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27 DE ABRIL 2019 I N°447 I AÑO XIX
PRECIO $40
TODOS
Cristo resucitado nos envía La Semana Santa culminó con la alegría de la Pascua y dio comienzo a la misión Casa de Todos
Entrevista al Obispo de Minas
Notas, crónicas, artículos y fotorreportajes PÁGINAS 2 A 9 Y 16 A 19
«La Virgen del Verdún es la devoción de más arraigo en el Uruguay» PÁGINAS 12 y 13
INTERNACIONAL
La semana del Papa Francisco, el incendio de Notre Dame y los ataques en Sri Lanka PÁGINAS 24 A 28
PARROQUIA DE LAS DURANAS
QUINCENARIO DE LA ARQUIDIÓCESIS DE MONTEVIDEO
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INFORME
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La Vida venció a la muerte Las celebraciones propias de Semana Santa terminaron con gran solemnidad en la Catedral de Montevideo C. BELLOCQ Y C. GENTA Redacción Entre Todos
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on la Vigilia Pascual y con la Misa del Domingo de Resurrección, los católicos celebraron el triunfo de Cristo sobre la muerte y el pecado. El sábado santo la Vigilia comenzó a última hora, cuando ya todo estaba oscuro. Incluso adentro del templo, donde apenas se distinguía dónde había sitios libres para sentarse. El primer ritual característico de esta “noche santa” comenzó al fondo del templo, donde encendieron un fuego que, una vez bendito, dio luz al cirio y a las velas de todos los que colmaban la iglesia. También a las lamparitas de los celebrantes, que eran varios y le daban mayor solemnidad a una fiesta que es elevada por naturaleza. Presidió el Arzobispo, Card. Daniel Sturla, y lo acompañaron sus auxiliares Mons. Luis Eduardo González y Mons. Pablo Jourdan, así como el Nuncio apostólico Mons. Martin Krebs, su secretario Mons. Simón Bolívar y el párroco de la Catedral, P. Juan González. Media docena de seminaristas y acólitos prestaron también su servicio. Con el templo a oscuras y ayudados de linternas, los lectores hicieron las siete lecturas del Nuevo Testamento. Cada una iba acompañada de un salmo cantado y de una oración. Así, la asamblea fue repasando la historia de la salvación hasta llegar a la venida de Jesús a este mundo para su redención. Entonces se encendieron todas las luces de la catedral, sonó el órgano, las campanas repicaron a voleo y se escuchó el canto alegre del Gloria. Hubo otras dos lecturas del Nuevo Testamento —también con sus salmos y oraciones— y la asamblea entonó el Aleluya, ese canto que estaba silenciado desde el miércoles de ceniza. También el domingo hubo gestos característicos. El templo estaba iluminado desde el principio, con más luz que de costumbre. Al comienzo de la Misa, el primer gesto propio fue la aspersión sobre los fieles. Después se leyó la Secuencia Pascual; un antiguo himno poético litúrgico, tal vez del siglo XI. La entonación de esta secuencia se realizó entre la segunda lectura y el canto del Aleluya.
La Vigilia Pascual comenzó con el rito de la luz. F. GUTIÉRREZ
«La Pascua de hoy es la victoria. De la vida sobre la muerte, del bien sobre el odio, de la razón sobre la sinrazón»
El triunfo de Cristo En las homilías pronunciadas el sábado y el domingo, el Cardenal Sturla saludó por las Pascuas y se refirió al triunfo de Cristo sobre el pecado y la muerte. "Precisamente la Pascua de hoy es la victoria. De la vida sobre la muerte, del bien sobre el odio, de la razón sobre la sinrazón (...). Ni el dolor, ni la enfermedad ni la muerte tienen la última palabra". “El hombre de todos los tiempos encontró muchos dolores y sufrimientos, pero encontró la muerte como el peor mal; ahí todo se aca-
El cirio permanecerá encendido durante todo el Tiempo de Pascua. F. GUTIÉRREZ
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INFORME
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Las misas de la Vigilia y el Domingo de Resurrección tienen una solemnidad y riqueza muy particulares. F. GUTIÉRREZ
baba. La muerte es un desgarro y algo se muere en nosotros con la persona querida”. Pero justamente, ante este dolor, con la resurrección de Jesús “hasta la muerte ha sido vencida”, agregó al día siguiente. “Entonces ningún mal, por profundo que sea, puede destruir esta alegría. La fe no es hecernos la ilusión o imaginarnos que todo va a ir mejor, la fe es la certeza de que realmente Cristo ha vencido y que, por lo tanto, la victoria es del amor. Porque la victoria de Cristo en la Cruz es la victoria del Amor que vence al pecado, el mal y la muerte”. La Pascua es razón de de la alegría, y por eso el Cardenal se sumó a la tradición de hacer algún chiste durante la homilía. Aseguró que “el mundo entero desborda de alegría porque Cristo ha Resucitado. Y esta
"TODOS ESTÁN CURADOS" El Card. Daniel Sturla hizo una comparación para explicar la alegría por la resurrección. "¿Qué experimentaron los disípulos esa mañana de Pascua? Lo mismo que sucedería si hoy dijéramos en los hospitales: 'Todos están curados', o en las cárceles, 'todos están libres'. Como si todos los que tuviéramos algún dolor, o extrañáramos a alguien que está lejos o fallecido: 'Hoy viene, hoy nos vamos a encontrar'. Es decir, experimentaron que el mundo y la vida que vivían se daba vuelta”, comparó.
buena noticia llena los corazones de todos de esperanza”. Otro punto al que se refirió el Card. Daniel Sturla es cómo opera la esperanza en nuestra vida de creyentes. Mencionó que esta esperanza “se hace activa para sanar heridas, para tratar de liberar ataduras, para darle sentido a la vida de las personas. Que Cristo haya resucitado nos compromete a hacer presente esta realidad”. Intenciones especiales En las Misas de Pascua se rezó por dos intenciones especiales: Venezuela, y Sri Lanka. En el primer caso, para que se encuentre una salida consensuada a la crisis política. Justamente una pareja de jóvenes venezolanos pidió, a la salida de la Misa, que el Arzobispo les bendijera la anillos con los que piensan casarse, Dios mediante, en su tierra natal. En el caso de Sri Lanka, el Card. Sturla lamentó los atentados perpetrados en iglesias durante las celebraciones pascuales, que dejaron unos 200 muertos y más de 400 heridos. Asimismo, mencionó la importancia de la vida religiosa, que ha jugado un rol tan importante en la sociedad a través del servicio: “Curar heridas, atender a los pobres, dar educación. ¿Para qué? Para que aquel cielo hacia el que vamos ya lo hagamos presente entre nosotros”. Y agregó: “Eso es lo cada cristiano está llamado a hacer, lo que cada familia está invitada a realizar”. Con esto, se refirió a la misión Casa de Todos, e invitó a los presentes a sumarse (más información en las pág 10 y 11). Después de la homilía, la Misa continuó como de costumbre. Con la diferencia de que en la Vigilia los presentes renovaron las promesas que hicieron el día de su Bautismo, y fue-
«El mundo entero desborda de alegría porque Cristo ha Resucitado»
ron luego roceados con agua bendita. Tras 40 días de Cuaresma, las misas de la Resurrección fueron una expresión de gran alegría, y así se notó en todos los momentos. Esto se hizo más patente cuando terminaron ambas ceremonias y los celebrantes salieron por la nave central. Al llegar al atrio comenzaron los abrazos y saludos entre quienes, felices, se saludaban por la Pascua y compartían la alegría de la resurrección, la razón de su fe.
LA IGLESIA EN FOTOS
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Visita a las 7 Iglesias FEDERICO GUTIÉRREZ Fotógrafo
La Iglesia se apronta a celebrar su gran fiesta: la Pascua. Y Montevideo se apresta a vivir la misión “Casa de Todos”.
La imagen de la Virgen Dolorosa acompaña al Pueblo de Dios en la recorrida.
Una imagen que seguirá conmoviendo al mundo, sin importar momento o lugar.
Varias decenas de personas acompañaron el recorrido.
Un Rosario, una reflexión, una oración, Cristo que nos habla a través de la Cruz. La mirada de fe…
Al comienzo de la procesión iban la cruz y la Virgen Dolorosa.
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LA IGLESIA EN FOTOS
Como es habitual, las iglesias recorridas estuvieron colmadas, muchas personas se iban sumando durante el trayecto que duró casi tres horas.
María observa la Cruz y nos invita a nosotros a poner la misma atención. “Hagan lo Él les diga”.
Muchas personas fueron sorprendidas en su cotidianidad, como estas señoras que esperaban el ómnibus.
Siempre sobrarán las palabras.
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REPORTAJE
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25 En el camino junto al Señor El viernes 19 de abril se realizó el tradicional Vía Crucis en el Cerro de Montevideo
Son las ediciones que se han realizado del Vía Crucis del Cerro.
CAMILO GENTA Redacción Entre Todos
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altaban 15 minutos para las siete de la tarde y sólo estaban presentes tres canales de televisión. La intersección de las calles Grecia y Carlos María Ramírez estaba semi desierta, como buena parte de la ciudad durante el viernes de Semana Santa. Nada hacía prever que 15 minutos después la zona se colmaría de fieles de todas las edades. La gente comenzó a llegar con una puntualidad poco habitual para los montevideanos, cada uno sabiendo qué lugar ocupar, con un orden también poco usual. Llegó una camioneta con el audio; otra que trajo una cruz de aproximadamente tres metros de alto, llegó el Card. Daniel Sturla, acompañado por el Obispo Auxiliar Luis Eduardo González y un seminarista; llegaron los sacerdotes y diáconos de la zona y otros que acompañaban este Vía Crucis. Todo coordinado a la perfección. No era para menos, esta era la vigesimoquinta oportunidad en la que se realizaba, pero el Espíritu con el que se transitó el camino hasta la fortaleza del Cerro sigue siendo el mismo. Unidos por la misma fe Para quien nunca concurrió al Vía Crucis del Cerro lo primero que salta a la vista es la participación de familias enteras, de abuelos, padres y nietos, que se impulsan unos a otros durante los kilometros de camino en ascenso... siempre en ascenso. También es destacable la participación de todas las comunidades católicas de la zona (las parroquias Santo Cura de Ars, de Punta Yeguas; San Alberto Hurtado, de Casabó; y Santa María de la Ayuda, San Rafael y Ntra. Sra. de Fátima, en el Cerro) y esta vez, como en otras ocasiones, acompañadas por los hermanos de la Iglesia Metodista. Son estas comunidades, sus sacerdotes, diáconos y laicos, los que se encargan de preparar cada estación con un cuidado especial; cada una con su propia impronta, pero guardando el significado universal del mensaje. Es que en esta zona de Montevideo conviven, tal
Los fieles, así como Simón de Cirene, cargan la cruz sobre sus hombros durante parte del recorrido. F. GUTIÉRREZ
La luna ilumina la bahía de Montevideo. A lo lejos se describe la silueta de la ciudad. F. GUTIÉRREZ
vez como en ninguna otra de la capital, realidades sociales, culturales y económicas muy diferentes. Es así que los signos elegidos para cada estación remitían al trato cotidiano, de persona a persona. Cuando se reflexionó sobre Simón de Cirene el gesto era el apoyo mutuo, hombro con hombro, de las personas que estaban haciendo el camino. En otro momento, cuando la reflexión ponía en escena a la Verónica, cada uno de los participantes enjugaba los ojos de quien tenía a su lado. Cuando se llegó a la estación en la
que Jesús era clavado en la Cruz, todos levantaban sus brazos para acompañar al Señor en su oración al Padre. Otro gesto muy profundo es el traslado de la cruz. Mide unos tres metros, hecha de madera sólida y requiere de varios turnos de siete personas para trasladarla. Es así que hombres y mujeres, algunos con sus hijos pequeños al costado, llevan agradecidos el madero durante el recorrido; otra forma de rezar a Dios. Sobre el final del camino los obispos y sacerdotes fueron quienes cargaron con el madero.
Un pueblo testigo del Señor El último kilometro de recorrido fue especialmente sobrecogedor: la noche estaba iluminada por la luna y a los pies del Cerro, la ciudad, con sus luces y las siluetas de los edificios, que parecía observar lo que sucedía en el camino de la cruz. Una vez terminado el Vía Crucis el Card. Daniel Sturla tomó la palabra, sobre una especie de descanso en las escaleras que llevan a la Fortaleza del Cerro. En primer lugar recordó que ese día, viernes 19 de abril, la comunidad judía comenzaba a celebrar el Pésaj
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OTROS VIA CRUCIS EN LA CIUDAD_
Tiempo de reflexionar y acompañar a Jesús. F. GUTIÉRREZ
(que concluirá el 27 de abril) quiso así unirse a “nuestros hermanos mayores en la fe”. Luego, el Arzobispo llamó a los presentes a vivr especialmente este tiempo de misión. “Debemos llegar a tanto hermanos nuestros que están alejados de la práctica de la fe y decirles que la Iglesia es casa de puertas abiertas, 'Casa de Todos'”, dijo. Remarcó que la Iglesia “nunca es club de perfectos, sino una casa donde nosotros, pecadores perdonados, caminamos y abrimos las puertas para que todos puedan
entrar, acompañar y encontrarse con el Dios Padre que les abre los brazos para el perdón”. Pidió a todos los presentes poner la vista en “Jesucristo el Señor, que es el hermano y amigo” e “impulsados por el Espíritu Santo experimentar la alegría de estar con Dios”. Una vez terminada la breve alocución, el Arzobispo de Montevideo y el Obispos Auxiliar bendijeron a los presentes, que en pequeños grupos y en reflexivo silencio bajaban hacia sus hogares preparados a vivir una nueva Pascua.
ECUMÉNICO
BARRIALES
Por sexto año consecutivo, distintas denominaciones de la Iglesia se unieron para acompañar a Jesús en el camino de la cruz. Católicos, anglicanos y luteranos comenzaron con una plegaria en el Templo Inglés. Tanto allí como en las calles de la Ciudad Vieja rezaron unidos, por las mismas intenciones. Los tres líderes religiosos se turnaban para llevar la cruz, una estación cada uno. Terminaron en la Catedral católica, donde el Card. Sturla, el obispo Daniel Genovesi (anglicano) y el pastor Jerónimo Granados (luterano) pronunciaron unas palabras de unidad.
Casi todas las parroquias organizaron recorridos por las calles del barrio, invitando a los vecinos a acompañarlos.
CON PERSONAS EN SITUACIÓN DE CALLE Por la Av. 18 de Julio hubo un camino guiado por Mons. Pablo Jourdan, donde participaron quienes viven en la zona.
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LA IGLESIA EN FOTOS
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HASHTAG #CasadeTodos
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NOTICIAS
COTTOLENGO FEMENINO DON ORIONE @COTTOORIONEFEM Una de las maneras de involucrarse con la misión #CasaDeTodos (...) es elegir una persona concreta que se ha alejado de la práctica de la fe y rezar por ella.
P. CHEBA ALCORTA @CHEBA.ALCORTA En la parroquia @sanjuanuy nos seguimos preparando para la Misión #CasaDeTodos de la @icm_uy
Comenzó la misión Casa de Todos Los misioneros fueron enviados en la Misa de Pascua y ya recorren las calles de Montevideo
Los misioneros están identificados con un chaleco amarillo. Conversan con las personas y los invitan al Encuentro Casa de Todos. A. GONZÁLEZ
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dentificados con chalecos amarillos, los misioneros recorren la ciudad de Montevideo. Forman parte de Casa de Todos, un impulso a nivel de toda la Arquidiócesis. La misión comenzó propiamente el Domingo de Pascua. En todas las parroquias que participan del Programa Misionero Jacinto Vera se realizó el envío. Este consistió en una breve ceremonia en la que toda la comunidad rezó por esas personas que estos días están saliendo al encuentro de los que se han alejado del Señor y de su Iglesia. Parte de la oración pide lo siguiente: "Con tu poder infinito, guía, Señor, sus pasos, fortalécelos con tu gracia, para que el cansancio no los venza. Que sus palabras sean un eco de las palabras de Cristo para que sus oyentes presten oído al Evangelio. Dígnate, Padre, infundir en sus corazones el Espíritu Santo para que, hechos todo para todos, atraigan a muchos hacia ti, que se incorporen a tu pueblo santo. Por Jesucristo, nuestro Señor".
El Cardenal Daniel Sturla se refirió a la misión en las Misas de Pascua. En la Vigilia, por ejemplo, explicó que Casa de Todos "quiere ser un llamado a tantos hermanos nuestros que están lejos de la fe. Queremos decirles que la Iglesia es casa de puertas abiertas y que al encontrarse con Dios, se encuentran consigo mismos, con el sentido de su existencia". Al día siguiente, en la celebración de Resurrección en la Catedral, volvió a mencionar esta gran misión: "Queremos convocar a otros para que vivan la alegría de la fe y que alimenten en su vida la esperanza de la victoria de Cristo”. Además, pidió a Dios para que todos los creyentes pudieran expresar la alegría de la resurrección de Jesús a quienes encontraran en su camino. “¡¡¡Cristo ha resucitado, verdaderamente ha resucitado!!!”, enfatizó. Más temprano en la semana, precisamente en la Misa del Jueves Santo, había hecho una confidencia a los que estaban con él en la celebra-
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Chalecos para misioneros fueron confeccionados por las mujeres de Ceprodih.
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Folletos de Casa de Todos se imprimieron, para repartir a los vecinos
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Son los lugares donde habrá Encuentros casa de Todos entre el 9 y el 11 de mayo.
ción de la Última Cena. "Tengo esta esperanza firme: que aquí en Montevideo va a haber una renovación de la vida cristiana. Pero esto depende de cada uno de nosotros, de que cada uno diga que quiere invitar a otros a participar de la alegría de la fe", comentó, con lo que recordó que la misión, como la Iglesia, es de todos. Los misioneros cuentan con la oración de toda la comunidad. Además, tienen un manual que contiene consejos para su labor. Entre otras cosas, se les pide tener tres actitudes básicas: escuchar, hacerse prójimos y testimoniar. "Este es el primer paso para facilitar el camino de la fe: escuchar. Es el apostolado del oído: escuchar, antes de hablar", dijo el Papa Francisco en la homilía de la Misa de conclusión del Sínodo de los obispos sobre los jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional. En esa intervención es que recomendó adoptar estas tres actitudes que la Iglesia de Montevideo recuerda para sus misioneros.
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"Escuchar con amor, con paciencia, como hace Dios con nosotros, con nuestras oraciones a menudo repetitivas. Dios nunca se cansa, siempre se alegra cuando lo buscamos. Pidamos también nosotros la gracia de un corazón dócil para escuchar", prosiguió. La segunda actitud de Jesús es hacerse prójimo, cercano al hermano. El Maestro "no delega en alguien de la 'multitud' que lo seguía, sino que se encuentra con Bartimeo en persona (...). Así lo hace Dios, implicándose en primera persona con un amor de predilección por cada uno. Ya en su modo de actuar transmite su mensaje: así la fe brota en la vida". Con respecto al testimonio, en aquella ocasión el Papa recordó que los cristianos no son una ONG sino una "comunidad de los salvados que viven la alegría del Señor". Debido a esto, recordó el Papa —y se recuerda también a los misioneros montevideanos—, "no es cristiano esperar que los hermanos que están en busca llamen a nuestras puertas; tendremos que ir donde están ellos, no llevándonos a nosotros mismos, sino a Jesús. Él nos envía, como a aquellos discípulos, para animar y levantar en su nombre. Él nos envía a decirles a todos: 'Dios te pide que te dejes amar por él'".
NOTICIAS
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MISIÓN Estas semanas, los misioneros salen al encuentro y hacen misión. Esto se concreta en visitas casa por casa, reuniones en casas de vecinos, y en acciones en lugares públicos. Están identificados por un chaleco amarillo con el logo de Casa de Todos. ENCUENTRO CASA DE TODOS Ya está disponible el sitio web www.casadetodos.uy.
«Todos, como comunidad, estamos en esta misión Casa de Todos, pero ustedes tienen el regalo de ser presencia viva de la Iglesia allí donde anuncien nuestra fe, irradiando el amor que procede de Dios y la alegría de sabernos redimidos por Él» De la oración de envío
Los misioneros invitan al Encuentro Casa de Todos, que se celebrará el 9, 10 u 11 de mayo en distintos barrios y a diferentes horas. Habrá testimonios, prédica en torno a la Palabra de Dios, un momento artístico y oración. Como su nombre lo indica, será un encuentro. CATEQUESIS Después del Encuentro Casa de Todos, las personas serán invitadas a participar en cuatro catequesis en las parroquias.
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ENTREVISTA A: MONS. JAIME FUENTES OBISPO DE LA DIÓCESIS DE MINAS
«La Virgen del Verdún es la devoción que tiene más arraigo en el Uruguay» La celebración anual de la fiesta del Verdún, cada 19 de abril, reúne cerca de 80.000 peregrinos. Este año coincidió con el Viernes Santo.
SANTIAGO SILVA LEDESMA Redacción Entre Todos
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lo largo del año, sobre todo los domingos de verano, son muchos los peregrinos que suben a la cumbre del Verdún para venerar a la Virgen. Desde su comienzo, la festividad se programó para l 19 de abril, por ser el día del Desembarco de los Treinta y Tres Orientales dirigidos por Juan A. Lavalleja (nacido en Minas). La fiesta vincula así la gesta patria de la independencia (1825) con el patrocinio de la Virgen María. El primer poblador del paraje, actual cerro del Verdún, fue el vasco francés Juan Bautista Berdum, a quien el gobierno de España donó esos campos en el año 1801. Por esa razón los vecinos luego lo llamaron Verdún. Fue en 1906 cuando Mons. Soler encargó al Arquitecto D. Cayetano Bringas un proyecto de monumento con la imagen de la Virgen en la cumbre que contara con tres grandes pilastrones que representaban las tres virtudes teologales (fe, esperanza y caridad). Debido a la afluencia ininterrumpida de peregrinos durante todo el año desde 1901, la Conferencia Episcopal Uruguaya, mediante un decreto, erigió en 2010 el lugar como Santuario Nacional de Nuestra Señora del Verdún. En la siguiente entrevista, Mons. Jaime Fuentes, Obispo de Minas, cuenta lo que genera en los fieles este lugar tan importante del país. Luego de casi ocho años al frente de la diócesis de Minas ¿qué evaluación puede hacer de su ministerio?
Mons. Jaime Funetes es obispo de Minas desde 2010. DECOS CEU
«El Verdún son sobre todo familias que han recibido en herencia el tesoro de su devoción y vienen a venerar a la Madre» Como síntesis, una profunda acción de gracias a Dios, por medio de la Santísima Virgen. Porque la gente es muy buena; porque hay en ella un gran espíritu de solidaridad; porque la intercesión de la Virgen es más que evidente; porque los sacerdotes son muy sacrificados y, sin excepción, tienen “olor a oveja”, como dice el Papa; porque hay vocaciones, aunque necesitamos más… En fin, todo es gracia. ¿Cuál es la historia de la imagen de la Virgen del Verdún? La imagen llegó a Minas el 18 de noviembre de 1909, de manera que cumplirá ahora 110 años. En 1902, al inaugurarse el santuario, se puso
otra imagen, que el P. Giuseppe De Luca, que fue el de la idea y su realización, trajo de la parroquia del Reducto, de Montevideo. Esta imagen fue destruida en dos ocasiones, cosas de aquellos tiempos. De ahí que se decidiera colocar otra que no estuviera al alcance de las manos. La actual imagen mide más de tres metros, es de metal y vino de Francia. Pienso que está a gusto donde está… El terreno pertenecía a la familia Dartayete, que lo cedió generosamente a la Iglesia. En estos años que está como Obispo de Minas, ¿cómo ha visto el acercamiento de los fieles hasta la imagen de la Virgen del Verdún? ¿Cómo es la actitud de los files con la imagen? La Virgen del Verdún es la devoción que tiene más arraigo en el Uruguay. No hace mucho tiempo, releyendo un libro de memorias de mi padre, descubrí que mi abuelo, Manuel Fuentes, a quien yo no conocí, conoció a mi abuela, María Elena Pareja, precisamente en una peregrinación al santuario del Verdún… Estoy seguro de que hay montón de casos como este. La devoción a la Virgen del Verdún se va transmitiendo de genera-
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ENTREVISTA
«Doy testimonio de que la devoción no decrece... Siempre hay intenciones para encomendarle a la Virgen y siempre hay motivos para venir a darle gracias» nio de que la devoción no decrece... siempre hay intenciones para encomendarle a la Virgen y siempre hay motivos para venir a darle gracias: cuestiones de salud, de trabajo, de superación de dificultades… ¿Se aseguran el mantenimiento y protección de la imagen de la imagen de la Virgen de algún modo? Pues se enfrenta a las inclemencias del clima. Pienso que este es el “milagro” de la Virgen: que su imagen, después de 110 años a la intemperie —y en el cerro se siente mucho el frío, la lluvia, el viento…— siga en su sitio, protegiendo a sus hijos minuanos y esperando a todos los que llegan a visitarla.
«Mi abuelo, Manuel Fuentes, conoció a mi abuela, María Elena Pareja, precisamente en una peregrinación al santuario del Verdún... Estoy seguro de que hay montón de casos como este»
¿Tiene alguna o algunas anécdotas respecto a visitantes y la imagen? Muchísimas… Para muestra basta un botón. Un matrimonio mayor llega al santuario, traen una piedra… Explican: 'Hace 50 años nos casamos y vinimos a pedirle a la Virgen que nos ayudara en el matrimonio que empezábamos. Nos llevamos de recuerdo una piedra, y ahora, que cumplimos las Bodas de Oro, venimos a agradecerle y devolverle la piedra, porque es de Ella'.
ción en generación; el Verdún son sobre todo familias que han recibido en herencia el tesoro de su devoción y vienen a venerar a la Madre no sólo el 19 de abril, día de su fiesta, sino también a lo largo de todo el año. Es lógico, ningún hijo viene solamente a verla el día de su cumpleaños… Calculamos que entre 60.000 y 80.000 personas llegan al Verdún solamente en este día y, por los años que llevo aquí, doy testimo-
¿Qué muestras de cariño ha visto que le hacen los fieles a la imagen? Le traen velas, flores; muchas personas —más mujeres que hombres— suben y bajan el cerro descalzas, como un sacrificio que avala su oración. Ponen una plaqueta en los depósitos que hay arriba, agradeciéndole su intercesión… También es una costumbre muy minuana que las chicas, cuando cumplen 15 años, vienen al Verdún con su vestido, para mostrárselo a la Virgen.
¿Las visitas grandes se dan durante todo el año? ¿O solo en la fiesta de la Virgen del Verdún en abril? Durante todo el año, más en los fines de semana, vienen ómnibus y autos particulares al Verdún. Y bicicletas y motos y gente de a pie. Ahora mismo estamos empeñados en sacar adelante lo que llamaríamos un “Centro de hospitalidad”, es decir, unos locales en los que podamos recibir a los peregrinos. En este local pondremos la historia del Verdún en fotos y otros elementos, y las Hermanas, que atienden a los peregrinos los sábados y domingos, podrán recibirlos cómodamente. ¿Cuál cree que es la importancia de que en Uruguay exista un lugar así, como lo es el Cerro del Verdún? En 2010 la Conferencia Episcopal declaró “Santuario Nacional” el santuario de la Virgen del Verdún. Fue un homenaje a la Virgen y un reconocimiento a las generaciones de fieles que vienen hasta aquí. Hace pocos años pudimos inaugurar, en la cumbre del Cerro, la capilla Madre de Misericordia, que es una invitación a dejarse ganar por el amor de Dios, que perdona nuestros pecados en el sacramento de la Misericordia, en la Confesión. Es la Virgen la que siempre mueve los corazones de sus hijos, para que se acerquen a esa fuente de gracia incomparable. Mirando el presente y el futuro, pienso que nos espera un precioso amanecer: reconciliadas con Dios, las familias estarán más unidas, serán fieles, habrá más alegría: es Ella, la Madre del Verdún, la que seguirá reuniendo a los hijos y acercándolos a su Hijo.
PERFIL
MONS. JAIME RAFAEL FUENTES MARTÍN OBISPO DE MINAS
Nació en Montevideo en 1945 y asistió al Colegio y Liceo Santa María de los Hermanos Maristas. Estudió periodismo en la Universidad de Navarra, cursó estudios de Filosofía y Teología en el Studium Generale del Opus Dei en España y en el Colegio Romano de la Santa Cruz (Roma) y se doctoró en Teología en la Universidad de Navarra. El 5 de agosto de 1973 fue ordenado sacerdote en Madrid y en 1974 regresó a Uruguay. Entre 1984 y 1992 se desempeñó como Vicario de la Prelatura del Opus Dei en Uruguay y desde 1988 hasta 2007 fue Profesor de Teología y Capellán en la Universidad de Montevideo (UM). Es Miembro Correspondiente de la Pontificia Academia Mariana Internacional. En el ámbito de la Conferencia Episcopal del Uruguay (CEU) es Responsable de la Comisión Nacional para la Pastoral Familiar y la Vida. Es el actual obispo de la diócesis de Minas, que comprende al Departamentos de Lavalleja y las zonas de Aiguá (Maldonado) y Lascano (Rocha).
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OPINÓN
«Al celebrar la Pascua cada año, actualizamos su mensaje y gracia»
EDITORIAL MONS. PABLO JOURDAN OBISPO AUXILIAR DE MONTEVIDEO
La Pascua nos impulsa a la misión
Mons. Pablo Jourdan
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esús resucitado nos hace un solo pedido, que no podemos dejar de realizar: “Hagan que todos sean mis discípulos” (cf. Mt 28, 19), es como un gran criterio donde evaluamos nuestra amistad con Él. En ese mismo pasaje nos dice en qué consiste y cómo se realiza: sumergiéndonos en las relaciones con Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo, poniendo en práctica todo lo que nos ha enseñado. El Espíritu nos está impulsando en esta Pascua a vivir esta hermosa vocación comunitaria a través de la misión “Casa de todos”. La Pascua es pasión, muerte y resurrección de Jesucristo. Al celebrarla cada año, actualizamos su mensaje y gracia. Recordemos brevemente el sentido de la cruz-resurrección: 1) A veces pensamos que la cruz son las situaciones "externas" de adversidad, problemas… que siempre están porque son parte de la vida humana. Estas situaciones indican una necesidad o que algo está mal y son "un llamado" a dar una respuesta. Si solo nos quedamos "mirando desde fuera" nos desanimamos, criticamos y juzgamos: "¡qué espantoso lo que está pasando!", "como está el mundo"… Para que la cruz sea cristiana hay que hacerle el Vía Crucis. 2) Se da un paso importante cuando esas situaciones pasan a ser asumidas por cada uno, con el deseo de transformar la realidad. Por lo tanto la cruz eres Tú, cuando has asumido esa realidad. Pero pronto nos damos cuenta que no tenemos fuerzas para cargarla y que caemos frecuentemente en la queja: "por qué a mí", "no puedo más", "es demasiado"… La cruz cristiana es para resucitarla o si no, no es cruz cristiana. 3) Si tú eres la persona crucificada por haber asumido la adversidad debes estar unida permanentemente al Resucitado, es Él quien tiene todo el poder divino para sostenerte y transformarte. Jesucristo es el que resucita toda cruz, llenándola de crecimiento, vida y amor. Seguramente tú en situaciones difíciles has dicho: ¡Cómo lo pude lograr! ¿De dónde me surgió la fuerza? La cruz es la oportunidad que tienes para experimentar que Jesucristo es Dios y que tiene la fuerza de la Resurrección. El Resucitado nos envía: es la mejor noticia que todos esperan. Todos experimentamos que estamos hechos para el amor “y frecuentemente nos dividimos”; que estamos hechos para la vida “pero nos enfermamos y morimos”; que estamos hechos para Dios “y no lo podemos encontrar”. Hay una pregunta en el corazón de todo ser humano: ¿hay Alguien que nos dé una respuesta? Nosotros respondemos que Sí y queremos anunciarlo: ¡Jesucristo! Parte de la oración de envío que rezamos en la Misa del domingo de Pascua dice así: “Oh Dios, que por la resurrección de Jesucristo y la misión de la Iglesia has llamado a todos los pueblos a la salvación, mira con bondad a estos hijos tuyos que hoy son enviados para anunciar el Evangelio. Derrama sobre ellos el Espíritu Santo para que los proteja, ilumine y aconseje. Que su testimonio abra el corazón de aquellos con quienes se encuentren para que puedan descubrir tu presencia en sus vidas. Por Jesucristo, nuestro Señor”.
CAROLINA BELLOCQ REDACTORA RESPONSABLE @CaroBellocq
Entre Todos vuelve a crecer
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on la alegría de la Pascua, llega un Entre Todos renovado. Hace un año que se produjo un gran cambio, con una apuesta fuerte a lograr un mayor vínculo con sus lectores. Esto implicó la renovación de su estructura y contenidos principales, entre los que se dio un mayor protagonismo a las imágenes. Después de un año de trabajo y escucha, hemos adoptado otras novedades. La modificación salta a la vista y responde a la necesidad de cambiar de imprenta para poder ofrecer un producto que se luzca más, donde se destaquen los colores y matices. Esto se convirtió en una ocasión propicia para hacer otra modificación exigida: el aumento del tamaño de letra. Sabemos que la anterior ha dado algunos problemas y, gracias a Dios —y al trabajo de
un gran equipo— pudimos crecer en este sentido. Finalmente, el tercer gran cambio implica un aumento en la cantidad de páginas. Esto también responde a un interés de la audiencia por poder profundizar en más aspectos, así como en la voluntad de los colaboradores de escribir notas más extensas. Creemos firmemente que todo esto representa una buena ganancia para los los que reciben el quincenario. Como se trata de ser sinceros, es justo aclarar que la mejoría insume más gastos de impresión, lo que exige el aumento en el precio de venta. No nos caben dudas de que los lectores lo podrán apreciar y que, contentos, podrán también difundir esta buena noticia, para que las demás personas también se acerquen al Entre Todos renovado.
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CLERO
OPINÓN
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EN LA VOZ DE_
P. MARCELO COPPETTI SACERDOTE JESUITA
CUMPLEAÑOS Y ANIVERSARIOS
HERNÁN BONILLA Director Ejecutivo del Centro de Estudios para el Desarrollo
mcoppetti@gmail.com
@Hernan_Bonilla
MARTES 30 Diác. José Pouse JUEVES 2 DE MAYO Pbro. Gonzalo Abadie (aniv.) Pbro. Gustavo Calvete (aniv.) VIERNES 3 Diác. Juan Pablo Iglesias Pbro. Henry Santana (aniv.) Pbro. Rodrigo Soto (aniv.) SÁBADO 4 Diác. Walter González LUNES 6 Pbro. William Bernasconi (aniv.) Pbro. Guillermo Orbe (aniv.) Pbro. Gonzalo Aemilius (aniv.) MARTES 7 Pbro. Jairo Banegas (aniv.) Pbro. Pablo García (aniv.) Pbro. Giacomo Marinucci (aniv.) Pbro. Krzysztof Pacholak (aniv.) MIÉRCOLES 8 Pbro. Omar França R.P. Julio Antonio Robledo F.D.P. Pbro. Eliomar Carrara (aniv.) Pbro. Lázaro Porto (aniv.) R.P. José Luis Morillo S.D.B. (aniv.) JUEVES 9 Pbro. Luis Ferrés VIERNES 10 Pbro. Carlos Varela (aniv.) SÁBADO 11 R.P. José Correa S.D.B. R.P. Hugo Espinosa S.D.B. Pbro. Ariel Cifuentes (aniv.) Pbro. Davi de Miranda (aniv.) Pbro. Vagner Fernándes (aniv.) Pbro. Leonardo Vernazza (aniv.) Pbro. Alan Zinche (aniv.)
SAN FELIPE Y SANTIAGO El viernes 3 de mayo se celebra a estos santos apóstoles, patronos de la ciudad de Montevideo.
¿Tener éxito o dar fruto?
E
ntre los apuntes que he ido acumulando con los años, encontré una meditación de unos Ejercicios Espirituales que llevaba por título: “Enviados en Misión: ¿tener éxito o dar frutos?” Una pregunta de mucha actualidad que interpela nuestro modo de estar en el mundo. Vivimos en una sociedad exitista en la que somos lo que conseguimos y que nos posiciona por encima de los demás, sin importar el precio que pagamos por ello. Parece que lo único que importa es lo que logramos y no cómo, mucho menos cómo lo vivimos o cómo nos sentimos. Eficiencia, inmediatez, reconocimiento, son palabras que se han instalado con mucha fuerza en nuestra cultura. Se valora a la gente por lo que hace, por lo que produce y no por lo que es. Todos somos parte de esta cultura del éxito y de la hiper actividad. No tener tiempo parece ser un signo de status. El encuentro gratuito con nuestros seres queridos, familiares o amigos, se hace cada vez más extraño. Del mismo modo, el descanso o el tiempo para la oración casi no tienen lugar en nuestras agendas. Poco a poco, nos olvidamos que la lógica del Evangelio es otra: dar fruto exige tiempo, disciplina y trabajo. Acontece en lo oculto, sin aparentar y sin dar gritos. El fruto no se exhibe, a diferencia del éxito que busca siempre la propaganda. Acepta los defectos, da tiempo y respeta los ritmos de los otros; el éxito, en cambio, exige perfección y se rige por una ley inflexible que endurece el corazón. A la cultura del éxito le importa poco el sujeto, le importa el producto y su valor. Son dos lógicas distintas, dos maneras de estar y de actuar en este mundo. Debemos estar atentos para no dejarnos arrastrar por la cultura dominante, que nos empobrece a todos. Por el contrario, debemos actuar desde la lógica del Evangelio, que nos permite sacar lo mejor de cada uno.
Notre Dame y nosotros
L
a Semana Santa tuvo un episodio trágico que conmovió al mundo; la Catedral de Notre Dame en París sufrió un importante incendio que consumió parte de su estructura y puso en riesgo la supervivencia del edificio. Las imágenes fueron impresionantes y conmovedoras, así como las reacciones de quienes se congregaban en sus alrededores a rezar o cantar. Ciertamente el impacto masivo de la noticia está dado por el lugar que tiene esa Catedral en el imaginario colectivo a nivel internacional. Apagado el incendio, varias personas anunciaron cuantiosas donaciones para la restauración del templo, lo que deparó reacciones positivas o negativas. En general las críticas vinieron por el costo oportunidad o, dicho en criollo; ¿no hay cosas más importantes en que gastar cientos de millones de dólares? Sin embargo, me interesa centrarme en otro aspecto que también nos interpela a nosotros, ¿por qué recién ahora aparecen los recursos que no estuvieron antes para su preservación? Es una actitud muy humana, que duda cabe, lamentarnos cuando ya no está lo que no apreciamos mientras nos fue
posible, o hacemos esfuerzos mucho mayores por recuperar lo que perdimos que los que hicimos por preservarlo. Vale a nivel personal y social. En Uruguay, casi sin darnos cuenta, también vamos perdiendo aspectos consustanciales a nuestra sociedad de los que nos lamentamos recién cuando vemos las consecuencias. Nuestra convivencia empeora día a día, nuestra sociedad se hace más violenta, nuestros resultados educativos son cada vez peores y nos enfrentamos a una fragmentación social creciente, sin reaccionar. Esto no es lo que ocurre en todos los países, por cierto, todo lo contrario; los indicadores de violencia disminuyen y los de educación mejoran en casi todas partes del mundo. ¿Qué esperamos para cambiar las políticas necesarias para frenar nuestra debacle? ¿Llegar a un punto en que ya no reconozcamos a la sociedad uruguaya como tal? ¿Que la reacción lleve en la gente en su desesperación a buscar un Bolsonaro? Aunque sea difícil, debemos actuar antes de que el edificio se nos prenda fuego para mejorar la casa de todos, sin demagogia y poniéndole el hombro al país.
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Y si Cristo no resucitó, la fe de ustedes es inútil Padre GONZALO ABADIE
"Y si Cristo no resucitó, la fe de ustedes es inútil…". "Si nosotros hemos puesto nuestra esperanza en Cristo solamente para esta vida, seríamos los hombres más dignos de lástima", les reprocha en su carta San Pablo a los cristianos de Corinto, comunidad fundada por él mismo en la ciudad más grande de Grecia, próspera y abierta a todo tipo de ideas que entraban y salían por su agitado puerto, dominadas por el paganismo, ideas y prácticas anticristianas que se iban infiltrando en la comunidad de los creyentes en Cristo, y afectaban no ya aspectos circunstanciales ni secundarios de la fe cristiana, sino su propio fundamento: "Hermanos, les recuerdo la buena noticia que les he predicado, que ustedes han recibido y a la cual permanecen fieles. Por ella son salvados, si la conservan tal como yo se la anuncié; de lo contrario, habrán creído en vano" (1 Co 15, 1-2).
P
ero llama la atención, respecto de esta reprensión, la siguiente frase acusadora de Pablo: "Si se anuncia que Cristo resucitó de entre los muertos, ¿cómo algunos de ustedes afirman que los muertos no resucitan?" (v. 12). Podemos parafrasear sus palabras: algunos afirman que Cristo resucitó y al mismo tiempo creen que los muertos no resucitan. ¿No ven la incongruencia? ¿No se dan cuenta de esa insensatez? ¿No ven que una cosa trae como consecuencia la otra? "¡Si no hay resurrección, Cristo no resucitó!" (v. 13). ¿Pero en qué cosa creen ustedes, entonces? Sea lo que fuere, la de ustedes es una fe inútil, que no sirve para nada, es pura ilusión y fantasía, un completo sinsentido y fracaso: "Si los muertos no resucitan, comamos y bebamos, porque mañana moriremos" (v. 32), porque todo sigue igual que antes. Pablo arremete contra los cristianos de Corinto que se están alejando de la fe, del centro del evangelio: Jesús resucitó, y esto
El cirio pascual representa a Cristo resucitado. F. GUTIÉRREZ
lo cambia todo, te cambia a ti, los cambia a ustedes: "¡Demos gracias a Dios, que nos ha dado la victoria por nuestro Señor Jesucristo!" (v. 57). Muchos corintios podían tal vez aceptar y decir "Cristo resucitó", pero les resultaba inaceptable que la resurrección fuese para ellos también. Se dejaban influir por corrientes culturales muy poderosas en aquella época, propia de los griegos, y muy arraigadas, que sostenían que el alma, que es pura, estaba encerrada en el cuerpo, que es malo… Por lo tanto, ¿cómo concebir que el cuerpo pueda resucitar? Estas ideas también están extendidas cada vez más hoy en día, y hay fuertes corrientes en la cultura que profesan esta idea del alma revestida de un cuerpo extraño, como si fuéramos una suma de dos partes, y no una persona, una unidad. Hay quienes sostienen: mi cuerpo es una cosa, pero yo entiendo que soy otra… Y ese "yo" prescinde del cuerpo, lo rechaza, o busca transformarlo caprichosamente. El cuerpo no forma parte de lo que soy. El cuerpo es la peor versión de mí mismo. Muchos, buscando superar esta tensión, adhieren a la idea de la reencarnación… Por eso Pablo reacciona tan viva-
mente: "Cristo murió por nuestros pecados, conforme a la Escritura. Fue sepultado y resucitó al tercer día, de acuerdo con la Escritura" (1 Cor 15 3-4). Y en esas palabras está sintetizado el evangelio, pues el amor de Dios por nosotros alcanzó una radicalidad insuperable y definitiva: "sabiendo Jesús que había llegado su hora de pasar de este mundo al Padre, él, que había amado a los suyos que quedaban en el mundo, los amó hasta el fin" (Jn 13, 1). El tiempo de Dios está puesto en esa intersección: el paso —eso significa pascua— de Jesús, su Hijo amado, de este mundo al mundo del Padre. Es un viaje hasta el fin, hasta el extremo: hasta el fin de lo que el Padre y el Hijo pueden dar, su propia vida; hasta el fin de toda la oposición imaginable, la oposición y enemistad y odio de los hombres de todos los tiempos; hasta el fin del amor y la vida, allí donde mandaba la muerte; hasta el fin del sufrimiento, la burla, la exclusión y el tormento; hasta el fin de los tiempos, porque este acontecimientos afecta a los que vivieron antes y vendrían después; hasta el fin de la historia; hasta el confín de las miserias humanas de cada persona que acepte este regalo; hasta el extremo mismo de la eternidad.
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Por eso San Pablo no puede permanecer indiferente ante los cristianos que se han alejado de la fe en la resurrección de Cristo, porque se apartan de su amor radical por ellos, se apartan de aquel que es capaz de salvar de la muerte, y del amplio territorio de influencia de la muerte: la soledad, el aislamiento, las disputas, la infidelidad, la corrupción, la vileza, el crimen, la desesperanza, la tristeza, la falta de fe en Dios, el adulterio, la envida, la difamación, la desaparición de los seres queridos, la aniquilación de todo los anhelos y experiencias y realidades valiosas de esta existencia. Pablo nos previene de una vida cristiana en que se puede participar ritualmente de la fe, se puede profesar el credo, se puede leer la Palabra de Dios, se puede adherir a una moral cristiana, se puede recibir los sacramentos, se puede participar de una actividad pastoral…, pero todo se vuelve vano y vacío, estéril e inútil sin la fe puesta en Cristo que ha muerto por nuestros pecados y resucitado por nuestra salvación. "¿Cómo es posible que los que hemos muerto al pecado sigamos viviendo en él? ¿No saben ustedes que todos los que fuimos bautizados en Cristo Jesús nos hemos sumergido en su muerte? Por el bautismo fuimos sepultados con él en la muerte, para que así como Cristo resucitó por la gloria del Padre, también nosotros llevemos una Vida nueva", escribe Pablo a los Romanos (6, 1-4). Escuchamos este pasaje en la noche, precisamente, de la Vigilia Pascual, en que celebramos la Pascua. Porque celebramos no sola la pascua de Cristo, sino también la nuestra. Esa noche la Iglesia nos lo recuerda: no vivas esto por fuera, como si no te afectara. Por el bautismo Cristo los ha atraído a este acontecimiento, hasta lo íntimo de su ser, para que participen de este movimiento producido por el amor extremo de Dios, que los libera de las tinieblas, y los lleva a la luz de su reino. Y nos
ESPIRITUALIDAD
En la Vigilia Pascual se tocaron las campanas al voleo, algo que sucede solo una vez al añ. GUTIÉRREZ
interpela: por el bautismo te has zambullido en la pascua de Jesús, te has zambullido en el Espíritu Santo, ¿por qué tu vida es la misma que antes? ¿Cómo no se nota en ti esa victoria de Cristo sobre el pecado y la muerte? ¿Cómo puede ser que no estés participando de esa Vida nueva? ¿Cómo ha caído tu fe en algo inútil? Aquella incredulidad de los corintios no incumbe solo al futuro, a la resurrección de los muertos, sino también a la vida presente. No se trata de una fe meramente intelectual, sino de una comunión de vida, un proceso mediante el cual vamos muriendo
«Cristo murió por nuestros pecados, conforme a la Escritura. Fue sepultado y resucitó al tercer día, de acuerdo con la Escritura» San Pablo, en la Carta a los Corintios
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a un modo de vivir que envejece, que va matando: "Comprendámoslo: nuestro hombre viejo ha sido crucificado con él" (Rm 6, 6), para que llevemos una Vida nueva: "Por eso, no nos desanimamos: aunque nuestro hombre exterior se vaya destruyendo, nuestro hombre interior se va renovando día a día. Nuestra angustia, que es leve y pasajera, nos prepara una gloria eterna,
que supera toda medida. Porque no tenemos puesta la mirada en las cosas visibles, sino en las invisibles: lo que se ve es transitorio, lo que no se ve es eterno. "Nosotros sabemos, en efecto, que si esta tienda de campaña —nuestra morada terrenal— es destruida, tenemos una casa permanente en el cielo, no construida por el hombre, sino por Dios" (2 Co 4, 16 – 5,1).
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¡En verdad ha resucitado! Diác. VÍCTOR HUGO MÉNDEZ
Los evangelios de este tiempo de Pascua nos permitirán asistir a una de las muchas apariciones del Resucitado. Lo importante es analizar ¿Cómo nos acercamos a cada una de las lecturas donde se nos relata las diferentes apariciones del resucitado?
P
odemos asistir a una “simple lectura” de un hecho histórico y sentirnos “lejos” de los mismos. Como que quedaron allí, “anclados” hace dos mil años. Algunos incluso especulan de que dichas lecturas no hay que entenderlas en sentido literal, sino que son “símbolos” intentando hacer con eso que, como dice San Pablo en Primera Carta a los Corintios: “si Cristo no ha resucitado, vana es entonces nuestra predicación, y vana también su fe”. Por eso en este tiempo líquido y lleno de relativismos, y donde el secularismo ha ganado grandes espacios a nivel eclesial, es bueno replantearnos como vivimos en lo personal este hecho maravilloso de la Resurrección del Señor. Ya no se trata de seguir una filosofía, o un líder revolucionario que trajo una propuesta de justicia e igualdad. Se
trata de seguir a una persona que está viva y resucitada hoy. No es seguir a alguien que vivió hace dos mil años…es sentirse seguidor de alguien que aquí y ahora está a nuestro lado. Es entrar en relación con alguien concreto y que esa relación no se suple con acciones sociales, ni asistenciales. Muchas veces esas acciones se convierten en “escapismos” de esa relación vital y real que cada seguidor del Señor debe tener. Él nos quiere en primer lugar para él, y luego, cual fruto de esa relación, él nos llena de su fuerza para que podamos llevar a esta sociedad que ha olvidado a Dios, podamos llevar un testimonio que contagie, que sea atractivo, valiente y que nos lleve a decir al igual que Pedro y Juan: “No podemos dejar de decir lo que hemos visto y oído”. ¿Con qué tipo de fe? Muchos pueden decir que “seguimos a Jesús”. Pero deberíamos preguntarnos; ¿con qué tipo de fe? Una fe social, donde nuestra comunidad parroquial se puede parecer más a un club social y no una comunidad de fe viva. La podemos llamar, paradójicamente, una fe incrédula. Todo esto nos dice algo importante sobre la resurrección. Ésta no es sólo un gran milagro, un argumento o una prueba a favor de la
Estamos invitados a experimentar que Cristo nos quiere rescatar. CATHOPIC
verdad de Cristo. Es más. Es un mundo nuevo en el que se entra con la fe acompañada de estupor y alegría. La resurrección de Cristo es la «nueva creación». No se trata sólo de creer que Jesús ha resucitado; se trata de conocer y experimentar «el poder de la resurrección» (Flp 3, 10). Esta dimensión más profunda de la Pascua es particularmente sentida por nuestros hermanos ortodoxos. Para ellos la resurrección de Cristo es todo. En el tiempo pascual, cuando se encuentran a alguien le saludan diciendo: «¡Cristo ha resucitado!», y el otro responde: «¡En verdad ha resucitado!». Esta costumbre está tan enraizada en el pueblo que se cuenta esta anécdota ocurrida a comienzos de la revolución bolchevique. Se había organizado un debate público sobre la resurrección de Cristo. Primero había hablado el ateo, demoliendo para siempre, en su opinión, la fe de los cristianos en la resurrección. Al bajar, subió al estrado el sacerdote ortodoxo, quien debía hablar en defensa. El humilde sacerdote miró a la multitud y dijo sencillamente: «¡Cristo ha resucitado!». Todos respondieron a coro, antes aún de pensar: «¡En verdad ha resucitado!». Y el sacerdote descendió en silencio del estrado. Conocemos bien cómo es representada la resurrección en la tradición occidental, por ejemplo en Piero della Francesca. Jesús que sale del sepulcro izando la cruz como un
«La resurrección de Cristo es también nuestra resurrección» Diác. Víctor Hugo Méndez
estandarte de victoria. El rostro inspira una extraordinaria confianza y seguridad. Pero su victoria es sobre sus enemigos exteriores, terrenos. Las autoridades habían puesto sellos en su sepulcro y guardias para vigilar, y he aquí que los sellos se rompen y los guardias duermen. Los hombres están presentes sólo como testigos inertes y pasivos, no toman parte verdaderamente en la resurrección. En la imagen oriental la escena es del todo diferente. No se desarrolla a cielo abierto, sino bajo tierra. Jesús, en la resurrección, no sale, sino que desciende. Con extraordinaria energía toma de la mano a Adán y Eva, que esperan en el reino de los muertos, y
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Los obispos animan a colaborar con la misión pascual ACI PRENSA
Los obispos de Uruguay expresaron sus deseos de Pascua de Resurrección para que todas las personas puedan vivir la vida plena a la que invita Jesucristo y ser colaboradores de la misión que dejó.
E les arrastra consigo hacia la vida y la resurrección. Detrás de los dos padres, una multitud incontable de hombres y mujeres que esperan la redención. Jesús pisotea las puertas de los infiernos que acaba de desencajar y quebrar Él mismo. La victoria de Cristo no es tanto sobre los enemigos visibles, sino sobre los invisibles, que son los más tremendos: la muerte, las tinieblas, la angustia, el demonio. Nosotros estamos involucrados en esta representación. La resurrección de Cristo es también nues-
tra resurrección. Cada hombre que mira es invitado a identificarse con Adán, cada mujer con Eva, y a tender su mano para dejarse aferrar y arrastrar por Cristo fuera del sepulcro. Fuera de nuestros sepulcros de incredulidad, donde el deseo de poder ha invadido nuestras estructuras y ha llenado nuestro corazón. Es éste el nuevo y universal éxodo pascual. Dios ha venido «con brazo poderoso y mano tendida» a liberar a su pueblo de una esclavitud mucho más dura y universal que la de Egipto.
l Obispo de San José de Mayo y Presidente de la Conferencia Episcopal del Uruguay (CEU), Mons. Arturo Fajardo, manifestó que “Jesucristo se entregó por cada uno de nosotros y nos llama a vivir con Él una vida plena”. Aludiendo a su última carta pastoral titulada “Effatá-Ábrete. Hacia una Reconfiguración Pastoral”, Mons. Fajardo recordó que “el Resucitado sigue curando hoy a la humanidad de múltiples maneras”. En tanto, Mons. Carlos Collazzi, Obispo de Mercedes y Vicepresidente de la CEU, invitó a ser “testigos del Resucitado” y “construir el Mundo según el Evangelio”. “Cuánto más fuertes sean los vínculos con el Señor Jesús, es claro que crece la sintonía y el discípulo se capacita, en el ámbito de la Iglesia, para vivir y actuar en coherencia con su Maestro. Esta es la fuente de nuestros compromisos y de nuestra entrega diaria”, agregó Mons. Collazzi.
En su mensaje, el Obispo de Maldonado y Secretario general de la CEU, Mons. Milton Tróccoli, destacó que la “Pascua es la fiesta de la Vida” porque “cada vida es sagrada y su dignidad inviolable”. Mons. Trócolli se refirió a los inmigrantes que buscan “una vida digna y una nueva oportunidad para sus familias”. El Obispo invitó a los fieles a asumir una actitud pascual de “amor fraterno que vence toda indiferencia” y que “mueve a buscar con creatividad la forma de generar nuevos espacios de encuentro y solidaridad”. Cristo es la luz del mundo A su turno, el Arzobispo de Montevideo, Cardenal Daniel Sturla, indicó que así como un faro que salva vidas y naufragios, “Cristo resucitado es la luz del mundo. Disipa todas las tinieblas: las del pecado, las de las tristezas, la de las angustias”. El mensaje continuó de esta manera: "La Iglesia es la memoria viva de Cristo resucitado, nunca ‘club de perfectos’, siempre casa de puertas abiertas. En este Tiempo Pascual en Montevideo estamos empeñados en la misión Casa de Todos, para convocar a aquellos hermanos que se han alejado de la fe. Jesús nos dice hoy ‘ven y verás’. ¡Felices Pascuas!"
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SOCIEDAD
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Combate al delito: la represión no alcanza JOSÉ MARÍA ROBAINA PIEGAS Pastoral Penitenciaria
Hace algún tiempo en conferencia de prensa realizada en el Ministerio del Interior, se difundieron datos del incremento del número de homicidios (45,8%) y de rapiñas (53,8%), que se produjeron en el año 2018. Dichos datos, que hablan de un aumento desolador de la actividad delictiva en nuestro país, provocaron diversas reacciones, fundamentalmente de la oposición, señalando el fracaso de la política de seguridad del gobierno.
E
s dable apreciar que mayoritariamente quienes asumieron esta postura crítica entienden por política de seguridad la vinculada a la represión del delito y por ende imputan la responsabilidad del fracaso exclusivamente al Ministerio del Interior. Sin desconocer la necesidad de contar con un Ministerio del Interior que cumpla con eficacia su cometido de prevenir y reprimir el delito, mientras se continúe considerando que éste se combate exclusivamente reprimiendo y encarcelando, sin atender al mismo tiempo las causas socio-culturales del mismo y el estado de las cárceles a fin de que no se conviertan en fábrica de reincidentes, difícilmente se alcanzará el estado de seguridad a que tienen derecho los habitantes del país. Todo parece indicar que, mayoritariamente, el espectro político —tanto el gobierno como la oposición— adhiere a ese concepto restringido de política de seguridad. Ello surge de la forma en que el primero gestiona dicha política, así como de la naturaleza de la mayoría de las medidas propuestas por la segunda para mejorarla. Sin embargo la política de seguridad debe articular la prevención con la represión. Proviniendo la inmensa mayoría de las personas privadas de libertad de los sectores más vulnerables de la sociedad, no es posible concebir una política de seguridad integral que no incluya acciones para incidir sobre esa realidad. Una realidad constituida muchas veces por bolsones de marginación, en donde se ha ido conformando una subcultura que asume el delito como una práctica legítima que refuerza el sentido de pertenencia a ese grupo social. Estas situaciones no se solucio-
En el 2018 se produjo un aumento grande de homicidios y rapiñas en Uruguay. UNSPLASH
nan con medidas de política criminal, sino de “política” a secas, que aborden las causas estructurales y culturales de la inseguridad que afectan el tejido social. Con más y mejor Estado interviniendo en esos sectores marginales en forma articulada y estable, satisfaciendo necesidades de vivienda, educación, salud, cultura, recreación, trabajo etc. Y también con más presencia de la sociedad civil, cuya responsabilidad en la realización del bien común resulta insoslayable, sobre todo cuando el Estado defecciona en su cometido de encarnar la justicia. El otro aspecto que tiene inocultable incidencia en materia de seguridad es el estado de las cárceles. Las tasas de reincidencia del orden del 65% evidencian que nuestras cárceles han fracasado como herramienta conducente a disminuir el delito y garantizar la seguridad pública. Las cárceles deben cumplir con el cometido constitucional de perseguir la reeducación y la aptitud para el trabajo del privado de libertad, así como la profilaxis del delito. Lamentablemente están muy lejos de cumplir los objetivos señalados. De acuerdo a lo expresado en el último informe del Comisionado Parlamentario sobre el estado de las cárceles, el 30% de la población carcelaria se encuentra en condiciones “crueles, inhumanas y degradantes” y el 44% sujeta a condiciones insuficientes de integración social, una realidad que aumenta la reincidencia por imposibilidad de inserción social positiva.
«Una política de seguridad que sólo reprima, sin atender las causas del delito, está condenada al fracaso» José María Robaina Piegas
Lo más grave de todo esto es que esta situación, de principal responsabilidad del Estado pero tolerada por la sociedad, se asienta en un extendido sentimiento punitivo que le otorga a la cárcel el cometido primordial de provocar dolor. Como nos han dañado, entonces devolvemos sufrimiento con sufrimiento. El problema es que el circuito de sufrimientos no culmina en la cárcel: cada año egresan del sistema penitenciario más de 6.000 personas después de haber estado sujetas a violencia y sin haber adquirido hábitos de convivencia, por lo que sólo se puede esperar más violencia cuando obtengan la libertad y vuelvan al seno de la sociedad. Es urgente un cambio cultural a partir del cual se asuma que la función de la cárcel no puede ser la mera venganza, sino el intento de rescatar vidas. De generar un espacio en el que se puedan construir proyectos vitales que permitan una inserción social positiva como garantía de la paz. Claro que eso supone poner en el centro la dignidad de las personas y confiar en que pueden cambiar, que pueden volver a empezar, a gestar un futuro distinto. Se trata de reconocerles su condición de agentes morales y no de meros calculadores de costos y beneficios. Por las razones expuestas, una política de seguridad que sólo reprima, sin atender las causas del delito y sin orientar la gestión carcelaria en procura de la reinserción social del delincuente, está condenada al fracaso.
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Católicos con responsabilidades políticas FELIPE PAULLIER Médico, concejal (s) en el Municipio CH de Montevideo
“La política es una de las formas más elevadas de la caridad porque sirve al bien común”. Interpelados por esta frase del Papa Francisco, comenzábamos el “Encuentro de católicos con responsabilidades políticas al servicio de los pueblos del Cono Sur”, que se desarrolló del 10 al 12 de abril en Asunción del Paraguay.
M
ás de 80 pastores y políticos de Uruguay, Paraguay, Brasil, Argentina y Chile, compartimos durante casi tres días en este encuentro a partir de la convocatoria del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM) y la Pontificia Comisión para América Latina (CAL). En representación de nuestro país, tuve el gusto de compartir estos días junto al Cardenal Daniel Sturla, Arzobispo de Montevideo, el presidente de la Conferencia Episcopal Mons. Arturo Fajardo, Obispo de San José, y los políticos Nelson Villarreal, Carmen Asiaín, Daniel Radío y Luis Alberto Lacalle Herrera. En clave de Iglesia, durante tres intensas jornadas, compartimos conferencias, espacios de reflexión y asamblea, para dialogar entre políticos y pastores sobre la experiencia de laicos católicos que asumen responsabilidades en sus respectivas comunidades. Entre algunos de los objetivos del encuentro, estaba buscar las modalidades más adecuadas para el acompañamiento, sostén y alimento espiritual de los políticos en su compromiso social. Además, se buscaba alentar, desde la distinción entre comunidad eclesial y comunidad política, una mayor participación de los laicos comprometidos en la vida política, en la comunión y misión de la Iglesia. El de Asunción fue un encuentro inspirado en el entendimiento de la actividad política como una actividad de servicio. Fueron días para reflexionar y repensar conceptos como el del poder político, un poder que debe estar ordenado al servicio del bien común. Un bien común, definido por el Concilio Vaticano II a partir del magisterio de la Iglesia Católica, como el conjunto de condiciones de vida social con las cuales los hombres, la familia y las asociaciones,
Políticos y obispos uruguayos que participaron en el encuentro en Asunción.
puedan lograr con mayor plenitud y facilidad su propia perfección. No faltaron durante estos días reflexiones y debates respecto a la situación de la democracia en nuestro continente. Democracia que se ve amenazada no solo por el resurgimiento de regímenes autoritarios, sino también por una marcada caída del apoyo a la preferencia democrática como sistema, con un marcado aumento de ciudadanos indiferentes, como muestra, entre otras mediciones, el Latinobarómetro. Una democracia que es condición necesaria para la convivencia pacífica en nuestras diferencias y para la construcción social desde el diálogo y los puntos comunes. La lucha por el fortalecimiento de la democracia y la institucionalidad debe ser una obligación, casi un mandamiento, para cualquier católico en política. Surge en estos tiempos la necesidad de afrontar el desafío de la política imponiendo como valor determinante el de la dignidad de la persona humana, respetando la vida desde su concepción hasta la muerte en paz. Una actividad política que debe estar guiada por los valores de la solidaridad y la caridad, que plantea la necesidad de la cercanía con el rostro de los pobres y los excluidos, poniendo en el centro a las mujeres violentadas, a los drogadictos, a los ancianos, a los niños pobres. Una política en la que el principio de subsidiariedad debe guiar la gestión pública, entendiendo la colaboración entre los
DISTINTOS PARTIDOS POLÍTICOS Por Uruguay, participaron políticos de los partidos Independiente y Nacional, así como del Gobierno. Concurrió Daniel Radío, diputado independiente, y los nacionalistas Luis Alberto Lacalle Herrera (expresidente), Carmen Asiaín (senadora) y Felipe Paullier (concejal suplente en el Municipio CH de Montevideo). Asistió, asimismo, el secretario de Derechos Humanos, Nelson Villarreal.
distintos actores que interactúan en la construcción social. Una actividad política en la que la realidad debe tener primacía sobre la idea, en especial, en el rostro de los desvalidos y los excluidos. Y no se trata de tener desprecio a lo ideológico, todo lo contrario, se trata de entender a las ideas nutriéndose de la realidad. El objetivo del desarrollo humano integral debe ser el faro que ilumine el camino en política para un cristiano, sin perder nunca de vista que como políticos estamos llamados a la transformación. Debemos entender a la política como una actividad que pone en su centro la representación de los problemas comunes, sabiendo que debe solucionar los problemas de la gente porque si no, no sirve. Una actividad que, como católicos, debemos entender en la opción preferencial por los pobres, imponiendo la urgencia de los desafíos de la exclusión, la violencia, el narcotráfico y otros tantos, que como sociedad nos interpelan día a día. Una actividad que debe encontrarnos reconociendo las necesidades de nuestro pueblo para no perder el norte ni su esencia, que es la transformación social. Por último, una política que no pierda el valor de la esperanza como virtud movilizadora y transformadora. Y por sobre todo, una política que como Iglesia nos logre encontrar en nuestras diferencias, sin perder de vista que no hay que luchar por la unidad política de los católicos sino por su unidad católica.
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Origen católico de los derechos humanos Ing. Agr. ÁLVARO FERNÁNDEZ
Cuando escuchamos hablar de Derechos Humanos, tendemos a pensar en la Declaración de los Derechos Humanos de 1948, o bien en su precedente, la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano del año 1789. Pero a veces olvidamos que la historia del reconocimiento de los derechos humanos empezó mucho antes, de la mano de sacerdotes católicos.
E
l descubrimiento de América, y la expansión del Imperio español en territorios habitados por pueblos nativos, planteó una serie de problemas morales a los teólogos y juristas españoles. De acuerdo con María Elvira Roca Barea, que dice en su libro Imperiofobia y leyenda negra, que “desde que llegaron al Nuevo Mundo, en 1510, los dominicos tomaron sobre sí la defensa de los indígenas y la denuncia de las injusticias que con ellos se cometían.” En su sermón de Navidad de 1511 Fray Antonio de Montesinos cuestiona a sus fieles: “¿Con qué derecho y con qué justicia tenéis en tan cruel y horrible servidumbre a estos indios? Estos, ¿no son hombres? ¿No tienen ánimas racionales? ¿No estáis obligados a amarlos como a vosotros mismos?” Como respuesta a las denuncias, en 1512, se promulgaron las Leyes de Burgos, que fueron seguidas en 1513 por las Leyes de Valladolid. En 1542, se promulgan las Leyes Nuevas, que ponen a los indígenas bajo la protección de la Corona. Y en 1551 se reúnen en Valladolid los mejores teólogos y juristas del Imperio español, para discutir la moralidad y legalidad de sus acciones en territorio indiano. “Dejemos de lado —ironiza Roca Barea— la anomalía histórica que supone que un imperio en plena expansión detenga su maquinaria para discutir la legitimidad moral y legal de sus conquistas. (…) Puede el lector fatigar las leyes británicas y las actas parlamentarias —dice la historiadora—. En vano. No encontrará leyes sobre el trato debido a los indígenas en los territorios que se iban conquistando en Norteamérica o planes para su integración. Simplemente no existen. Nadie se plantea (los clérigos tampoco) que tengan alma, o que necesiten atención hospitalaria o que se pueda pactar con ellos” concluye la experta. A tal punto era sensible la conciencia del Emperador Carlos V respecto de los nativos americanos, que en 1549 antes de la Junta de Valladolid, estaba decidido a aban-
Francisco de Vitoria afirmó que todos los hombres son libres e iguales. PXHERE
«La historia del reconocimiento de los derechos humanos empezó de la mano de sacerdotes católicos» Álvaro Fernández
donar las Indias a sus antiguos señores, si se demostraba que su dominio era ilegítimo. Esa decisión no se ejecutó, gracias al dictamen de Fray Francisco de Vitoria, que si bien fue crítico, proveyó las bases morales para mantener la presencia de España en las Indias. Francisco de Vitoria Este brillante dominico, nació en Burgos en 1483, se doctoró en Teología en la Universidad de Paris en 1522, y fue Catedrático de Teología de la Universidad de Salamanca, desde 1526 hasta su muerte. Fue él quien puso los fundamentos del moderno Derecho Internacional, siendo además, el precursor de los Derechos Humanos. Sobre los
cimientos que él dejó, el jesuita Francisco Suárez, desarrollo su doctrina de la soberanía popular y los derechos humanos. Pero vamos por partes. En 1539, en su obra titulada De Indis, Vitoria aborda uno de los grandes problemas de su época: la donación por parte del Papa de las tierras conquistadas en el Nuevo Mundo, a la Corona española. ¿Es lícito —se pregunta Vitoria— que el Papa done tierras pobladas por infieles al poder temporal? De acuerdo con el Prof. Mariano Fazio, en su libro Historia de las Ideas Contemporáneas, para contestar a esta pregunta, Vitoria procura dar respuesta a tres problemas: si los nativos eran verdaderos dueños de esas tierras; si los títulos de propiedad usados por los conquistadores justificaban la ocupación de América; y si había argumentos legítimos que permitieran a la Corona reclamar el dominio. Vitoria responde a la primera cuestión sosteniendo que los nativos, “ejercen el uso de razón”, y que “la capacidad de dominio del hombre deriva de su condición personal, y en consecuencia, ningún pecado ni infidelidad (…) impide al hombre ser dueño de sus bienes”. Vitoria fundamenta así el título de dominio jurídico, sobre la naturaleza de la persona humana.
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«Desde que llegaron al Nuevo Mundo, en 1510, los dominicos tomaron sobre sí la defensa de los indígenas y la denuncia de las injusticias que con ellos se cometían» María Elvira Roca Barea
ción a imagen y semejanza de Dios; promovió la legítima autonomía del orden temporal, sin cortar las raíces que lo unen con la trascendencia; y abrió las puertas que permitieron a la cultura occidental, pasar del mundo medieval al mundo moderno.
A la segunda cuestión —si los títulos de propiedad de los conquistadores justifican la ocupación—, el dominico responde que “ninguna potestad temporal tiene el Papa sobre aquellos bárbaros ni sobre los demás infieles.” Vitoria rechaza la idea de un imperio universal, en el que el Papa delegaba en el emperador el poder temporal universal del cual era depositario. De este modo, rompe con la teocracia medieval, pero fiel a las enseñanzas de Santo Tomás de Aquino, afirma que “todos los hombres son por naturaleza, libres e iguales”. Así, el dominico defiende el orden natural, afirma la absoluta gratuidad del orden sobrenatural y establece la necesidad de evitar la coacción en materia de fe: “Aunque la fe haya sido anunciada a los bárbaros —dice Vitoria— y éstos no la hayan querido recibir, no es lícito, por esta razón, hacerles la guerra ni despojarlos de sus bienes”. Para el dominico, creer es una acción libre, y la fe, un don de Dios. Como buen discípulo de Santo Tomás, Vitoria advierte que la verdad de la fe cristiana, no se puede imponer por la fuerza, ya que no es lícito violar el íntimo sagrario de la conciencia personal. A la tercera cuestión —si era legítimo que la Corona reclamara el dominio de esas tierras—, Vito-
ria responde afirmando que existe “una comunidad internacional de la que forman parte todas las naciones en igualdad de derechos y cuyos miembros deben tender al bien común”. Justifica además lo que hoy llamamos “injerencia humanitaria”, poniendo por encima de las leyes positivas, las leyes de la humanidad fundadas en el derecho natural y divino: “a todos mandó Dios el cuidado de su prójimo, y prójimos son todos aquellos: luego, cualquiera puede defenderles de semejante tiranía u opresión.” Vitoria se refiere a la tiranía de los caciques de los pueblos indianos, y en particular a la práctica muy extendida, de la antropofagia y de los sacrificios humanos rituales, que año a año cobraban decenas de miles de víctimas inocentes. Ello se consideró razón suficiente para que el Imperio Español ejerciera el dominio de los territorios indianos, aunque por supuesto, la evangelización de los pobladores nativos, siempre fue el principal motivo de la expansión española en América. Vitoria logró integrar su humanismo cristiano —heredero de la mejor tradición escolástica y tomista—, con la apertura a las ideas propias de su tiempo y a la secularización de lo que de suyo, pertenece al orden temporal; fundamentó la dignidad del hombre en su crea-
Francisco Suárez Si Vitoria puso los cimientos del edificio de los derechos humanos contemplando la realidad de los nativos americanos, Francisco Suárez empezó la construcción del edificio a raíz del atropello de Jacobo I de Inglaterra contra los católicos ingleses e irlandeses. Suárez, sacerdote jesuita, teólogo, filósofo y jurista —también conocido como Doctor Eximio—, sostiene en sus obras —publicadas
a principios del Siglo XVII— que el Estado existe gracias al carácter social de la naturaleza humana. El Estado está integrado por individuos conscientes y libres que reconocen, mediante la razón, la necesidad de su existencia. El jesuita sostiene que la ley es un principio básico para regular el obrar humano. Pero la ley humana, debe ser respetuosa del Derecho Natural, de esa “ley que naturalmente existe en nosotros, y en virtud de la cual somos capaces de distinguir el bien y el mal". De Suárez proviene además, la idea de la soberanía popular. La vieja idea tomista de que “todos los hombres nacen libres por naturaleza”, él la complementa diciendo que si esto es así, “ningún hombre tiene poder político sobre el otro". Por ello defiende la libertad de cada comunidad para dotarse del régimen político que considere más oportuno. Para el Doctor Eximio, toda sociedad humana “se constituye por libre decisión de los hombres, que se unen para formar una comunidad política.” Suárez sienta así las bases de la democracia moderna, al sostener que el poder del gobernante, es otorgado por Dios a través de la comunidad. Por tanto, si el legítimo soberano actuara en contra del bien común y de las leyes del reino, se convertiría en un tirano. He aquí una brevísima síntesis del pensamiento de dos juristas y teólogos católicos, que sobre una base filosófica tomista, pusieron los fundamentos y los primeros ladrillos del Derecho Internacional, de los Derechos Humanos, y de la Democracia moderna.
SACERDOTES PIONEROS_
FRANCISCO DE VITORIA 1483-1546
FRANCISCO SUÁREZ 1548-1617
Fraile dominico, escritor y catedrático de la Universidad de Salamanca. Se destacó por sus ideas y contribuciones al derecho internacional y la economía moral basados en el pensamiento humanista.
Sacerdote jesuita, teólogo, filósofo y jurista. Una de las principales figuras de la Escuela de Salamanca, y generalmente considerada entre los mejores escolásticos después de Santo Tomás.
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Semana Santa del Papa Francisco Un resumen de cómo se vivió en el Vaticano la semana más importante para los cristianos
URBI TE ORBI Es una bendición papal dirigida a la ciudad de Roma y al mundo entero. Se la imparte en Roma durante el año siempre en dos fechas: el Domingo de Pascua y el día de Navidad. Se hace al mediodía desde el balcón central de la basílica de San Pedro.
La celebración de la Solemne Vigilia Pascual. DANIEL IBÁÑEZ/CNA ACI PRENSA
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a Misa Crismal concelebrada con los cardenales, obispos y presbíteros, la Misa de la Cena del Señor en un Centro Penitenciario afuera de Roma, el rito del lavatorio de los pies a los presos, la celebración de la Pasión del Señor con la predica del P. Rainiero Cantalamessa, el tradicional Via Crucis en el Coliseo Romano, la Solemne Vigilia Pascual, Misa de Pascua en la Plaza de San Pedro y el habitual mensaje Pascual previo a la Bendición “Urbi et Orbi” fueron las actividades del Santo Padre en esta Semana Santa. Misa Crismal El Jueves Santo por la mañana, el Papa celebró la Misa Crismal en la Basílica de San Pedro del Vaticano y animó a los sacerdotes a donarse con generosidad en su ministerio y a ser siempre cercanos a la gente. Junto al Obispo de Roma, concelebraron los Cardenales, los Obispos y los Presbíteros presentes en Roma. Durante la Celebración Eucarística, los sacerdotes renovaron las promesas realizadas en el momento de su ordenación y, después, se bendijo el óleo de los enfermos, el óleo de los catecúmenos y el crisma. El Pontífice explicó en la homilía
«la fe necesita ir de nuevo a Galilea, reavivar el primer amor con Jesús, su llamada» Papa Francisco
que el Evangelio de San Lucas presenta a Jesucristo “en medio de la multitud, rodeado y apretujado por la gente que le acerca sus enfermos, le ruega que expulse los malos espíritus, escucha sus enseñanzas y camina con Él”. El Papa animó a los sacerdotes a estar “con Jesús en medio de nuestra gente” para que el Padre “renueve en nosotros la efusión de su Espíritu de santidad y haga que nos unamos para implorar su misericordia para el pueblo que nos fue confiado y para el mundo entero”. Misa de la Cena del Señor El Jueves Santo, durante la Misa de la Cena del Señor del Jueves Santo y la ceremonia del lavatorio de pies, el Papa Francisco exhortó a
los fieles a ser siempre “hermanos en el servicio” como enseñó Jesús a sus apóstoles, y a dejar de lado la ambición de dominar al otro. La ceremonia se realizó en el Centro Penitenciario de Velletri, localidad italiana ubicada a 60 km del Vaticano. Durante la visita, el Papa fue recibido por las autoridades del centro y se encontró con reclusos, personal civil y agentes de policía de prisiones. “Hemos escuchado lo que hizo Jesús, era interesante. Dice el Evangelio: sabiendo Jesús que el Padre le ha dado todo en sus manos, Jesús tenía todo el poder y después comienza a hacer este gesto de lavar los pies. Es un gesto que hacían los esclavos”, dijo el Santo Padre al iniciar su homilía. Explicó que si bien el Señor “tenía el poder” realiza “el gesto de un esclavo y después aconseja” a sus apóstoles: “Hagan también este gesto entre ustedes”. “En otras palabras, sirvanse unos a otros, sean hermanos en el servicio, no en la ambición, como alguien que domina al otro o que pisotea al otro no, sean hermanos en el servicio”. Cada uno de nosotros debe ser el servidor de los demás. Esta es la regla de Jesús y la regla del Evangelio: la regla de servicio, no de dominar, de hacer el mal, de humillar a otros. ¡Servicio!”, recordó el Pontífice.
Tras su homilía, el Pontífice lavó los pies a doce reclusos de esta cárcel durante la Misa “in Coena Domini”. Según informó la Oficina de Prensa de la Santa Sede, los 12 detenidos proceden de 4 países diferentes: 9 son italianos, 1 de Brasil, 1 de Costa de Marfil y 1 de Marruecos. Al final de la celebración, después del saludo del Director del Departamento de Prisiones y un intercambio de regalos, el Papa regresó al Vaticano. La Pasión del Señor El 19 de abril, Viernes Santo, el Papa Francisco presidió la celebración de la Pasión del Señor en la Basílica de San Pedro en el Vaticano. En la Basílica desprovista de ornamentos e iluminada por una luz tenue en consonancia con la sobriedad de la ceremonia en la que no se celebró la Eucaristía, el Santo Padre, vestido de púrpura en recuerdo de la sangre de Cristo derramada en la Cruz, se postró en el suelo delante del altar para orar durante unos minutos. Tras esos minutos de silenciosa oración, acompañado de los fieles presentes , que estaban arrodillados, el Pontífice se puso de nuevo en pie para la liturgia de la Palabra en la que el Evangelio que relata la Pasión de Cristo fue leído completamente en latín. Además de la oración del Papa ante el altar, un momento de especial emotividad espiritual fue la adoración de la Cruz aclamada tres veces con las palabras “Mirad el árbol de la Cruz, donde estuvo clavada la salvación del mundo. ¡Venid a adorarlo!”. Al igual que en otros años, el predicador de la Casa Pontificia, P. Rainiero Cantalamessa, pronunció la homilía. Esta vez su prédica llevó por título “Despreciado y rechazado por los hombres”.
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Vigilia Pascual Al presidir el Sábado Santo la Vigilia Pascual en la Basílica de San Pedro, el Papa Francisco alentó a los fieles a “volver a un amor vivo” con Jesús y no tener “una fe de museo”. En su homilía, el Santo Padre aseguró que “la fe necesita ir de nuevo a Galilea, reavivar el primer amor con Jesús, su llamada: recordarlo, es decir, literalmente volver a Él con el corazón”. “Es esencial volver a un amor vivo con el Señor, de lo contrario se tiene una fe de museo, no la fe de pascua. Pero Jesús no es un personaje del pasado, es una persona que vive hoy; no se le conoce en los libros de historia, se le encuentra en la vida”. Al recordar cómo las mujeres llevaron aromas al sepulcro de Jesús muy temprano el domingo, pero temen que no puedan mover la piedra que lo sella, el Papa señaló que ese camino “se asemeja al camino de la salvación que hemos recorrido esta noche. Da la impresión de que todo en él acabe estrellándose contra una piedra: la belleza de la creación contra el drama del pecado; la liberación de la esclavitud contra la infidelidad a la Alianza; las promesas de los profetas contra la triste indiferencia del pueblo”. “Esta noche cada uno de nosotros está llamado a descubrir en el que está Vivo a aquél que remueve las piedras más pesadas del corazón. Preguntémonos, antes de nada: ¿cuál es la piedra que tengo que remover en mí, cómo se llama?”, señaló. Luego el Santo Padre recordó que las mujeres que fueron al sepulcro “ante la piedra removida, se quedan asombradas; viendo a los ángeles, dice el Evangelio, quedaron ‘despavoridas’ y con ‘las caras mirando al suelo’”. “No tienen el valor de levantar la mirada. Cuántas veces nos
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sucede también a nosotros: preferimos permanecer encogidos en nuestros límites, encerrados en nuestros miedos”, lamentó. Sin embargo, dijo, “el Señor nos llama a alzarnos, a levantarnos de nuevo con su Palabra, a mirar hacia arriba y a creer que estamos hechos para el Cielo, no para la tierra; para las alturas de la vida, no para las bajezas de la muerte: ¿por qué buscáis entre los muertos al que vive?”. El Papa aseguró que “Dios nos pide que miremos la vida como Él la mira, que siempre ve en cada uno de nosotros un núcleo de belleza imborrable. En el pecado, él ve hijos que hay que elevar de nuevo; en la muerte, hermanos para resucitar; en la desolación, corazones para consolar”. “No tengas miedo, por tanto: el Señor ama tu vida, incluso cuando tienes miedo de mirarla y vivirla. En Pascua te muestra cuánto te ama: hasta el punto de atravesarla toda, de experimentar la angustia, el abandono, la muerte y los infiernos para salir victorioso y decirte: ‘No estás solo, confía en mí’”. Domingo de Pascua El Papa Francisco presidió, el domingo 21 de abril, la Misa de la Pascua de Resurrección en la Plaza de San Pedro del Vaticano. Ante una multitud de 70.000 fieles, según datos de la Gendarmería Pontificia facilitados por la Sala de Prensa de la Santa Sede, el Santo Padre celebró la liturgia eucarística que comenzó con el rito del “Resurrexit”. El Papa no pronunció homilía, ya que, inmediatamente después de la Misa, pronunció su tradicional Mensaje Pascual previo a la Bendición “Urbi et Orbi”, a la ciudad de Roma y al mundo.
La bendición Urbi et Orbi el Domingo de Pascua. DANIEL IBÁÑEZ/CNA
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La postración del Papa en la celebración de la Pasión. DANIEL IBÁÑEZ/CNA
«No tengas miedo, por tanto: el Señor ama tu vida, incluso cuando tienes miedo de mirarla y vivirla» Papa Francisco
En su Mensaje Pascual, el Papa pidió rezar por el fin de las guerras en Siria, Yemen y Libia, por el fin de las injusticias en Venezuela y en Nicaragua, y por la paz entre israelíes y palestinos. Además, en su felicitación por la Pascua posterior a la bendición “Urbi et Orbi”, Francisco rezó por las víctimas del atentado terrorista que en la mañana de este domingo causó 200 muertos y cientos de heridos en diferentes iglesias y hoteles de Sri Lanka. Bendición Urbi et Orbi El Papa Francisco hizo una firme defensa de la paz en el mundo durante el tradicional mensaje Pascual previo a la Bendición “Urbi et Orbi”, a la ciudad de Roma y al mundo, que impartió el domingo 21 de abril, Domingo de Resurrección, en la Plaza de San Pedro del Vaticano. En su mensaje, el Santo Padre pidió el fin de los conflictos en Siria, Israel y Palestina, Libia, Sudán y Sudán del Sur, y Ucrania. En este sentido, recordó que “Cristo vive y se queda con nosotros. Muestra la luz de su rostro de Resucitado y no abandona a los que se encuentran en el momento de la prueba, en el dolor y en el luto”. Por eso, pidió que “sea esperanza para el amado pueblo sirio, víctima de un conflicto que continúa y amenaza con hacernos caer en la resignación e incluso en la indiferencia”. También en Oriente Medio, realizó una mención especial “para la gente de Yemen, sobre todo para los niños, exhaustos por el hambre y la guerra”. Además, solicitó a israelíes y palestinos “aliviar tanto sufrimiento y a buscar un futuro de paz y estabilidad”. En este sentido, animó a los cristianos de Oriente Medio a no dejar “de dar testimonio con paciente perseverancia del Señor resucitado y de la victoria de la vida sobre la muerte”.
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El relato del sacerdote bombero que rescató los tesoros de Notre Dame ACI PRENSA
El P. Jean-Marc Fournier es capellán de los bomberos de París. Cuando se desató el fuego en su catedral, acudió y se encargó de lo más importante: el rescate del Santísimo Sacramento y de algunas reliquias que se encuentran en el templo. “Me llamaron y llegamos rápido. Dos cosas me parecieron esenciales por cumplir. La primera era salvar el tesoro inestimable que es la Corona de Espinas y, claro que sí, a Jesús presente en el Santísimo Sacramento”, dijo el sacerdote al canal televisivo francés KTO.
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omo se recuerda, el lunes 15 de abril un incendio destruyó gran parte de la Catedral de Notre Dame de París. Para la reconstrucción, ofrecida por el presidente Emmanuel Macron para dentro de cinco años, ya se cuenta con más de 600 millones de euros ofrecidos por varias de las familias más ricas de Francia. “Al llegar a la catedral había mucho humo pero no estaba muy caliente. Había una especie de cascada de fuego, que se originó por la caída de la aguja” de más de 90 metros que colapsó sobre el techo del templo, relató el sacerdote. “Acompañado de un oficial superior, la dificultad para nosotros era encontrar a alguien que nos diera la combinación para abrir la caja fuerte o cofre donde se preserva las santas reliquias”, añadió. Tras unos momentos y “para preservar las reliquias, un equipo de bomberos se vio obligado a romper el relicario, pulverizándolo lamentablemente”. A continuación “las santas reliquias pudieron ser retiradas y preservadas en un espacio seguro bajo la protección de las fuerzas del orden, en este caso los funcionarios de la prefectura de policía”. El sacerdote explicó que en todos los trabajos participaron unos 400 bomberos, a quienes agradeció su labor; y explicó que cuando salvó el Santísimo Sacramento, le hizo un pedido especial al Señor. “Cuando el fuego llegó a la torre norte, yo salía con el Santísimo Sacramento. No quise solamente salir con Jesús sino que aproveché para hacer una bendición con Él. Yo estaba completamente solo en la
El incendio consumió parte del templo y conmocionó al mundo entero. FLICR/MANHHAI
JEAN-MARC FOURNIER SACERDOTE · CAPELLÁN DE LOS BOMBEROS DE PARÍS El padre Fournier comenzó su carrera como sacerdote católico en Alemania y luego se mudó al departamento de Sarthe en Francia. Se unió a la diócesis de las fuerzas armadas en 2004 y pasó siete años trabajando con el ejército en todo el mundo. En Afganistán estuvo involucrado en una emboscada en la que murieron 10 soldados.
catedral, en medio del fuego, las llamas, de las cosas que caían. Al hacer esta bendición, le pedí a Jesús que nos ayudara a preservar el templo”, narró el capellán. El P. Fournier resaltó que, al final, “no solo el fuego se detuvo sino que se preservó la torre norte, y al preservarla todo lo demás se pudo salvar”. El sacerdote también se refirió a la importancia de los objetos sagrados que rescató de entre las llamas. “Todos comprenden que la Santa Corona es una reliquia extraordinaria y única; y el Santísimo Sacramento es nuestro Señor presente realmente, su cuerpo, su alma, su divinidad y su humanidad. Ustedes pueden comprender que fue delicado ver esto entre las llamas. Al acompañar a los bomberos con frecuencia en su labor, veo los efectos del fuego, por lo cual decidí resguardar prontamente la presencia real de nuestro Señor Jesucristo”, subrayó. Va a renacer En esa entrevista, el sacerdote también reflexionó sobre lo sucedido y sobre el devenir. Comentó que “la catedral no desapareció completamente para los cristianos y va a renacer más bella y más fuerte después de la Resurrección de Nuestro Señor Jesucristo”. El sacerdote también conversó con el diario francés La Croix, al que
«Una vez que Jesús estaba a buen recaudo, seguí participando con otros diez bomberos, salvando objetos de valor de todas las capillas laterales» P. P. Jean-Marc Fournier
relató que “una vez que Jesús (el Santísimo Sacramento) estaba a buen recaudo, seguí participando con otros diez bomberos, salvando objetos de valor de todas las capillas laterales”. “La sacristía no estaba en peligro y el tesoro estaba protegido. No fueron evacuados sino hasta después en la noche por personal de ministerio de Cultura y la policía”, agregó. Después, concluyó, “pasé a saludar a todos en sus vehículos y volví a mi casa a las 3:00 de la mañana. Sentí que, para todos, este incendio no fue como los otros. La acción se hizo oración”.
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Datos sobre la catedral parisina Curiosidades sobre la obra maestra que se incendió el Lunes Santo
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EN LA VOZ DE_
CARD. GIANFRANCO RAVASI PRESIDENTE DEL PONTIFICIO CONSEJO PARA LA CULTURA
Las grandes Catedrales son cuerpos vivientes
"M Notre Dame es un prototipo de la arquitectura gótica. FLICR/MANHHAI ACI PRENSA
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a emblemática Catedral de Notre Dame (Nuestra Señora) es considerada una obra maestra de la arquitectura gótica universal y un destino obligatorio para los turistas que visitan la ciudad de París, en Francia. A continuación, un recuento de por qué es tan importante esta catedral para el mundo: 1. Es patrimonio de la humanidad La catedral fue designada “Patrimonio de la Humanidad” por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) en 1991. 2. Es el templo más visitado de Europa Recibe al año cerca de 13 millones de personas provenientes de todo el mundo (un promedio anual de más de 30.000 personas al día). En los días de mayor afluencia puede albergar hasta 50.000 peregrinos y visitantes. La entrada es gratuita. 3. Ha sido escenario de acontecimientos históricos En el recinto ocurrieron acontecimientos históricos como la coronación de Enrique VI de Inglaterra en 1429 y la de Napoleón Bonaparte en 1804. Además, en esta catedral fue beatificada Juana de Arco en 1909.
4. Su construcción tomó más de 180 años La construcción de Notre Dame en la Île de la Cité, una pequeña isla en el centro de París rodeada por las aguas del río Sena duró 182 años. Comenzó en el 1163 y se concluyó en el 1345. En el lugar donde está ubicada existió antes una catedral románica. Allí mismo fue edificada la primera iglesia cristiana de París, la Basílica de Saint-Etienne, alrededor del año 528. 5. En su interior se encuentra la Corona de Espinas que habría usado Jesús La corona de espinas que habría usado Jesús es una de las reliquias más importantes de la cristiandad y se encuentra en la Catedral de Notre-Dame, junto con un pedazo de la Cruz y un clavo de la Pasión. 6. Es escenario de una famosa novela de Victor Hugo La catedral también es escenario de la famosa novela de Victor Hugo “Nuestra Señora de París”, que fue publicada en 1831. El libro cuenta la historia de Cuasimodo, que se enamora de una gitana de nombre Esmeralda. El éxito de la novela provocó una seria conciencia del valor de este recinto. 7. Tiene uno de los órganos más prestigiosos del mundo El órgano principal de la catedral es un destacado instrumento obra de Aristide Cavaillé-Coll, uno de los
fabricantes de órganos más importantes del siglo XIX. El instrumento tiene cinco teclados de 56 notas, un pedal de 32 notas, 109 juegos, 111 registros y 7.374 tubos. 8. Contiene obras de arte invaluables En su interior yacen obras maestras como “La visitación” de Jean Jouvenet de 1716 y “Santo Tomás de Aquino, fuente de la sabiduría” por Antoine Nicolas, de 1648, entre las más emblemáticas. 9. Su techo estaba lleno de abejas Según el sitio oficial de la Catedral de Notre Dame, en la primavera de 2013 se formó una colmena en el techo de la sacristía. Desde entonces, el templo está asociado con la preservación de la biodiversidad y tiene como deseo recordar la belleza de la Creación y la responsabilidad del hombre sobre la naturaleza. 10. El edificio posee grandes dimensiones La parte más alta del templo era la flecha del centro de 96 metros de altura. Las dos torres laterales medían 69 metros mientras que el techo tenía una altura de 43 metros. La longitud total del inmueble es de 128 metros por 12 de ancho. La fachada occidental tiene un ancho de 40 metros con una superficie total de 4.800 metros cuadrados.
e impresionaba de manera sugestiva el hecho de que muchos parisinos, también turistas, frente a las cámaras televisivas, llorasen por este suceso. Y esto manifiesta que la Catedral, las grandes Catedrales, las grandes Basílicas, son cuerpos vivientes. La historia de la construcción de la Catedral Notre Dame es en realidad, la de una persona que por medio de su vida asume sufrimientos, heridas, a veces parece que se encuentra bajo el umbral de la muerte y, sin embargo, continuamente renace, revive. Pensemos que esta realidad, como está ahora, se construyó en 1800 por Viollet le Duc. Ese continuo vivir por medio de intervenciones arquitectónicas muy diferentes, y a veces por medio de reestructuraciones radicales. El Pontificio Consejo de la Cultura asumió, en tiempos del Papa Benedicto XVI, la Pontificia Comisión de Bienes Culturales que tiene un vínculo con todo el horizonte de todo este inmenso patrimonio eclesial. Es un patrimonio que, incluso si no es propiedad de la Iglesia, como es el caso de la Catedral de Notre Dame, que es de propiedad del Estado Francés, permanece siempre como una criatura viviente en la cual se celebra la liturgia en la cual se hace el encuentro de Fe, y donde incluso los no creyentes entran para hacer un itinerario de belleza”. (Palabras pronunciadas en una conferencia de prensa en el Vaticano).
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Un Domingo de Pascua muy triste en Sri Lanka Hasta ahora los atentados dejaron más de 320 muertos y unos 500 heridos.
7%
De los srilanqueses creen en Jesucristo y constituyen una minoría.
ACI PRENSA
E
ste Domingo de Pascua dos iglesias católicas, un templo evangélico y cuatro hoteles en Sri Lanka fueron blanco de atentados terroristas que han dejado hasta el momento más de 320 muertos y unos 500 heridos. Esta serie de atentados, conjuntamente coordinados, se produjeron cuando los fieles celebraban la Misa por el Domingo de Resurrección, el día más importante para el cristianismo. Horas después de estos atentados la Policía informó de un ataque suicida contra un suburbio al norte de Colombo que dejó otros tres muertos. Una de las iglesias atacadas es el Santuario de San Antonio. Se trata de uno de los edificios cristianos más emblemáticos de Sri Lanka y un santuario nacional bastante concurrido. Esta y los tres hoteles, se encuentran en la ciudad de Colombo y son lugares muy frecuentados por turistas. La otra iglesia atacada fue la de San Sebastián, en Negombo, una ciudad mayoritariamente católica en el norte del país. El tejado de esta iglesia se derrumbó como consecuencia de la explosión, las ventanas y puertas también se vieron tremendamente dañadas. También fue atacado un templo evangélico de la localidad de Batticaloa, ubicada a unos cientos de kilómetros de donde se produjeron las otras explosiones. La Policía local informó que las primeras explosiones se produjeron casi de forma consecutiva entre las 8:45 y las 9 de la mañana, hora local, afectando a los templos donde precisamente se celebraba Misa. Sri Lanka tiene cerca de 22 millones de habitantes. Los cristianos representan el 7% de la población, mientras que los budistas son el 70%, los hinduistas el 15% y los musulmanes el 11%. Los hechos se repiten Esta no es la primera vez que los cristianos son atacados en Semana Santa en un país donde son minoría. El 9 de abril de 2017, en Domingo de Ramos, 30 personas fueron asesi-
El Santuario de San Antonio en Colombo fue una de las iglesias atacadas. WIKICOMMONS
70%
De los habitantes de Sri Lanka profesan el budismo, la principal religión del país.
15%
Practican el hinduismo, la segunda religión más importante en Sri Lanka.
11%
Confiesan el islam, que llegó a la isla de la mano de comerciantes árabes. .
nadas y al menos 70 quedaron heridas en un ataque suicida a la iglesia copta de Tanta (Egipto). Otro terrorista suicida atentó contra la iglesia de San Marcos en el distrito de Manshyia en Alejandría, dejando 16 muertos y 66 heridos. El 27 de marzo de 2016, en un Domingo de Pascua, al menos 75 personas fueron asesinadas y otras 340 quedaron heridas en el atentado suicida contra el parque Gulshan-e-Iqbal, en Lahore (Pakistán), donde los católicos celebraban la Resurrección de Cristo. También murieron varios musulmanes que se encontraban en el lugar. El 2 de abril de 2015, Jueves Santo, terroristas musulmanes ingresaron a la Universidad de Garissa, en Kenia, y asesinaron a 148 estudiantes cristianos, dejando también más de 70 heridos. El Papa muestra su cercanía con las víctimas El Papa Francisco mostró su tristeza por las víctimas del brutal atentado en varias iglesias y hoteles de Sri Lanka donde se estaba celebrando la Pascua.
«Confío al Señor a todos los que han fallecido trágicamente y rezo por los heridos como consecuencia de este dramático suceso» Papa Francisco
“He tomado con tristeza la noticia de los graves atentados que, precisamente hoy, día de Pascua, han llevado luto y dolor a algunas iglesias y otros lugares de reunión en Sri Lanka”, dijo al finalizar la bendición Urbi et Orbi en la Plaza de San Pedro del Vaticano. “Deseo manifestar mi afectuosa cercanía a la comunidad cristiana, golpeada mientras estaba reunida en oración, y a todas las víctimas de esta cruel violencia”, agregó.
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VIDA CULTURAL
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Risen: Sed de Misterio La resurrección de Cristo (Risen) está disponible en Netflix LAURA ÁLVAREZ GOYOAGA
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ras el Domingo de Resurrección, comienzan la Octava de Pascua (ocho días para contemplar la Resurrección) y el Tiempo Pascual (50 días en los que recordamos el tiempo que Jesús permaneció con los apóstoles antes de la fiesta de la Ascensión). La Pascua es tan importante, que un solo día no nos alcanza para festejarla. El Misterio de la Eternidad se hace presente en nuestras historias humanas, y nos invita a cambiar la perspectiva. La obra de arte, en sus diversas materializaciones posibles, es siempre un camino para acercarnos a la trascendencia; y entre las posibles obras de arte al alcance de nuestra contemplación, el cine tiene sus propuestas. Para que quienes ya la vieron vuelvan a acercarse a ella desde
una mirada diferente, y para que quienes todavía no la conocen puedan disfrutarla, ahora está disponible en Netflix La resurrección de Cristo (Risen en su título original). Se trata de una película épica-bíblica del año 2016, una superproducción del sello de Sony Pictures Affirm Films. El personaje principal (interpretado por Joseph Fiennes, protagonista de mega éxitos como Shakespeare enamorado y Elizabeth) es Clavius, un poderoso tribuno romano, quien debe encontrar información para acallar los rumores acerca de un mesías judío supuestamente resucitado, para evitar así una inminente revuelta popular. A partir de una especie de investigación policial, el protagonista, un romano escéptico, va persiguiendo sospechosos, interrogando testigos, sobornando informantes, exhumando cuerpos, obteniendo confe-
LIBROS RECOMENDADOS_
SABIDURÍA DE UN POBRE ELOI LECLERC En este gran clásico de la literatura espiritual, el franciscano Eloi Leclerc lleva a cabo una entrañable relectura de la "sabiduría" del Pobrecillo de Asís, llena de fuerte sensibilidad poética y con una perspectiva totalmente actual.
siones, para cumplir con su objetivo. A medida que sus esfuerzos aumentan, ve que el misterio se profundiza. Fiennes se luce en su interpretación de un hombre lentamente transformado por los eventos que sacuden sus convicciones acerca del mundo, y de su propio lugar como parte de la humanidad. Es un sujeto cuya búsqueda “profesional” se va transformando paulatinamente en una búsqueda de la Verdad, y el verdadero significado de la existencia. El realismo y la reconstrucción histórica agregan su cuota de interés. Acompañado por su segundo al mando. Lucius (Tom Felton, conocido por interpretar a Draco Malfoy en la saga de Harry Potter), Clavius nos introduce en verosímiles locaciones gráficas: las tumbas colectivas, los cuerpos de los ejecutados por los romanos, la crudeza de la guerra, la organización y la acción
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RELATOS DE UN PEREGRINO RUSO Si bien tiene su origen en el cristianismo ortodoxo, los Relatos de un peregrino ruso son uno de los grandes textos espirituales de la humanidad. Como tal su mensaje y su propuesta resuenan más allá de la tradición concreta que alumbró la obra.
del ejército romano en batalla. Y cuando se encuentra frente a frente con el resucitado Yeshua (como se lo nombra en el film), el desconcierto deja lugar a la admiración, el asombro… y la esperanza. Esto de contemplar la Resurrección focalizándola desde la visión de un tribuno romano, de corazón duro, la vuelve más comprensible para el espectador occidental. Nosotros hoy nos parecemos mucho a los romanos del siglo I, ciudadanos de un pueblo que se ha apartado de las virtudes que lo hicieron grande. Al mismo tiempo que reflexionamos acerca de esta espiritualidad sin religión del siglo XXI, también reconocemos como propios de nuestra época, el escepticismo, mezclado con la nostalgia y la esperanza, que alberga el corazón pagano de Clavius: es la necesidad insoslayable del encuentro de fe.
CERRITO 473
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EL HOMBRE EN BUSCA DE SENTIDO VIKTOR FRANKL
LLEGARÁ UN DIA EN EL QUE SERÁS LIBRE VIKTOR FRANKL
Es el estremecedor relato en el que Víktor Frankl narra su experiencia en los campos de concentración. Es mucho más que el testimonio de un psiquiatra, es una lección existencial.
En su libro anterior, el autor dejó una lección existencial. Lo que le ocurrió los meses posteriores tras su liberación permaneció oculto para la mayoría de sus lectores. Esta obra es complemento y continuación de la anterior.
30 ENTRE TODOS 27 de abril de 2019
EVANGELIO DOMINGO 28 DE ABRIL, II DE PASCUA
Creer sin ver EVANGELIO SEGÚN
SAN JUAN (20, 19-31) Al atardecer de ese mismo día, el primero de la semana, estando cerradas las puertas del lugar donde se encontraban los discípulos, por temor a los judíos, llegó Jesús y poniéndose en medio de ellos, les dijo: "¡La paz esté con ustedes!" Mientras decía esto, les mostró sus manos y su costado. Los discípulos se llenaron de alegría cuando vieron al Señor. (...) Tomás, uno de los Doce, de sobrenombre el Mellizo, no estaba con ellos cuando llegó Jesús. Los otros discípulos le dijeron: "¡Hemos visto al Señor!" Él les respondió: "Si no veo la marca de los clavos en sus manos, si no pongo el dedo en el lugar de los clavos y la mano en su costado, no lo creeré." Ocho días más tarde, estaban de nuevo los discípulos reunidos en la casa, y estaba con ellos Tomás. Entonces apareció Jesús, estando cerradas las puertas, se puso en medio de ellos y les dijo: "¡La paz esté con ustedes!" Luego dijo a Tomás: "Trae aquí tu dedo: aquí están mis manos. Acerca tu mano: Métela en mi costado. En adelante no seas incrédulo, sino hombre de fe." Tomás respondió: "¡Señor mío y Dios mío!" Jesús le dijo: "Ahora crees, porque me has visto. ¡Felices los que creen sin haber visto!"...
Padre KRZYSZTOF PACHOLAK
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espués de su resurrección, Jesús debe luchar nuevamente con la incredulidad de los discípulos. Un ejemplo de esta incredulidad es la figura de Tomás. Él tiene el corazón sensible a Jesús y a sus secretos más profundos. Pero también es un hombre realista y práctico. Confía en su razón, y como otros discípulos, ha puesto grandes esperanzas en Jesús: fue a quien le dedicó su vida, en quien encontró en él el significado de la misma. Después de la muerte de Jesús, quedaron la decepción y el vacío existencial. Tomás se decepcionó de Jesús, y por segunda vez no quiso arriesgar su fe, incluso ante el testimonio de diez hombres que aseguraban que lo habían visto. Tocar el cuerpo y las heridas de
Jesús es signo de relación personal. Intimidad, vínculo y confianza se expresan en este gesto. En Tomás, se derrite una actitud excesivamente crítica. Ya no confía en sí mismo, sino que se entrega totalmente a Jesús, su Señor y Dios. Su fe "va" desde la razón hasta el corazón, desde la etapa de la racionalidad hasta la de la confianza. Jesús opone la fe de Tomás a la de aquellos que no han visto y creen, y los llama bienaventurados. Esta bendición se aplica a todos nosotros. En nuestra vida hay momentos en los que no vemos, no sentimos, no experimentamos y, sin embargo, creemos que estamos en las manos de Dios. Son las experiencias de la oscuridad en las que no sentimos su presencia, no encontramos consuelo, no vemos la luz. Y, sin embargo, por medio de la gracia de Dios, permanecemos en la fe y enfrentamos las mayores adversidades.
DOMINGO 5 DE MAYO, III DE PASCUA
Jesús nos renueva EVANGELIO SEGÚN
SAN JUAN (21, 1-19) Jesús resucitado se apareció otra vez a los discípulos a orillas del mar de Tiberíades. Sucedió así: estaban juntos Simón Pedro, Tomás, llamado el Mellizo, Natanael, el de Caná de Galilea, los hijos de Zebedeo y otros dos discípulos. Simón Pedro les dijo: "Voy a pescar." Ellos le respondieron: "Vamos también nosotros." Salieron y subieron a la barca. Pero esa noche no pescaron nada. Al amanecer, Jesús estaba en la orilla, aunque los discípulos no sabían que era él. Jesús les dijo: "Muchachos, ¿tienen algo para comer?" Ellos respondieron: "No." Él les dijo: "Tiren la red a la derecha de la barca y encontrarán." Ellos la tiraron y se llenó tanto de peces que no podían arrastrarla. (...) Después de comer, Jesús dijo a Simón Pedro: "Simón, hijo de Juan, ¿me amas más que estos?" Él le respondió: "Sí, Señor, tú sabes que te quiero." Jesús le dijo: "Apacienta mis corderos." Le volvió a decir por segunda vez: "Simón, hijo de Juan, ¿me amas?" Él le respondió: "Sí, Señor, sabes que te quiero." Jesús le dijo: "Apacienta mis ovejas." Le preguntó por tercera vez: "Simón, hijo de Juan, ¿me quieres?" Pedro se entristeció de que por tercera vez le preguntara si lo quería, y le dijo: "Señor, tú lo sabes todo; sabes que te quiero"...
Padre KRZYSZTOF PACHOLAK
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sa noche, Pedro y sus compañeros no pescaron nada. Experimentaron el fracaso. Sin embargo, los apóstoles confiaron en Jesús y echaron las redes en el lado derecho de la barca y la pesca superó sus expectativas. El Señor cambió todo en un momento. Esta historia está llena de símbolos. El evangelista Juan originalmente combina una pesca maravillosa con una comida de Pascua. Dos eventos muy importantes al comienzo de la vocación de Pedro, que le dan sentido a su misión. No está solo en su lucha. Cristo está con él, en medio de su debilidad. Quizás más importante que la pesca milagrosa es lo que sucede después de un tiempo. La "confesión" del primer Papa, el diálogo que Jesús lleva con él a la orilla del lago. El maestro pregunta tres veces por el amor. Pedro negó a Jesús tres veces, pero también dijo tres veces: “Señor, tú
sabes que te quiero”. Parafraseando, podríamos agregar a estas palabras algo más: “Tú conoces mi corazón y aunque tengo mucho miedo, me encomiendo a ti”.Es una de las frases más bellas del Evangelio. Esta escena muestra que la fuente de nuestro llamado es el amor de Jesús. Cristo fue el primero en confesarnos su amor durante la última cena, y luego lo confirmó muriendo en la cruz. Los apóstoles regresaron a la orilla del mar y a sus barcas. Jesús, sin embargo, fue atrás de ellos después de su resurrección. Vino y renovó todo en ellos, resucitando en ellos la esperanza y el amor.
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AGENDA
9, 10 Y 11 DE MAYO Encuentros Casa de Todos
INTENCIÓN DEL PAPA FRANCISCO PARA MAYO Este mes, el Papa pide rezar por la siguiente intención universal: " Para que, a través del compromiso de sus miembros, la Iglesia en África sea un fermento de unidad entre los pueblos, un signo de esperanza para este continente".
FIESTA DE SAN FELIPE Y SANTIAGO
SÁBADO 11 DE MAYO
SÁBADO 4 DE MAYO Parroquia Nuestra Señora de Fátima (Cerro)
Catedral Metropolitana
Ituzaingó 1373 esq. Rincón
JUEVES 9 DE MAYO
TEXTOS SAGRADOS, KABBALAH Y PENSAMIENTO JUDÍO
Cno. Gral. Leandro Gómez 3856 esq. Martirene
16:00
11:00 P. San Ignacio de Loyola P. Nuestra Señora del Carmen (Toledo Chico)
Dr. José María Silva 3980
P. San José y San Maximiliano Kolbe (Conventuales)
Canelones 1156 esq. Héctor Gutiérrez Ruiz 20:00
Alejo Rosell y Rius 1603 esq. Feliciano Rodríguez 16:30
14:00 Colegio Los Maristas (Punta Carretas)
Capilla San Francisco 19:00
Este año la fiesta de los patronos de Montevideo se celebra con oración: a las 19 horas en la Catedral habrá adoración y Misa.
Cerrito y Solís
Belloni 6121 esq. Baltar
Viernes 3 19:00
P. Nuestra Señora de Guadalupe (Casavalle)
Bélgica 1765 esq. Chile 17:00
P. San Francisco de Asís (Ciudad Vieja)
A. Millán 4181
José Ellauri 527 esq. Gral. Gregorio Suarez
15:00
17:00
P. Nuestra Señora del Sagrado Corazón y Santa Rita
P. Santa Magdalena Sofía Barat (Aires Puros)
Besares 3567 Mariano Estapé
José Batlle y Ordóñez 4667 esq. Ibirocahy
Colegio y Liceo Mariano
16:00
18:00 Martes 7 19:45 a 21:45 Universidad Católica
Av. 8 de octubre 2738
VIERNES 10 DE MAYO Santuario Nacional de María Auxiliadora (Villa Colón)
Lezica 6375 esq. Veraguas
P. San Lorenzo (Manga)
Camino Repetto 3937 esq. Con. Paso de La Española 16:00
P. Nuestra Señora del Rosario de Pompeya (Piedras Blancas)
C Helvecia 4293 esq. A.de Lima 18:00
18:30 P. Santísima Trinidad y de la Sagrada Familia (Bella Italia)
educacioncontinua@ucu.edu.uy
Octavo curso de la Cátedra de Judaísmo Nisso Acher de la Universidad Católica, que se desarrollará del 7 de mayo al 26 de noviembre en la sede central de la UCU. El curso es una realización conjunta de la UCU y el Comité Central Israelita del Uruguay, con el apoyo de la Confraternidad Judeo-Cristiana del Uruguay.Se puede participar en modalidad presencial y también a distancia. Inscripciones abiertas por correo electrónico o por teléfono: 2487 2717 int. 6390.
P. De la Asunción y San Carlos Borromeo (Atahualpa)
Camino Maldonado 5842 esq. Pbro. José Raúl Porto
Avenida Millán 3307 y Cisplatina
16:00
P. San Pedro Apóstol (Buceo)
José Leguizamón 3684 19:45
15:00 y 19:00 Parroquia María de Nazaret Reina de la Paz (Unión)
DOMINGO 12 DE MAYO Parroquia Santa Elena (Buceo)
Av. 18 de Julio 1531
Bulevar José Batlle y Ordóñez 2645 esq. Dr. Turenne
20:00
16:00
10:00
P. Nuestra Señora del Carmen (Iglesia del Cordón)
Rivera 4212 esq. Juan M. Espinosa
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LA IGLESIA EN FOTOS
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Los símbolos del cirio pascual
Luz El Cirio Pascual representa a Cristo resucitado. “La luz verdadera que ilumina a todo hombre que viene a este mundo” y que disipa la oscuridad (muerte).
Alfa y Omega Las letras Alfa y Omega, la primera y la última del alfabeto griego, indican que la Pascua de Cristo, principio y fin del tiempo y de la eternidad, nos alcanza con fuerza siempre nueva en el año concreto en que vivimos. 2.
Llama El fuego representa una imagen viva de la Resurrección, del hombre que abandona el pecado y nace a una vida nueva. También remite a la fe, que todos recibimos y compartimos.
Año El año actual simboliza a Dios en el presente, y como Amo y Señor de toda la eternidad.
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4. Cinco granos de incienso Se incrustan en el cirio como clavos y representan las cinco llagas de Jesús: los tres clavos que le atravesaron las manos y los pies, la lanza clavada al costado derecho del torso y las espinas sobre su cabeza.
Cruz La cruz es siempre el símbolo central, es el camino que se debe tomar, al igual que Cristo, para llegar al Padre.
5. STAFF Redacción Responsable: Carolina Bellocq · Redacción: Camilo Genta, P. Krzysztof Pacholak, Pablo Podestá, Santiago Silva Ledesma Diseño: Agustín González · Fotografía: Federico Gutiérrez Administración: Enrique Martínez · Secretaría: Lelia Leal Publicidad: Martín Bazzino (098888181)
NÚMERO 447 Impresa el 25 de abril de 2019 por El País SA (D.L 375.579) Próximo número: Sábado 11 de mayo
COLABORADORES
SUSCRIPCIONES
P. Gonzalo Abadie, Laura Álvarez Goyoaga, P. Marcelo Coppetti, Álvaro Fernández, Mons. Pablo Jourdan, Diác. Víctor Hugo Méndez, Felipe Paullier, José María Robaina
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