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La salud mental en el sistema

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La ciudad perdida

La ciudad perdida

En España, debido al aislamiento impuesto, a la pandemia que nos asola, se ha realizado una investigación en la que colaboran varias universidades para establecer las principales consecuencias psicológicas derivadas de este último año. El total de una muestra de 5000 personas obtuvo un empeoramiento en las variables medidas: ansiedad, depresión e ira. Por otro lado, existe un sector de

la población que es aún más vulnerable a las consecuencias psicológicas que vivimos, son las personas que presentan antecedentes psiquiátricos o grupos vulnerables como los niños y adolescentes. En Reino Unido, se ha duplicado el número de derivaciones a la unidad de trastornos de la alimentación. ¿Las causas?: desde el aislamiento social hasta la inseguridad alimentaria, pasando por la presión para perder peso, la pérdida de rutinas o las interrupciones al acceso a los servicios clínicos presenciales. ¿Por qué en Europa la media de psicólogos por cada 100.000 habitantes es de 18 psicólogos? Y en España, ¿por qué esa media desciende a 6 psicólogos por cada 100.000 habitantes? Teniendo en cuenta las circunstancias actuales, a las que hay que añadir los antecedentes que ya teníamos antes de la pandemia: alteraciones emocionales en niños, casos de bullying, adicciones a las nuevas tecnologías y otras drogas, estrés laboral, problemas de pareja y un sinfín de problemas psicológicos y enfermedades. Los psicólogos que hay en la sanidad pública tienen tal saturación que es imposible rebajar la lista de espera menos de 6 meses, que, si tú consultas porque tienes ansiedad, el médico te receta Orfidal, porque no puede derivar a más pacientes a la unidad de psiquiatría. Estamos reclamando un derecho que nos pertenece y que además pagamos con nuestros impuestos, porque, ¿cuántas vidas más se va a llevar esa lista de espera? No olvidemos que la detección precoz y la prevención son dos puntos clave en el abordaje de los trastornos mentales, lo que nos lleva al punto más importante, la sanidad primaria necesita psicólogos urgentemente. No puede ser que los médicos estén ejerciendo una labor que ni les compete ni están preparados para ello. El psicólogo en la sanidad pública, especialistas en los hospitales y generalistas en los ambulatorios, es una necesidad, y es urgente.

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Manuela Saiz Bustillo

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