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Sin miedo a ‘derribar’ los retos
Sin miedo a ‘derribar’ los retos
JORGE LUIS TORRES / Vicepresidente FedEx Express México
POR ALEX FUENTES Y JAVIER CENDEJAS
Aenas tenía 17 años cuando a Jorge Luis le llegó la oportunidad de jugar en la liga mayor de rugby en México.
El deporte lo apasionaba y eso lo llenó de orgullo, pero también lo inquietó.
Y es que la primera división de rugby en México contaba con jugadores de al menos 19 años, dos más que él. Eso significaba que Jorge -de 65 kilos- tendría que derribar a adversarios que podrían doblarle el peso.
“El rugby formó mi carácter”, reflexiona el vicepresidente de FedEx Express México de FedEx México en entrevista con Latitudex.
Jorge Luis Torres habla desde una sala privada del JW Marriot de la Ciudad de México.
“Yo era un muchacho de 65 kilos y se me venían toros de 100, 110 kilos y pues había que tirarlos”, recuerda.
En ese momento no imaginó lo que ese reto le dejaría en su vida y en su carrera.
Y es que un deporte como el rugby, le daría las enseñanzas necesarias para avanzar en una carrera que lo llevaría a liderar en México, las operaciones de una empresa global que tiene presencia en 220 países y territorios.
“Con el rugby te das cuenta de que con técnica y coraje puedes enfrentar cualquier situación y ves cómo puedes derribar a tus adversarios que pesan el doble”, reflexiona.
“Hoy cuando tengo esas ‘broncotas’ que dices: ‘este tema es fuerte y más grande que yo’, si tú tienes la técnica, la experiencia, el coraje, la educación y la preparación puedes “derribar” cualquier problema sin importar su tamaño.
“El problema siempre se puede resolver”.
Jorge Luis jugaría ese deporte casi 22 años, hasta llegar a convertirse en árbitro.
El rugby sería una pasión para toda su vida, y las enseñanzas que adquirió en aquellas canchas lo acompañarían por siempre.
Jorge Luis Torres nació en León Guanajuato el 27 de diciembre de 1970. Sin embargo, sus raíces están en la Ciudad de México donde su familia llegó a vivir en 1973.
Ahí realizó sus primeros estudios en escuelas cerca de su casa. Primero en el área de la Villa de Guadalupe, luego cerca de Lomas Verdes.
Decidió estudiar comunicación en la Universidad del Valle de México, donde alcanzó una beca del 100 por ciento.
En 1991 vio un anuncio en la bolsa de trabajo de la universidad donde una empresa solicitaba estudiantes de comunicación que supieran hablar inglés.
Jorge Luis cursaba el quinto semestre y sin problema llenaba el perfil. En ese momento soñaba con tal vez convertirse en piloto aviador, le encantaban los aviones.
“Coincidentemente veo en la bolsa de trabajo que esta empresa Federal Express, yo no tenía idea, era una empresa de transporte de mercancía que tenía aviones.
“Ya cuando llegué me dijeron que iba a capturar datos”, dice divertido. La actividad estaba muy alejada de pilotear aviones.
El trabajo lo llenaba de ilusión, no solo por contar con un empleo formal sino porque tenía un sueño: invitar a comer a sus padres con su primer sueldo.
“Me pagaron mi primer salario: 600 mil pesos. Invité a mis papás a unos tacos, pero le tuve que pedir dinero a mi papá porque no me alcanzó para pagar la cuenta”, recuerda entre risas.
Comenzó de capturista, pero aún así el trabajo lo entusiasmaba. Algo de ese trabajo lo atraía, tal vez algo que cargaba en sus genes.
“Mi bisabuelo era conductor de locomotoras en Monterrey y era el responsable
de llevar el famoso Expreso del Norte que transportaba mercancías necesarias a la frontera”.
Se fueron dando las cosas y encontró una posición en el “call center”, donde la atención al cliente era el principal ingrediente.
“En ese momento tomé una decisión y decidí desde ese día ponerme una corbata. Tenía dos apenas”.
“Mi jefe me decía: ‘es un call center nadie te ve’. Pero a mí la corbata me daba una sensación de seguridad y me parecía que la podía transmitir a través de la comunicación interpersonal con quien está del otro lado del auricular y por eso les voy a dar un mejor servicio”.
Un buen día se abrió una posición de coordinador del call center. El jefe, José Luis López, llegó a la oficina con la tarea de encontrar al nuevo perfil.
“Por cosas del destino llega el jefe y dice ‘a ver tú el de corbata, vas a ser el nuevo coordinador’”.
Ahí comenzó una carrera meteórica que lo llevaría a la primera fila de una empresa global, de las más importantes del mundo entero.
El hoy vicepresidente de FedEx Express México ha circulado por diversas posiciones en la compañía.
Y aunque hay una infinidad de retos que ha enfrentado, hoy es protagonista de un cambio en la actividad de logística y transportación, que está siendo clave para la reactivación económica del país y del mundo.
Es bien sabido que el efecto pandemia, el conflicto bélico de Ucrania y Rusia, el desacomplamiento comercial entre China y Estados Unidos, entre otros fenómenos, están provocando un desfase en las cadenas de suministro.
“La logística hoy queda palpable y toma una mayor trascendencia en cómo contribuye a la vida de todos”.
De hecho, durante la parte más complicada de la crisis del Covid, Jorge Luis vivió uno de los momentos más difíciles para la economía en general.
De 2019 a 2021, el ejecutivo se desempeñó como presidente de la American Chamber of Commerce de México y desde ahí le tocó lidiar con los efectos inmediatos de la crisis en México.
“En México el criterio sanitario y de Estados Unidos eran diferentes”, recuerda
“Eso rompió las cadenas de valor, los procesos operativos, los cuales, sabemos, están profundamente integrados”.
Esa ruptura hizo que más del 50 por ciento de las exportaciones mexicanas cayeran en poco tiempo.
“El canciller Marcelo Ebrard me llamó y me dijo: ‘oiga presidente hay una cantidad de documentos, de cartas de empresas mexicanas que están solicitando poder hacerse actividad esencial para seguir chambeando’”.
Ahí comenzó una actividad titánica en la que se logró que poco a poco cientos de empresas establecidas en México recuperaran su actividad y no naufragaran en medio de la crisis.
“El hecho de poder sentarme con el canciller y poder aportar en conjunto a la reactivación económica me da mucho orgullo”, rememora.
“Fue con una voluntad auténtica de hacer lo correcto sin afectar el bienestar humano”.
Hoy, superada en cierta medida la crisis, la industria logística sigue evolucionando y para el vicepresidente de FedEx Express México existen tendencias que se verán en los próximos años.
“El gran reto para quienes nos dedicamos a esto es cerrar el ‘gap’ entre la velocidad que tenemos los consumidores para accesar a la información, y tomar decisiones y el acceso al producto físico”.
Y es que hoy los consumidores entran a la web a buscar unos tenis, eligen el color, el tamaño. Y después de pagar se preguntan: ¿dónde está mi pedido?
“Nosotros buscamos cerrar esa brecha”, comenta.
“El juego antes era de tamaño, y evolucionamos al tema de velocidad. Hoy es un tema de precisión”.
De acuerdo al capitán de FedEx México, el futuro se centra en los modelos predictivos de consumo que permitirán hacer aún más fácil la logística de productos.
“Es importante ver cómo nosotros cerramos ese ‘gap’ a través de modelos predictivos de consumo, que van a hacer que en lugar de que nosotros estemos funcionando a través de esquemas de distribución centralizados sean regionalizados”, explica.
“A través de estos modelos predictivos de consumo, podremos saber ‘esto se va a vender sí o sí mañana en Monterrey, entonces vamos a hacer la ubicación de almacenes para adelantarte a las necesidades’”.
Sin duda la pandemia vino a acelerar muchas cosas, entre ellas la evolución de la logística en el mundo entero. Una evolución en la que FedEx busca ser punta de lanza.
Cuando Jorge Luis habla de su familia su tono cambia.
Sin duda su actividad como capitán de empresa lo inspira, pero cuando se refiere a los suyos su emoción se nota, sobre todo cuando habla de su padre.
“Es un gran ejemplo, mi más alto ejemplo y referente en términos de responsabilidad, de integridad, de ética”.
Ese mismo ejemplo es el que busca dejar en sus hijos, ¿y por qué no? también en sus compañeros de trabajo.
“Todos en la vida debemos estar buscando nuestro sentido a través de ciertos pasos: haz lo que te gusta, hazlo bien, que esto genere valor a los demás y que esa actividad te brinde una forma de vida”.
Para el líder de FedEx en México tener
sentido de trascendencia de las cosas, es clave en cualquier actividad que desempeñes.
“Yo le digo a los responsables de correr la operación; ‘la misión que ustedes tienen no es llevar un paquete de un lado a otro… es hacer una línea de vida, conectar a las personas y a los negocios para que contribuyas a que la humanidad sea un lugar mejor cada día’”.
De acuerdo con Jorge Luis la pandemia representó una oportunidad única de servir a los demás. “Fue una labor heroica”.
Quizá en ese momento el rugby le dejó una gran enseñanza que pudo aplicar:
No importa el tamaño del adversario, sino el coraje con el que se le enfrenta.
