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Local - Artístico - Independiente Febrero 2020 - El Chaltén Santa Cruz - Número 49 EDITORIAL

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e todos los que aparecen en la escena, la novia es la única que no tiene expresión. El resto –de una u otra manera– celebra el evento. Ella no está triste, alegre, resignada ni esperanzada. Ella no reacciona. Se encuentra ahí como entregada al destino. Se manifiesta casi expuesta por quienes la rodean, ya que casi pareciera que la visten de rojo para que la vea y elija el mejor postor. Haciendo uso del libre pensamiento y la interpretación personal, quiero pensar que nuestro gran Chagall quiso criticar ese rol impuesto. No solo en defensa del rol de la mujer en su época, sino en contra de todas las imposiciones. Siendo él mismo un rebelde ante quienes lo querían encajar en un puesto, en un país, en una revolución, Marc hizo su propia revolución huyendo de los mandatos, podemos pensar, familiares y sociales. Me imagino el azul del cuadro como eso que nos rodea y nos impulsa a ser o hacer tal o cual cosa. Distintos personajes nos rodean y quieren dictar nuestro hacer. Orquestan nuestro destino como la cabra con su violín, el pez con su timbal y el hombre con su flauta,marcando el ritmo a cada paso que damos. Entonces ahí estamos, inertes. Dejándonos llevar, expuestos y sin expresión en nuestros rostros. Adornados para lo que vendrá. Quizás el color rojo, símbolo de pasión entre otras cosas, intenta decirnos que debemos seguir ese fuego que tenemos adentro. Contrarrestar el azul pálido, frío y reaccionar. Las flores en su vientre nos dicen que, una vez que dejemos lugar a la pasión, todo crecerá a su manera. Ellas, que captan nuestra atención, representan lo fructífero y están situadas donde toda vida nace. Acá, en nuestro pubis. ¿Será que es desde ahí, desde nuestras mismas entrañas que podremos florecer? Quiero creer que sí, que esta novia que pareciera resignada empieza de a poco a rebelarse. Porque como para nuestro querido artista, la rebeldía es lo que nos hace movernos y caminar. Como dicen por ahí, se hace camino al andar.

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¿ Cu á nt o s ti po s d e p er so n a s ex i s te n?

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on el creci mi ento del capit ali s mo, el pens ami ent o moder no y pos moder no, l a ext ens i ón de las comuni caci ones , et c.; nos encontr amos un concept o cada vez m ás i ndi vidual is t a del s er humano. El s er soci al es cada vez más s oli t ar i o en s u m aner a de actuar, en s u f orm a de vi vir, de pens ar. Todos s omos únicos , r ezan var ios anunci os publi cit ari os . De una u ot ra maner a, nos encont r amos en una er a en l a cual el yo es m ás fuer t e y úni co que nunca. Si n i nt enci ón de ent rar en banal es di scus i ones de l o que es el yo con al gún es tudi os o anali s t a, qui er o pr esent ar m i concept o pers onal . Para hacerl o voy a hablar de m í. E st e ego que m e habi t a est á conformado por var ios aspect os que dat an de mi niñez, obvi am ente. Dónde nací, cómo crecí y de qué maner a m e educar on. No s ol o l o que mi s padr es me decían que es t aba bi en o mal , s ino l o que hací an. Todos s abemos que muchas veces no s e cor r esponde una cos a con l a otr a. Es e paquete conf or ma una par t e, a l a cual s e l e sum an l as vi venci as que t uve has ta hoy en m i contact o per manent e con la s ociedad. Des de mi pri mer contact o con al gún par has ta el pri mer dí a de tr abajo o en la f acult ad.

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Todo eso va de al guna m anera al im entando a mi ego, sea como comi da nut ri t iva o chat arr a, per o l o hace. Com o bas e o r ecubr i mi ento de est os dos as pect os que nom bram os , pos eo una i m pront a ances tr al. E st a es la m ás dif í ci l de reconocer a veces , per o s i abr o los oj os y com ienzo a ver a mi f ami li a act ual y a mi s ant epas ados , com prendo que es una part e i m port ante de mí . Est a gran combi naci ón s e encuent ra en const ant e movi mi ento: no es es tát i ca y li neal, aunque a veces l o par ezca. Por que, adem ás , quienes nos rodean s ol o ven una par te de nues tr o s er y nos otr os mi s mos no somos capaces de t er m inar de conocer nos . ¿A cas o el cami no de l a vi da no ti ene que ver un poco con es o? ¿Con el aut oconoci m ient o? Pr efi ero pensar es to ant es de caer en el concepto pr ogr esi s t a del cr eci mi ento. Nues t ro cuerpo, ¿cr ece o envej ece? ¿Ocur ri r á l o m is m o con nuest r o yo? Podr ía ser que nues t ra real es encia s e mues t re en nues t ros pr im eros años de vi da y des pués apr endamos a vi vir en soci edad, con l o cual r epri m im os s ent imi ent os, r eacci ones , et c. Y luego nues tr o objet ivo podr í a s er el vol ver al pri nci pio, a s aber quiénes s omos . Por que s i nuest r a met a en la vi da f uer a cr ecer t ant o en cuerpo como en ser, ¿cuál s erí a el f in? ¿Pas ar a l a pr óxim a vida quizás ? ¿O l l egar al par aí so? Tengo m ás pregunt as que res pues tas .

FOTO: ojos macro


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Volvi endo a lo que s oy, ¿puedo cr eer que r eal m ent e s oy único? E l s er humano s iem pre int enta coincidi r con quien s e enf rent a. La adol es cencia es el m oment o de conf or maci ón de es e s er que m ost ram os hoy y nos j untam os con quienes es cuchan nues tr o t i po de m ús ica y nos ves ti mos a la moda que el egi mos : el cheto, el depor ti s ta, el t umber o, etc. Ya de adult os s egui mos en es e cami no des de el mi sm o l ugar o encontr amos ot r os. Somos catól icos , prot es tant es o at eos ; peronchos , gori l as o apolí t icos ; de t auro o de vi rgo; de ri ver o de boca. Es as coi ncidenci as , a veces f or zosas , nos dan s ent ido de per tenencia, me m arcan la cancha. P orque cr eem os que poder def ini r es os l ím it es nos da segur idad. En apar ienci a nos m ovemos en mas a per o en el f ondo lo hacemos par a que pr evalezca ante nues tr a pr opia m ir ada nues tr o yo. C omo di rí a un conf undi do zool ander m i rando s u r ef lej o: “Who am I ?” ( ¿Qui én s oy?) . Me autocal if i co, m e encas il lo, m e l i mi to. Apar entando un bi en com ún cuando en el f ondo i nt eres a mi om bl igo. ¿Cóm o logr amos , entonces , vivi r en comuni dad? Com o cual quier pr oblem át i ca per sonal que quer am os enf r ent ar, cr eo que el pr i mer paso es admi ti r. Reconocer mi ego es f undam ental y, des de es e reconocim ient o, poder act uar, tom ar deci s iones . No es t oy hablando de per der nues tr o yo en el nosot r os , s i no de

FOTO: ojos macro

pot enci arl o. Com o s i f uer a f ácil encont rar el equil ibr i o. Si n di sf r azar una cos a de otr a. Reconoci endo mi conexi ón con el otr o más al l á de l o apar ente. Q uizás exi st a al go que compar to con quien menos l o i magi no y tal vez con quien t engo en común al go super f ici al, s ea s olo es o. Veo que rápi do el s er humano s e fagoci ta, se adapt a a quien l o rodea. Com o cuando voy a vis i tar a mi s par i ent es a C orr i ent es y vuelvo us ando s u lunf ardo o vuelvo con acento cor dobés des pués de una vi s i ta a l a capit al del cuar t et o. ¿Puedo reconocer cuánt as cos as i ncorpor o de quienes me rodean? ¿Son t odas pos it i vas ? Una pel ícul a de hace vari os años mos t r aba a un ant ihér oe que s al vaba a un gr upo de per sonas de est ar at rapadas en un túnel . Todas est as per s onas eran m uy dis t i ntas entr e s í . Tanto el i nmi nente peli gr o com o el encontr ar se t odos ahí l ograban que s al ier a a l uz una part e de l a es encia de cada uno. Fuer a de s u zona de conf ort , con extr años , con un úni co obj et ivo: s obrevi vir. ¿Y s i es t a vida f uera no m ás que el túnel de Sábat o y l a m et a es l legar al ot r o l ado? N eces i tar íam os de ot ros par a l ogr ar l o. Q uizás el catól i co del at eo, el gor il a del per oncho y el bos t ero del de r iver. Qui zás l a úni ca f or ma de logr ar cam bios s igni f icati vos s ea de maner a col ecti va per o no i nvis i bil izando las indi vidual i dades , s ino pot enci ándolas

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E l s o n i do d e l a mú s i ca

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es de mi adoles cencia s i empr e, hi ci er a lo que hi ci er a, neces i té de un am bient e apr opi ado. Or den a mi al rededor ( s egún mi noci ón de or den, aclar o por s i lo lee m i madr e) , buena l uz y m ús ica. Al contr ari o de l o que pueda pas ar l e a ot ras pers onas , que s uene un t ema en el ambi ente me ayuda a concentr ar me y a pens ar. Cr eo que a t odos nos pas a que cier ta canci ón nos ani ma o nos depri m e; dependiendo de l a ocas ión. Es o no lo podemos negar. Por es o no m e s or prende el concept o que r espal da a l a M us icot erapi a. Si n darnos cuent a, ut il i zam os es te mét odo en nues tr a cot i dianei dad; per o, par a no fal tar l e el r es pet o a quienes s e dedi can a est a di s ci pl ina, qui er o aclar ar que par a poder ll evar est e nom bre l a acti vi dad r eal izada debe hacers e con un pr of esi onal en el t ema. Es ta di sci pl ina prom ueve l a ut il i zaci ón de l a m ús ica en cual qui er a s us for mas : s oni do, r i tm o, m elodí a y arm onía; en un proces o des t i nado a faci li tar y pr omover la com unicación, el apr endizaj e, la

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movi l izaci ón, l a expr es ión, la organizaci ón u ot ros obj et i vos t erapéut icos r elevant es, a f i n de as i s ti r a l as necesi dades f í si cas , ps í quicas , s oci ales y cogni ti vas . H oy es t á dem os tr ado que, por ej empl o, apr ender a t ocar un i ns tr ument o des de chi cos nos ayuda en un m ont ón de as pect os de nues t ra vi da. Que l a m ús ica que es cucham os , nos m ar ca, nos f orm a y nos t r ans f or ma. A caus a de l a fal ta de un pr ofes i onal a mano en el t ema ( s i al guno s abe de algui en en el puebl o con est a capacidad, le ruego que no le com ent e mi pl an), pr opongo pens ar en mom entos de nues tr a vi da que f ueron cruci ales , par a bi en o para m al. R ecor dar uno de es os moment os y pensar qué mús i ca l e pondrí amos . C omo s i fuér amos a mus i cali zar una pel ícul a. Y una vez que lo t engamos ident i fi cado, vayam os a nues tr a cas a, es paci o o l ugar y pongam os es e tema a t odo vol umen o en unos aur i cular es y s in pens ar demas iado, veamos qué nos provoca. Tal vez encont rem os la ll ave que ya no tami za nues tr os r ecuerdos , s i no una capaz de m odif i car nues t r o f utur o.

FOTO: Gobierno de Córdoba - Cultura


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Re la t o Li v re El r ef l ejo de l o anim al La l oba ll egó del t r abaj o, abr ió l a helader a ins t int i vam ente. N o iba a s al ir de cacer í a, le r equir i ó mucha energí a vi gil ar la m anada des de los com ienzos del val le. La l oba int entó abr i r el f ras co de conser vas y no l o logr ó, l e sol t ó un golpe con una de s us garr as ( ins t int i vam ente) . La l oba se r ecos tó en el lugar que más huel e a el l a de l a casa y dej ó que s u olf at o s e des pegara l ent am ente de es e es paci o y pas ear a por otr os mom entos de s u dí a, de su vi da. Pens ó en s u crí a,en s u pequeña m anada, en el s ol r ecorr i endo el val le, huyendo de l a luna. Huyendo. La l oba se vi o huyendo de un ol or que de r epente l e invadi ó el hoci co. Sus f auces s e fr unci er on ( ins ti nt ivam ent e) . Y l e mol est ó el olor. Er a olor a ot ra m anada, er a el ol or a un lobo que ya t enía m anada, un lobo que s e compor taba como un husky, que r evol vía ol ores de s i tuaci ones r ancias , de m omentos que ya no er an de l obos s ino de aves carr oñer as . La l oba no pedía acercami ent os con s u hoci co, no s e acer caba a t odos los s er es de m anera ami gabl e. La l oba con el t iem po,s e di o cuenta de que en el vall e no todos s on de s u m anada,no t odos huelen bi en, no quier e ya recor dar es os ol ores . Se r etor ció en s u es pacio, vol vi ó al ol or de el l a mi s ma, l o res pi ró pr of undament e y se dej ó a Morf eo. Sol o los que vi ajan por es as aguas s aben lo que pas a en el pl ano s uti l de un lobo. De una l oba.

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Cu l tur a L iv re Fl or Fr ancione empezó con l a f ot ograf ía en el año 2008, cuando s e fue a vivi r a San M ar t ín de Los A ndes. Un f otógr af o del puebl o daba un tal ler de manejo de cámar a y de fot ogr afí a es t enopeica, ens egui da se f as cinó con el m undo anal ógico y comenzó a s acar f ot os , a exper i mentar y a t omar cuanto cur so es taba a s u al cance. “Mi f orm ación es m ás bien aut odidact a, aunque el año pas ado t uve la oport uni dad de hacer un tal ler de l a U BA de cámar a como her r ami enta social , fuer on s ei s mes es de cur s ada y fue lo más académ ico que hi ce, s iem pre por cur i os idad”. Es t e año tuvo la opor t unidad de com pr ar s e un l abor at ori o, t odo l o neces ar io para ar mar un cuart o oscur o ar t esanal de revel ado anal ógico y es o l e perm it i ó l argar s e más a exper im entar y pr act i car, “en s í t odo es pr ácti ca, necesi t as sacar un m ont ón de f ot os y revel ar un t anto más ”. M oti vada con la pos i bil i dad que su pr opi o labor ator io l e bri ndaba, s e acer có a l a Di r ección de Cul tur a con l a pr opues ta de un tal ler de f otogr af ía es t enopei ca, pens ado en s eis encuentr os que t uvo l ugar en novi embr e pas ado. “Es tuvo buení s i mo por que s iem pre fui al umna y es l a pr i mer a vez que puedo est ar del ot ro l ado. La f otogr af ía anal ógi ca y la est enopeica en par ti cular s e bas an en la exper ienci a pura, te l o pueden contar per o s ól o l o apr endes cuando l o vi ví s vos mi sm o. Fue her mos o ver l a s or pres a de t odo el pr oces o, la pr im era vez que entr an a un cuart o oscur o, cuando aparece l a i m agen con el lí qui do revel ador, las caras de los part ici pantes , s us s or pres as , fue buenís i mo”. El t al ler com enzó con una br eve expl icaci ón de compos i ción de i magen y m anej o de cámar a, s igui ó con el arm ado de ést a y l os s i gui ent es encuent ros s e basar on en ensayo y err or de s acar fot os y r evel ar l as . Fl or es una apas ionada de l o anal ógico, se em ociona habl ando de todo el pr oces o, de l a opor t unidad úni ca que s i gnif ica tener l as f otos cont adas. A dif erenci a del mundo de lo di git al que s ólo nos l im it a mom entáneament e l a capaci dad de la tar jet a de mem ori a y que el r es ul tado lo vemos i ns tant áneament e dándonos la pos i bi li dad de bor rar s in desper dici ar l ugar, en l o anal ógico un r ol lo de tr ei nta y s eis equi val e a tr eint a y s eis opor tuni dades, ni más ni m enos . Ent onces, te obli ga a conocer más del m anej o de l a cám ara, pens ar l a f ot o, qué es l o que bus cas , cal cular bi en el ti empo de expos ici ón, l a apert ur a del di af r agma, en qué vas a hacer f oco, t odo par a obt ener el res ul tado que bus cás . “Pr es tás mucha m ás at ención, es un pr oceso, lo que m e par ece mucho m ás ri co que s i l a fot o es l i nda o no”. FOTO: Florencia Francione

Staff D irecc ió n d e red a cc ió n : R o mi na Lo j o R eda c ci ó n: Cec il ia Fa c a l - Ro m i na S a n ch ez C ol a b o ra ci ó n: A nt o n el la M a r a ng e ll i li v r ed i to r i al @ g m ai l.c o m

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f ac eb o o k /l iv r e


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