aprendió español, pero eso no impidió que la llamaran “exótica” en el pueblo de 1,500 habitantes donde sólo había otro hogar no blanco. “No siempre sentí que encajaba”, dice. En una comunidad tan pequeña, la mayoría de los residentes conocían su historia de origen y, en un momento dado, dividió al pueblo. La adopción de Leone fue inusual. Trasladar a cinco niñas menores de diez años por varios países no era la norma en el año 2000, y mucho menos para una familia que seguía criando a cinco hijos biológicos pequeños y a una adoptada de Guatemala. Fue abrumador para sus padres adoptivos iniciales, tanto que poco después de llegar, sus tres hermanas mayores fueron abandonadas en la guardería, y Leone y su hermana menor, una niña pequeña y ella una bebé en aquel momento, pasaron meses separadas de sus hermanas que las habían cuidado desde su nacimiento. “Recuerdo haber visto a mis hermanas mayores en un evento en la ciudad y haber llorado, intentando correr hacia ellas. Sabía que eran mis hermanas”. La gente del pueblo tenía opiniones encontradas sobre la separación. Algunos pensaban que se solucionaría con el tiempo, mientras que otros se horrorizaban de que se separara a niños tan pequeños. El orfanato de Colombia acabó interviniendo y exigió que las niñas estuvieran juntas, según el acuerdo de adopción, o que las devolvieran a Colombia. Por suerte, la familia que acogió temporalmente a sus hermanas mayores luchó por adoptarlas a las cinco. A día de hoy, Leone dice que son su familia, los padres que intervinieron cuando ella y sus hermanas necesi-
taban adultos de confianza que las mantuvieran seguras y unidas. Pero eso no significaba que la vida fuera a ser fácil a partir de ese momento. “La primera vez que me llamaron la palabra con N (N-word) estaba en la guardería”, cuenta Leone, que tuvo que preguntarle a su madre qué significaba y por qué la llamaban algo tan desagradable. No sabía cuál era su sitio. No era de Logan y toda la ciudad lo sabía, pero ésa era la única cultura que había conocido. “Sabía que no podía actuar de cierta manera, o me mirarían de otra forma”. En lugar de intentar minimizarse o rehuir a los demás, Leone se expresaba con valentía. “Ladré más fuerte de lo que podían morder”, dice riendo entre dientes. “Puedo hablar con cualquiera porque puedo amoldarme; adaptarme para ser lo que necesite”. Armada con esa habilidad de supervivencia, se ganó la reputación de ser franca, obstinada y desafiar las palabras y acciones de los demás. Desde el principio supo que hablar con los demás y conseguir que se abrieran a ella era una ventaja. Leone disfrutaba descubriendo los verdaderos pensamientos y sentimientos de la gente escuchando y compartiendo historias. Esa aptitud la ayudó a obtener un título de asociado en radio, televisión y comunicación digital en el Iowa Western Community College de Council Bluffs, Iowa, seguido de una licenciatura en periodismo por la Universidad de Nebraska en Omaha. Con sólo diecinueve años, consiguió su primer trabajo en periodismo televisivo como teleprompter en KETV, uno de los canales de noticias más antiguos y conocidos de Omaha. En los tres años siguientes, fue ascendida a operadora de cámara, fotógrafa nocturna y, por último, a periodista multimedia antes de incorporarse al equipo de noticias de WOI-TV en Des Moines como presentadora fin de semana y reportera de en 2021. “Me costó [aceptar el puesto]. Por mucho que me guste Iowa y sea precioso, hay mucho trauma por intentar sentir que pertenezco”. Pero no dejó que eso la detuviera y está contenta de haber aceptado el reto de volver a su estado natal. “Ha sido curativo establecer Continúa en la página 12