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La economía mexicana, de la mano de la manufactura
La economía mexicana, de la mano de la manufactura
Por Bribrilia Cota
El crecimiento de México es producto importante de la Inversión Extranjera Directa (IED). Se trata de empresas con reconocimiento mundial que han sabido aprovechar las ventajas competitivas que nuestro país posee y que al mismo tiempo han inyectado dinamismo al empleo nacional.
Sin duda alguna las posibilidades de crecimiento de un país van de la mano de su modelo productivo. México lleva décadas apostando por la manufactura, aprovechando su ubicación estratégica y sacando ventaja de la competitividad de su factor humano. En 2021, la industria manufacturera se coronó como la actividad económica de mayor contribución al producto interno bruto mexicano con un 18 % de las aportaciones totales. De acuerdo con información proporcionada por el Inegi, detrás de esta contribución a la economía mexicana se encuentran importantes empresas de capital extranjero provenientes principalmente de Estados Unidos, España, Canadá, Reino Unido, Alemania y Japón.
Dentro de la industria manufacturera, la fabricación de equipos de transporte es el subsector que acaparó, para ese mismo año, el 47 por ciento de la inversión extranjera directa, destacando la fabricación de autopartes; la fabricación de automóviles y camiones y, en tercer lugar, la fabricación de equipo aeroespacial. Datos del DENUE revelan que a nivel federal son más de 3 mil 500 unidades económicas las que pertenecen a este subsector, dentro de las cuales, 988 cuentan con más de 251 empleados. El 50 por ciento de estas grandes empresas se ubican en los seis estados que hacen frontera con Estados Unidos y el 26 por ciento se concentran en el bajío.
Los estados del norte, particularmente Chihuahua y Baja California, destacan en la fabricación de equipo aeroespacial y son base de importantes empresas como Safran, Zodiac y Honeywell, entre otras. La fabricación de automóviles y camionetas tiene mayor presencia en el bajío donde actualmente Nissan, General Motors, Honda, Toyota y Mazda cuentan con plantas de producción.
Siendo la mayoría de estas empresas de capital extranjero, resulta fácil entender el por qué las exportaciones en el subsector de la fabricación de equipos de transporte representaron en 2020 el 41.8 por ciento del total de las exportaciones de la industria manufacturera y no solo eso, sino que también generaron importantes contribuciones en el empleo. Datos de la ENOE revelaron que, al cierre de 2021, del total de población ocupada, el 16.5 por ciento se encontraba en el sector manufacturero con un salario promedio mensual de 6 mil 200 pesos.
Sin duda alguna la manufactura es una fuente importante de crecimiento económico, no solo a nivel nacional, sino a escala mundial. Pero, no podemos depender por siempre de la inversión extranjera que la genera y que viene a beneficiarse de la mano de obra barata; hay que trabajar en la búsqueda de salarios más justos, en la generación de políticas públicas que incentiven la educación y la innovación y en la creación de instituciones honestas que fomenten la competencia empresarial y nacional.