A18 VOL 750
CULTURA Por Iris Violeta
L
os primeros africanos llenales del siglo 16. En su mayoría, eran descendientes de las culturas sudanesa y bantú. Los bantús eran de Angola, Mozambique y del Congo. Los sudaneses eran yorubas y de algunas tribus islamitas. Los expertos ción del negro, a la cultura musical de América, proviene del yoruba. Bailaba el negro para divertirse, en sus ritos religiosos, y para comunicarse entre ellos. La Bomba puertorriqueña proviene del área costanera. Los mejores bailadores de Bomba eran de Guayama, Salinas, y Ponce, especialmente del barrio del Coquí, Jobos y Arroyo. Los bailes de Bomba son: Siká, Leró, Coembé, Kalindá, Holandés y Yubá. El Kalindá se baila, con dos mujeres y un hombre, bailando a un ritmo de complejas variaciones. La Bomba puertorriqueña, está compuesta, de frases cortas, y de un ritmo impetuoso, vibrante, variado y complejo. La improvisación es parte del baile, el tocador, muchas veces, no sabe el ritmo a tocar hasta que el cantador comience indicándoselo. El baile de Bomba, siempre termina, cuando se escucha la frase, “Bambula Eh”. La Bomba es música de tambores. Hay tambores en forma de cono, altos y bajos, los hay pequeños, redondos y grandes. El tambor tiene en la parte superior, un cuero de chivo, pinchado con aros de metal, y para mantener el cuero estirado, varias vueltas de sogas amarradas a su alrededor. En algunos pueblos en la Isla, se les da sexo a los tambores, “tambor macho, tambor hembra”; en otros pueblos,
La Bomba puertorriqueña
“el segundo y el requinto”, uno le siguió la Plena, música de raíces blancas y negras. La Plena no es un baile blanco ni negro, es un baile amulatado, criollo. En la Isla de Puerto Rico existe una fábula sobre la abolición de la esclavitud, y cómo se consiguió sin derramar ni una gota de sangre, pero la realidad es lo contrario. La historia de Puerto Rico relata, que las sublevaciones de los esclavizados comenzaron en el 1527. Desde el 1664, se estableció el pueblo de Cangrejos, con una población de negros libres, fugitivos de otras islas. Al esclavizado que se fugaba, se le llamaba cimarrón y era un delito ayudarlo. Si el cimarrón era capturado, el castigo era variado, entre azotes, el corte de manos o la muerte. En el 1868, el esclavizado negro, se unió a la revolución de Lares, luchando unido al resto del pueblo. Para controlar y disminuir la fuerza luchadora del jíbaro, el
gobierno español, optó por la abolición de la esclavitud, y en el 1873, la abolición de la esclavitud en Puerto Rico se hizo realidad. Se puede decir que, si eres oriundo de Puerto Rico, de padres puertorriqueños, eres un criollo, un mestizo. Eres una mezcla de yoruba, bantú, dehomeyana, española y taína. Si le interesa este tema, le recomiendo leer sobre la historia de Puerto Rico, hay un gran número de libros disponibles sobre este tema. * Esclavo/a (condición intrínseca de la persona). Esclavizado/a (condición impuesta por otro)
Del 5 al 11 de febrero de 2021
25
“Los abismos” de Claudia de Colombia Por Mary Luz Marques
L
a escritora colombiana Pilar Quintana, bajo el seudónimo de Claudia de Colombia, ganó el Premio Alfaguara de Novela 2021, galardón literario que otorga el Grupo Editorial Penguin Random House, por su novela “Los abismos”. La ceremonia virtual se llevó a cabo el pasado 21 de enero, desde la Casa de América en Madrid, España. Quintana agradeció al comité organizador este que “la literatura es el único lugar donde un escritor puede ser lo que quiere ser y puede decir lo que le apetece decir”. “Este medio – añadió–, ha sido mi refugio para poder ser yo misma y poder ser libre”. La autora, de 49 años, mencionó que en su estilo literario le gusta explorar la imaginación, siendo las experiencias de la vida su fuente directa para construir una historia. Su carrera literaria se remonta a los tiempos en que trabajaba como guionista de televisión; este entorno le permitió aprender cómo escribir diálogos. Quintana resalta que el universo narrativo de una obra es el espacio en donde se crean los personajes reales, en un tiempo y lugar determinado. La novela ganadora es narrada por Claudia, una niña que trata de entender
tre sus padres, sin perder su infancia visionaria. Situada en los años 80s, en Cali, Colombia, la historia presenta símbolos de consciencia colectiva como el miedo irracional a la muerte y a la orfandad. Quintana asegura que el hecho de haber sido madre a los 43 años le abrió un caudal literario que fue convirtiendo poco a poco que su búsqueda de madurez como escritora la obligó a reescribir el borrador de esta obra muchas veces, porque sentía que todavía tenía cosas que profundizar en la narración. Hija de una generación de mujeres que no tuvieron la opción de estudiar –porque las reglas de la sociedad las encajaba en el rol de madre de familia–, Quintana le quita los velos a la maternidad y a sus retos. Agrega que desde pequeña se sintió fea porque no formaba parte del estereotipo de belleza ideal; y como una forma de rebeldía, empezó a lucir libremente su pelo crespo para explorar su propia belleza. Su novela anterior “La perra” ha sido traducida a 12 idiomas y pronto será publicada en 8 lenguas más. Contacto: LinkedIn @ maryluzmarques, Twitter @maryluz_marques