9 minute read

4.1. El sujeto femenino múltiple: ama de casa y trabajadora

El siglo XX, marcado por los constantes conflictos bélicos90 , supuso un cambio en el paradigma social y cultural, pero también en el plano laboral. La mujer salía por primera vez del espacio doméstico para ocupar los puestos de trabajo abandonados por los hombres, forzosamente reconvertidos en soldados a causa de la propaganda patriótica y la necesidad de masa combatiente. Las mujeres tenían una doble responsabilidad; el rol del sujeto femenino decimonónico seguía estando vigente, pero se desdoblaba en dos facetas: el cuidado doméstico y el cuidado de la nación, trabajando en las fábricas del frente interno o como voluntarias en el ejército91 . En España, en 1930 solo el 10% de las mujeres españolas estaban registradas como trabajadoras, de las que la gran mayoría eran solteras o viudas. Se dedicaban exclusivamente a profesiones relacionadas con los cuidados y la educación: eran maestras, enfermeras o empleadas domésticas92 . La inclusión de la mujer en el tejido fabril contribuyó a la masificación del movimiento feminista, más allá de los círculos intelectuales y herméticos en los que se movía la Primera Ola93, relacionada con la innovación política de la Revolución Francesa y representada por obras como “Vindicación de los derechos de la mujer” (1792) de Mary Wollstonecraft y “Declaración de los derechos de la mujer y de la ciudadana” (1791) de Olimpia de Gouges. La Segunda Ola feminista tuvo su mayor repercusión en la primera década del siglo XX. El movimiento de las sufragistas británicas o suffragettes, con un marcado carácter interclasista, tenía como objetivos el sufragio femenino (fig. 24) y el acceso a la educación, que se conseguirían mediante la igualdad legislativa94. En Inglaterra, el sufragio universal llegaría con la feminización de la economía tras la Primera Guerra Mundial, como una concesión por haber sostenido al Imperio británico durante el conflicto95 . En España, el derecho a voto se legalizaría con la Segunda República Española (1931-1939), mediante sufragio pasivo96 en 1931 y sufragio activo en 1933. En esta etapa política también se conquistaron otros derechos, como la reforma del Código Civil para otorgar cierta independencia a la mujer casada o la inclusión del divorcio y la educación mixta en la Constitución Republicana97 .

87_Ídem. 88_Alicia Puleo, "El patriarcado: ¿una organización social superada?", Temas para el debate 133 (diciembre de 2005), 39-42. 89_Ídem. 90_La Primera Guerra Mundial (1914-1918), la Segunda Guerra Mundial (1939-1945), la Guerra Civil en España (1936-1939) y la Guerra Fría (1947-1991) fueron los conflictos europeos más importantes en el siglo XX. Tulio H. Demicheli, " «La Larga Guerra del siglo XX»: el siglo más sangriento de la Historia", ABC Cultura, 1 de febrero de 2014, https://bit.ly/2Lsys5P. 91_Margaret Regis, "In Uniform", en When our mothers went to war: an illustrated history of women in World War II (Seattle, Wash: NavPublishing, 2008), 106-24. 92_Hermine Catry Van Der Sanden, "Situación de la mujer española en el siglo XX: Un largo camino", Mosaico. Revista para la promoción y apoyo a la enseñanza del español 1 (1998), 7. 93_La ‘ola feminista’ es un término para clasificar cronológicamente los periodos de la historia en los que la corriente ha tenido mayor impulso. Samara de las Heras Aguilera, "Una aproximación a las teorías feministas", Universitas. Revista de Filosofía, Derecho y Política 9 (enero de 2009), 49. 94_Amaia del Río Martínez, "Historia del movimiento feminista" (Propuesta didáctica, Instituto Hegoa, 2019), https://bit.ly/2XkR52H. 95_Ídem. 96_El sufragio pasivo permitía a los hombres elegir a mujeres como diputadas, pero las mujeres no podían votar. En las elecciones a Cortes Constituyentes de 1931, fueron elegidas Margarita Nelken (Partido Socialista Obrero Español), Victoria Kent (Partido Republicano Radical Socialista) y Clara Campoamor (Partido Republicano Radical). Lucía Sánchez, "85 años del voto femenino", Ethic, 19 de noviembre de 2018, https://bit. ly/2S4Zmkn. 97_Hermine Catry Van Der Sanden, "Situación de la mujer española en el siglo XX: Un largo camino", Mosaico. Revista para la promoción y apoyo a la enseñanza del español 1 (1998), 9.

Advertisement

98_Sobre el rol de la mujer republicana durante la Guerra Civil, consultar: Francesc Tur, "La miliciana en la Guerra Civil: de heroína a prostituta (1936-1937)", Ser Histórico, 25 de junio de 2018, https:// bit.ly/3263S7K. 99_Margaret Regis, "In Uniform", en When our mothers went to war: an illustrated history of women in World War II (Seattle, Wash: NavPublishing, 2008), 106-24. 100_Ramón Hevia Tuero, "La guerra fría como conflicto económico. Capitalismo y comunismo" (Trabajo Fin de Grado, Universidad Pontificia de Comillas, 2015), 24-30. 101_Ricardo García Cárcel, "La mujer durante el franquismo", en Historia de una marginación, vol. 145 (Historia16, 1988). 102_Isabel Pérez Molina, "Las mujeres durante el franquismo", La gaceta de los miserables, 31 de mayo de 2018, https://bit.ly/2LS1MAr. 103_Ricardo García Cárcel, "La mujer durante el franquismo", en Historia de una marginación, vol. 145 (Historia16, 1988). 104_El eslogan Kinder, Küche und Kirche (‘niños, cocina e iglesia’), definía el rol de la mujer en la Alemania nazi. Margarete Crelling, "«Kinder, Küche, und Kirche»: Women’s Work in the Third Reich" (History Undergraduate Theses, University of Washington Tacoma, 2018). 105_Isabel Pérez Molina, "Las mujeres durante el franquismo", La gaceta de los miserables, 31 de mayo de 2018, https://bit.ly/2LS1MAr. 106_Ricardo García Cárcel, "La mujer durante el franquismo", en Historia de una marginación, vol. 145 (Historia16, 1988). 107_Amaia del Río Martínez, "Historia del movimiento feminista" (Propuesta didáctica, Instituto Hegoa, 2019), https://bit.ly/2XkR52H. 108_El colectivo ‘LGB’ incluye a lesbianas, gays y bisexuales. El término se amplió a ‘LGTB’ en los 90 con los transexuales y a ‘LGTBI’ en el siglo XXI como los intersexuales. En los últimos años, se emplea ‘LGTBI+’ para incluir a las identidades queer. Pnitas, "LGTBIQ+, terminología de la diversidad", Pnitas (blog), 18 de noviembre de 2014, https://bit.ly/308fe9s. Durante la Segunda Guerra Mundial y la Guerra Civil Española, la mujer ocupó por primera vez un lugar en el frente de batalla como milicianas98, aviadoras, enfermeras voluntarias o agentes. En el plano laboral, la mano de obra femenina era cualificada y especializada (fig. 25), debido a la tecnologización del armamento99 . La última mitad del siglo XX, con una Europa polarizada por el capitalismo estadounidense y el comunismo soviético100 , arrancó el proceso de reconversión de las naciones europeas en repúblicas democráticas y monarquías parlamentarias. Mientras, España se encontraba económica, social y políticamente aislada por la dictadura franquista. Frente a unas mujeres europeas que empezaban a tomar consciencia, el franquismo supuso un retroceso en los avances de la Segunda República. La familia tradicional conservadora se erigió como la piedra angular del régimen franquista, en el que la mujer española «era esposa, madre y reserva de los valores espirituales [...] El ideal femenino era el del sacrificio, de la obediencia y el de la subordinación101». El aparato falangista generó un discurso ideológico que situaba a la mujer como un sujeto pasivo y al hombre como uno activo. En base al argumentario de la Iglesia católica, se suspendió el matrimonio civil, la contracepción y el divorcio, y se otorgaron ayudas estatales a las familias numerosas. La restitución del Código Civil de 1889 volvía a calificar jurídicamente a la mujer como una ‘menor de edad’, una niña tutelada por la figura masculina de referencia, padre o marido102. En el ámbito académico y laboral, se prohibió la educación mixta y el ejercicio femenino de profesiones jurídicas103 .

El lema Kinder, Küche und Kirche104 se importó a España mediante la Sección Femenina (fig. 26), liderada por Pilar Primo de Rivera. La organización se encargó de adoctrinar a las mujeres españolas mediante el Servicio Social, en el que aprendían sobre economía doméstica y labores del hogar105 . La “Guía de la buena esposa” de 1953 (fig. 27) ejemplifica el comportamiento femenino modélico que se esperaba de las mujeres. Entre los años sesenta y la muerte de Franco, el ‘milagro económico español’ y la apertura del régimen al desarrollo político y social flexibilizó el rol femenino de la primera etapa franquista106 . En Europa, la Tercera Ola del feminismo se iniciaría con la publicación en 1963 de “La mística de la feminidad” de Betty Friedan. Este nuevo feminismo se centraba en la reforma del sistema y en la eliminación de la desigualdad mediante un pa-

pel activo político. Frente a la vertiente liberal, el feminismo radical de los setenta y ochenta se organizó en el Movimiento de Liberación de la Mujer, centrado en el fin del capitalismo como sistema opresivo. Los conceptos fundamentales feministas —como el género, la casta sexual o el patriarcado—, se acuñaron en las obras de los setenta107: “Política sexual” de Kate Millet y “La dialéctica del sexo” de Shulamith Firestone. El tercer periodo del feminismo, junto con otras corrientes de la contracultura del siglo XX, lucharon por la libertad de expresión y de los derechos civiles, y se opusieron a las guerras y la nuclearización. La revolución sexual, especialmente entre el colectivo LGB108, logró la legalización de la píldora y el aborto. En España, la liberación sexual se iniciaría en la democracia gracias a la Constitución Española de 1978 —en el plano legislativo—, y a movimientos contraculturales como la Movida —en el plano social109—. Se aprobó la Ley 30/1981 del divorcio110 y la Ley Orgánica 9/1985 del aborto111, se despenalizó la píldora anticonceptiva112 y se fundó el Instituto de la Mujer en 1983. A pesar de los avances legislativos, el patriarcado de consentimiento se mantuvo en las últimas decadas. Las mujeres reúnen el 70-80% de los contratos a tiempo parcial y soportan una brecha salarial del 30%113. La imposibilidad de conciliar la familia con la promoción laboral genera el ‘techo de cristal’ y una reducción drástica de fecundidad: la mujer no tiene tiempo para ser madre o profesional, ya que asimila la mayoría de las tarea del hogar114 . La violencia de género, y en especial los feminicidios de los años noventa, construyeron un relato del terror propagado en los medios de comunicación. Para Nerea Barjola, la mediatización morbosa de los asesinatos machistas, cuyo máximo exponente es el caso Alcàsser, «transforma la violencia ejercida sobre las mujeres en una acusación contra sus demandas de mayor autonomía. Ante una agresión sexual, los medios responden haciendo apología de la vida familiar y de valores sexuales conservadores, señalando cuál es nuestro lugar y cuáles nuestros comportamientos adecuados115».

109_Hermine Catry Van Der Sanden, "Situación de la mujer española en el siglo XX: Un largo camino", Mosaico. Revista para la promoción y apoyo a la enseñanza del español 1 (1998), 9. 110_Jefatura del Estado, "Ley 30/1981, 7 de julio, por la que se modifica la regulación del matrimonio en el Código Civil y se determina el procedimiento a seguir en las causas de nulidad, separación y divorcio", Boletín Oficial del Estado 172 (20 de julio de 1981), 1645716462. 111_Jefatura del Estado, "Ley Orgánica 9/1985, de 5 de julio, de reforma del artículo 417 bis del Código Penal", Boletín Oficial del Estado 166 (7 de diciembre de 1985), 22041. 112_Jefatura del Estado, "Ley 45/1978, de 7 de octubre, por la que se modifican los artículos 416 y 343 bis del Código Penal", Boletín Oficial del Estado 243 (11 de octubre de 1978), 23604. 113_Lina Gálvez Muñoz y Paula Rodríguez Modroño, "El empleo de las mujeres en la España democrática y el impacto de la Gran recesión", AREAS, Revista Internacional de Ciencias Sociales 32 (2013), 105-23. 114_José Luis Bajo Benayas, "El desigual reparto de las tareas domésticas se cobra a la víctima de siempre: la mujer", elEconomista.es, 24 de octubre de 2016, https://bit. ly/2YsyuhR. 115_Nerea Barjola Ramos, Microfísica sexista del poder: el caso Alcàsser y la construcción del terror sexual (Barcelona: Virus Editorial i Distribuïdora, 2018), 12.

Figura 25. Imagen editada del original. Rosie la remachadora, We Can Do It!. J. Howard Miller para Westinghouse, National Museum of American History.

This article is from: